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Reinado de Amadeo I de España

España
Reino de España


1871-1873


Lema nacional: Plus Ultra (latín: ‘Más allá’)
Himno nacional: Marcha Granadera
Capital Madrid
Idioma oficial Castellano
Gobierno Monarquía parlamentaria
Rey
 • 1871-1873 Amadeo I
Presidente del Consejo de Ministros
 • 1870-1871 Juan Bautista Topete
 • 1872-1873 Manuel Ruiz Zorrilla
Legislatura Cortes
Período histórico Edad Contemporánea
 • Proclamación de Amadeo I 2 de enero de 1871
 • Abdicación de Amadeo I 10 de febrero de 1873
Moneda Peseta


El reinado de Amadeo I fue el primer intento en la historia de España de poner en práctica la forma de gobierno de la monarquía parlamentaria («monarquía popular» o «monarquía democrática», como se la llamó en la época), aunque se saldó con un sonoro fracaso ya que solo duró dos años (del día 2 de enero de 1871, en que fue proclamado como rey Amadeo I por las Cortes Constituyentes, al día 10 de febrero de 1873, en que presentó su abdicación).

Entre las razones del fracaso se suele aducir el hecho de que el mismo día de la llegada a España del nuevo rey moría en Madrid el general Prim, víctima de un atentado que se había producido tres días antes. Prim, además de ser el principal valedor del nuevo monarca, era el líder del Partido Progresista, la fuerza política más importante de la coalición monárquico-democrática y cuya muerte abrió la pugna por la sucesión entre Práxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla que a la larga acabó provocando la «traumática descomposición» de aquella coalición destinada a ser el sostén de la monarquía amadeísta.[1]​ Como apuntó la historiadora Mª Victoria López-Cordón, «la deserción de las [fuerzas] que deberían haberla sustentado hizo imposible la experiencia».[2]​ Por otro lado, la monarquía de Amadeo I no consiguió integrar a los grupos políticos de oposición que no reconocían la legitimidad del nuevo rey y que siguieron defendiendo su propio proyecto político —la República, la monarquía carlista o la monarquía alfonsina—.

El reinado de Amadeo I forma parte del período del Sexenio Democrático (1868-1874), que comienza con la Revolución de 1868 y que termina con la también fracasada Primera República Española (1873-1874).

La elección de Amadeo de Saboya como rey de España

 
Prim, Serrano y Topete subastan la Corona española, La Flaca (1869).

Encontrar un rey se convirtió en un grave problema interno —las fuerzas políticas que habían derribado a Isabel II no se ponían de acuerdo en quién debería sustituirla: el duque de Montpensier, los unionistas; Fernando de Sajonia-Coburgo, los progresistas—[3]​ y también internacional, pues se desataron las rivalidades entre las principales potencias europeas (todas ellas monarquías) para "colocar" cada una de ellas a "su" candidato en el trono vacante de la Corona de España. El gobierno español anunció la candidatura del príncipe prusiano Leopoldo de Hohenzollern-Sigmaringen, pero pronto encontró la negativa de Napoleón III que, en plena rivalidad con Prusia, entendía como una amenaza próxima el hecho de que dos territorios fronterizos con Francia estuviesen encabezados por miembros de la misma casa real. Incluso de aquí nació el pretexto para el inicio de la guerra francoprusiana de 1870-1871 [y cuyo resultado fue la victoria prusiana (a raíz de la cual nacería el Imperio Alemán), el destronamiento de Napoleón III y la proclamación de la Tercera República Francesa]. Igualmente Napoleón III se opuso a la candidatura de Antonio de Orleans, duque de Montpensier, dado el antagonismo entre las casas dinásticas francesas [los Bonaparte y los Orleans]; además el entronque familiar de Montpensier con los Borbones (era cuñado de la destronada Isabel II) hizo que esta opción fuera muy poco apoyada por los partidos monárquicos-democráticos españoles. Solo quedaba la candidatura italiana de la casa de Saboya, impulsada por Prim desde el verano de 1870 hasta convertirse en su principal valedor.[4]

El 16 de noviembre de 1870 las Cortes Constituyentes eligieron al duque Amadeo de Aosta, segundo hijo del rey de Italia Víctor Manuel II, como nuevo rey de España, con el nombre de Amadeo I. Votaron a favor 191 diputados, en contra 100 y hubo 19 abstenciones —60 votaron por la república federal, 27 por Alfonso, duque de Montpensier, y 8 por el general Espartero—.[5]​ “La solución no satisfacía más que a los progresistas y fue aceptada con enorme frialdad por la opinión pública española, que no llegó a sentir nunca el menor entusiasmo por el príncipe italiano”.[6]​ El padre Luis Coloma en su famosa novela Pequeñeces hizo referencia a una “grotesca sátira” titulada “El Príncipe Lila” que se celebró en los jardines del Retiro de Madrid, “en la que designaban al monarca reinante con el nombre de Macarroni I” “mientras un gentío inmenso de todos los colores y matices aplaudía”.[7]

El primer año

 
Amadeo I frente al féretro del general Prim. Obra de Antonio Gisbert, 1871.

El reinado de Amadeo I “no pudo abrirse con peores pronósticos” porque nada más desembarcar en España el 30 de diciembre de 1870 le comunicaron la noticia de que el general Prim, su principal valedor, había muerto víctima de un atentado que había tenido lugar en Madrid tres días antes cuando se dirigía del Congreso a su domicilio. Este hecho privó a Amadeo I de un apoyo indispensable, sobre todo en los primeros momentos, y que habría sido decisivo si tenemos en cuenta que el progresismo acabó escindido entre los dos herederos de Prim, Práxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla.[8]

El nuevo rey entró en Madrid el 2 de enero de 1871 y ese mismo día juró la Constitución de 1869 ante las Cortes.[9]​ Más tarde se dirigió a la iglesia de la Virgen de Atocha donde se había instalado la capilla ardiente del general Prim, momento que inmortalizó el pintor Antonio Gisbert.[10]

El gobierno del general Serrano: el fracaso de la "conciliación"

Tras el asesinato del general Prim se había formado un gobierno de "conciliación" presidido por el Almirante Topete, petición de Prim en su lecho de muerte.[10]​ En esta misma línea Amadeo I propuso a las Cortes como nuevo presidente del Consejo de Ministros al “unionista” general Serrano, que desde la promulgación de la Constitución de 1869 hasta el juramento del nuevo rey había sido el regente, para que formara un gobierno de "conciliación". Serrano cumplió las instrucciones del rey y formó un gobierno con todos los líderes de los grupos que integraban la coalición monárquico-democrática que sustentaba a la nueva monarquía: los progresistas Sagasta, que ocupó el ministerio de Gobernación, y Ruiz Zorrilla, Fomento; el demócrata monárquico o “cimbrioCristino Martos; o el ”unionista” Adelardo López de Ayala, en Ultramar.[11][12]

El primer cometido del gobierno de Serrano, que algunos de sus miembros consideraban de “transición”, fue preparar las primeras elecciones de la nueva Monarquía, con el fin de obtener una cómoda mayoría para la coalición gubernamental. Para ello se promulgó una ley electoral que volvió al viejo sistema moderado de los distritos en lugar de las circunscripciones provinciales, que había sido el sistema defendido hasta entonces por los progresistas y que había sido el utilizado en las elecciones constituyentes del 1869. Con este cambio el gobierno podía ejercer más fácilmente su “influencia moral” en la mayoría de los distritos que eran rurales. El objetivo de obtener una mayoría clara se cumplió aunque “la oposición [integrada por carlistas y republicanos federales] consiguió un elevado número de diputados que pesaba todavía más en las Cortes debido a la debilidad de la coalición gubernamental”.[13]

La coalición gubernamental obtuvo 235 escaños —unos 130 eran progresistas, más de 80 eran unionistas "fronterizos" o "aostinos" y unos 20 eran demócratas monárquicos—, los republicanos 52, los carlistas 51 y 18 los moderados. Por su parte los unionistas disidentes de Ríos Rosas, que seguían defendiendo la candidatura del duque de Montpensier, y los de Antonio Cánovas del Castillo, que defendían los derechos del príncipe Alfonso de Borbón, hijo de la reina destronada Isabel II, obtuvieron siete y nueve escaños respectivamente.[14]

Cuando el gobierno del general Serrano, y las Cortes tuvieron que acometer el desarrollo legislativo de los principios democráticos establecidos en la Constitución de 1869 (el jurado o la separación de la Iglesia y el Estado, por ejemplo) o afrontar los problemas que se iban planteando (la abolición de las quintas; la guerra y la abolición de la esclavitud en Cuba; la conflictividad social protagonizada por jornaleros y obreros; etc.) surgieron las fricciones. "Los unionistas fronterizos y los progresistas sagastinos pensaban que, coronada la Constitución con la dinastía Saboya, debía hacerse una política que conservara lo existente. Los demócratas y progresistas de Ruiz Zorrilla creían que la consolidación de lo conseguido dependía del establecimiento inmediato de un programa de reformas sociales, económicas y políticas".[15]

Así pues, el enfrentamiento entre Sagasta y Ruiz Zorrilla se debió a sus diferencias en cuanto a la forma de afianzar la nueva monarquía parlamentaria. Sagasta, siguiendo la política que seguramente habría defendido el general Prim, propugnaba la conciliación con los "unionistas" del general Serrano, que serían los destinados a formar el partido de la derecha dinástica —el partido conservador— mientras el propio Sagasta al frente del Partido Progresista formaría la izquierda dinástica, el partido liberal, y al mismo tiempo propugnaba una política implacable con los enemigos del régimen, los carlistas y los republicanos federales. Por el contrario Manuel Ruiz Zorrilla defendía mantener la alianza de los progresistas con los demócratas monárquicos o "cimbrios" mediante la aplicación de una política reformista avanzada que en último término buscaría integrar en la nueva monarquía parlamentaria a los republicanos, al hacerles ver que dentro de ella también podían alcanzar sus objetivos. Para Sagasta esta política era poner la monarquía en manos de sus enemigos e incluso desconfiaba del compromiso con la misma de Ruiz Zorrilla y de sus seguidores, y por eso rechazaba de plano la colaboración parlamentaria con los republicanos, que sí defendía Ruiz Zorrilla.[16]

La oposición a la Monarquía de Amadeo I

La alta nobleza y la jerarquía eclesiástica no reconocieron a la nueva monarquía amadeísta. En principio porque era la institucionalización de la Revolución de 1868 que había puesto fin a la Monarquía isabelina en la que gozaban de una posición privilegiada y porque temían que el nuevo poder iba a acabar con ellos o que iba a ser la antesala de republicanos y de “socialistas” contrarios a la propiedad y al Estado confesional. La alta nobleza adoptó una postura casticista, arrogándose la defensa de unos supuestos valores nacionales frente al “rey extranjero”, que se tradujo en el boicot a la corte y en los continuos desaires a la persona del rey Amadeo, ante el que no disimulaban su fidelidad a los borbones destronados.[17]​ El episodio más conocido fue la llamada “Rebelión de las Mantillas” que relató el padre Luis Coloma en su conocida novela Pequeñeces:[18]

Ellas, con sus alardes de españolismo y sus algaradas aristocráticas, habían conseguido hacer el vacío en torno de Don Amadeo de Saboya y la reina María Victoria, acorralándolos en el Palacio de Oriente, en medio de una corte “cabos furrieles y tenderos acomodados”, según la opinión de la duquesa de Bara; de “indecentillos”, añadía Leopoldina Pastor, que no llegaban siquiera a indecentes. Las damas acudían a la Fuente Castellana, tendidas en sus carretelas, con clásicas mantillas de blonda y peineta de teja, y la flor de lis, emblema de la Restauración, brillaba en todos los tocados que se lucían en teatros y saraos

Por su parte la jerarquía eclesiástica veía en el rey Amadeo al hijo del rey de Italia Víctor Manuel II que había “despojado” al Papa Pío IX de los Estados Pontificios; y además se oponía a la libertad de cultos y a otras medidas que podían culminar con la completa separación de la Iglesia y el Estado.[17]​ Y hay que tener presente que “la jerarquía, investida del espíritu intolerante y combativo que le había proporcionado el Syllabus, ejercía una notoria influencia no sólo en las clases medias, en su mayoría católicas, sino también en el mundo rural, donde el párroco se constituía muchas veces en intérprete de los sucesos que llegaban de fuera”.[7]

El vacío de la “vieja nobleza” lo intentó llenar Amadeo I con el ennoblecimiento de miembros de la burguesía industrial y financiera que sí apoyó a la nueva monarquía democrática, aunque también en este grupo social hubo deserciones sobre todo por parte del sector más ligado al tema cubano, debido a los proyectos abolicionistas de la esclavitud en Cuba y Puerto Rico de los gobiernos radicales,[19]​ y de la burguesía industrial catalana que se oponía al librecambismo puesto en marcha en 1869 y que los radiciales continuaban defendiendo.[20]

 
Caricatura de La Flaca de agosto de 1869 en la que aparece el político neocatólico Cándido Nocedal como Sancho Panza y el pretendiente carlista Carlos VII como Don Quijote. La Iglesia católica aparece como telón de fondo.

Los carlistas, que desde 1868 habían experimentado un auge sin precedentes ampliando su influencia más allá de sus feudos tradicionales en el País Vasconavarro, el interior de Cataluña y el norte de Valencia, reivindicaban la monarquía tradicional, encarnada en la figura del pretendiente Carlos VII (nieto de Carlos María Isidro de la Primera Guerra Carlista). Al principio tuvo más peso el sector “neocatólico” encabezado por Nocedal que defendía la “vía legal”, es decir, alcanzar un gran peso en las Cortes a través de las elecciones, llegándose a presentar en coalición con los republicanos en las primeras elecciones a Cortes ordinarias y consiguiendo un buen resultado con 51 diputados y 21 senadores.[19]​ “La elección de Amadeo I les irritó profundamente y a partir de ese momento sólo la influencia que Nocedal y el ala legalista ejercieron sobre don Carlos pudieron contener levantamientos prematuros. […] En septiembre de 1871, don Carlos, quizá contra sus propios deseos, tuvo que frenar una vez más a sus partidarios”.[21]

Los republicanos se oponían a cualquier tipo de monarquía y continuaban defendiendo la República Federal, algo que veían a su alcance tras la caída del Segundo Imperio en Francia. Pero en el Partido Republicano Federal convivían bajo “el manto mítico de la República” diversos proyectos políticos, desde los defensores a ultranza del derecho de propiedad hasta “socialistas”, y desde los que propugnaban la república “unitaria” —un sector minoritario encabezado por Emilio Castelar— hasta los que defendían el Estado Federal siguiendo el modelo de Estados Unidos y de Suiza que constituían el sector mayoritario, con Francisco Pi y Margall y Nicolás Salmerón a su frente. También, como en el carlismo, existía la oposición entre los partidarios de la “vía legal”, que no rehusaban la colaboración con los radicales de Ruiz Zorrilla, frente a los se que decantaban por la “vía insurreccional”.[22]

El primer gobierno de Ruiz Zorrilla: la división de los progresistas

El 15 de julio de 1871 los ministros demócratas y progresistas "radicales" Martos, Ruiz Zorrilla, Beránger y Moret dimitieron para poner fin al gobierno de "conciliación" de Serrano, dar paso al "deslinde de los campos" entre conservadores y radicales de la coalición gubernamental y formar un gobierno homogéneo. El rey, que seguía siendo partidario de la "conciliación", no tuvo más remedio entonces que nombrar el 24 de julio como nuevo presidente del gobierno a Manuel Ruiz Zorrilla. "Esta solución supuso la derrota de los unionistas, pero también la de Sagasta y los suyos en su proyecto de mantener la unión mientras el nuevo régimen peligrara".[23]

 
Revista de tropas en Madrid por parte de Amadeo I, dibujo de Daniel Urrabieta Vierge publicado en Le Monde Illustré el 9 de septiembre de 1871.

En principio Ruiz Zorrilla intentó que entraran en su gobierno los progresistas de Sagasta pero este se negó porque, como explicó en el Congreso, el régimen no podía salvarse con una política «exclusiva de partido».[24]​ Entonces Manuel Ruiz Zorrilla formó gobierno únicamente con los progresistas de su facción y con los demócratas y en el que él mismo asumió la cartera de Gobernación, con Eugenio Montero Ríos en Gracia y Justicia, el general Fernando Fernández de Córdova en Guerra, Servando Ruiz Gómez en Hacienda, Santiago Diego Madrazo en Fomento, Tomás María Mosquera en Ultramar, y el vicealmirante José María Beránger en Marina. Cristino Martos no aceptó el ministerio de Estado y no formó parte del gobierno, que presentó su programa ante las Cortes el 25 de julio y cuyo lema fue «libertad, moralidad, civismo».[25]

Los demócratas consiguieron que Ruiz Zorrilla nombrara a Salustiano Olózaga, presidente del Congreso de Diputados, embajador en París y que a continuación presentara a líder demócrata Nicolás María Rivero para que ocupara el puesto que había quedado vacante. Ante esta maniobra los progresistas "sagastinos" propusieron al propio Sagasta para el puesto, intentando evitar así que un miembro destacado del grupo de los demócratas, a los que consideraban más cercanos a la República que a la Monarquía, lo ocupara. Ruiz Zorrilla y Sagasta se reunieron el 1 y el 2 de octubre de 1871 para evitar la ruptura del partido progresista pero la oferta de Sagasta de retirar las dos candidaturas y pactar un candidato de consenso fue rechazada por Ruiz Zorrilla porque ello supondría que los demócratas se unirían a los republicanos acabando con su proyecto reformista "radical" para afianzar la monarquía. Durante esa conversación Sagasta le dijo a Ruiz Zorrilla:[26]

Puesto tú en la alternativa de eliminar a los cimbrios —los demócratas— o de dividir al Partido Progresista, una parte del cual quiere que su credo prevalezca y se ejecute fielmente, tú no has vacilado, te quedas con los cimbrios y rompes con tus amigos de siempre; las consecuencias serán funestas para todos, pero la culpa no es mía

En la votación para la presidencia del Congreso celebrada el 3 de octubre ganó Sagasta a Rivero por 123 votos contra 113 —solo hubo dos votos en blanco—, por lo que a continuación Ruiz Zorrilla, que entendió el resultado como un voto de censura al gobierno, presentó la dimisión.

El rey Amadeo I acababa de volver de un viaje que había realizado por varias provincias del este de España junto a su esposa y que había sido organizado por el gobierno para aumentar su popularidad y en el que había pasado por Logroño para visitar al general Espartero —que estaba retirado aunque seguía gozando de una enorme popularidad entre los liberales progresistas que lo consideraban su "patriarca"— y quien le aseguró su lealtad porque había sido elegido por la "voluntad nacional". Cuando Amadeo I se entrevistó con Ruiz Zorrilla éste le pidió que disolviera las Cortes y convocara nuevas elecciones, a lo que el rey se negó porque no vio ninguna razón constitucional o parlamentaria para hacerlo —no había perdido la mayoría parlamentaria que lo apoyaba ni había habido formalmente ningún voto de censura contra el mismo—, valoración que vio confirmada cuando se entrevistó con Sagasta quien le aseguró que él y sus seguidores seguían apoyando el programa que el gobierno había presentado el 25 de julio, por lo que le pidió al rey que hiciera entrar en razón a Ruiz Zorrilla para que continuara al frente del consejo de ministros.[27]

El gobierno de Malcampo: el fracaso de la reunificación de los progresistas

 
Contralmirante José Malcampo, presidente del gobierno entre el 5 de octubre y el 21 de diciembre de 1871

Como Ruiz Zorrilla no cambió de opinión, entonces el rey, después de recibir la negativa del general Espartero para presidir el nuevo gobierno alegando su avanzada edad, encargó la formación de gobierno a Sagasta pero éste le propuso, para que no pareciera que hacía oposición a Ruiz Zorrilla, que nombrara en su lugar a otro progresista de su grupo, el contralmirante José Malcampo —un marino que había acompañado al vicealmirante Topete en la Revolución de 1868, "lo que le daba prestigio y autoridad revolucionarias, y se creía difícil que se le pudiera calificar como «reaccionario» por los radicales, presunción inocente en la que fallaron"—.[28]​ Su gobierno sirvió de puente al que finalmente encabezó el propio Sagasta el 21 de diciembre de 1871,[29]​ pero el partido progresista, la principal fuerza política que sustentaba a la Monarquía de Amadeo I, se había roto en dos: un sector más conservador y cercano a los planteamientos de la Unión Liberal encabezado por Práxedes Mateo Sagasta, y otro más avanzado encabezado por Manuel Ruiz Zorrilla, que se autodenominaba "progresista democrático" o también Partido Radical y que integraba a los demócratas monárquicos o “cimbrios” liderados por Cristino Martos y por Nicolás María Rivero.[30]

El sector progresista encabezado por Sagasta no abandonó la idea de lograr la reunificación del Partido Progresista pero sobre la base de su programa "histórico" que anteponía la soberanía nacional a los derechos individuales por lo que estos podrían ser regulados por las Cortes para asegurar la compatibilidad entre la libertad y el orden, mientras que los demócratas y los "zorrillistas" defendían la ilegislabilidad de los mismos y que de las extralimitaciones en su uso se ocuparan los tribunales de justicia. De esta forma lo que Sagasta pedía a Ruiz Zorrilla es que abandonara su alianza con los demócratas o que estos aceptaran la superioridad del principio de la soberanía nacional. Por eso Sagasta entendió el gobierno de Malcampo como un «Ministerio de transición» a la espera de la reunificación progresista y por eso también los ministros del gabinete eran exclusivamente progresistas —no se incluyó ningún miembro de la Unión Liberal— y el programa de gobierno que presentó en las Cortes el nuevo presidente fue el mismo que había propuesto Ruiz Zorrilla el 25 de julio.[31]

Sin embargo la primera respuesta de los "zorrillistas" fue proclamar unilateralmente a su líder como "jefe activo del Partido Progresista democrático", reconociendo como "jefe pasivo" del mismo al general Espartero —Manuel Ruiz Zorrilla seguía convencido de que "con reformas económicas y sociales, acercaría la monarquía democrática al pueblo, alejándolo del federalismo y del socialismo, y haría que en un futuro cercano la benevolencia republicana se transformara en fusión en el partido liberal"—.[32]​ Ante esta iniciativa los progresistas de Sagasta constituyeron el 20 de octubre su propia Junta directiva del Partido Progresista democrático, con lo que se formalizó la ruptura del mismo. Los intentos de algunos grupos y de personalidades progresistas como Ángel Fernández de los Ríos de recomponer la unidad del partido fracasaron —la apelación a los viejos líderes como Salustiano Olózaga o el general Espartero tampoco funcionó porque ambos se decantaron por el sector de Sagasta?—.[31]

El debate en las Cortes sobre la ilegalización de la sección española de la AIT
 
Emblema del Consejo Federal de España de la AIT.

