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Enrique de Castilla (1377-1404)

Enrique de Castilla, conocido también como Enrique Enríquez[2]​ (Castillo de Cabra,[3]​ 1377[4]​ - Córdoba, 14 de septiembre[5][6][7]​ o de noviembre[8][9]​ de 1404), fue un noble castellano e hijo ilegítimo del rey Enrique II de Castilla[4]​ y de la dama cordobesa Juana de Sousa.[10][8][11][a]

Enrique de Castilla
Duque de Medina Sidonia y de Cabra

Escudo de armas del duque Enrique de Castilla.
Información personal
Otros títulos Señor de Morón y de Alcalá de los Gazules[1]
Nacimiento 1377
Cabra, Corona de Castilla
Fallecimiento 1404
Córdoba, Corona de Castilla
Entierro Mezquita-catedral de Córdoba
Familia
Dinastía Casa de Trastámara
Padre Enrique II de Castilla
Madre Juana de Sousa

Fue I duque de Cabra y de Medina Sidonia y señor de Morón, Alcalá de los Gazules,[1]Portillo y Aranda de Duero,[2]​ aunque la mayoría de los historiadores afirman erróneamente que fue conde de Cabra y duque de Medina Sidonia[12][13]​ y señor de Morón y de Alcalá la Real.[14][15]​ Enrique de Castilla vivió junto a su madre en un palacio mudéjar del siglo XIV, conocido actualmente como el Palacio del Duque de Medina Sidonia, localizado en el número 13 de la Calle Rey Heredia de Córdoba (España).[b]

Según algunos autores el duque Enrique «es un personaje brumoso al que tanto la historiografía como la producción genealógica han prestado muy escasa atención», y han lamentado además el hecho de que falleciera sin dejar descendientes, ya que por su condición de miembro, aunque bastardo, de la familia real castellana, habrían formado parte de la más elevada «Grandeza de España».[12]​ Y otros autores han destacado también que el amplio conjunto de señoríos que llegó a poseer fue uno de los últimos grandes dominios de «persona real» que se formarían en Andalucía en la Baja Edad Media.[4]

Orígenes familiares

Por parte paterna era nieto del rey Alfonso XI de Castilla y de la dama Leonor de Guzmán, y por parte materna lo era de Vasco Alfonso de Sousa, que fue señor de Castillo Anzur y de Almenara y también alcalde mayor y justicia mayor de Córdoba, y de María García Carrillo.[16][17][18][19]

Biografía

Juventud y patrimonio

 
Retrato imaginario del rey Enrique II de Castilla, padre del duque Enrique de Castilla. José María Rodríguez de Losada. (Ayuntamiento de León).

Enrique de Castilla nació en 1377,[20][21][4]​ y algunos autores suponen que probablemente nació en septiembre de ese año en el castillo de Cabra, ya que es posible que el rey Enrique II pasara allí su «luna de miel» con Juana de Sousa y que la trasladara allí para mantenerla lejos de su familia, como ya había hecho su padre, Alfonso XI, con su amante Leonor de Guzmán, en el mismo lugar.[3]

En opinión del eclesiástico e historiador Manuel Nieto Cumplido, es casi seguro que sus padres se conocieron en Córdoba y cuando ya Enrique II había subido al trono, lo que ocurrió en 1369. Hay constancia de que Enrique II estuvo en Córdoba en 1370, 1371, 1374, 1375, 1376, 1377 y 1378, siendo las visitas de 1375 y 1377 «especialmente prolongadas»,[22]​ pero Nieto Cumplido aseguró que es muy probable que los padres de Enrique de Castilla iniciaran su relación amorosa en 1377, ya que esa fecha coincide con una donación que el monarca castellano hizo a favor de Juana de Sousa y de su madre, siendo además probable que Juana tuviera unos veinticuatro[23]​ o veinticinco años de edad en esos momentos.[24]​ Además, Juana de Sousa debía de ser, según algunos historiadores, una mujer de «extraordinaria belleza y simpatía», aunque lamentablemente no se ha conservado ningún retrato suyo ni tampoco ninguna descripción de su persona.[24]

Existen múltiples documentos en los que Juana de Sousa declaró explícitamente que era la «madre del duque don Enrique»,[25]​ como por ejemplo en uno otorgado el día 10 de mayo de 1391.[26]​ Y en el testamento del canónigo y maestrescuela Lope Gutiérrez de los Ríos, que era sobrino de Juana de Sousa, el eclesiástico aludió a su tía designándola nuevamente como «madre del duque don Enrique».[c]

La mayoría de los historiadores afirman erróneamente que Enrique II concedió a su hijo Enrique el ducado de Medina Sidonia y el condado de Cabra[10][13]​ junto con los señoríos de Morón y de Alcalá la Real,[14]​ pero Manuel Nieto Cumplido demostró que en realidad el título ostentado por Enrique de Castilla fue el de duque de Cabra, ya que así consta en varios documentos de la época[d]​ y también en el poema 530 del Cancionero de Baena:[27]

¿Que se fisieron los emperadores / papas e rreyes, grandes perlados...? ¿El Duque de Cabra e el Almirante / e otros muy grandes asas de Castilla / agora Ruy Dies que puso mansilla / su muerte a las gentes en tal estante / que la su grant fama fasta en leuante / sonaua en proeza e en toda bondat...?

Las villas de Cabra y de Medina-Sidonia habían pertenecido a Leonor de Guzmán, que fue la amante del rey Alfonso XI de Castilla y la abuela materna del duque Enrique.[10][20]​ Y en el testamento que Enrique II de Castilla otorgó el día 29 de mayo de 1374,[e]​ el monarca cedía el señorío de Medina-Sidonia,[1]​ que había pertenecido anteriormente a Leonor de Guzmán,[10][28]​, a su hijo Fadrique de Castilla, que llegaría a ser duque de Benavente, pero posteriormente el monarca modificó sus últimas voluntades y lo entregó a Enrique de Castilla, que era el hijo que había tenido con Juana de Sousa.[1]​ Y existen además múltiples documentos que prueban irrefutablemente que Enrique de Castilla ostentó el título de duque de Medina Sidonia.[f]

 
Vista del municipio de Medina-Sidonia.

También está documentado que Enrique de Castilla fue señor de la villa de Aranda de Duero, y posiblemente, como señaló Jesús Peribáñez Otero, por concesión de su hermanastro, el rey Juan I de Castilla, añadiendo además dicho autor que el duque Enrique retuvo el señorío de Aranda de Duero hasta su muerte, ocurrida en 1404.[g]

La tradición popular asegura que la relación de Enrique II de Castilla con Juana de Sousa se prolongó durante diez años y que pasado ese tiempo el monarca comenzó a interesarse por otra mujer, lo que fue considerado por Juana de Sousa como una «terrible traición».[29]​ Sin embargo, Enrique II se mostró muy generoso con su hijo Enrique y, además de cederle los señoríos de Medina-Sidonia y de Cabra también le hizo entrega de un «magnífico» palacio mudéjar que se encuentra en el número 13 de la calle Rey Heredia de Córdoba,[30]​ aunque en realidad dicho palacio pertenecía a la familia de Juana de Sousa.[31]​ Desde entonces, dicho palacio cordobés se conoce con el nombre de Palacio del Duque de Medina Sidonia. Y de nuevo según la tradición, Enrique II intentó que su antigua amante se casara con algún hombre adinerado que le asegurara una cómoda existencia, pero Juana de Sousa se negó alegando que el único «amor de su vida» había sido el monarca castellano, por lo que durante el resto de su vida la mencionada señora vivió dedicada por entero a su hijo Enrique.[32]

Durante la minoría de edad del duque Enrique de Castilla su madre fue la encargada de gobernar sus señoríos, como el de Medina-Sidonia, y hay constancia de que ella mantuvo durante ese periodo unas relaciones conflictivas con el concejo de la mencionada villa, según advirtió la historiadora Esther Alegre Carvajal en su tesis doctoral, titulada Las villas ducales como tipología urbana: el ejemplo de la villa ducal de Pastrana.[21]

Enrique de Castilla poseía un «magnífico» palacio mudéjar en Córdoba,[b][33]​ que fue la ciudad donde residió habitualmente,[20]​ que se encuentra en el número 13 de la calle Rey Heredia.[34]​ Dicha calle fue conocida hasta 1861[33]​ como calle del Duque[35]​ , debido precisamente a que el propio Enrique de Castilla, Primer Duque de Medina Sidonia, ostentaba allí su palacio y residencia.[36]

 
Palacio del duque de Medina Sidonia, situado en el número 13 de la calle Rey Heredia de la ciudad de Córdoba.

