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Parasitismo de puesta de Molothrus ater

El rasgo más prominente de la reproducción del tordo cabecicafé (Molothrus ater) —una especie de paseriforme ictérido que habita en gran parte de América del norte— es, sin lugar a dudas, el hecho de que practica el parasitismo de puesta; esto quiere decir que para reproducirse necesita depositar sus huevos en los nidos de otras aves, que hacen las veces de huéspedes o padres adoptivos para sus polluelos. Se trata del parásito de puesta más común de América del norte, pues se sabe que aova en nidos de más de 220 especies de aves, reduciendo el éxito reproductivo y amenazando la supervivencia de algunas de ellas.[1]​ Típicamente, la hembra pone sus huevos en los nidos de paseriformes pequeños,[2]​ en particular en aquellos en forma de taza.[3]​ Sin embargo, a veces este sagaz oportunista comete una equivocación al depositarlos en nidos en desuso de alguna temporada anterior.[4][5]

Hembra de tordo cabecicafé (Molothrus ater). Se trata del parásito de puesta más ampliamente distribuido y más conocido de América del norte.

El ornitólogo Herbert Friedmann (1929) sugiere que el tordo cabecicafé, al igual que las demás especies de su género (todas ellas parasíticas), originalmente criaba a sus pequeños —de hecho, los ictéridos son conocidos por sus nidos elaborados— y que el parasitismo fue un hábito adquirido. El tordo renegrido (Molothrus bonariensis), un parásito de puesta sudamericano, rara vez intenta construir su propio nido, siempre sin éxito, lo cual indicaría que en un principio disponía de la habilidad para hacerlo y que luego la perdió. Lo mismo pudo haberle sucedido a su primo neártico.[4]

Teorías sobre el origen del parasitismo

 
Chipe de Wilson (Wilsonia pusilla) criando a un polluelo de tordo cabecicafé.

Una de las teorías que intentaron explicar la adopción de los hábitos parasíticos, propuesta por F. H. Herrick, sostiene que los mismos pudieron haber evolucionado a partir de una falta de coordinación entre los instintos de la construcción del nido y de la puesta de huevos, la cual habría resultado en que los huevos estuvieran listos para ser depositados antes que el nido estuviese preparado. El ornitólogo Elliott Coues (1874), uno de los fundadores de la American Ornithologists' Union, conjeturó que una hembra de tordo cabecicafé en peligro inminente de perder su huevo a causa de no tener un nido listo para cuando debía depositarlo tal vez preferiera ponerlo en uno ajeno —quizá en uno de su misma especie— en lugar de en el suelo. La conveniencia de este proceso posiblemente la incitase a repetirlo. Sus polluelos, una vez maduros, podrían haber seguido sus pasos y así hasta que los tordos cabecicafé criados de esta manera superaran en número a los criados por su propia madre. De este modo, es probable que lo que comenzara como una necesidad se convirtiera en una elección inconsciente y finalmente se estandarizara bajo la forma de una conducta fija para toda la especie.[4]

 
Nido de mosquero fibí (Sayornis phoebe) con un huevo de tordo cabecicafé.

No obstante, el punto débil de esta teoría es que esos casos en los que los huevos eran depositados en nidos ajenos de manera casual debieron haber sido muy raros en un principio y la tendencia heredada a repetir la conducta de sus madres habría desaparecido rápidamente al cruzarse estos individuos con otros criados normalmente, a no ser que ese hábito probara ser beneficioso para la especie y no existe evidencia de ello. A menudo se encuentran huevos frescos de otras aves sobre el suelo y la imposibilidad de llegar a sus nidos para depositarlos nunca originó conductas parasíticas en ellas.[4]

El zoólogo Glover Morrill Allen (1925) concibió una posible explicación alternativa que apunta a que el parasitismo pudo haber surgido de la puesta ocasional de huevos en nidos ajenos por parte de aves muy sensibles al estímulo ovárico originado al ver nidos con huevos similares a los propios. Una tercera teoría, ideada por Otto Widmann (1907), indicaría que la asociación con los animales de pasturas habría sido la causa de su parasitismo debido a que, al seguir a las manadas en movimiento, se alejaban demasiado de sus nidos como para regresar a ellos a tiempo para poner sus huevos y, al tener tanta prisa, debían depositarlos en los nidos de otras aves. Sin embargo, el problema con esta potencial explicación es la carencia de hechos concretos que la respalden, pues no existen registros de tordos que abandonen sus nidos para seguir vacas, caballos o bisontes. Probablemente, la conducta parasítica haya sido adquirida por los ancestros de los tordos cabecicafé modernos en Sudamérica, antes de que llegaran a América del norte, y se desconoce hasta qué punto estos primitivos tordos sudamericanos habían desarrollado el hábito de seguir a las manadas errantes.[4]

Búsqueda de nidos y puesta de los huevos

 
Nido parasitado por un tordo cabecicafé.

Las hembras encuentran nidos que puedan parasitar de tres maneras distintas: en algunos casos se posan en un sitio oculto, buscando actividad relacionada con la nidificación en las áreas abiertas lindantes; otra opción es la de caminar por el suelo intentado descubrir dicha actividad; finalmente, también pueden hacerlo con vuelos cortos y ruidosos en lo que pareciera ser un esfuerzo por ahuyentar a potenciales huéspedes de sus nidos.[6][7]​ El parásito frecuentemente localiza un potencial nido hospedador durante su construcción.[8]​ Luego lo visita regularmente antes de depositar, mientras sus dueños están ausentes.[8]​ Un día antes de aovar o en el mismo día en que lo hace, a menudo quita un huevo del hospedador.[8]​ En ocasiones, lo ingiere en lugar de eyectarlo.[8]​ Es posible que haya desarrollado el hábito de remover uno de los huevos de la víctima a fin de evitar que ésta note una mayor cantidad de ellos tras la intrusión, o bien para asegurarse de que el suyo reciba una incubación adecuada, ya que su adición al nido podría dificultar al huésped la tarea de dar calor de manera uniforme a todos los huevos, lo que podría resultar en que algunos —incluyendo, posiblemente, el del tordo cabecicafé— no lograran romper el cascarón.[3]

Mientras que a los ictéridos no parasíticos les lleva entre 21,5 y 53,4 minutos poner sus huevos y a otros paseriformes entre 20,7 y 103,7, el tordo cabecicafé típicamente pasa menos de un minuto en el nido hospedador cuando aova. Al permanecer sólo unos pocos segundos en el nido, el parásito probablemente incremente sus posibilidades de pasar desapercibido y de evitar un ataque por parte de los huéspedes. La rapidez en la puesta de los huevos podría favorecer el que el huevo intruso sea aceptado por el dueño del nido.[9][10]

Las hembras no son necesariamente específicas en cuanto a la elección de sus huéspedes, es decir, una misma ave puede perfectamente depositar sus huevos en los nidos de distintas especies hospedadoras, incluso en días consecutivos.[4][11]​ Sin embargo, existe evidencia de que en ciertos lugares al menos algunas de las hembras tienden a especializarse en una determinada especie hospedadora.[8]

Smith y Arcese (1994) constataron que en Mandarte Island —una isla diminuta en el estrecho de Georgia, al sudeste de la isla de Vancouver— cada hembra de tordo cabecicafé solía aovar a diario, comenzaba a depositar considerablemente después que los gorriones melódicos (Melospiza melodia) en la mayoría de los años y evitaba poner dos huevos en un mismo nido. Los parásitos rara vez aovaban después de que los huéspedes hubieran completado su puesta y sus huevos eclosionaban con la misma frecuencia que los de los gorriones.[12]

Elliott Coues (1874) describió gráficamente la búsqueda de nidos por parte de la hembra de tordo cabecicafé:

Es interesante observar a una hembra de tordo cabecicafé lista para aovar. Se vuelve inquieta; revela una inusual excitación y abandona su ajetreada búsqueda de alimento con sus compañeros. Finalmente se separa de la bandada y sale a hacer un reconocimiento, ansiosa, porque su situación es urgente y no tiene hogar. (…) Vuela a un matorral, o a un seto, o a otro lugar frecuentado por las aves, en donde algo le dice —quizá la experiencia— que encontrará nidos. Sigilosamente y en absoluto silencio revolotea, escrutando furtivamente, alternando entre euforia y desánimo, las profundidades del follaje. Divisa un nido, pero su dueño pía sobre el borde, y entonces debe continuar. Ahora, sin embargo, llega su oportunidad; encuentra el nido exacto que desea y nadie está en casa. Desaparece por unos pocos minutos y es casi un ave distinta cuando resurge de entre los arbustos. Con su trabajo hecho y el problema resuelto, se regocija, arregla su plumaje prolijamente y vuela de regreso con sus congéneres.[4]
 
Chipe suelero coronado (Seiurus aurocapillus), especie parasitada.

En sus estudios sobre el parasitismo de puesta en nidos de chipe suelero coronado (Seiurus aurocapillus), Harry W. Hann (1941) llegó a las siguientes conclusiones:

1. La hembra de tordo cabecicafé habitualmente encuentra el nido del huésped al ver a las aves construyéndolo.

2. A veces observa el proceso de construcción atentamente y sin dudas esto estimula el desarrollo de los huevos, los cuales son depositados cuatro o cinco días después. Esta teoría, sugerida originalmente por Chance en referencia al cuco, explica la delicada sincronización entre la puesta del tordo cabecicafé y la del huésped y no descarta la posibilidad de que se depositen varios huevos en los días sucesivos.

3. Los huevos de tordo cabecicafé son normalmente depositados durante el período de puesta del huésped, aunque las excepciones son comunes. Los casos extremos registrados durante este estudio incluyeron la parasitación tres días antes de que el primer huevo de chipe suelero coronado fuera depositado y tres días después del comienzo de la incubación.

4. El tordo cabecicafé pone un huevo por nido a no ser que éstos sean escasos, en cuyo caso deposita una mayor cantidad.

5. La hembra de tordo cabecicafé hace regulares visitas de inspección a los nidos durante la ausencia de sus dueños, entre el momento en que los descubre y el momento en el que pone su huevo, y sabe de antemano en donde va a depositarlo.

6. Su hora habitual para aovar es temprano en la mañana antes de que el huésped haga lo propio y espantará al dueño de su nido de ser necesario. (…)

7. La hembra de tordo cabecicafé está tanto alerta como determinada cuando llega para depositar. Recorre y observa cuidadosamente los alrededores del nido por hasta tres minutos antes de entrar en él, pero regresará más tarde si algo la espanta.

8. La puesta le lleva de unos pocos segundos a un minuto y se marcha tan pronto como haya consumado su tarea.

9. (…) No he encontrado huevos rotos atribuibles a la intrusión del tordo cabecicafé.

10. La hembra de tordo cabecicafé habitualmente quita uno o más huevos del nido. No son removidos en el momento de la parasitación, sino durante la mañana del día anterior o en el día de la puesta, o raramente al día siguiente. (…)

11. Los huevos quitados son ingeridos por el tordo cabecicafé, pero no son removidos sólo con ese propósito o su eliminación no estaría tan estrechamente relacionada con la cantidad de huevos depositados. El número de huevos quitados representaba el 85% de los puestos por tordos cabecicafé e incluía cuatro del propio parásito. De los nidos no parasitados sólo un huevo desapareció durante el estudio.

12. Esta investigación corrobora la afirmación de Burroughs con respecto a que el tordo cabecicafé se deshace de un huevo sólo cuando hay dos o más en el nido.[4]

Hora de la puesta

 
Gorrión indefinido oriental (Spizella pusilla), especie parasitada.

La puesta de huevos excepcionalmente temprano en la mañana por parte del tordo cabecicafé podría constituir una adaptación a su reproducción parasítica.[13]​ Esta especie aova más temprano que cualquier otro ictérido conocido y típicamente deposita sus huevos antes del amanecer.[5][13][14][15][16]​ El tordo renegrido (Molothrus bonariensis), otro parásito de puesta, a veces también pone sus huevos antes del amanecer, mientras que ictéridos no parasíticos tales como el tordo sargento (Agelaius phoeniceus) y el zanate norteño (Quiscalus quiscula) lo hacen poco después del amanecer y otras aves pertenecientes a la misma familia, dentro de la hora tras la salida del sol.[13]

Russell T. Norris (1944) dio la siguiente descripción de un tordo cabecicafé parasitando el nido de un gorrión melódico (Melospiza melodia), que fue fotografiado por Hal H. Harrison:

 
Gorrión melódico (Melospiza melodia), especie parasitada.
Justo antes de las 4:30 a.m., alrededor de 22 minutos antes del amanecer, escuchamos las notas de un tordo cabecicafé, y unos pocos segundos más tarde una hembra se posó sobre la cámara. Después de observar los alrededores con cautela, voló al suelo hacia la base del trípode y comenzó a caminar nerviosa en dirección al nido. Cuando alcanzó el borde del mismo, hizo una pausa y contempló cuidadosamente el territorio circundante, luego entró en él y dio varias vueltas. Finalmente se sentó y Harrison presionó el botón de la cámara. Tras el flash, el tordo cabecicafé salió espantado. Había estado sobre el nido durante no más de 15 segundos y no había depositado su huevo. (…)

A las 4:38 a.m. advertí un movimiento en el pasto detrás del nido y después de unos pocos segundos el tordo cabecicafé apareció. Se acercó a éste con cautela, subió a su borde e hizo una pausa allí. Luego entró en él y comenzó a dar vueltas como lo había hecho en su visita previa. Después de unos pocos segundos, volvió a posarse sobre el margen y miró a los alrededores. Tres veces repitió este procedimiento de pararse sobre la orilla y luego dar vueltas dentro del nido intranquilamente. En un momento, se posó sobre la parte trasera del borde y miró hacia el césped. Aproximadamente a las 4:40 a.m. se sentó y Harrison obtuvo su toma. El ave se irguió ligeramente pero permaneció unos segundos más antes de marcharse. Al examinar el nido, encontré un huevo de tordo. No cabe duda de que el huevo estaba siendo depositado cuando se tomó la fotografía.

(...)

Dos gorriones y el tordo cabecicafé eclosionaron y fueron criados con éxito hasta el séptimo día de vida de éste y el sexto de los gorriones, cuando el nido fue destruido por un depredador.[4]

Cantidad de huevos por nido

 
Mosquero fibí (Sayornis phoebe), especie parasitada.

Con respecto al número de huevos parasíticos depositados por nido, Friedmann (1929) manifestó lo siguiente:

A fin de determinar definitivamente si el tordo cabecicafé por lo general pone un solo huevo en cada nido, se reunió información sobre alrededor de nueve mil nidos vulnerados de 195 tipos de aves y se descubrió que en más de dos tercios de los casos había un único huevo foráneo. Esto demuestra con bastante claridad que lo normal, lo usual, lo característico en el tordo cabecicafé es depositar un huevo en cada nido.

No obstante, en alrededor de un tercio de las observaciones se encontró más de un huevo del intruso. Este porcentaje de excepciones a la regla susodicha no es insignificante y requiere una explicación. Se ha demostrado que bajo condiciones normales cada pareja de tordos cabecicafé establece un territorio más o menos definido y que la hembra tiende a restringirse a los nidos dentro de esa área particular. Sin embargo, (…) es probable que la hembra se sienta inducida con bastante facilidad a abandonar su territorio transitoriamente el suficiente tiempo como para depositar un huevo en un nido cercano. (…) En las regiones en donde esta especie es muy común (y esto se aplica a una gran parte de su distribución) y en donde los territorios son proclives a superponerse, dos ejemplares pueden hacer uso de un mismo nido. De esta manera, creo que podemos explicar el hecho de que no rara vez huevos de dos, y con menos frecuencia incluso tres, diferentes individuos sean hallados en el mismo nido.[4]
 
Víreo de Bell (Vireo bellii), especie parasitada.

Además, una única hembra puede depositar más de un huevo en un solo nido en caso de que no logre encontrar a tiempo otro en el que no haya puesto alguno antes.[4]​ Arthur Cleveland Bent (1958) publicó los descubrimientos de la señora Nice (1939), que había escrito lo siguiente:

A lo largo de siete años de estudio en Interpont, 98 de los 223 nidos[n. 1]​ de gorrión melódico[n. 2]​</ref> localizados exhibían huevos de tordo cabecicafé; 69[n. 3]​ acogían un huevo, 26[n. 4]​ contenían dos huevos y 3[n. 5]​ albergaban tres. Sólo una vez encontré cuatro huevos de tordo cabecicafé en un mismo nido; esto sucedió en junio de 1928 y el nido pertenecía a un chipe de cara negra.[n. 6][4]
 
Tángara rojinegra migratoria (Piranga olivacea), especie parasitada.

Un huevo de tordo cabecicafé por nido es evidentemente la regla prevalente, pero dos huevos, a menudo depositados por hembras distintas, no son un hallazgo raro y existen numerosos registros de tres o más huevos en un nido. Bent (1958) comentó que A. C. Reneau le había notificado que en dos oportunidades había encontrado tres de estos huevos en nidos de mosquero (Sayornis sp.) y en una ocasión en uno de víreo de Bell (Vireo bellii). La lista de A. D. DuBois incluía un registro de tres huevos intrusos en un nido de cardenal rojo (Cardinalis cardinalis), otros tres huevos en uno de zorzal maculado (Hylocichla mustelina) y cinco en otro de esta segunda especie. Frank R. Smith comunicó a Bent su descubrimiento de tres huevos en un nido de zorzal maculado, puestos antes de que el zorzal hubiera comenzado a depositar los suyos, y aparentemente dejados por distintas hembras.[4]​ T. S. Roberts afirmó:

Tres o cuatro son poco comunes, aunque el señor Kilgore y quien escribe una vez hallaron un nido de zorzal maculado con dos huevos de zorzal y seis de tordo cabecicafé, los últimos con dos patrones distintos, lo que sugeriría que dos tordos cabecicafé habrían puesto tres huevos cada uno. (…) En Mille Lacs (...), el señor Marius Morse encontró un nido de tordo rojizo[n. 7]​ que contenía dos huevos del dueño y ocho de tordo cabecicafé. (…) Según parece cuatro diferentes hembras habían depositado uno o más huevos cada cual.[4]

J. H. Langille (1884) expuso:

 
Víreo ojirrojo (Vireo olivaceus), especie parasitada.
Con frecuencia he hallado más de uno en un mismo nido; una vez no menos de cuatro en un nido de tángara rojinegra migratoria,[n. 8]​ al que sólo le restaba espacio suficiente para dos propios. El señor Trippe descubrió en una oportunidad un nido de chipe trepador[n. 9]​ con cinco huevos del intruso y tres del dueño.[4]

Isaac E. Hess (1910) comentó sobre una tángara rojinegra migratoria (Piranga olivacea) que empollaba cuatro huevos de tordo cabecicafé y un nido de chipe suelero coronado (Seiurus aurocapillus) que contenía siete huevos del parásito. Bent (1958) dio a conocer su hallazgo de un nido de mímido gris (Dumetella carolinensis) con cuatro huevos de tordo cabecicafé y sólo uno propio.[4]​ F. A. E. Starr le escribió a Bent lo siguiente:

En una ocasión encontré un nido de víreo ojirrojo[n. 10]​ con el víreo sentado sobre seis huevos de tordo cabecicafé y ninguno propio. Se halló un nido de tordo rojizo[n. 7]​</ref> con un huevo suyo y cuatro de tordo cabecicafé.[4]

Sanborn y Goelitz (1915) registraron un nido de rascador (Pipilo sp.) que “contenía un huevo de rascador y ocho de tordo cabecicafé.”[4]​ En la Columbia Británica, la cantidad de huevos del invasor por nido en una muestra de 775 nidos parasitados variaba entre 1 y 8 y el 69% de ellos contenía sólo uno. En la misma provincia canadiense, el número de polluelos de esta especie por nido en una muestra de 196 nidos parasitados era de entre 1 y 4 y el 84% de ellos albergaba sólo uno.[10]

Especies hospedadoras

 
Churrinche (Pyrocephalus rubinus), especie parasitada.

A pesar de que en un principio probablemente hayan construido sus propios nidos y criado a sus polluelos, en la actualidad todos los miembros del género Molothrus son parásitos de puesta. El ornitólogo Charles Emil Bendire (1895) listó 91 especies y subespecies vulneradas por el tordo cabecicafé oriental. Friedmann (1929) identificó 114 especies y subespecies víctimas del parasitismo del tordo cabecicafé del este, añadiendo 3 huéspedes hipotéticos: el colibrí de garganta roja (Archilochus colubris), el gorrión de Nelson (Ammodramus nelsoni) y el trepador americano (Certhia americana). En publicaciones subsecuentes (1934, 1938, 1943 y 1949), aumentó el número de huéspedes conocidos del tordo cabecicafé oriental a 149 formas.[4]

 
Gorrión blanco coronaro (Zonotrichia leucophrys), especie parasitada.

