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Sexenio Democrático

Se conoce como Sexenio Democrático o Sexenio Revolucionario al periodo de la historia contemporánea de España transcurrido desde el triunfo de la Revolución de septiembre de 1868 hasta el pronunciamiento de diciembre de 1874, que supuso el inicio de la etapa conocida como Restauración borbónica.

Caricatura sobre las etapas del Sexenio Democrático, publicada por la revista La Madeja, otra de las cabeceras de La Flaca, el 14 de marzo de 1875.

El Sexenio suele dividirse en tres (o cuatro) etapas: la primera, la del Gobierno provisional de 1868-1871; la segunda, el reinado de Amadeo I (1871-1873); la tercera, la Primera República Española, proclamada tras la renuncia al trono del rey Amadeo de Saboya en febrero de 1873. A su vez, esta se divide entre el período de la República federal, a la que pone fin el golpe de Pavía de enero de 1874, y la República unitaria —también conocida como la dictadura de Serrano—, que se cierra con el pronunciamiento en diciembre de 1874 en Sagunto del general Arsenio Martínez Campos en favor de la restauración de la Monarquía borbónica en la persona del hijo de Isabel II: Alfonso XII.

En la actividad política de estos años se advierte la participación de cuatro bloques políticos: los unionistas, encabezados por el general Serrano; los progresistas, encabezados por el general Prim y, tras su asesinato, por Práxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla; los demócratas monárquicos llamados «cimbrios», encabezados por Cristino Martos y Nicolás María Rivero; y los republicanos federales, cuyos líderes eran Estanislao Figueras, Francisco Pi y Margall, Nicolás Salmerón y Emilio Castelar. Además, hay que contar con el Partido Moderado, decantado cada vez más hacia las posiciones de los alfonsinos dirigidos por Antonio Cánovas del Castillo; con los carlistas, que desencadenarán en 1872 la tercera guerra carlista para intentar poner en el trono al pretendiente Carlos VII; así como con los independentistas cubanos, lo que dará lugar tras el Grito de Yara a la guerra de los Diez Años.

Antecedentes

En 1863, la reina Isabel II destituyó al general Leopoldo O'Donnell, que durante los cinco años anteriores había presidido el «gobierno largo» de la Unión Liberal. El Partido Progresista esperaba ser llamado al Gobierno, pero la reina decidió nombrar al frente del poder ejecutivo a un veterano miembro del Partido Moderado: el marqués de Miraflores, Esto inclinó a los progresistas a optar por el retraimiento, lo que significaba que no presentarían candidatos a las elecciones, deslegitimando así las Cortes que salieran de ellas —e implícitamente a la propia Monarquía—. El Gobierno de Miraflores tuvo una corta duración, como los dos siguientes, también encabezados moderados, hasta que en 1864 fue nombrado presidente del Gobierno el «hombre fuerte» del Partido Moderado: el general Ramón María Narváez. Este se mantuvo en el poder hasta junio de 1865, siendo destituido por la reina a consecuencia de los trágicos sucesos conocidos como la Noche de San Daniel. Entonces, Isabel II volvió a llamar al Gobierno a Leopoldo O'Donnell, al frente de su partido la Unión Liberal, una especie de partido de «centro» del que formaban los moderados más progresistas («puritanos») y los progresistas más moderados («templados»).[1]

En junio de 1866 tuvo lugar una insurrección en Madrid para acabar con la Monarquía, conocida como la sublevación del cuartel de San Gil, porque fueron los sargentos de este cuartel de artillería los que protagonizaron el alzamiento. Al mes siguiente, la reina Isabel II destituyó al general O'Donnell por considerar que había sido demasiado blando con los insurrectos —a pesar de que habían sido fusilados 66 de ellos— y llamó de nuevo al general Narváez para sustituirle.[2]​ Narváez adoptó inmediatamente una política autoritaria y represiva que hizo imposible el turno en el poder con la Unión Liberal, que entonces optó por hacer el «vacío en Palacio» —según la expresión del propio O'Donnell—, lo que significaba el retraimiento en el Senado.[3]

La crisis económica de 1866-1868

 
La red de ferrocarriles en España durante el siglo xix.

A principios de 1866 estalló la primera crisis financiera de la historia del capitalismo español. Aunque estuvo precedida de la crisis de la industria textil catalana, cuyos primeros síntomas aparecieron en 1862 a consecuencia de la escasez de algodón provocada por la guerra civil estadounidense, el detonante de la crisis financiera de 1866 fueron las pérdidas de las compañías ferroviarias, que arrastraron con ellas a bancos y sociedades de crédito.[4]​ Las primeras quiebras de sociedades de crédito vinculadas a las compañías ferroviarias se produjeron en 1864, pero fue en mayo de 1866 cuando la crisis alcanzó a dos importantes sociedades de crédito de Barcelona, la Catalana General de Crédito y el Crédito Mobiliario Barcelonés, lo que desató una oleada de pánico.[5]

A la crisis financiera de 1866 se sumó una grave crisis de subsistencias en 1867 y 1868, motivada por la malas cosechas de esos años. Los afectados no fueron los hombres de negocios o los políticos, como en la crisis financiera, sino las clases populares, debido a la escasez y carestía de productos básicos como el pan. Se desataron motines populares en varias ciudades, como en Sevilla, donde el trigo llegó a multiplicar por seis su precio, o en Granada, al grito de «¡Pan a ocho!» (reales). La crisis de subsistencias se vio agravada por el crecimiento del paro, provocado por la crisis económica —a su vez desencadenada por la crisis financiera—, que afectó sobre todo a dos de los sectores que más trabajo proporcionaban: las obras públicas —incluidos los ferrocarriles— y la construcción. La coincidencia de ambas crisis, la financiera y la de subsistencias, creaba «unas condiciones sociales explosivas que daban argumentos a los sectores populares para incorporarse a la lucha contra el régimen isabelino».[6]

Según ha señalado Juan Francisco Fuentes, hay que descartar «una relación causa-efecto entre la crisis económica y la Revolución de 1868», aunque no «se puede ignorar la importancia que aquella gran crisis del capitalismo español iniciada en 1864 tuvo en la percepción general de las élites políticas y económicas: el convencimiento de que el régimen isabelino, reducido finalmente a una pequeña camarilla político-clerical, se había aislado por completo de la realidad nacional. A los ojos de una buena parte de la sociedad española, aquello era el final de una época. Una grave crisis de subsistencias en los años 1867-1868 acabaría de generalizar esa sensación de catástrofe nacional que se apodera del país en la última etapa del reinado de Isabel II».[6]

La crisis económica aceleró el deterioro político del régimen isabelino. El Gobierno debía enfrentarse a varios grupos hostiles, como los inversores, que querían salvar su patrimonio; los industriales, que precisaban mayor proteccionismo; y los campesinos y obreros, que no querían pasar hambre.

 
Juan Prim en 1869.

El pacto de Ostende

El Pacto de Ostende entre progresistas y demócratas, que recibe su nombre por el de la ciudad de Bélgica donde se firmó el 16 de agosto de 1866, fue una iniciativa del general progresista Juan Prim con el objetivo de derribar la Monarquía de Isabel II. Constaba de dos puntos:[3]

1º, destruir lo existente en las altas esferas del poder;

2º, nombramiento de una asamblea constituyente, bajo la dirección de un Gobierno provisorio, la cual decidiría la suerte del país, cuya soberanía era la ley que representase, siendo elegida por sufragio universal directo.

La ambigua redacción del primer punto permitía incorporar al mismo a otras personalidades y fuerzas políticas. Así, tras el fallecimiento de O'Donnell el 5 de noviembre de 1867, los generales Prim y Serrano —paradójicamente, el mismo militar que había dirigido la represión de la sublevación del cuartel de San Gil— firmaron un acuerdo en marzo de 1868 por el que la Unión Liberal se sumaba al mismo. Con esto, «la Unión Liberal aceptaba la entrada en un nuevo proceso constituyente y en la búsqueda de una nueva dinastía, y, según el punto segundo [del Pacto de Ostende], la soberanía única de la nación y el sufragio universal».[3]

La respuesta de Narváez fue acentuar su política autoritaria. Las Cortes, cerradas en julio de 1866, no volvieron a abrirse, pues fueron disueltas y se convocaron nuevas elecciones para principios de 1867. La «influencia moral» del Gobierno dio una mayoría tan aplastante a los diputados ministeriales que la Unión Liberal, lo más parecido a una oposición parlamentaria, quedó reducida a cuatro diputados. Además en el nuevo reglamento de las Cortes aprobado en junio de 1867, tres meses después de haber sido abiertas, se suprimió el voto de censura, reduciendo así sensiblemente su capacidad para controlar al Gobierno.[7]​ En abril de 1868 falleció el general Narváez, y la reina nombró para sustituirle al ultraconservador Luis González Bravo, que siguió con la política autoritaria y represiva de su antecesor.[8]

Revolución: «la Gloriosa»

El 16 de septiembre de 1868, el general Prim llegó a Cádiz procedente de Londres, vía Gibraltar, y dos días después, el 18 de septiembre, se sublevaba el almirante Juan Bautista Topete al frente de la escuadra. El 19, tras la llegada desde Canarias del general Serrano y del resto de los generales unionistas comprometidos, Topete leyó un manifiesto redactado por el escritor unionista Adelardo López de Ayala en el que se justificaba el pronunciamiento y que acababa con el grito «¡Viva España con honra!», que se haría célebre. En los días siguientes, el levantamiento se fue extendiendo por el resto del país, empezando por Andalucía.[9]​ Se formaron juntas provinciales que se encargaron de movilizar a la población mediante promesas de sufragio universal, de eliminación de los consumos, del fin del reclutamiento forzoso y de una nueva Constitución. En las ciudades, las juntas revolucionarias, formadas por demócratas y progresistas, asumieron el poder.

El mismo día en que se hizo público el manifiesto de los sublevados, González Bravo dimitió. La reina Isabel II nombró para sustituirle al general José Gutiérrez de la Concha, quien organizó un ejército en Madrid como pudo, dada la falta de apoyo que encontró entre los mandos militares, y lo envió a Andalucía al mando del general Manuel Pavía y Lacy, marqués de Novaliches, para que acabara con la rebelión. Al mismo tiempo, aconsejó a la reina que volviera a Madrid desde San Sebastián, donde estaba de veraneo; pero, al poco tiempo de iniciar el viaje en tren, el general de la Concha le envió un telegrama a la reina pidiéndole ahora que siguiera en San Sebastián, porque las situación de las fuerzas leales había empeorado.[10]

El 28 de septiembre tuvo lugar la decisiva batalla de Alcolea (en la provincia de Córdoba), en la que la victoria fue para las fuerzas sublevadas al mando del general Serrano, que contaron con el apoyo de millares de voluntarios armados. Al día siguiente, el levantamiento triunfaba en Madrid; y, el día 30, Isabel II abandonaba España desde San Sebastián.[11]​ Entonces terminó toda resistencia de las fuerzas leales a la reina y el 8 de octubre se formaba un Gobierno provisional presidido por el general Serrano, y del que formaban parte el general Prim y el almirante Topete. Se sellaba así el triunfo de la que sería llamada la Revolución de 1868 o la «Gloriosa», que había puesto fin al reinado de Isabel II.[12]

 
El Gobierno provisional en 1869. De izquierda a derecha: Laureano Figuerola (Hacienda), Práxedes Mateo Sagasta (Gobernación), Manuel Ruiz Zorrilla (Fomento), Juan Prim (Guerra), Francisco Serrano (presidente del Gobierno provisional), Juan Bautista Topete (Marina), Adelardo López de Ayala (Ultramar), Antonio Romero Ortiz (Gracia y Justicia) y Juan Álvarez Lorenzana (Estado). Fotografía de J. Laurent.