El mencionado palacio, anteriormente había pertenecido a Vasco Alfonso de Sousa, posteriormente a su esposa María García Carrillo, y desde agosto de 1397 a Juana de Sousa, hija de los anteriores y madre del duque Enrique de Castilla.[31]​ Tras la muerte de Juana, dicho Palacio del Duque de Medina Sidonia pasó, por voluntad testamentaria de la dama Juana de Sousa, a manos de su sobrino Juan Alfonso de Sousa,[37]​ que era miembro de la rama principal o «troncal» de la familia Sousa.[33]​ Después el inmueble quedó en poder de los marqueses del Carpio[35]​ y posteriormente de la familia Armenta.[h]

A lo largo de su vida el duque Enrique confirmó algunos privilegios, y hay constancia de que fue uno de los confirmantes del privilegio, otorgado el día 15 de diciembre de 1393 durante las Cortes de Madrid, que aludía a las «libertades de Toledo», y también otro privilegio otorgado en 1401 en el que confirmó como «don Enrique, tío del Rey, Duque de Medina Sidonia, Señor de Alcalá», habiendo sido ambos documentos expedidos durante el reinado de Enrique III de Castilla, que era sobrino carnal del duque Enrique.[7]

El historiador Ignacio Garijo Pérez llamó la atención sobre el hecho de que un individuo con la categoría social que poseía el duque Enrique de Castilla, que por su posición podría haber llegado a ser el tronco de una destacada «casa nobiliaria», falleciera a los veintisiete años de edad sin haber contraído matrimonio y sin haber dejado descendencia.[7]​ Y por causa de lo anterior y por el hecho de que apenas tuviera participación en la vida política y cortesana de la época, al contrario que sus hermanastros Alfonso Enríquez y Fadrique de Castilla, Garijo Pérez afirmó que es muy probable que Enrique de Castilla padeciera alguna clase de enfermedad o dolencia que lo incapacitara.[7]

También es posible, como señalaron Miguel Ángel Ladero Quesada y Manuel González Jiménez, que antes de la muerte del duque Enrique las protestas de los vecinos de Medina-Sidonia y de Alcalá de los Gazules hubieran ocasionado el fin del señorío que el duque ejercía en ambos lugares, ya que ambos autores se basaron en un fragmento de las actas capitulares de Jerez de la Frontera que dice así: «Los de Alcalá enviaron a decir al cabildo desta cibdad en miércoles dos de abril de MCCCCIII años y así mismo los de Medina Sidonia que enviaron sus cartas al rey nuestro señor que Medina y Alcalá sean reales y de su corona que non las dé a otra persona».[6][4]

El «único testimonio» conocido de la relación que el duque mantuvo con su villa de Alcalá de los Gazules es una sentencia, pronunciada por el propio duque en 1395, sobre el pleito que mantenían por motivos de términos sus villas de Medina-Sidonia y de Alcalá de los Gazules, ya que los procuradores de esta última villa, Ruy Martínez y Fernán Sánchez, habían denunciado a los habitantes de Medina-Sidonia por haber invadido con sus ganados unos prados situados en las cercanías del río Álamo.[4]​ Y en el documento donde se consignó la sentencia pronunciada acerca del mencionado pleito consta que el duque solicitó a las dos villas que presentaran los antiguos padrones de amojonamiento y que, al considerarse que el que presentó el procurador de Medina-Sidonia había sido «falseado», el duque resolvió el pleito a favor de los vecinos de Alcalá de los Gazules.[i]​ Y el historiador Marcos Fernández Gómez también subrayó el hecho de que a pesar de que el lugar de residencia habitual del duque era la ciudad de Córdoba, la sentencia fue pronunciada en Alcalá de los Gazules.[38]

 
Vista del municipio de Alcalá de los Gazules.

El único documento conocido sobre la administración del duque en su villa de Medina-Sidonia data de 1397, y en él el duque estableció que algunos tipos de manantiales pertenecían a su señorío, al igual que el «agua morisca», y concedió algunas mercedes para el uso de abrevaderos que contribuyeron a aumentar el desarrollo de la ganadería del propio duque.[39]​ Y, por otra parte, también hay constancia de que el duque estableció un monopolio sobre el jabón en Medina-Sidonia, lo que quebrantaba el privilegio que tenían sus habitantes de elaborarlo para su uso privado, y de que el duque continuó cobrando en dicha población el impuesto del «herbaje», a pesar de que su hermanastro, el rey Juan I de Castilla, lo había prohibido en 1379.[6]

Y aunque se desconoce casi todo lo concerniente a la administración de su patrimonio siendo ya mayor de edad, sí hay constancia de que el estilo de gobierno del duque Enrique contribuyó, al igual que en otros señoríos de la época, a reducir las libertades de los concejos y a «imponer o mantener cargas» que los vecinos de Medina-Sidonia consideraron excesivas, ya que es muy significativo, en opinión de Ladero Quesada y de González Jiménez, que los dos únicos testimonios que se conocen sobre su administración estén relacionados con asuntos ganaderos y derechos de pastos.[20]

El escudo de armas del duque Enrique de Castilla

 
Escudo de armas de los Sousas de Córdoba.

El escudo de armas del duque Enrique de Castilla, según el heraldista Faustino Menéndez Pidal de Navascués, consistió en un «escudo a frange, en lo alto y bajo los castillos y en los lados los leones», es decir, «un cuartelado en aspa de Castilla y de León», aunque otros autores afirmaron erróneamente que dicho escudo de armas fue usado por el infante Enrique de Castilla el Senador, que fue hijo de Fernando III de Castilla, pero Menéndez Pidal de Navascués demostró la falsedad de dicha afirmación basándose en el sello personal del infante Enrique y en los escudos de armas empleados por sus descendientes, los Enríquez de Sevilla.[13][40][j]

Hay constancia de que Inés Enríquez de Castilla, que fue abadesa del convento de Santa Clara la Real de Toledo e hija ilegítima de Enrique II de Castilla, y también Fernando Alfonso de Castilla, que fue hijo ilegítimo a su vez de Alfonso XI de Castilla, usaron un escudo en frange similar al empleado por Enrique de Castilla, aunque en el caso de Inés Enríquez esta comenzó a usarlo a partir de 1404 y tras la muerte de su hermanastro, el duque de Medina Sidonia.[41][42]​ Además, en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid se conserva un pinjante con el escudo de armas de Enrique de Castilla, aunque se desconoce su lugar de origen, y Menéndez Pidal de Navascués consideró altamente improbable que dicho pinjante hubiera pertenecido a Fernando de Castilla, el hijo ilegítimo de Alfonso XI, por lo que en su opinión debió pertenecer casi con total seguridad al duque Enrique de Castilla.[41]

Por otra parte, Ignacio Garijo Pérez apuntó en 2004 la posibilidad de que el escudo de armas de Enrique de Castilla se basara en el empleado por sus antepasados maternos, los Sousas,[k]​ aunque dicho autor añadió que hasta que no se conozcan con certeza los escudos utilizados por Vasco Alfonso de Sousa, el abuelo de Enrique, o por su madre, Juana de Sousa, o por su tío Diego Alfonso de Sousa su teoría consistirá simplemente en una mera hipótesis, ya que bien pudo ser al contrario y ser los Sousas los que tras la muerte del duque Enrique decidieran adoptar, en recuerdo de su «ilustrísimo familiar», el modelo heráldico empleado por aquel.[43]

La muerte del duque

Enrique de Castilla falleció a los veintisiete años de edad el día 14 de septiembre[5][24][6][7]​ o de noviembre[8][9]​ de 1404[44][11][l]​ en su palacio del Duque de Medina Sidonia, de la calle Rey Heredia de la ciudad de Córdoba.[5][7]​ Y tras la muerte del duque todos sus señoríos volvieron a pertenecer al realengo por haber fallecido sin dejar herederos, como advirtió Esther Alegre Carvajal.[21]

La madre del duque Enrique estableció doce aniversarios por el alma de su hijo[11][45]​ y fundó en el altar de Santiago de la Mezquita-catedral de Córdoba, junto al que fue sepultado, una capellanía «dotada de vestimentos, cáliz de plata y mármol, con 600 maravedís anuales para el capellán», al tiempo que legó al cabildo catedralicio cordobés una suma de 1200 maravedís a fin de que se celebraran doce memorias anuales en memoria de su hijo y «cada una todos los meses para siempre jamás».[5]​ En 1404, y a fin de completar una suma de 2020 maravedís como dote por la sepultura de su hijo, Juana de Sousa había obligado tres ruedas de aceña en la localidad sevillana de Écija[46]​ llamadas Chequilla, Pajuela y Nueva.[27]​ Y en 1414 la suma total de la renta anual por los oficios religiosos que Juana de Sousa había dotado en memoria de su hijo ascendía a 1420 maravedís, que provenían de unas tenerías situadas en la collación de San Nicolás de la Ajerquía de Córdoba y que en 1440 entregó definitivamente al cabildo catedralicio cordobés.[46][m]

Juana de Sousa obtuvo permiso del cabildo catedralicio cordobés para vivir en la propia Mezquita-catedral y en unas habitaciones que en siglos pasados fueron conocidas como Oficinas de Cabezas de rentas,[47][36][45]​ y allí vivió hasta el día de su muerte, ocurrida según Ramírez de Arellano el día 14 de noviembre de 1442,[36]​ aunque Nieto Cumplido aseguró que debió ocurrir poco antes del día 3 de julio de 1442 y cuando tenía aproximadamente ochenta y nueve años de edad, ya que en esa fecha el cabildo catedralicio cordobés vendió el paño que había cubierto las «andas de doña Juana».[27][n]

Ramírez de Arellano indicó que Juana de Sousa,[36]​ cuyo cadáver recibió sepultura en la capilla de los Sousas de la catedral cordobesa,[45]​ legó al cabildo catedralicio cordobés sus joyas[o]​ y «unas obligaciones sobre las tenerías para pago de los aniversarios y memorias de su hijo y suyos»,[36]​ y Nieto Cumplido añadió que en el testamento que Juana otorgó[p]​ el día 12 de mayo de 1442 manifestaba su deseo de ser enterrada junto a su hijo Enrique y legaba sus bienes a su hermana Leonor de Sousa y a sus sobrinos,[27]​ comenzando dicho testamento con el siguiente preámbulo:[25][q]

Sepan quantos esta carta vieren como yo doña Juana de Sousa, madre del duque don Enrique, que Dios dé su santo parayso, vecina y moradora que soy en la colación de Santa María de la muy noble ciudad de Córdova, estando enferma del cuerpo, etc.

Sepultura

 
Tumba del duque Enrique de Castilla en la Mezquita-catedral de Córdoba.

