Gustavo Cerati
Gustavo Adrián Cerati (Buenos Aires, 11 de agosto de 1959-Ib., 4 de septiembre de 2014) fue un músico, cantautor y productor discográfico argentino que obtuvo reconocimiento internacional por haber sido el líder, vocalista, compositor y guitarrista de la banda de rock Soda Stereo. Parte de la prensa especializada y músicos lo consideran como uno de los artistas más influyentes del rock latinoamericano y precursores de la música electrónica en el continente.
Gustavo Cerati | ||
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Cerati en octubre de 2006. | ||
Información personal | ||
Nombre de nacimiento | Gustavo Adrián Cerati | |
Nacimiento | 11 de agosto de 1959 Barracas, Buenos Aires, Argentina | |
Fallecimiento | 4 de septiembre de 2014 (55 años) Nuñez, Buenos Aires, Argentina | |
Causa de muerte | Paro cardiorrespiratorio | |
Sepultura | Cementerio de la Chacarita | |
Nacionalidad | argentina | |
Familia | ||
Cónyuge | Belén Edwards (matr. 1987; div. 1988) Cecilia Amenábar (matr. 1993; div. 2002) | |
Hijos | Benito Cerati Lisa Cerati | |
Educación | ||
Educación | Universidad del Salvador | |
Información profesional | ||
Ocupación | Cantante · compositor · guitarrista · productor musical | |
Años activo | 1981-2010 | |
Género | Rock · pop · folklórico · electrónico · sinfónico · hip-hop | |
Instrumento | Voz · guitarra · bajo · sintetizador · sampler · teclado · armónica · laptop | |
Tipo de voz | Tenor | |
Discográfica | Sony Music/Sony BMG | |
Miembro de | Soda Stereo Fricción Plan V Roken Ocio | |
Distinciones |
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Web | ||
Sitio web | cerati.com | |
Influido primero por The Beatles y posteriormente por The Police, Cerati integró diversas agrupaciones desde su adolescencia y en 1982 fundó la banda de rock latino Soda Stereo. Líder y principal compositor del conjunto, a partir de Signos (1986) su forma de hacer canciones comenzó a madurar, y su consolidación la alcanzó a comienzos de los años 1990 con Canción animal, en el que volvía a las raíces del rock argentino de los años 1970. Paralelo a su carrera con el grupo, en 1992 publicó a dúo con Daniel Melero el álbum Colores santos considerado uno de los primeros en Sudamérica en incluir música electrónica, y al año siguiente su primero como solista, Amor amarillo. Su gusto por la electrónica lo llevó a incorporarla a sus últimos trabajos con Soda Stereo. Después de la separación de la banda, lanzó Bocanada (1999) y Siempre es hoy (2002), donde mostró más su interés por el género que manifestó libremente en sus proyectos alternos Plan V y Ocio con la edición de álbumes y presentaciones que le dieron mayor difusión a este tipo de música.
En 2006, retomó el estilo roquero con su cuarto disco Ahí vamos, que recibió elogios del público y de la crítica, dicho trabajo contiene algunos de sus éxitos en solitario como «Crimen», «La excepción», «Adiós», «Lago en el cielo» y «Me quedo aquí». En 2007, se reunió con Soda Stereo tras diez años de separación en una gira que reunió a más de un millón de espectadores. En 2010, quedó en estado de coma tras padecer un accidente cerebrovascular, luego de finalizar un concierto en el que promocionaba su último álbum, Fuerza natural (2009). Falleció a la edad de 55 años a causa de un paro respiratorio en 2014.
Cerati fue un prolífico sesionista, estuvo como guitarrista invitado en temas de Caifanes, Babasónicos y Los Brujos, y colaboró en canciones con Charly García, Andrés Calamaro, Fito Páez, Shakira, Andy Summers, Roger Waters y Mercedes Sosa, entre otros. A lo largo de su carrera como solista, vendió más de siete millones de discos y ganó numerosos premios, entre ellos Grammy Latino, MTV, Konex y Gardel. En su edición de septiembre de 2012, la revista Rolling Stone posicionó a Cerati en el séptimo lugar de los cien mejores guitarristas del rock argentino.
Primeros años
Gustavo Adrián Cerati nació el 11 de agosto de 1959 en el barrio Barracas de Buenos Aires (Argentina),[1] como el hijo primogénito de Juan José Cerati y Lilian Clark, quienes se conocieron trabajando como contador y taquidactilógrafa en Esso.[2] Tenía ascendencia italiana por parte paterna e irlandesa por parte de su madre.[3] Sus hermanas son Estela y Laura.[4] A los seis años lo inscribieron en un colegio estatal y, a medida que aprendía a leer, descubrió los cómics y por consiguiente su primera gran pasión: el dibujo.[5][6] Lilian remembró que cada vez que Juan José volvía del trabajo, le compraba algún cómic de Superman, Tarzán o Flash, y de estos tomaba la base para crear historias, como Supercerebro, parecido a Superman, o el hombre alado Argos, un símil a Batman que sobrevolaba las ciudades de noche.[5][7][Nota 1] A los nueve años sus padres le obsequiaron una guitarra criolla, momento en que crecería su interés por la música. Dos semanas después de ese hecho, tomó clases de guitarra con una profesora y luego de mudarse al barrio Villa Ortúzar las continuó con otro maestro.[6][9][10]
Estudió la mayor parte de la primaria y por completo la secundaria en el colegio parroquial San Roque de Villa Urquiza.[6] A los doce años creó una banda con dos amigos de otro barrio,[11] y en 1976, con dieciséis, armó el grupo Koala que hacía música afroamericana y en el que asumió como guitarrista rítmico.[12] A mediados de los años 1970, Juan José en sus viajes de trabajo a Miami, le traía de regalo vinilos de rock difíciles de conseguir en Argentina y en uno de ellos también le obsequió su primera guitarra eléctrica, una Gibson SG de color marrón.[13] Formó parte del coro de su colegio, pero lo retiraron por indisciplina; en la parroquia del establecimiento compuso sus primeras canciones, como la religiosa «Desértico» que tocaba en misa y una navideña con base de rock progresivo que obtuvo el segundo lugar en un concurso musical —con León Gieco y Carlos Cutaia en los jurados— organizado y emitido en Canal 9.[2][14][15] A pesar de ser felicitado por uno de los sacerdotes, no lo reintegraron al coro.[16]
Cerati estuvo en la banda de Manuela Bravo y luego entró a cumplir con el servicio militar. En 1979, se inscribió para estudiar la carrera de publicidad en la Universidad del Salvador.[17] Al año siguiente, paralelo a sus estudios, participó en dos conjuntos diferentes: Existencia Terrenal (ET) —de rocanrol y rhythm and blues—, con quien descubrió a bandas como Sex Pistols y The Police; y Vozarrón —de fusión que mezclaba jazz, rock y folclor—, según sus palabras «era el guitarrista; ni siquiera era el compositor», a pesar de que lo disfrutaba le resultaba «forzado pensar en “la fórmula de”».[18][19] Ese mismo año, con dos cantantes inglesas creó Savage, que tocaba soul y música disco en cabarés y fiestas judías.[20][21] De dichas presentaciones Cerati recordó que improvisaba canciones lentas en el momento y hacía «versiones inventadas», pero a la gente solo le preocupaba bailar.[22] Al mismo tiempo componía temas y también era parte de un trío llamado Triciclo, con este grabó un reggae titulado «Ay, nena, ¿cómo vas a hacer?»,[Nota 2] que fue difundido en un programa de Radio Rivadavia.[24]
Carrera musical
1981-1997: Soda Stereo
Inicio y éxito de Soda Stereo (1981-1991)
En 1981, Cerati se uniría a The Morgan por proposición de Zeta Bosio,[25] a quien conocía como compañero en publicidad el año anterior,[26] pero estrecharon un lazo de amistad más fuerte al convivir juntos en Punta del Este (Uruguay).[27][28] Estuvieron un par de semanas en la banda y luego probaron con otras agrupaciones de corta duración como Proyecto Erekto y Stress.[29] Paralelamente, tenían una agencia de publicidad junto con Alfredo Lois y Ernesto Savaglio llamada Hergus & Herlois.[30] Allí hacían boletines como tarea y encargos a marcas para reunir dinero, los textos los realizaba Bosio mientras que Cerati se encargaba de los dibujos y los acabados junto a Lois. Sin embargo, pronto se dieron cuenta que la agencia no remuneraba lo suficiente y disolvieron la asociación ya que a los tres les motivaba más la música.[31]
Un día, Cerati le propuso a Bosio armar una banda con temas propios que no fuesen cantados en inglés sino en castellano: él asumió el rol de cantante y guitarrista, y Bosio fungió como bajista y corista.[18][28] Para completar la formación, en marzo de 1982 —gracias a la intervención de Laura— Charly Alberti ingresó como baterista.[32][33] En 1983, ya como Soda Stereo, fueron invitados a salir en el programa de televisión Música total de Canal 9; Cerati en ese momento trabajaba como visitador médico en el Laboratorio Boehringer de Buenos Aires, y como el programa justo coincidía con su horario laboral, pidió el día libre por enfermedad para poder asistir. Tras aparecer en televisión, sería visto por sus jefes, lo que significó primero, en su despido, y segundo, en tomar la decisión de dedicarse por completo a la banda.[34] En 1984 salió el debut discográfico Soda Stereo, que se caracterizó por ser liviano y divertido, en donde Cerati hacía muestra de su humor ácido mediante críticas con letras ambiguas para no confundir la ironía con la queja y el enojo. Este sería el único trabajo en que empleó este humor.[35] Aunque admitió que el álbum le dio popularidad, odió el resultado y lo llamó «una porquería».[36] Al año siguiente, antes de grabar el segundo material, quería experimentar otras cosas y para ello llamó a Richard Coleman, quien junto con Christian Basso y Fernando Samalea, formaron Fricción que de acuerdo con Coleman era «un grupo alternativo de Gustavo».[37] Hicieron unas presentaciones en Stud Free Pub y tanto la prensa como el público experimentado los consagró como una banda underground.[38] Pronto tuvo que abandonar la agrupación por conflictos de agenda con Soda Stereo, aprobó que Roly Ureta lo reemplazara y siguió como colaborador.[39]
A partir de Nada personal (1985), menos bailable que su predecesor y con letras un poco más profundas,[40] la figura de Cerati como compositor empezaba a notarse más, y sería en el siguiente trabajo, Signos (1986), que daría un salto evolutivo más evidente; hizo abandono del esquema tradicional en una canción y lo reemplazó por un concepto dinámico, formal y más elaborado.[35][41] Para Diego Giordano, en Signos aparece «la síntesis de heroísmo y melancolía» que Cerati utilizaría para componer los mayores éxitos de Soda Stereo, como «En la ciudad de la furia» y «De música ligera»; además fue el primer disco con temas de «autobiografía» según el escritor Eduardo Berti.[41] Tenía la música casi lista hecha propiamente en su departamento, mientras las letras las escribió en una sola noche.[37][41] La lírica la finalizó el día antes de cantar, a medida que Cerati terminaba sentía «una excitación muy particular», bajo la influencia de la cocaína que le producía tortura a la vez, al punto de terminar en un hospital lleno de paranoia. La grabación de Signos la recordó como «muy sufrida» en una entrevista para la revista Rolling Stone en 2006.[42] Por otro lado, en Signos se suscitaron las primeras disputas dentro de la banda a causa de los derechos autorales. Bosio y Alberti decían que ellos también debían firmar los temas, a lo que el Cerati les respondía que las canciones las hizo él.[43][Nota 3] Años más tarde, explicó a Rolling Stone: «Zeta decía que el grupo debía firmar todas las canciones. Eso me parecía válido, siempre y cuando el esfuerzo fuera compartido, pero cuando soy yo el que está haciendo prácticamente todo, no me parece justo».[44]
Signos se convirtió en el primer álbum de la banda en tener una recepción positiva de la crítica, que los trataba de «frívolos», por hacer «música divertida y no seria».[41] El mismo año 1986, Nada personal había alcanzado su mejor momento al presentarlo oficialmente en cuatro conciertos en el Estadio Obras Sanitarias en abril, con un total de asistencia de 20 000 personas aproximadamente. Con Signos ocuparon un lugar destacado, de acuerdo a Infobae: «ser la banda de rock más importante de la región».[45] En febrero de 1987, se presentaron con gran éxito en el XXVIII Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, que consolidó la denominada «sodamanía» —un equivalente a la beatlemania— con una multitud de fanáticas que los recibieron a gritos, siguiéndolos por todas partes, desde la llegada al aeropuerto, incluso, introduciéndose al hotel que los hospedaba; esto los convirtió en una de las bandas más importantes del rock en español. Desde ese instante, mantuvieron un ascenso exitoso a nivel internacional.[46] En 1988, al finalizar la gira Signos, Cerati comenzó a componer los temas que formarían parte del álbum Doble vida, producido por Carlos Alomar y grabado en Nueva York. Durante los ensayos surgieron las tensiones dentro del grupo, Cerati ejercía el control creativo de la banda, incluso hasta les indicaba cómo tocar, Bosio y Alberti se sentían por momentos los «músicos de un solista», el bajista mencionaría después: «Hoy entiendo que [Cerati] estaba proyectándose como el verdadero artista en el que pronto se convertiría». Según La Nación, Doble vida los consagró como «la banda de rock más convocante de América Latina», pero también los marcó en lo artístico y los llevó «a un espacio destacado dentro del rock nacional».[47] Por otro lado, les permitió triunfar en el mercado estadounidense, siendo la primera banda de América Latina en lograrlo.[48]