El Gobierno Provisional

Composición del Gobierno provisional y fuerzas políticas

Tras el triunfo de la revolución se formó un Gobierno Provisional presidido por el general Serrano (unionista) y con Prim (progresista) en el Ministerio de la Guerra, el almirante Juan Bautista Topete (también unionista) en la cartera de Marina y Sagasta (también progresista) en el de Gobernación. Quedaron fuera los demócratas, que no aceptaron el único puesto en el Gobierno que se les ofreció.

Cuando el Gobierno provisional proclamó que era favorable a la monarquía, rompiendo el compromiso del Pacto de Ostende de que se mantendría neutral en la cuestión de la forma de gobierno, el Partido Demócrata apostó claramente por la república y cambió su nombre por el de Partido Republicano Democrático Federal. Una minoría de demócratas que creían en la compatibilidad de la democracia con la monarquía —aunque seguían apoyando a la república, pero a más largo plazo— no continuaron en el partido y se unieron a la coalición de unionistas y progresistas que apoyaba al Gobierno provisional. Fueron llamados «cimbrios».

Sin embargo, en el seno del Partido Republicano Federal existían varias tendencias. Una más conservadora, encabezada por Emilio Castelar y cuyo concepto de España era una administración unitaria o centralista. Un segundo sector «centrista», encabezado por Francisco Pi y Margall, que defendía la república federal, pues concebían España como una federación pactada de Estados regionales históricos; además, aceptaba la legalidad y se oponía a la insurrección armada. Por último, estaban los «intransigentes», que, a diferencia de los «benévolos» —como llamaban a los conservadores y a los centristas—, eran partidarios de la insurrección para construir el Estado federal de «abajo arriba». Carecían de un líder claro, pero consideraban como su «patriarca» al veterano republicano José María Orense. Las bases sociales republicanas se encontraban en la pequeña burguesía, las clases populares urbanas (artesanos, asalariados) y parte del movimiento obrero y campesino antes de que fuera atraído por las ideas y organizaciones anarquistas y socialistas.

Elecciones constituyentes y reformas

La convocatoria a Cortes Constituyentes se hizo, por primera vez, mediante elecciones por sufragio universal masculino (mayores de 25 años), en las que votó el 70% del censo. La composición política del Parlamento quedó de la siguiente manera: progresistas (159 diputados), unionistas (69), republicanos federales (69), demócratas (20), carlistas (18), isabelinos o liberales moderados (14), y republicanos unitarios (2); que elaborarían y aprobarían en junio de 1869 la Constitución de la nueva monarquía.

Además de la aprobación de la Constitución, las Cortes abordaron la abolición de la esclavitud, que se limitó de momento a la «libertad de vientres» (ley Moret de 4 de julio de 1870, llamada así por Segismundo Moret, ministro de Ultramar y posteriormente de Hacienda). La supresión total hubo de esperar varios años más: a 1873 para Puerto Rico y a 1886 para Cuba. En ambas colonias se habían producido simultáneamente a la Revolución Gloriosa de la metrópolis las sublevaciones independentistas llamadas Grito de Lares —en Puerto Rico, de breve duración— y Grito de Yara —que condujo a la guerra de los Diez Años cubana—. En el seno del movimiento independentista se produjo un enfrentamiento entre los ricos dueños de las plantaciones y el resto de los cubanos, partidarios del fin del régimen esclavista. La forma de gestionar ambos asuntos (colonial y esclavista) proporcionó importantes argumentos utilizados por la oposición a los gobiernos del sexenio.

Por otro lado el Gobierno decretó la libertad de imprenta y de asociación. Se devolvieron sus puestos en la Universidad a los profesores que habían sido represaliados, como Emilio Castelar. Se tomaron medidas económicas para solucionar el déficit público, como la fijación de la peseta como unidad monetaria y se oficializó el sistema métrico decimal.

 
Prim, Serrano y Topete subastan la Corona española, La Flaca (1869).

La búsqueda de un nuevo rey

El triunfo en las elecciones de los partidos que defendían la monarquía como forma de gobierno, tal como se recogió en la Constitución de 1869, obligó al nuevo Gobierno a encontrar un nuevo rey para España. Mientras tanto, aplicando la Constitución, el general Serrano asumió la regencia.

Encontrar un rey se convirtió en un grave problema interno e internacional. Las fuerzas políticas que habían derribado a Isabel II no se ponían de acuerdo en quién debería sustituirla: el duque de Montpensier, los unionistas; Fernando de Sajonia-Coburgo, los progresistas.[13]​ Y se desataron las rivalidades entre las principales potencias europeas —todas ellas monarquías— para «colocar» a «su» candidato en el trono vacante de la Corona de España.[14]

El portugués Fernando de Sajonia-Coburgo-Gotha rechazó el ofrecimiento. La candidatura de Antonio de Orleans, duque de Montpensier y esposo de la hermana de la reina, María Luisa Fernanda de Borbón, no prosperó al matar en un duelo al infante Enrique de Borbón, hermano del esposo de Isabel II. El alemán Leopold de Hohenzollern-Sigmaringen (al que los españoles llamaban en tono de humor, y ante la dificultad de pronunciar correctamente su apellido: «Olé, olé, si me eligen»), contaba con el valioso apoyo del canciller Otto von Bismarck. Sin embargo, Napoleón III lo vetó temiendo que Francia quedara entre dos monarquías Hohenzollern. En medio de este enfrentamiento se presentó el Telegrama de Ems, que desató la guerra franco-prusiana de en julio de 1870. El futuro Alfonso XII no fue aceptado por Prim, debido al nefasto recuerdo del reinado del último Borbón, su madre Isabel II.

Así pues, tras quedar descartado el príncipe prusiano Leopold de Hohenzollern-Sigmaringen por la oposición de Napoleón III y el duque de Montpensier, a cuya candidatura también se oponía Napoleón III a causa del antagonismo entre las casas dinásticas francesas —los Bonaparte y los Orleans—, además de que el entronque familiar de Montpensier con los Borbones, al ser cuñado de la destronada Isabel II, hizo que esta opción fuera muy poco apoyada por los partidos monárquicos-democráticos españoles, «solo quedaba la candidatura italiana de la casa de Saboya, impulsada por Prim desde el verano de 1870 hasta convertirse en su principal valedor».[14]

El 16 de noviembre de 1870, las Cortes Constituyentes eligieron a Amadeo de Saboya, duque de Aosta y segundo hijo del rey Víctor Manuel II Italia, como nuevo rey de España, con el nombre de Amadeo I. Votaron a favor 191 diputados, en contra 100 y hubo 19 abstenciones —60 votaron por la república federal, 27 por el duque de Montpensier y 8 por el general Espartero—.[15]​ La solución «no satisfacía más que a los progresistas y fue aceptada con enorme frialdad por la opinión pública española, que no llegó a sentir nunca el menor entusiasmo por el príncipe italiano».[16]​ El padre Luis Coloma hizo referencia en su famosa novela Pequeñeces a una «grotesca sátira» titulada El Príncipe Lila, que se celebró en los jardines del Retiro de Madrid, «en la que designaban al monarca reinante con el nombre de Macarroni I», «mientras un gentío inmenso de todos los colores y matices aplaudía».[17]

La sesión de las Cortes de 16 de noviembre de 1870, presididas por Manuel Ruiz Zorrilla, en la que tuvo lugar la votación para la elección del nuevo Rey arrojó el siguiente resultado:

 
Amadeo de Saboya, I de España.

Tras jurar ante el Parlamento, Amadeo I fue proclamado rey de España el 2 de enero de 1871.

La monarquía parlamentaria de Amadeo I (1871-1873)

 
Retrato de Amadeo I (1872), de Vicente Palmaroli (Museo del Prado).

El reinado de Amadeo I fue el primer intento en la historia de España de poner en práctica la forma de gobierno de la Monarquía parlamentaria («monarquía popular» o «monarquía democrática», como se la llamó en la época), aunque se saldó con un sonoro fracaso ya qué solo duró dos años: del 2 de enero de 1871, en que fue proclamado como rey por las Cortes Constituyentes, al 10 de febrero de 1873, en que presentó su abdicación.[18]

Entre las razones se suele aducir el hecho de que, el mismo día de la llegada a España del nuevo rey, moría en Madrid el general Prim, víctima de un atentado que se había producido tres días antes. Prim, además de ser el principal valedor del monarca, era el líder del Partido Progresista, la fuerza política más importante de la coalición monárquico-democrática; su muerte abrió la pugna por la sucesión entre Práxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla, que a la larga acabó provocando la «traumática descomposición» de aquella coalición destinada a ser el sostén de la monarquía amadeísta. Para Ángel Bahamonde: «Son demostrativas de la inestabilidad política del régimen la celebración de tres elecciones generales a Cortes y la sucesión de seis gabinetes ministeriales en dos años de reinado».[18]​ En última instancia, como apuntó M.ª Victoria López-Cordón, «la deserción de las [fuerzas] que deberían haberla sustentado hizo imposible la experiencia».[19]

Otra de las razones fue que la monarquía de Amadeo I no pudo integrar a los grupos políticos de oposición que no reconocían la legitimidad del nuevo rey y que siguieron defendiendo su propio proyecto político —la república, la monarquía carlista o la monarquía alfonsina—.[18]​ Los republicanos federales protagonizaron varias insurrecciones armadas en Andalucía y Cataluña, en las que se mezclaron reivindicaciones populares como el reparto de tierras, la abolición de las quintas y de los impuestos de consumos, manifestándose la falta de apoyo entre el pueblo, que no aceptó al nuevo monarca al que, burlándose, llamaba «Macarronini I»[20]​ o «Macarrón I».[21]

Por su parte, los carlistas iniciaron una nueva ofensiva militar en 1872 —que se extendería más allá del Sexenio, hasta 1876—. Encabezados por el pretendiente Carlos VII, nieto de Carlos María Isidro (Carlos V en la sucesión carlista), movilizaron unos 45 000 hombres armados y, para aumentar sus apoyos, el pretendiente devolvió el 16 de junio los fueros catalanes, aragoneses y valencianos suprimidos por Felipe V; además, creó un Gobierno en Estella, embrión de un Estado carlista con ayuntamientos y diputaciones organizados según el régimen foral, impulsores de las lenguas locales y las instituciones tradicionales anteriores a 1700. La insurrección tuvo éxito en Cataluña, Navarra, País Vasco y puntos aislados del resto de España, donde las tropas carlistas controlaron las zonas rurales, pero no las ciudades.