Herbert Friedmann, Lloyd F. Kiff y Stephen I. Rothstein (1977) elevaron la cantidad de huéspedes del parásito a 216 especies y 375 especies y subespecies. De las 216 especies, 139 fueron identificadas como huéspedes exitosos en la tarea de criar a los polluelos, agregando las siguientes aves a los ya conocidos: madrugador avispero (Tyrannus verticalis), mosquero gris (Empidonax wrightii), churrinche (Pyrocephalus rubinus), párido del desierto (Auriparus flaviceps), reyezuelo de coronilla dorada (Regulus satrapa), estornino pinto (Sturnus vulgaris), gusanero cabecigrís (Vermivora celata), chipe negroamarillo (Dendroica townsendi), chipe gorra negra (Dendroica striata), pradero oriental (Sturnella magna), tordo ojo amarillo (Euphagus cyanocephalus), gorrión purpúreo (Carpodacus purpureus), jilguero aliblanco (Carduelis psaltria), rascador pardo (Pipilo fuscus), gorrión sabanero pechileonado (Ammodramus savannarum), gorrión blanco coronado (Zonotrichia leucophrys) y gorrión de Lincoln (Melospiza lincolnii).[11]

La siguiente es una lista de los nuevos huéspedes descubiertos para cada subespecie de tordo cabecicafé publicados por Friedmann y otros (1977). Aquellos marcados con un asterisco constituyen un nuevo huésped para la especie en su conjunto:

 
Gusanero cabecigrís (Vermivora celata), especie parasitada.

La disgregación taxonómica y la nueva información acrecentaron las cifras publicadas por Friedmann y otros (1977) a 227 especies hospedadoras, entre las que se contaban 151 huéspedes exitosos (Davis y Sealy, 2000; Ortega, 1998).[5][17][18]

Especies más frecuentemente parasitadas

 
Candelita norteña (Setophaga ruticilla), especie parasitada.

Peter E. Lowther (1993) determinó que en los Estados Unidos los huéspedes exitosos más parasitados eran:

En Wisconsin, de las observaciones confirmadas entre 1995 y 2000, las especies más parasitadas fueron el gorrión coronirrufo cejiblanco (Spizella passerina) y el gorrión melódico (Melospiza melodia).[19][20]​ En Míchigan, las observaciones confirmadas entre 1983 y 1988 sugieren que el principal huésped fue el chipe de Kirtland (Dendroica kirtlandii), seguido por el gorrión indefinido oriental (Spizella pusilla) y el gorrión coronirrufo cejiblanco (Spizella passerina).[19][21]

Frecuencia parasítica en las especies según su comportamiento

 
Rascador pinto oscuro (Pipilo erythrophthalmus), especie parasitada.

La mayoría de los huéspedes son paseriformes neotropicales migratorios.[22][23]​ La mayor parte de ellos construye nidos abiertos en forma de taza, los cuales son el objetivo más frecuente del tordo cabecicafé (Friedmann, 1929).[22]​ La temporada de puesta de huevos del parásito generalmente se extiende desde mediados de abril a mediados de julio (Friedmann, 1929; Scott, 1963), coincidiendo con la de la mayoría de las especies neotropicales migratorias (Whitcomb y otros, 1981).[22]​ Las especies sedentarias y migratorias de corta distancia normalmente tienen temporadas reproductivas más prolongadas que se superponen sólo parcialmente con la del tordo cabecicafé.[22]

El temperamento de los potenciales huéspedes es un factor a tener en cuenta. El carácter de los alcaudones los libera de cualquier perturbación por parte de la hembra parasítica, y la naturaleza pugnaz de los tiranos (Tyrannus spp.) los convierte en víctimas inusuales. Las aves que anidan en huecos también están mayormente a salvo de la interferencia del intruso. Friedmann (1929) afirma que los nidos de pájaros carpinteros, curucuchas (Troglodytes aedon), trepadores (Sitta spp.), carboneros (Poecile spp.) y azulejos (Sialia spp.) rara vez son vulnerados.[4]

Variaciones intraespecíficas en la frecuencia parasítica

 
Canario del manglar (Dendroica petechia), especie parasitada.

Los niveles de parasitismo por parte del tordo cabecicafé varían a lo largo de amplias áreas geográficas. Los zorzales maculados (Hylocichla mustelina), por ejemplo, experimentan tasas de parasitismo superiores en el Medio Oeste que en este norteamericano (Hoover y Brittingham), en donde, naturalmente, los tordos cabecicafé son menos abundantes. Lo mismo se aplica para el tordo sargento (Agelaius phoeniceus; Freeman y otros, 1990). En consecuencia, es probable que los efectos del parasitismo sobre las especies migratorias neotropicales sean más severos en el Medio Oeste.[22]

La colección de huevos de la Western Foundation of Vertebrate Zoology revela que varias especies con una extensa área de distribución reproductiva en América del Norte exhiben una mayor frecuencia parasítica en las regiones orientales que en las occidentales. Las siguientes especies constituyen ejemplos de esto:

 
Cardenal rojo (Cardinalis cardinalis), especie parasitada.
  • Canario del manglar (Dendroica petechia): De los 85 grupos de huevos de la raza oriental, D. p. aestiva, 13 (15,3%) albergaban alguno ajeno. La misma cantidad de muestras vulneradas —pero equivalentes a un 5,7% del total— se registró entre los 228 grupos de huevos de la raza occidental, D. p. morcomi.
  • Chipe de cara negra (Geothlypis trichas): De los 124 grupos de huevos de las razas orientales, 13 (10,5%) estaban parasitados, mientras que sólo 12 lo estaban entre los 159 grupos de huevos de las subespecies occidentales, lo que representa un 7,6%.
  • Cardenal rojo (Cardinalis cardinalis): De los 76 grupos de huevos de la raza oriental, 8 (10,5%) habían sido parasitados, identificándose 9 grupos vulnerados (8,7%) entre los 104 de las subespecies C. c. magnirostris y C. c. superba.
  • Rascador pinto oscuro (Pipilo erythrophthalmus) – rascador maculoso (Pipilo maculatus) —anteriormente considerados una única especie—: De los 55 grupos de huevos de las subespecies orientales, 9 (16,4%) contenían algún intruso. Se constata una marcada diferencia respecto de lo ocurrido con los 300 grupos de huevos de 8 razas occidentales: sólo 2 (0,7%) estaban parasitados.[n. 11][11]
 
Gorrión arlequín (Chondestes grammacus), especie parasitada.

Existen dos notables excepciones a esta tendencia: el gorrión arlequín (Chondestes grammacus) y el chipe de Wilson (Wilsonia pusilla). La forma oriental —aunque cabe destacar que no tan oriental como las de las especies arriba mencionadas— del gorrión arlequín estaba representada por 33 grupos de huevos, ninguno de los cuales exhibía alguno de tordo cabecicafé, mientras que de los 195 grupos de huevos de la raza occidental (C. g. strigatus), 17 —equivalentes a un 8,7%— estaban parasitados. Con respecto al chipe de Wilson es importante mencionar que, en la parte oriental de su área de distribución, se encuentra mayormente restringido a las regiones septentrionales, donde no abundan ni los tordos cabecicafé ni los observadores; de los 147 grupos de huevos de la raza occidental (W. p. chryseola), 10 (6,8%) estaban parasitados, mientras que ninguno de los 26 grupos de huevos orientales contenía alguno de tordo cabecicafé. Ciertas especies, tales como el jilguero canario (Carduelis tristis) y el gorrión melódico (Melospiza melodia), revelan variaciones locales en cuanto a la frecuencia parasítica, pero sin que éstas constituyan tendencias longitudinales significativas.[11]

Reacciones de los huéspedes

 
Gorrión coronirrufo cejiblanco (Spizella passerina), especie parasitada.

La gran mayoría de los huéspedes no se percata de la presencia de los huevos intrusos.[1][4]​ Sin embargo, muchas especies hospedadoras que coevolucionaron junto al tordo cabecicafé desarrollaron diferentes técnicas que reducen el éxito reproductivo de este parásito de puesta,[24][25]​ a saber: sepultar el huevo bajo un nuevo nido, abandonar el nido y arrojar o perforar el huevo extraño. Algunos huéspedes pueden evitar el parasitismo hasta cierto punto nidificando antes o después de la época reproductiva del tordo cabecicafé o criando más de una nidada por temporada (al menos uno de los nidos probablemente no sea vulnerado).[3]​ Ciertas especies parasitadas incluyen tanto poblaciones receptivas como no receptivas.[19][25]

Rothstein (1975a) llevó a cabo un programa de parasitaciones experimentales en 640 nidos de 43 aves norteamericanas, utilizando tanto huevos artificiales como auténticos. La mayoría (80,4%) de los 245 casos de rechazo a los huevos extraños se concretó a través de la expulsión de estos fuera del nido por parte del huésped. Se registró un menor número de casos en los que el ave hospedadora abandonó el nido, dañó el huevo sin arrojarlo o lo sepultó debajo de nuevo material de nidificación. Debido a que la eyección constituía la forma más común de rechazo, los experimentos indican que las prácticas defensivas del huésped pueden tergiversar contundentemente las conclusiones cuantitativas vinculadas a las tasas de parasitismo basadas únicamente en las observaciones del parasitismo natural. Otros modos de rechazo, como el abandono del nido, no representan un impedimento tan importante puesto que los nidos abandonados conservan la evidencia de la parasitación; los huevos de tordo cabecicafé aún están presentes.[11]​ Sin embargo, incluso el abandono del nido puede introducir ciertas dificultades ya que tiende a disminuir el número real de casos de parasitismo y a aumentar el porcentaje aparente de recepciones positivas respecto de los huevos intrusos al ser los nidos abandonados más difíciles de hallar que los activos, pues sus dueños no se encuentran en los alrededores para llamar la atención del investigador.[11][15]

Aceptación de los huevos

 
Verdín de las praderas (Dendroica discolor), especie parasitada.

Experimentos en al menos diez nidos por especie realizados por Rothstein (1975) revelaron una tendencia a la receptividad en el tordo sargento (Agelaius phoeniceus), zanate norteño (Quiscalus quiscula), mosquero fibí (Sayornis phoebe), gorrión coronirrufo cejiblanco (Spizella passerina), canario del manglar (Dendroica petechia), huilota (Zenaida macroura), golondrina común (Hirundo rustica), cuclillo piquinegro (Coccyzus erythropthalmus) y jilguero canario (Carduelis tristis). De los experimentos en entre seis y nueve nidos por especie, se sacaron conclusiones similares respecto del gorrión melódico (Melospiza melodia), cardenal rojo (Cardinalis cardinalis) y zorzal maculado (Hylocichla mustelina). Entre las aves que fueron estudiadas a través de experimentos en una menor cantidad de nidos —dos a cinco por cada especie—, dieron respuestas de aceptación hacia los huevos de tordo cabecicafé el picogrueso pechirrosa (Pheucticus ludovicianus), cenzontle aliblanco (Mimus polyglottos), gorrión zacatero coliblanco (Pooecetes gramineus), pradero oriental (Sturnella magna), víreo ojirrojo (Vireo olivaceus), verdín de las praderas (Dendroica discolor), rascador pinto oscuro (Pipilo erythrophthalmus),[n. 11]​ golondrina ala de sierra (Stelgidopteryx serripennis), estornino pinto (Sturnus vulgaris), carpodaco doméstico (Carpodacus mexicanus) y tordo cabeciamarillo (Xanthocephalus xanthocephalus). En algunas de las especies citadas no hay razón para asumir una frecuente parasitación —zanate norteño, huilota, golondrina común, cuclillo piquinegro, golondrina ala de sierra y estornino pinto—, pero el estudio demuestra que, en caso de ser parasitados sus nidos, responden aceptando los huevos ajenos.[11]

Según diversas investigaciones particulares en las que se tomaron gran cantidad de nidos como muestra, el chipe de Kirtland (Dendroica kirtlandii), el arrocero americano (Spiza americana) y el gorrión arlequín (Chondestes grammacus) sufrían tasas de parasitismo de un 55% (Mayfield, 1960), 78% (Zimmerman, 1966) y 45% (Newman, 1970), respectivamente.[11]

Eyección de los huevos

 
Zorzal pechirrojo (Turdus migratorius), especie parasitada no receptiva.

Según Rothstein (1975), los huéspedes que casi siempre rechazan los huevos de tordo cabecicafé incluyen al mímido gris (Dumetella carolinensis), zorzal pechirrojo (Turdus migratorius), pitirre americano (Tyrannus tyrannus), ampelis americano (Bombycilla cedrorum), arrendajo azul (Cyanocitta cristata), cuitlacoche rojizo (Toxostoma rufum) y oropéndola de Baltimore (Icterus galbula), basándose en experimentos en al menos diez nidos por cada especie.[11][19][26]​ El madrugador avispero (Tyrannus verticalis), estudiado menos adecuadamente —dos nidos—, también parece rechazar los huevos intrusos.[11]​ Otras fuentes incluyen en la lista de eyectores al cuitlacoche de las artemisas (Oreoscoptes montanus) y al bolsero calandria (Icterus bullockii).[10]

La eyección de los huevos extraños por parte del huésped puede alterar nuestra percepción acerca de las tasas de parasitismo reales en ciertas especies ya que gran parte de la actividad parasítica pasará desapercibida, pues muchos de los huevos de tordo cabecicafé habrán sido removidos antes de que los investigadores los detecten. Friedmann (1963:133) enfatizó la incidencia de esta dificultad en el caso de la oropéndola de Baltimore (Icterus galbula). Para entonces, se sabía de sólo 13 casos de parasitismo, pero en 3 de ellos se había encontrado huevos de tordo cabecicafé sobre el suelo debajo de los nidos, prueba de los hábitos de eyección de las oropéndolas.[11]

A pesar de que Friedmann (1929) menciona al mímido gris entre los “ejemplos de especies absolutamente intolerantes”, Arthur Cleveland Bent (1958) documentó en una oportunidad —tal como se dijo más arriba— una hembra “sentada con calma en un nido que contenía cuatro huevos de tordo cabecicafé y sólo uno propio.” Friedmann realizó experimentos en un nido de zorzal pechirrojo (Turdus migratorius) y otro de mímido gris (Dumetella carolinensis) para estudiar sus reacciones frente a huevos extraños. El zorzal arrojó fuera de su nido un huevo de gorrión melódico (Melospiza melodia), el cual tenía manchas como el de un tordo cabecicafé, pero aceptó el de un gorrión coronirrufo cejiblanco (Spizella passerina), que era principalmente azul como el propio aunque mucho más pequeño. El mímido rechazó los huevos de ambas especies.[4]

Construcción de un nuevo nido

 
Víreo pechiamarillo (Vireo flavifrons), especie parasitada que construye un nuevo nido sobre el anterior.

Ciertas aves ocasionalmente reconocen los huevos ajenos, pero son demasiado pequeñas como para quitarlos.[1]​ En lugar de eso, los huevos de tordo cabecicafé son sepultados, a veces en compañía de los propios, con la construcción de un segundo nido sobre el original.[1][27]​ Los víreos (Vireo spp.) suelen reaccionar de este modo, construyendo un nuevo "piso". Friedmann (1929) identificó esta conducta en el víreo ojirrojo (Vireo olivaceus), víreo gorjeador (Vireo gilvus), víreo anteojillo (Vireo solitarius), víreo pechiamarillo (Vireo flavifrons), chipe dorado (Protonotaria citrea), canario del manglar (Dendroica petechia), chipe gorriamarillo (Dendroica pensylvanica) y candelita norteña (Setophaga ruticilla).[4]

Entre las aves que muestran su intolerancia enterrando el huevo intruso en el fondo del nido o construyendo un nuevo piso sobre éste, se destaca el canario del manglar (Dendroica petechia). En esta especie, los nidos de dos pisos son bastante comunes en donde abunden los tordos cabecicafé. Los de tres niveles no son muy raros tampoco y hasta cuatro o incluso cinco pueden ser construidos. Además de las aves arriba mencionadas, R. M. Anderson (1907) registró un huevo sepultado en un nido de mosquerito de Traill.[n. 12]​ C. R. Keyes (1884) encontró uno de tángara rojinegra migratoria (Piranga olivacea) con un huevo de tordo cabecicafé enterrado en el fondo. Amos W. Butler (1898) documentó otro de chipe de cara negra (Geothlypis trichas) con tres pisos. “Dos nidos adicionales fueron construidos sobre la estructura original sepultando bajo cada uno de ellos un huevo de tordo cabecicafé.”[4]

Abandono del nido

 
Buscabreña (Icteria virens), especie parasitada que a menudo abandona los nidos vulnerados.

Con respecto al buscabreña (Icteria virens), Friedmann comentó lo siguiente:

Los huevos de buscabreña son muy similares a los de tordo cabecicafé, pero de todas maneras casi invariablemente abandona el nido si un huevo parasítico es depositado en él. Sin lugar a dudas esto se debe a su extrema timidez y nerviosismo, más que a una habilidad superior para distinguir los huevos extraños de los propios. (…) Sin embargo en al menos dos ocasiones, los buscabreñas han incubado y criado tordos cabecicafé.[4]

Algunos otros ejemplares, quizá más de los que se crea, arrojan los huevos ajenos fuera de sus nidos.[4]​ B. H. Warren (1890) afirmó:

En dos ocasiones encontré huevos de tordo cabecicafé rotos sobre el suelo cerca de nidos de buscabreñas y en tres oportunidades descubrí los restos de estos huevos directamente debajo de los nidos de oropéndola de Baltimore.[n. 13][4]

En un estudio, el gorrión indefinido oriental (Spizella pusilla) abandonó el 46% de los nidos parasitados por tordos cabecicafé y sólo el 1% de los nidos sin parasitar, lo que sugiere que la deserción del nido cumple la función principal de defensa contra el parasitismo. Los gorriones no abandonaban sus nidos después de varias manipulaciones de sus nidadas frecuentemente asociadas con la parasitación; esto indicaba que la deserción no respondía a la presencia del huevo extraño. Por el contrario, a menudo dejaban sus nidos tras encuentros con tordos cabecicafé reales o modelos de dichas aves.[16]​ El gorrión indefinido desértico (Spizella breweri) también ha sido documentado abandonando nidos parasitados (Biermann y otros, 1987).[10]

Agresividad hacia el tordo adulto

 
Tordo sargento (Agelaius phoeniceus), especie parasitada agresiva hacia el tordo cabecicafé adulto.

Algunas especies hospedadoras exhiben conductas agresivas hacia los tordos cabecicafé, pero pocas logran ahuyentarlos. George M. Sutton (1928) mencionó una interesante demostración de hostilidad. Notó que en Pymatuning Swamp (PensilvaniaOhio) las pequeñas especies palustres eran casi inmunes al parasitismo de los tordos cabecicafé porque los tordos sargento (Agelaius phoeniceus), una especie altamente territorial,[28]​ se unían para hacerles frente y conducirlos fuera del pantano. Vio “una bandada de sargentos asechar a una hembra de tordo cabecicafé hasta que estuviera completamente exhausta y se precipitara hacia el agua para escapar.”[4]

Variaciones intraespecíficas en la respuesta al parasitismo

De acuerdo a Briskie y otros (1992), en el sur de Manitoba, en donde las especies hospedadoras son simpátricas con el tordo cabecicafé, los zorzales pechirrojos (Turdus migratorius) se deshicieron de los huevos intrusos en todos los nidos experimentalmente parasitados (N = 25) y ninguno fue aceptado por más de cuatro días. En contraste, los zorzales del norte de Manitoba, en donde los tordos cabecicafé no se reproducen, aceptaron los huevos extraños en un 33% de los casos (N = 18) por al menos cinco días. Los niveles de aceptación de los huevos parasíticos por parte del canario del manglar (Dendroica petechia) fueron similares entre sí en poblaciones alopátricas (100% de 20 nidos) y simpátricas (88,6% de 35 nidos), pero los modelos de hembras de tordos cabecicafé suscitaron una mayor respuesta defensiva del nido en el área de simpatría. Ninguno de los huéspedes rechazó huevos de conespecíficos, lo cual prueba que la eyección de los de tordo cabecicafé no era un simple epifenómeno del parasitismo de puesta intraespecífico.[25]

Repercusiones sobre la nidada del huésped

En los nidos vulnerados, son menos los hijos del huésped que viven lo suficiente como para independizarse y a menudo ninguno de ellos logra hacerlo.[24]​ Las especies parasitadas con períodos de incubación prolongados frecuentemente no logran criar con éxito a ninguno de sus propios polluelos si tan sólo un huevo de tordo cabecicafé eclosiona en sus nidos (Rothstein, 1975; May y Robinson, 1985). Para las aves hospedadoras de mayor tamaño y con períodos de incubación más breves, el parasitismo del tordo cabecicafé es menos nocivo (Smith, 1981; Roskaft y otros, 1990; Friedmann y otros, 1977), excepto cuando sus nidos son parasitados dos o más veces.[22]​ La parasitación de un mismo nido por parte de más de una hembra casi inevitablemente resulta en la muerte de toda la nidada de la víctima.[3]

El parasitismo de puesta de los tordos cabecicafé es perjudicial para el éxito reproductivo del ave hospedadora debido a —entre otros motivos— las siguientes razones:

  • Las hembras de esta especie quitan huevos —normalmente uno— de los nidos parasitados entre un 33 y un 90% de las veces (otras fuentes restringen ese porcentaje a entre un 60 y un 70%);[3]
  • Los huevos de tordo cabecicafé están provistos de una cáscara particularmente gruesa que puede ocasionar roturas en los del huésped;
  • Su período de incubación es de alrededor de 11 días, mientras que el de la mayoría de sus huéspedes es de entre 12 y 14 días, lo cual les brinda una ventaja a los polluelos parasíticos sobre el resto desde el comienzo;
  • Los polluelos del legítimo dueño del nido suelen ser más pequeños y menos agresivos que el intruso;
  • Los polluelos de tordo cabecicafé crecen más rápido, piden alimento con mayor ímpetu y tienen bocas más grandes que sus compañeros de nido.[22]

La alimentación del parásito también perjudica la nidada del huésped, puesto que éste es siempre alimentado más frecuentemente que los hijos del ave hospedadora,[29]​ lo cual puede resultar en la muerte por inanición de estos polluelos.[3][4]​ De hecho, sus requerimientos de un incesante suministro de alimento pueden impedir que sus padres adopivos críen a una segunda nidada en la temporada.[30]​ Además de por desnutrición, los pequeños también pueden morir sofocados por su "hermano".[1]​ De acuerdo a Arthur Cleveland Bent (1958), aparentemente no hace ningún esfuerzo por expulsar a los demás fuera del nido, como sí lo hace el cuco común (Cuculus canorus), pero al ser tanto más grande que ellos y crecer mucho más rápido, a veces los otros pequeños caen por la falta de espacio.[3][4]

Estudios específicos

 
Chipe de cara negra (Geothlypis trichas), especie parasitada.