El 3 de diciembre de 1988, en pleno levantamiento militar liderado por Mohamed Alí Seineldín, Soda Stereo hacía su concierto programado en el Estadio Obras Sanitarias; en una parte del recital, Cerati hizo referencia a lo que estaba pasando, y sus palabras fueron reconfortantes para el público. «Las palabras de Cerati, la música de Soda Stereo, el rito colectivo que permitía que todos se sintieran más fuertes, hicieron de ese fin de semana un recuerdo menos oscuro», manifestó Eduardo Fabregat en Página/12, «hizo de cantar y de tocar una herramienta para la belleza artística, y con ella nos hizo un poco más bellos, más felices, más libres. [...] en algo aparentemente tan banal como un show de rock, consiguió diluir el miedo y reconfortar el alma», finalizó.[49] Belauza de Tiempo Argentino, dijo: «Cerati abrió la fiesta puntual, haciendo una alocución de defensa de la democracia; y eso fue suficiente para que muchos entendieran que con más o menos compromiso político y social, para las nuevas generaciones la democracia era innegociable».[50]
Las publicaciones de Doble vida y el EP Languis (1989) trajeron consigo dos giras en dos años, y en palabras de Giordano, Cerati se había convertido en una «especie de Julio Iglesias latino»; para salirse de eso retomó las bandas del rock argentino de los años 1970 que solía escuchar en su adolescencia. De este modo, en soledad empezó a componer los temas del álbum con el que Soda Stereo dio bienvenida a la década de 1990: Canción animal, que los volvió a consagrar ante el público y la prensa; catalogado como el mejor álbum de Soda Stereo, y de los más emblemáticos del rock en español.[51][52] Fue en su momento de mayor popularidad que comenzaron a cuestionar su futuro, luego de batir varios récords como llenar el Teatro Gran Rex, el Estadio Vélez y reunir 250 000 personas en la Avenida 9 de Julio. «Una posibilidad sería dedicarnos una y otra vez a superar nuestras propias marcas, como si fuese un deporte. ¿Pero hasta qué punto se puede hacer eso sin matar la música que amamos?», decía Cerati.[53]
Comienzos como solista y separación (1992-1997)
A fines de enero de 1992, cerraron la gira Animal en el Estadio José María Minella de Mar del Plata. En ese concierto mostraron una clase de despedida, Cerati declaró: «Este es el último show por un largo tiempo»; después de esto, la banda entró a un receso y sus miembros se embarcaron en proyectos personales mientras los fanáticos se preocuparon ante una posible disolución.[54] «Nosotros tomamos la decisión de distanciarnos un poco, de hacer otras cosas, de abrir un poco nuestra cabeza, de viajar y juntarnos cuando tenga que ser», explicaba.[55] En marzo, a dúo con Daniel Melero lanzó el álbum Colores santos,[Nota 4] que contó con la colaboración de Flavio Etcheto y Carola Bony.[58] Posteriormente, considerada por varios medios una «obra de culto»,[59] en su época no fue bien recibida por la crítica ni valorada por el público,[60] ya que sería la primera vez que Cerati tomaba distancia del «pop guitarrero» y adoptaba más el dream pop,[61][62][Nota 5] él mismo recordó que la gente le decía: «¿Qué es esto? ¡Colgate la guitarra, pibe!».[57] Colores santos nunca fue presentado en vivo ya que era parte de un acuerdo, según Melero.[64][Nota 6] Entre las piezas que constituyeron el material está «Vuelta por el Universo», en la que Cerati describió como «la principal contenedora de elementos conceptuales de amor, flotación y luz que se fueron desarrollando a través de diferentes canciones del álbum».[58][67]
En mayo, ya reagrupado con Soda para la gira en España, dedicaron la mayor parte de su tiempo en los ensayos de esos conciertos para crear nuevo material en su próximo álbum, Dynamo.[68] Lanzado en octubre, el ambiente entre la banda era complicado por dos razones: el cambio de compañía discográfica y la relación conflictiva de sus integrantes,[69] mientras tanto la recepción del público fue más moderada en comparación con Canción animal.[70] En la gira Dynamo, Cerati se sentía «prisionero artística y laboralmente», disfrutaba más estar con su novia, la chilena Cecilia Amenábar, que continuar la vorágine de las giras. En marzo de 1993, le comunicó a Daniel Kon, representante de Soda, y al resto de la banda que se bajaba, lo que llevó a la cancelación de fechas pactadas en Estados Unidos y España.[44][71] Tras regresar a Argentina, el grupo se tomó algunos días de descanso que, luego se extendieron hasta convertirse en un receso que estuvo a punto de desintegrarlo.[72]
Cerati pasó una temporada en Santiago de Chile con Amenábar en un departamento de Providencia, allí instaló una sala de ensayo, los estudios Ámbar, para componer y grabar la mayor parte de su primer álbum como solista. La otra parte la grabó en Argentina en el estudio Supersónico con sus compañeros de banda: Zeta Bosio y Tweety González como coproductor y consultor de audio respectivamente; excepto por las contribuciones de los dos y de Amenábar en algunos temas, Cerati compuso todas las canciones y tocó todos los instrumentos.[74] Al poco tiempo se enteraron de que Amenábar estaba embarazada, por lo que amplió su estadía en Chile, y a la vez, casarse con la modelo.[71] El 1 de noviembre salió Amor amarillo, que reflejó el buen momento de esa relación, como el homónimo, «A merced» y «Te llevo para que me lleves».[75] Su hijo Benito nació 25 días después.[76] Además, incluyó una versión de «Bajan», tema de Luis Alberto Spinetta que grabó bajo Pescado Rabioso en el álbum Artaud (1973).[77][Nota 7] En diversas entrevistas aseguró que no pensaba iniciar una carrera solista, y que este álbum solo era un trabajo en solitario.[79][80] En 1994, acompañado de Bosio en bajo y Etcheto en guitarra, Cerati hizo la única actuación oficial en vivo para promocionar Amor amarillo en la radio FM 100 ubicada en Buenos Aires, visto por cien personas adentro de los estudios y otras 700 a través de dos pantallas dispuestas en las calles.[81] En julio, uno de los hijos de Bosio, Tobías, falleció en un accidente de tránsito, hecho que llevó a Soda Stereo a reencontrarse. Tiempo después, se juntaron nuevamente para componer su próximo álbum como grupo.[44]
En junio de 1995, salió el último álbum de Soda, Sueño Stereo, que, aunque se destacó por tener un estilo ecléctico, tuvo una fuerte presencia de música electrónica, dado al gran interés de Cerati y Bosio en el género.[82] A fines de año, Amenábar quedó por segunda vez embarazada y Cerati decidió volver a instalarse en Santiago.[83] En marzo de 1996, Soda Stereo finalmente realizó el MTV Unplugged, luego de que Cerati se negara varias veces al considerar que el sonido del grupo no cuajaría en un formato acústico. Pero después de pensarlo, le propuso a la cadena hacer los temas más intimistas y relajados, sin tantos decibeles ni volumen, ni del todo acústicos.[84] Dos meses después nació su hija Lisa, y Cerati había formado con los chilenos Andrés Bucci, Guillermo Ugarte y Christian Powditch, la banda electrónica Plan V; unas semanas después, publicaron su primer álbum homónimo, también llamado «Habitat Individual».[85] El álbum fue un éxito en Argentina al ser el más vendido del género hasta entonces.[86] Powditch recordó que «la gente no podía creer que veía a Gustavo sin una guitarra y sin cantar».[87]
En la gira Comfort y música para volar, el desgaste entre Cerati y el resto de Soda Stereo ya era irremediable, hacia el final de la gira, les pidió evaluar la continuidad del grupo. En marzo de 1997, Bosio se enteró por los periódicos de que Soda Stereo se separaba, intentó persuadir a Cerati para desistir pero pronto se dio cuenta de que no lo iba a convencer.[44] El bajista destacó la similitud con la separación de The Beatles: «Era algo que estábamos discutiendo y de repente aparece en la prensa. Fue un comunicado de él».[88] El 1 de mayo, Soda Stereo anunció oficialmente su separación mediante un comunicado de prensa.[89] En tanto Cerati, publicó «La carta del adiós» en el suplemento Sí del diario Clarín.[90] Aceptó hacer una gira de despedida después de negarse a la idea en primera instancia, en una entrevista posterior al diario Página/12 ese año, comentó: «Yo estaba en contra [de hacer una gira], ya que nunca había pensado en una despedida de Soda [...] pero me puse a revisar en otros grupos y volvía a Soda, y me di cuenta de que podía ser un momento musical muy importante, de tocar las canciones por última vez. [...] “termina una época”».[9]
El último concierto se llevó a cabo el 20 de septiembre en el Estadio Antonio Vespucio Liberti; antes de culminar, Cerati dio el discurso final donde agradeció tanto a los fanes y colaboradores del grupo, finalizó con la frase: «gracias totales» que se volvió célebre.[91][92] Andrea Álvarez, quien era parte de los músicos invitados, comentó que nadie pensó que trascendería, incluso ella lo había sentido como algo «tonto» en ese momento.[93] Cerati comentó: «Yo he dicho muchas boludeces que no tenían ningún sentido, y que sin embargo han servido después como títulos, epígrafes [...] Lo de “gracias totales” surgió como una forma de decir “Esto es lo más grande”, porque Soda Stereo había tenido un final feliz pese a que era un divorcio».[86] En 1998, en un reportaje para la revista D'Mode y, nuevamente para el suplemento Sí, reflexionó acerca de la separación de la banda:
Terminar con el grupo fue mi decisión. Sentí un gran alivio cuando dejé de tocar en River. El cierre fue lo máximo que podíamos dar. Si hacíamos otra cosa, ya empezaría a comprometerse el resultado y la relación entre nosotros y afuera. Sobre todo el resultado artístico, porque está muy viciado y no se podía dar más. Para mí, se estiró más de la cuenta tras haber tomado en mayo la decisión de separarnos, y hacer conciertos [entre fines de agosto y] septiembre fue poco tortuoso, pero lo tomé con tranquilidad para no volverme loco. En definitiva, hasta tal vez nos hizo bien porque podría haber sido abrupto, y así hubo tiempo para reflexionar.[94]
1998-2010: Carrera solista
Primeros años (1998-2005)
En 1998, Cerati lanzó su segundo y último álbum con Plan V, Plan Black V Dog, en colaboración con el grupo inglés The Black Dog. A diferencia de su antecesor, publicado bajo un sello independiente, contó con el apoyo de BMG. El destino del conjunto y la grabación de un tercer álbum era difícil ya que había vuelto a Argentina, mientras un integrante vivía en Alemania y el resto en Chile.[86] En octubre, apareció como músico invitado en el concierto de Los 7 Delfines en el Teatro Regio.[95] El 20 de noviembre, debutó en vivo como solista en el Festival Inrockuptibles en el Centro Cultural Recoleta, salió sin compañía al inicio, pero seguidamente se sumarían Etcheto y Leo García como apoyo en samplers; luego saldría Plan V, siendo su aparición final; la última parte del espectáculo presentó su nueva asociación de electrónica, conformada con Etcheto: Ocio,[96][97][98] con el que lanzó en 1999, el álbum Medida universal —bajo la etiqueta Ámbar, subsello de BMG creado por el propio Cerati— y sería vital en el desarrollo de su próximo trabajo en solitario.[99][96][100]
El 28 de junio, sacó su segundo álbum solista, Bocanada, considerado por algunas personas el primero, mientras que Cerati lo definió como el primero «sin el amparo» de Soda Stereo.[6][101][80] Su presentación definitiva como solista despertó un gran interés en la prensa argentina, inédito en el rock local hasta ese momento.[96] Grabado en su estudio hogareño Casa Submarina y en Abbey Road con la Orquesta Filarmónica de Londres,[102] mostró un cambio en su carrera, debido a los estilos musicales presentados,[103] el uso de la guitarra no tomó un papel relevante, aunque continuó utilizándolo en sus obras siguientes.[104] El crítico Iván Adaime de Allmusic le otorgó una calificación de 4.5 estrellas de 5 posibles.[105] Al principio hubo una resistencia a Bocanada al aducir que la música de Soda era diferente.[106][96][107] Contrario a eso, Cerati mencionó a Página/12 previo a su lanzamiento, que algunas canciones se relacionan con otras creadas con la banda como «Perdonar es divino» que tenía un vínculo con «Signos» y «Raíz» con «Cuando pase el temblor», esta última pensaba llamarla «El temblor 2».[108] Con el tiempo, esa renuencia se disminuyó hasta considerarse un clásico del rock argentino y latino;[106][109] el veterano crítico de rock David Cortés Arce mencionó: «Bocanada es un álbum fundamental en la historia del rock iberoamericano, y en general, de todos los países hispanoparlantes».[110] En agosto, fue elegido el artista del mes por MTV, y en diciembre, el suplemento No de Página/12 lo nombró junto a Charly García los mejores artistas de la década.[111][112] En los premios Gardel de 2000 obtuvo el de mejor artista rock y mejor diseño de portada.[113] La canción «Puente» se convirtió en su primer éxito como solista al ser nominada en varios premios, entre ellos a un Grammy Latino como mejor canción de rock.[114]