Una oportunidad para la reunificación se planteó cuando el gobierno de Malcampo, deseoso de mostrar al país que la monarquía democrática no era sinónimo de desorden o de «anarquía mansa», propuso a la Cortes que votaran a favor de la ilegalización de la sección española de la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT) que se había fundado en junio del año anterior en un congreso celebrado en Barcelona, al considerarla fuera de la Constitución. El motivo de fondo era la enorme repercusión que había tenido la insurrección obrera de la Comuna de París de marzo-mayo de 1871 y que había extendido el temor al “socialismo” entre las clases propietarias de toda Europa —de hecho cuando en la festividad del 2 de mayo los internacionalistas intentaron celebrar un banquete de confraternidad entre españoles y franceses fue disuelto por la “partida de la porra”, “que el gobierno utilizaba para llevar la violencia más allá de los límites que fijaba la ley”—.[33][34]

Los unionistas de Serrano y los progresistas del sector de Sagasta, que apoyaban al gobierno, estaban a favor de la ilegalización, postura a la que también se sumaron los diputados carlistas porque consideraban a los internacionalistas los «enemigos de la sociedad» , mientras que los republicanos estaban en contra porque defendían el inalienable derecho de asociación y veían la medida como obra de la «reacción». El problema se planteó en el seno del grupo de Ruiz Zorrilla porque, por un lado, estaban de acuerdo con los republicanos en que el derecho de asociación debía prevalecer, pero por otro lado no querían que las clases medias y conservadores, e incluso por el propio rey, los vieran como defensores del "desorden" que personificaban los internacionalistas y que se había manifestado en la Comuna de París. La solución final que adoptó Ruiz Zorrilla fue no apoyar al gobierno de Malcampo, pero tampoco a los republicanos, por lo que optó por la abstención, perdiéndose así una última oportunidad para la reunificación de los progresistas. Para el historiador Jorge Vilches, este momento fue decisivo porque el voto a favor del gobierno, "habría hecho posible la conversión del progresista en el partido liberal que turnase con los unionistas transformados en los conservadores constitucionales. Este sistema de partidos podría haber dado mayor estabilidad que el que pretendía [Ruiz Zorrilla], y, por consiguiente, culminar con éxito el intento de afianzar en España una monarquía constitucional que asegurara la libertad y el orden". El 10 de noviembre de 1871 tuvo lugar la votación en las Cortes, en la que 192 diputados —unionistas, progresistas "sagastinos" y carlistas— se manifestaron a favor de la prohibición de la AIT y 38 en contra —los republicanos federales—.[35]

Sin embargo, la prohibición de la AIT votada en las Cortes no llegó a aplicarse a causa de la intervención del fiscal del Tribunal Supremo que insistió en que la Constitución de 1869 al reconocer el derecho de asociación amparaba a la AIT. Así pues la sección española de la AIT pudo continuar con sus actividades consiguiendo extenderse fuera de Cataluña, especialmente entre los jornaleros de Andalucía y los obreros y artesanos de Valencia y Murcia, y celebrando su segundo Congreso en Zaragoza en abril de 1872, en el que se impusieron las tesis bakuninistas, lo que quedó confirmado en el Congreso de Córdoba celebrado entre el 25 de diciembre de 1872 y el 3 de enero de 1873.[36]

Voto de censura al gobierno y suspensión de las Cortes

El 13 de noviembre, solo tres días después de su derrota en la votación de la ilegalización de la AIT, los radicales de Ruiz Zorrilla presentaron un voto de censura contra el gobierno de Malcampo, al que un periódico "zorrillista" calificó de "Ministerio pirata", aduciendo que se había apropiado indebidamente del gobierno. La razón última de la decisión era que pretendían acceder al gobierno antes de que el de Malcampo pudiera convocar elecciones y obtener una mayoría en el Congreso, ya que estaba a punto de finalizar el plazo de cuatro meses que la Constitución fijaba entre elección y elección. Los carlistas vieron su oportunidad y presentaron un moción sobre asociaciones religiosas esperando que se sumaran a ella los republicanos y los radicales y así derribar al gobierno, en lo que estaban de acuerdo los tres grupos. Cuando el 17 de noviembre las votaciones mostraron que el gobierno se encontraba en minoría en las Cortes, pues solo encontró el apoyo de los progresistas "históricos" de Sagasta y los "unionistas" que sumaron 127 diputados frente a los 166 de carlistas, radicales y republicanos, el gobierno consiguió del rey el decreto de suspensión de las Cortes y Malcampo no se vio obligado a dimitir. "El rey explicó a su padre [el rey de Italia], que había firmado el decreto por el escándalo que había producido la unión de los radicales con los antidinásticos [carlistas y republicanos]. [...] Cuando se levantó la sesión, los federales gritaron: «¡Viva la República!»". Algunos radicales llegaron a calificar la decisión del rey, aun reconociendo que era constitucional, como «golpe de estado».[37]

Elecciones municipales

Los radicales continuaron con su oposición frontal al gobierno y en las elecciones municipales del 9 de diciembre se volvieron a coaligar con los partidos antidinásticos, aunque esta vez solo con el Partido Republicano Federal. El resultado de las elecciones, en las que la abstención fue alta —entre el 40 y el 50%—, fue muy controvertido pues todos los partidos se atribuyeron la victoria. El diario "zorrillista" El Imparcial afirmó que el gobierno había sido derrotado porque de los 600 municipios importantes, solo 200 había sido ganados por los ministeriales, mientras que los otros 400 habían sido ganados por los contrarios al gobierno —250 los radicales, 180 los republicanos y 50 los carlistas—. En cambio si solo se contabilizaban las capitales de provincia el resultado había sido favorable al gobierno, como así se apresuró a presentárselo al rey el ministro de la Gobernación, pues los candidatos gubernamentales habrían ganado en 25 —entre ellas Barcelona, Sevilla, Cádiz y Málaga— mientras que los opuestos al gobierno habrían sumado 22 ?—de ellas los radicales solo 3, aunque una era Madrid, mientras los republicanos conseguían 14, entre ellas Valencia, La Coruña y Granada, y los carlistas 5—. Así que el rey no hizo caso a los requerimientos de Ruiz Zorrilla para que le entregara el poder a él con el argumento de que el gobierno había sido derrotado en las elecciones.[38]

El fin del gobierno Malcampo y el nombramiento de Sagasta

Tras las elecciones municipales el rey dio un plazo de una semana al gobierno para que reabriera las Cortes, siendo consciente de que cuando esto sucediera el gobierno se vería obligado a dimitir. Por eso aseguró a los líderes políticos que su sustituto, al que concedería el decreto de disolución de las Cortes y la convocatoria de nuevas elecciones, sería aquel que reuniera el «maggior numero di voti dinastici» [el que obtuviera el mayor número de votos de los partidos dinásticos], con lo que invalidaba las maniobras de radicales, republicanos y carlistas para sumar sus diputados para derribar al gobierno. Finalmente, Malcampo, que desde el 17 de noviembre no veía sentido a la continuidad de su gobierno pues cada vez estaba más lejana la posibilidad de reunificar el partido progresista, dimitió el 19 de diciembre anticipándose a la reapertura de las Cortes. El designado para sustituirle fue Práxedes Mateo Sagasta, siguiendo la práctica parlamentaria de que cuando un presidente del gobierno dimitía sin causa constitucional o pérdida de la mayoría, le debía sustituir el presidente del Congreso. Sagasta formó su gobierno dos días después.[39]

El segundo año

“Si en 1871 se habían sucedido las crisis gubernamentales, en 1872 la insistencia de esas mismas crisis redundó en un progresivo deterioro de la vida política y parlamentaria. Un desequilibrio político de efectos nefastos para la monarquía de Amadeo I”.[40]

El gobierno de Sagasta: los conservadores constitucionales en el poder

En principio Sagasta ofreció una amplia participación en su gobierno a los radicales de Ruiz Zorrilla —cuatro carteras, la mitad del gabinete— pero estos rechazaron la oferta, porque eso supondría separarse de los demócratas y la ruptura del pacto de benevolencia con los republicanos —en el encuentro que mantuvieron Sagasta y Ruiz Zorrilla, éste le contestó que él ya era algo más que progresista, era radical—. Sagasta se vio entonces obligado a buscar la alianza con los unionistas del general Serrano que se integraron en su gobierno, aunque con una sola cartera, la de Ultramar, que ocupó el almirante Topete. El resto eran progresistas "históricos" incluido el anterior jefe de gobierno el contraalmirante José Malcampo que se encargó de las carteras de Guerra y de Marina: Bonifacio de Blas, Santiago de Angulo, Francisco de Paula Angulo y Alonso Colmenares.[41]

En la presentación del nuevo gobierno ante las Cortes el 22 de enero de 1872 lo definió como progresista conservador, pues pretendía mantener los derechos de la Constitución al tiempo que el cumplimiento de los deberes inherentes a ellos. Después de defender la Monarquía "como un fundamento esencial de las libertades públicas" concluyó proponiendo un sistema de partidos leales y benevolentes, sin políticas extremas o excluyentes, sino conciliadoras, "más progresivo el uno, menos progresivo el otro; pero liberal conservador el uno y conservador liberal, el otro". En la votación el gobierno salió derrotado, pero como obtuvo más votos dinásticos a favor que en contra, el rey cumplió su palabra y le otorgó a Sagasta el decreto de disolución de las Cortes para que convocara nuevas elecciones, a fin de asegurarse una mayoría sólida en la cámara que le permitiera gobernar. La respuesta de Ruiz Zorrilla se puede resumir en la consigna «¡Radicales a defenderse!» y en la exclamación: «¡Dios salve al país! ¡Dios salve a la dinastía! ¡Dios salve a la libertad!». Los republicanos fueron mucho más lejos al afirmar: que «el rey ha roto con el Parlamento, que hoy acaba la dinastía de Saboya».[42]

Los radicales atribuyeron la decisión del rey a la existencia de una supuesta "camarilla" en la corte, que como en los tiempos de Isabel II, estaba conjurada para impedirles el acceso al poder. Según ellos estaba formada por los consejeros italianos del monarca Dragonetti y Ronchi y por los conservadores que visitaban al rey y por los "neocatólicos" que influían en la muy católica reina María Victoria. Así al día siguiente de ser confirmado Sagasta al frente del gobierno, Ruiz Zorrilla criticó la decisión del rey en las Cortes e hizo un alegato en favor del «derecho a la insurrección» porque creía que las libertades estaban amenazadas. "Amadeo I dejó de ser intocable para los periódicos radicales... El despecho fue tal que a la habitual comida que los viernes daba el rey en palacio comenzaron a faltar todos los líderes radicales invitados aludiendo indisposición, salvo Moret". En una reunión electoral celebrada en Madrid el 2 de febrero José Echegaray dijo que había que abrir las ventanas del Palacio de Oriente para le oreara el aire de la libertad, y en un artículo de fondo del diario El Imparcial del 22 de febrero se decía que el partido radical "desdeñado continúa [por el rey], como desdeñado fue siempre", equiparando así las monarquías de Amadeo I y de Isabel II. El gobierno de Sagasta fue calificado como "Ministerio reaccionario".[43]

En una carta escrita a su padre el radical Francisco Salmerón, que era uno de los progresistas "exaltados" que más había defendido la alianza del Partido Progresista con los demócratas "cimbrios", decía en enero de 1872:

Palacio no es hostil, pues el Rey se da las delicias de las cortesanas; y la Reina hacia política neo. El infame Sagasta hace implacable guerra a los radicales; y los villanos pseudo-conservadores explotan su saña, para absorberle, y fascinan al Rey para hundirle. Nosotros los radicales, vamos a la lucha electoral con la evidencia de una derrota; luego presenciaremos retraídos el cataclismo que preparan las iniquidades del Gobierno, las ingratitudes del Monarca, las perfidias unionistas y los sagastistas furibundos. Al fin se hará la luz; lo que ignoro es quién sobrenadará en el diluvio
El nacimiento del Partido Constitucional y de la "coalición nacional"
 
La coalición nacional - ¡¡A las urnas!!, caricatura de José Luis Pellicer publicada el 10 de marzo de 1872 en Gil Blas, en la que aparecen representados en primer plano Martos, Pi y Margall y Ruiz Zorrilla y en segundo plano el «alfonsismo» y el «carlismo».

Para preparar las elecciones los progresistas de Sagasta y los unionistas formaron un comité electoral conjunto que hizo público un manifiesto en el que se resumía el programa de gobierno presentado el 22 de enero. Los unionistas lo entendieron como el primer paso para formar un único partido, pero Sagasta se resistía porque pretendía formar un «tercer partido» entre unionistas y radicales que atrajera «lo mejor de ambos bandos», manteniendo así viva la idea de reunificar el progresismo. El rey intervino y para que se le entendiera, al no hablar bien el castellano, le pidió al unionista José Luis Albareda, que visitaba al rey con asiduidad, que le escribiera un "papelito" en el que propugnaba la formación de un Partido Conservador que se alternaría con el Partido Radical en el poder cuando así lo decidieran los electores. De esta forma cerraba la puerta al "tercer partido" y Sagasta, que inicialmente presentó la dimisión al sentirse desautorizado por el rey, se vio obligado a aceptar la fusión al amenazar el rey con entregar el poder al Partido Radical. Así nació el 21 de febrero de 1872 el nuevo partido que se llamó Partido Constitucional porque su objetivo era la defensa de la dinastía y de la Constitución, e inmediatamente se remodeló el gobierno integrado por cuatro progresistas, además de Sagasta, y tres unionistas. El eslogan del nuevo Partido Constitucional en las elecciones de 2 de abril fue «Libertad, Constitución de 1869, dinastía de Amadeo I e integridad del territorio».[44]

Por su parte el Partido Radical, en su afán de derribar al gobierno, extendió la "coalición nacional" que había formado con los republicanos con motivo las elecciones municipales de diciembre de 1871 al otro partido antisistema, el carlista, con el objetivo común, sin que ninguno de los tres partidos renunciara a sus principios, de "vencer al Gobierno fruto de la inmoralidad y de la mentira" porque "la libertad y la honra de patria... están por encima de todo". Más tarde el Partido Moderado también se sumó a la coalición. Durante la campaña se recurrió a la retórica patriótica como el de "España libre e independiente" en alusión al origen italiano del rey o como el argumento que utilizó el republicano Emilio Castelar para convencer a sus compañeros de partido de que apoyaran la "coalición nacional" afirmando que se formaba para "defender el gobierno de España por los españoles" y que en el manifiesto electoral republicano del 29 de marzo se convirtió en el eslogan "España para los españoles". Los partidos de la "coalición nacional" se comprometieron a presentar un único candidato por distrito —el del partido que hubiera obtenido mejores resultados en las anteriores elecciones— y votarles todos a él.[45]

Las elecciones de abril de 1872

El resultado de las elecciones generales de abril de 1872 fue una victoria aplastante para los constitucionales —consiguieron la mayoría absoluta, con más diputados de procedencia unionista que progresista, lo que favoreció el liderazgo de general Serrano frente a Sagasta— gracias a que el gobierno ejerció su "influencia moral" —el constitucional Andrés Borrego lo justificó diciendo que el gobierno no tenía más remedio que «oponer a la audacia de las oposiciones, la audacia de las administraciones»—, a pesar de que el rey le había pedido a Sagasta limpieza, a lo que éste le había respondido que las elecciones serían «todo lo puras que pueden serlo en España». Republicanos y carlistas perdieron diputados —lo que fortaleció a sus respectivas alas intransigentes que se habían opuesto a la participación en las elecciones—, pero los grandes derrotados fueron los radicales que solo obtuvieron 42 escaños, por debajo incluso de los republicanos —lo que puso en cuestión el liderazgo de Ruiz Zorrilla y también les llevó a plantearse el abandono de la "vía legal" para alcanzar el gobierno—.[46]​ Sin embargo, la suma de radicales, carlistas, republicanos federales y moderados alfonsinos no era desdeñable pues entre todos sumaban casi 150 diputados.[47]​ En las elecciones de abril se produjo una gran abstención debido a la campaña promovida por los republicanos “intransigentes” y al desinterés general,[48]​ y también hubo desórdenes en las provincias de preponderancia carlista —País Vasco y Navarra— y republicana federal —las de la costa mediterránea—.[49]

Así pues, con las elecciones de abril de 1872 se consumó la ruptura "legal" del Partido Progresista ya que de la alianza del sector encabezado por Sagasta con la Unión Liberal del general Serrano surgió un nuevo partido, el Partido Constitucional, mientras que Manuel Ruiz Zorrilla quedó al frente del Partido Radical, resultado de la unión de su grupo de progresistas avanzados con los demócratas monárquicos o “cimbrios” liderados por Cristino Martos y por Nicolás María Rivero.[30]

La insurrección carlista

 
Carlos María de Borbón y Austria-Este, el pretendiente carlista Carlos VII
 
Apertura de las Cortes en Madrid, al final del discurso del rey, los diputados gritan «Muerte a los carlistas», Le Monde Illustré, mayo de 1872.