Al día siguiente de la abdicación de Amadeo I, el 10 de febrero, las Cortes, en una reunión de ambas no prevista en la Constitución de 1869, proclamaron la República el 11 de febrero de 1873.

La Primera República Española (1873-1874)

República Federal (1873)

El 11 de febrero de 1873, al día siguiente de la abdicación de Amadeo I, el Congreso y el Senado, constituidos en Asamblea Nacional, proclamaron la República por 258 votos contra 32, pero sin definirla como unitaria o como federal —decisión que postergaban a las futuras Cortes Constituyentes— y nombraron como presidente del Ejecutivo al republicano federal Estanislao Figueras.[22]

 
Caricatura de la revista satírica La Flaca, del 3 de marzo de 1873, sobre la pugna entre los radicales, defensores de la república unitaria, y los republicanos federales, divididos en «transigentes» e «intransigentes».

En mayo se celebraron las elecciones a Cortes Constituyentes, que, a causa del retraimiento del resto de los partidos, supusieron una aplastante victoria para el Partido Republicano Federal. Pero esta situación era engañosa; porque, en realidad, los diputados republicanos federales de las Constituyentes estaban divididos en tres grupos:[23]

  • Los «intransingentes», con unos 60 diputados, formaban la izquierda de la Cámara y propugnaban que las Cortes se declararan en Convención, asumiendo todos los poderes del Estado —el legislativo, el ejecutivo y el judicial— para construir la república federal de abajo arriba: desde el municipio a los cantones o estados, y desde éstos al poder federal. También defendían la introducción de reformas sociales que mejoraran las condiciones de vida del cuarto estado. Este sector de los republicanos federales no tenía un líder claro, aunque reconocían como su «patriarca» a José María Orense, el viejo marqués de Albaida. Destacaban dentro de él Nicolás Estévanez, Francisco Díaz Quintero, los generales Juan Contreras y Blas Pierrad, y los escritores Roque Barcia y Manuel Fernández Herrero.
  • Los «centristas», liderados por Francisco Pi y Margall, coincidían con los intransigentes en que el objetivo era construir una república federal, pero de arriba abajo, es decir: primero había que elaborar la Constitución federal y, luego, proceder a la formación de los cantones o estados federados. El número de diputados con que contaba este sector no era muy amplio y en muchas ocasiones actuaban divididos en las votaciones, aunque se solían inclinar por las propuestas de los intransigentes.
  • Los «moderados» constituían la derecha de la Cámara y estaban liderados por Emilio Castelar y por Nicolás Salmerón —y entre los que también destacaban Eleuterio Maisonnave y Buenaventura Abárzuza Ferrer—. Defendían la formación de una república democrática que diera cabida a todas las opciones liberales, por lo que rechazaban la conversión de las Cortes en un poder revolucionario —como defendían los intransigentes— y coincidían con los «pimargalianos» en que la prioridad de las Cortes era aprobar la nueva Constitución. Constituían el grupo más numeroso de la Cámara, aunque había ciertas diferencias entre los seguidores de Castelar, partidarios de la conciliación con los radicales de Cristino Martos y Nicolás María Rivero —que aceptaban la república, aunque en principio habían apoyado la monarquía de Amadeo I— y con los monárquicos constitucionales del general Serrano y Práxedes Mateo Sagasta, para incluirlos en el nuevo régimen; y los seguidores de Salmerón, que propugnaban que la república solo debía fundamentarse en la alianza de los republicanos «viejos».

A pesar de esta división, no tuvieron problemas en proclamar el 8 de junio la república federal, una semana después de que se abrieran las Cortes Constituyentes bajo la presidencia del veterano republicano intransigente José María Orense, por 218 votos contra dos:[24]

Artículo único. La forma de gobierno de la Nación española es la República democrática federal.
 
Retrato de Francisco Pi y Margall, segundo presidente del Poder Ejecutivo de la República.

Cuando el presidente del Poder Ejecutivo, Estanislao Figueras, que sufría una fuerte depresión por la muerte de su mujer, tuvo conocimiento de que los generales intransigentes Juan Contreras y Blas Pierrad preparaban un golpe de Estado para iniciar la república federal «desde abajo», al margen del Gobierno y de las Cortes, temiendo por su vida, el 10 de junio huyó a Francia.[25]​ Le sustituyó el republicano federal centrista Francisco Pi y Margall, quien estableció como prioridad derrotar a los carlistas, que ya llevaban más de un año alzados en armas en la llamada tercera guerra carlista, y la elaboración y aprobación de la nueva Constitución de la República Federal. Pero enseguida el Gobierno de Pi y Margall se encontró con la oposición de los republicanos federales intransigentes, porque en su programa no se habían incluido algunas de las reivindicaciones históricas de los federales como «la abolición del estanco del tabaco, de la lotería, de los aranceles judiciales y de los consumos repuestos en 1870 por ausencia de recursos». Pero lo que reclamaban los «intransigentes» era, sobre todo, que las Cortes, mientras se redactaba y aprobaba la nueva Constitución de la República democrática federal, se constituyeran en Convención, de la que emanaría una Junta de Salud Pública que detentaría el poder ejecutivo; propuesta que fue rechazada por Pi y Margall, y por la mayoría de diputados centristas y moderados que apoyaban al Gobierno.[26]

La respuesta de los intransigentes a la política de «orden y progreso» del Gobierno de Pi y Margall fue abandonar las Cortes el 1 de julio, acusando al Gobierno de haber contemporizado e incluso claudicado frente a los enemigos de la República federal.[27]​ A continuación, los intransigentes exhortaron a la inmediata y directa formación de cantones, para construir la república de abajo arriba, lo que iniciaría la rebelión cantonal. Para dirigirla se formó en Madrid un Comité de Salud Pública, aunque la iniciativa partió de los federales de cada localidad. Si bien hubo casos como el de Málaga, en que las autoridades locales fueron las que encabezaron la sublevación, en la mayoría se formaron juntas revolucionarias. Dos semanas después de la retirada de las Cortes, la revuelta era un hecho en Murcia, Valencia y Andalucía.[28]

Para acabar con la rebelión cantonal, Pi y Margall se negó a aplicar las medidas de excepción que le proponía el sector moderado de su partido, que incluía la suspensión de las sesiones de las Cortes. El presidente confiaba en que la rápida aprobación de la Constitución federal —lo que no sucedió— y la vía del diálogo —que ya le había funcionado cuando la Diputación de Barcelona proclamó el Estado catalán en el mes de marzo— haría entrar en razón a los sublevados.[29]​ Aun así, no dudó en recurrir a la represión.[30]​ Pero, como la política de Pi y Margall de persuasión y represión no consiguió detener la rebelión cantonal, el sector moderado le retiró su apoyo el 17 de julio votando a favor de Nicolás Salmerón. Al día siguiente, Pi y Margall dimitió, tras 37 días de mandato.[29]

El lema del nuevo Gobierno de Salmerón fue el «imperio de la ley». Para sofocar la rebelión cantonal, tomó medidas duras como destituir a los gobernadores civiles, alcaldes y militares que habían apoyado de alguna forma a los cantonalistas y, a continuación, nombrar a generales —aunque fueran contrarios a la República federal— como Manuel Pavía o Arsenio Martínez Campos, para que mandaran las expediciones militares a Andalucía y a Valencia, respectivamente, que pusieran fin a la rebelión. «Además, movilizó a los reservistas, aumentó la Guardia Civil con 30 000 hombres, nombró delegados del Gobierno en las provincias con las mismas atribuciones que el Ejecutivo. Autorizó a las Diputaciones a imponer contribuciones de guerra y a organizar cuerpos armados provinciales, y decretó que los barcos en poder de los cartageneros se consideraran piratas —lo que suponía que cualquier embarcación podía abatirlos estuviera en aguas españolas o no—».[31]​ Gracias a estas medidas, fueron sometidos uno tras otro los distintos cantones, excepto el de Cartagena, que resistiría hasta el 12 de enero de 1874.

 
Emilio Castelar, cuarto presidente del Poder Ejecutivo de la Primera República Española

Nicolás Salmerón renunció a su cargo al no querer firmar las sentencias de muerte de varios soldados acusados de traición, ya que, como krausista, era absolutamente contrario a la pena de muerte. Para sustituirle, las Cortes eligieron el 7 de septiembre a Emilio Castelar.[32]​ Inmediatamente, Castelar consiguió de las Cortes la concesión de facultades extraordinarias, para acabar tanto con la guerra carlista como con la rebelión cantonal, y la suspensión de sus sesiones desde el 20 de septiembre de 1873 hasta el 2 de enero de 1874, lo que, entre otras consecuencias, supuso paralizar el debate y la aprobación del proyecto de Constitución federal.[33]

Los poderes extraordinarios que obtuvo Castelar le permitieron gobernar por decreto, facultad que utilizó inmediatamente para reorganizar el Cuerpo de Artillería —disuelto entre los días 8 y 9 de febrero, al final del reinado de Amadeo I—; llamar a los reservistas y convocar una nueva leva, con lo que consiguió un ejército de 200 000 hombres; y lanzar un empréstito de 100 millones de pesetas para hacer frente a los gastos de guerra.[34]

A finales de noviembre, el Gobierno de Castelar ordenó al general Ceballos, quien dirigía el sitio de Cartagena tras la dimisión del general Martínez Campos —que lo había iniciado el 15 de agosto—, bombardear Cartagena con el fin de «quebrantar el ánimo de los defensores o cuando menos molestarles, para no dar lugar a que permanezcan como han permanecido, completamente tranquilos». El bombardeo comenzó el 26 de noviembre de 1873, sin previo aviso, y se prolongó hasta el último día del asedio, el 12 de enero de 1874, contabilizándose en total 27 189 proyectiles: «un verdadero diluvio de fuego» que causó 800 heridos y 12 muertos, y destrozos en la mayoría de los inmuebles —solo 28 casas quedaron indemnes—. Fue respondido por los cañones de los castillos de Cartagena y de las fragatas, pero fueron mucho menos efectivos, dada la dispersión de las fuerzas gubernamentales que sitiaban la plaza por tierra.[35]​ Tras la primera semana de bombardeo, en que los sitiadores se percataron de que las defensas de Cartagena seguían intactas, el general Ceballos presentó la dimisión; el 10 de diciembre fue sustituido por el general José López Domínguez, también un antirrepublicano y, además, sobrino del general Serrano, el líder del monárquico Partido Constitucional. En la entrevista que mantuvo en Madrid con Castelar, este le insistió en que debía conseguir la rendición de Cartagena, costara lo que costara, antes del 2 de enero, la fecha prevista para la reapertura de las Cortes.[36]

República unitaria: la dictadura de Serrano (1874)

 
Entrada de las fuerzas del general Pavía en el Congreso de los Diputados en la madrugada del 3 de enero de 1874.