La gira Bocanada, la primera de Cerati como solista, inició el 25 de septiembre de 1999 en México y se extendió catorce meses. Para octubre estuvo en Chile y Argentina con seis actuaciones repletas en el Teatro Gran Rex;[106] en algunas de ellas fanáticos le pedían temas de Soda Stereo, pero él les decía que la banda era parte del pasado.[96][109][Nota 8] En junio de 2000, fusionó su gira con la de Café Tacvba, llamándose Bocanada al revés, que era la unión del título de su disco con el de la banda mexicana que promocionaba Revés/Yo soy (1999). Con esta gira, hicieron actuaciones en México y dos conciertos en el Estadio Obras Sanitarias de Argentina, además, compartieron el escenario para interpretar «Juego de seducción».[120] Ese año, en cambio, Ocio editó el EP Insular, que llevó al dúo ser partícipes del festival de música electrónica Sónar.[121]
En noviembre de 2001, Cerati presentó la banda sonora homónima de la película +bien, en la que asumió el rol protagónico como breve incursión en el cine.[Nota 9] +Bien fue nominado a un Grammy Latino como mejor álbum instrumental pop.[124] Sucesivamente, sacó el álbum en vivo 11 episodios sinfónicos, que se llevó a cabo en agosto en el Teatro Avenida, acompañado por una orquesta sinfónica de 40 instrumentistas conducida por Alejandro Terán, interpretó temas de todas sus etapas en clave de violines, clarinetes, arpas y oboes.[125][126][127] Cerati se mantuvo reservado ante la prensa sobre el tema, solo declaró antes de que saliera el disco: «Está mi nombre y está mi trabajo ahí. Posiblemente esto no lo hubiera hecho si no era porque me lo proponían. Pero me gustó la idea».[125] Ante la crítica de algunos fanes de Soda que no les agradaban esas interpretaciones a los éxitos de la banda, respondió que no competían con las versiones originales, sino que eran solo nuevas lecturas.[128] El 22 de abril de 2002 se presentó en la sala principal del Teatro Colón de Buenos Aires, esta vez junto a la Orquesta Sinfónica Nacional y bajo la dirección de Pedro Ignacio Calderón.[125]
El 26 de noviembre lanzó su tercer álbum como solista, Siempre es hoy, producido por Sacha Truijeque y Toy Hernández, con más influencia electrónica, además de hip hop.[129][130][131] Contó con las participaciones de Charly García, Domingo Cura, Camilo Castaldi «Tea-Time», y su nueva pareja, Deborah de Corral.[132] Su producción representaba una doble faceta en lo «emocional», según propias palabras del cantante: «El disco tiene momentos de felicidad y de enojo. Siento que es celebratorio. Sobre todo de la vida en sí, de los diferentes matices de la vida. Esa es mi sensación general». En un principio, contenía mayor material pero terminó editado en un único álbum por la situación económica que atravesaba el país en aquel entonces. También involucró un aspecto reflexivo entre la crisis suscitada y su vida personal.[130] Si bien, los sencillos «Cosas imposibles», «Karaoke» y «Artefacto» tuvieron una amplia difusión, y el disco se posicionó entre los cinco más vendidos de Argentina en diciembre, no tuvo buena aceptación en la crítica por su extensión de tiempo y la dispersión en los sonidos electrónicos.[133][134] En contraposición, Siempre es hoy le valió la única nominación de Cerati en los Premios Grammy, en la categoría mejor álbum de rock latino/alternativo.[135]
En noviembre de 2003 salió el álbum de remezclas Reversiones: Siempre es hoy, realizadas por diferentes músicos, productores y DJs de Argentina, Chile, México y Alemania, además de dos fanes que ganaron un concurso organizado por Cerati, uno incluido en el formato CD y otro en la edición de vinilo.[136][137] A la par, publicó el DVD de 11 episodios sinfónicos, que incluyó el concierto completo en el Teatro Avenida, con tres temas inéditos que cantó junto a la Orquesta de las Américas en el Auditorio Nacional de México, y el demo original que impulsó el proyecto: la interpretación de «Pasos» junto a la Orquesta Sinfónica de Quebec (Canadá), bajo la dirección de Gilles Ouellet.[138] En 2004, Cerati editó un álbum recopilatorio en CD+DVD titulado Canciones elegidas 93-04, que tiene dos ediciones con diferentes canciones para Argentina y España; incluyó el tema «Tu locura» utilizado en la serie de televisión Locas de amor de Canal 13, nominado en los Premios Martín Fierro 2005 como tema musical original.[139][140]
La gira Siempre es Hoy abrió en Quito (Ecuador) y abarcó todo el continente y España, con 48 conciertos entre finales de 2002 y 2004.[141][133] A fines de 2003, en dicha gira Cerati creó junto a Etcheto y Leandro Fresco el trío laptop Roken; este proyecto lo presentaron formalmente en el festival Mutek de Valparaíso, y después harían diversas presentaciones en distintos países de América Latina.[142] Con el término de la gira, Roken quedó en pausa,[143] en una entrevista a Etcheto en 2005 dijo que se reunirían con Cerati para ver como continuar y grabar un álbum,[144] pero jamás se concretó algún lanzamiento.[145] En abril, Cerati estuvo como invitado sorpresa en la actuación de Los Pericos en la sexta edición del festival Vive Latino.[146]
Éxito como solista, reunión de Soda Stereo, y últimos años (2006-2010)
El 4 de abril de 2006, lanzó su cuarto álbum Ahí vamos en donde las guitarras eléctricas volvieron a tomar un lugar destacado, según Infobae: «[Cerati] volvió al rock del que nunca se había ido del todo pero que quizás había quedado más entreverado con otros estilos en sus trabajos previos».[147] Coproducido por el músico y Tweety González, contó con la participación de músicos como el reencuentro con Richard Coleman, Fernando Samalea, entre otros. El disco fue mezclado por el ingeniero y músico venezolano Héctor Castillo y masterizado por Howie Weinberg en el estudio Masterdisk en Nueva York.[148][149] Coleman comentó que el disco era «una necesidad personal del músico», mientras que Cerati sintió el desafío de grabar un disco que represente emoción y temor por comenzar con algo, que luego, deseaba plasmar una «esencia roquera».[150][151]
En Argentina alcanzó disco de platino antes de salir a la venta, a causa de los pedidos anticipados, mientras que en México y Chile consiguió disco de oro.[152][147][153] Asimismo, ganó un Grammy Latino como mejor álbum de rock, y con «Crimen», su primer sencillo promocional, se posicionó rápidamente en el primer lugar de las radios argentinas y le valió otro Grammy Latino como mejor canción de rock.[154][148][152] En los Premios Gardel 2007, Cerati se llevó el Gardel de oro, el mayor trofeo otorgado por la Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas (CAPIF), más otros seis galardones de dicho álbum y la canción «Crimen», considerada la mejor del año.[155] En la edición siguiente, Ahí vamos fue nuevamente galardonado, ahora como Mejor DVD.[154] El resto de sencillos —«La excepción», «Adiós», «Lago en el cielo» y «Me quedo aquí»— obtuvieron una recepción positiva del público y la prensa.[156][157][147]
La gira Ahí Vamos inició el 1 de junio de 2006 en Ciudad de México y siguió por América Latina, Estados Unidos, España y Londres, donde Cerati tocó por primera vez el 12 de octubre en The Forum, con 76 conciertos en total.[147] El 23 de febrero de 2007, se presentó en el anfiteatro de la Quinta Vergara para participar en el XLVIII Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, mismo certamen en el que estuvo veinte años antes con Soda Stereo. El Monstruo lo premió con las dos artorchas y la gaviota de plata, esta última la rebautizó como «el pelícano de platino».[158] El 10 de marzo, participó en un concierto gratuito con motivo del cierre del programa de verano del gobierno de la ciudad de Buenos Aires (GCBA), frente al Monumento a Güemes con las principales calles cerradas. Los medios estimaron una concurrencia de 200 000 personas.[159] En junio, la gira se interrumpió tras el regreso de Soda Stereo,[160] anunciado ese mismo mes.[152]
En julio, Cerati participó en el concierto de Shakira como parte del Live Earth, al interpretar juntos el tema «Día especial» en Hamburgo (Alemania) y Estambul (Turquía).[161] La gira de reunión Me verás volver de Soda Stereo fue comprendida entre octubre y diciembre con veintidós fechas en nueve países con un total de más de un millón de espectadores.[162] Seis de esas fechas se hicieron en el Estadio Antonio Vespucio Liberti, que los llevó a ser la primer banda de rock latinoamericano que logró dicha cantidad en una sola gira, superando el récord de The Rolling Stones con cinco.[163] Más tarde, Cerati mencionó: «[...] nosotros llamamos una burbuja en el tiempo [...] estamos juntos porque nos llevamos increíblemente bien, pero de aquí en más cada uno sigue su camino por separado».[164] En 2008 realizó apariciones como invitado: en mayo participó en el concierto organizado por la Fundación América Latina en Acción Solidaria (ALAS), en las actuaciones de Fito Páez y de Shakira en el cierre;[165][166] en agosto, fue invitado especial en el concierto de Emmanuel Horvilleur en el Teatro Gran Rex,[167] y en noviembre estuvo en la presentación de Bajofondo del festival Creamfields en el autódromo de Buenos Aires.[168]
Si yo me retirara ahora, en este momento, no creo que sea muy factible, pero supongamos que sí, me iría contento por Fuerza natural.[2] —Cerati, agosto de 2009 |
El 20 de julio de 2009 se estrenó en las radios «Déjà vu», primer sencillo de su nuevo álbum solista.[169] El 1 de septiembre, lanzó Fuerza natural en formatos CD y vinilo.[170] Se caracterizó por tener un sonido folk y country alternativo con presencia de guitarras acústicas.[171] Cerati comentó: «Lo que hice fue una composición bastante rápida. Tenía muchas ganas de hacer algo acústico, es decir, salir un poquito de la distorsión que planteaba Ahí vamos y también en cuanto a la composición. Quería que se moviera hacia lugares más libres. Después vino [la gira Me verás volver] de Soda Stereo, que fue tan gigante y tan power. Necesitaba como bajar unos cambios en ese aspecto».[171] En ese sentido, dijo que para el disco no pretendía sacar videoclips de manera convencional, sino que había sido concebido detrás de una idea original basada en armar, con todas las canciones del álbum, «un único y gran video musical» en forma de película con estilo road movie.[172][Nota 10]
Tanto «Fuerza natural» y «Déjà vu» fueron consideradas entre las cien mejores canciones de 2009 en Argentina.[174] El álbum consiguió un disco de oro por las ventas anticipadas, y disco de platino a las pocas semanas de salir a la venta. Ocupó el primer lugar en ventas también en México, Colombia, Perú y Chile, así como el primer lugar de los más vendidos en la tienda latina de iTunes en Estados Unidos en la primera semana. Fue puesto en la quinta posición de los 50 mejores discos de 2009, por la revista Rolling Stone; además, consiguió otro premio Gardel de oro en 2010, el segundo de su carrera.[175][171][176] A finales de 2010, logró otros dos Grammy Latinos como mejor álbum de rock y mejor diseño de portada de su disco.[177][Nota 11] La gira Fuerza Natural inició el 19 de noviembre de 2009 en el Estadio de Béisbol de Monterrey,[Nota 12] y cerró su segundo tramo el 15 de mayo de 2010 en el Estadio de fútbol de la Universidad Simón Bolívar de Caracas.[183][Nota 13]
Accidente cerebrovascular y fallecimiento