En las elecciones de abril de 1872 los carlistas sufrieron un relativo descalabro bajando de 51 a 38 diputados, por lo que los partidarios de la “vía insurreccional” se impusieron a los neocatólicos de Cándido Nocedal, defensores de la vía parlamentaria. Así "los carlistas variaron de postura e hicieron buena la última frase del manifiesto del 8 de marzo, «ahora a las urnas, después a donde Dios nos llame», es decir, a la guerra".[50]

El 14 de abril el pretendiente Carlos VII dio la orden de que los diputados electos no acudieran a las Cortes y de que se iniciara la insurrección armada, que estaba planeada y organizada desde mucho antes por si fallaba la estrategia de Cándido Nocedal —quien dimitió inmediatamente de todos sus cargos—.[51]​ Don Carlos (VII) proclamó en un manifiesto los motivos del levantamiento y llamó a todos los españoles a que se sumaran a él:

La santa religión de nuestros padres está perseguida, los buenos oprimidos, honrada la inmoralidad, triunfante la anarquía, la hacienda pública entrada a saco, el crédito perdido, la propiedad amenazada, la industria exánime... Si siguen así las cosas, el pobre pueblo queda sin pan y la España sin honra. Nuestros padres no hubieran soportado tanto; seamos dignos de nuestros padres. Por nuestro Dios, por nuestra Patria y por vuestro Rey, levantaos, españoles

Así comenzaba la Tercera Guerra Carlista. El 2 de mayo entraba en España por Vera de Bidasoa el pretendiente carlista al grito de “¡Abajo el extranjero y viva España!”. Dos días después tenía lugar la batalla de Oroquieta en la que los carlistas fueron derrotados, lo que obligó al pretendiente a huir a Francia. Ante la ausencia de una cabeza visible de la sublevación el general Serrano, que comandaba el ejército del Norte y que acababa de recibir la notificación del rey de que le había encargado la presidencia del gobierno tras la dimisión de Sagasta, firmó el 24 de mayo con los "diputados a guerra" de la Diputación foral de Vizcaya, que se había proclamado a favor del pretendiente carlista, el convenio de Amorebieta en el que se ponía fin al conflicto, concediendo el indulto a todos los sublevados que entregaran las armas, y que incluía un artículo (el 4º) en el que se devolvía a sus empleos a los jefes y oficiales que se habían sumado a la rebelión. Esta última concesión levantó muchas críticas en el seno del Ejército y entre la oposición radical y republicana por considerarla demasiado generosa con los sublevados y por haberse atribuido el general Serrano facultades que no tenía.[52]

El Convenio de Amorebieta puso fin a la guerra en el país vasconavarro pero las partidas carlistas siguieron actuando en Cataluña —el 16 de junio el pretendiente prometió devolver los fueros catalanes que había sido abolidos por Felipe V con los decretos de Nueva Planta de 1714—[53]​ hasta que en diciembre de 1872 se produjo una nueva insurrección en la zona vasconavarra —la guerra se prolongaría más allá del reinado de Amadeo I hasta 1876—.[54]

La caída del gobierno de Sagasta y el gobierno "relámpago" de Serrano: el fin del proyecto conservador

El gobierno de Sagasta duró poco tiempo porque al mes siguiente de celebrarse las elecciones estalló un escándalo que acabó con él. El 11 de mayo un diputado republicano le pidió cuentas por el destino de dos millones de reales que habían sido desviados por orden del gobierno del ministerio de Ultramar al de Gobernación, previsiblemente para emplearlos en las operaciones de corrupción que se habían producido en las elecciones —uno de los métodos utilizados era el de los "lázaros", el uso de difuntos para engrosar la lista de votantes adictos a las candidaturas gubernamentales—.[55]​ También se dijo que el dinero habría sido destinado a evitar el escándalo de alguna de las aventuras amorosas del rey Amadeo o de la esposa del general Serrano con uno de sus ayudantes, pero parece seguro que el dinero se gastó en las corruptelas electorales.[47]

El gobierno de Sagasta no dio una explicación satisfactoria del destino del dinero. Alegó que había servido para realizar pagos de naturaleza reservada para prevenir conspiraciones pero los papeles que presentó para justificarlo eran inventados y registraban los pagos sin autorización alguna, además de que demostraban que se había violado la correspondencia.[47]​ "Atrapado, el presidente del Consejo de Ministros pidió un voto de confianza a la mayoría que lo sustentaba, pero le fue negado. A los unionistas no les importaba tanto el destino de los dos millones como las ilegalidades y la imagen de un partido y Gobierno conservadores que acababan de iniciar su andadura". El 22 de mayo Sagasta presentó la dimisión al rey.[56]

Cuatro días después Amadeo I nombró como nuevo presidente del consejo de ministros al general Serrano que estaba en aquellos momentos al frente del ejército del norte que combatía a los carlistas. El rey pensó que Serrano podría gobernar porque su partido seguía teniendo la mayoría en las Cortes. De hecho en el gobierno que formó había tres antiguos progresistas y cinco antiguos unionistas, uno de ellos de la facción que encabezaba Antonio Cánovas del Castillo, que había reconocido a Amadeo I pero que era alfonsino.[57]

La presentación en el Congreso de los Diputados del nuevo gobierno el 27 de mayo de 1872 corrió a cargo del presidente interino, el almirante Topete, porque Serrano aún no había vuelto a Madrid. La sorpresa la dio Manuel Ruiz Zorrilla cuando anunció que haría una oposición leal, legal y respetuosa al nuevo gobierno y que deseaba que agotara la legislatura, lo que significaba un cambio completo de actitud porque suponía aceptar las reglas propias de la monarquía constitucional, lo que fue inmediatamente contestado por buena parte de los miembros de su partido encabezados por Cristino Martos que no estaban dispuestos a esperar dos o tres años para acceder al poder, ni colaborar de ese modo con la "reacción". Al no ver respaldada su postura por la mayoría de su partido, Ruiz Zorrilla renunció a su acta de diputado el 31 de mayo, al día siguiente de haberse entrevistado con el rey en el acto celebrado en Palacio por su cumpleaños, y se retiró a su finca de Soria "La Tablada" alegando que le faltaba la energía suficiente para seguir en la política. Según Jorge Vilches, "el camino antidinástico y presumiblemente insurreccional que iba a tomar el progresismo democrático no quería ser presenciado por Ruiz Zorrilla estando dentro de sus filas, ni sentirse cómplice de una nueva guerra civil". Por su parte la prensa afín al partido radical culpó al rey y a la reina de la marcha de Ruiz Zorrilla.[58]

Mientras tanto la firma del Convenio de Amorebieta a punto estuvo de dar al traste con el gobierno de Serrano, pues inicialmente todos los ministros se mostraron contrarios al mismo especialmente con la base 4ª que reintegraba a los oficiales rebeldes al estamento militar, porque era «depresiva para la dignidad de nuestro ejército [generales destacados habían protestado ante el ministro de la Guerra] y del Gobierno que la sancionase», pero el respaldo del rey a Serrano acabó con la crisis y el convenio de Amorebieta fue ratificado no solo por el gobierno sino también por las Cortes, donde solo votaron en contra los republicanos, mientras los radicales se abstuvieron. El 4 de junio Serrano juró su cargo como nuevo presidente del gobierno.[59]

A pesar de haber superado el trámite parlamentario, los radicales —ahora encabezados por Martos tras la retirada de Ruiz Zorrilla de la vida política— y los republicanos cuestionaron la legitimidad del gobierno de Serrano —una de las razones era que había incluido en él a un alfonsino—[60]​ y el lenguaje prerrovolucionario se extendió por la presa radical —y por la republicana— con lemas como «¡La revolución ha muerto! ¡Viva la revolución!» y con críticas no solo contra el gobierno conservador de Serrano sino contra los reyes —en un artículo de El Imparcial publicado el 10 de junio se aludió implícitamente a la reina en un artículo titulado «La loca del Vaticano»—.[61]

El 6 de junio, solo dos días después de haber jurado Serrano su cargo, los radicales convocaron en la Plaza Mayor de Madrid a la Milicia Nacional, concretamente a los Voluntarios de la Libertad de Madrid, para que se manifestaran en contra del gobierno. Este entonces ordenó acuartelar a las tropas y a la Guardia Civil y solicitar al rey el 11 de junio la firma del decreto de suspensión de las garantías constitucionales —medida que había sido refrendada por las Cortes—, para poder atajar la que parecía inminente insurrección republicana, a la que parecía que iban a sumarse los radicales —una vez que Ruiz Zorrilla se había retirado a su finca de Soria— para lo que tenían convocada una asamblea a celebrar el 16 de junio bajo el lema "la Revolución de Septiembre y la libertad de la patria", omitiendo mencionar a la dinastía por primera vez. Entonces Amadeo I, temeroso de que los radicales se pasaran definitivamente al campo antidinástico y de que pudiera estallar un grave conflicto civil, se negó a firmar el decreto, por lo que el general Serrano presentó la dimisión. Ese mismo día, 12 de junio de 1872, los batallones de la Milicia Nacional se congregaban en la Plaza de Mayor pero al conocer la dimisión del gobierno se disolvieron.[62]

El general Serrano, “sin llegar a cumplir veinte días en el cargo”, “se retiró a sus fincas de Arjona y declinó presentarse a las nuevas elecciones, lo que le eliminaba como alternativa de gobierno a los radicales (fue entonces cuando le dijo a un diplomático francés, refiriéndose al rey: “Hay que echar a ese imbécil”)”.[60]

Como ha señalado Jorge Vilches, tras la dimisión de Serrano,[63]

la soledad del rey era casi completa, en un país con grandes oposiciones antidinásticas, unos partidos constitucionales débiles, pues el conservador se formó porque él les obligó y el radical ostentaba una lealtad proporcional a su cercanía al poder. Contaba además con unos líderes políticos que carecían de capacidad para aunar voluntades y conducir esfuerzos, y un pueblo que no le apreciaba. El 12 de junio de 1872, el bagaje era: su principal mentor, Prim, muerto, retirado otro, Ruiz Zorrilla, y cerca del procesamiento el último, Sagasta. El Partido Radical, por un lado, estaba entre el dinastismo coyuntural y la república. El Partido Conservador [Constitucional] se sentía desairado, y aún se sentiría más humillado, pues un gobierno radical no podría existir con unas Cámaras contrarias. Por último, se vivía con dos guerras civiles, la carlista y la cubana, y otra amenazadora, la republicana. Es más, un mes después, los reyes sufrieron un atentado contra su vida mientras paseaban por la calle Arenal de Madrid

Cuando los constitucionales conocieron que el rey había nombrado como nuevo presidente del Consejo de Ministros a Manuel Ruiz Zorrilla y que había decretado la suspensión de las sesiones de las Cortes a partir del 14 de junio, lo que anunciaba su disolución, reunieron a sus diputados y senadores en una asamblea en la que Francisco Romero Robledo denunció «el golpe de Estado inaudito y desvergonzado» que se había producido y acordaron pedir al rey que no accediera a la condición que había puesto Ruiz Zorrilla para aceptar el cargo de presidente del gobierno —la disolución de las Cortes y la convocatoria de nuevas elecciones—, porque además de ser anticonstitucional —no habían transcurrido los cuatro meses preceptivos desde las elecciones anteriores— agravaría la inestabilidad del régimen que en año y medio había tenido tres elecciones generales, unas municipales, dos disoluciones anticipadas, otras dos suspensiones de sesiones, numerosas crisis parciales de Gobierno y seis totales. A cambio prometieron su apoyo al nuevo gobierno.[64]

El segundo gobierno de Ruiz Zorrilla: el fracaso de los radicales

Tras la dimisión de Serrano el rey encargó la formación de gobierno al general Fernando Fernández de Córdoba, a la espera de la vuelta de Ruiz Zorrilla, y las críticas a los reyes en la prensa radical cesaron. Hasta trescientos radicales en cabezados por Nicolás María Rivero, José María Beránger y Francisco Salmerón fueron a la finca de "La Tablada" para convencerle para que volviera a Madrid a hacerse cargo del gobierno y varios miles fueron a recibirle a su llegada a la capital. Ruiz Zorrila puso como condición al rey para aceptar la presidencia que disolviera las Cortes y convocara nuevas elecciones, a sabiendas de que era un acto inconstitucional porque aún no habían trascurrido cuatro meses desde las últimas elecciones. Pero Amadeo I aceptó el chantaje —así lo califica Jorge Vilches— lo que provocó que el rey no fuera visto a partir de entonces como "un rey de todos los españoles, árbitro de las instituciones y de los partidos" sino como un monarca vinculado a un partido, el radical.[65]​ Según Jorge Vilches, las acciones llevadas a cabo por los radicales para, primero, ser llamados al poder —amenazando con la insurrección— y, luego, para que el rey disolviera las Cortes, aun contraviniendo la Constitución, "pueden denominarse, sin temor a dudas, como un golpe de Estado".[66]

Manuel Ruiz Zorrilla formó gobierno el 13 de junio en el que él mismo asumió el ministerio de la Gobernación y en el que había dos antiguos demócratas —Martos en Estado y Echegaray en Fomento— y cuatro antiguos progresistas —Eduardo Gasset y Artime en Ultramar, Servando Ruiz Gómez en Hacienda, Eugenio Montero Ríos en Gracia y Justicia y Beránger en Marina—, más el general Fernández de Córdoba en el ministerio de Guerra. A Nicolás María Rivero se le prometió la presidencia del Congreso de los Diputados, tras la celebración de las elecciones.[67]​ A continuación “se procedió al habitual cambio de funcionarios públicos, echando a 40 000 de ellos para instalar a otros tantos fieles”.[68]

El atentado contra los reyes del 18 de julio y los desaires a la Corona
 
Tentativa regicida contra Amadeo I en la calle del Arenal (Historia de la interinidad y guerra civil de España desde 1868, Vol. 2)

La sensación de soledad del rey, que ya solo contaba con el apoyo de los radicales de Ruiz Zorrilla, se vio acentuada por el atentado que sufrió en la calle del Arenal de Madrid el 18 de julio junto a su esposa, que aunque lograron salvar la vida, le dejó muy impresionado.[69]​ "Una casualidad hizo que un amigo de Topete se enterara de que Amadeo iba a ser asesinado el día 18 de julio, por lo que informó a Martos y éste se lo hizo saber al rey y a Pedro Mata, gobernador civil de Madrid. El monarca se negó a cambiar el recorrido de su paseo a pesar de las indicaciones de la reina Victoria, por lo que Mata colocó agentes en todo el trayecto, los cuales esperaron a que los regicidas dispararan para detenerles. La actitud del gobernador para impedirlo fue duramente criticada... Los autores del atentado, [republicanos] federales de Madrid, fueron defendidos en el juicio por el abogado Francisco Pi y Margall. Ésta no fue la única vejación popular de los reyes, pues su coche fue detenido y zarandeado en la calle de Alcalá por una manifestación de vendedores ambulantes. En otra ocasión se les lanzó lodo cuando paseaban por Cedaceros. Un día cerca de El Retiro un hombre se acercó al monarca y le insultó gravemente a la cara. Otra persona se introdujo armada dentro del recinto regio. Y hasta se les tiró una piedra en una manifestación republicana cercana al Palacio Real. Esto sin contar con los insultos que vinieron del lado aristocrático, como la famosa anécdota de las mantillas, los desaires en los palcos de los teatros, en los que por cierto se presentaba bufamente al rey, y el vacío al que sometieron a la reina María Victoria. No fue grata para los reyes su estancia en España".[70]

Las elecciones de agosto de 1872 y sus consecuencias

En las elecciones de agosto de 1872 los radicales presentaron un programa de reformas ambicioso que incluía el jurado, la abolición de las quintas y de las matrículas de mar, la separación de la Iglesia y el Estado, el impulso a la educación pública, el reforzamiento de la Milicia Nacional, etc.[48]​ Con este programa los radicales estaban decididos a cumplir las promesas hechas al "cuarto estado", a las clases populares, en la revolución de 1868 para así darla por concluida.[71]

 
«El entusiasmo, inmenso; la muchedumbre, indescriptible», caricatura de Amadeo I en la revista Gil Blas, obra de Pellicer y publicada el 4 de agosto de 1872.

La convocatoria de elecciones abrió un difícil debate en el seno del Partido Constitucional entre los partidarios de participar en ellas, a pesar de que sabían que gracias a la "influencia" del gobierno su derrota estaba asegurada, y los partidarios del retraimiento, apoyados en la inconstitucionalidad de las mismas, por lo que llamaban a Amadeo I «el rey cautivo» de los radicales. Al final la junta del partido decidió el 5 de julio la participación, porque su ausencia en las Cortes haría más fácil la proclamación de la República si los radicales demócratas de Martos y Rivero abandonaban a Ruiz Zorrilla y se unían a los federales. Pero la resolución fue acogida con poco entusiasmo por los comités locales, por lo que, seguros de su derrota, el partido Constitucional presentó muy pocos candidatos y en la mitad de las provincias no presentó ninguno.[72]​ El retraimiento, según Ángel Bahamonde, constituyó “una peligrosa actitud que ponía en cuestión no ya las mismas elecciones, sino el sistema en su conjunto”,[69]​ a lo que se unía el hecho de que el propio líder del Partido Constitucional, el general Serrano, tampoco se presentó por lo que no podría suceder a Ruiz Zorrilla en el Gobierno según las prácticas parlamentarias. Según Jorge Vilches, "la responsabilidad que contrajo Serrano con la viabilidad de la dinastía Saboya fue grande, pues era él el jefe declarado del otro partido dinástico llamado, en teoría, a alternarse con el radical. El significado de la dejación no podía ser otro que el dar por terminada la experiencia".[73]​ Su defección al frente del Partido Constitucional fue asumida por el almirante Topete, Práxedes Mateo Sagasta y Antonio Ríos Rosas que seguían creyendo en el proyecto de la "monarquía democrática" amadeísta, aunque seguían considerando a Serrano como presidente del partido.[74]

Las elecciones celebradas el 24 de agosto de 1872, gracias a la "influencia moral del gobierno", dieron la victoria a los candidatos del Partido Radical —274 diputados, frente a 77 republicanos, 14 constitucionalistas y 9 moderados—, aunque más de la mitad de los electores no fueron a votar a causa del "retraimiento" del Partido Constitucionalista, de la campaña abstencionista de los carlistas y de una parte de los republicanos (con el argumento de que las elecciones estaban amañadas ya que siempre ganaba el gobierno de turno) y del desinterés general (dada la falta de cultura política entre una población mayoritariamente analfabeta).[69][75]​ Hubo un pacto tácito entre los radicales y los republicanos "benevolentes", propiciado por el ministro Cristino Martos para que en los distritos donde estos se presentaran los radicales no presentaran candidato y viceversa.[66]

Según Jorge Vilches, "las repercusiones del resultado [de las elecciones] sobre la credibilidad de la revolución [de 1868] para las clases medias y conservadoras fueron muy negativas, ya que el régimen giraba bruscamente a la izquierda tras una serie de ilegalidades cometidas por el Gobierno y refrendadas por Amadeo I, y se anulaba al Partido Constitucional como alternativa dinástica al radical y portavoz o defensor de sus intereses".[76]​ De ahí que empezaran a considerar a Amadeo I como un rey de partido, el radical, y comenzaran a decantarse por la opción de la restauración de los Borbones en la figura del príncipe Alfonso, "libre de los errores de [su madre] Isabel II".[77]

La alternativa del príncipe Alfonso había cobrado un nuevo impulso desde que en abril de 1872 su tío el duque de Montpensier, a instancias de la antigua regente María Cristina de Borbón, lo había reconocido como heredero de la dinastía "legítima" y lo había presentado en una carta hecha pública el 20 de junio como un rey que no volvería a leyes e instituciones «que ya caducaron» y que recogería lo que las «pasadas crisis y revoluciones hayan creado de fecundo, de útil y de bueno». Y también cuando los moderados alfonsinos más liberales, que pensaban que la vuelta a la Constitución de 1845 ya no era posible, se abrieron a los antiguos unionistas encabezados por Antonio Cánovas del Castillo, que había quedado fuera de las Cortes por la presión gubernamental en los dos distritos por los que se presentó y que daba por fracasada la "monarquía democrática" de Amadeo I porque, según él, no había sabido hacer compatible el orden con la libertad.[78]

El proyecto de abolición de la esclavitud en Puerto Rico

El 15 de septiembre de 1872 el gobierno de Ruiz Zorrilla presentó su anunciado programa de reformas en las Cortes, pero del mismo solo lograría sacar adelante la nueva Ley de Enjuiciamiento criminal a pesar de la amplia mayoría con que contaba en el Congreso.[69]

Una de las reformas más importante que presentó el nuevo gobierno, la abolición de la esclavitud en las colonias de las Antillas, creó tensiones en su seno porque el ministro de Ultramar, Eduardo Gasset y Artime, era partidario de mantener el pacto de las Cortes constituyentes de 1869 de no introducir reformas en Cuba hasta que terminara la insurrección así como la "ley Moret" que abolía la esclavitud gradualmente en Puerto Rico.[79]​ Cuando el gobierno planteó la abolición inmediata de la esclavitud en Puerto Rico, acompañada de la aplicación del régimen provincial a la isla y la separación de la autoridad política de la militar, Gasset y Artime dimitió —y también el ministro de Hacienda Ruiz Gómez que se solidarizó con él— siendo sustituido por Tomás María Mosquera que fue quien presentó el proyecto el 24 de diciembre de 1872, haciendo coincidir "la festividad del nacimiento de Jesucristo, el salvador de los oprimidos, con la exposición de la liberación de los esclavos".[80]​ Este proyecto contó con el apoyo de los republicanos dentro de la cámara, y con el de la Sociedad Abolicionista Española fuera de ella. Según Ángel Bahamonde, la presión del Centro Hispano Ultramarino de Madrid, que reunía a los comerciantes y hombres de negocios con intereses en las plantaciones de azúcar en las Antillas y en el tráfico de esclavos, logró que el gobierno no extendiera su proyecto de abolición inmediata a Cuba.[69]​ Por otra parte, el pretendiente carlista Carlos VII llegó a ofrecer el envío a Cuba a quienes combatían por él en Cataluña y en Navarra para defender “la integridad de la patria”.[81]

Los conservadores consideraron que estos cambios ponían en riesgo los intereses españoles en Puerto Rico, porque liberar de forma inmediata a los 30 000 esclavos de las plantaciones —a pesar de que los propietarios serían indemnizados y los esclavos mantendrían la condición de libertos durante varios años— supondría la desestabilización de la isla, conceder el régimen provincial haría que los municipios pudieran organizar su fuerza armada y oponerse a la política gubernamental como de hecho estaba sucediendo en la metrópoli, y por último, la división del mando militar y civil debilitaría la autoridad del Estado para reprimir a los independentistas. Además estas medidas en conjunto causarían un efecto negativo en Cuba al alentar a los sublevados. "Los radicales, en cambio, confiaban en que una muestra de buena voluntad por parte del Gobierno haría ver a los independentistas que con la paz podían obtener las mejoras prometidas por la revolución".[82]