Russell T. Norris (1947) publicó los resultados de sus estudios en nidos parasitados y sin parasitar, siendo los siguientes párrafos de especial interés:

De 19 huevos de tordo cabecicafé, uno eclosionó cuatro días antes que el huésped; 4 eclosionaron un día antes; 10 eclosionaron el mismo día que el huésped; 3 eclosionaron un día después que el huésped; y uno eclosionó cinco días después que el huésped. (…)

En los 237 nidos observados, los huéspedes depositaron 668 huevos, de los cuales 383 (57,3%) eclosionaron; los tordos cabecicafé pusieron 108 huevos, de los cuales 46 (42,6%) eclosionaron; 37,7% de los huevos del huésped y 26,8% de los de tordo cabecicafé produjeron polluelos que lograron abandonar el nido. De los huevos del huésped que eclosionaron, el 64% produjo jóvenes que dejaron el nido; de los huevos de tordo cabecicafé que eclosionaron, el 63%.

(...)

Los 35 nidos no parasitados (exitosos) produjeron en promedio 2,94 jóvenes que lograron abandonarlos; 19 nidos parasitados (exitosos) produjeron 2,05, lo que indica que cada parásito fue criado a expensas de alrededor de un polluelo del huésped.[4]

Con respecto a la pérdida total de la nidada, la señora Nice (1939) escribió:

Muchos autores afirman que cada tordo cabeciafé es criado a expensas de una nidada de polluelos. Ése no es el caso con los gorriones melódicos.[n. 2]​ Sesenta y seis nidos exitosos sin tordos cabecicafé en Interpont produjeron un promedio de 3,4 gorriones, mientras que veintiocho nidos exitosos con tordos cabecicafé dieron un promedio de 2,4 gorriones. Entonces, en términos generales, cada tordo cabecicafé fue criado a expensas de un gorrión. (…)

Los gorriones melódicos a menudo crían a todos sus pequeños que eclosionan junto con el pensionista, llegando a abandonar estos nidos los entre uno y cinco gorriones [que hayan nacido en ellos]. Con dos tordos cabecicafé de edad similar en el nido, los gorriones pueden criar a sólo uno o dos de sus hijos. Las aves más pequeñas sin lugar a dudas son más afectadas que los gorriones, pero no existe mucha información al respecto. En una ocasión encontré un nido con tres jóvenes chipes de cara negra[n. 6]​ y un tordo cabecicafé listos para marcharse.[4]

En un estudio de 16 años en Mandarte Island (Columbia Británica, Canadá), Smith y Arcese (1994) constataron que las hembras de tordo cabecicafé quitaron un huevo en dos tercios de los nidos parasitados de gorrión melódico (Melospiza melodia) y dañaron el 2% de los huevos restantes del huésped. El parasitismo redujo la cantidad de polluelos que lograban abandonar el nido en un 0,79 por nido, pero solo en un 0,27 en los años en los que se suministró alimento con fines experimentales en algunos territorios.[12]

Inadecuación del huésped

 
La construcción de sus nidos en cavidades y sus ausencias cuando la temperaura es baja hacen de la golondrina invernal (Tachycineta bicolor) un huésped inadecuado.

En ocasiones se encuentran huevos de esta especie en nidos de aves totalmente inadecuadas para convertirse en los padres adoptivos de sus polluelos; en estos casos no se producirá la eclosión o bien los pequeños no sobrevivirán. Si los huevos del dueño del nido son mucho más grandes que los del parásito, el de tordo cabecicafé no será debidamente incubado. Si los legítimos hijos de sus padres adoptivos son alimentados sobre la base de una dieta no adecuada para los polluelos de tordo cabecicafé, estos no prosperarán. Es difícil imaginar, por ejemplo, a una huilota (Zenaida macroura) —la cual es una especie parasitada— alimentando al extraño con leche de buche. Una golondrina podría incubar bien el huevo intruso y alimentar al pequeño en su nido en un principio, pero no luego puesto que se les enseña a las jóvenes golondrinas a alimentarse mientras vuelan.[4]

Es importante que la hembra escoja un nido abierto de alguna especie altricial que alimente a sus polluelos en el nido hasta que estén casi listos para volar; los polluelos de aves precoces dejan el nido poco después de haber roto el cascarón y el pequeño tordo cabecicafé sería abandonado. Uno de estos huevos fue hallado en el nido de un chorlitejo colirrojo (Charadrius vociferus), pero, de haber eclosionado, el pequeño habría sido dejado en el nido en donde moriría por inanición o exposición a los elementos.[4]​ El andarríos maculado (Actitis macularius) es otro ejemplo de un huésped inadecuado debido a la preococidad de sus polluelos.[10]

Otras aves, como la golondrina invernal (Tachycineta bicolor; Mills, 1988), el sastrecillo (Psaltriparus minimus) y el chivirín pantanero (Cistothorus palustris; Picman, 1986), no constituyen buenos huéspedes porque anidan en cavidades o construyen nidos con esa forma, o bien por su comportamiento o tamaño. Las golondrinas invernales, por ejemplo, a menudo abandonan sus huevos por largos períodos de tiempo cuando la temperatura es baja y los embriones de tordo cabecicafé podrían ser menos tolerantes al frío (Mills, 1988). Los chivirines pantaneros se asocian con los tordos alirrojos (Agelaius phoeniceus) en sus áreas de nidificación y esta segunda especie les brinda protección contra el parasitismo a través de la defensa grupal de sus colonias (Picman, 1986; Freeman y otros, 1990).[10]

Alimentación inadecuada de los polluelos

 
Los jilgueros canario (Carduelis tristis) no son buenos huéspedes debido a la alimentación vegetariana.

La mayor parte de los paseriformes alimenta a los jóvenes con artrópodos; las dietas de los polluelos de distintas especies que cohabitan en un mismo territorio a menudo son bastante similares. Por esta razón, no existen grandes restricciones en este sentido en cuanto a la elección del huésped por parte de los tordos cabecicafé: una gran variedad de especies puede ofrecer una alimentación igualmente adecuada a los polluelos de esta ave.[31]​ De hecho, estos son alimentados sobre la base de una dieta casi siempre insectívora por sus padres adoptivos.[32]​ Sin embargo, la dieta del carpodaco doméstico (Carpodacus mexicanus), un huésped ocasional del tordo cabecicafé, está compuesta de una variedad de alimentos de origen vegetal, mayormente semillas de hierbas. Los pocos animales que consume son áfidos y orugas.[31]

La mayoría de los polluelos altriciales crece con rapidez, lo cual demanda una dieta rica en proteínas; una alimentación de bajo contenido proteico puede retrasar el crecimiento severamente. El escaso desarrollo de los tordos cabecicafé observado en nidos de carpodacos domésticos se debe justamente a una deficiencia de esos nutrientes. En esos casos, la masa corporal de los polluelos no sigue el patrón sigmoidal característico del crecimiento normal, sino que aumenta de manera mayormente lineal durante todo el desarrollo. Las semillas y particularmente las frutas por lo general no contienen muchas proteínas. Adicionalmente, las proteínas vegetales a menudo carecen de uno o varios aminoácidos esenciales, los cuales no pueden ser sintetizados por el organismo.[31]

Carpodaco doméstico (Carpodacus mexicanus)

 
Los carpodacos domésticos (Carpodacus mexicanus) no son buenos huéspedes debido a la alimentación vegetariana.

Al igual que otros miembros de Carduelinae, el carpodaco doméstico (Carpodacus mexicanus) es inusual entre los huéspedes de esta especie por el hecho de que alimenta a sus pequeños con productos vegetales principalmente. La comida les es suministrada por regurgitación, no está parcialmente digerida, ni contiene secreciones nutritivas producidas por el adulto, lo que implica un fracaso reproductivo para los tordos cabecicafé que depositen sus huevos en estos nidos dadas las necesidades alimenticias de sus polluelos.[31]

El tordo cabecicafé parasitó 99 (24,4%) de los 406 nidos de carpodacos domésticos estudiados en Barrie, Guelph, Orillia y St. Catharines (Ontario, Canadá), en los períodos 1983 – 1985 y 1990 – 1993. Los nidos contenían un total de 127 huevos parasíticos. Aunque muchos lograron eclosionar, ningún polluelo sobrevivió. Los polluelos que perecían en los nidos eran encontrados allí (35,6%) o eran removidos por el ave adulta (64,4%). En principio, el crecimiento de estos era muy lento: necesitaban alrededor del doble del tiempo que requerían los tordos cabecicafé en nidos de otras especies para alcanzar una misma talla. La masa corporal final estimada en ellos era un 22,4% inferior a la normal. Sobrevivían un promedio de tan sólo 3,2 días, dos de ellos no habiendo superado siquiera el día de vida. Sólo uno logró abandonar el nido a la edad de 14 días, pero su cuerpo sin vida fue hallado al día siguiente. El crecimiento de las plumas también se vio afectado: ese único ejemplar que pudo abandonar el nido requirió alrededor de 4 días adicionales para alcanzar un desarrollo del plumaje comparable al de un polluelo normal de 10 días de edad.[31]

Debido a que el parasitismo de puesta en nidos de carpodacos domésticos no resulta exitoso, los tordos cabecicafé deberían evitarlos. Aunque la frecuencia con la que los tordos parasitaron dichos nidos fue alta cuando este estudio fue llevado a cabo, esto puede ser resultado de la entonces reciente asociación entre el mencionado huésped y el parásito en Ontario. De hecho, la tasa de parasitismo en el carpodaco disminuyó notablemente con el correr del tiempo en el este de América del norte.[31]

Otras especies

 
La alimentación frugívora por parte de los ampelis americanos (Bombycilla cedrorum) a los polluelos puede ocasionar la muerte de los jóvenes parásitos.

Los pequeños tordos cabecicafé enfrentan los mismos problemas en nidos de otras especies con una dieta similar. En un experimento, la mayoría de estos polluelos murió en los primeros seis días tras ser ubicados en nidos de gorrión común (Passer domesticus), el cual también alimenta a sus hijos sobre la base de una dieta de origen vegetal. Según otros estudios, los polluelos sobrevivían un promedio de sólo dos días en nidos de jilguero canario (Carduelis tristis); la mayoría moría para el cuarto día y sólo uno sobrevivió hasta los 12. Los tordos cabecicafé pueden abandonar el nido en caso de haber sido criados por ampelis americanos (Bombycilla cedrorum), pero ocasionalmente fallecen después de tres días cuando los padres comienzan a alimentar a sus polluelos con frutas en vez de insectos.[31]

Destrucción de los nidos

Las hembras son diestras observadores del comportamiento de las otras aves cuando necesitan un nido en el que depositar sus huevos, pero el tordo cabecicafé puede ser aún más ingenioso de lo que podría esperarse, tal como descubrieron Jeffrey Hoover y Scott Robinson (2007). Aparentemente, éstas revisan sus huevos y polluelos periódicamente y el rechazo del huevo por parte del ave parasitada puede originar una reacción vengativa en aquellas. Dichos ornitólogos describieron un comportamiento denominado “cowbird mafia”, que consiste en que las hembras destruyan los nidos en los que los huéspedes hayan removido sus huevos. Esta conducta alienta a las aves hospedadoras a no interferir con el huevo intruso para evitar un riesgo a su propia descendencia. Asimismo, algunas hembras atacan nidos y roban sus huevos antes de depositar los propios, forzando al huésped a construir uno nuevo. Debido a que estas segundas puestas son generalmente menos numerosas, el polluelo de tordo cabecicafé tendrá entonces una competencia menor cuando la hembra finalmente deposite su huevo en el nido recientemente construido.[30]

Factores influyentes en el parasitismo

El parasitismo del tordo cabecicafé puede verse influido por el sustrato del nido, su altura, ubicación —por ejemplo, tipo de hábitat, distancia al margen más cercano y a los puntos de observación— y grado de ocultamiento (Wiens, 1963; Zimmerman, 1983; Romig y Crawford, 1995; Davis y Sealy, 2000; S. K. Davis, Saskatchewan Watershed Authority, Regina, Saskatchewan, comunicación personal); por ciertas características de las especies vulneradas, tales como su abundancia, tendencia a la defensa grupal (Freeman y otros, 1990; Strausberger 2001) y fenología durante la temporada reproductiva (Fleischer, 1986; Davis, 1994); y por la distancia a las áreas de pastura (Goguen y Mathews, 2000).[5]​ La receptividad para con sus huevos y la talla de las víctimas también son importantes factores a tener en cuenta.[3][8]​ Existen estudios que sugieren que —al menos en lo que respecta al gorrión melódico (Melospiza melodia)— la edad del huésped podría incidir sobre las tasas de parasitismo descubiertas en sus nidos.[12][33]

Vulnerabilidad y tamaño del huésped

 
Chipe de Kirtland (Dendroica kirtlandii), especie particularmente susceptible al parasitismo de puesta.

La evidencia circunstancial indica que en ciertos lugares al menos algunas hembras se especializan en aves hospedadoras particularmente vulnerables, evitando parasitar aparentemente los nidos de otras especies que constituyen huéspedes usuales en otras partes de su área de distribución. Una explicación parcial para esto podría ser que las especies hospedadoras que han estado en contacto con los tordos cabecicafé durante mucho tiempo hayan desarrollado la habilidad de reconocer al parásito o a sus huevos. Consecuentemente, muchas de estas aves que, en otras circunstancias representarían buenos huéspedes, atacan agresivamente a las hembras de tordo cabecicafé o bien arrojan los huevos extraños, los destruyen o abandonan sus nidos tras detectar la intrusión. En cambio, otras especies en este sentido más receptivas y también más seriamente afectadas por el parasitismo han estado sometidas a esta amenaza durante un menor período de tiempo puesto que sus áreas de distribución no se superponían con la del tordo cabecicafé antes de su diseminación sobre gran parte de América del norte. El chipe de Kirtland (Dendroica kirtlandii) y la subespecie californiana del víreo de Bell (Vireo bellii pusillus) son ejemplos de aves cuyo contacto con el tordo cabecicafé es relativamente reciente y para las cuales el parasitismo representa una amenaza.[8]

Experimentos realizados con nidos artificiales en un aviario sugieren que los tordos cabecicafé tienden a escoger aquellos con huevos más pequeños que los propios.[1][6]​ De igual manera, las aves parasitadas suelen ser de menor tamaño que ellos: para cuando sus polluelos están listos para abandonar el nido, estos pesan más del doble que la mayoría de los polluelos de chipes (parúlidos) y víreos (Vireo spp.), los cuales se encuentran entre sus huéspedes más comunes, e incluso superan en tamaño a los adultos.[3]

Sustrato, altura y ubicación del nido

 
Arrocero americano (Spiza americana), especie parasitada.

Distintos investigadores descubrieron efectos variados del sustrato y la altura del nido sobre el parasitismo de puesta. Wiens (1963) no encontró diferencias vinculadas a esos dos factores entre nidos parasitados y no parasitados en praderas de pasto alto y bosques de meseta y de tierras bajas en Oklahoma. Tanto unos como otros fueron hallados en árboles pequeños y arbustos. En un estudio llevado a cabo en Kansas, pequeñas diferencias en el sustrato no parecían afectar las tasas de parasitismo en nidos de tordo sargento (Agelaius phoeniceus), mientras que sí lo hacía la altura (Fleischer, 1986). Los nidos vulnerados de tordo sargento y arrocero americano (Spiza americana) se ubicaban a una altura considerablemente mayor sobre el sustrato que los nidos sin parasitar. En el sur de Saskatchewan (Canadá), los nidos vulnerados de gorrión sabanero pálido (Ammodramus bairdii) estaban significativamente menos ocultos que los no parasitados; se daba el caso contrario con el gorrión indefinido rayado (Spizella pallida) (S. K. Davis, comunicación personal). No existían diferencias importantes en cuanto al grado de escondimiento entre nidos parasitados y no parasitados de arnoldo ventrinegro (Calcarius ornatus), gorrión sabanero común (Passerculus sandwichensis), bisbita llanera (Anthus spragueii) y pradero occidental (Sturnella neglecta).[5]

La altura a la que se ubicaban 696 nidos parasitados en la Columbia Británica (Canadá) variaba entre el nivel del suelo y los 15 m, con el 54% de ellos entre los 0,9 y los 2,1 m.[10]

Características del hábitat

 
Las extensas superficies arboladas de los Ozarks de Misuri presentan niveles bajos parasitismo de puesta.

La disponibilidad de zonas de alimentación, como corrales para el ganado, está asociada a niveles más elevados de parasitismo de puesta. Verner y Ritter (1983) y Rothstein y otros (1980) descubrieron que las áreas cercanas a esos corrales y a campos destinados a la alimentación del ganado en la Sierra Nevada presentaban una mayor cantidad de tordos cabecicafé y de nidos parasitados. De hecho, estas aves parasíticas eran escasas lejos de las alteraciones al ambiente realizadas por la mano del hombre. En el Shawnee National Forest (Illinois), los estudios de telemetría demostraron que los tordos cabecicafé visitaban las pasturas con ganado y los feedlots incluso en la mañana.[22]​ Por otro lado, las tasas de parasitismo son relativamente bajas en los hábitats boscosos en gran parte intactos del norte de Míchigan, Wisconsin y Minnesota.[19]​ Las extensas superficies arboladas de los Ozarks de Misuri, norte de Wisconsin e Indiana centromeridional presentan niveles bajos de depredación en los nidos y parasitismo de puesta y podrían proporcionar el excedente necesario para mantener las poblaciones de aves en los bosques fragmentados del sur de Wisconsin, Illinois y norte de Misuri.[34]

El parasitismo de puesta del tordo cabecicafé se encuentra negativamente relacionado con el porcentaje de superficie cubierta por bosques. En un estudio llevado a cabo en distintos puntos de Illinois, Indiana, Minnesota, Misuri y Wisconsin, Robinson y otros (1995) descubrieron que la mayoría de los nidos de zorzal maculado (Hylocichla mustelina) en áreas con menos de un 55% de superficie boscosa estaba parasitado. En algunos lugares, había más huevos de tordo cabecicafé por nido que de zorzal maculado. En contraste, el parasitismo de puesta era tan bajo en zonas de arboleda densa que probablemente no representara allí una causa significativa de fracaso reproductivo. Por otra parte, las tasas de parasitismo eran consistentemente más elevadas en los cuatro puntos de estudio de Illinois que en bosques comparablemente fragmentados en los otros estados. La abundancia de tordos cabecicafé también era superior en Illinois. Varias especies migratorias eran severamente parasitadas en Indiana, un estado de paisajes mayormente boscosos, en donde los nidos de otras especies eran raramente vulnerados.[34]

 
Zorzal maculado (Hylocichla mustelina), especie parasitada.

