Nacionalismo japonés
El nacionalismo japonés, a veces denominado imperialismo japonés (cuando se relaciona con el pasado reciente de Japón, hasta la Segunda Guerra Mundial), se refiere a una serie de ideas de tipo patriótico o nacionalista que han existido y existen en Japón.
Desde el punto de vista político y en los años que condujeron a la Segunda Guerra Mundial, los fundamentos políticos e ideológicos en los que se basaban las actuaciones del Ejército y la Marina Imperial japonesa se podrían denominar como ideología nacionalista japonesa. Esta ideología, demasiado compleja para una explicación reducida, implicaba doctrinas ultranacionalistas similares al fascismo, que se desarrollaba contemporáneamente en Europa. Se trataba de una combinación única y singular de elementos filosóficos, nacionalistas, culturales y religiosos.
Ideología del nacionalismo imperial (1905-1945)
El bushido
El bushidō (el camino del guerrero) se conoce también como código samurái. Cuando el Emperador abolió el sistema feudal, este código se adoptó con propósito ideológico y doctrina militarista. El Ejército Imperial japonés, a través de su ideólogo Sadao Araki, analizó en profundidad el bushido para su adaptación en el entrenamiento militar contemporáneo como doctrina de formación espiritual ("seishin kyoiku") para las Fuerzas Armadas. Como Ministro de Educación, Sadao apoyó la integración del código samurái en el sistema educativo japonés. Los oficiales y comandantes de las Fuerzas Imperiales portaban la katana, la espada samurái (de tipo Shin gunto), así como la pistola Nambu.
El papel del sintoísmo
Al desarrollar el concepto moderno de "sintoísmo estatal" y el culto al Emperador, varios pensadores japoneses trataron de proteger las creencias nacionales de elementos extranjeros, tales como el pensamiento religioso chino. Querían volver a las antiguas tradiciones japonesas, creando el "Movimiento de Restauración Sintoísta" siguiendo a Norinaga Motoori, pensador del siglo XVIII. En sus investigaciones sobre los orígenes de la cultura japonesa, Motoori estudió las Crónicas Sintoístas Clásicas Kojiki. Estas muestran la superioridad de la Diosa Solar Amaterasu Omikami. En esta filosofía, la participación divina en los acontecimientos naturales es rara, la providencia no puede predecirse. Por respeto a lo divino, se espera que los sujetos se sometan a la Divina Providencia.
Un seguidor, Atsutane Hirata, extendió la idea de Norinaga de depurar los fundamentos sintoístas de la influencia china. Hirata propuso una teología cristiana mixta, comparando Amenomikanushi-no Kami, un dios central mencionado en la crónica de Kojiki, con el Dios cristiano. Su idea era que el primer dios que presidía el universo tenía dos ayudantes: El Productivo (Takami-Musubi) y el Productivo Divino (Kami-Musubi), que representaban el principio del pensamiento asiático conocido como Yin-Yang. Esto combinado con textos sagrados de Kojiki, Shoku Nihongi y Yengi-Shiki produjo una mezcla de sintoísmo altamente monoteísta durante un tiempo.
Es esta ideología de carácter religioso la que conformó la base del culto al Emperador y de la religión sintoísta estatal: el Divino Emperador descendía directamente de Amaterasu O-Mikami, la Diosa Nacional que protegía Japón. Por lo tanto, todas las proclamaciones del Emperador tenían carácter religioso.
En 1890 se adaptó el sistema educativo, pasando el sintoísmo estatal a ser la principal religión. Aun así, ya existían otras 13 sectas sintoístas.
Hachiman
En Japón, Hachiman era la deidad tradicionalmente asociada con la guerra y los militares le rendían culto. Las familias de soldados enviados al frente oraban en sus santuarios por el éxito de los esfuerzos para ganar la guerra y el pronto retorno de sus hijos. Algunos de los teóricos del Ejército japonés invocaban su protección sagrada y su apoyo. Desde su punto de vista, les daba la oportunidad divina de terminar definitivamente con el peligro comunista; estaban preparando la invasión de la parte asiática de la Unión Soviética y de tierras siberianas, como parte de los planes generales del Ejército japonés de julio de 1941.