Tras finalizar su concierto en Caracas, Cerati tuvo que ser trasladado a un hospital. En un principio se informó que había sufrido una descompensación.[186][187] El 18 de mayo en un comunicado, confirmaron que padeció un accidente cerebrovascular (ACV), donde sufrió «un evento vascular isquémico con afasia de expresión», fue intervenido quirúrgicamente ante la gravedad del cuadro, y uno de los facultativos dijo que «no volvería a ser el mismo».[188][189][190] Desde ese momento, permaneció en estado de coma.[2] Los medios recordaron que Cerati había tenido una trombosis cuatro años antes.[Nota 14] En junio fue repatriado a Argentina en un avión ambulancia para ser trasladado al instituto FLENI de Buenos Aires.[196] El 14 de ese mes, sus amigos cercanos informaron que había movido los labios y la cabeza al escuchar sus canciones.[197] En octubre fue ingresado a la clínica ALCLA, en su estadía persistió el mismo estado neurológico.[198] Desde que sufrió el ACV, sus fanáticos hicieron varias vigilias y recibió diversos homenajes desde Luis Alberto Spinetta, Charly García, Fito Páez, Andrés Calamaro, Shakira, hasta Bono, Joaquín Sabina, Alejandro Sanz, Maná, entre otros.[199][200][201][202] En 2013, el papa Francisco le escribió una carta de oración, a petición del artista plástico Gustavo Masó; en un fragmento mencionó: «Me ayudó a reconectarme con Gustavo [Cerati]».[203]
Cerati falleció el 4 de septiembre de 2014, cerca de las 9:00 a.m. hora local (12:00 GMT), según la noticia emitida en Twitter mediante la cuenta oficial del cantante, así como un comunicado por parte de sus familiares y médicos de la clínica en el que se encontraba internado.[204][205][206] Había cumplido 55 años el mes anterior.[207] La noticia se difundió de forma anticipada por varios medios de comunicación argentinos como Radio Mitre.[208] En la Legislatura Porteña, fue dada a conocer por el vicepresidente primero Cristian Ritondo, luego de que el ministro de Cultura Hernán Lombardi lo confirmara.[209] La legisladora Susana Rinaldi expresó su pesar, y todo el poder legislativo guardó un minuto de silencio.[210] La presidenta Cristina Fernández de Kirchner decretó dos días de duelo nacional con la Bandera de Argentina izada a media asta en todos los edificios públicos.[211] El ministro vocero chileno Álvaro Elizalde expresó sus condolencias no solo a nombre del gobierno de Chile, sino también como «admirador». Tras dejar su mensaje en el libro de condolencias dispuesto en el Consulado de Argentina de Santiago, declaró a la prensa: «Su vida fue expresión de la hermandad entre nuestros pueblos».[212] Otros artistas que también expresaron su pesar, fueron Indio Solari, Francisco Bochatón, Diego Frenkel, Juanes, Ricky Martin, Residente, Julieta Venegas y Molotov.[213][214][215]
En la ceremonia de los Premios Gardel 2014 en el Teatro Gran Rex —que coincidió con el día de su deceso— se le hicieron múltiples homenajes en la entrega de premios.[216] Andrés Calamaro dijo: «[...] lloré como un chico y es la tercera vez que me emocioné tanto en mi vida. La última vez que me dieron un premio estaba sentado junto a Gustavo y fue él el primero en levantarse y felicitarme».[217] El velorio se hizo en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires con una duración de catorce horas,[218] acudieron miles de personas dentro de los que estaban Zeta Bosio, Charly García, Miguel Mateos, Pedro Aznar, Fena Della Maggiora, Dante Spinetta, María Carámbula y Martín Palermo.[219] Los fanáticos se formaron en una fila de más de quince cuadras del lugar para rendirle homenaje.[220] El 5 de septiembre, fue llevado en un cortejo fúnebre que recorrió diversas zonas de las principales avenidas de Buenos Aires, mientras que cientos de seguidores le lanzaban flores al vehículo que llevaba su féretro; después, realizaron una ceremonia privada con sus familiares y cercanos en las capillas del Cementerio de la Chacarita, con una gran multitud afuera del lugar.[221] Los restos de Cerati fueron puestos en una tumba junto a la de su padre, fallecido en 1992.[222]
Vida personal
Relaciones y matrimonios
Saint Jean, Chomyszyn y Balfour
Mientras estudiaba publicidad y trabajaba como visitador médico, mantenía una relación con Ana Saint Jean, a quien le grabó un tema llamado «Hablando de vos», que permanecería inédito hasta 2018. La relación empezó a deteriorarse cuando Cerati empezó a dedicarse a Soda Stereo, Saint Jean llegó a ver algunas presentaciones del grupo, pero estaba cada vez más distante. Cuando Soda Stereo apareció en Música total, la relación ya había acabado.[223] En un concierto en 1984, Cerati conoció a Anastasia «Tashi» Chomyszyn de quince años, quien regresaba a Buenos Aires después de cinco años de estadía en lugares como Inglaterra y Bélgica. Su apariencia inspirada en bandas europeas como The Cure lo dejó impresionado cuando la vio por primera vez.[224] Con el poco éxito del primer disco y las críticas hacia la banda, acusados de ser plásticos y tener «mucha imagen, poca música», decidieron hacer un cambio en su estética con la ayuda de Chomyszyn; como fue el volumen del cabello y el uso de ropas antiguas que cortaron. Cuando se tuvieron que maquillar, Cerati se negaba porque temía que lo tacharan de gay, pero luego cedió.[225] Cerati le escribió la canción «Juego de seducción», que ya disponía de la música pero sin la letra, en base a los juegos que tenían: Chomyszyn era la «señora bien» y él el mayordomo, apodado «Oliver».[224] Después de dos años, terminaron la relación en una de las primeras giras de Soda, ahí Cerati conoció a la modelo Nöelle Balfour con quien comenzó una nueva relación.[224] Apenas un mes, planearon casarse y alquilaron juntos un departamento en el barrio Recoleta, lugar en el que Cerati escribiría todas las letras de Signos, inspirado en su posterior ruptura con Balfour, quien definió la relación como breve pero «fulminante».[7]
Edwards y Antonucci
Cerati empezó una relación con la modelo Belén Edwards, quien por entonces mantenía una relación inestable con Julio Moura.[226] En marzo de 1987, contrajeron matrimonio después de que Soda terminó el primer tramo de la gira Signos,[46] pero con el auge de la sodamanía y el éxito de Doble vida, se separaron ambos al año siguiente. Fue justamente en esa época que conoció a la modelo Cecilia Amenábar en una conferencia de prensa de Soda en Chile, y después comenzó un romance con Paola Antonucci, quien era pareja de Charly Alberti. En 1989, se mudaron juntos a un departamento en Avenida Figueroa Alcorta, donde experimentaban con el LSD y Cerati compuso los temas de Canción animal, algunos inspirados en Antonucci;[51][227] para el homónimo le pidió a Melero que hiciera la letra describiendo la relación.[228] También simbolizó su conexión con Antonucci al rediseñar juntos el arte de la portada del álbum con una pareja de leones copulando.[229] Según la visión de Andrea Álvarez, Canción animal se liga como el disco de la relación, mientras que Dynamo se relaciona a la ruptura.[230]
Matrimonio con Amenábar
En agosto de 1988, luego de conocer a Cecilia Amenábar, empezaron a verse frecuentemente, Cerati viajaba a Chile para verla cada vez que podía, pero el inicio de la gira Doble Vida, los mantuvo un tiempo alejados y la relación seguiría a distancia.[231] En junio de 1991, le envió de regalo por correo un manuscrito que, más tarde, se convirtió en la canción «No necesito verte (para saberlo)».[232] En 1992, decidió tener una relación estable con Amenábar, y viajó a Chile para pasar dos semanas juntos. En ese tiempo, Cerati pensaba en su vida fuera de Soda Stereo.[233] En diciembre la llevó a Buenos Aires y en enero de 1993 a la gira Dynamo, ahí le confesó que estaba cansado de esa rutina, y quería formar una familia.[234] Contrajeron matrimonio civil en la localidad de Las Condes el 19 de mayo; y después, el 25 de junio, se casaron de forma religiosa en la iglesia Los Misioneros, en el barrio de Pedro de Valdivia Norte.[235][236] Tuvieron dos hijos: Benito y Lisa, ambos nacidos en Santiago.[237][238]
Los dos colaboraron en Amor amarillo, Amenábar fue coautora de «Ahora es nunca» y aportó voces en «Te llevo para que me lleves» y «A merced», en este último además ejecutó el bajo.[74][239] Con respecto a su inclusión, Cerati señaló que ya se dedicaba a la música: «una de las cosas que nos ha unido es su sensibilidad musical [...] no fue una superficialidad ponerla en el disco, porque ella fue la que estuvo cerca mientras yo lo estaba haciendo». En cuanto a su habilidad musical, explicó: «Ella ya tocaba el bajo, yo solo le di una líneas simples y la empujé a tocar».[240] En otra entrevista había dicho: «Pretendo hacer música con ella. Cecilia es tan amante de la música como yo y creo que tiene condiciones buenísimas. De hecho, es una cosa que nos une mucho. Puede ser que hagamos un video juntos, aunque sea en la casa».[241][Nota 15]
Óscar Jalil en Rolling Stone, considera que Bocanada habla del inminente divorcio de la pareja: «El álbum de Cerati plantea una mirada melancólica sobre las primeras grietas que anticipan una ruptura, visiones en cámara lenta y sin los típicos excesos que explicitan el dolor y la pérdida [...] Insinuaciones del deterioro afectivo aparecen en varias letras del disco».[96] En febrero de 2001, los problemas ya eran insostenibles, en mayo se hizo público el distanciamiento de ambos, Cerati dejó el hogar en que vivían en Vicente López desde que se fueron de Chile en 1997, y alquiló un departamento en Avenida del Libertador.[243][244][245] Se separaron en febrero de 2002.[246] Poco después, se encontraron en un concierto de Mouse on Mars y bailaron de forma espontánea, Amenábar diría que la «música tiene un poder curativo enorme».[247]
Deborah de Corral
En 2001, tras dejar a Amenábar, Cerati inició una relación con la modelo Deborah de Corral, quien fue anteriormente pareja de Charly Alberti, lo que causó un gran revuelo.[248] La transición de pareja se reflejó en Siempre es hoy.[249] Sobre lo que influyó más, en una entrevista para Rolling Stone en 2003 Cerati aclaró: «No sé si [mi relación con de Corral] tuvo más influencia en el disco que mi separación [con Amenábar], pero mi relación con [de Corral] fue energía positiva, me sostuvo. Además, ella fue testigo de todo el momento de creación del álbum y también participó. [...] y al mismo tiempo mi exmujer también tuvo mucha importancia».[250] No solamente tuvo contribución de Corral en lo musical, dando coros en «Casa» y «Torre de marfil», y un silbido en «Altar», además de cantar en algunos conciertos;[251] también apareció parcialmente en la contraportada.[252] Se mantuvieron juntos hasta julio de 2005.[253] Según Lilian Clark, fue el gran amor de su vida.[254][255]
Medrano, Balcarce y Bello
Tras su separación con de Corral, inició un romance con la vestuarista Sofía Medrano,[256] a quien conoció en un evento benéfico de la Fundación Huésped.[257] Medrano fue vestuarista en la gira Ahí vamos del mismo modo que Edwards y Antonucci en las giras de Soda Stereo, mientras fueron parejas de Cerati.[248][258] Terminaron a fines de diciembre de 2007, tras la conclusión del retorno de Soda Stereo.[259] En enero de 2008, comenzó a salir con la actriz Leonora Balcarce, que duró solo un año.[260][257] En abril de 2009, empezó un nuevo noviazgo con la modelo Chloé Bello.[261] Ambos adoptaron a un perro de raza Border collie al que llamaron Jack.[262] Tenían planes de casarse en Marruecos en la segunda mitad de 2010; Bello acompañó a Cerati en el segundo tramo de la gira Fuerza Natural, pero cerca de las últimas fechas, se tuvo que ir a Europa por cuestiones de trabajo.[2]
Relación con Chile
Yo vivo parte de mi tiempo en Chile y tengo una ligación muy especial con este país y con su gente, pero para [Soda este país] es muy importante porque Chile fue el primer país que conocimos fuera de la Argentina.[263] —Cerati. |
Su primera visita a Chile sería con Soda Stereo en mayo de 1986, para aparecer en el estelar Martes 13.[46] Según EMOL, desde ese instante Cerati se transformó en «ídolo»: «Apareció con una cabellera de cómic y una holgada camisa brillante. Su voz stereofónica impostada hizo estragos entre las chicas en el set».[264] En la segunda visita de la banda, en noviembre, se desató la sodamanía por primera vez. Hicieron cuatro conciertos en el Estadio Chile —donde Cerati dijo «el régimen se acabó»—[265] y uno en Valparaíso.[46] Tras la exitosa presentación en el Festival de Viña del Mar, en febrero de 1987, la prensa argentina los criticó por haber sido partícipes del certamen mientras al exterior del anfiteatro de la Quinta Vergara unos manifestantes eran reprendidos, a lo que Cerati respondió: «Sin duda que yo no estoy de acuerdo con lo que pasa políticamente en Chile».[46] Años después reconocería que parte del éxito que tuvo la banda en Chile se debió por la situación política. «Nos sacaban en titulares de todos los diarios. Los espectáculos, en ese aspecto, a lo mejor copaban un lugar que, en otras circunstancias, no sería tanto. Pero la gente nos adoptó inmediatamente», señaló.[266] En la gira al sur de Chile que emprendió Soda tras triunfar en Viña del Mar, Cerati se mostró impresionado por el lago y volcán nevado de Frutillar.[267]