Cuando se reabrieron las Cortes, a las dos de la tarde del 2 de enero de 1874, el capitán general de Madrid, Manuel Pavía, tenía preparadas a sus tropas en caso de que Castelar perdiera la votación parlamentaria.[37]​ Pasada la medianoche, se produjo la votación de la cuestión de confianza, en la que el Gobierno salió derrotado por 100 votos a favor y 120 en contra, lo que obligó a Castelar a presentar la dimisión.[38]​ Entonces, Pavía partió hacia el Congreso de los Diputados con los regimientos comprometidos y, cuando llegó, la Guardia Civil, que custodiaba el Congreso, se puso a sus órdenes.[39]​ Tras ordenar al presidente del Congreso de los Diputados, Nicolás Salmerón, que lo desalojara, fuerzas de la Guardia Civil y del Ejército entraron en el edificio del Congreso disparando tiros al aire por los pasillos, y los diputados lo abandonaron rápidamente. Pavía justificó el golpe afirmando que lo había dado por «la salvación del Ejército, de la libertad y de la patria».[40]

El general Pavía intentó que se formara un «Gobierno nacional» presidido por Emilio Castelar. No obstante, este rehusó asistir a la reunión de los líderes políticos constitucionales, radicales, alfonsinos y republicanos unitarios que Pavía había convocado con tal fin —los republicanos federales de Salmerón y de Pi y Margall, y los intransigentes quedaron obviamente excluidos—, al no querer mantenerse en el poder por medios antidemocráticos. En la reunión, Pavía defendió la república conservadora y, por eso, impuso al republicano unitario Eugenio García Ruiz como ministro de la Gobernación y nombró al general Serrano jefe del nuevo Gobierno.[41]​ Con Serrano al frente, «nominalmente la República continuaba pero completamente desnaturalizada», afirma José Barón Fernández, por lo que el golpe de Pavía supuso el final de facto de la Primera República Española.[42]

 
Retrato del general Serrano, último presidente de la I República, desde enero hasta diciembre de 1874.

El general Francisco Serrano formó un Gobierno de concentración que agrupó a constitucionales, radicales y republicanos unitarios, y del que se excluyó a los republicanos federales.[41]​ Su objetivo prioritario fue acabar con la rebelión cantonal y con la guerra carlista, para luego convocar unas Cortes que decidieran la forma de gobierno.[43]​ Quedó así establecida la dictadura de Serrano, pues no existían Cortes —al haber quedado disueltas— que controlaran la acción del Gobierno ni ley suprema que delimitara sus funciones; porque, si bien restableció la Constitución de 1869, a continuación la dejó en suspenso «hasta que se asegurase la normalidad de la vida política».[44]

Recién formado el nuevo Gobierno, se puso fin a la rebelión cantonal con la entrada en Cartagena el 12 de enero del general José López Domínguez, sustituto de Martínez Campos. Las primeras medidas que tomó pusieron de manifiesto su carácter conservador, como la inmediata proscripción de la sección española de Asociación Internacional de Trabajadores, la Federación Regional Española (fundada en 1870), por atentar «contra la propiedad, contra la familia y demás bases sociales».[45]

El 26 de febrero, Serrano marchó al norte para encargarse personalmente de las operaciones contra los carlistas, dejando al general Juan de Zavala y de la Puente al frente del Gobierno y quedando él como presidente del Poder Ejecutivo de la República.[46]​ Tras su éxito en el levantamiento del sitio de Bilbao, Serrano reforzó su posición en el Gobierno con el nombramiento en mayo de Sagasta al frente del ministerio de la Gobernación, lo que provocó la salida de los tres ministros radicales y del único ministro republicano, el unitario Eugenio García Ruiz. Así, se formó un Gobierno exclusivamente constitucional que siguió presidido por el general Zavala.

Este fue sustituido el 3 de septiembre por Sagasta, tras evitar que Zavala intentara que los republicanos volvieran al gobierno, ya que en aquel momento los constitucionales propugnaban la restauración «parlamentaria y democrática» del príncipe Alfonso. Serrano nombró entonces a Andrés Borrego para que negociara con los alfonsinos de Antonio Cánovas del Castillo. No obstante, este rechazó las propuestas de los constitucionales, porque suponía reconocer la Jefatura del Estado de Serrano hasta que fueran derrotados los carlistas y aceptar que la restauración borbónica llegaría a través de la convocatoria de unas Cortes generales extraordinarias. La exreina Isabel II le escribió a su hijo Alfonso: «Serrano sigue empeñado en su propósito de ser presidente de la República por 10 años con 4 millones de reales anuales».[47]

El 1 de diciembre, Cánovas del Castillo tomó la iniciativa con la publicación del Manifiesto de Sandhurst, escrito por él y firmado por el príncipe Alfonso. En él se definía como «hombre del siglo, verdaderamente liberal» —afirmación con la que buscaba la reconciliación de los liberales en torno a su monarquía— y vinculaba los derechos históricos de la dinastía legítima —los Borbón— con el gobierno representativo y los derechos y libertades que le acompañan.[48]​ Era la culminación de la estrategia que Cánovas había diseñado desde que asumiera la jefatura de la causa alfonsina el 22 de agosto de 1873 —en plena rebelión cantonal— que, como le había explicado a la exreina Isabel y al príncipe Alfonso en sendas cartas de enero de 1874 —tras el golpe de Pavía—, consistía en crear «mucha opinión en favor de Alfonso» con «calma, serenidad, paciencia, tanto como perseverancia y energía».[46]

Aunque Cánovas no deseaba que fuera obra de un pronunciamiento militar, el 29 de diciembre de 1874, el general Arsenio Martínez Campos se pronunció en Sagunto a favor de la restauración de la monarquía borbónica en la persona de don Alfonso de Borbón, hijo de Isabel II. Serrano optó por no presentar resistencia.[49]​ El 31 de diciembre de 1874 se formó el llamado Ministerio-Regencia, presidido por Cánovas, a la espera de que el príncipe Alfonso regresara a España desde Inglaterra. En ese Gobierno estaban dos hombres de la Revolución de 1868 y ministros con Amadeo I: Francisco Romero Robledo y Adelardo López de Ayala, quien había sido el redactor del manifiesto «Viva España con honra», que había dado inicio a la revolución.[50]

Referencias

  1. Fontana, 2007, pp. 315-320.
  2. Vilches, 2001, p. 70.
  3. Vilches, 2001, p. 71.
  4. Fuentes, 2007, pp. 229-230.
  5. Fontana, 2007, p. 330. «El pánico se extendió por todo el país, donde afectó inicialmente a sociedades de crédito y a bancos, que arrastraban en su caída a otras empresas que se encontraban sin liquidez y con una demanda reducida, como consecuencia de la ruina de quienes habían colocado sus ahorros en obligaciones de bancos y ferrocarriles.»
  6. Fuentes, 2007, p. 233.
  7. Fuentes, 2007, p. 228.
  8. Fontana, 2007, pp. 347-349.
  9. Fontana, 2007, pp. 351-352.
  10. Fontana, 2007, pp. 352-353.
  11. Fontana, 2007, p. 354. «El 30 de septiembre, a las once de la mañana, salió para la frontera francesa, en medio de la indiferencia general, el tren que llevaba al exilio a la reina, acompañada de su familia (el rey consorte la abandonaría muy pronto, para irse a vivir con Meneses) y de toda su corte de los milagros
  12. Fuentes, 2007, p. 235.
  13. López-Cordón, 1976, pp. 39-40.
  14. Bahamonde, 1996, pp. 65-66.
  15. Fontana, 2007, p. 366.
  16. López-Cordón, 1976, p. 40.
  17. López-Cordón, 1976, p. 148.
  18. Bahamonde, 1996, pp. 72-73.
  19. López-Cordón, 1976, p. 39.
  20. Albaigès, Josep M. (1995). Enciclopedia de los nombres propios. Ed. Planeta
  21. Aguado Sánchez, Francisco (1984). Historia de la Guardia Civil. CUPSA Editorial
  22. Fontana, 2007, p. 371.
  23. Vilches, 2001, p. 381-382.
  24. López-Cordón, 1976, p. 58.
  25. Vilches, 2001, pp. 382-383.
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  27. Barón Fernández, 1998, p. 89.
  28. López-Cordón, 1976, p. 67-68.
  29. Vilches, 2001, p. 387-388.
  30. Barón Fernández, 1998, p. 90; 170-171.
  31. Vilches, 2001, p. 390-391.
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  33. Vilches, 2001, p. 394-396.
  34. Barón Fernández, 1998, p. 240.
  35. Barón Fernández, 1998, p. 239-242; 222.
  36. Barón Fernández, 1998, p. 241-247.
  37. Barón Fernández, 1998, pp. 261-262.
  38. Vilches, 2001, p. 399.
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  40. Vilches, 2001, pp. 399-400.
  41. Vilches, 2001, p. 402.
  42. Barón Fernández, 1998, p. 266.
  43. Vilches, 2001, pp. 402-403.
  44. López-Cordón, 1976, pp. 71; 74.
  45. López-Cordón, 1976, p. 74.
  46. Vilches, 2001, p. 403.
  47. Vilches, 2001, pp. 406-407.
  48. Vilches, 2001, pp. 409-410.
  49. Vilches, 2001, pp. 410-411.
  50. Vilches, 2001, p. 411.

Bibliografía

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  • Fontana, Josep (2007). La época del liberalismo. Vol. 6 de la Historia de España, dirigida por Josep Fontana y Ramón Villares. Barcelona: Crítica/Marcial Pons. ISBN 978-84-8432-876-6. 
  • Fuentes, Juan Francisco (2007). El fin del Antiguo Régimen (1808-1868). Política y sociedad. Madrid: Síntesis. ISBN 978-84-975651-5-8. 
  • López-Cordón, María Victoria (1976). La revolución de 1868 y la I República. Madrid: Siglo XXI. ISBN 84-323-0238-4. 
  • Vilches, Jorge (2001). Progreso y Libertad. El Partido Progresista en la Revolución Liberal Española. Madrid: Alianza Editorial. ISBN 84-206-6768-4. 