Kamikaze
El uso extremado de la tradición puede observarse en la idea de Takijiro Ohnishi de unidades especiales de defensa Kamikaze en activo entre 1944 y 1945. El almirante Soemu Toyoda en un principio se opuso, pero tuvo que reconocer que estas unidades suicidas por sí mismas eran capaces de infligir daños sustanciales a los navíos aliados. Antes de realizar su ataque, los pilotos participaban en una ceremonia, en la que bebían sake, un vino tradicional japonés elaborado a base de arroz. Llevaban a la batalla banderas simbólicas "Kyokujitsu-ki", papeles con plegarias sintoístas escritas, la pistola Nambu o katana reglamentaria y el hachimaki, con la cinta de sol y rayos de la bandera arriba expuesta. Esto conduce a la mítica versión del rechazo a la flota mongol en el siglo XIII, que ya había sido un punto de referencia cuando el mal tiempo causó graves daños a la flota estadounidense estacionada en Filipinas.
Shiragiku (el crisantemo)
Sello Imperial y Nacional
El shiragiku (literalmente "crisantemo blanco") o flor de crisantemo se utiliza incluso en la actualidad como símbolo imperial. Alude al Trono del Crisantemo, el trono tradicional de los Emperadores de Japón. El grito tradicional ofrecido al Emperador y otros dignatarios o en conmemoraciones especiales era Tenno Heika Banzai (larga vida al Emperador), o el abreviado Banzai. Se convirtió en el típico grito de guerra o victoria de los japoneses, originariamente para dar ánimo a las tropas imperiales en combate.
El nacionalismo en la educación
En la educación, se remarcó la importancia de los valores políticos nacionales, la religión y la moralidad. Este énfasis prevaleció desde la Era Meiji. El Estado japonés se modernizó en su organización, aunque conservó su idiosincrasia nacional. Japón iba a convertirse en una potencia, por lo menos tanto como las occidentales, una actitud que se reforzó a partir de 1905. Durante el periodo Showa el sistema educativo se impregnaba de ideología militarista radical, como apoyo al Estado militarizado preparando a sus futuros soldados.
El Gobierno japonés hizo publicar libros de texto oficiales para estudiantes de todos los niveles y reforzó sus enseñanzas mediante actividades culturales, seminarios, etc. Estos cursos culturales se complementaban con entrenamiento militar y de supervivencia ante una hipotética invasión.
En Corea y las provincias ocupadas en China el sistema educativo era distinto, pues a sus ciudadanos no se les consideraba súbditos japoneses de pleno derecho. Por ejemplo, tanto a los coreanos como a los manchúes se les educaba como trabajadores industriales, empleados de oficina o soldados de baja graduación. En Manchuria incluso se cerraron todas las escuelas y universidades.
Movilización de la juventud
Aparte del adoctrinamiento en el nacionalismo y la religión, los escolares recibían entrenamiento militar (armamento, combate cuerpo a cuerpo, supervivencia, primeros auxilios). La Federación de Juventudes Imperiales llegó más lejos: los universitarios eran entrenados y reclutados por las unidades militares, las jóvenes recibían cursos de primeros auxilios y los niños trabajaban en fábricas de armamento.
Las políticas nacionalistas en Japón
Origen de las estructuras y partidos nacionalistas
En 1882 el Gobierno japonés organizó el Teiseito (Partido Gubernamental Imperial), uno de los primeros partidos nacionalistas de la Historia de Japón. Tras la Guerra ruso-japonesa, Japón comenzó a denominarse "Dai Nippon Teikoku", estableciéndose como un auténtico imperio que incluía Formosa (1895), la Península de Liaotung y Karafuto (1905), el Mandato sobre el Pacífico Sur (1918-1919) y la voluntad de controlar Corea.