Ante una situación en que el Partido Constitucional solo contaba con 14 diputados en las Cortes, la oposición a las reformas en Puerto Rico la asumieron los Centros hispano ultramarinos que habían nacido a finales de 1871 como grupos de presión cuya finalidad era oponerse a la abolición inmediata de la esclavitud en Cuba y en Puerto Rico y a cualquier cambio que perjudicara los intereses sus miembros. Su lema era "Cuba española" y presionaron a Amadeo I para que no firmara los decretos que le presentara el gobierno sobre reformas del régimen colonial. En los Centros hispanoultramarinos ingresaron a finales de 1872 el Partido Constitucional de la mano de Serano, que volvió a la vida política por esta causa, y de Adelardo López de Ayala; el Círculo moderado del conde de Toreno y de Manuel García Barzanallana; el Círculo de la Unión Liberal —al que pertenecía Cánovas— y la Grandeza de España liderada por el duque de Alba. Cuando el gobierno presentó el 24 de diciembre su proyecto de abolición de la esclavitud en Puerto Rico, los Centros hispanoultramarinos formaron una Liga Nacional que presentó un Manifiesto a la nación escrito por López de Ayala en el que pedían la paralización de las reformas. "La Liga Nacional no deseaba la desestabilización del régimen o el cambio de dinastía... La sustitución del Gobierno de Ruiz Zorrilla por uno conservador en que estuvieran Augusto Ulloa, Ríos Rosas, Sagasta, Topete o Serrano, les hubiera garantizado la satisfacción de sus demandas sin salirse de la Constitución, pues éstos hubieran paralizado el proceso de reformas".[83]

Las reformas paralizadas y la división de los radicales

Como ya había sucedido con anteriores gobiernos, la guerra carlista y la de Cuba impidieron que Ruiz Zorrilla pudiera cumplir su promesa de abolir las quintas, por lo que cuando anunció que iba a llamar a un nuevo reemplazo se produjeron algaradas en varias ciudades y alentó a los republicanos federales "intrasigentes" a seguir defendiendo la vía insurreccional. El levantamiento más grave protagonizado por estos tuvo lugar el 11 de octubre de 1872 en Ferrol que fracasó porque no encontró apoyos en la ciudad y porque, en contra de lo que esperaban los sublevados, no fue secundado en ningún otro lugar. Además la dirección del partido republicano federal, dominada por los "benevolentes", condenó la insurrección porque como dijo Francisco Pi y Margall en las Cortes el 15 de octubre la insurrección era un «verdadero delito» cuando «están plenamente aseguradas nuestras libertades individuales».[84]​ La condena agravó las tensiones que ya padecía el partido entre los partidarios de la “vía legal”, como Pi, y los defensores de la “vía insurreccional”, hasta el punto de que solo la proclamación de la República cuatro meses después evitó que se produjera un nuevo levantamiento.[85]

A todo ello se sumó el recrudecimiento de la tercera guerra carlista a partir de diciembre de 1872,[54]​ por lo que de nuevo la abolición de las quintas fue aplazada, con el consiguiente rechazo de los republicanos, llegándose a formar algunas partidas en Andalucía, si bien mucho menos peligrosas que las carlistas.[85]

Ante la difícil situación que vivía el gobierno Ruiz Zorrilla intentó restablecer las relaciones con el Partido Constitucional proponiendo que Sagasta no fuera juzgado por el Senado sino por los tribunales ordinarios por el escándalo de los dos millones de reales —que le había hecho perder el gobierno—, pero se encontró con la rebelión de los diputados de procedencia demócrata liderados por el presidente del Congreso Nicolás María Rivero y por dos de sus ministros, Martos y Echegaray, que votaron junto con los republicanos para rechazar la propuesta. Esta división en el partido que apoyaba al gobierno alentó a los republicanos "benevolentes" a proseguir en su estrategia de atraer a su campo a los antiguos demócratas "cimbrios" y conseguir una mayoría en el parlamento para poner fin a la monarquía y proclamar la República.[86]

La abdicación de Amadeo I y la proclamación de la República

El conflicto de los radicales con el rey

El 29 de enero de 1873 los radicales más extremistas tomaron como pretexto un supuesto desaire del rey a las Cortes —al haber aplazado un día el bautismo del heredero al trono que acababa de nacer a causa de que el parto había sido difícil, mientras el gobierno y los presidentes del Congreso y del Senado, vestidos de gala para la ocasión, esperaban en una antesala del palacio— junto con el rumor de que el rey pretendía destituir al gobierno y sustituirlo por otro del partido constitucional —se sabía que el rey se había entrevistado con el general Serrano en Palacio para que asistiera al bautismo del príncipe, aunque tras consultar con la junta directiva de su partido, había declinado la invitación alegando motivos de salud para no dar a entender que aflojaban en su oposición al gobierno radical—, y propusieron en las Cortes que se declarasen en sesión permanente, en Convención, que solo la rápida llegada del Gobierno logró atajar. Sin embargo, la Cámara declaró sin más estar «enterada» del nacimiento del infante y no hubo ningún tipo de celebración ni discursos. El rey le comunicó a Ruiz Zorrilla su disgusto por la actitud de las Cortes y que no estaba «dispuesto a sufrir imposiciones de nadie» y que se hallaba «preparado para proceder según lo aconsejaran las circunstancias». Amadeo I escribió a su padre a principios de febrero que se estaba planteando abdicar porque:[87]

Yo vi que mi ministro, en vez de trabajar en la consolidación de la dinastía, trabajaba, de acuerdo con los republicanos, para su caída

Otro conflicto, que sería el definitivo, enfrentó al gobierno y a las Cortes con el rey. Ese mismo mes de enero de 1873 los oficiales del arma de artillería habían desafiado el gobierno amenazando con dimitir si éste mantenía como capitán general de las Vascongadas al general Hidalgo, al que acusaban de haber colaborado en la abortada sublevación del cuartel de San Gil de junio de 1866. La respuesta del gobierno, con el apoyo de las Cortes, fue reafirmar la supremacía del poder civil sobre el ejército manteniendo el nombramiento y procediendo a reorganizar el arma, por lo que los oficiales cumplieron su promesa y dimitieron en bloque.[88]

El 6 de febrero una delegación de los artilleros dimitidos se entrevistó con el rey para pedir su intervención en el conflicto que mantenían con el gobierno y ofreciéndose para apoyar un golpe de fuerza que disolviera las Cortes y suspendiera por algún tiempo las garantías constitucionales hasta preparar nuevas elecciones para unas nuevas Cortes que aprobaran más prerrogativas para la Corona. El rey rechazó la propuesta del golpe de fuerza pero prometió que se opondría a la reorganización del arma de artillería que preparaba el gobierno.[89]​ Cuando el rey tuvo conocimiento ese mismo día por la prensa de que el gobierno pensaba nombrar al general Hidalgo nuevo capitán general de Cataluña, hizo llamar a Ruiz Zorrilla a Palacio. El presidente le aseguró que lo que decía la prensa no era cierto pero al día siguiente se confirmó el nombramiento por lo que el rey comprobó «que Zorrilla me había mentido». Intentó que el gobierno diera marcha atrás y llamó a Ruiz Zorrilla el día 7 de febrero por la mañana y otra vez por la tarde cuando supo que la cuestión de la reorganización del arma de artillería iba a ser tratada en el Congreso de Diputados, aconsejándole que no lo hiciera y que ganara tiempo no admitiendo las dimisiones de los oficiales del cuerpo de artillería justificándolo con la guerra carlista. Según el rey, Ruiz Zorrilla se mostró conforme, pero las Cortes aquel día aprobaron la aceptación de la renuncia de los oficiales de artillería, su sustitución por los sargentos y la reorganización del arma. Al día siguiente, 8 de febrero, el Senado ratificaba la votación del Congreso, aunque el moderado Calderón Collantes advirtió al gobierno que las medidas aprobadas eran un ataque a la prerrogativa regia, pues era conocida la oposición de la Corona a las mismas. El rey se sintió engañado de nuevo —además los oficiales estaban siendo obligados a entregar las armas en Madrid a los sargentos la misma mañana del día 8 cuando ni siquiera el rey había firmado el decreto—. "Es obvio el papel que los radicales otorgaban al rey de una monarquía constitucional, la sanción inopinada de todo cuento el Gobierno le presentase, pero además, en el caso, el desprecio a la persona que ocupaba la institución", afirma Jorge Vilches.[90]

La única alternativa que le quedaba a Amadeo I era nombrar un gobierno del Partido constitucional y disolver las Cortes, pero «per dissolvere la camera era necesario ricorrere alla forza», como le dijo el rey a su padre en una carta, lo que podía conducir a la guerra civil —el rey podía contar con los más importantes generales conservadores, Topete, Serrano y Malcampo pero la guarnición de la capital estaba en manos de militares afines al Partido Radical—.[91]​ De hecho ese mismo viernes 7 de febrero el almirante Topete visitó al rey en Palacio ofreciéndole el apoyo de su partido, el Constitucionalista, y el de los generales unionistas, los de más prestigio en el Ejército. Al día siguiente, sábado 8 de febrero, acudió de nuevo Topete a Palacio comunicándole el rey que no deseaba que por él se derramara sangre y que iba a firmar el decreto de reorganización del cuerpo de artilleros.[92]

Así Amadeo I abandonó la opción del golpe de fuerza y cuando el consejo de ministros presidido por él se reunió el sábado 8 de febrero firmó los decretos sobre los artilleros al haber sido ratificados por las Cortes, aunque hizo constar que esa cuestión era competencia del Ejecutivo, que según la Constitución de 1869 detentaba el rey, y no del Legislativo. "El rey retuvo a Ruiz Zorrilla después del Consejo de Ministros para decirle que le había decepcionado porque habiéndole creído leal a la dinastía y a lo que ella significaba, había sido cegado por el espíritu de partido" y continuación le expuso su idea de que se formara, «per effetto di patriottismo», un gobierno de conciliación de todos los partidos que le habían votado en noviembre de 1870. De lo contrario no le quedaba más opción que abdicar.[91]

Ruiz Zorrilla reunió a su gobierno en tres ocasiones para estudiar la propuesta del rey de formar un gobierno de conciliación con los constitucionales de Serrano y Sagasta, sabiendo que estaba en juego la continuidad del reinado de Amadeo I. Pero la propuesta fue rechazada. Cuando esto se supo el domingo 9 de febrero, el Partido Constitucional acordó ofrecerse de nuevo al rey para lo que requiriese, enviándose un telegrama al general Serrano que estaba en Jaén para que volviera inmediatamente a Madrid. Al día siguiente, lunes 10 de febrero, llegó Serrano a la capital e informó al rey de que él estaba dispuesto a formar gobierno y defender a la dinastía, pero ese mismo día un número extraordinario del diario de mayor tirada, La Correspondencia de España, dio la noticia de que Amadeo I había renunciado al trono.[93]

La abdicación

El rey se vio obligado a firmar el decreto de reorganización del arma de artillería, que fue publicado el día 9, y al día siguiente, lunes 10 de febrero de 1873, renunció a la Corona.[81]​ Este fue el mensaje que el rey envió a las Cortes:[94]

[...] Dos años largos ha que ciño la Corona de España, y la España vive en constante lucha, viendo cada día más lejana la era de paz y de ventura que tan ardientemente anhelo. Si fuesen extranjeros los enemigos de su dicha, entonces, al frente de estos soldados tan valientes como sufridos, sería el primero en combatirlos; pero todos los que con la espada, con la pluma, con la palabra, agravan y perpetúan los males de la Nación son españoles, todos invocan el dulce nombre de la Patria, todos pelean y se agitan por su bien, y entre el fragor del combate, entre el confuso y atronador y contradictorio clamor de los partidos, entre tantas y tan opuestas manifestaciones de la opinión pública, es imposible atinar cuál es la verdadera, y más imposible todavía hallar el remedio para tamaños males. Lo he buscado ávidamente dentro de la ley, no lo he hallado. Fuera de la ley no ha de buscarlo quien ha prometido observarla. Nadie achacará a la flaqueza de ánimo mi resolución. No habría peligro que me moviera a desceñirme la corona si creyera que la llevaba en mis sienes para bien de los españoles: ni causó mella en mi ánimo el que corrió la vida de mi augusta esposa, que en este solemne momento manifiesta como yo el que en su día se indulte a los autores de aquel atentado. Pero tengo hoy la firmísima convicción de que serían estériles mis esfuerzos e irrealizables mis propósitos. Estas son, Sres. Diputados, las razones que me mueven a devolver a la nación, y en su nombre a vosotros, la corona que me ofreció el voto nacional, haciendo de ella renuncia por mí, por mis hijos y sucesores. Estad seguros de que al desprenderme de la Corona no me desprendo del amor a esta España, tan noble como desgraciada, y de que no llevo otro pesar que el de no haberme sido posible procurarle todo el bien que mi leal corazón para ella apatecía.-Amadeo-Palacio de Madrid, 11 de febrero de 1873
 
Partida de Amadeo y María Victoria dal Pozzo del país, dibujo de Vierge publicado en Le Monde Illustré el 22 de febrero de 1873.

Uno de los pocos revolucionarios de 1868 que acudieron a despedir a los reyes tras su renuncia a la Corona fue el almirante Topete, que había defendido la candidatura de Montpensier pero que se convirtió en un leal servidor de Amadeo I una vez fue elegido por las Cortes —"Topete era un hombre de honestidad intachable que ni los republicanos atacaban", afirma Jorge Vilches—.[95]

Según Jorge Vilches, la responsabilidad principal en la caída de la monarquía de Amadeo I recae en los radicales de Ruiz Zorrilla porque "tergiversaron la figura de la Corona en la monarquía constitucional que construyeron. La convirtieron en simple poder sancionador. Imposibilitaron la formación de un sistema de partidos dinásticos leales con el régimen y entre sí tanto en el gobierno como en la oposición. Alimentaron a los enemigos del régimen con sus alianzas electorales y parlamentarias y con el cuestionamiento de la legitimidad gubernamental conservadora. Echaron a los constitucionales de las instituciones, transformando la resolución de meros enfrentamientos programáticos a situaciones de cambio de régimen". Aunque también tienen su parte de responsabilidad Sagasta y Serrano y sus seguidores respectivos, el primero porque "estuvo remiso a la hora de la formación del Partido Conservador" y el segundo porque él y sus seguidores "enseguida consideraron fracasada la experiencia amadeísta, y no respaldaron al monarca cuando les invitó a palacio, despreciándole sólo porque su asistencia podía ser considerada como un apoyo al Gobierno de Ruiz Zorrilla". En conclusión, "la situación de los partidos, de los hombres de la revolución, fue la que condujo a que, sin apoyo ni salida pacífica legal, Amadeo I renunciara".[96]

La proclamación de la República

En cuanto el lunes 10 de febrero el diario La Correspondencia de España dio la noticia de que el rey había abdicado, los federales madrileños se agolparon en las calles pidiendo la proclamación de la república. El gobierno se reunió y en su seno las opiniones estaban divididas entre el presidente y los ministros de procedencia progresista, que pretendían constituirse en gobierno provisional para organizar una consulta al país sobre la forma de gobierno —postura que también apoyaba el Partido Constitucional, porque de esa forma no se produciría la proclamación inmediata de la República—, y los ministros de procedencia demócrata encabezados por Cristino Martos y apoyados por el presidente del Congreso de los Diputados, Nicolás María Rivero, que se decantaban por la reunión conjunta del Congreso y del Senado que constituidos en Convención decidirían la forma de gobierno, lo que conduciría a la proclamación de la República dada la mayoría que formaban en ambas cámaras la suma de republicanos federales y de radicales de procedencia demócrata.[97]

El presidente Ruiz Zorrilla acudió al Congreso de Diputados para pedir a los diputados de su propio partido, que tenían la mayoría absoluta en la Cámara, que aprobaran la suspensión de las sesiones al menos veinticuatro horas, las suficientes para restablecer el orden. Asimismo pidió que no se tomara ninguna decisión hasta que llegara a las Cortes el escrito de renuncia a la Corona del rey Amadeo I y anunció que el gobierno presentaría un proyecto de Ley de Abdicación. Con todo ello Ruiz Zorrilla pretendía ganar tiempo, pero fue desautorizado por su propio ministro de Estado Cristino Martos cuando dijo que en cuanto llegara la renuncia formal del rey el poder sería de las Cortes y «aquí no habrá dinastía ni monarquía posible, aquí no hay otra cosa posible que la República». Así se aprobó la moción del republicano Estanislao Figueras para que las Cortes se declararan en sesión permanente, a pesar del intento de Ruiz Zorrilla de que los radicales no la apoyaran. Mientras tanto el edificio del Congreso de los Diputados había sido rodeado por una multitud que exigía la proclamación de la República, aunque la Milicia Nacional logró disolverla.[98]

 
Estanislao Figueras, primer presidente del Poder Ejecutivo de la Primera República Española.

Al día siguiente, martes 11 de febrero, los jefes de distrito republicanos amenazaron al Congreso de los Diputados con que si no proclamaban la República antes de las tres de la tarde iniciarían una insurrección. Los republicanos de Barcelona enviaron un telegrama a sus diputados en Madrid en el mismo sentido. Entonces los ministros demócratas encabezados por Martos, junto con los presidentes del Congreso y del Senado, Rivero y Figuerola, decidieron que se reunieran ambas Cámaras, ante las cuales se leyó la renuncia al trono de Amadeo I, y a continuación, ante la ausencia del presidente del gobierno Ruiz Zorrilla, el ministro de Estado Martos anunció que el gobierno devolvía sus poderes a las Cortes con lo que éstas se convertían en Convención y asumían todos los poderes del Estado. Entonces varios diputados republicanos y radicales presentaron una moción para que las dos cámaras, constituidas en Asamblea Nacional, aprobaran como forma de gobierno la República y eligieran un Poder Ejecutivo responsable ante aquella.[99]

A las tres de la tarde del 11 de febrero de 1873, el Congreso y el Senado, constituidos en Asamblea Nacional, proclamaron la República por 258 votos contra 32:[81]

"La Asamblea Nacional resume todos los poderes y declara como forma de gobierno de la Nación la República, dejando a las Cortes Constituyentes la organización de esta forma de gobierno...”

Tras un receso de tres horas volvieron a reunirse las Cámaras para nombrar presidente del Poder Ejecutivo al republicano federal Estanislao Figueras que estaría al frente de un gobierno pactado entre los radicales y los republicanos federales e integrado por tres republicanos —Emilio Castelar en Estado; Francisco Pi y Margall en Gobernación; y Nicolás Salmerón en Gracia y Justicia— y cinco radicales —José Echegaray en Hacienda; Manuel Becerra en Fomento; Francisco Salmerón en Ultramar; el general Fernández de Córdoba en Guerra y el almirante Beránger en Marina—. Cristino Martos fue elegido presidente de la autoproclamada Asamblea Nacional, "el verdadero poder en una situación de Convención", por 222 votos frente a los 20 que reunió Nicolás María Rivero.[100][101]

Valoración

Según Jorge Vilches, la monarquía de Amadeo I fracasó por "la dificultad de combinar con realismo la monarquía constitucional y la democracia", ya que la Constitución de 1869 no instauró una monarquía parlamentaria sino que la atribución del "nombramiento del gobierno a la Corona y no al Parlamento señala que aún se estaba en una fase «pre-parlamentaria» de la historia constitucional". Así pues,[102]

se había instaurado una democracia, pero la responsabilidad que se dejaba caer sobre la Corona era mayor que en el régimen anterior. La posibilidad de cumplir con tal papel dependía de que el sistema de partidos fuera centrípeto y coincidente en el objetivo superior de estabilizar el régimen. Pero en su lugar se construyó uno polarizado en cuestiones fundamentales, como el carácter legislable de los derechos o la pacificación de Cuba, llegando a la identificación partidista de las instituciones, al exclusivismo, a la ruptura del equilibrio entre poderes, a la alianza con los partidos contrarios al régimen y, finalmente, a la puesta en práctica de la accidentalidad de las formas de gobierno