Mientras vivió en Santiago, Cerati le manifestó en una entrevista de 1994 al diario El Mercurio, que la ciudad le representaba «calma», y que había «una timidez respetuosa» en sus habitantes, que le encantaba.[268] Incentivado por su esposa, frecuentó lugares underground de música electrónica, lo que daría origen a Plan V, y de rock alternativo, en donde conoció a bandas como Sien y Solar.[269][267] Según Amenábar en 2013, Amor amarillo fue «uno de sus discos menos vendidos y comprendidos» porque lo hizo fuera de Soda, y porque «a mucha gente no le gustó que se fuera a Chile».[74] En 1997, mediante la carta que publicó en el diario Clarín sobre la disolución de Soda Stereo, Cerati desmintió que sus constantes viajes a Chile tuvieran algún factor determinante en la decisión, puntualizó que aun vivía en Argentina y que continuaría su carrera en su país natal, como lo era siempre.[270] En el marco de El último concierto en Chile, tras finalizar «Té para tres» le confió al público: «Ustedes saben que esta también es mi casa».[Nota 16] Según Jalil, durante la gira de prensa de Bocanada «jugaba más de local» en Santiago que en Buenos Aires.[96] Con su familia formada en Chile, viajaba a la playa de Zapallar y al Lago Vichuquén, lugares que aún visitaba, aunque con menor frecuencia, después de separarse de Amenábar.[272][273] También recorrió otros sitios en el norte de Chile, como San Pedro de Atacama.[274]
Tras el terremoto de Chile de 2010, Cerati fue uno de los primeros artistas internacionales que manifestó su conmoción y solidaridad mediante la red social Twitter y de un mensaje en vídeo.[275][276] El 13 de marzo, encabezó el concierto Argentina abraza a Chile a beneficio de las víctimas de la catástrofe, en el que concurrieron 100 000 personas.[277] Después recordaría: «[había] muchas banderas chilenas llevadas por argentinos, lo que me dio mucho orgullo. Parecía que estaba tocando en Santiago».[237] Al año siguiente, en la Casa de la Patria Grande de Buenos Aires, los ministros de Chile y de Argentina, Luciano Cruz-Coke y Jorge Coscia, respectivamente, le hicieron entrega del Premio Binacional de las Artes y la Cultura al Compromiso Solidario por su participación en el evento benéfico, quien estuvo representado por Lilian Clark.[278]
Fútbol
Vivo frente a River, soy del Racing Club, mi living tiene los colores de Boca y mi cuarto los de la Selección.[279] —Cerati sobre su hogar en Alcorta |
Cerati expresó su desinterés por el fútbol en una entrevista en 2010,[237] pero cuatro años antes, confesó que cuando tenía que decidir en un club en 1966, eligió a Racing Club de Avellaneda, ya que en ese momento resultó campeón.[194] En 2001 había aclarado que no tenía ninguna pasión por el fútbol, ni por Racing ni por otro equipo, y declaró como falsa una publicación que decía que era fanático.[280] En 1993, en el programa La Cueva de Telefé, manifestó: «Soy de Racing, pero poco fútbol, porque tuve mucha decepción durante mucho tiempo. Tal vez ahora lo recupero, que andamos bien».[281] Durante un concierto de Soda Stereo en 1995, mientras cantaba «Primavera 0», Cerati gritó «¡Dale Racing!» como modo de celebrar su triunfo de 3-0 al Club Atlético Lanús.[282] En diciembre de 2014 a unos meses de fallecer, Racing logró el campeonato tras trece años, y en la celebración del título, la hinchada de la Academia cantó «De música ligera».[283]
Otros proyectos
En noviembre de 1993, Cerati condujo brevemente un espacio de MTV como VJ para hacer la presentación de diversos vídeos musicales, incluso algunos suyos como «En la ciudad de la furia» con Soda Stereo, «Hoy ya no soy yo» con Daniel Melero, y el estreno de su solista «Te llevo para que me lleves».[284] Fue rostro publicitario en 2001 para un comercial de Cerveza Quilmes, al que compuso el tema de la campaña «Salí para ver».[285] Dos años después, aparecería esta vez para un comercial de CTI Móvil.[286] El 20 de diciembre de 2001, grabó unos separadores para los cortes comerciales del programa de televisión Fútbol de Primera, en donde aparecía improvisando y experimentando con su guitarra,[287] y que pudieron ser vistos recién en 2002.[288][Nota 17] En 2009, Cerati lanzó su propia línea de ropas para hombres diseñadas por él con la ayuda de su diseñador de imagen Manuel Morales, bajo el nombre «GC» para la marca Basement de tiendas Falabella, que incluía jeans, camisas, chaquetas, trajes, corbatas y accesorios de color negro, blanco y gris, inspirados en su estilo preferido punk-rock.[289][290]
Ganancias
A mediados de los años 1980, Juan José Cerati empezó a encargarse de los asuntos financieros de Soda Stereo, y creó la editorial «J.J.C.» para amparar el catálogo de canciones firmadas por su hijo, labor que pasaría después a manos de Laura Cerati.[291] Hasta 2011, las regalías por las canciones de Cerati ascendían a 66 000 millones de dólares, pero después de su fallecimiento la cifra aumentó considerablemente a 142 840 dólares. Tenía propiedades en Argentina —incluida una casa en Buenos Aires—, Chile, Uruguay, un estudio en Estados Unidos el cual contenía un equipo de audio valuado en 1.7 millones de dólares.[292][293][294] En 2016, la revista Forbes Argentina lo situó como el músico local que más generaba ingresos póstumamente, pese a que en ese momento el musical Sép7imo Día de Cirque du Soleil no contaba con números, señaló que se estimaba una recaudación cercana a 30 millones de dólares.[295] En 2019, el diario Publimetro valoraba que su fortuna completa rondaba los 50 000 millones en pesos argentinos.[296]
Musicalidad
Influencias
En 1999, Cerati declaró que cuando tenía nueve años, aunque ya conocía a The Beatles ellos lo impactaron después, y lo que lo motivó a tocar y armar una banda fueron los temas «Purple Haze» de Jimi Hendrix y «Pictures of Lily» de The Who, que escuchaba a diario.[6] The Beatles es el primer recuerdo musical de Cerati; en varias entrevistas mencionó que jugaba con una escoba que cantaba y tocaba «Twist and Shout», y su preferido era John Lennon, a quien en una entrevista para Página/12 en 2005 elogió como un «compositor único» y aseguró: «Si tengo que nombrar un artista entre todos lo elijo a él».[297][298] Ese mismo año se inspiraría en su canción «Jealous Guy» para componer «Crimen».[299] También tendría influencias de George Harrison; el periodista Mauricio Cavallo del diario digital uruguayo LaRed21, dijo que Bocanada hacía referencias a algo muy espiritual, con puntos de contactos con Harrison, y citó como ejemplo «Puente», además de lo lírico «se percibe un “slide” de guitarra, muy al estilo Harrison».[300] En Fuerza natural Harrison volvería a ocupar un espacio, y de igual manera Tom Petty, Bob Dylan, Jeff Lynne, y la banda que formaron: Traveling Wilburys, se reflejaron en su último álbum. Aunque Cerati admitió no haber sido nunca un gran seguidor de Dylan, citó «Blowin' in the Wind» («la respuesta está en el viento») en «Tracción a sangre».[301] Cerati siempre profesó su admiración por Lynne y su banda, Electric Light Orchestra (ELO); para la grabación de Sueño Stereo y la gira, Soda Stereo tuvo una alineación como la de ELO: guitarras de doce cuerdas, bajo, teclados análogos, dos chelos y un violín. También Cerati se basó en la imagen de Lynne, con cabellera ensortijada abundante, barba descuidada y gafas oscuras; antes de que Soda Stereo tocara en el MTV Unplugged, bromeó: «Buenas noches, yo soy Jeff Lynne y esto es Electric Light Orchestra».[302]
Para Cerati, David Bowie fue otro de sus artistas íconos junto a Lennon; como parte de su formación musical en los años 1970 «si te gustaba la música, no te podías no sentir influenciado por los Beatles o Bowie», diría en 2003.[303]
Asimismo, Luis Alberto Spinetta incidió en Cerati, quien le marcó una profunda identidad en la lírica y el estilo de sus melodías.[304] El propio Cerati relató: «Recuerdo que no hacía otra cosa que imitar, tratar de conseguir reproducir el clima que [Spinetta] lograba en [Artaud]», refiriéndose al inicio de su carrera con las primeras bandas, y el impulso fuerte del álbum hacia él; cuando se mudó a Santiago, llevaba consigo un montón discos compactos, entre estos se encontraba Artaud, lo que le permitió redescubrir el tema «Bajan» que tocaba en esos años, y así crear una versión e incluirla en su primer trabajo solista, aunque explicó que no se trataba de un homenaje a Spinetta, sino de tocar una canción que le quedaba bien y que adoraba cantarla cuando tenía quince.[77] Otros modelos de inspiración en esos años que citó fueron Roxy Music y King Crimson.[77]
Después de The Beatles, no hubo otro grupo que me hubiera producido esa sensación de querer estar ahí como lo hizo The Police. [...] Porque The Police existe porque existieron The Beatles, está clarísimo eso. Y encontrarme de vuelta con esa sustancia pop y con esa energía, fue como único ese momento, y fue muy instructivo para salir a tocar. Cuando Soda Stereo sale a tocar, salimos tratando de emular esa energía. Esa fue la escuela.[305] —Cerati, revista Rolling Stone, 2006. |
The Police le hizo ver a Cerati que podía mezclarse el rock, punk, jazz y reggae para dar una gran obra.[306] El vínculo comenzó con el álbum Outlandos d'Amour (1978), las canciones como «Roxanne» y «So Lonely» le dieron pauta para que creara los primeros demos con Soda.[307] El guitarrista de la banda, Andy Summers, le enseñaría los «secretos» armónicos que mostraban en los acordes que manejaba, para después, integrarlos al propio lenguaje musical con Soda Stereo y luego como solista.[304] Tuvo la oportunidad de verlos en vivo, y de conocerlos en persona, en una visita que hicieron los británicos a Argentina, en diciembre de 1980.[17] También tuvo influencias de David Gilmour, de quien se sabía tal cual sus solos de Pink Floyd.[17]
En los años 1980, Cerati al ver un afiche promocional de Pornography (1982) de The Cure, le reveló la imagen y estética que quería plasmar para Soda Stereo. Del mismo álbum, el verso del tema «One Hundred Years»: «It doesn’t matter if we all die», le dio un gran impacto entre las opciones que encontró Cerati como compositor.[306] También tomaría otros elementos como las armonías, el canto y la actitud.[308]
Otros exponentes como Mick Ronson (guitarrista de David Bowie), Jimmy Page de Led Zeppelin, Ace Frehley de Kiss y Ritchie Blackmore de Deep Purple, le hicieron entender que, además de armonías y melodías, el rock también requiere fuerza y poder.[304] Otras de sus influencias fueron The Beach Boys, Stereolab, Massive Attack, Jörg Follert; también autores literarios como Octavio Paz, Jorge Luis Borges, Horacio Quiroga y Alejandra Pizarnik.[108][309][310][311] Algunas obras de artistas como José María Madrid, William Blake, y algunas películas de Kenneth Anger atribuyó que posiblemente estuvieron en su mente al momento de la composición de Fuerza natural, aunque no creía que las «letras sean directamente producto de eso», sí creía que «son un punto contractual de todo esto».[312]
Dynamo, con influencias marcadas de Pixies, Sonic Youth, My Bloody Valentine y Ride, sentó las bases del «rock sónico» en Argentina y permitió el ingreso de nuevas bandas locales como Babasónicos, Martes Menta, Los Brujos y Tía Newton, a quienes Cerati invitó para que abrieran las presentaciones de Soda Stereo en el Estadio Obras.[313] En Amor amarillo seguiría experimentando con el indie y alternativos de Sonic Youth, Nine Inch Nails y Fatboy Slim.[306]
Estilo musical
Cerati abarcó diferentes estilos; trataba de no encasillarse en uno solo, y logró dejar su sello en cada estilo que experimentó.[314] El periodista Sergio Marchi expresó que tenía un estilo, y lo hizo más libre. En su carrera solista «se diferenció pero tampoco hizo algo que no tenía que ver con lo que venía haciendo», no buscó un estilo completamente opuesto porque «sabía que iba a ser poco natural y no iba a favorecer su música». Según Marchi, tenía un estilo más cercano al de Luis Alberto Spinetta, «de quien fue su mejor alumno», y que, a diferencia de Charly García, no hacía canciones sociales o de protesta con letras de «contenido puro y duro».[315] En una entrevista en 2009, Cerati dijo: «El arte no me interesa si está mezclado con la política, pero hay gente que lo hace bien».[316] En los dos primeros álbumes de Soda Stereo, hacía crítica con sarcasmo del consumismo y el capitalismo, como un presagio de lo que pasaría en Argentina en los años 1990, pero, según Carlos Schilling en La Voz del Interior, una vez que se cumplieron las profecías «la poesía de Cerati perdió algo de ese filo inicial y se volvió menos inmediata, ya no orientada a descifrar los signos de la época, sino ensimismada en sus propias imágenes que no obstante seguían siendo insinuantes».[317]