  •   Datos: Q12411956
  •   Multimedia: Democratic Sexennium

sexenio, democrático, conoce, como, sexenio, revolucionario, periodo, historia, contemporánea, españa, transcurrido, desde, triunfo, revolución, septiembre, 1868, hasta, pronunciamiento, diciembre, 1874, supuso, inicio, etapa, conocida, como, restauración, bor. Se conoce como Sexenio Democratico o Sexenio Revolucionario al periodo de la historia contemporanea de Espana transcurrido desde el triunfo de la Revolucion de septiembre de 1868 hasta el pronunciamiento de diciembre de 1874 que supuso el inicio de la etapa conocida como Restauracion borbonica Caricatura sobre las etapas del Sexenio Democratico publicada por la revista La Madeja otra de las cabeceras de La Flaca el 14 de marzo de 1875 El Sexenio suele dividirse en tres o cuatro etapas la primera la del Gobierno provisional de 1868 1871 la segunda el reinado de Amadeo I 1871 1873 la tercera la Primera Republica Espanola proclamada tras la renuncia al trono del rey Amadeo de Saboya en febrero de 1873 A su vez esta se divide entre el periodo de la Republica federal a la que pone fin el golpe de Pavia de enero de 1874 y la Republica unitaria tambien conocida como la dictadura de Serrano que se cierra con el pronunciamiento en diciembre de 1874 en Sagunto del general Arsenio Martinez Campos en favor de la restauracion de la Monarquia borbonica en la persona del hijo de Isabel II Alfonso XII En la actividad politica de estos anos se advierte la participacion de cuatro bloques politicos los unionistas encabezados por el general Serrano los progresistas encabezados por el general Prim y tras su asesinato por Praxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla los democratas monarquicos llamados cimbrios encabezados por Cristino Martos y Nicolas Maria Rivero y los republicanos federales cuyos lideres eran Estanislao Figueras Francisco Pi y Margall Nicolas Salmeron y Emilio Castelar Ademas hay que contar con el Partido Moderado decantado cada vez mas hacia las posiciones de los alfonsinos dirigidos por Antonio Canovas del Castillo con los carlistas que desencadenaran en 1872 la tercera guerra carlista para intentar poner en el trono al pretendiente Carlos VII asi como con los independentistas cubanos lo que dara lugar tras el Grito de Yara a la guerra de los Diez Anos Indice 1 Antecedentes 1 1 La crisis economica de 1866 1868 1 2 El pacto de Ostende 2 Revolucion la Gloriosa 3 El Gobierno Provisional 3 1 Composicion del Gobierno provisional y fuerzas politicas 3 2 Elecciones constituyentes y reformas 3 3 La busqueda de un nuevo rey 4 La monarquia parlamentaria de Amadeo I 1871 1873 5 La Primera Republica Espanola 1873 1874 5 1 Republica Federal 1873 5 2 Republica unitaria la dictadura de Serrano 1874 6 Referencias 7 BibliografiaAntecedentes EditarArticulo principal Crisis final del reinado de Isabel II En 1863 la reina Isabel II destituyo al general Leopoldo O Donnell que durante los cinco anos anteriores habia presidido el gobierno largo de la Union Liberal El Partido Progresista esperaba ser llamado al Gobierno pero la reina decidio nombrar al frente del poder ejecutivo a un veterano miembro del Partido Moderado el marques de Miraflores Esto inclino a los progresistas a optar por el retraimiento lo que significaba que no presentarian candidatos a las elecciones deslegitimando asi las Cortes que salieran de ellas e implicitamente a la propia Monarquia El Gobierno de Miraflores tuvo una corta duracion como los dos siguientes tambien encabezados moderados hasta que en 1864 fue nombrado presidente del Gobierno el hombre fuerte del Partido Moderado el general Ramon Maria Narvaez Este se mantuvo en el poder hasta junio de 1865 siendo destituido por la reina a consecuencia de los tragicos sucesos conocidos como la Noche de San Daniel Entonces Isabel II volvio a llamar al Gobierno a Leopoldo O Donnell al frente de su partido la Union Liberal una especie de partido de centro del que formaban los moderados mas progresistas puritanos y los progresistas mas moderados templados 1 En junio de 1866 tuvo lugar una insurreccion en Madrid para acabar con la Monarquia conocida como la sublevacion del cuartel de San Gil porque fueron los sargentos de este cuartel de artilleria los que protagonizaron el alzamiento Al mes siguiente la reina Isabel II destituyo al general O Donnell por considerar que habia sido demasiado blando con los insurrectos a pesar de que habian sido fusilados 66 de ellos y llamo de nuevo al general Narvaez para sustituirle 2 Narvaez adopto inmediatamente una politica autoritaria y represiva que hizo imposible el turno en el poder con la Union Liberal que entonces opto por hacer el vacio en Palacio segun la expresion del propio O Donnell lo que significaba el retraimiento en el Senado 3 La crisis economica de 1866 1868 Editar La red de ferrocarriles en Espana durante el siglo xix A principios de 1866 estallo la primera crisis financiera de la historia del capitalismo espanol Aunque estuvo precedida de la crisis de la industria textil catalana cuyos primeros sintomas aparecieron en 1862 a consecuencia de la escasez de algodon provocada por la guerra civil estadounidense el detonante de la crisis financiera de 1866 fueron las perdidas de las companias ferroviarias que arrastraron con ellas a bancos y sociedades de credito 4 Las primeras quiebras de sociedades de credito vinculadas a las companias ferroviarias se produjeron en 1864 pero fue en mayo de 1866 cuando la crisis alcanzo a dos importantes sociedades de credito de Barcelona la Catalana General de Credito y el Credito Mobiliario Barcelones lo que desato una oleada de panico 5 A la crisis financiera de 1866 se sumo una grave crisis de subsistencias en 1867 y 1868 motivada por la malas cosechas de esos anos Los afectados no fueron los hombres de negocios o los politicos como en la crisis financiera sino las clases populares debido a la escasez y carestia de productos basicos como el pan Se desataron motines populares en varias ciudades como en Sevilla donde el trigo llego a multiplicar por seis su precio o en Granada al grito de Pan a ocho reales La crisis de subsistencias se vio agravada por el crecimiento del paro provocado por la crisis economica a su vez desencadenada por la crisis financiera que afecto sobre todo a dos de los sectores que mas trabajo proporcionaban las obras publicas incluidos los ferrocarriles y la construccion La coincidencia de ambas crisis la financiera y la de subsistencias creaba unas condiciones sociales explosivas que daban argumentos a los sectores populares para incorporarse a la lucha contra el regimen isabelino 6 Segun ha senalado Juan Francisco Fuentes hay que descartar una relacion causa efecto entre la crisis economica y la Revolucion de 1868 aunque no se puede ignorar la importancia que aquella gran crisis del capitalismo espanol iniciada en 1864 tuvo en la percepcion general de las elites politicas y economicas el convencimiento de que el regimen isabelino reducido finalmente a una pequena camarilla politico clerical se habia aislado por completo de la realidad nacional A los ojos de una buena parte de la sociedad espanola aquello era el final de una epoca Una grave crisis de subsistencias en los anos 1867 1868 acabaria de generalizar esa sensacion de catastrofe nacional que se apodera del pais en la ultima etapa del reinado de Isabel II 6 La crisis economica acelero el deterioro politico del regimen isabelino El Gobierno debia enfrentarse a varios grupos hostiles como los inversores que querian salvar su patrimonio los industriales que precisaban mayor proteccionismo y los campesinos y obreros que no querian pasar hambre Juan Prim en 1869 El pacto de Ostende Editar El Pacto de Ostende entre progresistas y democratas que recibe su nombre por el de la ciudad de Belgica donde se firmo el 16 de agosto de 1866 fue una iniciativa del general progresista Juan Prim con el objetivo de derribar la Monarquia de Isabel II Constaba de dos puntos 3 1º destruir lo existente en las altas esferas del poder 2º nombramiento de una asamblea constituyente bajo la direccion de un Gobierno provisorio la cual decidiria la suerte del pais cuya soberania era la ley que representase siendo elegida por sufragio universal directo La ambigua redaccion del primer punto permitia incorporar al mismo a otras personalidades y fuerzas politicas Asi tras el fallecimiento de O Donnell el 5 de noviembre de 1867 los generales Prim y Serrano paradojicamente el mismo militar que habia dirigido la represion de la sublevacion del cuartel de San Gil firmaron un acuerdo en marzo de 1868 por el que la Union Liberal se sumaba al mismo Con esto la Union Liberal aceptaba la entrada en un nuevo proceso constituyente y en la busqueda de una nueva dinastia y segun el punto segundo del Pacto de Ostende la soberania unica de la nacion y el sufragio universal 3 Almirante Juan Bautista Topete 1887 por Rafael Monleon Museo Naval de Madrid La respuesta de Narvaez fue acentuar su politica autoritaria Las Cortes cerradas en julio de 1866 no volvieron a abrirse pues fueron disueltas y se convocaron nuevas elecciones para principios de 1867 La influencia moral del Gobierno dio una mayoria tan aplastante a los diputados ministeriales que la Union Liberal lo mas parecido a una oposicion parlamentaria quedo reducida a cuatro diputados Ademas en el nuevo reglamento de las Cortes aprobado en junio de 1867 tres meses despues de haber sido abiertas se suprimio el voto de censura reduciendo asi sensiblemente su capacidad para controlar al Gobierno 7 En abril de 1868 fallecio el general Narvaez y la reina nombro para sustituirle al ultraconservador Luis Gonzalez Bravo que siguio con la politica autoritaria y represiva de su antecesor 8 Revolucion la Gloriosa EditarArticulo principal Revolucion de 1868 El 16 de septiembre de 1868 el general Prim llego a Cadiz procedente de Londres via Gibraltar y dos dias despues el 18 de septiembre se sublevaba el almirante Juan Bautista Topete al frente de la escuadra El 19 tras la llegada desde Canarias del general Serrano y del resto de los generales unionistas comprometidos Topete leyo un manifiesto redactado por el escritor unionista Adelardo Lopez de Ayala en el que se justificaba el pronunciamiento y que acababa con el grito Viva Espana con honra que se haria celebre En los dias siguientes el levantamiento se fue extendiendo por el resto del pais empezando por Andalucia 9 Se formaron juntas provinciales que se encargaron de movilizar a la poblacion mediante promesas de sufragio universal de eliminacion de los consumos del fin del reclutamiento forzoso y de una nueva Constitucion En las ciudades las juntas revolucionarias formadas por democratas y progresistas asumieron el poder El mismo dia en que se hizo publico el manifiesto de los sublevados Gonzalez Bravo dimitio