Referencias

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Bibliografía


  •   Datos: Q6104643

reinado, amadeo, españa, españa, reino, españa, 1871, 1873, bandera, escudolema, nacional, plus, ultra, latín, más, allá, himno, nacional, marcha, granaderacapital, madrididioma, oficial, castellanogobierno, monarquía, parlamentariarey, 1871, 1873, amadeo, ipr. Espana Reino de Espana 1871 1873 Bandera EscudoLema nacional Plus Ultra latin Mas alla Himno nacional Marcha GranaderaCapital MadridIdioma oficial CastellanoGobierno Monarquia parlamentariaRey 1871 1873 Amadeo IPresidente del Consejo de Ministros 1870 1871 Juan Bautista Topete 1872 1873 Manuel Ruiz ZorrillaLegislatura CortesPeriodo historico Edad Contemporanea Proclamacion de Amadeo I 2 de enero de 1871 Abdicacion de Amadeo I 10 de febrero de 1873Moneda Peseta El reinado de Amadeo I fue el primer intento en la historia de Espana de poner en practica la forma de gobierno de la monarquia parlamentaria monarquia popular o monarquia democratica como se la llamo en la epoca aunque se saldo con un sonoro fracaso ya que solo duro dos anos del dia 2 de enero de 1871 en que fue proclamado como rey Amadeo I por las Cortes Constituyentes al dia 10 de febrero de 1873 en que presento su abdicacion Entre las razones del fracaso se suele aducir el hecho de que el mismo dia de la llegada a Espana del nuevo rey moria en Madrid el general Prim victima de un atentado que se habia producido tres dias antes Prim ademas de ser el principal valedor del nuevo monarca era el lider del Partido Progresista la fuerza politica mas importante de la coalicion monarquico democratica y cuya muerte abrio la pugna por la sucesion entre Praxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla que a la larga acabo provocando la traumatica descomposicion de aquella coalicion destinada a ser el sosten de la monarquia amadeista 1 Como apunto la historiadora Mª Victoria Lopez Cordon la desercion de las fuerzas que deberian haberla sustentado hizo imposible la experiencia 2 Por otro lado la monarquia de Amadeo I no consiguio integrar a los grupos politicos de oposicion que no reconocian la legitimidad del nuevo rey y que siguieron defendiendo su propio proyecto politico la Republica la monarquia carlista o la monarquia alfonsina El reinado de Amadeo I forma parte del periodo del Sexenio Democratico 1868 1874 que comienza con la Revolucion de 1868 y que termina con la tambien fracasada Primera Republica Espanola 1873 1874 Indice 1 La eleccion de Amadeo de Saboya como rey de Espana 2 El primer ano 2 1 El gobierno del general Serrano el fracaso de la conciliacion 2 2 La oposicion a la Monarquia de Amadeo I 2 3 El primer gobierno de Ruiz Zorrilla la division de los progresistas 2 4 El gobierno de Malcampo el fracaso de la reunificacion de los progresistas 3 El segundo ano 3 1 El gobierno de Sagasta los conservadores constitucionales en el poder 3 2 La insurreccion carlista 3 3 La caida del gobierno de Sagasta y el gobierno relampago de Serrano el fin del proyecto conservador 3 4 El segundo gobierno de Ruiz Zorrilla el fracaso de los radicales 4 La abdicacion de Amadeo I y la proclamacion de la Republica 4 1 El conflicto de los radicales con el rey 4 2 La abdicacion 4 3 La proclamacion de la Republica 5 Valoracion 6 Referencias 6 1 BibliografiaLa eleccion de Amadeo de Saboya como rey de Espana EditarArticulo principal Gobierno Provisional de 1868 1871 Prim Serrano y Topete subastan la Corona espanola La Flaca 1869 Encontrar un rey se convirtio en un grave problema interno las fuerzas politicas que habian derribado a Isabel II no se ponian de acuerdo en quien deberia sustituirla el duque de Montpensier los unionistas Fernando de Sajonia Coburgo los progresistas 3 y tambien internacional pues se desataron las rivalidades entre las principales potencias europeas todas ellas monarquias para colocar cada una de ellas a su candidato en el trono vacante de la Corona de Espana El gobierno espanol anuncio la candidatura del principe prusiano Leopoldo de Hohenzollern Sigmaringen pero pronto encontro la negativa de Napoleon III que en plena rivalidad con Prusia entendia como una amenaza proxima el hecho de que dos territorios fronterizos con Francia estuviesen encabezados por miembros de la misma casa real Incluso de aqui nacio el pretexto para el inicio de la guerra francoprusiana de 1870 1871 y cuyo resultado fue la victoria prusiana a raiz de la cual naceria el Imperio Aleman el destronamiento de Napoleon III y la proclamacion de la Tercera Republica Francesa Igualmente Napoleon III se opuso a la candidatura de Antonio de Orleans duque de Montpensier dado el antagonismo entre las casas dinasticas francesas los Bonaparte y los Orleans ademas el entronque familiar de Montpensier con los Borbones era cunado de la destronada Isabel II hizo que esta opcion fuera muy poco apoyada por los partidos monarquicos democraticos espanoles Solo quedaba la candidatura italiana de la casa de Saboya impulsada por Prim desde el verano de 1870 hasta convertirse en su principal valedor 4 Embarque del rey Amadeo en el puerto de La Spezia Italia en 1870 obra de Luis Alvarez Catala El 16 de noviembre de 1870 las Cortes Constituyentes eligieron al duque Amadeo de Aosta segundo hijo del rey de Italia Victor Manuel II como nuevo rey de Espana con el nombre de Amadeo I Votaron a favor 191 diputados en contra 100 y hubo 19 abstenciones 60 votaron por la republica federal 27 por Alfonso duque de Montpensier y 8 por el general Espartero 5 La solucion no satisfacia mas que a los progresistas y fue aceptada con enorme frialdad por la opinion publica espanola que no llego a sentir nunca el menor entusiasmo por el principe italiano 6 El padre Luis Coloma en su famosa novela Pequeneces hizo referencia a una grotesca satira titulada El Principe Lila que se celebro en los jardines del Retiro de Madrid en la que designaban al monarca reinante con el nombre de Macarroni I mientras un gentio inmenso de todos los colores y matices aplaudia 7 El primer ano Editar Amadeo I frente al feretro del general Prim Obra de Antonio Gisbert 1871 El reinado de Amadeo I no pudo abrirse con peores pronosticos porque nada mas desembarcar en Espana el 30 de diciembre de 1870 le comunicaron la noticia de que el general Prim su principal valedor habia muerto victima de un atentado que habia tenido lugar en Madrid tres dias antes cuando se dirigia del Congreso a su domicilio Este hecho privo a Amadeo I de un apoyo indispensable sobre todo en los primeros momentos y que habria sido decisivo si tenemos en cuenta que el progresismo acabo escindido entre los dos herederos de Prim Praxedes Mateo Sagasta y Manuel Ruiz Zorrilla 8 El nuevo rey entro en Madrid el 2 de enero de 1871 y ese mismo dia juro la Constitucion de 1869 ante las Cortes 9 Mas tarde se dirigio a la iglesia de la Virgen de Atocha donde se habia instalado la capilla ardiente del general Prim momento que inmortalizo el pintor Antonio Gisbert 10 El gobierno del general Serrano el fracaso de la conciliacion Editar Tras el asesinato del general Prim se habia formado un gobierno de conciliacion presidido por el Almirante Topete peticion de Prim en su lecho de muerte 10 En esta misma linea Amadeo I propuso a las Cortes como nuevo presidente del Consejo de Ministros al unionista general Serrano que desde la promulgacion de la Constitucion de 1869 hasta el juramento del nuevo rey habia sido el regente para que formara un gobierno de conciliacion Serrano cumplio las instrucciones del rey y formo un gobierno con todos los lideres de los grupos que integraban la coalicion monarquico democratica que sustentaba a la nueva monarquia los progresistas Sagasta que ocupo el ministerio de Gobernacion y Ruiz Zorrilla Fomento el democrata monarquico o cimbrio Cristino Martos o el unionista Adelardo Lopez de Ayala en Ultramar 11 12 Amadeo I rey de Espana El primer cometido del gobierno de Serrano que algunos de sus miembros consideraban de transicion fue preparar las primeras elecciones de la nueva Monarquia con el fin de obtener una comoda mayoria para la coalicion gubernamental Para ello se promulgo una ley electoral que volvio al viejo sistema moderado de los distritos en lugar de las circunscripciones provinciales que habia sido el sistema defendido hasta entonces por los progresistas y que habia sido el utilizado en las elecciones constituyentes del 1869 Con este cambio el gobierno podia ejercer mas facilmente su influencia moral en la mayoria de los distritos que eran rurales El objetivo de obtener una mayoria clara se cumplio aunque la oposicion integrada por carlistas y republicanos federales consiguio un elevado numero de diputados que pesaba todavia mas en las Cortes debido a la debilidad de la coalicion gubernamental 13 La coalicion gubernamental obtuvo 235 escanos unos 130 eran progresistas mas de 80 eran unionistas fronterizos o aostinos y unos 20 eran democratas monarquicos los republicanos 52 los carlistas 51 y 18 los moderados Por su parte los unionistas disidentes de Rios Rosas que seguian defendiendo la candidatura del duque de Montpensier y los de Antonio Canovas del Castillo que defendian los derechos del principe Alfonso de Borbon hijo de la reina destronada Isabel II obtuvieron siete y nueve escanos respectivamente 14 Cuando el gobierno del general Serrano y las Cortes tuvieron que acometer el desarrollo legislativo de los principios democraticos establecidos en la Constitucion de 1869 el jurado o la separacion de la Iglesia y el Estado por ejemplo o afrontar los problemas que se iban planteando la abolicion de las quintas la guerra y la abolicion de la esclavitud en Cuba la conflictividad social protagonizada por jornaleros y obreros etc surgieron las fricciones Los unionistas fronterizos y los progresistas sagastinos pensaban que coronada la Constitucion con la dinastia Saboya debia hacerse una politica que conservara lo existente Los democratas y progresistas de Ruiz Zorrilla creian que la consolidacion de lo conseguido dependia del establecimiento inmediato de un programa de reformas sociales economicas y politicas 15 Asi pues el enfrentamiento entre Sagasta y Ruiz Zorrilla se debio a sus diferencias en cuanto a la forma de afianzar la nueva monarquia parlamentaria Sagasta siguiendo la politica que seguramente habria defendido el general Prim propugnaba la conciliacion con los unionistas del general Serrano que serian los destinados a formar el partido de la derecha dinastica el partido conservador mientras el propio Sagasta al frente del Partido Progresista formaria la izquierda dinastica el partido liberal y al mismo tiempo propugnaba una politica implacable con los enemigos del regimen los carlistas y los republicanos federales Por el contrario Manuel Ruiz Zorrilla defendia mantener la alianza de los progresistas con los democratas monarquicos o cimbrios mediante la aplicacion de una politica reformista avanzada que en ultimo termino buscaria integrar en la nueva monarquia parlamentaria a los republicanos al hacerles ver que dentro de ella tambien podian alcanzar sus objetivos Para Sagasta esta politica era poner la monarquia en manos de sus enemigos e incluso desconfiaba del compromiso con la misma de Ruiz Zorrilla y de sus seguidores y por eso rechazaba de plano la colaboracion parlamentaria con los republicanos que si defendia Ruiz Zorrilla 16 La oposicion a la Monarquia de Amadeo I Editar La alta nobleza y la jerarquia eclesiastica no reconocieron a la nueva monarquia amadeista En principio porque era la institucionalizacion de la Revolucion de 1868 que habia puesto fin a la Monarquia isabelina en la que gozaban de una posicion privilegiada y porque temian que el nuevo poder iba a acabar con ellos o que iba a ser la antesala de republicanos y de socialistas contrarios a la propiedad y al Estado confesional La alta nobleza adopto una postura casticista arrogandose la defensa de unos supuestos valores nacionales frente al rey extranjero que se tradujo en el boicot a la corte y en los continuos desaires a la persona del rey Amadeo ante el que no disimulaban su fidelidad a los borbones destronados 17 El episodio mas conocido fue la llamada Rebelion de las Mantillas que relato el padre Luis Coloma en su conocida novela Pequeneces 18 El rey Amadeo de Saboya y su mujer Maria Victoria del Pozzo Ellas con sus alardes de espanolismo y sus algaradas aristocraticas habian conseguido hacer el vacio en torno de Don Amadeo de Saboya y la reina Maria Victoria acorralandolos en el Palacio de Oriente en medio de una corte cabos furrieles y tenderos acomodados segun la opinion de la duquesa de Bara de indecentillos anadia Leopoldina Pastor que no llegaban siquiera a indecentes Las damas acudian a la Fuente Castellana tendidas en sus carretelas con clasicas mantillas de blonda y peineta de teja y la flor de lis emblema de la Restauracion brillaba en todos los tocados que se lucian en teatros y saraos Por su parte la jerarquia eclesiastica veia en el rey Amadeo al hijo del rey de Italia Victor Manuel II que habia despojado al Papa Pio IX de los Estados Pontificios y ademas se oponia a la libertad de cultos y a otras medidas que podian culminar con la completa separacion de la Iglesia y el Estado 17 Y hay que tener presente que la jerarquia investida del espiritu intolerante y combativo que le habia proporcionado el Syllabus ejercia una notoria influencia no solo en las clases medias en su mayoria catolicas sino tambien en el mundo rural donde el parroco se constituia muchas veces en interprete de los sucesos que llegaban de fuera 7 El vacio de la vieja nobleza lo intento llenar Amadeo I con el ennoblecimiento de miembros de la burguesia industrial y financiera que si apoyo a la nueva monarquia democratica aunque tambien en este grupo social hubo deserciones sobre todo por parte del sector mas ligado al tema cubano debido a los proyectos abolicionistas de la esclavitud en Cuba y Puerto Rico de los gobiernos radicales 19 y de la burguesia industrial catalana que se oponia al librecambismo puesto en marcha en 1869 y que los radiciales continuaban defendiendo 20 Caricatura de La Flaca de agosto de 1869 en la que aparece el politico neocatolico Candido Nocedal como Sancho Panza y el pretendiente carlista Carlos VII como Don Quijote La Iglesia catolica aparece como telon de fondo Los carlistas que desde 1868 habian experimentado un auge sin precedentes ampliando su influencia mas alla de sus feudos tradicionales en el Pais Vasconavarro el interior de Cataluna y el norte de Valencia reivindicaban la monarquia tradicional encarnada en la figura del pretendiente Carlos VII nieto de Carlos Maria Isidro de la Primera Guerra Carlista Al principio tuvo mas peso el sector neocatolico encabezado por Nocedal que defendia la via legal es decir alcanzar un gran peso en las Cortes a traves de las elecciones llegandose a presentar en coalicion con los republicanos en las primeras elecciones a Cortes ordinarias y consiguiendo un buen resultado con 51 diputados y 21 senadores 19 La eleccion de Amadeo I les irrito profundamente y a partir de ese momento solo la influencia que Nocedal y el ala legalista ejercieron sobre don Carlos pudieron contener levantamientos prematuros En septiembre de 1871 don Carlos quiza contra sus propios deseos tuvo que frenar una vez mas a sus partidarios 21 Los republicanos se oponian a cualquier tipo de monarquia y continuaban defendiendo la Republica Federal algo que veian a su alcance tras la caida del Segundo Imperio en Francia Pero en el Partido Republicano Federal convivian bajo el manto mitico de la Republica diversos proyectos politicos desde los defensores a ultranza del derecho de propiedad hasta socialistas y desde los que propugnaban la republica unitaria un sector minoritario encabezado por Emilio Castelar hasta los que defendian el Estado Federal siguiendo el modelo de Estados Unidos y de Suiza que constituian el sector mayoritario con Francisco Pi y Margall y Nicolas Salmeron a su frente Tambien como en el carlismo existia la oposicion entre los partidarios de la via legal que no rehusaban la colaboracion con los radicales de Ruiz Zorrilla frente a los se que decantaban por la via insurreccional 22 El primer gobierno de Ruiz Zorrilla la division de los progresistas Editar El 15 de julio de 1871 los ministros democratas y progresistas radicales Martos Ruiz Zorrilla Beranger y Moret dimitieron para poner fin al gobierno de conciliacion de Serrano dar paso al deslinde de los campos entre conservadores y radicales de la coalicion gubernamental y formar un gobierno homogeneo El rey que seguia siendo partidario de la conciliacion no tuvo mas remedio entonces que nombrar el 24 de julio como nuevo presidente del gobierno a Manuel Ruiz Zorrilla Esta solucion supuso la derrota de los unionistas pero tambien la de Sagasta y los suyos en su proyecto de mantener la union mientras el nuevo regimen peligrara 23 Revista de tropas en Madrid por parte de Amadeo I dibujo de Daniel Urrabieta Vierge publicado en Le Monde Illustre el 9 de septiembre de 1871 En principio Ruiz Zorrilla intento que entraran en su gobierno los progresistas de Sagasta pero este se nego porque como explico en el Congreso el regimen no podia salvarse con una politica exclusiva de partido 24 Entonces Manuel Ruiz Zorrilla formo gobierno unicamente con los progresistas de su faccion y con los democratas y en el que el mismo asumio la cartera de Gobernacion con Eugenio Montero Rios en Gracia y Justicia el general Fernando Fernandez de Cordova en Guerra Servando Ruiz Gomez en Hacienda Santiago Diego Madrazo en Fomento Tomas Maria Mosquera en Ultramar y el vicealmirante Jose Maria Beranger en Marina Cristino Martos no acepto el ministerio de Estado y no formo parte del gobierno que presento su programa ante las Cortes el 25 de julio y cuyo lema fue libertad moralidad civismo 25 Los democratas consiguieron que Ruiz Zorrilla nombrara a Salustiano Olozaga presidente del Congreso de Diputados embajador en Paris y que a continuacion presentara a lider democrata Nicolas Maria Rivero para que ocupara el puesto que habia quedado vacante Ante esta maniobra los progresistas sagastinos propusieron al propio Sagasta para el puesto intentando evitar asi que un miembro destacado del grupo de los democratas a los que consideraban mas cercanos a la Republica que a la Monarquia lo ocupara Ruiz Zorrilla y Sagasta se reunieron el 1 y el 2 de octubre de 1871 para evitar la ruptura del partido progresista pero la oferta de Sagasta de retirar las dos candidaturas y pactar un candidato de consenso fue rechazada por Ruiz Zorrilla porque ello supondria que los democratas se unirian a los republicanos acabando con su proyecto reformista radical para afianzar la monarquia Durante esa conversacion Sagasta le dijo a Ruiz Zorrilla 26 Puesto tu en la alternativa de eliminar a los cimbrios los democratas o de dividir al Partido Progresista una parte del cual quiere que su credo prevalezca y se ejecute fielmente tu no has vacilado te quedas con los cimbrios y rompes con tus amigos de siempre las consecuencias seran funestas para todos pero la culpa no es mia En la votacion para la presidencia del Congreso celebrada el 3 de octubre gano Sagasta a Rivero por 123 votos contra 113 solo hubo dos votos en blanco por lo que a continuacion Ruiz Zorrilla que entendio el resultado como un voto de censura al gobierno presento la dimision El rey Amadeo I acababa de volver de un viaje que habia realizado por varias provincias del este de Espana junto a su esposa y que habia sido organizado por el gobierno para aumentar su popularidad y en el que habia pasado por Logrono para visitar al general Espartero que estaba retirado aunque seguia gozando de una enorme popularidad entre los liberales progresistas que lo consideraban su patriarca y quien le aseguro su lealtad porque habia sido elegido por la voluntad nacional Cuando Amadeo I se entrevisto con Ruiz Zorrilla este le pidio que disolviera las Cortes y convocara nuevas elecciones a lo que el rey se nego porque no vio ninguna razon constitucional o parlamentaria para hacerlo no habia perdido la mayoria parlamentaria que lo apoyaba ni habia habido formalmente ningun voto de censura contra el mismo valoracion que vio confirmada cuando se entrevisto con Sagasta quien le aseguro que el y sus seguidores seguian apoyando el programa que el gobierno habia presentado el 25 de julio por lo que le pidio al rey que hiciera entrar en razon a Ruiz Zorrilla para que continuara al frente del consejo de ministros 27 El gobierno de Malcampo el fracaso de la reunificacion de los progresistas Editar Contralmirante Jose Malcampo presidente del gobierno entre el 5 de octubre y el 21 de diciembre de 1871 Como Ruiz Zorrilla no cambio de opinion entonces el rey despues de recibir la negativa del general Espartero para presidir el nuevo gobierno alegando su avanzada edad encargo la formacion de gobierno a Sagasta pero este le propuso para que no pareciera que hacia oposicion a Ruiz Zorrilla que nombrara en su lugar a otro progresista de su grupo el contralmirante Jose Malcampo un marino que habia acompanado al vicealmirante Topete en la Revolucion de 1868 lo que le daba prestigio y autoridad revolucionarias y se creia dificil que se le pudiera calificar como reaccionario por los radicales presuncion inocente en la que fallaron 28 Su gobierno sirvio de puente al que finalmente encabezo el propio Sagasta el 21 de diciembre de 1871 29 pero el partido progresista la principal fuerza politica que sustentaba a la Monarquia de Amadeo I se habia roto en dos un sector mas conservador y cercano a los planteamientos de la Union Liberal encabezado por Praxedes Mateo Sagasta y otro mas avanzado encabezado por Manuel Ruiz Zorrilla que se autodenominaba progresista democratico o tambien Partido Radical y que integraba a los democratas monarquicos o cimbrios liderados por Cristino Martos y por Nicolas Maria Rivero 30 El sector progresista encabezado por Sagasta no abandono la idea de lograr la reunificacion del Partido Progresista pero sobre la base de su programa historico que anteponia la soberania nacional a los derechos