Enrique de Castilla fue sepultado en un arco «dorado» de la primitiva capilla mayor de la Mezquita-catedral de Córdoba,[48]​ espacio que en la actualidad ocupa la capilla de Villaviciosa,[5][36]​ y en su tumba, que era «dorada»[5][48][r]​ y de madera,[5][7]​ posiblemente estarían colocados, como señaló Menéndez Pidal de Navascués, los escudos de armas del difunto.[13]​ Y conviene señalar que la tumba se encontraba situada junto al altar del apóstol Santiago[49]​ y también que en el mismo templo fueron sepultados la madre de Enrique de Castilla,[50]​ sus abuelos maternos y su abuelo paterno, el rey Alfonso XI de Castilla.[51]

La tumba del duque Enrique estuvo colocada en un primer momento entre el altar mayor y la capilla de los Obispos, a petición del rey Enrique III de Castilla y del infante Fernando el de Antequera,[5][27]​ según consta en la «Donación del deán y cabildo de la catedral de Córdoba para que sea inhumado don Enrique, duque de Medina Sidonia», que es un documento otorgado en Córdoba el día 15 de noviembre de 1404.[52][s]​ Y los restos mortales del duque permanecieron durante varios siglos[t]​ en la capilla de Villaviciosa de la catedral cordobesa, y allí permanecieron hasta principios del siglo XX, cuando con motivo de unas obras de restauración fue trasladado a una atarazana de la catedral.[36]

Desde principios del siglo XX,[u]​ y por iniciativa del arquitecto Ricardo Velázquez Bosco,[v]​ los restos mortales del duque reposan bajo una «sencilla lápida» y «sin emblemas» colocada junto al muro del lado del Evangelio[13]​ de la capilla mayor de la Mezquita-catedral de Córdoba en la que está esculpido el siguiente epitafio:[1][53][7][54]

Aqui jace Don / Enrrique de Castilla / Duque de Medina / Sidonia Conde de / Cabra Señor de Alcala / y Morón Hijo del mui alto rei D. Enrique 2º / el Magnifico.

La lápida es de mármol azulado y probablemente fue realizada en el siglo XVII, aunque Nieto Cumplido precisó que la tumba se encuentra junto a la cabecera del crucero de la catedral cordobesa[w]​ y al lado izquierdo del altar mayor.[26]

Leyenda del fantasma de su madre

Según la tradición popular, la muerte de Enrique de Castilla dejó a su madre «sola y desamparada» y al borde de la locura, ya que incluso llegó a permanecer varios días encerrada a solas con el cadáver de su hijo.[55]​ Además, la desconsolada madre solicitó al cabildo catedralicio cordobés que le permitieran instalarse en una habitación dentro del propio templo para estar siempre cerca de la tumba de su hijo, a lo que accedió el cabildo, y según la tradición ya nunca abandonó el edificio y vivió allí durante el resto de su vida.[53]​ Y el legendario relato también afirma que por las noches, cuando la Mezquita-catedral permanecía cerrada al público, Juana de Sousa acostumbraba a pasear entre las columnas «sin rumbo definido».[53]

En la actualidad existe la creencia popular de que el fantasma de Juana de Sousa continúa visitando la tumba de su hijo cada noche, y así lo consignó José Manuel Morales Gajete en su obra Enigmas y misterios de Córdoba, ya que varios vigilantes de seguridad nocturnos han declarado haber «sentido»[x]​ la presencia del mencionado fantasma:[56]

Son muchos los vigilantes de seguridad que, cuando se marchan los turistas y se apagan las luces, aseguran haber contemplado toda suerte de sombras, extrañas luminarias y, sobre todo, la figura de una dama con vestido largo y vaporoso que cada noche surge entre las columnas, pasea por las capillas a diez centímetros sobre el suelo y, tras unos segundos, rodea el Altar Mayor y se desvanece justo sobre la antigua y desgastada lápida gris de Enrique de Castilla y Sousa. ¿Será el alma en pena de doña Juana que, a día de hoy, continúa buscando a su hijo para despedirlo con un afectuoso beso maternal?.