La reina Isabel II nombro para sustituirle al general Jose Gutierrez de la Concha quien organizo un ejercito en Madrid como pudo dada la falta de apoyo que encontro entre los mandos militares y lo envio a Andalucia al mando del general Manuel Pavia y Lacy marques de Novaliches para que acabara con la rebelion Al mismo tiempo aconsejo a la reina que volviera a Madrid desde San Sebastian donde estaba de veraneo pero al poco tiempo de iniciar el viaje en tren el general de la Concha le envio un telegrama a la reina pidiendole ahora que siguiera en San Sebastian porque las situacion de las fuerzas leales habia empeorado 10 El 28 de septiembre tuvo lugar la decisiva batalla de Alcolea en la provincia de Cordoba en la que la victoria fue para las fuerzas sublevadas al mando del general Serrano que contaron con el apoyo de millares de voluntarios armados Al dia siguiente el levantamiento triunfaba en Madrid y el dia 30 Isabel II abandonaba Espana desde San Sebastian 11 Entonces termino toda resistencia de las fuerzas leales a la reina y el 8 de octubre se formaba un Gobierno provisional presidido por el general Serrano y del que formaban parte el general Prim y el almirante Topete Se sellaba asi el triunfo de la que seria llamada la Revolucion de 1868 o la Gloriosa que habia puesto fin al reinado de Isabel II 12 El Gobierno provisional en 1869 De izquierda a derecha Laureano Figuerola Hacienda Praxedes Mateo Sagasta Gobernacion Manuel Ruiz Zorrilla Fomento Juan Prim Guerra Francisco Serrano presidente del Gobierno provisional Juan Bautista Topete Marina Adelardo Lopez de Ayala Ultramar Antonio Romero Ortiz Gracia y Justicia y Juan Alvarez Lorenzana Estado Fotografia de J Laurent El Gobierno Provisional EditarArticulo principal Gobierno Provisional de 1868 1871 Composicion del Gobierno provisional y fuerzas politicas Editar Tras el triunfo de la revolucion se formo un Gobierno Provisional presidido por el general Serrano unionista y con Prim progresista en el Ministerio de la Guerra el almirante Juan Bautista Topete tambien unionista en la cartera de Marina y Sagasta tambien progresista en el de Gobernacion Quedaron fuera los democratas que no aceptaron el unico puesto en el Gobierno que se les ofrecio Cuando el Gobierno provisional proclamo que era favorable a la monarquia rompiendo el compromiso del Pacto de Ostende de que se mantendria neutral en la cuestion de la forma de gobierno el Partido Democrata aposto claramente por la republica y cambio su nombre por el de Partido Republicano Democratico Federal Una minoria de democratas que creian en la compatibilidad de la democracia con la monarquia aunque seguian apoyando a la republica pero a mas largo plazo no continuaron en el partido y se unieron a la coalicion de unionistas y progresistas que apoyaba al Gobierno provisional Fueron llamados cimbrios Sin embargo en el seno del Partido Republicano Federal existian varias tendencias Una mas conservadora encabezada por Emilio Castelar y cuyo concepto de Espana era una administracion unitaria o centralista Un segundo sector centrista encabezado por Francisco Pi y Margall que defendia la republica federal pues concebian Espana como una federacion pactada de Estados regionales historicos ademas aceptaba la legalidad y se oponia a la insurreccion armada Por ultimo estaban los intransigentes que a diferencia de los benevolos como llamaban a los conservadores y a los centristas eran partidarios de la insurreccion para construir el Estado federal de abajo arriba Carecian de un lider claro pero consideraban como su patriarca al veterano republicano Jose Maria Orense Las bases sociales republicanas se encontraban en la pequena burguesia las clases populares urbanas artesanos asalariados y parte del movimiento obrero y campesino antes de que fuera atraido por las ideas y organizaciones anarquistas y socialistas Elecciones constituyentes y reformas Editar La convocatoria a Cortes Constituyentes se hizo por primera vez mediante elecciones por sufragio universal masculino mayores de 25 anos en las que voto el 70 del censo La composicion politica del Parlamento quedo de la siguiente manera progresistas 159 diputados unionistas 69 republicanos federales 69 democratas 20 carlistas 18 isabelinos o liberales moderados 14 y republicanos unitarios 2 que elaborarian y aprobarian en junio de 1869 la Constitucion de la nueva monarquia Ademas de la aprobacion de la Constitucion las Cortes abordaron la abolicion de la esclavitud que se limito de momento a la libertad de vientres ley Moret de 4 de julio de 1870 llamada asi por Segismundo Moret ministro de Ultramar y posteriormente de Hacienda La supresion total hubo de esperar varios anos mas a 1873 para Puerto Rico y a 1886 para Cuba En ambas colonias se habian producido simultaneamente a la Revolucion Gloriosa de la metropolis las sublevaciones independentistas llamadas Grito de Lares en Puerto Rico de breve duracion y Grito de Yara que condujo a la guerra de los Diez Anos cubana En el seno del movimiento independentista se produjo un enfrentamiento entre los ricos duenos de las plantaciones y el resto de los cubanos partidarios del fin del regimen esclavista La forma de gestionar ambos asuntos colonial y esclavista proporciono importantes argumentos utilizados por la oposicion a los gobiernos del sexenio Por otro lado el Gobierno decreto la libertad de imprenta y de asociacion Se devolvieron sus puestos en la Universidad a los profesores que habian sido represaliados como Emilio Castelar Se tomaron medidas economicas para solucionar el deficit publico como la fijacion de la peseta como unidad monetaria y se oficializo el sistema metrico decimal Prim Serrano y Topete subastan la Corona espanola La Flaca 1869 La busqueda de un nuevo rey Editar El triunfo en las elecciones de los partidos que defendian la monarquia como forma de gobierno tal como se recogio en la Constitucion de 1869 obligo al nuevo Gobierno a encontrar un nuevo rey para Espana Mientras tanto aplicando la Constitucion el general Serrano asumio la regencia Encontrar un rey se convirtio en un grave problema interno e internacional Las fuerzas politicas que habian derribado a Isabel II no se ponian de acuerdo en quien deberia sustituirla el duque de Montpensier los unionistas Fernando de Sajonia Coburgo los progresistas 13 Y se desataron las rivalidades entre las principales potencias europeas todas ellas monarquias para colocar a su candidato en el trono vacante de la Corona de Espana 14 Leopoldo de Hohenzollern Sigmaringen El portugues Fernando de Sajonia Coburgo Gotha rechazo el ofrecimiento La candidatura de Antonio de Orleans duque de Montpensier y esposo de la hermana de la reina Maria Luisa Fernanda de Borbon no prospero al matar en un duelo al infante Enrique de Borbon hermano del esposo de Isabel II El aleman Leopold de Hohenzollern Sigmaringen al que los espanoles llamaban en tono de humor y ante la dificultad de pronunciar correctamente su apellido Ole ole si me eligen contaba con el valioso apoyo del canciller Otto von Bismarck Sin embargo Napoleon III lo veto temiendo que Francia quedara entre dos monarquias Hohenzollern En medio de este enfrentamiento se presento el Telegrama de Ems que desato la guerra franco prusiana de en julio de 1870 El futuro Alfonso XII no fue aceptado por Prim debido al nefasto recuerdo del reinado del ultimo Borbon su madre Isabel II Asi pues tras quedar descartado el principe prusiano Leopold de Hohenzollern Sigmaringen por la oposicion de Napoleon III y el duque de Montpensier a cuya candidatura tambien se oponia Napoleon III a causa del antagonismo entre las casas dinasticas francesas los Bonaparte y los Orleans ademas de que el entronque familiar de Montpensier con los Borbones al ser cunado de la destronada Isabel II hizo que esta opcion fuera muy poco apoyada por los partidos monarquicos democraticos espanoles solo quedaba la candidatura italiana de la casa de Saboya impulsada por Prim desde el verano de 1870 hasta convertirse en su principal valedor 14 El 16 de noviembre de 1870 las Cortes Constituyentes eligieron a Amadeo de Saboya duque de Aosta y segundo hijo del rey Victor Manuel II Italia como nuevo rey de Espana con el nombre de Amadeo I Votaron a favor 191 diputados en contra 100 y hubo 19 abstenciones 60 votaron por la republica federal 27 por el duque de Montpensier y 8 por el general Espartero 15 La solucion no satisfacia mas que a los progresistas y fue aceptada con enorme frialdad por la opinion publica espanola que no llego a sentir nunca el menor entusiasmo por el principe italiano 16 El padre Luis Coloma hizo referencia en su famosa novela Pequeneces a una grotesca satira titulada El Principe Lila que se celebro en los jardines del Retiro de Madrid en la que designaban al monarca reinante con el nombre de Macarroni I mientras un gentio inmenso de todos los colores y matices aplaudia 17 Duque de Montpensier en 1870 La sesion de las Cortes de 16 de noviembre de 1870 presididas por Manuel Ruiz Zorrilla en la que tuvo lugar la votacion para la eleccion del nuevo Rey arrojo el siguiente resultado Candidatura VotosAmadeo de Saboya 191Republica federal 60Duque de Montpensier 27Baldomero Espartero 8Alfonso de Borbon 2Republica unitaria 2Republica 1Duquesa de Montpensier 1Blancos 19Total 311 Amadeo de Saboya I de Espana Tras jurar ante el Parlamento Amadeo I fue proclamado rey de Espana el 2 de enero de 1871 La monarquia parlamentaria de Amadeo I 1871 1873 EditarArticulo principal Reinado de Amadeo I Retrato de Amadeo I 1872 de Vicente Palmaroli Museo del Prado El reinado de Amadeo I fue el primer intento en la historia de Espana de poner en practica la forma de gobierno de la Monarquia parlamentaria monarquia popular o monarquia democratica como se la llamo en la epoca aunque se saldo con un sonoro fracaso ya que solo duro dos anos del 2 de enero de 1871 en que fue proclamado como rey por las Cortes Constituyentes al 10 de febrero de 1873 en que presento su abdicacion 18 Entre las razones se suele aducir el hecho de que el mismo dia de la llegada a Espana del nuevo rey moria en Madrid el general Prim victima de un atentado que se habia producido tres dias antes Prim ademas de ser el principal valedor del monarca era el lider del Partido Progresista la fuerza politica mas importante de la coalicion monarquico democratica su muerte abrio la pugna por la sucesion entre Praxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla que a la larga acabo provocando la traumatica descomposicion de aquella coalicion destinada a ser el sosten de la monarquia amadeista Para Angel Bahamonde Son demostrativas de la inestabilidad politica del regimen la celebracion de tres elecciones generales a Cortes y la sucesion de seis gabinetes ministeriales en dos anos de reinado 18 En ultima instancia como apunto M ª Victoria Lopez Cordon