En zonas de gran densidad forestal, las poblaciones de tordos cabecicafé están más restringidas por la disponibilidad de áreas de alimentación que por la de nidos hospedadores. En lugares de vegetación más fragmentada, por otra parte, es la cantidad de nidos lo que limita sus números en mayor medida y los parásitos pueden saturar el hábitat reproductivo disponible.[34]

En una investigación llevada a cabo en el Sierra National Forest (California) entre 1980 y 1981 (Verner y Ritter, 1983), los tordos cabecicafé mostraron una marcada tendencia a preferir los bordes de los prados como hábitat reproductivo, empleando en menor medida áreas taladas completa o parcialmente y rara vez bosques sin talar. En los prados —favorecidos como hábitat para la reproducción—, su número se reducía rápidamente a medida que aumentaba la distancia respecto de las fuentes de alimentación con presencia humana.[35]

En la Columbia Británica (Canadá), la mayoría de los nidos parasitados (34%) se ubicaba en hábitats rurales, incluyendo terrenos agrícolas cultivados (12%), cascos de estancia (11%), huertos de frutales (7%) y pasturas (4%); seguidos por los hábitats forestales (30%), entre los que se encuentran los bosques caducifolios (13%), de coníferas (9%) y mixtos (8%). En el valle de Okanagan, Fonnesbeck (1998) descubrió que el parasitismo de puesta menguaba significativamente en los bosques de altura con respecto a los valles. Las áreas ribereñas (16%), hábitats urbanos y suburbanos (11%) y matorrales (6%) también eran importantes para el tordo cabecicafé.[10]

Efecto de borde

El parasitismo de puesta del tordo cabecicafé ha sido favorecido por las prácticas agrícolas a lo largo del siglo XX.[24][36]​ Existe una mayor frecuencia parasítica cerca de las orillas de los campos, con lugares altos en los que posarse, que lejos de ellas.[36]​ Esta ave es a menudo más abundante a lo largo de los márgenes de los bosques que en el interior de los mismos y las tasas de parasitismo son generalmente más elevadas en las inmediaciones de dichos márgenes y en pequeñas extensiones de pradera.[37]​ En los bosques caducifolios orientales, la densidad poblacional de la especie y la tasa de parasitismo se reducen conforme uno se aleje de sus límites.[22][24][38]​ Consecuentemente, la fragmentación de los bosques incrementa el parasitismo.[22][24]​ En su estudio, Brittingham y Temple (1983) categorizaron los nidos de las especies hospedadoras en cuatro grupos basándose en la distancia entre ellos y el margen más cercano: 0 – 99 m, 100 – 199 m, 200 – 299 m y más de 300 m. Determinaron que 26 nidos de los 40 que había en el área de 0 – 99 m estaban parasitados, 17 de 37 entre los 100 y 199 m, 4 de 11 entre los 200 y 299 m, y 3 de 17 más allá de los 300 m.[24][38]​ Esto quiere decir que en la zona boscosa de Wisconsin estudiada la tasa de parasitismo se reducía de un 65% en los primeros 99 m a menos del 18% más allá de los 300 m.[22]

Por otro lado, en un área moderadamente forestada (50%) del Shawnee National Forest en el sur de Illinois, Robinson y otros y Trime y otros no descubrieron un descenso significativo en los niveles de parasitismo incluso a 800 m del margen más cercano. Aparentemente, la población de tordos cabecicafé había saturado los bosques disponibles en esa zona. En contraste, la tasa de parasitismo es baja —inferior al 10% de los nidos hospedadores en potencia— en las extensas superficies arboladas (más del 80%) del Mark Twain National Forest (Misuri) y del Hoosier National Forest (Indiana) (John Faaborg y Don Whitehead, comunicación personal). De manera similar, Hoover (1992) no encontró evidencia del denominado “efecto de borde” en Pensilvania central en donde las poblaciones de tordos cabecicafé son generalmente reducidas. Por lo tanto, la magnitud del “efecto de borde” —es decir, el grado en que esa predilección generalizada por los márgenes era tomada en cuenta— variaba de un lugar a otro dependiendo del nivel de fraccionamiento del paisaje y de la abundancia de tordos cabecicafé.[22]

Overcash y Roseberry (1987) descubrieron que la cantidad de tordos cabecicafé era de 4 a 5 veces superior alrededor de claros naturales pequeños (menos de 4 hectáreas) en el Shawnee National Forest del sur de Illinois, aunque no recolectaron información sobre la tasa de parasitismo. Don Whitehead (comunicación personal) encontró niveles de parasitismo más elevados a lo largo de áreas taladas que en el interior del bosque en el Hoosier National Forest, incluso no existiendo allí sitios en los que alimentarse. Gates y sus colegas investigaron sobre si la abundancia de tordos cabecicafé y los niveles de parasitismo eran mayores en presencia de claros con cables eléctricos y compararon los resultados con lo que ocurría en corredores naturales creados por arroyos (Chasko y Gates, 1982; Gates y Giffen, 1991). Descubrieron que tanto el número de ejemplares como la tasa de parasitismo eran superiores en ambos tipos de corredores, pero también se encontraron con que las densidades de huéspedes eran mayores en las cercanías de los mismos.[22]

En las Grandes Llanuras

 
Gorrión indefinido rayado (Spizella pallida), especie parasitada.

Los nidos más cercanos a los confines de un fragmento de cierto hábitat parecen ser más vulnerables al parasitismo del tordo cabecicafé que los ubicados en el interior del mismo. Las tasas más altas de parasitismo en los pastizales de Manitoba (Canadá) se daban en áreas con una mayor proporción de márgenes que en otros lugares (Davis, 1994; Davis y Sealy, 2000). La proximidad entre los sitios de alimentación de los tordos cabecicafé y los nidos hospedadores pudo haber resultado en una mayor frecuencia parasítica en estos márgenes (Davis y Sealy, 2000). En Illinois, los niveles de parasitismo eran más elevados en los bosques y sus límites que en hábitats de pastizales o mixtos de pastizales y matorrales (Best, 1978; Strausberger y Ashley, 1997). En las praderas de pasto alto de Minnesota, se registraron tasas más altas de parasitismo cerca —menos de 45 m— de los márgenes arbolados de las praderas que lejos de estos —45 m o más— en nidos de gorrión indefinido rayado (Spizella pallida) y pradero occidental (Sturnella neglecta) (Johnson y Temple, 1990). En Oklahoma, Wiens (1963) descubrió que los nidos parasitados se ubicaban cerca del límite de un hábitat, como matorrales bajos y arbustivos que bordeaban áreas relativamente abiertas cubiertas por pasto alto, mientras que la mayoría de los nidos en zonas abiertas con pasto alto no estaba parasitada. En Nebraska, Johnsgard (1980) encontró que los tordos cabecicafé depositaban sus huevos en nidos situados en los márgenes de los bosques, en matorrales arbustivos y en áreas con árboles o arbustos esparcidos.[5]

 
Pradero oriental (Sturnella magna), especie parasitada.

Zimmerman (1983) concluyó que en Kansas los nidos de arrocero americano (Spiza americana) en zonas con pasto alto eran parasitados con más frecuencia (85% de 125 nidos) que los construidos en antiguos terrenos agrícolas (60% de 385 nidos). En el mismo estado, las tasas de parasitismo para el pradero oriental (Sturnella magna), el gorrión sabanero pechileonado (Ammodramus savannarum) y el arrocero americano (Spiza americana) eran más elevadas en los nidos ubicados dentro de los 100 m del margen de un bosque que más allá de esa distancia, pero no se observaban diferencias con respecto al parasitismo entre los nidos emplazados en las cercanías de los límites de terrenos agrícolas y lejos de ellos (Jensen, 1999).[5]

Las tasas de parasitismo en nidos de tordo ojo amarillo (Euphagus cyanocephalus) en Colorado y Wyoming eran más altas cerca del agua —300 m o menos— que lejos de ella —más de 300 m— (Hanka, 1979). En las praderas de pasto alto de Wisconsin, Clotfelter y otros (1999) descubrieron que las probabilidades de parasitismo en nidos de tordo sargento (Agelaius phoeniceus) aumentaba con la proximidad al borde de un hábitat —en este caso, las áreas entre praderas y terrenos agrícolas o segmentos de bosque— o a una carretera y con la distancia desde superficies quemadas. La distancia a dichos límites no era un factor determinante del éxito reproductivo o de la cantidad de polluelos que lograban abandonar el nido.[5]

 
Tordo ojo amarillo (Euphagus cyanocephalus), especie parasitada.

En áreas ribereñas del oeste de Montana, las tasas de parasitismo aumentaban con una mayor densidad de huéspedes y proximidad a los lugares con presencia del hombre como casas y granjas (Tewksbury y otros, 1999). Según este estudio, las aves hospedadoras que anidaban en segmentos extensos de bosque ribereño corrían mayor riesgo de parasitismo que las que nidificaban en fragmentos más reducidos de bosque ribereño y en bosques de coníferas. Muchas de las áreas ribereñas amplias se encontraban cerca de zonas agrícolas y tenían una gran abundancia de tordos cabecicafé. Las características del terreno ubicado a más de un kilómetro de distancia de los sitios estudiados ejercían escasa influencia sobre las tasas de parasitismo.[5]

El tamaño de las extensiones dominadas por un determinado hábitat puede influir sobre el parasitismo de puesta. Daub (1993) documentó que el parasitismo se producía sólo en humedales de una superficie menor a las 2,9 hectáreas, posiblemente debido a la facilidad con la que las hembras de tordo cabecicafé podían observar a las de tordo sargento y tordo cabeciamarillo (Xanthocephalus xanthocephalus) anidando en los humedales pequeños. En Minnesota, Montana, Dakota del Norte y Dakota del Sur, la densidad de tordos cabecicafé disminuía con el tamaño de las extensiones de los pastizales que cubrían el campo (Johnson e Igl, 2001). De manera similar, en el sur de Saskatchewan, su abundancia y las tasas de parasitismo eran entre 2 y 4 veces mayores en pequeñas pasturas —menos de 256 hectáreas— que en las grandes —256 hectáreas o más— (S. K. Davis, comunicación personal).[5]

Distancia a los puntos de observación

 
Gorrión sabanero pálido (Ammodramus bairdii), especie parasitada.

Dentro de un mismo lugar, el porcentaje de nidos parasitados puede variar según la estructura de la vegetación. A menudo se observa tordos cabecicafé posados o exhibiéndose en la copa de árboles secos. Anderson y Storer (1976), quienes trabajaron en un hábitat relativamente abierto con pinos de Banks (Pinus banksiana), descubrieron que las posibilidades de que los nidos de chipe de Kirtland (Dendroica kirtlandii) fueran parasitados eran mayores cuando había un árbol muerto en las proximidades. Brittingham y Temple (información no publicada) no hallaron esa relación con respecto a la cercanía de un árbol seco en los bosques caducifolios.[22]

Algunos hábitats marginales brindan a los tordos cabecicafé sitios adecuados en los que posarse para buscar nidos; estos sitios a menudo están asociados a tasas más altas de parasitismo.[5]​ En Iowa, los nidos de tordo sargento (Agelaius phoeniceus) en humedales restaurados eran menos parasitados que los emplazados en humedales naturales, posiblemente debido a la escasez de árboles en los primeros (Delphey y Dinsmore, 1993).[5]​ En un estudio realizado en el este de Washington, los tordos cabecicafé parasitaron nidos inactivos de tordo sargento y, en este caso, las tasas de parasitismo fueron más bajas en los humedales con árboles que en los humedales sin ellos (Freeman y otros, 1990).[5][22]​ Los autores sugirieron entonces que los árboles contribuirían con la eficiencia a la hora de identificar los nidos activos en el sentido de que les permitirían a las hembras evaluar mejor si los nidos se encuentran o no en desuso.[5][22]

 
Gorrión sabanero común (Passerculus sandwichensis), especie parasitada.

La proximidad a los sitios en los que estas aves se posan puede influir sobre las probabilidades de que un nido sea parasitado. En el este de Dakota del Norte, los nidos parasitados de gorrión indefinido rayado (Spizella pallida) se encontraban considerablemente más cerca de esos puntos de observación, definidos como cualquier arbusto, árbol o estructura hecha por la mano del hombre que se elevara al menos un metro sobre la vegetación circundante (Romig y Crawford, 1995). De hecho, ningún nido a más de 52 m de ellos había sido vulnerado. En Manitoba, eran más parasitados los nidos localizados dentro de los 150 m de arbustos, cercas y otras estructuras de al menos un metro de alto (Davis, 1994). Sin embargo, algunos nidos ubicados a 340 m o más de uno de cualquiera de esos puntos también sufrían el parasitismo del tordo cabecicafé (Davis y Sealy, 2000). En Nueva York, los nidos parasitados de gorrión melódico (Melospiza melodia) se ubican significativamente más próximos a estos puntos de observación, que podían ser árboles y estructuras como cercas de al menos 2 m, que los nidos sin parasitar (Hauber y Russo, 2000).[5]

En Saskatchewan (Canadá), 28 nidos parasitados de arnoldo ventrinegro (Calcarius ornatus) se hallaban sustancialmente más próximos a los puntos que los tordos cabecicafé potencialmente utilizarían para posarse —definidos como arbustos, cercas y otras estructuras de al menos 50 cm de alto— que 174 nidos sin parasitar, a un promedio de 34 y 50 m respectivamente; se observaba la misma tendencia con los nidos de gorrión zacatero coliblanco (Pooecetes gramineus), con distancias medias de 77 y 159 m respectivamente (S. K. Davis y D. G. McMaster, comunicación personal). Los nidos parasitados de las siguientes tres especies también se ubicaban, en promedio, más cerca, aunque no significativamente, de los mencionados sitios que los no parasitados: gorrión sabanero pálido (Ammodramus bairdii) —25 m (21 nidos) frente a 36 m (58 nidos)—, gorrión sabanero común (Passerculus sandwichensis) —34 m (18 nidos) y 36 m (32 nidos)— y pradero occidental (Sturnella neglecta) —33 m (13 nidos) comparado con 38 m (34 nidos)—.[5]

Nidificación colectiva de los huéspedes

La defensa grupal por parte de los potenciales huéspedes puede disuadir el parasitismo (Freeman y otros, 1990; Carello y Snyder, 2000). En Washington, las colonias densas de tordo sargento (Agelaius phoeniceus) mostraban tasas de parasitismo inferiores a las más disgregadas, posiblemente debido a la defensa grupal (Freeman y otros, 1990). En una zona de Colorado, los niveles de parasitismo estaban negativamente asociados al número de nidos de tordo sargento en cada estanque (Carello y Snyder, 2000). Los autores sugirieron que serían más bajas debido a la concentrada distribución de los nidos. Sin embargo, Fretwell (1972) descubrió que los arroceros americanos (Spiza americana) que anidaban en las proximidades de las colonias de tordos sargento sufrían altas tasas de parasitismo por parte de los tordos cabecicafé, probablemente atraídos por aquellos otros ictéridos. En Wisconsin, Clotfelter y Yasukawa (1999) examinaron los efectos de la nidificación en colonias del tordo sargento. Se registró una relación positiva significativa entre la cantidad de nidos comenzados por día y la proporción de nidos parasitados, lo que sugería que la nidificación colectiva no repercutía en una menor amenaza de parasitismo. No obstante, la sincronización en la puesta de huevos aparentemente contribuía a reducir el riesgo de parasitismo. Los nidos parasitados tenían períodos de puesta menos sincronizados con los de sus vecinos más cercanos y se encontraban más alejados del nido simultáneamente activo más próximo —es decir, estaban más aislados— que en el caso de los nidos sin parasitar. La distancia media entre 39 nidos parasitados y el nido simultáneamente activo más cercano era de 79 m, comparada a los 54 m de los 119 nidos sin parasitar.[5]

Fenología de los huéspedes

 
Gorrión sabanero pechileonado (Ammodramus savannarum), especie parasitada.

La fenología de las especies hospedadoras durante la temporada reproductiva puede afectar la frecuencia con la que sus nidos son parasitados. En Manitoba, los nidos de arnoldo ventrinegro (Calcarius ornatus) no eran vulnerados a menudo, posiblemente debido a que criaban a sus polluelos en dos períodos distintos, varias semanas antes y varias semanas después de que los tordos cabecicafé comenzaran a depositar sus huevos (Davis, 1994). Estos parasitaban los nidos de gorrión sabanero pechileonado (Ammodramus savannarum) con mayor frecuencia a medida que la temporada reproductiva avanzaba. En un estudio realizado en Dakota del Norte, ninguno de los 24 nidos de alondra cornuda (Eremophila alpestris) encontrados antes del 15 de mayo estaba parasitado, mientras que el 83% de los 60 nidos descubiertos después de esa fecha sí lo estaba (Koford y otros, 2000). En Kansas, los tordos cabecicafé ponían sus huevos en nidos de tordo sargento (Agelaius phoeniceus) en la primera etapa de la época de reproducción —antes del 25 de mayo— y empezaban a parasitar los de arrocero americano (Spiza americana) más tarde —después del 25 de mayo— a medida que su disponibilidad aumentaba (Fleischer, 1986). En Washington, los nidos de tordo sargento construidos más temprano —20 a 60 días desde el comienzo de la temporada reproductiva, basándose en la fecha en la que el primer huevo fue depositado— eran menos parasitados que los construidos luego —60 a 80 días desde el comienzo de la temporada reproductiva— (Freeman y otros, 1990).[5]

Edad del huésped

Estudios realizados en Mandarte Island (Columbia Británica) revelaron que los nidos de las hembras de gorrión melódico (Melospiza melodia) de mayor edad sufrían una tasa de parasitismo superior a la encontrada en nidos de hembras de la misma especie de tan sólo un año que se reproducían por primera vez.[12][33]​ Esto puede deberse a una diferencia en el comportamiento que guarde relación con la edad del huésped:[12]​ es probable que el modo en que los gorriones mayores reaccionan frente a las hembras de tordos cabecicafé en busca de nidos los predisponga a ser más fácilmente reconocidos como huéspedes en potencia.[33]

Se puso a prueba esta hipótesis midiendo las respuestas de los gorriones melódicos hacia un modelo de una hembra de tordo cabecicafé en 1982, cuando ningún parásito frecuentaba la isla. Este modelo y otro de control que representaba una hembra de junco eran ubicados cerca de los nidos de gorriones de edad conocida. Tal como se había predicho, los gorriones hembra adultos exhibían un comportamiento distinto hacia el modelo de tordo cabecicafé que los de un año. No se registraron diferencias en sus reacciones hacia el junco. Los machos adultos también respondieron de distinto modo en presencia del tordo cabecicafé y del junco, pero no difirieron significativamente respecto de los machos de un año de edad en cuanto a sus reacciones hacia ambos modelos.[33]

Cuando se volvió a experimentar con las aves juveniles, ahora ya adultos de dos años de edad, que habían respondido débilmente en ausencia de tordos cabecicafé en la isla, éstas reaccionaron enérgicamente tras la recolonización de Mandarte Island por parte de los parásitos. Los individuos de dos años de edad que no habían sido expuestos a la presencia de tordos cabecicafé en su primera temporada reproductiva mostraron una tasa parasítica intermedia entre la de los adultos experimentados y la de ejemplares de sólo un año de edad. Los nidos de las hembras de un año eran vulnerados con menos frecuencia al comienzo de la época de reproducción que al final de la misma. Todos estos resultados apoyan la hipótesis de que la selectividad etaria del parásito deriva de las diferencias en las respuestas hacia los tordos cabecicafé exhibidas por individuos de distintas edades.[33]

La mayor reacción de las hembras de más edad parecería no constituir una conducta adaptativa puesto que aparentemente perjudica el éxito reproductivo de esas aves debido a la selectividad etaria del parásito. Es posible que esta paradoja pueda justificarse si se considera la respuesta hacia un tordo cabecicafé en las cercanías del nido un ejemplo de una reacción más general frente a todos los potenciales enemigos que se puedan aproximarse al mismo.[33]

Notas

  1. Esto equivale a alrededor del 43,95% de los nidos localizados.
  2. Melospiza melodia, nombre científico del gorrión melódico, no citado en la fuente original.
  3. Esto equivale a alrededor del 70,41% de los nidos parasitados.
  4. Esto equivale a alrededor del 26,53% de los nidos parasitados.
  5. Esto equivale a alrededor del 3,06% de los nidos parasitados.
  6. Geothlypis trichas, nombre científico del chipe de cara negra, no citado en la fuente original.
  7. Catharus fuscescens, nombre científico del tordo rojizo, no citado en la fuente original.
  8. Piranga olivacea, nombre científico de la tángara rojinegra migratoria, no citado en la fuente original.
  9. Mniotilta varia, nombre científico del chipe trepador, no citado en la fuente original.
  10. Vireo olivaceus, nombre científico del víreo ojirrojo, no citado en la fuente original.
  11. La fuente de información original (en inglés) habla de rufous-sided towhee, denominación que aludía conjuntamente al rascador pinto oscuro (Pipilo erythrophthalmus) y al rascador maculoso (Pipilo maculatus) cuando eran considerados una única especie. A partir de Pipilo erythrophthalmus, se distinguieron luego dos especies: una en el este de América del norte, que retuvo ese nombre científico, y otra en el oeste, denominada Pipilo maculatus. Por consiguiente, en la actualidad se reconoce que algunas de las subespecies entonces tomadas como pertenecientes a erythrophthalmus en realidad forman parte de una especie distinta, maculatus.
  12. El mosquerito de Traill (Empidonax traillii) era considerado antiguamente una especie de tiránido, la cual fue luego dividida en otras dos: mosquerito suacero, que retuvo el nombre científico de su predecesor, y mosquerito ailero (Empidonax alnorum).
  13. Icterus galbula, nombre científico de la oropéndola de Baltimore, no citado en la fuente original.