Notas

  1. Ricardo del Arco y Garay, en su obra Sepulcros de la Casa Real de Castilla, señaló erróneamente que la madre de Enrique de Castilla fue Beatriz Ponce de León, que fue una de las amantes del rey Enrique II de Castilla. Cfr. Arco y Garay (1954), p. 312. Y otros autores, como Derek William Lomax, también erraron al afirmar lo mismo. Cfr. Lomax (1982), p. 639.
  2. Para más información sobre el palacio que el duque Enrique poseía en la ciudad de Córdoba, véase el artículo Casa del hijo del Rey Don Enrique II, que fue publicado por Miguel Muñoz Vázquez en 1962 en el Boletín de la Real Academia de Córdoba, de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes. Cfr. Muñoz Vázquez (1962), pp. 109-134.
  3. El fragmento del testamento del canónigo Lope Gutiérrez de los Ríos que menciona a Juana de Sousa y a su hijo, y que fue otorgado el día 24 de junio de 1441, dice así: «E mandamos e queremos que doña Juana de Sousa, nuestra señora tía, madre del duque don Enrique que Dios aya, por quanto nos tenemos de ella cargo de muchas honras e buenas obras que de ella havemos rezevido de cada un día, sea después de nuestros días en tanto que ella vibiere usufructuaria de nuestro cortijo que dizen del Morillo...». Cfr. Garijo Pérez (2004), p. 277.
  4. En un documento del 23 de junio de 1440 se menciona expresamente que Juana de Sousa era la «madre del señor don Enrique, duque de Cabra». Y en otro del día 3 de julio de 1442 vuelve Enrique a aparecer como «duque de Cabra». Cfr. Nieto Cumplido (1979), pp. 208-209. Y por último, en el Cronicón Cordubense de Fernando de Salmerón también se le otorga a Enrique de Castilla el mismo título. Cfr. Lomax (1982), p. 639.
  5. El testamento otorgado por Enrique II de Castilla el día 29 de mayo de 1374 aparece íntegramente publicado en el segundo tomo de la obra Crónicas de los reyes de Castilla Don Pedro, Don Enrique II, Don Juan I y Don Enrique III. Cfr. López de Ayala (1780), pp. 106-121.
  6. El rey Juan I de Castilla declaró en un documento del día 6 de noviembre de 1379 que la villa de Medina-Sidonia pertenecía a su hermanastro Enrique de Castilla, y el día 24 de abril de 1395 este último aparece con el título de duque de Medina Sidonia pronunciando una sentencia acerca del pleito que mantenían sus villas de Medina-Sidonia y de Alcalá de los Gazules acerca de sus respectivos términos. Y el día 23 de julio de 1397 Enrique de Castilla, titulándose nuevamente duque de Medina Sidonia, concedió a su vasallo Antón González, que era el escribano público de Medina-Sidonia, «derechos preferentes» sobre dos abrevaderos de ganado. Cfr. Nieto Cumplido (1979), p. 208.
  7. Existen tres documentos en los que el duque Enrique figura como señor de la villa de Aranda de Duero, y en el primero de ellos, que fue otorgado el día 20 de febrero de 1392 y que es la confirmación del Fuero de Ledigos, el duque aparece entre los confirmantes como «Don Enrique, tio del Rey, sennor de Alcalá, y de Aranda, y de Cabra, y de Portillo». El segundo documento fue otorgado en Aranda de Duero el 30 de agosto de 1398, y el tercero, que no ha podido ser localizado aunque es mencionado por algunos autores, data de 1392 y es una carta de pago de 17000 maravedís que el duque Enrique tenía sobre las rentas de la villa, haciendo además este último documento referencia al «aparato burocrático» del duque en la mencionada localidad y a la red de clientes que poseía en dicho lugar. Cfr. Peribáñez Otero (2010), p. 9.
  8. En 1636 el arcediano Damián de Armenta realizó «importantes reformas» en el palacio y colocó en la fachada principal el escudo de armas de los Armenta, que aún permanece en la actualidad. Cfr. Garijo Pérez (2004), p. 282.
  9. En la sentencia que el duque Enrique de Castilla pronunció en 1395 también se reconoció el derecho que tenían los habitantes de Alcalá de los Gazules para «usar y aprovechar» las tierras de pasto que también reclamaban los habitantes de Medina-Sidonia, aunque el duque se reservó la propiedad exclusiva de esos terrenos. Y también consta en el documento de la sentencia que estuvieron presentes en calidad de testigos Juan Sánchez de Bivanco, que era el alcalde mayor de los señoríos del duque, Gonzalo García de Espinosa, el alcaide dc Alcalá de los Gazules, Pero Benítez, el antiguo alcaide de la mencionada villa, y Juan Alfón de Sousa, que era el alcaide de Medina-Sidonia, siendo todos ellos los representantes del duque en esa zona. Cfr. Fernández Gómez (1995), pp. 218-219.
  10. En 1982 Faustino Menéndez Pidal de Navascués apuntó la «posibilidad» de que el duque Enrique de Castilla hubiera usado el escudo cuartelado en aspa o en frange de Castilla y León. Cfr. Menéndez Pidal de Navascués (1982), pp. 172-173. Pero en el año 2011, y en su nueva edición de la obra Heráldica de la Casa Real de León y de Castilla, ya lo considera casi una certeza total. Cfr. Menéndez Pidal de Navascués (2011), pp. 275-276.
  11. El escudo de armas de los Sousas de Córdoba consiste en un escudo «en frange con Castilla en el jefe y en la punta, y las reales quinas portuguesas en los flancos, emblema derivado de la armería del rey don Alfonso III de Portugal». Y en la Descripción genealógica y historial de la ilustre Casa de Sousa, que fue escrita en 1770, también se afirma que las armas de los Sousas de Córdoba consisten en un escudo «en frange o aspa, poniendo un castillo en la parte alta y otro en la baja y a cada lado un escudete de quinas azules en campo de plata sin la orla de los castillos del algarve, pero con la Corona y sin tymbre». Cfr. Garijo Pérez (2004), pp. 287-288.
  12. En el Cronicón Cordubense de Fernando de Salmerón se afirma explícitamente que «En el anuo de Nuestro Seunor de mill e quatrocientos e quatro annos murío el duque de Cabra», aunque Derek William Lomax advirtió equivocadamente que por ostentar Enrique de Castilla los títulos de conde de Cabra y duque de Medina Sidonia, el cronista Salmerón se refiere a él como «duque de Cabra», que según Lomax era un título inexistente por aquel entonces. Cfr. Lomax (1982), p. 639. Y conviene señalar que Rafael Ramírez de Arellano afirmó que el duque Enrique falleció el día 14 de noviembre de 1404, ya que en esa fecha el cabildo catedralicio cordobés (aunque en realidad fue el 15 de noviembre) otorgó su consentimiento para que fuera sepultado en la catedral cordobesa. Cfr. Ramírez de Arellano (1921), p. 63.
  13. El 13 de junio de 1440 Juana de Sousa cedió al cabildo catedralicio cordobés una tenería que producía 5000 maravedís de renta y veinte pares de gallinas anuales para reemplazar la suma que anteriormente había otorgado al cabildo procedente de sus tres aceñas de Écija. Cfr. Nieto Cumplido (1979), p. 209.
  14. Rafael Ramírez de Arellano señaló que el día 14 de noviembre de 1442, y estando reunido el cabildo catedralicio cordobés, el racionero Diego Sánchez informó a sus componentes de la muerte de Juana de Sousa y les entregó «los vestimentos que dejó la difunta», según consta en el Libro de Actas de la catedral cordobesa. Cfr. Ramírez de Arellano (1921), p. 64.
  15. Hay constancia de que Juana de Sousa donó al cabildo catedralicio cordobés una arqueta-relicario de plata y adornada con esmaltes, desaparecida en la actualidad, que contenía «un canuto de plata con el espina de Ntro. Señor y otras muchas reliquias». Cfr. VV.AA. (2006), p. 615.
  16. En su testamento, Juana de Sousa mencionó a un individuo que se hacía llamar Juan Enríquez siendo su apellido verdadero el de Rodríguez, y declaró que dicho individuo era hijo de Juan Alfonso y de María González de Bregón y no hijo o nieto del duque Enrique de Castilla, su hijo. Y conviene señalar que dicho individuo había vivido en casa de Juana de Sousa en calidad de huésped. Cfr. Garijo Pérez (2004), p. 281.
  17. Para más información sobre el testamento otorgado por Juana de Sousa el día 12 de mayo de 1442, véase el artículo Casa del hijo del Rey Don Enrique II, que fue publicado en 1962 por Miguel Muñoz Vázquez en el Boletín de la Real Academia de Córdoba, de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes.
  18. En la capilla de la Mezquita-catedral de Córdoba donde estaba sepultado Vasco Alfonso de Sousa, el abuelo materno de Enrique de Castilla, estaba colocada una lápida donde se mencionaba explícitamente que su nieto Enrique yacía «en una tunba dor/ada debaxo del arco dorado que está/en la Capilla de a/ltar mayor». Cfr. Jordano Barbudo (2002), p. 158.
  19. El día 15 de noviembre de 1404 el cabildo catedralicio cordobés expidió un documento por el que entregaba a Juana de Sousa, como lugar de enterramiento para su hijo Enrique, una sepultura situada entre la capilla de los Obispos y el altar mayor de catedral cordobesa, como señaló Nieto Cumplido. Cfr. Nieto Cumplido (1979), p. 209. Y el mencionado documento del 15 de noviembre, que fue publicado íntegramente por Rafael Ramírez de Arellano, dice así: «Sepan cuantos esta carta vieren, como nos el deán y cabildo de la Iglesia Cathedral de la muy noble ciudad de Córdoba, conociendo como D. Enrique, duque de Medina Sidonia fijo del muy noble Rei don Enrique, a los quales Dios dé santo Paraíso; e vos doña Joana de Sousa madre del dicho señor duque, vecina a la collación de Santa María, que estades presente, nos avedes fecho muchas buenas obras, e otro sí mercedes, que avemos recebido del dicho señor duque, e de los señores reies onde el viene. E oomo vos siempre amastes, e honrrastes a la dicha iglesia; e entiendo, que lo queredes llevar adelante, e como por esto la iglesia es honrrada siempre, e dotada con los enterramientos de los tales, como el dicho señor duque. E otro si por quanto nos lo envió a mandar e rogar N. señor el Rei D. Enrrique que Dios mantenga, e el Infante D. Fernando su hermano e agora por estas razones susodichas, e entendiendo, que facemos servicio al dicho señor Rei, e al dicho señor Infante, e honrra al cuerpo del dicho señor duque; otorgamos e conocemos a vos la dicha doña Joana que estáis presente madre del dicho señor duque, un lugar para sepultura, que es entre la capilla de los obispos, e el altar mayor en derecho del arco que está y en medio que ha linderos de una parte el marmol, do se pone el sirio Pascual, e de la otra la capilla que dicen de los Obispos. E este lugar vos damos para que se ponga el dicho cuerpo del dicho señor duque, que la junten con los marmoles, e postes del dicho arco. E esta donación, facemos por nuestra propia buena voluntad, donación pura, buena e limpia, irrebocable, fecha y dada luego de mano e valedera para siempre jamás. E otorgárnosla ante el notario e testigos iuso escriptos. Fecha esta carta en la muy noble ciudad de Cordoba a quince dias del mes de noviembre del nascimiento de N. Salvador JesuXpto de mill e quatro cientos e quatro años... e yo Blasco Ximenez de Segovia clérigo notario publico». Cfr. Ramírez de Arellano (1921), p. 64.
  20. En el siglo XVI, Ambrosio de Morales atestiguó que los restos del duque descansaban en una «riquísima tumba de madera, muy grande, y toda labrada de talla y muy dorada», y también que la tumba estaba en la capilla mayor y que la retiraron de allí porque parecía tener «tanto o más honrado enterramiento» que los reyes Fernando IV y Alfonso XI de Castilla, cuyos restos mortales descansaban en esos momentos en la Capilla Real de la Mezquita-catedral de Córdoba. Y Parcerisa también añadió que: «no debía este cuerpo (el del duque Enrique) estar muy bien guardado, porque se contaba que habían hurtado algunas sortijas que tenía en los dedos. Siendo esto así, no debe estrañarse que el arca haya sido objeto de mayores profanaciones, y que este precioso objeto de escultura, tan interesante para la historia del arte nacional, haya completamente desaparecido...». Cfr. Parcerisa (1855), p. 256. Pero Miguel Muñoz Vázquez indicó que, a pesar de lo afirmado por Ambrosio de Morales, el traslado del arca con los restos mortales del duque sólo fue provisional y con motivo de una visita del rey Felipe II de España a Córdoba, ya que cuando el rey abandonó la ciudad el arca sepulcral del duque volvió a ser colocada en la capilla mayor de la catedral cordobesa. Cfr. Muñoz Vázquez (1962), p. 119.
  21. No obstante, Ignacio Garijo Pérez afirmó que fue en el año 1600 cuando los restos mortales del duque Enrique fueron trasladados a su actual emplazamiento, que se halla según la descripción del autor en «un hueco de la nave exterior de la capilla mayor, hacia el lado de la Epístola». Cfr. Garijo Pérez (2004), p. 281. Y Miguel Muñoz Vázquez también aseguró que en 1600 los restos del duque fueron trasladados a «una sepultura bajo tierra» en el lado de la Epístola de la nave exterior de la capilla mayor y que fueron colocados bajo una lápida en la que podía leerse el siguiente epitafio: «Aquí yace Don Enrique, Duque de Medina Sidonia, Conde de Cabra, Señor de Alcalá y Morón, hijo del muy alto Rey Don Enrique el Magnífico». Cfr. Muñoz Vázquez (1962), p. 119. Sin embargo, en el tomo noveno de la obra Recuerdos y bellezas de España se afirma que fue a mediados del siglo XVI cuando el arca que contenía los restos mortales del duque Enrique de Castilla fue sacada de la capilla mayor de la catedral cordobesa. Cfr. Parcerisa (1855), p. 255.
  22. El arquitecto Ricardo Velázquez Bosco, que dirigió las obras de restauración de la Mezquita-catedral de Córdoba a principios del siglo XX, depositó los restos del duque Enrique en el lado exterior de la capilla mayor y frente a la capilla de los Sousas. Y Rafael Ramírez de Arellano señaló que fue una «lástima» que no se aprovechase la ocasión para extraer del féretro los tejidos en los que estaba envuelto el cadáver, que estaba «en parte momificado y en parte en esqueleto», y que consistían en «una especie de túnica a listas de unos diez centímetros de anchas, la una de seda roja y la otra de hilo calado a manera de encaje». Cfr. Ramírez de Arellano (1921), p. 64.
  23. Miguel Salcedo Hierro, en su obra La Mezquita, Catedral de Córdoba, también mencionó que la tumba del duque Enrique se encuentra en la actualidad en el crucero de la Mezquita-catedral. Cfr. Salcedo Hierro (2000), p. 374.
  24. Morales Gajete afirmó que entrevistó a un vigilante de seguridad que le contó que en una ocasión, a las tres de la madrugada, comenzó a notar que «algo» o «alguien» le seguía muy de cerca mientras hacía su ronda habitual nocturna por la Mezquita-catedral. Y en otra ocasión un joven vigilante de seguridad que se encontraba leyendo un libro en un banco de la capilla del Sagrario pudo observar cómo una sombra aparecía de la nada y caminaba frente a él durante unos segundos, aunque momentos después desapareció. Cfr. Morales Gajete (2015), p. 185.