Las guerras contra China y Rusia fueron totales y requirieron un énfasis nacionalista en el sentimiento patriótico. A partir de este periodo, el santuario de Yasukuni Jinja se convirtió en el centro del nuevo sentido patriótico. Durante la década de 1920 el establishment japonés se organizó conceptualmente de la siguiente manera: Nobleza y Aristocracia (Mombatsu); Comerciantes e Industriales (Zaibatsu); militares y clanes de grandes terratenientes (Gumbatsu).
Entre 1926 y 1928 el Gobierno japonés organizó el "Departamento para la Preservación de la Paz" (una especie de policía política), que actuó contra comunistas que proponían un gobierno de tipo socialista. El Ejército organizó el Kempeitai (Policía Militar), de igual manera que en la fuerza naval. Estas fuerzas de seguridad no sólo tenían las competencias de policía militar, además disponían de armas especiales (especialmente los destacamentos en Manchuria) y un departamento político, además de estar relacionados ideológicamente con la facción Kōdōha (brazo político de los militares en el gobierno civil) y las administraciones en los territorios ocupados de Asia-Pacífico.
El 26 de febrero de 1936, una serie de militares partidarios de la instauración de una monarquía absoluta entorno al Emperador de Japón como poseedor del poder absoluto, así como de un exacerbado expansionismo, dieron un golpe de Estado fallido en el que tomaron varios edificios e instalaciones militares en Tokio, consiguiendo asesinar a varios rivales de sus facciones dentro del Ejército Imperial Japonés hasta que se rindieron el 29 de febrero. Este suceso se conoció como el Incidente del 26 de febrero o "Incidente 2-2-6".
Realidad del poder político
Para muchos autores, calificar al Japón de 1941 como fascista o totalitario es un error. La "Nueva Estructura" japonesa no dependía de un líder como Benito Mussolini en Italia o Adolf Hitler en Alemania. Los japoneses fueron conducidos hacia un "Estado defensivo" o un "Estado de Consenso", en el cual todos los esfuerzos de la nación eran en busca de objetivos colectivos, guiados por los mitos, Historia y dogmas nacionales, a través de los cuales se obtenía el "consenso nacional".
En este Estado, la figura central era la del Tenno, el Emperador, tal y como venía siendo desde la Constitución Meiji, que coexistía con los intereses del poder establecido.
Respecto de quién tenía realmente el poder en Japón existen dos versiones. Una dice que el poder lo ejercía el Emperador sobre los militares, la otra valida la "trinidad" arriba mencionada.
Existe una posición de tipo "realista", que niega que la política fuera un factor influyente: El control real lo tenían los militares, tras los cuales se encontraba el Emperador y el Gobierno (tal y como ocurrió en Manchuria con el Emperador Kangde Puyi).
Las principales figuras militares fueron:
- General Hideki Tōjō, Primer Jefe del Kempeitai en Manchukuo, Primer Ministro, Ministro de Guerra e Interior, también en 1941 jefe del partido Kodoha,
- Teniente General Hyotaro Yamada, Viceministro de Guerra,
- General Sadao Araki, Ideólogo del Ejército, fundador y primer jefe del partido Kōdōha, de extrema derecha nacionalista y durante 1938-39 Ministro de Educación,
- General Hachiro Arita, Ministro de Asuntos Exteriores y estratega militar, que había alcanzado un pacto contra Rusia con las Potencias del Eje,
- General Hajime Sugiyama,
- General Otozo Yamada,
- Almirante Osami Nagano,
- Almirante Koshirō Oikawa, ministro de la Marina.