Referencias

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Véase también

  •   Datos: Q6061359

parasitismo, puesta, molothrus, ater, rasgo, más, prominente, reproducción, tordo, cabecicafé, molothrus, ater, especie, paseriforme, ictérido, habita, gran, parte, américa, norte, lugar, dudas, hecho, practica, parasitismo, puesta, esto, quiere, decir, para, . El rasgo mas prominente de la reproduccion del tordo cabecicafe Molothrus ater una especie de paseriforme icterido que habita en gran parte de America del norte es sin lugar a dudas el hecho de que practica el parasitismo de puesta esto quiere decir que para reproducirse necesita depositar sus huevos en los nidos de otras aves que hacen las veces de huespedes o padres adoptivos para sus polluelos Se trata del parasito de puesta mas comun de America del norte pues se sabe que aova en nidos de mas de 220 especies de aves reduciendo el exito reproductivo y amenazando la supervivencia de algunas de ellas 1 Tipicamente la hembra pone sus huevos en los nidos de paseriformes pequenos 2 en particular en aquellos en forma de taza 3 Sin embargo a veces este sagaz oportunista comete una equivocacion al depositarlos en nidos en desuso de alguna temporada anterior 4 5 Hembra de tordo cabecicafe Molothrus ater Se trata del parasito de puesta mas ampliamente distribuido y mas conocido de America del norte El ornitologo Herbert Friedmann 1929 sugiere que el tordo cabecicafe al igual que las demas especies de su genero todas ellas parasiticas originalmente criaba a sus pequenos de hecho los icteridos son conocidos por sus nidos elaborados y que el parasitismo fue un habito adquirido El tordo renegrido Molothrus bonariensis un parasito de puesta sudamericano rara vez intenta construir su propio nido siempre sin exito lo cual indicaria que en un principio disponia de la habilidad para hacerlo y que luego la perdio Lo mismo pudo haberle sucedido a su primo neartico 4 Indice 1 Teorias sobre el origen del parasitismo 2 Busqueda de nidos y puesta de los huevos 2 1 Hora de la puesta 2 2 Cantidad de huevos por nido 3 Especies hospedadoras 3 1 Especies mas frecuentemente parasitadas 3 2 Frecuencia parasitica en las especies segun su comportamiento 3 3 Variaciones intraespecificas en la frecuencia parasitica 4 Reacciones de los huespedes 4 1 Aceptacion de los huevos 4 2 Eyeccion de los huevos 4 3 Construccion de un nuevo nido 4 4 Abandono del nido 4 5 Agresividad hacia el tordo adulto 4 6 Variaciones intraespecificas en la respuesta al parasitismo 5 Repercusiones sobre la nidada del huesped 5 1 Estudios especificos 6 Inadecuacion del huesped 6 1 Alimentacion inadecuada de los polluelos 6 1 1 Carpodaco domestico Carpodacus mexicanus 6 1 2 Otras especies 7 Destruccion de los nidos 8 Factores influyentes en el parasitismo 8 1 Vulnerabilidad y tamano del huesped 8 2 Sustrato altura y ubicacion del nido 8 3 Caracteristicas del habitat 8 3 1 Efecto de borde 8 3 2 En las Grandes Llanuras 8 4 Distancia a los puntos de observacion 8 5 Nidificacion colectiva de los huespedes 8 6 Fenologia de los huespedes 8 7 Edad del huesped 9 Notas 10 Referencias 11 Vease tambienTeorias sobre el origen del parasitismo Editar Chipe de Wilson Wilsonia pusilla criando a un polluelo de tordo cabecicafe Una de las teorias que intentaron explicar la adopcion de los habitos parasiticos propuesta por F H Herrick sostiene que los mismos pudieron haber evolucionado a partir de una falta de coordinacion entre los instintos de la construccion del nido y de la puesta de huevos la cual habria resultado en que los huevos estuvieran listos para ser depositados antes que el nido estuviese preparado El ornitologo Elliott Coues 1874 uno de los fundadores de la American Ornithologists Union conjeturo que una hembra de tordo cabecicafe en peligro inminente de perder su huevo a causa de no tener un nido listo para cuando debia depositarlo tal vez preferiera ponerlo en uno ajeno quiza en uno de su misma especie en lugar de en el suelo La conveniencia de este proceso posiblemente la incitase a repetirlo Sus polluelos una vez maduros podrian haber seguido sus pasos y asi hasta que los tordos cabecicafe criados de esta manera superaran en numero a los criados por su propia madre De este modo es probable que lo que comenzara como una necesidad se convirtiera en una eleccion inconsciente y finalmente se estandarizara bajo la forma de una conducta fija para toda la especie 4 Nido de mosquero fibi Sayornis phoebe con un huevo de tordo cabecicafe No obstante el punto debil de esta teoria es que esos casos en los que los huevos eran depositados en nidos ajenos de manera casual debieron haber sido muy raros en un principio y la tendencia heredada a repetir la conducta de sus madres habria desaparecido rapidamente al cruzarse estos individuos con otros criados normalmente a no ser que ese habito probara ser beneficioso para la especie y no existe evidencia de ello A menudo se encuentran huevos frescos de otras aves sobre el suelo y la imposibilidad de llegar a sus nidos para depositarlos nunca origino conductas parasiticas en ellas 4 El zoologo Glover Morrill Allen 1925 concibio una posible explicacion alternativa que apunta a que el parasitismo pudo haber surgido de la puesta ocasional de huevos en nidos ajenos por parte de aves muy sensibles al estimulo ovarico originado al ver nidos con huevos similares a los propios Una tercera teoria ideada por Otto Widmann 1907 indicaria que la asociacion con los animales de pasturas habria sido la causa de su parasitismo debido a que al seguir a las manadas en movimiento se alejaban demasiado de sus nidos como para regresar a ellos a tiempo para poner sus huevos y al tener tanta prisa debian depositarlos en los nidos de otras aves Sin embargo el problema con esta potencial explicacion es la carencia de hechos concretos que la respalden pues no existen registros de tordos que abandonen sus nidos para seguir vacas caballos o bisontes Probablemente la conducta parasitica haya sido adquirida por los ancestros de los tordos cabecicafe modernos en Sudamerica antes de que llegaran a America del norte y se desconoce hasta que punto estos primitivos tordos sudamericanos habian desarrollado el habito de seguir a las manadas errantes 4 Busqueda de nidos y puesta de los huevos Editar Nido parasitado por un tordo cabecicafe Las hembras encuentran nidos que puedan parasitar de tres maneras distintas en algunos casos se posan en un sitio oculto buscando actividad relacionada con la nidificacion en las areas abiertas lindantes otra opcion es la de caminar por el suelo intentado descubrir dicha actividad finalmente tambien pueden hacerlo con vuelos cortos y ruidosos en lo que pareciera ser un esfuerzo por ahuyentar a potenciales huespedes de sus nidos 6 7 El parasito frecuentemente localiza un potencial nido hospedador durante su construccion 8 Luego lo visita regularmente antes de depositar mientras sus duenos estan ausentes 8 Un dia antes de aovar o en el mismo dia en que lo hace a menudo quita un huevo del hospedador 8 En ocasiones lo ingiere en lugar de eyectarlo 8 Es posible que haya desarrollado el habito de remover uno de los huevos de la victima a fin de evitar que esta note una mayor cantidad de ellos tras la intrusion o bien para asegurarse de que el suyo reciba una incubacion adecuada ya que su adicion al nido podria dificultar al huesped la tarea de dar calor de manera uniforme a todos los huevos lo que podria resultar en que algunos incluyendo posiblemente el del tordo cabecicafe no lograran romper el cascaron 3 Mientras que a los icteridos no parasiticos les lleva entre 21 5 y 53 4 minutos poner sus huevos y a otros paseriformes entre 20 7 y 103 7 el tordo cabecicafe tipicamente pasa menos de un minuto en el nido hospedador cuando aova Al permanecer solo unos pocos segundos en el nido el parasito probablemente incremente sus posibilidades de pasar desapercibido y de evitar un ataque por parte de los huespedes La rapidez en la puesta de los huevos podria favorecer el que el huevo intruso sea aceptado por el dueno del nido 9 10 Las hembras no son necesariamente especificas en cuanto a la eleccion de sus huespedes es decir una misma ave puede perfectamente depositar sus huevos en los nidos de distintas especies hospedadoras incluso en dias consecutivos 4 11 Sin embargo existe evidencia de que en ciertos lugares al menos algunas de las hembras tienden a especializarse en una determinada especie hospedadora 8 Smith y Arcese 1994 constataron que en Mandarte Island una isla diminuta en el estrecho de Georgia al sudeste de la isla de Vancouver cada hembra de tordo cabecicafe solia aovar a diario comenzaba a depositar considerablemente despues que los gorriones melodicos Melospiza melodia en la mayoria de los anos y evitaba poner dos huevos en un mismo nido Los parasitos rara vez aovaban despues de que los huespedes hubieran completado su puesta y sus huevos eclosionaban con la misma frecuencia que los de los gorriones 12 Elliott Coues 1874 describio graficamente la busqueda de nidos por parte de la hembra de tordo cabecicafe Es interesante observar a una hembra de tordo cabecicafe lista para aovar Se vuelve inquieta revela una inusual excitacion y abandona su ajetreada busqueda de alimento con sus companeros Finalmente se separa de la bandada y sale a hacer un reconocimiento ansiosa porque su situacion es urgente y no tiene hogar Vuela a un matorral o a un seto o a otro lugar frecuentado por las aves en donde algo le dice quiza la experiencia que encontrara nidos Sigilosamente y en absoluto silencio revolotea escrutando furtivamente alternando entre euforia y desanimo las profundidades del follaje Divisa un nido pero su dueno pia sobre el borde y entonces debe continuar Ahora sin embargo llega su oportunidad encuentra el nido exacto que desea y nadie esta en casa Desaparece por unos pocos minutos y es casi un ave distinta cuando resurge de entre los arbustos Con su trabajo hecho y el problema resuelto se regocija arregla su plumaje prolijamente y vuela de regreso con sus congeneres 4 Chipe suelero coronado Seiurus aurocapillus especie parasitada En sus estudios sobre el parasitismo de puesta en nidos de chipe suelero coronado Seiurus aurocapillus Harry W Hann 1941 llego a las siguientes conclusiones 1 La hembra de tordo cabecicafe habitualmente encuentra el nido del huesped al ver a las aves construyendolo 2 A veces observa el proceso de construccion atentamente y sin dudas esto estimula el desarrollo de los huevos los cuales son depositados cuatro o cinco dias despues Esta teoria sugerida originalmente por Chance en referencia al cuco explica la delicada sincronizacion entre la puesta del tordo cabecicafe y la del huesped y no descarta la posibilidad de que se depositen varios huevos en los dias sucesivos 3 Los huevos de tordo cabecicafe son normalmente depositados durante el periodo de puesta del huesped aunque las excepciones son comunes Los casos extremos registrados durante este estudio incluyeron la parasitacion tres dias antes de que el primer huevo de chipe suelero coronado fuera depositado y tres dias despues del comienzo de la incubacion 4 El tordo cabecicafe pone un huevo por nido a no ser que estos sean escasos en cuyo caso deposita una mayor cantidad 5 La hembra de tordo cabecicafe hace regulares visitas de inspeccion a los nidos durante la ausencia de sus duenos entre el momento en que los descubre y el momento en el que pone su huevo y sabe de antemano en donde va a depositarlo 6 Su hora habitual para aovar es temprano en la manana antes de que el huesped haga lo propio y espantara al dueno de su nido de ser necesario 7 La hembra de tordo cabecicafe esta tanto alerta como determinada cuando llega para depositar Recorre y observa cuidadosamente los alrededores del nido por hasta tres minutos antes de entrar en el pero regresara mas tarde si algo la espanta 8 La puesta le lleva de unos pocos segundos a un minuto y se marcha tan pronto como haya consumado su tarea 9 No he encontrado huevos rotos atribuibles a la intrusion del tordo cabecicafe 10 La hembra de tordo cabecicafe habitualmente quita uno o mas huevos del nido No son removidos en el momento de la parasitacion sino durante la manana del dia anterior o en el dia de la puesta o raramente al dia siguiente 11 Los huevos quitados son ingeridos por el tordo cabecicafe pero no son removidos solo con ese proposito o su eliminacion no estaria tan estrechamente relacionada con la cantidad de huevos depositados El numero de huevos quitados representaba el 85 de los puestos por tordos cabecicafe e incluia cuatro del propio parasito De los nidos no parasitados solo un huevo desaparecio durante el estudio 12 Esta investigacion corrobora la afirmacion de Burroughs con respecto a que el tordo cabecicafe se deshace de un huevo solo cuando hay dos o mas en el nido 4 Hora de la puesta Editar Gorrion indefinido oriental Spizella pusilla especie parasitada La puesta de huevos excepcionalmente temprano en la manana por parte del tordo cabecicafe podria constituir una adaptacion a su reproduccion parasitica 13 Esta especie aova mas temprano que cualquier otro icterido conocido y tipicamente deposita sus huevos antes del amanecer 5 13 14 15 16 El tordo renegrido Molothrus bonariensis otro parasito de puesta a veces tambien pone sus huevos antes del amanecer mientras que icteridos no parasiticos tales como el tordo sargento Agelaius phoeniceus y el zanate norteno Quiscalus quiscula lo hacen poco despues del amanecer y otras aves pertenecientes a la misma familia dentro de la hora tras la salida del sol 13 Russell T Norris 1944 dio la siguiente descripcion de un tordo cabecicafe parasitando el nido de un gorrion melodico Melospiza melodia que fue fotografiado por Hal H Harrison Gorrion melodico Melospiza melodia especie parasitada Justo antes de las 4 30 a m alrededor de 22 minutos antes del amanecer escuchamos las notas de un tordo cabecicafe y unos pocos segundos mas tarde una hembra se poso sobre la camara Despues de observar los alrededores con cautela volo al suelo hacia la base del tripode y comenzo a caminar nerviosa en direccion al nido Cuando alcanzo el borde del mismo hizo una pausa y contemplo cuidadosamente el territorio circundante luego entro en el y dio varias vueltas Finalmente se sento y Harrison presiono el boton de la camara Tras el flash el tordo cabecicafe salio espantado Habia estado sobre el nido durante no mas de 15 segundos y no habia depositado su huevo A las 4 38 a m adverti un movimiento en el pasto detras del nido y despues de unos pocos segundos el tordo cabecicafe aparecio Se acerco a este con cautela subio a su borde e hizo una pausa alli Luego entro en el y comenzo a dar vueltas como lo habia hecho en su visita previa Despues de unos pocos segundos volvio a posarse sobre el margen y miro a los alrededores Tres veces repitio este procedimiento de pararse sobre la orilla y luego dar vueltas dentro del nido intranquilamente En un momento se poso sobre la parte trasera del borde y miro hacia el cesped Aproximadamente a las 4 40 a m se sento y Harrison obtuvo su toma El ave se irguio ligeramente pero permanecio unos segundos mas antes de marcharse Al examinar el nido encontre un huevo de tordo No cabe duda de que el huevo estaba siendo depositado cuando se tomo la fotografia Dos gorriones y el tordo cabecicafe eclosionaron y fueron criados con exito hasta el septimo dia de vida de este y el sexto de los gorriones cuando el nido fue destruido por un depredador 4 Cantidad de huevos por nido Editar Mosquero fibi Sayornis phoebe especie parasitada Con respecto al numero de huevos parasiticos depositados por nido Friedmann 1929 manifesto lo siguiente A fin de determinar definitivamente si el tordo cabecicafe por lo general pone un solo huevo en cada nido se reunio informacion sobre alrededor de nueve mil nidos vulnerados de 195 tipos de aves y se descubrio que en mas de dos tercios de los casos habia un unico huevo foraneo Esto demuestra con bastante claridad que lo normal lo usual lo caracteristico en el tordo cabecicafe es depositar un huevo en cada nido No obstante en alrededor de un tercio de las observaciones se encontro mas de un huevo del intruso Este porcentaje de excepciones a la regla susodicha no es insignificante y requiere una explicacion Se ha demostrado que bajo condiciones normales cada pareja de tordos cabecicafe establece un territorio mas o menos definido y que la hembra tiende a restringirse a los nidos dentro de esa area particular Sin embargo es probable que la hembra se sienta inducida con bastante facilidad a abandonar su territorio transitoriamente el suficiente tiempo como para depositar un huevo en un nido cercano En las regiones en donde esta especie es muy comun y esto se aplica a una gran parte de su distribucion y en donde los territorios son proclives a superponerse dos ejemplares pueden hacer uso de un mismo nido De esta manera creo que podemos explicar el hecho de que no rara vez huevos de dos y con menos frecuencia incluso tres diferentes individuos sean hallados en el mismo nido 4 Vireo de Bell Vireo bellii especie parasitada Ademas una unica hembra puede depositar mas de un huevo en un solo nido en caso de que no logre encontrar a tiempo otro en el que no haya puesto alguno antes 4 Arthur Cleveland Bent 1958 publico los descubrimientos de la senora Nice 1939 que habia escrito lo siguiente A lo largo de siete anos de estudio en Interpont 98 de los 223 nidos n 1 de gorrion melodico n 2 lt ref gt localizados exhibian huevos de tordo cabecicafe 69 n 3 acogian un huevo 26 n 4 contenian dos huevos y 3 n 5 albergaban tres Solo una vez encontre cuatro huevos de tordo cabecicafe en un mismo nido esto sucedio en junio de 1928 y el nido pertenecia a un chipe de cara negra n 6 4 Tangara rojinegra migratoria Piranga olivacea especie parasitada Un huevo de tordo cabecicafe por nido es evidentemente la regla prevalente pero dos huevos a menudo depositados por hembras distintas no son un hallazgo raro y existen numerosos registros de tres o mas huevos en un nido Bent 1958 comento que A C Reneau le habia notificado que en dos oportunidades habia encontrado tres de estos huevos en nidos de mosquero Sayornis sp y en una ocasion en uno de vireo de Bell Vireo bellii La lista de A D DuBois incluia un registro de tres huevos intrusos en un nido de cardenal rojo Cardinalis cardinalis otros tres huevos en uno de zorzal maculado Hylocichla mustelina y cinco en otro de esta segunda especie Frank R Smith comunico a Bent su descubrimiento de tres huevos en un nido de zorzal maculado puestos antes de que el zorzal hubiera comenzado a depositar los suyos y aparentemente dejados por distintas hembras 4 T S Roberts afirmo Tres o cuatro son poco comunes aunque el senor Kilgore y quien escribe una vez hallaron un nido de zorzal maculado con dos huevos de zorzal y seis de tordo cabecicafe los ultimos con dos patrones distintos lo que sugeriria que dos tordos cabecicafe habrian puesto tres huevos cada uno En Mille Lacs el senor Marius Morse encontro un nido de tordo rojizo n 7 que contenia dos huevos del dueno y ocho de tordo cabecicafe Segun parece cuatro diferentes hembras habian depositado uno o mas huevos cada cual 4 J H Langille 1884 expuso Vireo ojirrojo Vireo olivaceus especie parasitada Con frecuencia he hallado mas de uno en un mismo nido una vez no menos de cuatro en un nido de tangara rojinegra migratoria n 8 al que solo le restaba espacio suficiente para dos propios El senor Trippe descubrio en una oportunidad un nido de chipe trepador n 9 con cinco huevos del intruso y tres del dueno 4 Isaac E Hess 1910 comento sobre una tangara rojinegra migratoria Piranga olivacea que empollaba cuatro huevos de tordo cabecicafe y un nido de chipe suelero coronado Seiurus aurocapillus que contenia siete huevos del parasito Bent 1958 dio a conocer su hallazgo de un nido de mimido gris Dumetella carolinensis con cuatro huevos de tordo cabecicafe y solo uno propio 4 F A E Starr le escribio a Bent lo siguiente En una ocasion encontre un nido de vireo ojirrojo n 10 con el vireo sentado sobre seis huevos de tordo cabecicafe y ninguno propio Se hallo un nido de tordo rojizo n 7 lt ref gt con un huevo suyo y cuatro de tordo cabecicafe 4 Sanborn y Goelitz 1915 registraron un nido de rascador Pipilo sp que contenia un huevo de rascador y ocho de tordo cabecicafe 4 En la Columbia Britanica la cantidad de huevos del invasor por nido en una muestra de 775 nidos parasitados variaba entre 1 y 8 y el 69 de ellos contenia solo uno En la misma provincia canadiense el numero de polluelos de esta especie por nido en una muestra de 196 nidos parasitados era de entre 1 y 4 y el 84 de ellos albergaba solo uno 10 Especies hospedadoras Editar Churrinche Pyrocephalus rubinus especie parasitada A pesar de que en un principio probablemente hayan construido sus propios nidos y criado a sus polluelos en la actualidad todos los miembros del genero Molothrus son parasitos de puesta El ornitologo Charles Emil Bendire 1895 listo 91 especies y subespecies vulneradas por el tordo cabecicafe oriental Friedmann 1929 identifico 114 especies y subespecies victimas del parasitismo del tordo cabecicafe del este anadiendo 3 huespedes hipoteticos el colibri de