En la canción «Sin sobresaltos» varios apuntaron que se refería a la dictadura militar de Jorge Rafael Videla o a la guerra de las Malvinas.[318]
En 1999, Cerati señaló que siempre le interesó la música andina y que plasmó ciertamente, no de modo sustancial, en «Cuando pase el temblor», «Corazón delator» y «Raíz».[319] De acuerdo a Carlos Polimeni, el primer gran éxito continental de Soda Stereo «no fue un tema a lo The Police o a lo de The Cure [...]. Fue “Cuando pase el temblor” [...], un carnavalito, es decir, un ritmo festivo propio del altiplano argentino-boliviano».[320] La canción «Cactús» estaba relacionada con la música folclórica que incorporaba una rítmica cercana a la chacarera argentina.[321]
Su esquema sería diferente de lo que componía hasta ese tiempo, varios temas tenían solo tres acordes gran parte del tema como «Sueles dejarme solo» o «De música ligera».[322] Según Jalil es «el primer registro en que Gustavo Cerati empieza a mirarse como un heredero del rock argentino de los años 70».[323]A principios de los años 1990, Cerati se interesó en el movimiento sónico Madchester gestado en el Reino Unido y lo incluyó en el maxi Rex Mix, siendo dentro del rock en español el primero en incluirlo.[313] Dynamo presentó un cambio profundo de sonido con respecto a los álbumes previos de Soda Stereo, con un estilo shoegaze que aprovechaba la voz de Cerati de manera más «potente y definida».[324]
Su interés por lo electrónico se venía gestando desde los años 1980, influenciado por el new wave británico de la época, a partir de Nada personal incorporó el sintetizador. En el álbum en vivo Ruido blanco (1987) los temas fueron reversionados llenos de sonidos sintéticos, baterías electrónicas y secuencias.[62] A su vez, en las remezclas de «Sobredosis de TV» y «Nada personal» en 1985, y las incluidas en los EPs Languis y Rex Mix, demostraba su curiosidad en lo electrónico.[325]
La crítica de la época catalogó a Colores santos como «una de las primeras manifestaciones electrónicas masivas en Argentina». No obstante, Cerati y Melero dijeron que era «un disco de rock contemporáneo» que absorbía otros estilos, a pesar de que también contenía sonidos sintéticos y de máquinas.[325] Por aquel tiempo, en sus viajes a Chile forjó una gran amistad con Christian Powditch, quien le dispuso una gran variedad de álbumes con sonidos de beats y computadoras, que coincidió en su interés por los sonidos sintéticos y que materializó en el Rex Mix y «Pulsar».[326] Sobre esta canción, Página/12 recogía que «es también una declaración de principios de Cerati sobre la apropiación de la música electrónica en su propuesta de allí en más».[74] Tras pasar una temporada en Santiago, Cerati volvió a Buenos Aires muy entusiasmado por el acid house y ambient, y lo plasmó en Sueño Stereo.[327][44]
Para el diario en línea El Mostrador supuso un presagio de lo que vendría después del rock latino: «Más de una vibración digital y electrónica, y menos del rocanrol tradicional cargado de guitarras».[328]
Trabajo de guitarra
Cerati era zurdo pero aprendió a tocar la guitarra como diestro por «una cuestión de práctica», declaró,[329] aunque tampoco pudo encontrar un modelo especial.[330] Practicaba con Deep Purple, Black Sabbath, Led Zeppelin, Commodores, Earth Wind & Fire, y Parliament, entre otros.[9] El músico Javier Barría destacó que la mano que Cerati tenía más fuerza era la izquierda y se notaba en su tratamiento de las cuerdas.[331] Analistas y cercanos coinciden que como guitarrista sobresalió por la rítmica de su mano derecha; El Heraldo de México recopiló: «Sus dedos largos le permitían tocar las cuerdas con amplios intervalos».[332][333][334] El propio Cerati en una entrevista en 2006, dijo que tenía una mano derecha «muy movediza» y «cierto espíritu funky» en su forma de tocar.[335] Para el crítico de rock colombiano Eduardo Arias, el impacto musical de Cerati fue como guitarrista, ya que trajo nuevas técnicas para tocar, inspirado en The Specials, The Police o The Cure.[336] Buscaba frecuentemente nuevos sonidos al experimentar a través de efectos o formas de tocar la guitarra, ya que tenía un amplio conocimiento del instrumento. Dominaba el delay con el que hacía ecos repetitivos, influenciado por Summers y Gilmour.[331][332][337][338] Marchi mencionó una ocasión en que vio a Cerati buscar un sonido particular y «sacudía con fuerza la pachera» con el fin de conseguirlo.[339] Fernando Cárdenas de Radio Nacional resaltó sus arreglos a los temas de Los 7 Delfines, cuando tocó con la banda en vivo, en «Ni una vez más» aportó con su guitarra un «sonido envolvente bastante similar a un sintetizador».[340]
Richard Coleman le reveló a Rolling Stone, que el primer impacto que tuvo de Cerati al verlo tocar por primera vez, fue «su estilo de guitarra rítmica tan personal» con «una mezcla de funk con reggae, que marcaba el groove de las canciones», y que utilizara «acordes simples» con el que «hacía muchos acordes en primera posición tocados con una precisión que hacía que sonaran mucho más grandes», dijo.[337] En 1985, Cerati trabajó las guitarras con Coleman para Nada personal, de acuerdo al periodista Carlos Iogna Prat de Todo Noticias, en «Estoy Azulado» presentó un resultado «interesante» al usarse dos compresores y una mezcladora antes de enchufarla al amplificador que dividió el sonido en cuatro señales y en «Observándonos (Satélites)» se invirtió una parte de la cinta con la guitarra y tuvo «un particular efecto».[341] Jalil en Rolling Stone afirma que Signos incluye algunos de sus mejores riffs como «El rito», «Final Caja Negra» y «En camino».[134] Cerati siempre componía sus canciones con una guitarra acústica o criolla, «pero el concepto sonoro de los dos primeros discos de Soda no dejaba lugar para esa clase de instrumento», explicaría Giordano. «En “Signos”, en cambio, la acústica adquiere un rol fundamental como consecuencia de querer reformular la propuesta del trío a partir de un criterio sonoro más clásico y orgánico», puntualizó.[41] A partir de la gira Signos, usaría una guitarra con cuerdas nailon para interpretar únicamente el tema homónimo.[46] Después haría temas acústicos como «Té para tres», «Te llevo para que me lleves», «A merced» y gran parte de las piezas de Fuerza natural, en el que tocó además dobros, mandolina y charango.[134][74]
En 1990, Cerati no priorizó los sintetizadores como los últimos trabajos con el grupo, y tomó en Canción animal un estilo más riguroso con guitarras ruidosas «pre-grunge», asemejándose a Pescado Rabioso, Manal o Vox Dei. De acuerdo a Carolina Taffoni en La Capital, Canción animal «podía ir del riff épico de “Un millón de años luz” a la oscuridad distorsionada de “Sueles dejarme solo”, pasando por la spinetteana “Té para tres”».[51] Coleman comentó que hasta Canción animal el sonido de la guitarra «evoluciona con una coherencia» y que Cerati hizo experimentación hasta Dynamo, en el cual la distorsión crecía.[337] Roque Casciero de Página/12 señaló que Ahí vamos está a alturas similares con Canción animal y Dynamo, y a su vez mencionó a la guitarra como el «arma de destrucción masiva» del álbum. Opinó que «La excepción» tiene esa «magia distorsionada» de Canción animal con las dos guitarras que tomaría la dirección de la banda.[342]
Una de las actuaciones de Cerati más aclamadas como guitarrista fue la versión del tema «Génesis» de Vox Dei que tocó con Soda Stereo en el MTV Unplugged, en el que ejecutó un solo ampliamente elogiado por analistas y fanes.[343][344][345][134] El músico y periodista Iván Nieblas dijo que fue «un ejecutante limpio y con un gran gusto para elegir las notas y explosiones justas», y que para muchos ese fue su gran momento como guitarrista.[338] De igual forma lo destacaron en el cierre de su presentación final en Caracas con el tema «Un lago en el cielo», al finalizar con un solo de guitarra «lisérgico» y extendido que tocó por casi dos minutos, que «coronó» el concierto.[346][347][348]
Guitarras
En enero de 1986, Cerati y Bosio compraron una serie de instrumentos en Nueva York; entre estas, se encontraba una Jackson Soloist SL 1 acabado azul,[349] siendo la guitarra emblemática de Cerati de los primeros años de Soda Stereo.[350] Después de varios años sin usarla, la quiso recuperar para la gira Me veras volver. Le pidió a su asistente que la buscara, pero este la encontró en mal estado, lo que llevó a restaurarla;[351] aunque luego, se desafinaba sola debido a que Cerati apoyaba su mano sobre los microfinadores cuando hacía las rítmicas, por lo que su ayudante tuvo que diseñarle un protector.[352] En 2008, la usó por última vez en el concierto de Emmanuel Horvilleur; antes de efectuar el riff de «Nada personal», bromeó: «Esta guitarra solo toca un tema, ¡toca sola!».[340][167] En 1987, mientras se encontraba de gira con Soda Stereo, le llegaría de Nueva York una Pensa-Suhr, de sus guitarras favoritas.[353] Al año siguiente, se compró una PRS Multifoil Special Model de una edición limitada de cien modelos, desde Canción animal hasta la gira El último concierto era su guitarra principal, aunque en su carrera solista alternaba diferentes marcas, siguió usando la Multifoil.[354][355] En la gira Me veras volver usaría una PRS SE Custom 24 que rompía cuando tocaba «Sueles dejarme solo».[356] En el día que Cerati cumpliría 56 años, PRS Guitars lanzó a modo de homenaje una edición limitada de quince unidades del modelo 2015 Multi-foil LTD con la leyenda «gracias totales» en la tapa trasera de la guitarra.[357]
Tenía una Fender Electric XII, que se le vio utilizarla en los videoclips de «En la ciudad de la furia» y «De música ligera».[282][357] Hacia la última etapa de Soda, ocupó un Parker Fly y una Gibson ES-355, esta última usada en baladas, sonidos melancólicos y blues, como la versión de «Té para tres» en Comfort y música para volar.[358] También utilizó otros modelos de Fender como Telecaster, y de Gibson como Les Paul. Usó de la marca G&L los modelos ASAT Classic y Legacy HB.[358][359][360] En 2010, en medio de la gira Fuerza Natural en Los Ángeles, decidió comprarse una Mosrite double-neck (doble mástil de doce y seis cuerdas),[361] el cual usó para interpretar «Trátame suavemente»: «Mandé a hacer esta guitarra solo para tocar este tema», le mencionó a la audiencia de Caracas en su último concierto.[362] Entre las guitarras acústicas que tenía estaba una Guild, una Alvarez Yairi de doce cuerdas, y una Taylor T5.[363][364][365] Usó una Yamaha APX 5 de color negro —prestada por Spinetta— para la grabación de Amor amarillo y la presentación en vivo.[239]
Sampler
Era el momento en que comenzaba la estética y la tecnología del sampler, yo tenía un aparato que se llamaba MPC-60 de Akai [...], pero hasta ese entonces hacía baterías porque parecía haber sido creada para eso. Cuando empecé a agarrar trozos de canciones se nos abrió el mundo, como al hip hop. Entonces fue una fuente inagotable de ideas que terminó en un disco que ni siquiera pensábamos que íbamos a hacer [con Melero].[57] —Cerati sobre Colores santos |
A principios de los años 1990, Cerati comenzó a hacer uso del sampler, anticipado en el tema «Ves el sol» de Cámara de Daniel Melero y en Rex Mix,[35] a base de sus experimentaciones con Melero iniciadas en Canción animal,[230][366] tomó fuerza en Colores santos, lo que sirvió como precursor para Dynamo.[72] A partir de ahí, fue clave en varias composiciones de Cerati usar este instrumento para recoger fragmentos de canciones de una amplia gama de artistas para utilizar sus sonidos —con ciertas modificaciones— «para que hicieran parte de un todo completamente nuevo».[367][368][Nota 18] Esto motivó a que sus detractores lo acusaran directamente de cometer «plagio» o «copia», aunque ninguno de estos casos llegó a aparecer en los tribunales.[371]
Su interés por el sampler crecía a medida que Soda llegaba a su fin, expresado en Plan V y Ocio,[372] destacándose en Medida universal que sería la génesis en la concepción de Bocanada;[96] experimentaba a través de un MPC3000.[373] De acuerdo a Rolling Stone, Bocanada es uno de los pocos álbumes del rock argentino que tiene tantos samples y tan reconocibles, desde Elvis Presley, Claude Debussy, The Spencer Davis Group, Focus, John Barry, Electric Light Orchestra, Gary Glitter, The Verve, hasta Los Jaivas, todos acreditados en el disco.[96] El propio Cerati dijo al diario español Zona de Obras en 2000, que Bocanada contiene mucho de «sampleadelia» y declaró que había señalado las muestras usadas que pudieran generar algún tipo de problema, como Focus, del que usó un fragmento de «Eruption» de Moving Waves (1971) para el tema que da título al disco: «El terreno de los samples aún no está muy claro. Ahora se está debatiendo el tema MP3. Mi sensación es que, en el caso del sample de Focus es una parte fundamental de la composición [de «Bocanada»]. Sobre el tema instrumental hice una nueva canción». Seguidamente, mencionó que había encontrado un disco de unos alemanes donde usaron el mismo sample utilizado en «Zoom» y lo definió: «Como si hubiesen hecho una versión de “Zoom” en clave minimal techno. ¡Era increíble!» —exclamó— «Cuando sampleas una cosa y funciona hay que usarla. Tampoco me importa que lo hagan conmigo»; concluyó que: «Lo importante es transformar el sample en una canción, darle un valor diferente».[374]