- Contralmirante Shigeru Fukudome,
- Almirante Shigetaro Shimada,
- Almirante Mineo Osumi, miembro de la nobleza,
- Almirante Teijiro Toyoda, ministro de Comercio, Industria y Asuntos Exteriores,
- General Juichi Terauchi, hijo del Mariscal Masatake Terauchi,
- General Takazo Numata,
- Almirante Isoroku Yamamoto, Jefe de la Flota Combinada del Pacífico, que concibió la Operación Hawái y el ataque a Pearl Harbor,
- Contralmirante Matome Ugaki,
- Vicealmirante Chuichi Nagumo,
- Vicealmirante Takijiro Ohnishi, jefe de la División Naval de Aviación y de la primera Flota Aérea, Comandante en el norte de las Filipinas desde octubre de 1944, conocido como fundador de las fuerzas especiales Kamikaze,
- General Hiroshi Oshima, el oficial en contacto con Alemania, firme partidario de la asociación con los nazis,
- Major-General Kazuo Otani,
- Teniente General Seizo Sakonji, Ministro de Comercio e Industria que sustituyó al Almirante Toyoda.
Entre los industriales de la época destacan los nombres de Mitsui, Mitsubishi (Iwasaki), Sumitomo, Okura, Asano, Kuhara y Yasuda.
Doctrinas
La Doctrina Amau (equivalente japonés de la Doctrina Monroe de Estados Unidos) declaraba que Japón asumía toda la responsabilidad de la paz y la estabilidad en Asia. El ministro Hirota proclamó "una zona especial, anticomunista, pro-japonesa y pro-Manchukuo" y que el norte de China era una "parte fundamental de la existencia nacional japonesa", al anunciar como "misión nacional" una especie de guerra divina contra la China y la Unión Soviética.
Durante 1940 el príncipe Fumimaro Konoe proclamó que el Shintaisen (Nueva Estructura Nacional), que aplicaba a Japón un "estado avanzado de defensa nacional".
Los textos académicos oficiales eran el Kokutai no Hongi y el Shinmin no Michi. Ambos presentaban la visión de un Japón idealizado para unir Oriente y Occidente.
El nacionalismo japonés contemporáneo
Mediante una compleja mezcla de ideas, doctrinas y acciones nacionalistas, las Fuerzas Imperiales japonesas encontraron apoyo nacionalista, político e ideológico para la lucha en el continente asiático y el Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial. La Casa Imperial representaba a la cabeza de la nación y tenía la última palabra en la toma de decisiones. Diferentes puntos de vista coincidieron en la cuestión de la expansión continental y la conquista de la zona del Pacífico.
Tras la rendición de Japón ante Estados Unidos en agosto de 1945, esta estructura fue desmantelada por las autoridades aliadas de ocupación en Japón y todos los territorios ocupados por los japoneses.
Las ideas nacionalistas tras la Segunda Guerra Mundial
En febrero de 1946, el general estadounidense Douglas MacArthur se encargó de redactar una Constitución que sirviera como guía para los japoneses. La intención de Washington era asegurarse que el militarismo japonés quedara totalmente desmantelado a través de reformas fundamentales en el gobierno, la sociedad y la estructura económica. Quizá el efecto que más ha perdurado de esta Constitución es su artículo noveno, que dice:
«Aspirando sinceramente a una paz internacional basada en el orden y la justicia, el pueblo japonés renuncia para siempre a la guerra como derecho soberano de la nación y a la amenaza o uso de la fuerza como medio para resolver las disputas internacionales. Para cumplir el objetivo del párrafo precedente, no existirán fuerzas de tierra, mar o aire ni ningún otro potencial de guerra. No se le reconocerán derechos de beligerancia al Estado.»
Tras la renuncia a la guerra y al poder militar, el Gobierno japonés buscó la seguridad ofrecida por los Estados Unidos. Al empezar la Guerra Fría, los norteamericanos iniciaron unas relaciones de proximidad con Japón debido a su ubicación, de importancia estratégica en relación a la URSS. Así, Japón se convirtió para los Estados Unidos en un importante aliado, según palabras de Yasuhiro Nakasone, que fue Primer Ministro de Japón entre 1982 y 1987, en un "portaaviones imposible de hundir". En línea con estas relaciones de cercanía con los Estados Unidos, desde Japón se deseaba en aquel momento convertirse en "el tercer lado de un triángulo en el que estaban las dos superpotencias". El milagro económico japonés ocurrido en la última mitad del siglo XX disipó el interés de sus ciudadanos por el nacionalismo.