garganta roja Archilochus colubris el gorrion de Nelson Ammodramus nelsoni y el trepador americano Certhia americana En publicaciones subsecuentes 1934 1938 1943 y 1949 aumento el numero de huespedes conocidos del tordo cabecicafe oriental a 149 formas 4 Gorrion blanco coronaro Zonotrichia leucophrys especie parasitada Herbert Friedmann Lloyd F Kiff y Stephen I Rothstein 1977 elevaron la cantidad de huespedes del parasito a 216 especies y 375 especies y subespecies De las 216 especies 139 fueron identificadas como huespedes exitosos en la tarea de criar a los polluelos agregando las siguientes aves a los ya conocidos madrugador avispero Tyrannus verticalis mosquero gris Empidonax wrightii churrinche Pyrocephalus rubinus parido del desierto Auriparus flaviceps reyezuelo de coronilla dorada Regulus satrapa estornino pinto Sturnus vulgaris gusanero cabecigris Vermivora celata chipe negroamarillo Dendroica townsendi chipe gorra negra Dendroica striata pradero oriental Sturnella magna tordo ojo amarillo Euphagus cyanocephalus gorrion purpureo Carpodacus purpureus jilguero aliblanco Carduelis psaltria rascador pardo Pipilo fuscus gorrion sabanero pechileonado Ammodramus savannarum gorrion blanco coronado Zonotrichia leucophrys y gorrion de Lincoln Melospiza lincolnii 11 La siguiente es una lista de los nuevos huespedes descubiertos para cada subespecie de tordo cabecicafe publicados por Friedmann y otros 1977 Aquellos marcados con un asterisco constituyen un nuevo huesped para la especie en su conjunto Gusanero cabecigris Vermivora celata especie parasitada Molothrus ater ater Rallus limicola limicola Actitis macularia Regulus satrapa satrapa Dendroica striata Quiscalus quiscula stonei Passerina ciris pallidior y Carpodacus mexicanus frontalis Molothrus ater artemisiae Charadrius vociferus vociferus Empidonax hammondii Empidonax wrightii Auriparus flaviceps acaciarum Psaltriparus minimus minimus Vireo huttoni insularis Vermivora chrysoptera Vermivora celata celata Dendroica townsendi Dendroica castanea Dendroica striata Icterus spurius Carpodacus purpureus californicus Spinus tristis jewetti Amphispiza bilineata deserticola Junco hyemalis shufeldti Zonotrichia leucophrys pugetensis y Melospiza lincolnii alticola Molothrus ater obscurus Zenaida macroura marginella Tyrannus verticalis Sayornis phoebe Sayornis saya saya Polioptila melanura melanura Chamaea fasciata intermedia Bombycilla cedrorum Sturnus vulgaris vulgaris Vireo huttoni carolinae Agelaius tricolor Icterus cucullatus californicus Pheucticus melanocephalus maculatus Pipilo erythrophthalmus falcinellus Pipilo fuscus crissalis Pipilo fuscus carolae Spizella pusilla pusilla Zonotrichia leucophrys nuttalli Passerella iliaca stephensi y Melospiza melodia mailliardi 11 La disgregacion taxonomica y la nueva informacion acrecentaron las cifras publicadas por Friedmann y otros 1977 a 227 especies hospedadoras entre las que se contaban 151 huespedes exitosos Davis y Sealy 2000 Ortega 1998 5 17 18 Especies mas frecuentemente parasitadas Editar Candelita nortena Setophaga ruticilla especie parasitada Peter E Lowther 1993 determino que en los Estados Unidos los huespedes exitosos mas parasitados eran Canario del manglar Dendroica petechia Gorrion melodico Melospiza melodia Vireo ojirrojo Vireo olivaceus Gorrion coronirrufo cejiblanco Spizella passerina Mosquero fibi Sayornis phoebe Rascador pinto oscuro Pipilo erythrophthalmus Chipe suelero coronado Seiurus aurocapillus Chipe de cara negra Geothlypis trichas Candelita nortena Setophaga ruticilla Colorin azul Passerina cyanea Buscabrena Icteria virens Tordo sargento Agelaius phoeniceus Chipe patilludo Oporornis formosus Mosquerito saucero Empidonax traillii Vireo de Bell Vireo bellii Vireo garganta amarilla Vireo flavifrons Gorrion indefinido oriental Spizella pusilla 6 7 En Wisconsin de las observaciones confirmadas entre 1995 y 2000 las especies mas parasitadas fueron el gorrion coronirrufo cejiblanco Spizella passerina y el gorrion melodico Melospiza melodia 19 20 En Michigan las observaciones confirmadas entre 1983 y 1988 sugieren que el principal huesped fue el chipe de Kirtland Dendroica kirtlandii seguido por el gorrion indefinido oriental Spizella pusilla y el gorrion coronirrufo cejiblanco Spizella passerina 19 21 Frecuencia parasitica en las especies segun su comportamiento Editar Rascador pinto oscuro Pipilo erythrophthalmus especie parasitada La mayoria de los huespedes son paseriformes neotropicales migratorios 22 23 La mayor parte de ellos construye nidos abiertos en forma de taza los cuales son el objetivo mas frecuente del tordo cabecicafe Friedmann 1929 22 La temporada de puesta de huevos del parasito generalmente se extiende desde mediados de abril a mediados de julio Friedmann 1929 Scott 1963 coincidiendo con la de la mayoria de las especies neotropicales migratorias Whitcomb y otros 1981 22 Las especies sedentarias y migratorias de corta distancia normalmente tienen temporadas reproductivas mas prolongadas que se superponen solo parcialmente con la del tordo cabecicafe 22 El temperamento de los potenciales huespedes es un factor a tener en cuenta El caracter de los alcaudones los libera de cualquier perturbacion por parte de la hembra parasitica y la naturaleza pugnaz de los tiranos Tyrannus spp los convierte en victimas inusuales Las aves que anidan en huecos tambien estan mayormente a salvo de la interferencia del intruso Friedmann 1929 afirma que los nidos de pajaros carpinteros curucuchas Troglodytes aedon trepadores Sitta spp carboneros Poecile spp y azulejos Sialia spp rara vez son vulnerados 4 Variaciones intraespecificas en la frecuencia parasitica Editar Canario del manglar Dendroica petechia especie parasitada Los niveles de parasitismo por parte del tordo cabecicafe varian a lo largo de amplias areas geograficas Los zorzales maculados Hylocichla mustelina por ejemplo experimentan tasas de parasitismo superiores en el Medio Oeste que en este norteamericano Hoover y Brittingham en donde naturalmente los tordos cabecicafe son menos abundantes Lo mismo se aplica para el tordo sargento Agelaius phoeniceus Freeman y otros 1990 En consecuencia es probable que los efectos del parasitismo sobre las especies migratorias neotropicales sean mas severos en el Medio Oeste 22 La coleccion de huevos de la Western Foundation of Vertebrate Zoology revela que varias especies con una extensa area de distribucion reproductiva en America del Norte exhiben una mayor frecuencia parasitica en las regiones orientales que en las occidentales Las siguientes especies constituyen ejemplos de esto Cardenal rojo Cardinalis cardinalis especie parasitada Canario del manglar Dendroica petechia De los 85 grupos de huevos de la raza oriental D p aestiva 13 15 3 albergaban alguno ajeno La misma cantidad de muestras vulneradas pero equivalentes a un 5 7 del total se registro entre los 228 grupos de huevos de la raza occidental D p morcomi Chipe de cara negra Geothlypis trichas De los 124 grupos de huevos de las razas orientales 13 10 5 estaban parasitados mientras que solo 12 lo estaban entre los 159 grupos de huevos de las subespecies occidentales lo que representa un 7 6 Cardenal rojo Cardinalis cardinalis De los 76 grupos de huevos de la raza oriental 8 10 5 habian sido parasitados identificandose 9 grupos vulnerados 8 7 entre los 104 de las subespecies C c magnirostris y C c superba Rascador pinto oscuro Pipilo erythrophthalmus rascador maculoso Pipilo maculatus anteriormente considerados una unica especie De los 55 grupos de huevos de las subespecies orientales 9 16 4 contenian algun intruso Se constata una marcada diferencia respecto de lo ocurrido con los 300 grupos de huevos de 8 razas occidentales solo 2 0 7 estaban parasitados n 11 11 Gorrion arlequin Chondestes grammacus especie parasitada Existen dos notables excepciones a esta tendencia el gorrion arlequin Chondestes grammacus y el chipe de Wilson Wilsonia pusilla La forma oriental aunque cabe destacar que no tan oriental como las de las especies arriba mencionadas del gorrion arlequin estaba representada por 33 grupos de huevos ninguno de los cuales exhibia alguno de tordo cabecicafe mientras que de los 195 grupos de huevos de la raza occidental C g strigatus 17 equivalentes a un 8 7 estaban parasitados Con respecto al chipe de Wilson es importante mencionar que en la parte oriental de su area de distribucion se encuentra mayormente restringido a las regiones septentrionales donde no abundan ni los tordos cabecicafe ni los observadores de los 147 grupos de huevos de la raza occidental W p chryseola 10 6 8 estaban parasitados mientras que ninguno de los 26 grupos de huevos orientales contenia alguno de tordo cabecicafe Ciertas especies tales como el jilguero canario Carduelis tristis y el gorrion melodico Melospiza melodia revelan variaciones locales en cuanto a la frecuencia parasitica pero sin que estas constituyan tendencias longitudinales significativas 11 Reacciones de los huespedes Editar Gorrion coronirrufo cejiblanco Spizella passerina especie parasitada La gran mayoria de los huespedes no se percata de la presencia de los huevos intrusos 1 4 Sin embargo muchas especies hospedadoras que coevolucionaron junto al tordo cabecicafe desarrollaron diferentes tecnicas que reducen el exito reproductivo de este parasito de puesta 24 25 a saber sepultar el huevo bajo un nuevo nido abandonar el nido y arrojar o perforar el huevo extrano Algunos huespedes pueden evitar el parasitismo hasta cierto punto nidificando antes o despues de la epoca reproductiva del tordo cabecicafe o criando mas de una nidada por temporada al menos uno de los nidos probablemente no sea vulnerado 3 Ciertas especies parasitadas incluyen tanto poblaciones receptivas como no receptivas 19 25 Rothstein 1975a llevo a cabo un programa de parasitaciones experimentales en 640 nidos de 43 aves norteamericanas utilizando tanto huevos artificiales como autenticos La mayoria 80 4 de los 245 casos de rechazo a los huevos extranos se concreto a traves de la expulsion de estos fuera del nido por parte del huesped Se registro un menor numero de casos en los que el ave hospedadora abandono el nido dano el huevo sin arrojarlo o lo sepulto debajo de nuevo material de nidificacion Debido a que la eyeccion constituia la forma mas comun de rechazo los experimentos indican que las practicas defensivas del huesped pueden tergiversar contundentemente las conclusiones cuantitativas vinculadas a las tasas de parasitismo basadas unicamente en las observaciones del parasitismo natural Otros modos de rechazo como el abandono del nido no representan un impedimento tan importante puesto que los nidos abandonados conservan la evidencia de la parasitacion los huevos de tordo cabecicafe aun estan presentes 11 Sin embargo incluso el abandono del nido puede introducir ciertas dificultades ya que tiende a disminuir el numero real de casos de parasitismo y a aumentar el porcentaje aparente de recepciones positivas respecto de los huevos intrusos al ser los nidos abandonados mas dificiles de hallar que los activos pues sus duenos no se encuentran en los alrededores para llamar la atencion del investigador 11 15 Aceptacion de los huevos Editar Verdin de las praderas Dendroica discolor especie parasitada Experimentos en al menos diez nidos por especie realizados por Rothstein 1975 revelaron una tendencia a la receptividad en el tordo sargento Agelaius phoeniceus zanate norteno Quiscalus quiscula mosquero fibi Sayornis phoebe gorrion coronirrufo cejiblanco Spizella passerina canario del manglar Dendroica petechia huilota Zenaida macroura golondrina comun Hirundo rustica cuclillo piquinegro Coccyzus erythropthalmus y jilguero canario Carduelis tristis De los experimentos en entre seis y nueve nidos por especie se sacaron conclusiones similares respecto del gorrion melodico Melospiza melodia cardenal rojo Cardinalis cardinalis y zorzal maculado Hylocichla mustelina Entre las aves que fueron estudiadas a traves de experimentos en una menor cantidad de nidos dos a cinco por cada especie dieron respuestas de aceptacion hacia los huevos de tordo cabecicafe el picogrueso pechirrosa Pheucticus ludovicianus cenzontle aliblanco Mimus polyglottos gorrion zacatero coliblanco Pooecetes gramineus pradero oriental Sturnella magna vireo ojirrojo Vireo olivaceus verdin de las praderas Dendroica discolor rascador pinto oscuro Pipilo erythrophthalmus n 11 golondrina ala de sierra Stelgidopteryx serripennis estornino pinto Sturnus vulgaris carpodaco domestico Carpodacus mexicanus y tordo cabeciamarillo Xanthocephalus xanthocephalus En algunas de las especies citadas no hay razon para asumir una frecuente parasitacion zanate norteno huilota golondrina comun cuclillo piquinegro golondrina ala de sierra y estornino pinto pero el estudio demuestra que en caso de ser parasitados sus nidos responden aceptando los huevos ajenos 11 Segun diversas investigaciones particulares en las que se tomaron gran cantidad de nidos como muestra el chipe de Kirtland Dendroica kirtlandii el arrocero americano Spiza americana y el gorrion arlequin Chondestes grammacus sufrian tasas de parasitismo de un 55 Mayfield 1960 78 Zimmerman 1966 y 45 Newman 1970 respectivamente 11 Eyeccion de los huevos Editar Zorzal pechirrojo Turdus migratorius especie parasitada no receptiva Segun Rothstein 1975 los huespedes que casi siempre rechazan los huevos de tordo cabecicafe incluyen al mimido gris Dumetella carolinensis zorzal pechirrojo Turdus migratorius pitirre americano Tyrannus tyrannus ampelis americano Bombycilla cedrorum arrendajo azul Cyanocitta cristata cuitlacoche rojizo Toxostoma rufum y oropendola de Baltimore Icterus galbula basandose en experimentos en al menos diez nidos por cada especie 11 19 26 El madrugador avispero Tyrannus verticalis estudiado menos adecuadamente dos nidos tambien parece rechazar los huevos intrusos 11 Otras fuentes incluyen en la lista de eyectores al cuitlacoche de las artemisas Oreoscoptes montanus y al bolsero calandria Icterus bullockii 10 La eyeccion de los huevos extranos por parte del huesped puede alterar nuestra percepcion acerca de las tasas de parasitismo reales en ciertas especies ya que gran parte de la actividad parasitica pasara desapercibida pues muchos de los huevos de tordo cabecicafe habran sido removidos antes de que los investigadores los detecten Friedmann 1963 133 enfatizo la incidencia de esta dificultad en el caso de la oropendola de Baltimore Icterus galbula Para entonces se sabia de solo 13 casos de parasitismo pero en 3 de ellos se habia encontrado huevos de tordo cabecicafe sobre el suelo debajo de los nidos prueba de los habitos de eyeccion de las oropendolas 11 A pesar de que Friedmann 1929 menciona al mimido gris entre los ejemplos de especies absolutamente intolerantes Arthur Cleveland Bent 1958 documento en una oportunidad tal como se dijo mas arriba una hembra sentada con calma en un nido que contenia cuatro huevos de tordo cabecicafe y solo uno propio Friedmann realizo experimentos en un nido de zorzal pechirrojo Turdus migratorius y otro de mimido gris Dumetella carolinensis para estudiar sus reacciones frente a huevos extranos El zorzal arrojo fuera de su nido un huevo de gorrion melodico Melospiza melodia el cual tenia manchas como el de un tordo cabecicafe pero acepto el de un gorrion coronirrufo cejiblanco Spizella passerina que era principalmente azul como el propio aunque mucho mas pequeno El mimido rechazo los huevos de ambas especies 4 Construccion de un nuevo nido Editar Vireo pechiamarillo Vireo flavifrons especie parasitada que construye un nuevo nido sobre el anterior Ciertas aves ocasionalmente reconocen los huevos ajenos pero son demasiado pequenas como para quitarlos 1 En lugar de eso los huevos de tordo cabecicafe son sepultados a veces en compania de los propios con la construccion de un segundo nido sobre el original 1 27 Los vireos Vireo spp suelen reaccionar de este modo construyendo un nuevo piso Friedmann 1929 identifico esta conducta en el vireo ojirrojo Vireo olivaceus vireo gorjeador Vireo gilvus vireo anteojillo Vireo solitarius vireo pechiamarillo Vireo flavifrons chipe dorado Protonotaria citrea canario del manglar Dendroica petechia chipe gorriamarillo Dendroica pensylvanica y candelita nortena Setophaga ruticilla 4 Entre las aves que muestran su intolerancia enterrando el huevo intruso en el fondo del nido o construyendo un nuevo piso sobre este se destaca el canario del manglar Dendroica petechia En esta especie los nidos de dos pisos son bastante comunes en donde abunden los tordos cabecicafe Los de tres niveles no son muy raros tampoco y hasta cuatro o incluso cinco pueden ser construidos Ademas de las aves arriba mencionadas R M Anderson 1907 registro un huevo sepultado en un nido de mosquerito de Traill n 12 C R Keyes 1884 encontro uno de tangara rojinegra migratoria Piranga olivacea con un huevo de tordo cabecicafe enterrado en el fondo Amos W Butler 1898 documento otro de chipe de cara negra Geothlypis trichas con tres pisos Dos nidos adicionales fueron construidos sobre la estructura original sepultando bajo cada uno de ellos un huevo de tordo cabecicafe 4 Abandono del nido Editar Buscabrena Icteria virens especie parasitada que a menudo abandona los nidos vulnerados Con respecto al buscabrena Icteria virens Friedmann comento lo siguiente Los huevos de buscabrena son muy similares a los de tordo cabecicafe pero de todas maneras casi invariablemente abandona el nido si un huevo parasitico es depositado en el Sin lugar a dudas esto se debe a su extrema timidez y nerviosismo mas que a una habilidad superior para distinguir los huevos extranos de los propios Sin embargo en al menos dos ocasiones los buscabrenas han incubado y criado tordos cabecicafe 4 Algunos otros ejemplares quiza mas de los que se crea arrojan los huevos ajenos fuera de sus nidos 4 B H Warren 1890 afirmo En dos ocasiones encontre huevos de tordo cabecicafe rotos sobre el suelo cerca de nidos de buscabrenas y en tres oportunidades descubri los restos de estos huevos directamente debajo de los nidos de oropendola de Baltimore n 13 4 En un estudio el gorrion indefinido oriental Spizella pusilla abandono el 46 de los nidos parasitados por tordos cabecicafe y solo el 1 de los nidos sin parasitar lo que sugiere que la desercion del nido cumple la funcion principal de defensa contra el parasitismo Los gorriones no abandonaban sus nidos despues de varias manipulaciones de sus nidadas frecuentemente asociadas con la parasitacion esto indicaba que la desercion no respondia a la presencia del huevo extrano Por el contrario a menudo dejaban sus nidos tras encuentros con tordos cabecicafe reales o modelos de dichas aves 16 El gorrion indefinido desertico Spizella breweri tambien ha sido documentado abandonando nidos parasitados Biermann y otros 1987 10 Agresividad hacia el tordo adulto Editar Tordo sargento Agelaius phoeniceus especie parasitada agresiva hacia el tordo cabecicafe adulto Algunas especies hospedadoras exhiben conductas agresivas hacia los tordos cabecicafe pero pocas logran ahuyentarlos George M Sutton 1928 menciono una interesante demostracion de hostilidad Noto que en Pymatuning Swamp Pensilvania Ohio las pequenas especies palustres eran casi inmunes al parasitismo de los tordos cabecicafe porque los tordos sargento Agelaius phoeniceus una especie altamente territorial 28 se unian para hacerles frente y conducirlos fuera del pantano Vio una bandada de sargentos asechar a una hembra de tordo cabecicafe hasta que estuviera completamente exhausta y se precipitara hacia el agua para escapar 4 Variaciones intraespecificas en la respuesta al parasitismo Editar De acuerdo a Briskie y otros 1992 en el sur de Manitoba en donde las especies hospedadoras son simpatricas con el tordo cabecicafe los zorzales pechirrojos Turdus migratorius se deshicieron de los huevos intrusos en todos los nidos experimentalmente parasitados N 25 y ninguno fue aceptado por mas de cuatro dias En contraste los zorzales del norte de Manitoba en donde los tordos cabecicafe no se reproducen aceptaron los huevos extranos en un 33 de los casos N 18 por al menos cinco dias Los niveles de aceptacion de los huevos parasiticos por parte del canario del manglar Dendroica petechia fueron similares entre si en poblaciones alopatricas 100 de 20 nidos y simpatricas 88 6 de 35 nidos pero los modelos de hembras de tordos cabecicafe suscitaron una mayor respuesta defensiva del nido en el area de simpatria Ninguno de los huespedes rechazo huevos de conespecificos lo cual prueba que la eyeccion de los de tordo cabecicafe no era un simple epifenomeno del parasitismo de puesta intraespecifico 25 Repercusiones sobre la nidada del huesped EditarVease tambien Molothrus ater Impacto ecologico En los nidos vulnerados son menos los hijos del huesped que viven lo suficiente como para independizarse y a menudo ninguno de ellos logra hacerlo 24 Las especies parasitadas con periodos de incubacion prolongados frecuentemente no logran criar con exito a ninguno de sus propios polluelos si tan solo un huevo de tordo cabecicafe eclosiona en sus nidos Rothstein 1975 May y Robinson 1985 Para las aves hospedadoras de mayor tamano y con periodos de incubacion