individuales por lo que estos podrian ser regulados por las Cortes para asegurar la compatibilidad entre la libertad y el orden mientras que los democratas y los zorrillistas defendian la ilegislabilidad de los mismos y que de las extralimitaciones en su uso se ocuparan los tribunales de justicia De esta forma lo que Sagasta pedia a Ruiz Zorrilla es que abandonara su alianza con los democratas o que estos aceptaran la superioridad del principio de la soberania nacional Por eso Sagasta entendio el gobierno de Malcampo como un Ministerio de transicion a la espera de la reunificacion progresista y por eso tambien los ministros del gabinete eran exclusivamente progresistas no se incluyo ningun miembro de la Union Liberal y el programa de gobierno que presento en las Cortes el nuevo presidente fue el mismo que habia propuesto Ruiz Zorrilla el 25 de julio 31 Sin embargo la primera respuesta de los zorrillistas fue proclamar unilateralmente a su lider como jefe activo del Partido Progresista democratico reconociendo como jefe pasivo del mismo al general Espartero Manuel Ruiz Zorrilla seguia convencido de que con reformas economicas y sociales acercaria la monarquia democratica al pueblo alejandolo del federalismo y del socialismo y haria que en un futuro cercano la benevolencia republicana se transformara en fusion en el partido liberal 32 Ante esta iniciativa los progresistas de Sagasta constituyeron el 20 de octubre su propia Junta directiva del Partido Progresista democratico con lo que se formalizo la ruptura del mismo Los intentos de algunos grupos y de personalidades progresistas como Angel Fernandez de los Rios de recomponer la unidad del partido fracasaron la apelacion a los viejos lideres como Salustiano Olozaga o el general Espartero tampoco funciono porque ambos se decantaron por el sector de Sagasta 31 El debate en las Cortes sobre la ilegalizacion de la seccion espanola de la AIT Emblema del Consejo Federal de Espana de la AIT Una oportunidad para la reunificacion se planteo cuando el gobierno de Malcampo deseoso de mostrar al pais que la monarquia democratica no era sinonimo de desorden o de anarquia mansa propuso a la Cortes que votaran a favor de la ilegalizacion de la seccion espanola de la Asociacion Internacional de Trabajadores AIT que se habia fundado en junio del ano anterior en un congreso celebrado en Barcelona al considerarla fuera de la Constitucion El motivo de fondo era la enorme repercusion que habia tenido la insurreccion obrera de la Comuna de Paris de marzo mayo de 1871 y que habia extendido el temor al socialismo entre las clases propietarias de toda Europa de hecho cuando en la festividad del 2 de mayo los internacionalistas intentaron celebrar un banquete de confraternidad entre espanoles y franceses fue disuelto por la partida de la porra que el gobierno utilizaba para llevar la violencia mas alla de los limites que fijaba la ley 33 34 Los unionistas de Serrano y los progresistas del sector de Sagasta que apoyaban al gobierno estaban a favor de la ilegalizacion postura a la que tambien se sumaron los diputados carlistas porque consideraban a los internacionalistas los enemigos de la sociedad mientras que los republicanos estaban en contra porque defendian el inalienable derecho de asociacion y veian la medida como obra de la reaccion El problema se planteo en el seno del grupo de Ruiz Zorrilla porque por un lado estaban de acuerdo con los republicanos en que el derecho de asociacion debia prevalecer pero por otro lado no querian que las clases medias y conservadores e incluso por el propio rey los vieran como defensores del desorden que personificaban los internacionalistas y que se habia manifestado en la Comuna de Paris La solucion final que adopto Ruiz Zorrilla fue no apoyar al gobierno de Malcampo pero tampoco a los republicanos por lo que opto por la abstencion perdiendose asi una ultima oportunidad para la reunificacion de los progresistas Para el historiador Jorge Vilches este momento fue decisivo porque el voto a favor del gobierno habria hecho posible la conversion del progresista en el partido liberal que turnase con los unionistas transformados en los conservadores constitucionales Este sistema de partidos podria haber dado mayor estabilidad que el que pretendia Ruiz Zorrilla y por consiguiente culminar con exito el intento de afianzar en Espana una monarquia constitucional que asegurara la libertad y el orden El 10 de noviembre de 1871 tuvo lugar la votacion en las Cortes en la que 192 diputados unionistas progresistas sagastinos y carlistas se manifestaron a favor de la prohibicion de la AIT y 38 en contra los republicanos federales 35 Sin embargo la prohibicion de la AIT votada en las Cortes no llego a aplicarse a causa de la intervencion del fiscal del Tribunal Supremo que insistio en que la Constitucion de 1869 al reconocer el derecho de asociacion amparaba a la AIT Asi pues la seccion espanola de la AIT pudo continuar con sus actividades consiguiendo extenderse fuera de Cataluna especialmente entre los jornaleros de Andalucia y los obreros y artesanos de Valencia y Murcia y celebrando su segundo Congreso en Zaragoza en abril de 1872 en el que se impusieron las tesis bakuninistas lo que quedo confirmado en el Congreso de Cordoba celebrado entre el 25 de diciembre de 1872 y el 3 de enero de 1873 36 Voto de censura al gobierno y suspension de las CortesEl 13 de noviembre solo tres dias despues de su derrota en la votacion de la ilegalizacion de la AIT los radicales de Ruiz Zorrilla presentaron un voto de censura contra el gobierno de Malcampo al que un periodico zorrillista califico de Ministerio pirata aduciendo que se habia apropiado indebidamente del gobierno La razon ultima de la decision era que pretendian acceder al gobierno antes de que el de Malcampo pudiera convocar elecciones y obtener una mayoria en el Congreso ya que estaba a punto de finalizar el plazo de cuatro meses que la Constitucion fijaba entre eleccion y eleccion Los carlistas vieron su oportunidad y presentaron un mocion sobre asociaciones religiosas esperando que se sumaran a ella los republicanos y los radicales y asi derribar al gobierno en lo que estaban de acuerdo los tres grupos Cuando el 17 de noviembre las votaciones mostraron que el gobierno se encontraba en minoria en las Cortes pues solo encontro el apoyo de los progresistas historicos de Sagasta y los unionistas que sumaron 127 diputados frente a los 166 de carlistas radicales y republicanos el gobierno consiguio del rey el decreto de suspension de las Cortes y Malcampo no se vio obligado a dimitir El rey explico a su padre el rey de Italia que habia firmado el decreto por el escandalo que habia producido la union de los radicales con los antidinasticos carlistas y republicanos Cuando se levanto la sesion los federales gritaron Viva la Republica Algunos radicales llegaron a calificar la decision del rey aun reconociendo que era constitucional como golpe de estado 37 Elecciones municipalesLos radicales continuaron con su oposicion frontal al gobierno y en las elecciones municipales del 9 de diciembre se volvieron a coaligar con los partidos antidinasticos aunque esta vez solo con el Partido Republicano Federal El resultado de las elecciones en las que la abstencion fue alta entre el 40 y el 50 fue muy controvertido pues todos los partidos se atribuyeron la victoria El diario zorrillista El Imparcial afirmo que el gobierno habia sido derrotado porque de los 600 municipios importantes solo 200 habia sido ganados por los ministeriales mientras que los otros 400 habian sido ganados por los contrarios al gobierno 250 los radicales 180 los republicanos y 50 los carlistas En cambio si solo se contabilizaban las capitales de provincia el resultado habia sido favorable al gobierno como asi se apresuro a presentarselo al rey el ministro de la Gobernacion pues los candidatos gubernamentales habrian ganado en 25 entre ellas Barcelona Sevilla Cadiz y Malaga mientras que los opuestos al gobierno habrian sumado 22 de ellas los radicales solo 3 aunque una era Madrid mientras los republicanos conseguian 14 entre ellas Valencia La Coruna y Granada y los carlistas 5 Asi que el rey no hizo caso a los requerimientos de Ruiz Zorrilla para que le entregara el poder a el con el argumento de que el gobierno habia sido derrotado en las elecciones 38 El fin del gobierno Malcampo y el nombramiento de SagastaTras las elecciones municipales el rey dio un plazo de una semana al gobierno para que reabriera las Cortes siendo consciente de que cuando esto sucediera el gobierno se veria obligado a dimitir Por eso aseguro a los lideres politicos que su sustituto al que concederia el decreto de disolucion de las Cortes y la convocatoria de nuevas elecciones seria aquel que reuniera el maggior numero di voti dinastici el que obtuviera el mayor numero de votos de los partidos dinasticos con lo que invalidaba las maniobras de radicales republicanos y carlistas para sumar sus diputados para derribar al gobierno Finalmente Malcampo que desde el 17 de noviembre no veia sentido a la continuidad de su gobierno pues cada vez estaba mas lejana la posibilidad de reunificar el partido progresista dimitio el 19 de diciembre anticipandose a la reapertura de las Cortes El designado para sustituirle fue Praxedes Mateo Sagasta siguiendo la practica parlamentaria de que cuando un presidente del gobierno dimitia sin causa constitucional o perdida de la mayoria le debia sustituir el presidente del Congreso Sagasta formo su gobierno dos dias despues 39 El segundo ano Editar Si en 1871 se habian sucedido las crisis gubernamentales en 1872 la insistencia de esas mismas crisis redundo en un progresivo deterioro de la vida politica y parlamentaria Un desequilibrio politico de efectos nefastos para la monarquia de Amadeo I 40 El gobierno de Sagasta los conservadores constitucionales en el poder Editar Praxedes Mateo Sagasta En principio Sagasta ofrecio una amplia participacion en su gobierno a los radicales de Ruiz Zorrilla cuatro carteras la mitad del gabinete pero estos rechazaron la oferta porque eso supondria separarse de los democratas y la ruptura del pacto de benevolencia con los republicanos en el encuentro que mantuvieron Sagasta y Ruiz Zorrilla este le contesto que el ya era algo mas que progresista era radical Sagasta se vio entonces obligado a buscar la alianza con los unionistas del general Serrano que se integraron en su gobierno aunque con una sola cartera la de Ultramar que ocupo el almirante Topete El resto eran progresistas historicos incluido el anterior jefe de gobierno el contraalmirante Jose Malcampo que se encargo de las carteras de Guerra y de Marina Bonifacio de Blas Santiago de Angulo Francisco de Paula Angulo y Alonso Colmenares 41 En la presentacion del nuevo gobierno ante las Cortes el 22 de enero de 1872 lo definio como progresista conservador pues pretendia mantener los derechos de la Constitucion al tiempo que el cumplimiento de los deberes inherentes a ellos Despues de defender la Monarquia como un fundamento esencial de las libertades publicas concluyo proponiendo un sistema de partidos leales y benevolentes sin politicas extremas o excluyentes sino conciliadoras mas progresivo el uno menos progresivo el otro pero liberal conservador el uno y conservador liberal el otro En la votacion el gobierno salio derrotado pero como obtuvo mas votos dinasticos a favor que en contra el rey cumplio su palabra y le otorgo a Sagasta el decreto de disolucion de las Cortes para que convocara nuevas elecciones a fin de asegurarse una mayoria solida en la camara que le permitiera gobernar La respuesta de Ruiz Zorrilla se puede resumir en la consigna Radicales a defenderse y en la exclamacion Dios salve al pais Dios salve a la dinastia Dios salve a la libertad Los republicanos fueron mucho mas lejos al afirmar que el rey ha roto con el Parlamento que hoy acaba la dinastia de Saboya 42 Los radicales atribuyeron la decision del rey a la existencia de una supuesta camarilla en la corte que como en los tiempos de Isabel II estaba conjurada para impedirles el acceso al poder Segun ellos estaba formada por los consejeros italianos del monarca Dragonetti y Ronchi y por los conservadores que visitaban al rey y por los neocatolicos que influian en la muy catolica reina Maria Victoria Asi al dia siguiente de ser confirmado Sagasta al frente del gobierno Ruiz Zorrilla critico la decision del rey en las Cortes e hizo un alegato en favor del derecho a la insurreccion porque creia que las libertades estaban amenazadas Amadeo I dejo de ser intocable para los periodicos radicales El despecho fue tal que a la habitual comida que los viernes daba el rey en palacio comenzaron a faltar todos los lideres radicales invitados aludiendo indisposicion salvo Moret En una reunion electoral celebrada en Madrid el 2 de febrero Jose Echegaray dijo que habia que abrir las ventanas del Palacio de Oriente para le oreara el aire de la libertad y en un articulo de fondo del diario El Imparcial del 22 de febrero se decia que el partido radical desdenado continua por el rey como desdenado fue siempre equiparando asi las monarquias de Amadeo I y de Isabel II El gobierno de Sagasta fue calificado como Ministerio reaccionario 43 En una carta escrita a su padre el radical Francisco Salmeron que era uno de los progresistas exaltados que mas habia defendido la alianza del Partido Progresista con los democratas cimbrios decia en enero de 1872 Palacio no es hostil pues el Rey se da las delicias de las cortesanas y la Reina hacia politica neo El infame Sagasta hace implacable guerra a los radicales y los villanos pseudo conservadores explotan su sana para absorberle y fascinan al Rey para hundirle Nosotros los radicales vamos a la lucha electoral con la evidencia de una derrota luego presenciaremos retraidos el cataclismo que preparan las iniquidades del Gobierno las ingratitudes del Monarca las perfidias unionistas y los sagastistas furibundos Al fin se hara la luz lo que ignoro es quien sobrenadara en el diluvio El nacimiento del Partido Constitucional y de la coalicion nacional La coalicion nacional A las urnas caricatura de Jose Luis Pellicer publicada el 10 de marzo de 1872 en Gil Blas en la que aparecen representados en primer plano Martos Pi y Margall y Ruiz Zorrilla y en segundo plano el alfonsismo y el carlismo Para preparar las elecciones los progresistas de Sagasta y los unionistas formaron un comite electoral conjunto que hizo publico un manifiesto en el que se resumia el programa de gobierno presentado el 22 de enero Los unionistas lo entendieron como el primer paso para formar un unico partido pero Sagasta se resistia porque pretendia formar un tercer partido entre unionistas y radicales que atrajera lo mejor de ambos bandos manteniendo asi viva la idea de reunificar el progresismo El rey intervino y para que se le entendiera al no hablar bien el castellano le pidio al unionista Jose Luis Albareda que visitaba al rey con asiduidad que le escribiera un papelito en el que propugnaba la formacion de un Partido Conservador que se alternaria con el Partido Radical en el poder cuando asi lo decidieran los electores De esta forma cerraba la puerta al tercer partido y Sagasta que inicialmente presento la dimision al sentirse desautorizado por el rey se vio obligado a aceptar la fusion al amenazar el rey con entregar el poder al Partido Radical Asi nacio el 21 de febrero de 1872 el nuevo partido que se llamo Partido Constitucional porque su objetivo era la defensa de la dinastia y de la Constitucion e inmediatamente se remodelo el gobierno integrado por cuatro progresistas ademas de Sagasta y tres unionistas El eslogan del nuevo Partido Constitucional en las elecciones de 2 de abril fue Libertad Constitucion de 1869 dinastia de Amadeo I e integridad del territorio 44 Por su parte el Partido Radical en su afan de derribar al gobierno extendio la coalicion nacional que habia formado con los republicanos con motivo las elecciones municipales de diciembre de 1871 al otro partido antisistema el carlista con el objetivo comun sin que ninguno de los tres partidos renunciara a sus principios de vencer al Gobierno fruto de la inmoralidad y de la mentira porque la libertad y la honra de patria estan por encima de todo Mas tarde el Partido Moderado tambien se sumo a la coalicion Durante la campana se recurrio a la retorica patriotica como el de Espana libre e independiente en alusion al origen italiano del rey o como el argumento que utilizo el republicano Emilio Castelar para convencer a sus companeros de partido de que apoyaran la coalicion nacional afirmando que se formaba para defender el gobierno de Espana por los espanoles y que en el manifiesto electoral republicano del 29 de marzo se convirtio en el eslogan Espana para los espanoles Los partidos de la coalicion nacional se comprometieron a presentar un unico candidato por distrito el del partido que hubiera obtenido mejores resultados en las anteriores elecciones y votarles todos a el 45 Las elecciones de abril de 1872El resultado de las elecciones generales de abril de 1872 fue una victoria aplastante para los constitucionales consiguieron la mayoria absoluta con mas diputados de procedencia unionista que progresista lo que favorecio el liderazgo de general Serrano frente a Sagasta gracias a que el gobierno ejercio su influencia moral el constitucional Andres Borrego lo justifico diciendo que el gobierno no tenia mas remedio que oponer a la audacia de las oposiciones la audacia de las administraciones a pesar de que el rey le habia pedido a Sagasta limpieza a lo que este le habia respondido que las elecciones serian todo lo puras que pueden serlo en Espana Republicanos y carlistas perdieron diputados lo que fortalecio a sus respectivas alas intransigentes que se habian opuesto a la participacion en las elecciones pero los grandes derrotados fueron los radicales que solo obtuvieron 42 escanos por debajo incluso de los republicanos lo que puso en cuestion el liderazgo de Ruiz Zorrilla y tambien les llevo a plantearse el abandono de la via legal para alcanzar el gobierno 46 Sin embargo la suma de radicales carlistas republicanos federales y moderados alfonsinos no era desdenable pues entre todos sumaban casi 150 diputados 47 En las elecciones de abril se produjo una gran abstencion debido a la campana promovida por los republicanos intransigentes y al desinteres general 48 y tambien hubo desordenes en las provincias de preponderancia carlista Pais Vasco y Navarra y republicana federal las de la costa mediterranea 49 Asi pues con las elecciones de abril de 1872 se consumo la ruptura legal del Partido Progresista ya que de la alianza del sector encabezado por Sagasta con la Union Liberal del general Serrano surgio un nuevo partido el Partido Constitucional mientras que Manuel Ruiz Zorrilla quedo al frente del Partido Radical resultado de la union de su grupo de progresistas avanzados con los democratas monarquicos o cimbrios liderados por Cristino Martos y por Nicolas Maria Rivero 30 La insurreccion carlista Editar Carlos Maria de Borbon y Austria Este el pretendiente carlista Carlos VII Apertura de las Cortes en Madrid al final del discurso del rey los diputados gritan Muerte a los carlistas Le Monde Illustre mayo de 1872 En las elecciones de abril de 1872 los carlistas sufrieron un relativo descalabro bajando de 51 a 38 diputados por lo que los partidarios de la via insurreccional se impusieron a los neocatolicos de Candido Nocedal defensores de la via parlamentaria Asi los carlistas variaron de postura e hicieron buena la ultima frase del manifiesto del 8 de marzo ahora a las urnas despues a donde Dios nos llame es decir a la guerra 50 El 14 de abril el pretendiente Carlos VII dio la orden de que los diputados electos no acudieran a las Cortes y de que se iniciara la insurreccion armada que estaba planeada y organizada desde mucho antes por si fallaba la estrategia de Candido Nocedal quien dimitio inmediatamente de todos sus cargos 51 Don Carlos VII proclamo en un manifiesto los motivos del levantamiento y llamo a todos los espanoles a que se sumaran a el La santa religion de nuestros padres esta perseguida los buenos oprimidos honrada la inmoralidad triunfante la anarquia la hacienda publica entrada a saco el credito perdido la propiedad amenazada la industria exanime Si siguen asi las cosas el pobre pueblo queda sin pan y la Espana sin honra Nuestros padres no hubieran soportado tanto seamos dignos de nuestros padres Por nuestro Dios por nuestra Patria y por vuestro Rey levantaos espanoles Asi comenzaba la Tercera Guerra Carlista El 2 de mayo entraba en Espana por Vera de Bidasoa el pretendiente carlista al grito de Abajo el extranjero y viva Espana Dos dias despues tenia lugar la batalla de Oroquieta en la que los carlistas fueron derrotados lo que obligo al pretendiente a huir a Francia Ante la ausencia de una cabeza visible de la sublevacion el general Serrano que comandaba el ejercito del Norte y que acababa de recibir la notificacion del rey de que le habia encargado la presidencia del gobierno tras la dimision de Sagasta firmo el 24 de mayo con los diputados a guerra de la Diputacion foral de Vizcaya que se habia proclamado a favor del pretendiente carlista el convenio de Amorebieta en el que se ponia fin al conflicto concediendo el indulto a todos los sublevados que entregaran las armas y que incluia un articulo el 4º en el que se devolvia a sus empleos a los jefes y oficiales que se habian sumado a la rebelion Esta ultima concesion levanto muchas criticas en el seno del Ejercito y entre la oposicion radical y republicana por considerarla demasiado generosa con los sublevados y por haberse atribuido el general Serrano facultades que no tenia 52 El Convenio de Amorebieta puso fin a la guerra en el pais vasconavarro pero las partidas carlistas siguieron actuando en Cataluna el 16 de junio el pretendiente prometio devolver los fueros catalanes que habia sido abolidos por Felipe V con los decretos de Nueva Planta de 1714 53 hasta que en diciembre de 1872 se produjo una nueva insurreccion en la zona vasconavarra