Referencias

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Enlaces externos

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  • Palacio del duque de Medina Sidonia en Córdoba
  •   Datos: Q5833957
  •   Multimedia: Henry of Castile (1378-1404)

enrique, castilla, 1377, 1404, enrique, castilla, conocido, también, como, enrique, enríquez, castillo, cabra, 1377, córdoba, septiembre, noviembre, 1404, noble, castellano, hijo, ilegítimo, enrique, castilla, dama, cordobesa, juana, sousa, enrique, castilladu. Enrique de Castilla conocido tambien como Enrique Enriquez 2 Castillo de Cabra 3 1377 4 Cordoba 14 de septiembre 5 6 7 o de noviembre 8 9 de 1404 fue un noble castellano e hijo ilegitimo del rey Enrique II de Castilla 4 y de la dama cordobesa Juana de Sousa 10 8 11 a Enrique de CastillaDuque de Medina Sidonia y de CabraEscudo de armas del duque Enrique de Castilla Informacion personalOtros titulosSenor de Moron y de Alcala de los Gazules 1 Nacimiento1377Cabra Corona de CastillaFallecimiento1404Cordoba Corona de CastillaEntierroMezquita catedral de CordobaFamiliaDinastiaCasa de TrastamaraPadreEnrique II de CastillaMadreJuana de Sousa editar datos en Wikidata Fue I duque de Cabra y de Medina Sidonia y senor de Moron Alcala de los Gazules 1 Portillo y Aranda de Duero 2 aunque la mayoria de los historiadores afirman erroneamente que fue conde de Cabra y duque de Medina Sidonia 12 13 y senor de Moron y de Alcala la Real 14 15 Enrique de Castilla vivio junto a su madre en un palacio mudejar del siglo XIV conocido actualmente como el Palacio del Duque de Medina Sidonia localizado en el numero 13 de la Calle Rey Heredia de Cordoba Espana b Segun algunos autores el duque Enrique es un personaje brumoso al que tanto la historiografia como la produccion genealogica han prestado muy escasa atencion y han lamentado ademas el hecho de que falleciera sin dejar descendientes ya que por su condicion de miembro aunque bastardo de la familia real castellana habrian formado parte de la mas elevada Grandeza de Espana 12 Y otros autores han destacado tambien que el amplio conjunto de senorios que llego a poseer fue uno de los ultimos grandes dominios de persona real que se formarian en Andalucia en la Baja Edad Media 4 Indice 1 Origenes familiares 2 Biografia 2 1 Juventud y patrimonio 2 2 El escudo de armas del duque Enrique de Castilla 2 3 La muerte del duque 3 Sepultura 4 Leyenda del fantasma de su madre 5 Notas 6 Referencias 7 Bibliografia 8 Enlaces externosOrigenes familiares EditarPor parte paterna era nieto del rey Alfonso XI de Castilla y de la dama Leonor de Guzman y por parte materna lo era de Vasco Alfonso de Sousa que fue senor de Castillo Anzur y de Almenara y tambien alcalde mayor y justicia mayor de Cordoba y de Maria Garcia Carrillo 16 17 18 19 Biografia EditarJuventud y patrimonio Editar Retrato imaginario del rey Enrique II de Castilla padre del duque Enrique de Castilla Jose Maria Rodriguez de Losada Ayuntamiento de Leon Enrique de Castilla nacio en 1377 20 21 4 y algunos autores suponen que probablemente nacio en septiembre de ese ano en el castillo de Cabra ya que es posible que el rey Enrique II pasara alli su luna de miel con Juana de Sousa y que la trasladara alli para mantenerla lejos de su familia como ya habia hecho su padre Alfonso XI con su amante Leonor de Guzman en el mismo lugar 3 En opinion del eclesiastico e historiador Manuel Nieto Cumplido es casi seguro que sus padres se conocieron en Cordoba y cuando ya Enrique II habia subido al trono lo que ocurrio en 1369 Hay constancia de que Enrique II estuvo en Cordoba en 1370 1371 1374 1375 1376 1377 y 1378 siendo las visitas de 1375 y 1377 especialmente prolongadas 22 pero Nieto Cumplido aseguro que es muy probable que los padres de Enrique de Castilla iniciaran su relacion amorosa en 1377 ya que esa fecha coincide con una donacion que el monarca castellano hizo a favor de Juana de Sousa y de su madre siendo ademas probable que Juana tuviera unos veinticuatro 23 o veinticinco anos de edad en esos momentos 24 Ademas Juana de Sousa debia de ser segun algunos historiadores una mujer de extraordinaria belleza y simpatia aunque lamentablemente no se ha conservado ningun retrato suyo ni tampoco ninguna descripcion de su persona 24 Existen multiples documentos en los que Juana de Sousa declaro explicitamente que era la madre del duque don Enrique 25 como por ejemplo en uno otorgado el dia 10 de mayo de 1391 26 Y en el testamento del canonigo y maestrescuela Lope Gutierrez de los Rios que era sobrino de Juana de Sousa el eclesiastico aludio a su tia designandola nuevamente como madre del duque don Enrique c La mayoria de los historiadores afirman erroneamente que Enrique II concedio a su hijo Enrique el ducado de Medina Sidonia y el condado de Cabra 10 13 junto con los senorios de Moron y de Alcala la Real 14 pero Manuel Nieto Cumplido demostro que en realidad el titulo ostentado por Enrique de Castilla fue el de duque de Cabra ya que asi consta en varios documentos de la epoca d y tambien en el poema 530 del Cancionero de Baena 27 Que se fisieron los emperadores papas e rreyes grandes perlados El Duque de Cabra e el Almirante e otros muy grandes asas de Castilla agora Ruy Dies que puso mansilla su muerte a las gentes en tal estante que la su grant fama fasta en leuante sonaua en proeza e en toda bondat Las villas de Cabra y de Medina Sidonia habian pertenecido a Leonor de Guzman que fue la amante del rey Alfonso XI de Castilla y la abuela materna del duque Enrique 10 20 Y en el testamento que Enrique II de Castilla otorgo el dia 29 de mayo de 1374 e el monarca cedia el senorio de Medina Sidonia 1 que habia pertenecido anteriormente a Leonor de Guzman 10 28 a su hijo Fadrique de Castilla que llegaria a ser duque de Benavente pero posteriormente el monarca modifico sus ultimas voluntades y lo entrego a Enrique de Castilla que era el hijo que habia tenido con Juana de Sousa 1 Y existen ademas multiples documentos que prueban irrefutablemente que Enrique de Castilla ostento el titulo de duque de Medina Sidonia f Vista del municipio de Medina Sidonia Tambien esta documentado que Enrique de Castilla fue senor de la villa de Aranda de Duero y posiblemente como senalo Jesus Peribanez Otero por concesion de su hermanastro el rey Juan I de Castilla anadiendo ademas dicho autor que el duque Enrique retuvo el senorio de Aranda de Duero hasta su muerte ocurrida en 1404 g La tradicion popular asegura que la relacion de Enrique II de Castilla con Juana de Sousa se prolongo durante diez anos y que pasado ese tiempo el monarca comenzo a interesarse por otra mujer lo que fue considerado por Juana de Sousa como una terrible traicion 29 Sin embargo Enrique II se mostro muy generoso con su hijo Enrique y ademas de cederle los senorios de Medina Sidonia y de Cabra tambien le hizo entrega de un magnifico palacio mudejar que se encuentra en el numero 13 de la calle Rey Heredia de Cordoba 30 aunque en realidad dicho palacio pertenecia a la familia de Juana de Sousa 31 Desde entonces dicho palacio cordobes se conoce con el nombre de Palacio del Duque de Medina Sidonia Y de nuevo segun la tradicion Enrique II intento que su antigua amante se casara con algun hombre adinerado que le asegurara una comoda existencia pero Juana de Sousa se nego alegando que el unico amor de su vida habia sido el monarca castellano por lo que durante el resto de su vida la mencionada senora vivio dedicada por entero a su hijo Enrique 32 Durante la minoria de edad del duque Enrique de Castilla su madre fue la encargada de gobernar sus senorios como el de Medina Sidonia y hay constancia de que ella mantuvo durante ese periodo unas relaciones conflictivas con el concejo de la mencionada villa segun advirtio la historiadora Esther Alegre Carvajal en su tesis doctoral titulada Las villas ducales como tipologia urbana el ejemplo de la villa ducal de Pastrana 21 Enrique de Castilla poseia un magnifico palacio mudejar en Cordoba b 33 que fue la ciudad donde residio habitualmente 20 que se encuentra en el numero 13 de la calle Rey Heredia 34 Dicha calle fue conocida hasta 1861 33 como calle del Duque 35 debido precisamente a que el propio Enrique de Castilla Primer Duque de Medina Sidonia ostentaba alli su palacio y residencia 36 Palacio del duque de Medina Sidonia situado en el numero 13 de la calle Rey Heredia de la ciudad de Cordoba El mencionado palacio anteriormente habia pertenecido a Vasco Alfonso de Sousa posteriormente a su esposa Maria Garcia Carrillo y desde agosto de 1397 a Juana de Sousa hija de los anteriores y madre del duque Enrique de Castilla 31 Tras la muerte de Juana dicho Palacio del Duque de Medina Sidonia paso por voluntad testamentaria de la dama Juana de Sousa a manos de su sobrino Juan Alfonso de Sousa 37 que era miembro de la rama principal o troncal de la familia Sousa 33 Despues el inmueble quedo en poder de los marqueses del Carpio 35 y posteriormente de la familia Armenta h A lo largo de su vida el duque Enrique confirmo algunos privilegios y hay constancia de que fue uno de los confirmantes del privilegio otorgado el dia 15 de diciembre de 1393 durante las Cortes