En la actualidad, hay quien percibe que el nacionalismo japonés está volviendo a extender su influencia en la sociedad. Algunos legisladores del Partido Liberal Democrático quieren revisar la Constitución, en especial su artículo 9, explicado más arriba. Otro ejemplo son los libros de Historia en los colegios, que rebajan el expansionismo a ultranza de Japón en la Segunda Guerra Mundial. En 1988, la adopción del himno nacional y la bandera como símbolos de Estado, así como las seis visitas del primer ministro Koizumi al santuario Yasukuni se han entendido como un aumento de la influencia nacionalista. Por otra parte, hay quien afirma que los cambios en los últimos años son una mera afirmación de la confianza del pueblo japonés y señalan que Japón "no es un país más nacionalista que ninguno de sus vecinos".
En 2006, miembros de un grupo militante de extrema derecha utilizaron cócteles Molotov y bombas para intimidar a políticos moderados y figuras públicas, incluyendo al antiguo Viceministro de Asuntos Exteriores Hitoshi Tanaka y al presidente de Fuji Xerox, Yotaro Kobayashi. Un exmiembro de un grupo ultraderechista incendió la casa de Koichi Kato, político del PLD. Koichi Kato y Yotaro Kobayashi habían opinado en contra de las visitas de Koizumi al santuario Yasukuni.[1]
Bibliografía
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- ISBN 84-320-4410-5 (español), Editorial Planeta, cuarta edición, 1988.
- ISBN 0-553-34474-9 (inglés), Bantam, 1987
- Newman, Joseph. "Goodbye Japan", publicado en Nueva York, 1942(en español "Adiós al Japón") traducido y publicado para Editorial Poseidón, Buenos Aires Arg, 1943.
- Moore, Frederick."With Japan's Leaders", publicado en Nueva York, 1942
- Whitney Hall, John. "Japanese Empire", Vol.20 (en español "Imperio Japonés") traducido y publicado para Ed. Historia Universal XXI,1967.
- Emmott, Bill. "Japan's English Lessons". Foreign Policy, 140 (2004)
- Kase, Yuri. "Japan's Nonnuclear Weapons Policy on the Changing Security Environment". World Affairs, 165.3 (2003)
- Lincoln, Edward. "Japan: Using Power Narrowly". Washington Quarterly, 27.1 (Winter 2003/2004)
- Ozawa, Terutomo. "The New Economic Nationalism and the Japanese Disease":
- "The Conundrum of Managed Economic Growth", Journal of Economic Issues, v30 (1996)
- Pyle, Kenneth B., "The Japanese Question: Power and Purpose in a New Era", (Washington D.C.)
Otras referencias históricas
Geopolítica de Asia y el Pacífico
- Shaw, B. Earl, article "United States Pacific Defense" en Van Valkenburg, Samuel Book "America at War" Prentice-Hall, (1942).
- Weigerth, W. Hans."Haushofer and the Pacific", Foreign Affairs, XX (1942), P.732-742.
- Mackinder, J. Halford, "Democratic Ideals and Reality", Nueva York, Holt, (1942).
- Bowman, Isaiah. "The New World", Yonker-on-Hudson, World Book, (1928), 4th Ed.
Referencias
- Steven Clemons (27 de agosto de 2006). The Rise of Japan's Thought Police.
Enlaces externos
- Right wing rising Japanese nationalists use comics, film, punk rock to recruit youth
- The Rise of Japan's Neo-Nationalists: What It Means to the United States
- Media Intimidation in Japan, A Close Encounter with Hard Japanese Nationalism
- Japanese nationalism Link Index
- Obuchi raises the banner of Japanese nationalism
- University research study about Japanese nationalism
- Mori's 'gaffes' point to a revival of right-wing Japanese nationalism
- Rising Japanese nationalism?
- Japanese expansionism
- Japanese ultranationalism
- list of secret ultranationalist societies
- Explanations of Japan¡¯s Imperialistic Expansion, 1894-1910