Por otro lado, en algunos temas no aplicó técnicamente sample en el sentido estricto de la palabra, sino que realizó reinterpretaciones ejecutadas por él mismo. Fue el caso de la versión de «Un misil en mi placard» en Comfort y música para volar, que tocó el riff del tema «Chrome Waves» de Ride.[375] En una visita de la banda británica a Chile en 2019, Andy Bell se enteró de esto mientras estaba en una entrevista de radio, suceso que lo asombró de tal manera que en el concierto que dio Ride en el país, Bell le dedicaría «Chrome Waves» a Cerati; después colocaría los dos temas en su propio programa radial, para relatar el impacto que le produjo.[376][377]
Voz
Qué particular que es tu voz, Gustavo. Los franceses dicen trés particulier, cuando es una cosa que no se puede describir.[378] —Mercedes Sosa a Cerati |
Cerati tenía un amplio registro vocal, poseía agudos y dominaba también los graves. Según la cantante Mariela Espinosa en El Comercio, tenía «un timbre de voz bastante propio al igual que sus arreglos musicales», y «como cantante tuvo evolución». En 11 episodios sinfónicos, Cerati no tocaba ningún instrumento, solo cantaba, «[eso] solo lo puede hacer alguien con cierto nivel de virtuosismo vocal». Espinosa señaló que su interpretación tenía elementos atmosféricos al igual que en su voz. «Porque Cerati usaba bastantes efectos, tenía una voz que aprovechaba eso. Con letras, su voz tenía esa función de ser un instrumento más».[379] El editor Claudio Vergara de La Tercera dijo que la manera de cantar de Cerati era con muchos giros y cambios de timbres de una manera «súper atractiva» que demostraba su «riqueza vocal».[380] Jalil en Rolling Stone recordó que tenía un tono «seguro y cálido», y que por momentos, cambiaba el color de su voz por «un registro más imperativo».[250]
Cerati señaló a Bocanada un disco de interpretación, en donde impregnó la voz como gran parte de su esencia, y que en los discos anteriores siempre le había costado esa parte, tal vez por el apuro que tenía al momento de cantar o por la escasez de sistemas de grabación como Pro Tools. Pero al grabarlo desde su casa, lo tomó con más calma, lo que se reflejó en su voz más relajada y expresiva.[374] Para la revista Rockaxis, su forma de cantar en Siempre es hoy estaba en una madurez, «este puede ser el disco donde vocalmente se encuentra en su punto», y destacó su interpretación en «Especie», en el que jugaba con el falsete.[131] De este álbum Espinosa destacaría su interpretación en «Vivo», «Cerati muestra su rango y su amplio registro. Pero sobre todo su capacidad de cantar en momentos sutiles, bajitos y luego explotar dejando que su voz se vuelva más grande, sabía mostrar su dinámica», concluyó.[379]
Otros instrumentos
Cerati tocó el bajo en el tema «Camaleón», rol que invirtió con Bosio y que de igual manera tocaron en vivo en la gira Dynamo.[381][382] Anteriormente, ya había ejecutado el bajo en el demo de «Hombre al agua»[74] y en Colores santos,[383] de igual modo lo tocaría en sus álbumes en solitario como en varias pistas de Fuerza natural; en «He visto a Lucy» empleó un Höfner 500/1,[384] y en otros casos usó el teclado para sustituir el bajo, porque tenía un sonido profundo en comparación con un bajo tradicional, explicaba.[385] En Colores santos, además de la guitarra y el bajo, tocó baterías y teclado, este último, Cerati dijo que su mayor intervención con este instrumento fue en dicho álbum.[386] También tocaba el sintetizador, aunque no sabía mucho.[86] En Soda Stereo hacía las programaciones de las baterías,[387][388] mismo que repitió en todas las pistas de Amor amarillo, donde además, tocó el resto de los instrumentos en la mayoría de temas.[74] También los ejecutó todos en «Raíz».[389] Llegó a utilizar la armónica.[390]
Colaboraciones
Desde el primer álbum de Soda Stereo, Cerati colaboraba con otros artistas; dicho debut contó con Richard Coleman y Daniel Melero, con quienes coescribió temas para álbumes posteriores.[391][392] También coescribió canciones con Isabel de Sebastián,[393] Jorge Daffunchio,[394] Francisco Bochatón,[395] Flavio Etcheto,[396] su hijo Benito,[397] y Adrián Paoletti,[398] entre otros.[106] Hizo un arreglo de guitarra al tema «Imágenes paganas» (1986) de Virus, en una reunión con esta banda.[399] Colaboró con Fricción en sus dos álbumes: en Consumación o consumo (1986) aportó guitarra, sintetizadores y coros en algunos temas. En un principio iba a producirlo, pero sus compromisos con Soda lo limitó;[400][401] produjo Para terminar (1988), en el que tocó un solo de guitarra.[402][39]
Entre 1988 y 1992 efectuó varias colaboraciones; tocó la guitarra rítmica en el tema «La bestia humana» de la banda mexicana Caifanes.[403] Cantó para Leda Valladares en tres temas del álbum Grito en el cielo vol. 2: «La gota cava la piedra», «De vicio me has de aborrecer», y «En otro poder».[404] Participó en «Vietnam» de Nadie sale vivo de aquí de Andrés Calamaro.[405] Charly García le propuso grabar un álbum titulado Tango 3 a trío junto con Pedro Aznar, pero nunca se consumó.[Nota 19] De esas sesiones quedó el tema «No te mueras en mi casa», incluido en Filosofía barata y zapatos de goma de García; participó en guitarras y coros en la canción «Vampiro» de Tango 4 de García y Aznar.[407][408] Tocó en «Arcos» de Algo mejor de Fabiana Cantilo,[409][410] colaboró con Daniel Melero previo, en «Música lenta» y en Cámara, adicionalmente ejecutó el bajo en todos los temas.[411][279] Contribuyó imperceptiblemente en El amor después del amor de Fito Páez, la única colaboración en estudio entre ambos.[412]
A principios de los años 1990, Cerati tocó para las bandas emergentes Los Brujos y Babasónicos en sus álbumes debut.[413][414][410] En el receso de Soda de 1992, colaboró como productor en L7D de Los 7 Delfines y guitarrista en la canción «Terror de mi vida» de Aguirre, del álbum que produjo Zeta Bosio.[55][415] En su estancia en Chile se asoció con diversos artistas locales: ayudó en la grabación de la canción «Óleo» (1994) de Sien y produjo Sueños en tránsito (1997) de Nicole.[416] En 1997, con Soda Stereo participó en un homenaje a Queen con una versión en español de «Some Day One Day» titulada «Algún día».[Nota 20] Cerati hizo la adaptación de la letra, que no era exactamente a la original por lo que fue acreditado coautor del tema con Brian May.[418] En 1998, grabó con Andy Summers y Vinnie Colaiuta una versión en español de «Bring On the Night» («Tráeme la noche») para el álbum homenaje a The Police, Outlandos D'Americas, en el que cantó, tocó el bajo y la guitarra acústica.[419][Nota 21]
Ya en su etapa solista, colaboró y/o produjo a artistas como Francisco Bochatón, Altocamet, Andrea Álvarez, Antonio Birabent y Leo García, entre otros.[415][395][421][422] En 2001, cantó una reversión de «Rasguña las piedras» en Si - Detrás de las paredes de Sui Generis y en «Parte de las reglas» de la banda Pr3ssion.[412][423] Trabajó para Leandro Fresco en tres canciones de su álbum Luz sin calor (2005) y en «Sol de medianoche» que apareció en El reino invisible (2015).[424][425] Colaboró para Shakira como productor y/o compositor en «No» y «Día especial» de Fijación oral vol. 1 (2005), y «Devoción» y «Tu boca» de Sale el sol (2010).[426] Participó en tres temas del álbum Easy (2006) del DJ alemán Jörg Follert.[427] En 2008, grabó con Roger Waters el tema benéfico «The Child Will Fly», publicado en junio de 2014 con una versión de dos minutos y medio de los trece que duraba en total.[428][429][430] Tocó el solo de guitarra de «Normal» publicado en Siberia Country Club (2011) de Richard Coleman.[431][412]
Otras colaboraciones que hizo entre 2005 y 2009 fueron añadidas después en su segundo álbum recopilatorio póstumo: Satélite Cerati: «Tesoro» de Leo García; «Electroshock» con Telefunka; «Eiti Leda» de Fabiana Cantilo; «I'm Losing You» con Los Durabeat; «Los libros de la buena memoria» con Lito Vitale; «Sueño en gotas» con D-mente; «El mareo» con Bajofondo, nominada a los Grammy Latino como mejor canción alternativa; «19» con Emmanuel Horvilleur; «Desde el papel» con 202; «Nunca iré» de No lo Soporto; y «Zona de promesas» con Mercedes Sosa.[154][432][433]
Legado
Los historiadores de Encyclopedia of Latino Popular Culture dijeron que Soda Stereo estuvo «entre los pioneros del rock en español moderno», surgieron «con un sonido distinto que los catapultó entre las grandes leyendas» y se le considera una banda innovadora.[434] El diario colombiano La República aseguró que Cerati logró con Soda Stereo hacer del rock en español un negocio internacional, si bien a finales de los años 1960 Los Gatos ya vendían millones, el director de la emisora Radiónica Álvaro González añadió que encontró cómo hacerlo «autosostenible».[435] Pedro David del sitio Cultura Colectiva dijo: «Hoy la historia del rock argentino giraría en direcciones distintas si Cerati hubiera perseguido aquellos cánones sociales que representaban pulcritud».[436] Belauza en el diario Tiempo Argentino señaló que la etapa solista de Cerati lo consagró «definitivamente como el eslabón perdido entre los dos próceres fundadores del rock argentino: [Luis Alberto] Spinetta y [Charly] García»; prosiguió: «A diez años de su último disco [Fuerza natural], queda la sensación de que Cerati habría acompañado de manera original la evolución de los gustos juveniles por el hip hop y el trap».[50] Apadrinó bandas de la «movida sónica» como Babasónicos, Juana La Loca, Tía Newton y Martes Menta. Logró darle más notoriedad a músicos como Leandro Fresco, Leo García, Flavio Etcheto, Fernando Nalé, Pedro Moscuzza, Capri, Javier Zuker, Loló Gasparini, e influyó a nuevas generaciones como Lisandro Aristimuño, Paco Amoroso, y Lucy Patané.[437]
La revista Vice considera a Colores santos «una obra de culto de la electrónica sudamericana».[438] Cerati formó parte como uno más en el nacimiento de la escena electrónica en Chile, mientras que en Argentina la logró sacar del anonimato dándole mayor difusión, dado que la prensa de su país iba a sus presentaciones con Plan V y Ocio, lo que masificó a la escena underground. «Puede ser que mucha gente se haya involucrado en la electrónica a partir de Cerati», dijo el autor Gito Minore, aunque no cree que fue el responsable, «colaboró para eso».[325][439] Roken fueron los primeros exponentes en América Latina en traer de Europa, un nuevo género de la música electrónica compuesta e interpretada en vivo por medio de computadoras.[440]
Vergara en su reseña a «En la ciudad de la furia» mencionó que tenía «esta capacidad [...] Cerati, desde sus orígenes como publicista, de instalar ciertas palabras, ciertas frases en el inconsciente colectivo. Y “la ciudad de la furia” quedó instalada como uno de los apelativos más conocidos de Buenos Aires y de cualquier ciudad que sea relativamente tumultuosa».[380] Para Shakira: «Las melodías Ceratianas han sido a menudo el marco donde Gustavo ha creado imágenes que sobreviven a la persistencia del tiempo. El surrealismo citadino y a la vez salvaje de sus letras lo convierten, a mi modo de ver, en uno de los compositores más interesantes de Hispanoamérica», concluyó en su opinión que «es el músico de rock más importante de habla hispana y será difícil que alguien pueda superarlo».[441] Nieblas coincide que es «irrefutable el legado de sus palabras y su voz», pero también cree que «sin el marco envolvente de los sonidos de sus manos pulsando la guitarra, sería imposible pensar en Cerati como una totalidad».[338]