de Madrid que aludia a las libertades de Toledo y tambien otro privilegio otorgado en 1401 en el que confirmo como don Enrique tio del Rey Duque de Medina Sidonia Senor de Alcala habiendo sido ambos documentos expedidos durante el reinado de Enrique III de Castilla que era sobrino carnal del duque Enrique 7 El historiador Ignacio Garijo Perez llamo la atencion sobre el hecho de que un individuo con la categoria social que poseia el duque Enrique de Castilla que por su posicion podria haber llegado a ser el tronco de una destacada casa nobiliaria falleciera a los veintisiete anos de edad sin haber contraido matrimonio y sin haber dejado descendencia 7 Y por causa de lo anterior y por el hecho de que apenas tuviera participacion en la vida politica y cortesana de la epoca al contrario que sus hermanastros Alfonso Enriquez y Fadrique de Castilla Garijo Perez afirmo que es muy probable que Enrique de Castilla padeciera alguna clase de enfermedad o dolencia que lo incapacitara 7 Tambien es posible como senalaron Miguel Angel Ladero Quesada y Manuel Gonzalez Jimenez que antes de la muerte del duque Enrique las protestas de los vecinos de Medina Sidonia y de Alcala de los Gazules hubieran ocasionado el fin del senorio que el duque ejercia en ambos lugares ya que ambos autores se basaron en un fragmento de las actas capitulares de Jerez de la Frontera que dice asi Los de Alcala enviaron a decir al cabildo desta cibdad en miercoles dos de abril de MCCCCIII anos y asi mismo los de Medina Sidonia que enviaron sus cartas al rey nuestro senor que Medina y Alcala sean reales y de su corona que non las de a otra persona 6 4 El unico testimonio conocido de la relacion que el duque mantuvo con su villa de Alcala de los Gazules es una sentencia pronunciada por el propio duque en 1395 sobre el pleito que mantenian por motivos de terminos sus villas de Medina Sidonia y de Alcala de los Gazules ya que los procuradores de esta ultima villa Ruy Martinez y Fernan Sanchez habian denunciado a los habitantes de Medina Sidonia por haber invadido con sus ganados unos prados situados en las cercanias del rio Alamo 4 Y en el documento donde se consigno la sentencia pronunciada acerca del mencionado pleito consta que el duque solicito a las dos villas que presentaran los antiguos padrones de amojonamiento y que al considerarse que el que presento el procurador de Medina Sidonia habia sido falseado el duque resolvio el pleito a favor de los vecinos de Alcala de los Gazules i Y el historiador Marcos Fernandez Gomez tambien subrayo el hecho de que a pesar de que el lugar de residencia habitual del duque era la ciudad de Cordoba la sentencia fue pronunciada en Alcala de los Gazules 38 Vista del municipio de Alcala de los Gazules El unico documento conocido sobre la administracion del duque en su villa de Medina Sidonia data de 1397 y en el el duque establecio que algunos tipos de manantiales pertenecian a su senorio al igual que el agua morisca y concedio algunas mercedes para el uso de abrevaderos que contribuyeron a aumentar el desarrollo de la ganaderia del propio duque 39 Y por otra parte tambien hay constancia de que el duque establecio un monopolio sobre el jabon en Medina Sidonia lo que quebrantaba el privilegio que tenian sus habitantes de elaborarlo para su uso privado y de que el duque continuo cobrando en dicha poblacion el impuesto del herbaje a pesar de que su hermanastro el rey Juan I de Castilla lo habia prohibido en 1379 6 Y aunque se desconoce casi todo lo concerniente a la administracion de su patrimonio siendo ya mayor de edad si hay constancia de que el estilo de gobierno del duque Enrique contribuyo al igual que en otros senorios de la epoca a reducir las libertades de los concejos y a imponer o mantener cargas que los vecinos de Medina Sidonia consideraron excesivas ya que es muy significativo en opinion de Ladero Quesada y de Gonzalez Jimenez que los dos unicos testimonios que se conocen sobre su administracion esten relacionados con asuntos ganaderos y derechos de pastos 20 El escudo de armas del duque Enrique de Castilla Editar Escudo de armas de los Sousas de Cordoba El escudo de armas del duque Enrique de Castilla segun el heraldista Faustino Menendez Pidal de Navascues consistio en un escudo a frange en lo alto y bajo los castillos y en los lados los leones es decir un cuartelado en aspa de Castilla y de Leon aunque otros autores afirmaron erroneamente que dicho escudo de armas fue usado por el infante Enrique de Castilla el Senador que fue hijo de Fernando III de Castilla pero Menendez Pidal de Navascues demostro la falsedad de dicha afirmacion basandose en el sello personal del infante Enrique y en los escudos de armas empleados por sus descendientes los Enriquez de Sevilla 13 40 j Hay constancia de que Ines Enriquez de Castilla que fue abadesa del convento de Santa Clara la Real de Toledo e hija ilegitima de Enrique II de Castilla y tambien Fernando Alfonso de Castilla que fue hijo ilegitimo a su vez de Alfonso XI de Castilla usaron un escudo en frange similar al empleado por Enrique de Castilla aunque en el caso de Ines Enriquez esta comenzo a usarlo a partir de 1404 y tras la muerte de su hermanastro el duque de Medina Sidonia 41 42 Ademas en el Museo Arqueologico Nacional de Madrid se conserva un pinjante con el escudo de armas de Enrique de Castilla aunque se desconoce su lugar de origen y Menendez Pidal de Navascues considero altamente improbable que dicho pinjante hubiera pertenecido a Fernando de Castilla el hijo ilegitimo de Alfonso XI por lo que en su opinion debio pertenecer casi con total seguridad al duque Enrique de Castilla 41 Por otra parte Ignacio Garijo Perez apunto en 2004 la posibilidad de que el escudo de armas de Enrique de Castilla se basara en el empleado por sus antepasados maternos los Sousas k aunque dicho autor anadio que hasta que no se conozcan con certeza los escudos utilizados por Vasco Alfonso de Sousa el abuelo de Enrique o por su madre Juana de Sousa o por su tio Diego Alfonso de Sousa su teoria consistira simplemente en una mera hipotesis ya que bien pudo ser al contrario y ser los Sousas los que tras la muerte del duque Enrique decidieran adoptar en recuerdo de su ilustrisimo familiar el modelo heraldico empleado por aquel 43 La muerte del duque Editar Vista de la torre de la Calahorra y del puente romano de Cordoba Enrique de Castilla fallecio a los veintisiete anos de edad el dia 14 de septiembre 5 24 6 7 o de noviembre 8 9 de 1404 44 11 l en su palacio del Duque de Medina Sidonia de la calle Rey Heredia de la ciudad de Cordoba 5 7 Y tras la muerte del duque todos sus senorios volvieron a pertenecer al realengo por haber fallecido sin dejar herederos como advirtio Esther Alegre Carvajal 21 La madre del duque Enrique establecio doce aniversarios por el alma de su hijo 11 45 y fundo en el altar de Santiago de la Mezquita catedral de Cordoba junto al que fue sepultado una capellania dotada de vestimentos caliz de plata y marmol con 600 maravedis anuales para el capellan al tiempo que lego al cabildo catedralicio cordobes una suma de 1200 maravedis a fin de que se celebraran doce memorias anuales en memoria de su hijo y cada una todos los meses para siempre jamas 5 En 1404 y a fin de completar una suma de 2020 maravedis como dote por la sepultura de su hijo Juana de Sousa habia obligado tres ruedas de acena en la localidad sevillana de Ecija 46 llamadas Chequilla Pajuela y Nueva 27 Y en 1414 la suma total de la renta anual por los oficios religiosos que Juana de Sousa habia dotado en memoria de su hijo ascendia a 1420 maravedis que provenian de unas tenerias situadas en la collacion de San Nicolas de la Ajerquia de Cordoba y que en 1440 entrego definitivamente al cabildo catedralicio cordobes 46 m Juana de Sousa obtuvo permiso del cabildo catedralicio cordobes para vivir en la propia Mezquita catedral y en unas habitaciones que en siglos pasados fueron conocidas como Oficinas de Cabezas de rentas 47 36 45 y alli vivio hasta el dia de su muerte ocurrida segun Ramirez de Arellano el dia 14 de noviembre de 1442 36 aunque Nieto Cumplido aseguro que debio ocurrir poco antes del dia 3 de julio de 1442 y cuando tenia aproximadamente ochenta y nueve anos de edad ya que en esa fecha el cabildo catedralicio cordobes vendio el pano que habia cubierto las andas de dona Juana 27 n Ramirez de Arellano indico que Juana de Sousa 36 cuyo cadaver recibio sepultura en la capilla de los Sousas de la catedral cordobesa 45 lego al cabildo catedralicio cordobes sus joyas o y unas obligaciones sobre las tenerias para pago de los aniversarios y memorias de su hijo y suyos 36 y Nieto Cumplido anadio que en el testamento que Juana otorgo p el dia 12 de mayo de 1442 manifestaba su deseo de ser enterrada junto a su hijo Enrique y legaba sus bienes a su hermana Leonor de Sousa y a sus sobrinos 27 comenzando dicho testamento con el siguiente preambulo 25 q Sepan quantos esta carta vieren como yo dona Juana de Sousa madre del duque don Enrique que Dios de su santo parayso vecina y moradora que soy en la colacion de Santa Maria de la muy noble ciudad de Cordova estando enferma del cuerpo etc Sepultura