la guerra se prolongaria mas alla del reinado de Amadeo I hasta 1876 54 La caida del gobierno de Sagasta y el gobierno relampago de Serrano el fin del proyecto conservador Editar El gobierno de Sagasta duro poco tiempo porque al mes siguiente de celebrarse las elecciones estallo un escandalo que acabo con el El 11 de mayo un diputado republicano le pidio cuentas por el destino de dos millones de reales que habian sido desviados por orden del gobierno del ministerio de Ultramar al de Gobernacion previsiblemente para emplearlos en las operaciones de corrupcion que se habian producido en las elecciones uno de los metodos utilizados era el de los lazaros el uso de difuntos para engrosar la lista de votantes adictos a las candidaturas gubernamentales 55 Tambien se dijo que el dinero habria sido destinado a evitar el escandalo de alguna de las aventuras amorosas del rey Amadeo o de la esposa del general Serrano con uno de sus ayudantes pero parece seguro que el dinero se gasto en las corruptelas electorales 47 El gobierno de Sagasta no dio una explicacion satisfactoria del destino del dinero Alego que habia servido para realizar pagos de naturaleza reservada para prevenir conspiraciones pero los papeles que presento para justificarlo eran inventados y registraban los pagos sin autorizacion alguna ademas de que demostraban que se habia violado la correspondencia 47 Atrapado el presidente del Consejo de Ministros pidio un voto de confianza a la mayoria que lo sustentaba pero le fue negado A los unionistas no les importaba tanto el destino de los dos millones como las ilegalidades y la imagen de un partido y Gobierno conservadores que acababan de iniciar su andadura El 22 de mayo Sagasta presento la dimision al rey 56 General Serrano Cuatro dias despues Amadeo I nombro como nuevo presidente del consejo de ministros al general Serrano que estaba en aquellos momentos al frente del ejercito del norte que combatia a los carlistas El rey penso que Serrano podria gobernar porque su partido seguia teniendo la mayoria en las Cortes De hecho en el gobierno que formo habia tres antiguos progresistas y cinco antiguos unionistas uno de ellos de la faccion que encabezaba Antonio Canovas del Castillo que habia reconocido a Amadeo I pero que era alfonsino 57 La presentacion en el Congreso de los Diputados del nuevo gobierno el 27 de mayo de 1872 corrio a cargo del presidente interino el almirante Topete porque Serrano aun no habia vuelto a Madrid La sorpresa la dio Manuel Ruiz Zorrilla cuando anuncio que haria una oposicion leal legal y respetuosa al nuevo gobierno y que deseaba que agotara la legislatura lo que significaba un cambio completo de actitud porque suponia aceptar las reglas propias de la monarquia constitucional lo que fue inmediatamente contestado por buena parte de los miembros de su partido encabezados por Cristino Martos que no estaban dispuestos a esperar dos o tres anos para acceder al poder ni colaborar de ese modo con la reaccion Al no ver respaldada su postura por la mayoria de su partido Ruiz Zorrilla renuncio a su acta de diputado el 31 de mayo al dia siguiente de haberse entrevistado con el rey en el acto celebrado en Palacio por su cumpleanos y se retiro a su finca de Soria La Tablada alegando que le faltaba la energia suficiente para seguir en la politica Segun Jorge Vilches el camino antidinastico y presumiblemente insurreccional que iba a tomar el progresismo democratico no queria ser presenciado por Ruiz Zorrilla estando dentro de sus filas ni sentirse complice de una nueva guerra civil Por su parte la prensa afin al partido radical culpo al rey y a la reina de la marcha de Ruiz Zorrilla 58 Mientras tanto la firma del Convenio de Amorebieta a punto estuvo de dar al traste con el gobierno de Serrano pues inicialmente todos los ministros se mostraron contrarios al mismo especialmente con la base 4ª que reintegraba a los oficiales rebeldes al estamento militar porque era depresiva para la dignidad de nuestro ejercito generales destacados habian protestado ante el ministro de la Guerra y del Gobierno que la sancionase pero el respaldo del rey a Serrano acabo con la crisis y el convenio de Amorebieta fue ratificado no solo por el gobierno sino tambien por las Cortes donde solo votaron en contra los republicanos mientras los radicales se abstuvieron El 4 de junio Serrano juro su cargo como nuevo presidente del gobierno 59 A pesar de haber superado el tramite parlamentario los radicales ahora encabezados por Martos tras la retirada de Ruiz Zorrilla de la vida politica y los republicanos cuestionaron la legitimidad del gobierno de Serrano una de las razones era que habia incluido en el a un alfonsino 60 y el lenguaje prerrovolucionario se extendio por la presa radical y por la republicana con lemas como La revolucion ha muerto Viva la revolucion y con criticas no solo contra el gobierno conservador de Serrano sino contra los reyes en un articulo de El Imparcial publicado el 10 de junio se aludio implicitamente a la reina en un articulo titulado La loca del Vaticano 61 El 6 de junio solo dos dias despues de haber jurado Serrano su cargo los radicales convocaron en la Plaza Mayor de Madrid a la Milicia Nacional concretamente a los Voluntarios de la Libertad de Madrid para que se manifestaran en contra del gobierno Este entonces ordeno acuartelar a las tropas y a la Guardia Civil y solicitar al rey el 11 de junio la firma del decreto de suspension de las garantias constitucionales medida que habia sido refrendada por las Cortes para poder atajar la que parecia inminente insurreccion republicana a la que parecia que iban a sumarse los radicales una vez que Ruiz Zorrilla se habia retirado a su finca de Soria para lo que tenian convocada una asamblea a celebrar el 16 de junio bajo el lema la Revolucion de Septiembre y la libertad de la patria omitiendo mencionar a la dinastia por primera vez Entonces Amadeo I temeroso de que los radicales se pasaran definitivamente al campo antidinastico y de que pudiera estallar un grave conflicto civil se nego a firmar el decreto por lo que el general Serrano presento la dimision Ese mismo dia 12 de junio de 1872 los batallones de la Milicia Nacional se congregaban en la Plaza de Mayor pero al conocer la dimision del gobierno se disolvieron 62 El general Serrano sin llegar a cumplir veinte dias en el cargo se retiro a sus fincas de Arjona y declino presentarse a las nuevas elecciones lo que le eliminaba como alternativa de gobierno a los radicales fue entonces cuando le dijo a un diplomatico frances refiriendose al rey Hay que echar a ese imbecil 60 Como ha senalado Jorge Vilches tras la dimision de Serrano 63 la soledad del rey era casi completa en un pais con grandes oposiciones antidinasticas unos partidos constitucionales debiles pues el conservador se formo porque el les obligo y el radical ostentaba una lealtad proporcional a su cercania al poder Contaba ademas con unos lideres politicos que carecian de capacidad para aunar voluntades y conducir esfuerzos y un pueblo que no le apreciaba El 12 de junio de 1872 el bagaje era su principal mentor Prim muerto retirado otro Ruiz Zorrilla y cerca del procesamiento el ultimo Sagasta El Partido Radical por un lado estaba entre el dinastismo coyuntural y la republica El Partido Conservador Constitucional se sentia desairado y aun se sentiria mas humillado pues un gobierno radical no podria existir con unas Camaras contrarias Por ultimo se vivia con dos guerras civiles la carlista y la cubana y otra amenazadora la republicana Es mas un mes despues los reyes sufrieron un atentado contra su vida mientras paseaban por la calle Arenal de Madrid Cuando los constitucionales conocieron que el rey habia nombrado como nuevo presidente del Consejo de Ministros a Manuel Ruiz Zorrilla y que habia decretado la suspension de las sesiones de las Cortes a partir del 14 de junio lo que anunciaba su disolucion reunieron a sus diputados y senadores en una asamblea en la que Francisco Romero Robledo denuncio el golpe de Estado inaudito y desvergonzado que se habia producido y acordaron pedir al rey que no accediera a la condicion que habia puesto Ruiz Zorrilla para aceptar el cargo de presidente del gobierno la disolucion de las Cortes y la convocatoria de nuevas elecciones porque ademas de ser anticonstitucional no habian transcurrido los cuatro meses preceptivos desde las elecciones anteriores agravaria la inestabilidad del regimen que en ano y medio habia tenido tres elecciones generales unas municipales dos disoluciones anticipadas otras dos suspensiones de sesiones numerosas crisis parciales de Gobierno y seis totales A cambio prometieron su apoyo al nuevo gobierno 64 El segundo gobierno de Ruiz Zorrilla el fracaso de los radicales Editar Manuel Ruiz Zorrilla Tras la dimision de Serrano el rey encargo la formacion de gobierno al general Fernando Fernandez de Cordoba a la espera de la vuelta de Ruiz Zorrilla y las criticas a los reyes en la prensa radical cesaron Hasta trescientos radicales en cabezados por Nicolas Maria Rivero Jose Maria Beranger y Francisco Salmeron fueron a la finca de La Tablada para convencerle para que volviera a Madrid a hacerse cargo del gobierno y varios miles fueron a recibirle a su llegada a la capital Ruiz Zorrila puso como condicion al rey para aceptar la presidencia que disolviera las Cortes y convocara nuevas elecciones a sabiendas de que era un acto inconstitucional porque aun no habian trascurrido cuatro meses desde las ultimas elecciones Pero Amadeo I acepto el chantaje asi lo califica Jorge Vilches lo que provoco que el rey no fuera visto a partir de entonces como un rey de todos los espanoles arbitro de las instituciones y de los partidos sino como un monarca vinculado a un partido el radical 65 Segun Jorge Vilches las acciones llevadas a cabo por los radicales para primero ser llamados al poder amenazando con la insurreccion y luego para que el rey disolviera las Cortes aun contraviniendo la Constitucion pueden denominarse sin temor a dudas como un golpe de Estado 66 Manuel Ruiz Zorrilla formo gobierno el 13 de junio en el que el mismo asumio el ministerio de la Gobernacion y en el que habia dos antiguos democratas Martos en Estado y Echegaray en Fomento y cuatro antiguos progresistas Eduardo Gasset y Artime en Ultramar Servando Ruiz Gomez en Hacienda Eugenio Montero Rios en Gracia y Justicia y Beranger en Marina mas el general Fernandez de Cordoba en el ministerio de Guerra A Nicolas Maria Rivero se le prometio la presidencia del Congreso de los Diputados tras la celebracion de las elecciones 67 A continuacion se procedio al habitual cambio de funcionarios publicos echando a 40 000 de ellos para instalar a otros tantos fieles 68 El atentado contra los reyes del 18 de julio y los desaires a la Corona Tentativa regicida contra Amadeo I en la calle del Arenal Historia de la interinidad y guerra civil de Espana desde 1868 Vol 2 La sensacion de soledad del rey que ya solo contaba con el apoyo de los radicales de Ruiz Zorrilla se vio acentuada por el atentado que sufrio en la calle del Arenal de Madrid el 18 de julio junto a su esposa que aunque lograron salvar la vida le dejo muy impresionado 69 Una casualidad hizo que un amigo de Topete se enterara de que Amadeo iba a ser asesinado el dia 18 de julio por lo que informo a Martos y este se lo hizo saber al rey y a Pedro Mata gobernador civil de Madrid El monarca se nego a cambiar el recorrido de su paseo a pesar de las indicaciones de la reina Victoria por lo que Mata coloco agentes en todo el trayecto los cuales esperaron a que los regicidas dispararan para detenerles La actitud del gobernador para impedirlo fue duramente criticada Los autores del atentado republicanos federales de Madrid fueron defendidos en el juicio por el abogado Francisco Pi y Margall Esta no fue la unica vejacion popular de los reyes pues su coche fue detenido y zarandeado en la calle de Alcala por una manifestacion de vendedores ambulantes En otra ocasion se les lanzo lodo cuando paseaban por Cedaceros Un dia cerca de El Retiro un hombre se acerco al monarca y le insulto gravemente a la cara Otra persona se introdujo armada dentro del recinto regio Y hasta se les tiro una piedra en una manifestacion republicana cercana al Palacio Real Esto sin contar con los insultos que vinieron del lado aristocratico como la famosa anecdota de las mantillas los desaires en los palcos de los teatros en los que por cierto se presentaba bufamente al rey y el vacio al que sometieron a la reina Maria Victoria No fue grata para los reyes su estancia en Espana 70 Las elecciones de agosto de 1872 y sus consecuenciasEn las elecciones de agosto de 1872 los radicales presentaron un programa de reformas ambicioso que incluia el jurado la abolicion de las quintas y de las matriculas de mar la separacion de la Iglesia y el Estado el impulso a la educacion publica el reforzamiento de la Milicia Nacional etc 48 Con este programa los radicales estaban decididos a cumplir las promesas hechas al cuarto estado a las clases populares en la revolucion de 1868 para asi darla por concluida 71 El entusiasmo inmenso la muchedumbre indescriptible caricatura de Amadeo I en la revista Gil Blas obra de Pellicer y publicada el 4 de agosto de 1872 La convocatoria de elecciones abrio un dificil debate en el seno del Partido Constitucional entre los partidarios de participar en ellas a pesar de que sabian que gracias a la influencia del gobierno su derrota estaba asegurada y los partidarios del retraimiento apoyados en la inconstitucionalidad de las mismas por lo que llamaban a Amadeo I el rey cautivo de los radicales Al final la junta del partido decidio el 5 de julio la participacion porque su ausencia en las Cortes haria mas facil la proclamacion de la Republica si los radicales democratas de Martos y Rivero abandonaban a Ruiz Zorrilla y se unian a los federales Pero la resolucion fue acogida con poco entusiasmo por los comites locales por lo que seguros de su derrota el partido Constitucional presento muy pocos candidatos y en la mitad de las provincias no presento ninguno 72 El retraimiento segun Angel Bahamonde constituyo una peligrosa actitud que ponia en cuestion no ya las mismas elecciones sino el sistema en su conjunto 69 a lo que se unia el hecho de que el propio lider del Partido Constitucional el general Serrano tampoco se presento por lo que no podria suceder a Ruiz Zorrilla en el Gobierno segun las practicas parlamentarias Segun Jorge Vilches la responsabilidad que contrajo Serrano con la viabilidad de la dinastia Saboya fue grande pues era el el jefe declarado del otro partido dinastico llamado en teoria a alternarse con el radical El significado de la dejacion no podia ser otro que el dar por terminada la experiencia 73 Su defeccion al frente del Partido Constitucional fue asumida por el almirante Topete Praxedes Mateo Sagasta y Antonio Rios Rosas que seguian creyendo en el proyecto de la monarquia democratica amadeista aunque seguian considerando a Serrano como presidente del partido 74 Las elecciones celebradas el 24 de agosto de 1872 gracias a la influencia moral del gobierno dieron la victoria a los candidatos del Partido Radical 274 diputados frente a 77 republicanos 14 constitucionalistas y 9 moderados aunque mas de la mitad de los electores no fueron a votar a causa del retraimiento del Partido Constitucionalista de la campana abstencionista de los carlistas y de una parte de los republicanos con el argumento de que las elecciones estaban amanadas ya que siempre ganaba el gobierno de turno y del desinteres general dada la falta de cultura politica entre una poblacion mayoritariamente analfabeta 69 75 Hubo un pacto tacito entre los radicales y los republicanos benevolentes propiciado por el ministro Cristino Martos para que en los distritos donde estos se presentaran los radicales no presentaran candidato y viceversa 66 Segun Jorge Vilches las repercusiones del resultado de las elecciones sobre la credibilidad de la revolucion de 1868 para las clases medias y conservadoras fueron muy negativas ya que el regimen giraba bruscamente a la izquierda tras una serie de ilegalidades cometidas por el Gobierno y refrendadas por Amadeo I y se anulaba al Partido Constitucional como alternativa dinastica al radical y portavoz o defensor de sus intereses 76 De ahi que empezaran a considerar a Amadeo I como un rey de partido el radical y comenzaran a decantarse por la opcion de la restauracion de los Borbones en la figura del principe Alfonso libre de los errores de su madre Isabel II 77 La alternativa del principe Alfonso habia cobrado un nuevo impulso desde que en abril de 1872 su tio el duque de Montpensier a instancias de la antigua regente Maria Cristina de Borbon lo habia reconocido como heredero de la dinastia legitima y lo habia presentado en una carta hecha publica el 20 de junio como un rey que no volveria a leyes e instituciones que ya caducaron y que recogeria lo que las pasadas crisis y revoluciones hayan creado de fecundo de util y de bueno Y tambien cuando los moderados alfonsinos mas liberales que pensaban que la vuelta a la Constitucion de 1845 ya no era posible se abrieron a los antiguos unionistas encabezados por Antonio Canovas del Castillo que habia quedado fuera de las Cortes por la presion gubernamental en los dos distritos por los que se presento y que daba por fracasada la monarquia democratica de Amadeo I porque segun el no habia sabido hacer compatible el orden con la libertad 78 El proyecto de abolicion de la esclavitud en Puerto RicoVease tambien Sociedad Abolicionista Espanola El 15 de septiembre de 1872 el gobierno de Ruiz Zorrilla presento su anunciado programa de reformas en las Cortes pero del mismo solo lograria sacar adelante la nueva Ley de Enjuiciamiento criminal a pesar de la amplia mayoria con que contaba en el Congreso 69 Una de las reformas mas importante que presento el nuevo gobierno la abolicion de la esclavitud en las colonias de las Antillas creo tensiones en su seno porque el ministro de Ultramar Eduardo Gasset y Artime era partidario de mantener el pacto de las Cortes constituyentes de 1869 de no introducir reformas en Cuba hasta que terminara la insurreccion asi como la ley Moret que abolia la esclavitud gradualmente en Puerto Rico 79 Cuando el gobierno planteo la abolicion inmediata de la esclavitud en Puerto Rico acompanada de la aplicacion del regimen provincial a la isla y la separacion de la autoridad politica de la militar Gasset y Artime dimitio y tambien el ministro de Hacienda Ruiz Gomez que se solidarizo con el siendo sustituido por Tomas Maria Mosquera que fue quien presento el proyecto el 24 de diciembre de 1872 haciendo coincidir la festividad del nacimiento de Jesucristo el salvador de los oprimidos con la exposicion de la liberacion de los esclavos 80 Este proyecto conto con el apoyo de los republicanos dentro de la camara y con el de la Sociedad Abolicionista Espanola fuera de ella Segun Angel Bahamonde la presion del Centro Hispano Ultramarino de Madrid que reunia a los comerciantes y hombres de negocios con intereses en las plantaciones de azucar en las Antillas y en el trafico de esclavos logro que el gobierno no extendiera su proyecto de abolicion inmediata a Cuba 69 Por otra parte el pretendiente carlista Carlos VII llego a ofrecer el envio a Cuba a quienes combatian por el en Cataluna y en Navarra para defender la integridad de la patria 81 Los conservadores consideraron que estos cambios ponian en riesgo los intereses espanoles en Puerto Rico porque liberar de forma inmediata a los 30 000 esclavos de las plantaciones a pesar de que los propietarios serian indemnizados y los esclavos mantendrian la condicion de libertos durante varios anos supondria la desestabilizacion de la isla conceder el regimen provincial haria que los municipios pudieran organizar su fuerza armada y oponerse a la politica gubernamental como de hecho estaba sucediendo en la metropoli y por ultimo la division del mando militar y civil debilitaria la autoridad del Estado para reprimir a los independentistas Ademas estas medidas en conjunto causarian un efecto negativo en Cuba al alentar a los sublevados Los radicales en cambio confiaban en que una muestra de buena voluntad por parte del Gobierno haria ver a los independentistas que con la paz podian obtener las mejoras prometidas por la revolucion 82 Ante una situacion en que el Partido Constitucional solo contaba con 14 diputados en las Cortes la oposicion a las reformas en Puerto Rico la asumieron los Centros hispano ultramarinos que habian nacido a finales de 1871 como grupos de presion cuya finalidad era oponerse a la abolicion inmediata de la esclavitud en Cuba y en Puerto Rico y a cualquier cambio que perjudicara los intereses sus miembros Su lema era Cuba espanola y presionaron a Amadeo I para que no firmara los decretos que le presentara el gobierno sobre reformas del regimen colonial En los Centros hispanoultramarinos ingresaron a finales de 1872 el Partido Constitucional de la mano de Serano que volvio a la vida politica por esta causa y de Adelardo Lopez de Ayala el Circulo moderado del conde de Toreno y de Manuel Garcia Barzanallana el Circulo de la Union Liberal al que pertenecia Canovas y la Grandeza de Espana liderada por el duque de Alba Cuando el gobierno presento el 24 de diciembre su proyecto de abolicion de la esclavitud en Puerto Rico los Centros hispanoultramarinos formaron una Liga Nacional que presento un Manifiesto a la nacion escrito por Lopez de Ayala en el que pedian la paralizacion de las reformas La Liga Nacional no deseaba la desestabilizacion del regimen o el cambio de dinastia La sustitucion del Gobierno de Ruiz Zorrilla por uno conservador en que estuvieran Augusto Ulloa Rios Rosas Sagasta Topete o Serrano les hubiera garantizado la satisfaccion de sus demandas sin salirse de la Constitucion pues estos hubieran paralizado el proceso de reformas 83 Las reformas paralizadas y la division de los radicalesComo ya habia sucedido con anteriores gobiernos la guerra carlista y la de Cuba impidieron que Ruiz Zorrilla pudiera cumplir su promesa de abolir las