La locutora Olivia Luna comentó: «Cerati aportó y cambió muchísimo la escena musical, él dio como una pauta para que también muchos otros músicos, se inspiraran a través de las letras de sus canciones y también Gustavo estaba adelantado a su época, porque después se fue por un lado más electrónico, hacer producciones distintas, que no fueran nada más bajo, guitarra, batería, él empezó a experimentar con otros sonidos y dio pauta para que otros músicos lo vieran a él, como un avanzado de la época que se iba más allá del rock».[442] El vocalista de U2 Bono consideró a Cerati un «genio» por sus canciones en Dynamo, que según él fue «pionero» por tener un sonido sónico que utilizó para hacer Zooropa (1993).[442] La periodista chilena Paula Molina declaró: «Fue su compromiso con las técnicas y la experimentación de otros géneros, que luego fusionó e incorporó en su música, lo hizo tan popular. Ahora, luego de haber reflexionado sobre lo que fue su legado, lo que se destaca es su habilidad para hacer que la música trasciende los géneros y cruza las fronteras —música para todos los latinoamericanos―».[443]
Premios y reconocimientos
Antes y después de su fallecimiento, Cerati ya era considerado por parte de la prensa, músicos y críticos como un icono del rock latinoamericano y uno de los precursores de la música electrónica del continente por haber utilizado nuevas tecnologías.[311][374][336][444][445][62][175] En Argentina se le consideró uno de los integrantes del quinteto de los más grandes solistas del mundo del rock, junto a Charly García, Luis Alberto Spinetta, Andrés Calamaro y Fito Páez.[446] Con Soda Stereo recibió el Premio Especial a la Trayectoria Artística, otorgado en la primera edición de los MTV Awards Latinoamérica en 2002.[447] En los Premios Grammy 2015 rindieron tributo en el segmento «In memorian» a artistas fallecidos el año anterior, Cerati salió con una foto suya bajo el título de «Latin Rock Legend» (en español: Leyenda del rock latino).[448] A lo largo de su carrera en solitario vendió más de siete millones de discos,[449] ganó seis Grammy Latinos,[Nota 22] dos Gardel de Oro,[450] tres Premios Konex,[451] y un MTV Latino.[452]
Recibió diversas distinciones como mejor solista nacional por Rock & Pop Awards (2006), dos antochas y una gaviota en el Festival de Viña del Mar 2007, Personalidad Destacada de la Cultura por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (2007) y Personalidad del año por CAPIF (2008).[453] En su edición de septiembre de 2012, la revista Rolling Stone posicionó a Cerati en el séptimo lugar de los cien mejores guitarristas del rock argentino.[454] El 5 de diciembre de 2013 fue nombrado ciudadano ilustre por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.[455] El 8 de agosto de 2015, el Concejo Deliberante de Paraná (Entre Ríos) bautizó a una calle de la ciudad con el nombre del músico.[456] El 11 de agosto, Google por medio de un doodle lo homenajeó con una animación junto con la frase «gracias totales», que apareció en doce países de América Latina más Bulgaria y Corea del Sur.[457]
Discografía
Filmografía
Año | Título | Rol | Notas |
---|---|---|---|
2001 | +bien | Jorge | |
2019 | Gustavo Cerati: Fuerza Natural Tour, en vivo en Monterrey/MX/2009 | Él mismo | Concierto filmado en 2009 |
Año | Título | Rol | Notas |
---|---|---|---|
2000 | Todo por dos pesos | Él mismo | Programa de humor |
2018 | Bios: Gustavo Cerati | Él mismo | Documental de National Geographic |
Giras musicales
- 1999–2001: Gira Bocanada
- 2002–2004: Gira Siempre es Hoy
- 2006–2007: Gira Ahí Vamos
- 2009–2010: Gira Fuerza Natural
Véase también
Notas
- Más tarde, Argos le serviría de inspiración para la letra de «En la ciudad de la furia», mientras el riff usado en este tema, lo creó a la edad de 13 o 14 años.[8]
- Fue la primera canción que Cerati registró en la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (SADAIC). Tras su fallecimiento dicha organización publicó la partitura del tema, que permanecía inédita.[23]
- Finalmente, tanto Bosio como Alberti aparecieron como coautores con Cerati en dos temas cada uno, figurando los tres en «Final Caja Negra».[41]
- Se conocieron en 1982; Melero participó en el álbum debut de Soda Stereo y les cedió su tema «Trátame suavemente» a pedido de Federico Moura que fue el productor.[56] Cerati y Melero se reencontraron a mediados de 1990, y, debido a la estrecha afinidad musical entre ambos, decidieron juntarse a componer canciones, algunas incluidas a Canción animal, Rex Mix o Cámara, álbum de Melero. «Nos divertía hacer lo que aparentemente era incorrecto, básicamente como experiencia sónica», decía Cerati, «Colores santos es el resultado de una música conectada a todo lo que estuvimos haciendo, desde Canción animal hasta Cámara. Ninguno podía haber hecho esto por separado».[57]
- De acuerdo a Cerati, mucha gente pensaba que él ponía la parte roquera y Melero el techno, pero en ocasiones era al revés.[63]
- No obstante, Cerati incluiría varias canciones de Colores santos en sus conciertos como solista.[65] Con Soda Stereo cantó «Vuelta por el Universo» en la gira Comfort y música para volar.[66]
- Llegaron a interpretar «Bajan» juntos en vivo en 2007 y 2009, en este último, tras concluir el tema Cerati le dijo a Spinetta: «Si hay un sueño cumplido es este».[78]
- Cerati no incluyó muchos temas de Soda Stereo en sus conciertos, enfocándose más en el álbum que promocionaba en el momento, además de cantar sus temas previos en solitario.[115][116] Si bien, en los años 1990, había señalado que no le gustaba vivir de la nostalgia,[117] en una entrevista al diario La Capital en 2003, aseguró: «Si tuviese algún problema [con que me pidan temas de Soda Stereo] no hubiese hecho 11 episodios sinfónicos. Ahora [en la gira Siempre es hoy] estoy versionando más canciones de Soda que en la época de Bocanada, porque no tengo pruritos en reencontrarme con el pasado».[118] En un concierto en 2009, ante un público dividido que exigía canciones del grupo y otro que disfrutaba, bromeó: «Se ha producido un enfrentamiento entre la misma persona».[119]
- También se encargó de hacer la banda sonora Sólo por hoy para la película homónima ese mismo año. El álbum permanece inédito hasta el día de hoy.[122] También aportó una remezcla de «Raíz» para la banda sonora de Condor Crux, en 2000.[123]
- Cerati logró publicar solo dos videoclips —«Dèja Vú» y «Rapto»— de cuatro previstos, aunque, alcanzó a grabar los dos restantes ―«Magia» y «Cactús»― permanecen inéditos.[173]
- De acuerdo a La Voz del Interior, varios analistas no dudaron en señalar a Fuerza natural como su mejor obra solista.[178] El propio Cerati también consideró que fue su mejor obra.[179][180]
- Al cumplirse una década de esa actuación, sería conmemorada proyectándose la misma en salas de cine de América Latina, Estados Unidos y España, y editándose en un CD doble + DVD, titulado Fuerza Natural Tour, en vivo en Monterrey, MX, 2009.[181] Ganó un Premio Gardel a mejor álbum en vivo en 2020.[182]
- El 17 de mayo, Cerati iría a España a dar entrevistas para la promoción de Fuerza natural —editado en ese país el día después—,[184] y en octubre iba a regresar para seguir con la gira.[185]
- En abril de 2006, cuando estaba rodando el videoclip de «Crimen», Cerati sufrió una tromboflebitis en las piernas, por motivos médicos dejó de fumar y comenzó a tomar medicamentos y guardar reposo, lo que llevó a aplazar la gira Ahí vamos.[191][192][193] En una entrevista ese año, dijo que se pegó tal susto que pasó a ser «un fumador que por ahora no fuma más».[194] En 2007, retomó el hábito.[195]
- Amenábar apareció en los videoclips de «Te llevo para que me lleves» —en un avanzado estado de embarazo de su hijo Benito— y de «Pulsar».[242]
- Ese sería el registro utilizado en el CD El último concierto B, mientras que el DVD, editado en 2005, tendría la versión interpretada en el Estadio de River.[271]
- Paralelo a las grabaciones de dichas cortinas, se desataba el cacerolazo producto de la crisis argentina.[250]
- En la fase primitiva de Ahí vamos, Cerati hizo samples para definir ritmos básicos, pero para la grabación del disco se desprendería del instrumento para darle prioridad a un sonido orientado hacia las guitarras en canciones «más clásicas», según sus propias palabras.[369][370]
- Charly García reveló tras la muerte de Cerati, que los tres estuvieron cerca de armar una banda. Aunque llegaron a tocar, no se concretó debido a que García fue internado.[406]
- En 1993, Cerati recibió una llamada por parte del bajista de Kiss Gene Simmons, para que Soda Stereo fuera parte del tributo Kiss My Ass: Classic Kiss Regrooved. Aunque tuvieron varias conversaciones no lograron un acuerdo, aun así añadieron al grupo en los agradecimientos del disco.[417]
- Cerati fue contactado por Miles Copeland —representante de The Police y de Sting— a finales de 1997 para que participara en el proyecto. «Tráeme la noche» se volvió la canción más destacada del álbum, y en general, el disco tuvo buen recibimiento, lo que llevó a Summers y al batería original, Stewart Copeland, idear una gira para promocionarlo en los países hispanos, con Cerati reemplazando a Sting. Miles viajó a Buenos Aires con el único propósito de hacerle esta proposición, sin embargo, Cerati rechazó la oferta para poder continuar preparando Bocanada.[420][305][96]
- Uno por Fijación oral vol. 1 de Shakira en la categoría mejor álbum del año, del que fue uno de sus productores y compositores.[328]
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- Ramos y Lejbowicz, 1991, El Arca de Noé. «Por el año '80 Gustavo Cerati tocaba casi todas las noches en El Arca de Noé, [...]. Actuaba con el grupo Savage, en el que cantaban dos chicas inglesas [...]. Hacían covers e improvisaban canciones lentas y bailables. [...] Cuando se desencadenó la guerra de las Malvinas las inglesas se regresaron a su país.»
- Ramos y Lejbowicz, 1991, El Arca de Noé. «En las fiestas del Arca de Noé hacía canciones que inventaba al momento. La gente iba, bailaba y no le daba ninguna importancia. Yo hacía lentos y versiones inventadas.»
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- Fernández Bitar, 2017, El inicio. «En 1980, Zeta decidió retomar sus estudios de Publicidad en la Universidad del Salvador, donde solo había cursado un mes el año anterior, antes de subirse a la fragata. El primer día de clases, por supuesto, llegó tarde. [...] No tardó en darse cuenta de que había un grupo de gente muy interesante en el aula: Gustavo Cerati [...].»
- Fernández Bitar, 2017, El inicio. «En ese verano de 1981, en Punta de Este, Zeta conoció a Marcelo Angiolini (luego manager [de Soda Stereo]) [...]. También se encontró con Gustavo, quien —como [la discoteca] que contrató a Sauvage cerró imprevistamente— había quedado [solo] y tuvo que ir a dormir a la habitación de Zeta y Marcelo [...].»
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- Fernández Bitar, 2017, El inicio. «Esta versión de The Morgan solo duró un par de semanas, [...] el conjunto se disolvió, no sin intentar una efímera variante que bautizaron Proyecto Erekto. "Igualmente —apuntó Zeta— me seguí juntado con Gustavo los sábados, [...] ¡Hasta aprovechamos que Andrés [Calamaro] no se había llevado sus teclados e iniciamos la trayectoria del efímero grupo Erekto con unas largas obras de música electroacústica". En esas [improvisaciones], donde no faltaban los temas de The Police, condujeron a la formación de Stress, [...]. "Ensayábamos covers en un taller artístico de Belgrano ―confesó Gustavo tentado de la risa al recordarlo― y el único recital que dimos fue en La Caja de Ahorro y Seguros, [...]. Terminaron aplaudiendo de pie, pero igualmente Stress terminó ahí".»
- Fernández Bitar, 2017, El inicio. «En paralelo, en primavera comenzó la historia de una insólita agencia de publicidad propia, resultado de la unión de Gustavo, Zeta y Alfredo Lois con Ernesto Savaglio, [...] quien tenía una pequeña agencia llamada Sougasa. La rebautizaron H & H: Hergus & Herlois, por "Hernesto", "Gus-tavo", "Hé-ctor" y "Lois".»
- Fernández Bitar, 2017, El inicio. «"Paradójicamente —recordó Lois— el que se dedicaba a la parte de la redacción de textos no era Gustavo, que dibujaba y armaba los originales conmigo, sino Zeta". Con esa tarea, más algunos trabajos esporádicos como un catálogo para una casa de modas, calendarios y hasta bolsas de polietileno, pudieron cubrir los gastos por un par de meses, hasta que se dieron cuenta de que no daba suficiente. Es más, al final perdieron dinero. Se separaron justo cuando estaban por presentar una campaña televisiva porque —a diferencia de Ernesto, quien luego se convirtió en un importante publicitario— el único interés de Gustavo, Zeta y Alfredo era la música. "Nos fue bastante mal —admitió Zeta— porque nos pasábamos escuchando música, así que decidimos jugarnos en la nuestra".»
- Fernández Bitar, 2017, El inicio. «Fue en marzo de 1982 cuando Gustavo y Zeta combinaron para encontrarse en la casa de Charly para tocar juntos. [...] En poco tiempo se hicieron muy amigos y después del ensayo se iban a comer juntos o a tomar un helado a Vía Flaminia, en Martínez.»
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