Editar Tumba del duque Enrique de Castilla en la Mezquita catedral de Cordoba Enrique de Castilla fue sepultado en un arco dorado de la primitiva capilla mayor de la Mezquita catedral de Cordoba 48 espacio que en la actualidad ocupa la capilla de Villaviciosa 5 36 y en su tumba que era dorada 5 48 r y de madera 5 7 posiblemente estarian colocados como senalo Menendez Pidal de Navascues los escudos de armas del difunto 13 Y conviene senalar que la tumba se encontraba situada junto al altar del apostol Santiago 49 y tambien que en el mismo templo fueron sepultados la madre de Enrique de Castilla 50 sus abuelos maternos y su abuelo paterno el rey Alfonso XI de Castilla 51 La tumba del duque Enrique estuvo colocada en un primer momento entre el altar mayor y la capilla de los Obispos a peticion del rey Enrique III de Castilla y del infante Fernando el de Antequera 5 27 segun consta en la Donacion del dean y cabildo de la catedral de Cordoba para que sea inhumado don Enrique duque de Medina Sidonia que es un documento otorgado en Cordoba el dia 15 de noviembre de 1404 52 s Y los restos mortales del duque permanecieron durante varios siglos t en la capilla de Villaviciosa de la catedral cordobesa y alli permanecieron hasta principios del siglo XX cuando con motivo de unas obras de restauracion fue trasladado a una atarazana de la catedral 36 Desde principios del siglo XX u y por iniciativa del arquitecto Ricardo Velazquez Bosco v los restos mortales del duque reposan bajo una sencilla lapida y sin emblemas colocada junto al muro del lado del Evangelio 13 de la capilla mayor de la Mezquita catedral de Cordoba en la que esta esculpido el siguiente epitafio 1 53 7 54 Aqui jace Don Enrrique de Castilla Duque de Medina Sidonia Conde de Cabra Senor de Alcala y Moron Hijo del mui alto rei D Enrique 2º el Magnifico La lapida es de marmol azulado y probablemente fue realizada en el siglo XVII aunque Nieto Cumplido preciso que la tumba se encuentra junto a la cabecera del crucero de la catedral cordobesa w y al lado izquierdo del altar mayor 26 Leyenda del fantasma de su madre Editar Interior de la Mezquita catedral de Cordoba Segun la tradicion popular la muerte de Enrique de Castilla dejo a su madre sola y desamparada y al borde de la locura ya que incluso llego a permanecer varios dias encerrada a solas con el cadaver de su hijo 55 Ademas la desconsolada madre solicito al cabildo catedralicio cordobes que le permitieran instalarse en una habitacion dentro del propio templo para estar siempre cerca de la tumba de su hijo a lo que accedio el cabildo y segun la tradicion ya nunca abandono el edificio y vivio alli durante el resto de su vida 53 Y el legendario relato tambien afirma que por las noches cuando la Mezquita catedral permanecia cerrada al publico Juana de Sousa acostumbraba a pasear entre las columnas sin rumbo definido 53 En la actualidad existe la creencia popular de que el fantasma de Juana de Sousa continua visitando la tumba de su hijo cada noche y asi lo consigno Jose Manuel Morales Gajete en su obra Enigmas y misterios de Cordoba ya que varios vigilantes de seguridad nocturnos han declarado haber sentido x la presencia del mencionado fantasma 56 Son muchos los vigilantes de seguridad que cuando se marchan los turistas y se apagan las luces aseguran haber contemplado toda suerte de sombras extranas luminarias y sobre todo la figura de una dama con vestido largo y vaporoso que cada noche surge entre las columnas pasea por las capillas a diez centimetros sobre el suelo y tras unos segundos rodea el Altar Mayor y se desvanece justo sobre la antigua y desgastada lapida gris de Enrique de Castilla y Sousa Sera el alma en pena de dona Juana que a dia de hoy continua buscando a su hijo para despedirlo con un afectuoso beso maternal Notas Editar Ricardo del Arco y Garay en su obra Sepulcros de la Casa Real de Castilla senalo erroneamente que la madre de Enrique de Castilla fue Beatriz Ponce de Leon que fue una de las amantes del rey Enrique II de Castilla Cfr Arco y Garay 1954 p 312 Y otros autores como Derek William Lomax tambien erraron al afirmar lo mismo Cfr Lomax 1982 p 639 a b Para mas informacion sobre el palacio que el duque Enrique poseia en la ciudad de Cordoba vease el articulo Casa del hijo del Rey Don Enrique II que fue publicado por Miguel Munoz Vazquez en 1962 en el Boletin de la Real Academia de Cordoba de Ciencias Bellas Letras y Nobles Artes Cfr Munoz Vazquez 1962 pp 109 134 El fragmento del testamento del canonigo Lope Gutierrez de los Rios que menciona a Juana de Sousa y a su hijo y que fue otorgado el dia 24 de junio de 1441 dice asi E mandamos e queremos que dona Juana de Sousa nuestra senora tia madre del duque don Enrique que Dios aya por quanto nos tenemos de ella cargo de muchas honras e buenas obras que de ella havemos rezevido de cada un dia sea despues de nuestros dias en tanto que ella vibiere usufructuaria de nuestro cortijo que dizen del Morillo Cfr Garijo Perez 2004 p 277 En un documento del 23 de junio de 1440 se menciona expresamente que Juana de Sousa era la madre del senor don Enrique duque de Cabra Y en otro del dia 3 de julio de 1442 vuelve Enrique a aparecer como duque de Cabra Cfr Nieto Cumplido 1979 pp 208 209 Y por ultimo en el Cronicon Cordubense de Fernando de Salmeron tambien se le otorga a Enrique de Castilla el mismo titulo Cfr Lomax 1982 p 639 El testamento otorgado por Enrique II de Castilla el dia 29 de mayo de 1374 aparece integramente publicado en el segundo tomo de la obra Cronicas de los reyes de Castilla Don Pedro Don Enrique II Don Juan I y Don Enrique III Cfr Lopez de Ayala 1780 pp 106 121 El rey Juan I de Castilla declaro en un documento del dia 6 de noviembre de 1379 que la villa de Medina Sidonia pertenecia a su hermanastro Enrique de Castilla y el dia 24 de abril de 1395 este ultimo aparece con el titulo de duque de Medina Sidonia pronunciando una sentencia acerca del pleito que mantenian sus villas de Medina Sidonia y de Alcala de los Gazules acerca de sus respectivos terminos Y el dia 23 de julio de 1397 Enrique de Castilla titulandose nuevamente duque de Medina Sidonia concedio a su vasallo Anton Gonzalez que era el escribano publico de Medina Sidonia derechos preferentes sobre dos abrevaderos de ganado Cfr Nieto Cumplido 1979 p 208 Existen tres documentos en los que el duque Enrique figura como senor de la villa de Aranda de Duero y en el primero de ellos que fue otorgado el dia 20 de febrero de 1392 y que es la confirmacion del Fuero de Ledigos el duque aparece entre los confirmantes como Don Enrique tio del Rey sennor de Alcala y de Aranda y de Cabra y de Portillo El segundo documento fue otorgado en Aranda de Duero el 30 de agosto de 1398 y el tercero que no ha podido ser localizado aunque es mencionado por algunos autores data de 1392 y es una carta de pago de 17000 maravedis que el duque Enrique tenia sobre las rentas de la villa haciendo ademas este ultimo documento referencia al aparato burocratico del duque en la mencionada localidad y a la red de clientes que poseia en dicho lugar Cfr Peribanez Otero 2010 p 9 En 1636 el arcediano Damian de Armenta realizo importantes reformas en el palacio y coloco en la fachada principal el escudo de armas de los Armenta que aun permanece en la actualidad Cfr Garijo Perez 2004 p 282 En la sentencia que el duque Enrique de Castilla pronuncio en 1395 tambien se reconocio el derecho que tenian los habitantes de Alcala de los Gazules para usar y aprovechar las tierras de pasto que tambien reclamaban los habitantes de Medina Sidonia aunque el duque se reservo la propiedad exclusiva de esos terrenos Y tambien consta en el documento de la sentencia que estuvieron presentes en calidad de testigos Juan Sanchez de Bivanco que era el alcalde mayor de los senorios del duque Gonzalo Garcia de Espinosa el alcaide dc Alcala de los Gazules Pero Benitez el antiguo alcaide de la mencionada villa y Juan Alfon de Sousa que era el alcaide de Medina Sidonia siendo todos ellos los representantes del duque en esa zona Cfr Fernandez Gomez 1995 pp 218 219 En 1982 Faustino Menendez Pidal de Navascues apunto la posibilidad de que el duque Enrique de Castilla hubiera usado el escudo cuartelado en aspa o en frange de Castilla y Leon Cfr Menendez Pidal de Navascues 1982 pp 172 173 Pero en el ano 2011 y en su nueva edicion de la obra Heraldica de la Casa Real de Leon y de Castilla ya lo considera casi una certeza total Cfr Menendez Pidal de Navascues 2011 pp 275 276 El escudo de armas de los Sousas de Cordoba consiste en un escudo en frange con Castilla en el jefe y en la punta y las reales quinas portuguesas en los flancos emblema derivado de la armeria del rey don Alfonso III de Portugal Y en la Descripcion genealogica y historial de la ilustre Casa de Sousa que fue escrita en 1770 tambien se afirma que las armas de los Sousas de Cordoba consisten en un escudo en frange o aspa poniendo un castillo en la parte alta y otro en la baja y a cada lado un escudete de quinas azules en campo de plata sin la orla de los castillos del algarve pero con la Corona y sin tymbre Cfr Garijo Perez 2004 pp 287 288 En el Cronicon Cordubense