quintas por lo que cuando anuncio que iba a llamar a un nuevo reemplazo se produjeron algaradas en varias ciudades y alento a los republicanos federales intrasigentes a seguir defendiendo la via insurreccional El levantamiento mas grave protagonizado por estos tuvo lugar el 11 de octubre de 1872 en Ferrol que fracaso porque no encontro apoyos en la ciudad y porque en contra de lo que esperaban los sublevados no fue secundado en ningun otro lugar Ademas la direccion del partido republicano federal dominada por los benevolentes condeno la insurreccion porque como dijo Francisco Pi y Margall en las Cortes el 15 de octubre la insurreccion era un verdadero delito cuando estan plenamente aseguradas nuestras libertades individuales 84 La condena agravo las tensiones que ya padecia el partido entre los partidarios de la via legal como Pi y los defensores de la via insurreccional hasta el punto de que solo la proclamacion de la Republica cuatro meses despues evito que se produjera un nuevo levantamiento 85 A todo ello se sumo el recrudecimiento de la tercera guerra carlista a partir de diciembre de 1872 54 por lo que de nuevo la abolicion de las quintas fue aplazada con el consiguiente rechazo de los republicanos llegandose a formar algunas partidas en Andalucia si bien mucho menos peligrosas que las carlistas 85 Ante la dificil situacion que vivia el gobierno Ruiz Zorrilla intento restablecer las relaciones con el Partido Constitucional proponiendo que Sagasta no fuera juzgado por el Senado sino por los tribunales ordinarios por el escandalo de los dos millones de reales que le habia hecho perder el gobierno pero se encontro con la rebelion de los diputados de procedencia democrata liderados por el presidente del Congreso Nicolas Maria Rivero y por dos de sus ministros Martos y Echegaray que votaron junto con los republicanos para rechazar la propuesta Esta division en el partido que apoyaba al gobierno alento a los republicanos benevolentes a proseguir en su estrategia de atraer a su campo a los antiguos democratas cimbrios y conseguir una mayoria en el parlamento para poner fin a la monarquia y proclamar la Republica 86 La abdicacion de Amadeo I y la proclamacion de la Republica EditarEl conflicto de los radicales con el rey Editar El 29 de enero de 1873 los radicales mas extremistas tomaron como pretexto un supuesto desaire del rey a las Cortes al haber aplazado un dia el bautismo del heredero al trono que acababa de nacer a causa de que el parto habia sido dificil mientras el gobierno y los presidentes del Congreso y del Senado vestidos de gala para la ocasion esperaban en una antesala del palacio junto con el rumor de que el rey pretendia destituir al gobierno y sustituirlo por otro del partido constitucional se sabia que el rey se habia entrevistado con el general Serrano en Palacio para que asistiera al bautismo del principe aunque tras consultar con la junta directiva de su partido habia declinado la invitacion alegando motivos de salud para no dar a entender que aflojaban en su oposicion al gobierno radical y propusieron en las Cortes que se declarasen en sesion permanente en Convencion que solo la rapida llegada del Gobierno logro atajar Sin embargo la Camara declaro sin mas estar enterada del nacimiento del infante y no hubo ningun tipo de celebracion ni discursos El rey le comunico a Ruiz Zorrilla su disgusto por la actitud de las Cortes y que no estaba dispuesto a sufrir imposiciones de nadie y que se hallaba preparado para proceder segun lo aconsejaran las circunstancias Amadeo I escribio a su padre a principios de febrero que se estaba planteando abdicar porque 87 Yo vi que mi ministro en vez de trabajar en la consolidacion de la dinastia trabajaba de acuerdo con los republicanos para su caida Otro conflicto que seria el definitivo enfrento al gobierno y a las Cortes con el rey Ese mismo mes de enero de 1873 los oficiales del arma de artilleria habian desafiado el gobierno amenazando con dimitir si este mantenia como capitan general de las Vascongadas al general Hidalgo al que acusaban de haber colaborado en la abortada sublevacion del cuartel de San Gil de junio de 1866 La respuesta del gobierno con el apoyo de las Cortes fue reafirmar la supremacia del poder civil sobre el ejercito manteniendo el nombramiento y procediendo a reorganizar el arma por lo que los oficiales cumplieron su promesa y dimitieron en bloque 88 El 6 de febrero una delegacion de los artilleros dimitidos se entrevisto con el rey para pedir su intervencion en el conflicto que mantenian con el gobierno y ofreciendose para apoyar un golpe de fuerza que disolviera las Cortes y suspendiera por algun tiempo las garantias constitucionales hasta preparar nuevas elecciones para unas nuevas Cortes que aprobaran mas prerrogativas para la Corona El rey rechazo la propuesta del golpe de fuerza pero prometio que se opondria a la reorganizacion del arma de artilleria que preparaba el gobierno 89 Cuando el rey tuvo conocimiento ese mismo dia por la prensa de que el gobierno pensaba nombrar al general Hidalgo nuevo capitan general de Cataluna hizo llamar a Ruiz Zorrilla a Palacio El presidente le aseguro que lo que decia la prensa no era cierto pero al dia siguiente se confirmo el nombramiento por lo que el rey comprobo que Zorrilla me habia mentido Intento que el gobierno diera marcha atras y llamo a Ruiz Zorrilla el dia 7 de febrero por la manana y otra vez por la tarde cuando supo que la cuestion de la reorganizacion del arma de artilleria iba a ser tratada en el Congreso de Diputados aconsejandole que no lo hiciera y que ganara tiempo no admitiendo las dimisiones de los oficiales del cuerpo de artilleria justificandolo con la guerra carlista Segun el rey Ruiz Zorrilla se mostro conforme pero las Cortes aquel dia aprobaron la aceptacion de la renuncia de los oficiales de artilleria su sustitucion por los sargentos y la reorganizacion del arma Al dia siguiente 8 de febrero el Senado ratificaba la votacion del Congreso aunque el moderado Calderon Collantes advirtio al gobierno que las medidas aprobadas eran un ataque a la prerrogativa regia pues era conocida la oposicion de la Corona a las mismas El rey se sintio enganado de nuevo ademas los oficiales estaban siendo obligados a entregar las armas en Madrid a los sargentos la misma manana del dia 8 cuando ni siquiera el rey habia firmado el decreto Es obvio el papel que los radicales otorgaban al rey de una monarquia constitucional la sancion inopinada de todo cuento el Gobierno le presentase pero ademas en el caso el desprecio a la persona que ocupaba la institucion afirma Jorge Vilches 90 La unica alternativa que le quedaba a Amadeo I era nombrar un gobierno del Partido constitucional y disolver las Cortes pero per dissolvere la camera era necesario ricorrere alla forza como le dijo el rey a su padre en una carta lo que podia conducir a la guerra civil el rey podia contar con los mas importantes generales conservadores Topete Serrano y Malcampo pero la guarnicion de la capital estaba en manos de militares afines al Partido Radical 91 De hecho ese mismo viernes 7 de febrero el almirante Topete visito al rey en Palacio ofreciendole el apoyo de su partido el Constitucionalista y el de los generales unionistas los de mas prestigio en el Ejercito Al dia siguiente sabado 8 de febrero acudio de nuevo Topete a Palacio comunicandole el rey que no deseaba que por el se derramara sangre y que iba a firmar el decreto de reorganizacion del cuerpo de artilleros 92 Asi Amadeo I abandono la opcion del golpe de fuerza y cuando el consejo de ministros presidido por el se reunio el sabado 8 de febrero firmo los decretos sobre los artilleros al haber sido ratificados por las Cortes aunque hizo constar que esa cuestion era competencia del Ejecutivo que segun la Constitucion de 1869 detentaba el rey y no del Legislativo El rey retuvo a Ruiz Zorrilla despues del Consejo de Ministros para decirle que le habia decepcionado porque habiendole creido leal a la dinastia y a lo que ella significaba habia sido cegado por el espiritu de partido y continuacion le expuso su idea de que se formara per effetto di patriottismo un gobierno de conciliacion de todos los partidos que le habian votado en noviembre de 1870 De lo contrario no le quedaba mas opcion que abdicar 91 Ruiz Zorrilla reunio a su gobierno en tres ocasiones para estudiar la propuesta del rey de formar un gobierno de conciliacion con los constitucionales de Serrano y Sagasta sabiendo que estaba en juego la continuidad del reinado de Amadeo I Pero la propuesta fue rechazada Cuando esto se supo el domingo 9 de febrero el Partido Constitucional acordo ofrecerse de nuevo al rey para lo que requiriese enviandose un telegrama al general Serrano que estaba en Jaen para que volviera inmediatamente a Madrid Al dia siguiente lunes 10 de febrero llego Serrano a la capital e informo al rey de que el estaba dispuesto a formar gobierno y defender a la dinastia pero ese mismo dia un numero extraordinario del diario de mayor tirada La Correspondencia de Espana dio la noticia de que Amadeo I habia renunciado al trono 93 La abdicacion Editar El rey se vio obligado a firmar el decreto de reorganizacion del arma de artilleria que fue publicado el dia 9 y al dia siguiente lunes 10 de febrero de 1873 renuncio a la Corona 81 Este fue el mensaje que el rey envio a las Cortes 94 Dos anos largos ha que cino la Corona de Espana y la Espana vive en constante lucha viendo cada dia mas lejana la era de paz y de ventura que tan ardientemente anhelo Si fuesen extranjeros los enemigos de su dicha entonces al frente de estos soldados tan valientes como sufridos seria el primero en combatirlos pero todos los que con la espada con la pluma con la palabra agravan y perpetuan los males de la Nacion son espanoles todos invocan el dulce nombre de la Patria todos pelean y se agitan por su bien y entre el fragor del combate entre el confuso y atronador y contradictorio clamor de los partidos entre tantas y tan opuestas manifestaciones de la opinion publica es imposible atinar cual es la verdadera y mas imposible todavia hallar el remedio para tamanos males Lo he buscado avidamente dentro de la ley no lo he hallado Fuera de la ley no ha de buscarlo quien ha prometido observarla Nadie achacara a la flaqueza de animo mi resolucion No habria peligro que me moviera a descenirme la corona si creyera que la llevaba en mis sienes para bien de los espanoles ni causo mella en mi animo el que corrio la vida de mi augusta esposa que en este solemne momento manifiesta como yo el que en su dia se indulte a los autores de aquel atentado Pero tengo hoy la firmisima conviccion de que serian esteriles mis esfuerzos e irrealizables mis propositos Estas son Sres Diputados las razones que me mueven a devolver a la nacion y en su nombre a vosotros la corona que me ofrecio el voto nacional haciendo de ella renuncia por mi por mis hijos y sucesores Estad seguros de que al desprenderme de la Corona no me desprendo del amor a esta Espana tan noble como desgraciada y de que no llevo otro pesar que el de no haberme sido posible procurarle todo el bien que mi leal corazon para ella apatecia Amadeo Palacio de Madrid 11 de febrero de 1873 Partida de Amadeo y Maria Victoria dal Pozzo del pais dibujo de Vierge publicado en Le Monde Illustre el 22 de febrero de 1873 Uno de los pocos revolucionarios de 1868 que acudieron a despedir a los reyes tras su renuncia a la Corona fue el almirante Topete que habia defendido la candidatura de Montpensier pero que se convirtio en un leal servidor de Amadeo I una vez fue elegido por las Cortes Topete era un hombre de honestidad intachable que ni los republicanos atacaban afirma Jorge Vilches 95 Segun Jorge Vilches la responsabilidad principal en la caida de la monarquia de Amadeo I recae en los radicales de Ruiz Zorrilla porque tergiversaron la figura de la Corona en la monarquia constitucional que construyeron La convirtieron en simple poder sancionador Imposibilitaron la formacion de un sistema de partidos dinasticos leales con el regimen y entre si tanto en el gobierno como en la oposicion Alimentaron a los enemigos del regimen con sus alianzas electorales y parlamentarias y con el cuestionamiento de la legitimidad gubernamental conservadora Echaron a los constitucionales de las instituciones transformando la resolucion de meros enfrentamientos programaticos a situaciones de cambio de regimen Aunque tambien tienen su parte de responsabilidad Sagasta y Serrano y sus seguidores respectivos el primero porque estuvo remiso a la hora de la formacion del Partido Conservador y el segundo porque el y sus seguidores enseguida consideraron fracasada la experiencia amadeista y no respaldaron al monarca cuando les invito a palacio despreciandole solo porque su asistencia podia ser considerada como un apoyo al Gobierno de Ruiz Zorrilla En conclusion la situacion de los partidos de los hombres de la revolucion fue la que condujo a que sin apoyo ni salida pacifica legal Amadeo I renunciara 96 La proclamacion de la Republica Editar En cuanto el lunes 10 de febrero el diario La Correspondencia de Espana dio la noticia de que el rey habia abdicado los federales madrilenos se agolparon en las calles pidiendo la proclamacion de la republica El gobierno se reunio y en su seno las opiniones estaban divididas entre el presidente y los ministros de procedencia progresista que pretendian constituirse en gobierno provisional para organizar una consulta al pais sobre la forma de gobierno postura que tambien apoyaba el Partido Constitucional porque de esa forma no se produciria la proclamacion inmediata de la Republica y los ministros de procedencia democrata encabezados por Cristino Martos y apoyados por el presidente del Congreso de los Diputados Nicolas Maria Rivero que se decantaban por la reunion conjunta del Congreso y del Senado que constituidos en Convencion decidirian la forma de gobierno lo que conduciria a la proclamacion de la Republica dada la mayoria que formaban en ambas camaras la suma de republicanos federales y de radicales de procedencia democrata 97 El presidente Ruiz Zorrilla acudio al Congreso de Diputados para pedir a los diputados de su propio partido que tenian la mayoria absoluta en la Camara que aprobaran la suspension de las sesiones al menos veinticuatro horas las suficientes para restablecer el orden Asimismo pidio que no se tomara ninguna decision hasta que llegara a las Cortes el escrito de renuncia a la Corona del rey Amadeo I y anuncio que el gobierno presentaria un proyecto de Ley de Abdicacion Con todo ello Ruiz Zorrilla pretendia ganar tiempo pero fue desautorizado por su propio ministro de Estado Cristino Martos cuando dijo que en cuanto llegara la renuncia formal del rey el poder seria de las Cortes y aqui no habra dinastia ni monarquia posible aqui no hay otra cosa posible que la Republica Asi se aprobo la mocion del republicano Estanislao Figueras para que las Cortes se declararan en sesion permanente a pesar del intento de Ruiz Zorrilla de que los radicales no la apoyaran Mientras tanto el edificio del Congreso de los Diputados habia sido rodeado por una multitud que exigia la proclamacion de la Republica aunque la Milicia Nacional logro disolverla 98 Estanislao Figueras primer presidente del Poder Ejecutivo de la Primera Republica Espanola Al dia siguiente martes 11 de febrero los jefes de distrito republicanos amenazaron al Congreso de los Diputados con que si no proclamaban la Republica antes de las tres de la tarde iniciarian una insurreccion Los republicanos de Barcelona enviaron un telegrama a sus diputados en Madrid en el mismo sentido Entonces los ministros democratas encabezados por Martos junto con los presidentes del Congreso y del Senado Rivero y Figuerola decidieron que se reunieran ambas Camaras ante las cuales se leyo la renuncia al trono de Amadeo I y a continuacion ante la ausencia del presidente del gobierno Ruiz Zorrilla el ministro de Estado Martos anuncio que el gobierno devolvia sus poderes a las Cortes con lo que estas se convertian en Convencion y asumian todos los poderes del Estado Entonces varios diputados republicanos y radicales presentaron una mocion para que las dos camaras constituidas en Asamblea Nacional aprobaran como forma de gobierno la Republica y eligieran un Poder Ejecutivo responsable ante aquella 99 A las tres de la tarde del 11 de febrero de 1873 el Congreso y el Senado constituidos en Asamblea Nacional proclamaron la Republica por 258 votos contra 32 81 La Asamblea Nacional resume todos los poderes y declara como forma de gobierno de la Nacion la Republica dejando a las Cortes Constituyentes la organizacion de esta forma de gobierno Tras un receso de tres horas volvieron a reunirse las Camaras para nombrar presidente del Poder Ejecutivo al republicano federal Estanislao Figueras que estaria al frente de un gobierno pactado entre los radicales y los republicanos federales e integrado por tres republicanos Emilio Castelar en Estado Francisco Pi y Margall en Gobernacion y Nicolas Salmeron en Gracia y Justicia y cinco radicales Jose Echegaray en Hacienda Manuel Becerra en Fomento Francisco Salmeron en Ultramar el general Fernandez de Cordoba en Guerra y el almirante Beranger en Marina Cristino Martos fue elegido presidente de la autoproclamada Asamblea Nacional el verdadero poder en una situacion de Convencion por 222 votos frente a los 20 que reunio Nicolas Maria Rivero 100 101 Valoracion EditarSegun Jorge Vilches la monarquia de Amadeo I fracaso por la dificultad de combinar con realismo la monarquia constitucional y la democracia ya que la Constitucion de 1869 no instauro una monarquia parlamentaria sino que la atribucion del nombramiento del gobierno a la Corona y no al Parlamento senala que aun se estaba en una fase pre parlamentaria de la historia constitucional Asi pues 102 se habia instaurado una democracia pero la responsabilidad que se dejaba caer sobre la Corona era mayor que en el regimen anterior La posibilidad de cumplir con tal papel dependia de que el sistema de partidos fuera centripeto y coincidente en el objetivo superior de estabilizar el regimen Pero en su lugar se construyo uno polarizado en cuestiones fundamentales como el caracter legislable de los derechos o la pacificacion de Cuba llegando a la identificacion partidista de las instituciones al exclusivismo a la ruptura del equilibrio entre poderes a la alianza con los partidos contrarios al regimen y finalmente a la puesta en practica de la accidentalidad de las formas de gobiernoReferencias Editar Bahamonde 1996 pp 72 73 Son demostrativas de la inestabilidad politica del regimen la celebracion de tres elecciones generales a Cortes y la sucesion de seis gabinetes ministeriales en dos anos de reinado Lopez Cordon 1976 p 39 Lopez Cordon 1976 pp 39 40 Bahamonde 1996 pp 65 66 Fontana 2007 p 366 Lopez Cordon 1976 p 40 a b Lopez Cordon 1976 p 148 Lopez Cordon 1976 pp 40 41 Fontana 2007 p 367 a b Vilches 2001 p 147 Bahamonde 1996 pp 74 75 Lopez Cordon 1976 p 41 Lopez Cordon 1976 pp 41 42 Vilches 2001 p 152 Vilches 2001 p 153 Vilches 2001 pp 148 149 a b Bahamonde 1996 pp 76 78 Lopez Cordon 1976 pp 147 148 a b Bahamonde 1996 p 78 Lopez Cordon 1976 p 44 Lopez Cordon 1976 p 45 Bahamonde 1996 pp 78 80 Vilches 2001 pp 162 168 Vilches 2001 p 168 Vilches 2001 pp 168 169 Vilches 2001 pp 172 178 Vilches 2001 pp 179 183 Vilches 2001 pp 179 183 186 Bahamonde 1996 p 76 La vida parlamentaria quedo eclipsada por los choques de los personalismos a b Bahamonde 1996 pp 75 76 a b Vilches 2001 pp 196 199 Vilches 2001 pp 184 188 Fontana 2007 p 368 Vilches 2001 p 201 Vilches 2001 pp 201 204 Lopez Cordon 1976 pp 50 51 Vilches 2001 pp 204 208 212 Vilches 2001 pp 212 216 Vilches 2001 pp 216 220 Bahamonde 1996 p 80 Vilches 2001 pp 222 223 226 Vilches 2001 pp 232 235 Vilches 2001 pp 285 287 Vilches 2001 pp 237 244 Vilches 2001 pp 287 291 Vilches 2001 pp 244 245 a b c Fontana 2007 p 369 a b Bahamonde 1996 pp 84 85 Vilches 2001 pp 245 246 Vilches 2001 p 245 Vilches 2001 p 254 Vilches 2001 pp 255 256 Vilches 2001 p 256 a b Lopez Cordon 1976 p 46 Vilches 2001 p 248 Vilches 2001 pp 250 Vilches 2001 pp 251 252 Vilches 2001 pp 292 297 Vilches 2001 pp 256 258 a b Fontana 2007 pp 369 370 Vilches 2001 p 298 300 Vilches 2001 pp 262 263 301 302 Vilches 2001 pp 263 264 Vilches 2001 pp 267 268 Vilches 2001 pp 304 306 a b Vilches 2001 p 308 Vilches 2001 p 306 Fontana 2007 p 370 a b c d e Bahamonde 1996 p 86 Vilches 2001 pp 314 315 Vilches 2001 p 307 Vilches 2001 p 269 Vilches 2001 p 275 Vilches 2001 p 276 Lopez Cordon 1976 p 42 Vilches 2001 p 272 Vilches 2001 p 273 Vilches 2001 pp 276 278 Vilches 2001 pp 279 280 Vilches 2001 pp 282 321 a b c Fontana 2007 p 371 Vilches 2001 pp 318 320 Vilches 2001 pp 278 282 Vilches 2001 pp 315 317 a b Lopez Cordon 1976 p 47 Vilches 2001 pp 322 324 Vilches 2001 pp 326 327 Bahamonde 1996 p 88 Bahamonde 1996 pp 88 89 Vilches 2001 pp 331 333 a b Vilches 2001 pp 333 334 Vilches 2001 pp 334 337 Vilches 2001 pp 337 339 Lopez Cordon 1976 pp 135 136 Vilches 2001 p 223 Vilches 2001 pp 335 336 Vilches 2001 p 339 Vilches 2001 pp 340 342 Vilches 2001 pp 342 344 Vilches 2001 pp 344 345 365 366 Lopez Cordon 1976 p 54 Vilches 2001 pp 86 87 Bibliografia Editar Bahamonde Angel 1996 Espana en democracia El Sexenio 1868 1874 Madrid Historia 16 Temas de Hoy ISBN 84 7679 316 2 Fontana Josep 2007 La epoca del liberalismo Vol 6 de la Historia de Espana dirigida por Josep Fontana y Ramon Villares Barcelona Critica Marcial Pons ISBN 978 84 8432 876 6 Lopez Cordon Maria Victoria 1976 La revolucion de 1868 y la I Republica Madrid Siglo XXI ISBN 84 323 0238 4 Vilches Jorge 2001 Progreso y Libertad El Partido Progresista en la Revolucion Liberal Espanola Madrid Alianza Editorial ISBN 84 206 6768 4 Predecesor Gobierno Provisional de 1868 1871 Periodos de la Historia de EspanaReinado de Amadeo I de Espana Sucesor Primera Republica Espanola Datos Q6104643Obtenido de https es wikipedia org w index php title Reinado de Amadeo I de Espana amp oldid 134530161, wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

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