mas breves el parasitismo del tordo cabecicafe es menos nocivo Smith 1981 Roskaft y otros 1990 Friedmann y otros 1977 excepto cuando sus nidos son parasitados dos o mas veces 22 La parasitacion de un mismo nido por parte de mas de una hembra casi inevitablemente resulta en la muerte de toda la nidada de la victima 3 El parasitismo de puesta de los tordos cabecicafe es perjudicial para el exito reproductivo del ave hospedadora debido a entre otros motivos las siguientes razones Las hembras de esta especie quitan huevos normalmente uno de los nidos parasitados entre un 33 y un 90 de las veces otras fuentes restringen ese porcentaje a entre un 60 y un 70 3 Los huevos de tordo cabecicafe estan provistos de una cascara particularmente gruesa que puede ocasionar roturas en los del huesped Su periodo de incubacion es de alrededor de 11 dias mientras que el de la mayoria de sus huespedes es de entre 12 y 14 dias lo cual les brinda una ventaja a los polluelos parasiticos sobre el resto desde el comienzo Los polluelos del legitimo dueno del nido suelen ser mas pequenos y menos agresivos que el intruso Los polluelos de tordo cabecicafe crecen mas rapido piden alimento con mayor impetu y tienen bocas mas grandes que sus companeros de nido 22 La alimentacion del parasito tambien perjudica la nidada del huesped puesto que este es siempre alimentado mas frecuentemente que los hijos del ave hospedadora 29 lo cual puede resultar en la muerte por inanicion de estos polluelos 3 4 De hecho sus requerimientos de un incesante suministro de alimento pueden impedir que sus padres adopivos crien a una segunda nidada en la temporada 30 Ademas de por desnutricion los pequenos tambien pueden morir sofocados por su hermano 1 De acuerdo a Arthur Cleveland Bent 1958 aparentemente no hace ningun esfuerzo por expulsar a los demas fuera del nido como si lo hace el cuco comun Cuculus canorus pero al ser tanto mas grande que ellos y crecer mucho mas rapido a veces los otros pequenos caen por la falta de espacio 3 4 Estudios especificos Editar Chipe de cara negra Geothlypis trichas especie parasitada Russell T Norris 1947 publico los resultados de sus estudios en nidos parasitados y sin parasitar siendo los siguientes parrafos de especial interes De 19 huevos de tordo cabecicafe uno eclosiono cuatro dias antes que el huesped 4 eclosionaron un dia antes 10 eclosionaron el mismo dia que el huesped 3 eclosionaron un dia despues que el huesped y uno eclosiono cinco dias despues que el huesped En los 237 nidos observados los huespedes depositaron 668 huevos de los cuales 383 57 3 eclosionaron los tordos cabecicafe pusieron 108 huevos de los cuales 46 42 6 eclosionaron 37 7 de los huevos del huesped y 26 8 de los de tordo cabecicafe produjeron polluelos que lograron abandonar el nido De los huevos del huesped que eclosionaron el 64 produjo jovenes que dejaron el nido de los huevos de tordo cabecicafe que eclosionaron el 63 Los 35 nidos no parasitados exitosos produjeron en promedio 2 94 jovenes que lograron abandonarlos 19 nidos parasitados exitosos produjeron 2 05 lo que indica que cada parasito fue criado a expensas de alrededor de un polluelo del huesped 4 Con respecto a la perdida total de la nidada la senora Nice 1939 escribio Muchos autores afirman que cada tordo cabeciafe es criado a expensas de una nidada de polluelos Ese no es el caso con los gorriones melodicos n 2 Sesenta y seis nidos exitosos sin tordos cabecicafe en Interpont produjeron un promedio de 3 4 gorriones mientras que veintiocho nidos exitosos con tordos cabecicafe dieron un promedio de 2 4 gorriones Entonces en terminos generales cada tordo cabecicafe fue criado a expensas de un gorrion Los gorriones melodicos a menudo crian a todos sus pequenos que eclosionan junto con el pensionista llegando a abandonar estos nidos los entre uno y cinco gorriones que hayan nacido en ellos Con dos tordos cabecicafe de edad similar en el nido los gorriones pueden criar a solo uno o dos de sus hijos Las aves mas pequenas sin lugar a dudas son mas afectadas que los gorriones pero no existe mucha informacion al respecto En una ocasion encontre un nido con tres jovenes chipes de cara negra n 6 y un tordo cabecicafe listos para marcharse 4 En un estudio de 16 anos en Mandarte Island Columbia Britanica Canada Smith y Arcese 1994 constataron que las hembras de tordo cabecicafe quitaron un huevo en dos tercios de los nidos parasitados de gorrion melodico Melospiza melodia y danaron el 2 de los huevos restantes del huesped El parasitismo redujo la cantidad de polluelos que lograban abandonar el nido en un 0 79 por nido pero solo en un 0 27 en los anos en los que se suministro alimento con fines experimentales en algunos territorios 12 Inadecuacion del huesped Editar La construccion de sus nidos en cavidades y sus ausencias cuando la temperaura es baja hacen de la golondrina invernal Tachycineta bicolor un huesped inadecuado En ocasiones se encuentran huevos de esta especie en nidos de aves totalmente inadecuadas para convertirse en los padres adoptivos de sus polluelos en estos casos no se producira la eclosion o bien los pequenos no sobreviviran Si los huevos del dueno del nido son mucho mas grandes que los del parasito el de tordo cabecicafe no sera debidamente incubado Si los legitimos hijos de sus padres adoptivos son alimentados sobre la base de una dieta no adecuada para los polluelos de tordo cabecicafe estos no prosperaran Es dificil imaginar por ejemplo a una huilota Zenaida macroura la cual es una especie parasitada alimentando al extrano con leche de buche Una golondrina podria incubar bien el huevo intruso y alimentar al pequeno en su nido en un principio pero no luego puesto que se les ensena a las jovenes golondrinas a alimentarse mientras vuelan 4 Es importante que la hembra escoja un nido abierto de alguna especie altricial que alimente a sus polluelos en el nido hasta que esten casi listos para volar los polluelos de aves precoces dejan el nido poco despues de haber roto el cascaron y el pequeno tordo cabecicafe seria abandonado Uno de estos huevos fue hallado en el nido de un chorlitejo colirrojo Charadrius vociferus pero de haber eclosionado el pequeno habria sido dejado en el nido en donde moriria por inanicion o exposicion a los elementos 4 El andarrios maculado Actitis macularius es otro ejemplo de un huesped inadecuado debido a la preococidad de sus polluelos 10 Otras aves como la golondrina invernal Tachycineta bicolor Mills 1988 el sastrecillo Psaltriparus minimus y el chivirin pantanero Cistothorus palustris Picman 1986 no constituyen buenos huespedes porque anidan en cavidades o construyen nidos con esa forma o bien por su comportamiento o tamano Las golondrinas invernales por ejemplo a menudo abandonan sus huevos por largos periodos de tiempo cuando la temperatura es baja y los embriones de tordo cabecicafe podrian ser menos tolerantes al frio Mills 1988 Los chivirines pantaneros se asocian con los tordos alirrojos Agelaius phoeniceus en sus areas de nidificacion y esta segunda especie les brinda proteccion contra el parasitismo a traves de la defensa grupal de sus colonias Picman 1986 Freeman y otros 1990 10 Alimentacion inadecuada de los polluelos Editar Los jilgueros canario Carduelis tristis no son buenos huespedes debido a la alimentacion vegetariana La mayor parte de los paseriformes alimenta a los jovenes con artropodos las dietas de los polluelos de distintas especies que cohabitan en un mismo territorio a menudo son bastante similares Por esta razon no existen grandes restricciones en este sentido en cuanto a la eleccion del huesped por parte de los tordos cabecicafe una gran variedad de especies puede ofrecer una alimentacion igualmente adecuada a los polluelos de esta ave 31 De hecho estos son alimentados sobre la base de una dieta casi siempre insectivora por sus padres adoptivos 32 Sin embargo la dieta del carpodaco domestico Carpodacus mexicanus un huesped ocasional del tordo cabecicafe esta compuesta de una variedad de alimentos de origen vegetal mayormente semillas de hierbas Los pocos animales que consume son afidos y orugas 31 La mayoria de los polluelos altriciales crece con rapidez lo cual demanda una dieta rica en proteinas una alimentacion de bajo contenido proteico puede retrasar el crecimiento severamente El escaso desarrollo de los tordos cabecicafe observado en nidos de carpodacos domesticos se debe justamente a una deficiencia de esos nutrientes En esos casos la masa corporal de los polluelos no sigue el patron sigmoidal caracteristico del crecimiento normal sino que aumenta de manera mayormente lineal durante todo el desarrollo Las semillas y particularmente las frutas por lo general no contienen muchas proteinas Adicionalmente las proteinas vegetales a menudo carecen de uno o varios aminoacidos esenciales los cuales no pueden ser sintetizados por el organismo 31 Carpodaco domestico Carpodacus mexicanus Editar Los carpodacos domesticos Carpodacus mexicanus no son buenos huespedes debido a la alimentacion vegetariana Al igual que otros miembros de Carduelinae el carpodaco domestico Carpodacus mexicanus es inusual entre los huespedes de esta especie por el hecho de que alimenta a sus pequenos con productos vegetales principalmente La comida les es suministrada por regurgitacion no esta parcialmente digerida ni contiene secreciones nutritivas producidas por el adulto lo que implica un fracaso reproductivo para los tordos cabecicafe que depositen sus huevos en estos nidos dadas las necesidades alimenticias de sus polluelos 31 El tordo cabecicafe parasito 99 24 4 de los 406 nidos de carpodacos domesticos estudiados en Barrie Guelph Orillia y St Catharines Ontario Canada en los periodos 1983 1985 y 1990 1993 Los nidos contenian un total de 127 huevos parasiticos Aunque muchos lograron eclosionar ningun polluelo sobrevivio Los polluelos que perecian en los nidos eran encontrados alli 35 6 o eran removidos por el ave adulta 64 4 En principio el crecimiento de estos era muy lento necesitaban alrededor del doble del tiempo que requerian los tordos cabecicafe en nidos de otras especies para alcanzar una misma talla La masa corporal final estimada en ellos era un 22 4 inferior a la normal Sobrevivian un promedio de tan solo 3 2 dias dos de ellos no habiendo superado siquiera el dia de vida Solo uno logro abandonar el nido a la edad de 14 dias pero su cuerpo sin vida fue hallado al dia siguiente El crecimiento de las plumas tambien se vio afectado ese unico ejemplar que pudo abandonar el nido requirio alrededor de 4 dias adicionales para alcanzar un desarrollo del plumaje comparable al de un polluelo normal de 10 dias de edad 31 Debido a que el parasitismo de puesta en nidos de carpodacos domesticos no resulta exitoso los tordos cabecicafe deberian evitarlos Aunque la frecuencia con la que los tordos parasitaron dichos nidos fue alta cuando este estudio fue llevado a cabo esto puede ser resultado de la entonces reciente asociacion entre el mencionado huesped y el parasito en Ontario De hecho la tasa de parasitismo en el carpodaco disminuyo notablemente con el correr del tiempo en el este de America del norte 31 Otras especies Editar La alimentacion frugivora por parte de los ampelis americanos Bombycilla cedrorum a los polluelos puede ocasionar la muerte de los jovenes parasitos Los pequenos tordos cabecicafe enfrentan los mismos problemas en nidos de otras especies con una dieta similar En un experimento la mayoria de estos polluelos murio en los primeros seis dias tras ser ubicados en nidos de gorrion comun Passer domesticus el cual tambien alimenta a sus hijos sobre la base de una dieta de origen vegetal Segun otros estudios los polluelos sobrevivian un promedio de solo dos dias en nidos de jilguero canario Carduelis tristis la mayoria moria para el cuarto dia y solo uno sobrevivio hasta los 12 Los tordos cabecicafe pueden abandonar el nido en caso de haber sido criados por ampelis americanos Bombycilla cedrorum pero ocasionalmente fallecen despues de tres dias cuando los padres comienzan a alimentar a sus polluelos con frutas en vez de insectos 31 Destruccion de los nidos EditarLas hembras son diestras observadores del comportamiento de las otras aves cuando necesitan un nido en el que depositar sus huevos pero el tordo cabecicafe puede ser aun mas ingenioso de lo que podria esperarse tal como descubrieron Jeffrey Hoover y Scott Robinson 2007 Aparentemente estas revisan sus huevos y polluelos periodicamente y el rechazo del huevo por parte del ave parasitada puede originar una reaccion vengativa en aquellas Dichos ornitologos describieron un comportamiento denominado cowbird mafia que consiste en que las hembras destruyan los nidos en los que los huespedes hayan removido sus huevos Esta conducta alienta a las aves hospedadoras a no interferir con el huevo intruso para evitar un riesgo a su propia descendencia Asimismo algunas hembras atacan nidos y roban sus huevos antes de depositar los propios forzando al huesped a construir uno nuevo Debido a que estas segundas puestas son generalmente menos numerosas el polluelo de tordo cabecicafe tendra entonces una competencia menor cuando la hembra finalmente deposite su huevo en el nido recientemente construido 30 Factores influyentes en el parasitismo EditarEl parasitismo del tordo cabecicafe puede verse influido por el sustrato del nido su altura ubicacion por ejemplo tipo de habitat distancia al margen mas cercano y a los puntos de observacion y grado de ocultamiento Wiens 1963 Zimmerman 1983 Romig y Crawford 1995 Davis y Sealy 2000 S K Davis Saskatchewan Watershed Authority Regina Saskatchewan comunicacion personal por ciertas caracteristicas de las especies vulneradas tales como su abundancia tendencia a la defensa grupal Freeman y otros 1990 Strausberger 2001 y fenologia durante la temporada reproductiva Fleischer 1986 Davis 1994 y por la distancia a las areas de pastura Goguen y Mathews 2000 5 La receptividad para con sus huevos y la talla de las victimas tambien son importantes factores a tener en cuenta 3 8 Existen estudios que sugieren que al menos en lo que respecta al gorrion melodico Melospiza melodia la edad del huesped podria incidir sobre las tasas de parasitismo descubiertas en sus nidos 12 33 Vulnerabilidad y tamano del huesped Editar Chipe de Kirtland Dendroica kirtlandii especie particularmente susceptible al parasitismo de puesta La evidencia circunstancial indica que en ciertos lugares al menos algunas hembras se especializan en aves hospedadoras particularmente vulnerables evitando parasitar aparentemente los nidos de otras especies que constituyen huespedes usuales en otras partes de su area de distribucion Una explicacion parcial para esto podria ser que las especies hospedadoras que han estado en contacto con los tordos cabecicafe durante mucho tiempo hayan desarrollado la habilidad de reconocer al parasito o a sus huevos Consecuentemente muchas de estas aves que en otras circunstancias representarian buenos huespedes atacan agresivamente a las hembras de tordo cabecicafe o bien arrojan los huevos extranos los destruyen o abandonan sus nidos tras detectar la intrusion En cambio otras especies en este sentido mas receptivas y tambien mas seriamente afectadas por el parasitismo han estado sometidas a esta amenaza durante un menor periodo de tiempo puesto que sus areas de distribucion no se superponian con la del tordo cabecicafe antes de su diseminacion sobre gran parte de America del norte El chipe de Kirtland Dendroica kirtlandii y la subespecie californiana del vireo de Bell Vireo bellii pusillus son ejemplos de aves cuyo contacto con el tordo cabecicafe es relativamente reciente y para las cuales el parasitismo representa una amenaza 8 Experimentos realizados con nidos artificiales en un aviario sugieren que los tordos cabecicafe tienden a escoger aquellos con huevos mas pequenos que los propios 1 6 De igual manera las aves parasitadas suelen ser de menor tamano que ellos para cuando sus polluelos estan listos para abandonar el nido estos pesan mas del doble que la mayoria de los polluelos de chipes parulidos y vireos Vireo spp los cuales se encuentran entre sus huespedes mas comunes e incluso superan en tamano a los adultos 3 Sustrato altura y ubicacion del nido Editar Arrocero americano Spiza americana especie parasitada Distintos investigadores descubrieron efectos variados del sustrato y la altura del nido sobre el parasitismo de puesta Wiens 1963 no encontro diferencias vinculadas a esos dos factores entre nidos parasitados y no parasitados en praderas de pasto alto y bosques de meseta y de tierras bajas en Oklahoma Tanto unos como otros fueron hallados en arboles pequenos y arbustos En un estudio llevado a cabo en Kansas pequenas diferencias en el sustrato no parecian afectar las tasas de parasitismo en nidos de tordo sargento Agelaius phoeniceus mientras que si lo hacia la altura Fleischer 1986 Los nidos vulnerados de tordo sargento y arrocero americano Spiza americana se ubicaban a una altura considerablemente mayor sobre el sustrato que los nidos sin parasitar En el sur de Saskatchewan Canada los nidos vulnerados de gorrion sabanero palido Ammodramus bairdii estaban significativamente menos ocultos que los no parasitados se daba el caso contrario con el gorrion indefinido rayado Spizella pallida S K Davis comunicacion personal No existian diferencias importantes en cuanto al grado de escondimiento entre nidos parasitados y no parasitados de arnoldo ventrinegro Calcarius ornatus gorrion sabanero comun Passerculus sandwichensis bisbita llanera Anthus spragueii y pradero occidental Sturnella neglecta 5 La altura a la que se ubicaban 696 nidos parasitados en la Columbia Britanica Canada variaba entre el nivel del suelo y los 15 m con el 54 de ellos entre los 0 9 y los 2 1 m 10 Caracteristicas del habitat Editar Vease tambien Molothrus ater Habitat Las extensas superficies arboladas de los Ozarks de Misuri presentan niveles bajos parasitismo de puesta La disponibilidad de zonas de alimentacion como corrales para el ganado esta asociada a niveles mas elevados de parasitismo de puesta Verner y Ritter 1983 y Rothstein y otros 1980 descubrieron que las areas cercanas a esos corrales y a campos destinados a la alimentacion del ganado en la Sierra Nevada presentaban una mayor cantidad de tordos cabecicafe y de nidos parasitados De hecho estas aves parasiticas eran escasas lejos de las alteraciones al ambiente realizadas por la mano del hombre En el Shawnee National Forest Illinois los estudios de telemetria demostraron que los tordos cabecicafe visitaban las pasturas con ganado y los feedlots incluso en la manana 22 Por otro lado las tasas de parasitismo son relativamente bajas en los habitats boscosos en gran parte intactos del norte de Michigan Wisconsin y Minnesota 19 Las extensas superficies arboladas de los Ozarks de Misuri norte de Wisconsin e Indiana centromeridional presentan niveles bajos de depredacion en los nidos y parasitismo de puesta y podrian proporcionar el excedente necesario para mantener las poblaciones de aves en los bosques fragmentados del sur de Wisconsin Illinois y norte de Misuri 34 El parasitismo de puesta del tordo cabecicafe se encuentra negativamente relacionado con el porcentaje de superficie cubierta por bosques En un estudio llevado a cabo en distintos puntos de Illinois Indiana Minnesota Misuri y Wisconsin Robinson y otros 1995 descubrieron que la mayoria de los nidos de zorzal maculado Hylocichla mustelina en areas con menos de un 55 de superficie boscosa estaba parasitado En algunos lugares habia mas huevos de tordo cabecicafe por nido que de zorzal maculado En contraste el parasitismo de puesta era tan bajo en zonas de arboleda densa que probablemente no representara alli una causa significativa de fracaso reproductivo Por otra parte las tasas de parasitismo eran consistentemente mas elevadas en los cuatro puntos de estudio de Illinois que en bosques comparablemente fragmentados en los otros estados La abundancia de tordos cabecicafe tambien era superior en Illinois Varias especies migratorias eran severamente parasitadas en Indiana un estado de paisajes mayormente boscosos en donde los nidos de otras especies eran raramente vulnerados 34 Zorzal maculado Hylocichla mustelina especie parasitada En zonas de gran densidad forestal las poblaciones de tordos cabecicafe estan mas restringidas por la disponibilidad de areas de alimentacion que por la de nidos hospedadores En lugares de vegetacion mas fragmentada por otra parte es la cantidad de nidos lo que limita sus numeros en mayor medida y los parasitos pueden saturar el habitat reproductivo disponible 34 En una investigacion llevada a cabo en el Sierra National Forest California entre 1980 y 1981 Verner y Ritter 1983 los tordos cabecicafe mostraron una marcada tendencia a preferir los bordes de los prados como habitat reproductivo empleando en menor medida areas taladas completa o parcialmente y rara vez bosques sin talar En los prados favorecidos como habitat para la reproduccion su numero se reducia rapidamente a medida que aumentaba la distancia respecto de las fuentes de alimentacion con presencia humana 35 En la Columbia Britanica Canada la mayoria de los nidos parasitados 34 