la desercion de las fuerzas que deberian haberla sustentado hizo imposible la experiencia 19 Otra de las razones fue que la monarquia de Amadeo I no pudo integrar a los grupos politicos de oposicion que no reconocian la legitimidad del nuevo rey y que siguieron defendiendo su propio proyecto politico la republica la monarquia carlista o la monarquia alfonsina 18 Los republicanos federales protagonizaron varias insurrecciones armadas en Andalucia y Cataluna en las que se mezclaron reivindicaciones populares como el reparto de tierras la abolicion de las quintas y de los impuestos de consumos manifestandose la falta de apoyo entre el pueblo que no acepto al nuevo monarca al que burlandose llamaba Macarronini I 20 o Macarron I 21 Por su parte los carlistas iniciaron una nueva ofensiva militar en 1872 que se extenderia mas alla del Sexenio hasta 1876 Encabezados por el pretendiente Carlos VII nieto de Carlos Maria Isidro Carlos V en la sucesion carlista movilizaron unos 45 000 hombres armados y para aumentar sus apoyos el pretendiente devolvio el 16 de junio los fueros catalanes aragoneses y valencianos suprimidos por Felipe V ademas creo un Gobierno en Estella embrion de un Estado carlista con ayuntamientos y diputaciones organizados segun el regimen foral impulsores de las lenguas locales y las instituciones tradicionales anteriores a 1700 La insurreccion tuvo exito en Cataluna Navarra Pais Vasco y puntos aislados del resto de Espana donde las tropas carlistas controlaron las zonas rurales pero no las ciudades Al dia siguiente de la abdicacion de Amadeo I el 10 de febrero las Cortes en una reunion de ambas no prevista en la Constitucion de 1869 proclamaron la Republica el 11 de febrero de 1873 La Primera Republica Espanola 1873 1874 EditarArticulo principal Primera Republica Espanola Republica Federal 1873 Editar Vease tambien Rebelion cantonal El 11 de febrero de 1873 al dia siguiente de la abdicacion de Amadeo I el Congreso y el Senado constituidos en Asamblea Nacional proclamaron la Republica por 258 votos contra 32 pero sin definirla como unitaria o como federal decision que postergaban a las futuras Cortes Constituyentes y nombraron como presidente del Ejecutivo al republicano federal Estanislao Figueras 22 Caricatura de la revista satirica La Flaca del 3 de marzo de 1873 sobre la pugna entre los radicales defensores de la republica unitaria y los republicanos federales divididos en transigentes e intransigentes En mayo se celebraron las elecciones a Cortes Constituyentes que a causa del retraimiento del resto de los partidos supusieron una aplastante victoria para el Partido Republicano Federal Pero esta situacion era enganosa porque en realidad los diputados republicanos federales de las Constituyentes estaban divididos en tres grupos 23 Los intransingentes con unos 60 diputados formaban la izquierda de la Camara y propugnaban que las Cortes se declararan en Convencion asumiendo todos los poderes del Estado el legislativo el ejecutivo y el judicial para construir la republica federal de abajo arriba desde el municipio a los cantones o estados y desde estos al poder federal Tambien defendian la introduccion de reformas sociales que mejoraran las condiciones de vida del cuarto estado Este sector de los republicanos federales no tenia un lider claro aunque reconocian como su patriarca a Jose Maria Orense el viejo marques de Albaida Destacaban dentro de el Nicolas Estevanez Francisco Diaz Quintero los generales Juan Contreras y Blas Pierrad y los escritores Roque Barcia y Manuel Fernandez Herrero Los centristas liderados por Francisco Pi y Margall coincidian con los intransigentes en que el objetivo era construir una republica federal pero de arriba abajo es decir primero habia que elaborar la Constitucion federal y luego proceder a la formacion de los cantones o estados federados El numero de diputados con que contaba este sector no era muy amplio y en muchas ocasiones actuaban divididos en las votaciones aunque se solian inclinar por las propuestas de los intransigentes Los moderados constituian la derecha de la Camara y estaban liderados por Emilio Castelar y por Nicolas Salmeron y entre los que tambien destacaban Eleuterio Maisonnave y Buenaventura Abarzuza Ferrer Defendian la formacion de una republica democratica que diera cabida a todas las opciones liberales por lo que rechazaban la conversion de las Cortes en un poder revolucionario como defendian los intransigentes y coincidian con los pimargalianos en que la prioridad de las Cortes era aprobar la nueva Constitucion Constituian el grupo mas numeroso de la Camara aunque habia ciertas diferencias entre los seguidores de Castelar partidarios de la conciliacion con los radicales de Cristino Martos y Nicolas Maria Rivero que aceptaban la republica aunque en principio habian apoyado la monarquia de Amadeo I y con los monarquicos constitucionales del general Serrano y Praxedes Mateo Sagasta para incluirlos en el nuevo regimen y los seguidores de Salmeron que propugnaban que la republica solo debia fundamentarse en la alianza de los republicanos viejos A pesar de esta division no tuvieron problemas en proclamar el 8 de junio la republica federal una semana despues de que se abrieran las Cortes Constituyentes bajo la presidencia del veterano republicano intransigente Jose Maria Orense por 218 votos contra dos 24 Articulo unico La forma de gobierno de la Nacion espanola es la Republica democratica federal Retrato de Francisco Pi y Margall segundo presidente del Poder Ejecutivo de la Republica Cuando el presidente del Poder Ejecutivo Estanislao Figueras que sufria una fuerte depresion por la muerte de su mujer tuvo conocimiento de que los generales intransigentes Juan Contreras y Blas Pierrad preparaban un golpe de Estado para iniciar la republica federal desde abajo al margen del Gobierno y de las Cortes temiendo por su vida el 10 de junio huyo a Francia 25 Le sustituyo el republicano federal centrista Francisco Pi y Margall quien establecio como prioridad derrotar a los carlistas que ya llevaban mas de un ano alzados en armas en la llamada tercera guerra carlista y la elaboracion y aprobacion de la nueva Constitucion de la Republica Federal Pero enseguida el Gobierno de Pi y Margall se encontro con la oposicion de los republicanos federales intransigentes porque en su programa no se habian incluido algunas de las reivindicaciones historicas de los federales como la abolicion del estanco del tabaco de la loteria de los aranceles judiciales y de los consumos repuestos en 1870 por ausencia de recursos Pero lo que reclamaban los intransigentes era sobre todo que las Cortes mientras se redactaba y aprobaba la nueva Constitucion de la Republica democratica federal se constituyeran en Convencion de la que emanaria una Junta de Salud Publica que detentaria el poder ejecutivo propuesta que fue rechazada por Pi y Margall y por la mayoria de diputados centristas y moderados que apoyaban al Gobierno 26 La respuesta de los intransigentes a la politica de orden y progreso del Gobierno de Pi y Margall fue abandonar las Cortes el 1 de julio acusando al Gobierno de haber contemporizado e incluso claudicado frente a los enemigos de la Republica federal 27 A continuacion los intransigentes exhortaron a la inmediata y directa formacion de cantones para construir la republica de abajo arriba lo que iniciaria la rebelion cantonal Para dirigirla se formo en Madrid un Comite de Salud Publica aunque la iniciativa partio de los federales de cada localidad Si bien hubo casos como el de Malaga en que las autoridades locales fueron las que encabezaron la sublevacion en la mayoria se formaron juntas revolucionarias Dos semanas despues de la retirada de las Cortes la revuelta era un hecho en Murcia Valencia y Andalucia 28 Para acabar con la rebelion cantonal Pi y Margall se nego a aplicar las medidas de excepcion que le proponia el sector moderado de su partido que incluia la suspension de las sesiones de las Cortes El presidente confiaba en que la rapida aprobacion de la Constitucion federal lo que no sucedio y la via del dialogo que ya le habia funcionado cuando la Diputacion de Barcelona proclamo el Estado catalan en el mes de marzo haria entrar en razon a los sublevados 29 Aun asi no dudo en recurrir a la represion 30 Pero como la politica de Pi y Margall de persuasion y represion no consiguio detener la rebelion cantonal el sector moderado le retiro su apoyo el 17 de julio votando a favor de Nicolas Salmeron Al dia siguiente Pi y Margall dimitio tras 37 dias de mandato 29 El lema del nuevo Gobierno de Salmeron fue el imperio de la ley Para sofocar la rebelion cantonal tomo medidas duras como destituir a los gobernadores civiles alcaldes y militares que habian apoyado de alguna forma a los cantonalistas y a continuacion nombrar a generales aunque fueran contrarios a la Republica federal como Manuel Pavia o Arsenio Martinez Campos para que mandaran las expediciones militares a Andalucia y a Valencia respectivamente que pusieran fin a la rebelion Ademas movilizo a los reservistas aumento la Guardia Civil con 30 000 hombres nombro delegados del Gobierno en las provincias con las mismas atribuciones que el Ejecutivo Autorizo a las Diputaciones a imponer contribuciones de guerra y a organizar cuerpos armados provinciales y decreto que los barcos en poder de los cartageneros se consideraran piratas lo que suponia que cualquier embarcacion podia abatirlos estuviera en aguas espanolas o no 31 Gracias a estas medidas fueron sometidos uno tras otro los distintos cantones excepto el de Cartagena que resistiria hasta el 12 de enero de 1874 Emilio Castelar cuarto presidente del Poder Ejecutivo de la Primera Republica Espanola Nicolas Salmeron renuncio a su cargo al no querer firmar las sentencias de muerte de varios soldados acusados de traicion ya que como krausista era absolutamente contrario a la pena de muerte Para sustituirle las Cortes eligieron el 7 de septiembre a Emilio Castelar 32 Inmediatamente Castelar consiguio de las Cortes la concesion de facultades extraordinarias para acabar tanto con la guerra carlista como con la rebelion cantonal y la suspension de sus sesiones desde el 20 de septiembre de 1873 hasta el 2 de enero de 1874 lo que entre otras consecuencias supuso paralizar el debate y la aprobacion del proyecto de Constitucion federal 33 Los poderes extraordinarios que obtuvo Castelar le permitieron gobernar por decreto facultad que utilizo inmediatamente para reorganizar el Cuerpo de Artilleria disuelto entre los dias 8 y 9 de febrero al final del reinado de Amadeo I llamar a los reservistas y convocar una nueva leva con lo que consiguio un ejercito de 200 000 hombres y lanzar un emprestito de 100 millones de pesetas para hacer frente a los gastos de guerra 34 A finales de noviembre el Gobierno de Castelar ordeno