se ubicaba en habitats rurales incluyendo terrenos agricolas cultivados 12 cascos de estancia 11 huertos de frutales 7 y pasturas 4 seguidos por los habitats forestales 30 entre los que se encuentran los bosques caducifolios 13 de coniferas 9 y mixtos 8 En el valle de Okanagan Fonnesbeck 1998 descubrio que el parasitismo de puesta menguaba significativamente en los bosques de altura con respecto a los valles Las areas riberenas 16 habitats urbanos y suburbanos 11 y matorrales 6 tambien eran importantes para el tordo cabecicafe 10 Efecto de borde Editar Veanse tambien Efecto de bordey Molothrus ater El parasitismo de puesta del tordo cabecicafe ha sido favorecido por las practicas agricolas a lo largo del siglo XX 24 36 Existe una mayor frecuencia parasitica cerca de las orillas de los campos con lugares altos en los que posarse que lejos de ellas 36 Esta ave es a menudo mas abundante a lo largo de los margenes de los bosques que en el interior de los mismos y las tasas de parasitismo son generalmente mas elevadas en las inmediaciones de dichos margenes y en pequenas extensiones de pradera 37 En los bosques caducifolios orientales la densidad poblacional de la especie y la tasa de parasitismo se reducen conforme uno se aleje de sus limites 22 24 38 Consecuentemente la fragmentacion de los bosques incrementa el parasitismo 22 24 En su estudio Brittingham y Temple 1983 categorizaron los nidos de las especies hospedadoras en cuatro grupos basandose en la distancia entre ellos y el margen mas cercano 0 99 m 100 199 m 200 299 m y mas de 300 m Determinaron que 26 nidos de los 40 que habia en el area de 0 99 m estaban parasitados 17 de 37 entre los 100 y 199 m 4 de 11 entre los 200 y 299 m y 3 de 17 mas alla de los 300 m 24 38 Esto quiere decir que en la zona boscosa de Wisconsin estudiada la tasa de parasitismo se reducia de un 65 en los primeros 99 m a menos del 18 mas alla de los 300 m 22 Por otro lado en un area moderadamente forestada 50 del Shawnee National Forest en el sur de Illinois Robinson y otros y Trime y otros no descubrieron un descenso significativo en los niveles de parasitismo incluso a 800 m del margen mas cercano Aparentemente la poblacion de tordos cabecicafe habia saturado los bosques disponibles en esa zona En contraste la tasa de parasitismo es baja inferior al 10 de los nidos hospedadores en potencia en las extensas superficies arboladas mas del 80 del Mark Twain National Forest Misuri y del Hoosier National Forest Indiana John Faaborg y Don Whitehead comunicacion personal De manera similar Hoover 1992 no encontro evidencia del denominado efecto de borde en Pensilvania central en donde las poblaciones de tordos cabecicafe son generalmente reducidas Por lo tanto la magnitud del efecto de borde es decir el grado en que esa predileccion generalizada por los margenes era tomada en cuenta variaba de un lugar a otro dependiendo del nivel de fraccionamiento del paisaje y de la abundancia de tordos cabecicafe 22 Overcash y Roseberry 1987 descubrieron que la cantidad de tordos cabecicafe era de 4 a 5 veces superior alrededor de claros naturales pequenos menos de 4 hectareas en el Shawnee National Forest del sur de Illinois aunque no recolectaron informacion sobre la tasa de parasitismo Don Whitehead comunicacion personal encontro niveles de parasitismo mas elevados a lo largo de areas taladas que en el interior del bosque en el Hoosier National Forest incluso no existiendo alli sitios en los que alimentarse Gates y sus colegas investigaron sobre si la abundancia de tordos cabecicafe y los niveles de parasitismo eran mayores en presencia de claros con cables electricos y compararon los resultados con lo que ocurria en corredores naturales creados por arroyos Chasko y Gates 1982 Gates y Giffen 1991 Descubrieron que tanto el numero de ejemplares como la tasa de parasitismo eran superiores en ambos tipos de corredores pero tambien se encontraron con que las densidades de huespedes eran mayores en las cercanias de los mismos 22 En las Grandes Llanuras Editar Gorrion indefinido rayado Spizella pallida especie parasitada Los nidos mas cercanos a los confines de un fragmento de cierto habitat parecen ser mas vulnerables al parasitismo del tordo cabecicafe que los ubicados en el interior del mismo Las tasas mas altas de parasitismo en los pastizales de Manitoba Canada se daban en areas con una mayor proporcion de margenes que en otros lugares Davis 1994 Davis y Sealy 2000 La proximidad entre los sitios de alimentacion de los tordos cabecicafe y los nidos hospedadores pudo haber resultado en una mayor frecuencia parasitica en estos margenes Davis y Sealy 2000 En Illinois los niveles de parasitismo eran mas elevados en los bosques y sus limites que en habitats de pastizales o mixtos de pastizales y matorrales Best 1978 Strausberger y Ashley 1997 En las praderas de pasto alto de Minnesota se registraron tasas mas altas de parasitismo cerca menos de 45 m de los margenes arbolados de las praderas que lejos de estos 45 m o mas en nidos de gorrion indefinido rayado Spizella pallida y pradero occidental Sturnella neglecta Johnson y Temple 1990 En Oklahoma Wiens 1963 descubrio que los nidos parasitados se ubicaban cerca del limite de un habitat como matorrales bajos y arbustivos que bordeaban areas relativamente abiertas cubiertas por pasto alto mientras que la mayoria de los nidos en zonas abiertas con pasto alto no estaba parasitada En Nebraska Johnsgard 1980 encontro que los tordos cabecicafe depositaban sus huevos en nidos situados en los margenes de los bosques en matorrales arbustivos y en areas con arboles o arbustos esparcidos 5 Pradero oriental Sturnella magna especie parasitada Zimmerman 1983 concluyo que en Kansas los nidos de arrocero americano Spiza americana en zonas con pasto alto eran parasitados con mas frecuencia 85 de 125 nidos que los construidos en antiguos terrenos agricolas 60 de 385 nidos En el mismo estado las tasas de parasitismo para el pradero oriental Sturnella magna el gorrion sabanero pechileonado Ammodramus savannarum y el arrocero americano Spiza americana eran mas elevadas en los nidos ubicados dentro de los 100 m del margen de un bosque que mas alla de esa distancia pero no se observaban diferencias con respecto al parasitismo entre los nidos emplazados en las cercanias de los limites de terrenos agricolas y lejos de ellos Jensen 1999 5 Las tasas de parasitismo en nidos de tordo ojo amarillo Euphagus cyanocephalus en Colorado y Wyoming eran mas altas cerca del agua 300 m o menos que lejos de ella mas de 300 m Hanka 1979 En las praderas de pasto alto de Wisconsin Clotfelter y otros 1999 descubrieron que las probabilidades de parasitismo en nidos de tordo sargento Agelaius phoeniceus aumentaba con la proximidad al borde de un habitat en este caso las areas entre praderas y terrenos agricolas o segmentos de bosque o a una carretera y con la distancia desde superficies quemadas La distancia a dichos limites no era un factor determinante del exito reproductivo o de la cantidad de polluelos que lograban abandonar el nido 5 Tordo ojo amarillo Euphagus cyanocephalus especie parasitada En areas riberenas del oeste de Montana las tasas de parasitismo aumentaban con una mayor densidad de huespedes y proximidad a los lugares con presencia del hombre como casas y granjas Tewksbury y otros 1999 Segun este estudio las aves hospedadoras que anidaban en segmentos extensos de bosque ribereno corrian mayor riesgo de parasitismo que las que nidificaban en fragmentos mas reducidos de bosque ribereno y en bosques de coniferas Muchas de las areas riberenas amplias se encontraban cerca de zonas agricolas y tenian una gran abundancia de tordos cabecicafe Las caracteristicas del terreno ubicado a mas de un kilometro de distancia de los sitios estudiados ejercian escasa influencia sobre las tasas de parasitismo 5 El tamano de las extensiones dominadas por un determinado habitat puede influir sobre el parasitismo de puesta Daub 1993 documento que el parasitismo se producia solo en humedales de una superficie menor a las 2 9 hectareas posiblemente debido a la facilidad con la que las hembras de tordo cabecicafe podian observar a las de tordo sargento y tordo cabeciamarillo Xanthocephalus xanthocephalus anidando en los humedales pequenos En Minnesota Montana Dakota del Norte y Dakota del Sur la densidad de tordos cabecicafe disminuia con el tamano de las extensiones de los pastizales que cubrian el campo Johnson e Igl 2001 De manera similar en el sur de Saskatchewan su abundancia y las tasas de parasitismo eran entre 2 y 4 veces mayores en pequenas pasturas menos de 256 hectareas que en las grandes 256 hectareas o mas S K Davis comunicacion personal 5 Distancia a los puntos de observacion Editar Gorrion sabanero palido Ammodramus bairdii especie parasitada Dentro de un mismo lugar el porcentaje de nidos parasitados puede variar segun la estructura de la vegetacion A menudo se observa tordos cabecicafe posados o exhibiendose en la copa de arboles secos Anderson y Storer 1976 quienes trabajaron en un habitat relativamente abierto con pinos de Banks Pinus banksiana descubrieron que las posibilidades de que los nidos de chipe de Kirtland Dendroica kirtlandii fueran parasitados eran mayores cuando habia un arbol muerto en las proximidades Brittingham y Temple informacion no publicada no hallaron esa relacion con respecto a la cercania de un arbol seco en los bosques caducifolios 22 Algunos habitats marginales brindan a los tordos cabecicafe sitios adecuados en los que posarse para buscar nidos estos sitios a menudo estan asociados a tasas mas altas de parasitismo 5 En Iowa los nidos de tordo sargento Agelaius phoeniceus en humedales restaurados eran menos parasitados que los emplazados en humedales naturales posiblemente debido a la escasez de arboles en los primeros Delphey y Dinsmore 1993 5 En un estudio realizado en el este de Washington los tordos cabecicafe parasitaron nidos inactivos de tordo sargento y en este caso las tasas de parasitismo fueron mas bajas en los humedales con arboles que en los humedales sin ellos Freeman y otros 1990 5 22 Los autores sugirieron entonces que los arboles contribuirian con la eficiencia a la hora de identificar los nidos activos en el sentido de que les permitirian a las hembras evaluar mejor si los nidos se encuentran o no en desuso 5 22 Gorrion sabanero comun Passerculus sandwichensis especie parasitada La proximidad a los sitios en los que estas aves se posan puede influir sobre las probabilidades de que un nido sea parasitado En el este de Dakota del Norte los nidos parasitados de gorrion indefinido rayado Spizella pallida se encontraban considerablemente mas cerca de esos puntos de observacion definidos como cualquier arbusto arbol o estructura hecha por la mano del hombre que se elevara al menos un metro sobre la vegetacion circundante Romig y Crawford 1995 De hecho ningun nido a mas de 52 m de ellos habia sido vulnerado En Manitoba eran mas parasitados los nidos localizados dentro de los 150 m de arbustos cercas y otras estructuras de al menos un metro de alto Davis 1994 Sin embargo algunos nidos ubicados a 340 m o mas de uno de cualquiera de esos puntos tambien sufrian el parasitismo del tordo cabecicafe Davis y Sealy 2000 En Nueva York los nidos parasitados de gorrion melodico Melospiza melodia se ubican significativamente mas proximos a estos puntos de observacion que podian ser arboles y estructuras como cercas de al menos 2 m que los nidos sin parasitar Hauber y Russo 2000 5 En Saskatchewan Canada 28 nidos parasitados de arnoldo ventrinegro Calcarius ornatus se hallaban sustancialmente mas proximos a los puntos que los tordos cabecicafe potencialmente utilizarian para posarse definidos como arbustos cercas y otras estructuras de al menos 50 cm de alto que 174 nidos sin parasitar a un promedio de 34 y 50 m respectivamente se observaba la misma tendencia con los nidos de gorrion zacatero coliblanco Pooecetes gramineus con distancias medias de 77 y 159 m respectivamente S K Davis y D G McMaster comunicacion personal Los nidos parasitados de las siguientes tres especies tambien se ubicaban en promedio mas cerca aunque no significativamente de los mencionados sitios que los no parasitados gorrion sabanero palido Ammodramus bairdii 25 m 21 nidos frente a 36 m 58 nidos gorrion sabanero comun Passerculus sandwichensis 34 m 18 nidos y 36 m 32 nidos y pradero occidental Sturnella neglecta 33 m 13 nidos comparado con 38 m 34 nidos 5 Nidificacion colectiva de los huespedes Editar La defensa grupal por parte de los potenciales huespedes puede disuadir el parasitismo Freeman y otros 1990 Carello y Snyder 2000 En Washington las colonias densas de tordo sargento Agelaius phoeniceus mostraban tasas de parasitismo inferiores a las mas disgregadas posiblemente debido a la defensa grupal Freeman y otros 1990 En una zona de Colorado los niveles de parasitismo estaban negativamente asociados al numero de nidos de tordo sargento en cada estanque Carello y Snyder 2000 Los autores sugirieron que serian mas bajas debido a la concentrada distribucion de los nidos Sin embargo Fretwell 1972 descubrio que los arroceros americanos Spiza americana que anidaban en las proximidades de las colonias de tordos sargento sufrian altas tasas de parasitismo por parte de los tordos cabecicafe probablemente atraidos por aquellos otros icteridos En Wisconsin Clotfelter y Yasukawa 1999 examinaron los efectos de la nidificacion en colonias del tordo sargento Se registro una relacion positiva significativa entre la cantidad de nidos comenzados por dia y la proporcion de nidos parasitados lo que sugeria que la nidificacion colectiva no repercutia en una menor amenaza de parasitismo No obstante la sincronizacion en la puesta de huevos aparentemente contribuia a reducir el riesgo de parasitismo Los nidos parasitados tenian periodos de puesta menos sincronizados con los de sus vecinos mas cercanos y se encontraban mas alejados del nido simultaneamente activo mas proximo es decir estaban mas aislados que en el caso de los nidos sin parasitar La distancia media entre 39 nidos parasitados y el nido simultaneamente activo mas cercano era de 79 m comparada a los 54 m de los 119 nidos sin parasitar 5 Fenologia de los huespedes Editar Gorrion sabanero pechileonado Ammodramus savannarum especie parasitada La fenologia de las especies hospedadoras durante la temporada reproductiva puede afectar la frecuencia con la que sus nidos son parasitados En Manitoba los nidos de arnoldo ventrinegro Calcarius ornatus no eran vulnerados a menudo posiblemente debido a que criaban a sus polluelos en dos periodos distintos varias semanas antes y varias semanas despues de que los tordos cabecicafe comenzaran a depositar sus huevos Davis 1994 Estos parasitaban los nidos de gorrion sabanero pechileonado Ammodramus savannarum con mayor frecuencia a medida que la temporada reproductiva avanzaba En un estudio realizado en Dakota del Norte ninguno de los 24 nidos de alondra cornuda Eremophila alpestris encontrados antes del 15 de mayo estaba parasitado mientras que el 83 de los 60 nidos descubiertos despues de esa fecha si lo estaba Koford y otros 2000 En Kansas los tordos cabecicafe ponian sus huevos en nidos de tordo sargento Agelaius phoeniceus en la primera etapa de la epoca de reproduccion antes del 25 de mayo y empezaban a parasitar los de arrocero americano Spiza americana mas tarde despues del 25 de mayo a medida que su disponibilidad aumentaba Fleischer 1986 En Washington los nidos de tordo sargento construidos mas temprano 20 a 60 dias desde el comienzo de la temporada reproductiva basandose en la fecha en la que el primer huevo fue depositado eran menos parasitados que los construidos luego 60 a 80 dias desde el comienzo de la temporada reproductiva Freeman y otros 1990 5 Edad del huesped Editar Estudios realizados en Mandarte Island Columbia Britanica revelaron que los nidos de las hembras de gorrion melodico Melospiza melodia de mayor edad sufrian una tasa de parasitismo superior a la encontrada en nidos de hembras de la misma especie de tan solo un ano que se reproducian por primera vez 12 33 Esto puede deberse a una diferencia en el comportamiento que guarde relacion con la edad del huesped 12 es probable que el modo en que los gorriones mayores reaccionan frente a las hembras de tordos cabecicafe en busca de nidos los predisponga a ser mas facilmente reconocidos como huespedes en potencia 33 Se puso a prueba esta hipotesis midiendo las respuestas de los gorriones melodicos hacia un modelo de una hembra de tordo cabecicafe en 1982 cuando ningun parasito frecuentaba la isla Este modelo y otro de control que representaba una hembra de junco eran ubicados cerca de los nidos de gorriones de edad conocida Tal como se habia predicho los gorriones hembra adultos exhibian un comportamiento distinto hacia el modelo de tordo cabecicafe que los de un ano No se registraron diferencias en sus reacciones hacia el junco Los machos adultos tambien respondieron de distinto modo en presencia del tordo cabecicafe y del junco pero no difirieron significativamente respecto de los machos de un ano de edad en cuanto a sus reacciones hacia ambos modelos 33 Cuando se volvio a experimentar con las aves juveniles ahora ya adultos de dos anos de edad que habian respondido debilmente en ausencia de tordos cabecicafe en la isla estas reaccionaron energicamente tras la recolonizacion de Mandarte Island por parte de los parasitos Los individuos de dos anos de edad que no habian sido expuestos a la presencia de tordos cabecicafe en su primera temporada reproductiva mostraron una tasa parasitica intermedia entre la de los adultos experimentados y la de ejemplares de solo un ano de edad Los nidos de las hembras de un ano eran vulnerados con menos frecuencia al comienzo de la epoca de reproduccion que al final de la misma Todos estos resultados apoyan la hipotesis de que la selectividad etaria del parasito deriva de las diferencias en las respuestas hacia los tordos cabecicafe exhibidas por individuos de distintas edades 33 La mayor reaccion de las hembras de mas edad pareceria no constituir una conducta adaptativa puesto que aparentemente perjudica el exito reproductivo de esas aves debido a la selectividad etaria del parasito Es posible que esta paradoja pueda justificarse si se considera la respuesta hacia un tordo cabecicafe en las cercanias del nido un ejemplo de una reaccion mas general frente a todos los potenciales enemigos que se puedan aproximarse al mismo 33 Notas Editar Esto equivale a alrededor del 43 95 de los nidos localizados a b Melospiza melodia nombre cientifico del gorrion melodico no citado en la fuente original Esto equivale a alrededor del 70 41 de los nidos parasitados Esto equivale a alrededor del 26 53 de los nidos parasitados Esto equivale a alrededor del 3 06 de los nidos parasitados a b Geothlypis trichas nombre cientifico del chipe de cara negra no citado en la fuente original a b Catharus fuscescens nombre cientifico del tordo rojizo no citado en la fuente original Piranga olivacea nombre cientifico de la tangara rojinegra migratoria no citado en la fuente original Mniotilta varia nombre cientifico del chipe trepador no citado en la fuente original Vireo olivaceus nombre cientifico del vireo ojirrojo no citado en la fuente original a b La fuente de informacion original en ingles habla de rufous sided towhee denominacion que aludia conjuntamente al rascador pinto oscuro Pipilo erythrophthalmus y al rascador maculoso Pipilo maculatus cuando eran considerados una unica especie A partir de Pipilo erythrophthalmus se distinguieron luego dos especies una en el este de America del norte que retuvo ese nombre cientifico y otra en el oeste denominada Pipilo maculatus Por consiguiente en la actualidad se reconoce que algunas de las subespecies entonces tomadas como pertenecientes a erythrophthalmus en realidad forman parte de una especie distinta maculatus El mosquerito de Traill Empidonax traillii era considerado antiguamente una especie de tiranido la cual fue luego dividida en otras dos mosquerito suacero que retuvo el nombre cientifico de su predecesor y mosquerito ailero Empidonax alnorum Icterus galbula nombre cientifico de la oropendola de Baltimore no citado en la fuente original Referencias Editar a b c d e f Brown headed Cowbird All About Birds en ingles Ithaca Nueva York Cornell Lab of Ornithology 2009 Consultado el 11 de enero de 2011 issg Database Ecology of Molothrus ater en ingles Consultado el 12 de enero de 2011 a b c d e f g h i Petit Lisa Brown headed Cowbirds From Buffalo Birds to Modern Scourge en ingles Smithsonian Migratory Bird Center Archivado desde el original el 12 de junio de 2010 Consultado el 6 de febrero de 2011 a b c d e f g h i j k l m n n o p q r s t u v w x y z aa ab ac ad ae af ag Bent Arthur Cleveland 1958 Brown headed Cowbird Molothrus ater Eastern Brown headed Cowbird Life Histories of North American Blackbirds Orioles Tanagers and Allies Life Histories of North American Birds en ingles Instituto Smithsoniano United States National Museum Bulletin 211 pp 421 450 Consultado el 20 de febrero de 2011 a b c d e f g h i j k l m n n o p q 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