al general Ceballos quien dirigia el sitio de Cartagena tras la dimision del general Martinez Campos que lo habia iniciado el 15 de agosto bombardear Cartagena con el fin de quebrantar el animo de los defensores o cuando menos molestarles para no dar lugar a que permanezcan como han permanecido completamente tranquilos El bombardeo comenzo el 26 de noviembre de 1873 sin previo aviso y se prolongo hasta el ultimo dia del asedio el 12 de enero de 1874 contabilizandose en total 27 189 proyectiles un verdadero diluvio de fuego que causo 800 heridos y 12 muertos y destrozos en la mayoria de los inmuebles solo 28 casas quedaron indemnes Fue respondido por los canones de los castillos de Cartagena y de las fragatas pero fueron mucho menos efectivos dada la dispersion de las fuerzas gubernamentales que sitiaban la plaza por tierra 35 Tras la primera semana de bombardeo en que los sitiadores se percataron de que las defensas de Cartagena seguian intactas el general Ceballos presento la dimision el 10 de diciembre fue sustituido por el general Jose Lopez Dominguez tambien un antirrepublicano y ademas sobrino del general Serrano el lider del monarquico Partido Constitucional En la entrevista que mantuvo en Madrid con Castelar este le insistio en que debia conseguir la rendicion de Cartagena costara lo que costara antes del 2 de enero la fecha prevista para la reapertura de las Cortes 36 Republica unitaria la dictadura de Serrano 1874 Editar Articulos principales Golpe de Paviay Dictadura de Serrano Entrada de las fuerzas del general Pavia en el Congreso de los Diputados en la madrugada del 3 de enero de 1874 Cuando se reabrieron las Cortes a las dos de la tarde del 2 de enero de 1874 el capitan general de Madrid Manuel Pavia tenia preparadas a sus tropas en caso de que Castelar perdiera la votacion parlamentaria 37 Pasada la medianoche se produjo la votacion de la cuestion de confianza en la que el Gobierno salio derrotado por 100 votos a favor y 120 en contra lo que obligo a Castelar a presentar la dimision 38 Entonces Pavia partio hacia el Congreso de los Diputados con los regimientos comprometidos y cuando llego la Guardia Civil que custodiaba el Congreso se puso a sus ordenes 39 Tras ordenar al presidente del Congreso de los Diputados Nicolas Salmeron que lo desalojara fuerzas de la Guardia Civil y del Ejercito entraron en el edificio del Congreso disparando tiros al aire por los pasillos y los diputados lo abandonaron rapidamente Pavia justifico el golpe afirmando que lo habia dado por la salvacion del Ejercito de la libertad y de la patria 40 El general Pavia intento que se formara un Gobierno nacional presidido por Emilio Castelar No obstante este rehuso asistir a la reunion de los lideres politicos constitucionales radicales alfonsinos y republicanos unitarios que Pavia habia convocado con tal fin los republicanos federales de Salmeron y de Pi y Margall y los intransigentes quedaron obviamente excluidos al no querer mantenerse en el poder por medios antidemocraticos En la reunion Pavia defendio la republica conservadora y por eso impuso al republicano unitario Eugenio Garcia Ruiz como ministro de la Gobernacion y nombro al general Serrano jefe del nuevo Gobierno 41 Con Serrano al frente nominalmente la Republica continuaba pero completamente desnaturalizada afirma Jose Baron Fernandez por lo que el golpe de Pavia supuso el final de facto de la Primera Republica Espanola 42 Retrato del general Serrano ultimo presidente de la I Republica desde enero hasta diciembre de 1874 El general Francisco Serrano formo un Gobierno de concentracion que agrupo a constitucionales radicales y republicanos unitarios y del que se excluyo a los republicanos federales 41 Su objetivo prioritario fue acabar con la rebelion cantonal y con la guerra carlista para luego convocar unas Cortes que decidieran la forma de gobierno 43 Quedo asi establecida la dictadura de Serrano pues no existian Cortes al haber quedado disueltas que controlaran la accion del Gobierno ni ley suprema que delimitara sus funciones porque si bien restablecio la Constitucion de 1869 a continuacion la dejo en suspenso hasta que se asegurase la normalidad de la vida politica 44 Recien formado el nuevo Gobierno se puso fin a la rebelion cantonal con la entrada en Cartagena el 12 de enero del general Jose Lopez Dominguez sustituto de Martinez Campos Las primeras medidas que tomo pusieron de manifiesto su caracter conservador como la inmediata proscripcion de la seccion espanola de Asociacion Internacional de Trabajadores la Federacion Regional Espanola fundada en 1870 por atentar contra la propiedad contra la familia y demas bases sociales 45 General Arsenio Martinez Campos El 26 de febrero Serrano marcho al norte para encargarse personalmente de las operaciones contra los carlistas dejando al general Juan de Zavala y de la Puente al frente del Gobierno y quedando el como presidente del Poder Ejecutivo de la Republica 46 Tras su exito en el levantamiento del sitio de Bilbao Serrano reforzo su posicion en el Gobierno con el nombramiento en mayo de Sagasta al frente del ministerio de la Gobernacion lo que provoco la salida de los tres ministros radicales y del unico ministro republicano el unitario Eugenio Garcia Ruiz Asi se formo un Gobierno exclusivamente constitucional que siguio presidido por el general Zavala Este fue sustituido el 3 de septiembre por Sagasta tras evitar que Zavala intentara que los republicanos volvieran al gobierno ya que en aquel momento los constitucionales propugnaban la restauracion parlamentaria y democratica del principe Alfonso Serrano nombro entonces a Andres Borrego para que negociara con los alfonsinos de Antonio Canovas del Castillo No obstante este rechazo las propuestas de los constitucionales porque suponia reconocer la Jefatura del Estado de Serrano hasta que fueran derrotados los carlistas y aceptar que la restauracion borbonica llegaria a traves de la convocatoria de unas Cortes generales extraordinarias La exreina Isabel II le escribio a su hijo Alfonso Serrano sigue empenado en su proposito de ser presidente de la Republica por 10 anos con 4 millones de reales anuales 47 El 1 de diciembre Canovas del Castillo tomo la iniciativa con la publicacion del Manifiesto de Sandhurst escrito por el y firmado por el principe Alfonso En el se definia como hombre del siglo verdaderamente liberal afirmacion con la que buscaba la reconciliacion de los liberales en torno a su monarquia y vinculaba los derechos historicos de la dinastia legitima los Borbon con el gobierno representativo y los derechos y libertades que le acompanan 48 Era la culminacion de la estrategia que Canovas habia disenado desde que asumiera la jefatura de la causa alfonsina el 22 de agosto de 1873 en plena rebelion cantonal que como le habia explicado a la exreina Isabel y al principe Alfonso en sendas cartas de enero de 1874 tras el golpe de Pavia consistia en crear mucha opinion en favor de Alfonso con calma serenidad paciencia tanto como perseverancia y energia 46 Aunque Canovas no deseaba que fuera obra de un pronunciamiento militar el 29 de diciembre de 1874 el general Arsenio Martinez Campos se pronuncio en Sagunto a favor de la restauracion de la monarquia borbonica en la persona de don Alfonso de Borbon hijo de Isabel II Serrano opto por no presentar resistencia 49 El 31 de diciembre de 1874 se formo el llamado Ministerio Regencia presidido por Canovas a la espera de que el principe Alfonso regresara a Espana desde Inglaterra En ese Gobierno estaban dos hombres de la Revolucion de 1868 y ministros con Amadeo I Francisco Romero Robledo y Adelardo Lopez de Ayala quien habia sido el redactor del manifiesto Viva Espana con honra que habia dado inicio a la revolucion 50 Referencias Editar Fontana 2007 pp 315 320 Vilches 2001 p 70 a b c Vilches 2001 p 71 Fuentes 2007 pp 229 230 Fontana 2007 p 330 El panico se extendio por todo el pais donde afecto inicialmente a sociedades de credito y a bancos que arrastraban en su caida a otras empresas que se encontraban sin liquidez y con una demanda reducida como consecuencia de la ruina de quienes habian colocado sus ahorros en obligaciones de bancos y ferrocarriles a b Fuentes 2007 p 233 Fuentes 2007 p 228 Fontana 2007 pp 347 349 Fontana 2007 pp 351 352 Fontana 2007 pp 352 353 Fontana 2007 p 354 El 30 de septiembre a las once de la manana salio para la frontera francesa en medio de la indiferencia general el tren que llevaba al exilio a la reina acompanada de su familia el rey consorte la abandonaria muy pronto para irse a vivir con Meneses y de toda su corte de los milagros Fuentes 2007 p 235 Lopez Cordon 1976 pp 39 40 a b Bahamonde 1996 pp 65 66 Fontana 2007 p 366 Lopez Cordon 1976 p 40 Lopez Cordon 1976 p 148 a b c Bahamonde 1996 pp 72 73 Lopez Cordon 1976 p 39 Albaiges Josep M 1995 Enciclopedia de los nombres propios Ed Planeta Aguado Sanchez Francisco 1984 Historia de la Guardia Civil CUPSA Editorial Fontana 2007 p 371 Vilches 2001 p 381 382 Lopez Cordon 1976 p 58 Vilches 2001 pp 382 383 Vilches 2001 p 384 385 Baron Fernandez 1998 p 89 Lopez Cordon 1976 p 67 68 a b Vilches 2001 p 387 388 Baron Fernandez 1998 p 90 170 171 Vilches 2001 p 390 391 Vilches 2001 p 394 Vilches 2001 p 394 396 Baron Fernandez 1998 p 240 Baron Fernandez 1998 p 239 242 222 Baron Fernandez 1998 p 241 247 Baron Fernandez 1998 pp 261 262 Vilches 2001 p 399 Baron Fernandez 1998 p 263 Vilches 2001 pp 399 400 a b Vilches 2001 p 402 Baron Fernandez 1998 p 266 Vilches 2001 pp 402 403 Lopez Cordon 1976 pp 71 74 Lopez Cordon 1976 p 74 a b Vilches 2001 p 403 Vilches 2001 pp 406 407 Vilches 2001 pp 409 410 Vilches 2001 pp 410 411 Vilches 2001 p 411 Bibliografia EditarBahamonde Angel 1996 Espana en democracia El Sexenio 1868 1874 Madrid Historia 16 Temas de Hoy ISBN 84 7679 316 2 Baron Fernandez Jose 1998 El movimiento cantonal de 1873 1ª Republica Sada A Coruna Edicios do Castro ISBN 84 7492 896 6 Fontana Josep 2007 La epoca del liberalismo Vol 6 de la Historia de Espana dirigida por Josep Fontana y Ramon Villares Barcelona Critica Marcial Pons ISBN 978 84 8432 876 6 Fuentes Juan Francisco 2007 El fin del Antiguo Regimen 1808 1868 Politica y sociedad Madrid Sintesis ISBN 978 84 975651 5 8 Lopez Cordon Maria Victoria 1976 La revolucion de 1868 y la I Republica Madrid Siglo XXI ISBN 84 323 0238 4 Vilches Jorge 2001 Progreso y Libertad El Partido Progresista en la Revolucion Liberal Espanola Madrid Alianza Editorial ISBN 84 206 6768 4 Predecesor Reinado de Isabel II Periodos de la Historia de EspanaSexenio Democratico Sucesor Restauracion borbonica en Espana Datos Q12411956 Multimedia Democratic Sexennium Obtenido de https es wikipedia org w index php title Sexenio Democratico amp oldid 140444643, wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

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