de Fernando de Salmeron se afirma explicitamente que En el anuo de Nuestro Seunor de mill e quatrocientos e quatro annos murio el duque de Cabra aunque Derek William Lomax advirtio equivocadamente que por ostentar Enrique de Castilla los titulos de conde de Cabra y duque de Medina Sidonia el cronista Salmeron se refiere a el como duque de Cabra que segun Lomax era un titulo inexistente por aquel entonces Cfr Lomax 1982 p 639 Y conviene senalar que Rafael Ramirez de Arellano afirmo que el duque Enrique fallecio el dia 14 de noviembre de 1404 ya que en esa fecha el cabildo catedralicio cordobes aunque en realidad fue el 15 de noviembre otorgo su consentimiento para que fuera sepultado en la catedral cordobesa Cfr Ramirez de Arellano 1921 p 63 El 13 de junio de 1440 Juana de Sousa cedio al cabildo catedralicio cordobes una teneria que producia 5000 maravedis de renta y veinte pares de gallinas anuales para reemplazar la suma que anteriormente habia otorgado al cabildo procedente de sus tres acenas de Ecija Cfr Nieto Cumplido 1979 p 209 Rafael Ramirez de Arellano senalo que el dia 14 de noviembre de 1442 y estando reunido el cabildo catedralicio cordobes el racionero Diego Sanchez informo a sus componentes de la muerte de Juana de Sousa y les entrego los vestimentos que dejo la difunta segun consta en el Libro de Actas de la catedral cordobesa Cfr Ramirez de Arellano 1921 p 64 Hay constancia de que Juana de Sousa dono al cabildo catedralicio cordobes una arqueta relicario de plata y adornada con esmaltes desaparecida en la actualidad que contenia un canuto de plata con el espina de Ntro Senor y otras muchas reliquias Cfr VV AA 2006 p 615 En su testamento Juana de Sousa menciono a un individuo que se hacia llamar Juan Enriquez siendo su apellido verdadero el de Rodriguez y declaro que dicho individuo era hijo de Juan Alfonso y de Maria Gonzalez de Bregon y no hijo o nieto del duque Enrique de Castilla su hijo Y conviene senalar que dicho individuo habia vivido en casa de Juana de Sousa en calidad de huesped Cfr Garijo Perez 2004 p 281 Para mas informacion sobre el testamento otorgado por Juana de Sousa el dia 12 de mayo de 1442 vease el articulo Casa del hijo del Rey Don Enrique II que fue publicado en 1962 por Miguel Munoz Vazquez en el Boletin de la Real Academia de Cordoba de Ciencias Bellas Letras y Nobles Artes En la capilla de la Mezquita catedral de Cordoba donde estaba sepultado Vasco Alfonso de Sousa el abuelo materno de Enrique de Castilla estaba colocada una lapida donde se mencionaba explicitamente que su nieto Enrique yacia en una tunba dor ada debaxo del arco dorado que esta en la Capilla de a ltar mayor Cfr Jordano Barbudo 2002 p 158 El dia 15 de noviembre de 1404 el cabildo catedralicio cordobes expidio un documento por el que entregaba a Juana de Sousa como lugar de enterramiento para su hijo Enrique una sepultura situada entre la capilla de los Obispos y el altar mayor de catedral cordobesa como senalo Nieto Cumplido Cfr Nieto Cumplido 1979 p 209 Y el mencionado documento del 15 de noviembre que fue publicado integramente por Rafael Ramirez de Arellano dice asi Sepan cuantos esta carta vieren como nos el dean y cabildo de la Iglesia Cathedral de la muy noble ciudad de Cordoba conociendo como D Enrique duque de Medina Sidonia fijo del muy noble Rei don Enrique a los quales Dios de santo Paraiso e vos dona Joana de Sousa madre del dicho senor duque vecina a la collacion de Santa Maria que estades presente nos avedes fecho muchas buenas obras e otro si mercedes que avemos recebido del dicho senor duque e de los senores reies onde el viene E oomo vos siempre amastes e honrrastes a la dicha iglesia e entiendo que lo queredes llevar adelante e como por esto la iglesia es honrrada siempre e dotada con los enterramientos de los tales como el dicho senor duque E otro si por quanto nos lo envio a mandar e rogar N senor el Rei D Enrrique que Dios mantenga e el Infante D Fernando su hermano e agora por estas razones susodichas e entendiendo que facemos servicio al dicho senor Rei e al dicho senor Infante e honrra al cuerpo del dicho senor duque otorgamos e conocemos a vos la dicha dona Joana que estais presente madre del dicho senor duque un lugar para sepultura que es entre la capilla de los obispos e el altar mayor en derecho del arco que esta y en medio que ha linderos de una parte el marmol do se pone el sirio Pascual e de la otra la capilla que dicen de los Obispos E este lugar vos damos para que se ponga el dicho cuerpo del dicho senor duque que la junten con los marmoles e postes del dicho arco E esta donacion facemos por nuestra propia buena voluntad donacion pura buena e limpia irrebocable fecha y dada luego de mano e valedera para siempre jamas E otorgarnosla ante el notario e testigos iuso escriptos Fecha esta carta en la muy noble ciudad de Cordoba a quince dias del mes de noviembre del nascimiento de N Salvador JesuXpto de mill e quatro cientos e quatro anos e yo Blasco Ximenez de Segovia clerigo notario publico Cfr Ramirez de Arellano 1921 p 64 En el siglo XVI Ambrosio de Morales atestiguo que los restos del duque descansaban en una riquisima tumba de madera muy grande y toda labrada de talla y muy dorada y tambien que la tumba estaba en la capilla mayor y que la retiraron de alli porque parecia tener tanto o mas honrado enterramiento que los reyes Fernando IV y Alfonso XI de Castilla cuyos restos mortales descansaban en esos momentos en la Capilla Real de la Mezquita catedral de Cordoba Y Parcerisa tambien anadio que no debia este cuerpo el del duque Enrique estar muy bien guardado porque se contaba que habian hurtado algunas sortijas que tenia en los dedos Siendo esto asi no debe estranarse que el arca haya sido objeto de mayores profanaciones y que este precioso objeto de escultura tan interesante para la historia del arte nacional haya completamente desaparecido Cfr Parcerisa 1855 p 256 Pero Miguel Munoz Vazquez indico que a pesar de lo afirmado por Ambrosio de Morales el traslado del arca con los restos mortales del duque solo fue provisional y con motivo de una visita del rey Felipe II de Espana a Cordoba ya que cuando el rey abandono la ciudad el arca sepulcral del duque volvio a ser colocada en la capilla mayor de la catedral cordobesa Cfr Munoz Vazquez 1962 p 119 No obstante Ignacio Garijo Perez afirmo que fue en el ano 1600 cuando los restos mortales del duque Enrique fueron trasladados a su actual emplazamiento que se halla segun la descripcion del autor en un hueco de la nave exterior de la capilla mayor hacia el lado de la Epistola Cfr Garijo Perez 2004 p 281 Y Miguel Munoz Vazquez tambien aseguro que en 1600 los restos del duque fueron trasladados a una sepultura bajo tierra en el lado de la Epistola de la nave exterior de la capilla mayor y que fueron colocados bajo una lapida en la que podia leerse el siguiente epitafio Aqui yace Don Enrique Duque de Medina Sidonia Conde de Cabra Senor de Alcala y Moron hijo del muy alto Rey Don Enrique el Magnifico Cfr Munoz Vazquez 1962 p 119 Sin embargo en el tomo noveno de la obra Recuerdos y bellezas de Espana se afirma que fue a mediados del siglo XVI cuando el arca que contenia los restos mortales del duque Enrique de Castilla fue sacada de la capilla mayor de la catedral cordobesa Cfr Parcerisa 1855 p 255 El arquitecto Ricardo Velazquez Bosco que dirigio las obras de restauracion de la Mezquita catedral de Cordoba a principios del siglo XX deposito los restos del duque Enrique en el lado exterior de la capilla mayor y frente a la capilla de los Sousas Y Rafael Ramirez de Arellano senalo que fue una lastima que no se aprovechase la ocasion para extraer del feretro los tejidos en los que estaba envuelto el cadaver que estaba en parte momificado y en parte en esqueleto y que consistian en una especie de tunica a listas de unos diez centimetros de anchas la una de seda roja y la otra de hilo calado a manera de encaje Cfr Ramirez de Arellano 1921 p 64 Miguel Salcedo Hierro en su obra La Mezquita Catedral de Cordoba tambien menciono que la tumba del duque Enrique se encuentra en la actualidad en el crucero de la Mezquita catedral Cfr Salcedo Hierro 2000 p 374 Morales Gajete afirmo que entrevisto a un vigilante de seguridad que le conto que en una ocasion a las tres de la madrugada comenzo a notar que algo o alguien le seguia muy de cerca mientras hacia su ronda habitual nocturna por la Mezquita catedral Y en otra ocasion un joven vigilante de seguridad que se encontraba leyendo un libro en un banco de la capilla del Sagrario pudo observar como una sombra aparecia de la nada y caminaba frente a el durante unos segundos aunque momentos despues desaparecio Cfr Morales Gajete 2015 p 185 Referencias Editar a b c d e Nieto Cumplido 1979 p 208 a b Peribanez Otero 2010 p 9 a b Munoz Vazquez 1962 p 116 a b c d e f Fernandez Gomez 1995 p 218 a b c d e f g h Munoz Vazquez 1962 p 118 a b c d Ladero Quesada y Gonzalez Jimenez 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121 Fernandez Gomez 1995 p 219 Ladero Quesada y Gonzalez Jimenez 1977 pp 219 220 Menendez Pidal de Navascues 1983 pp 307 311 a b Menendez Pidal de Navascues 2011 p 276 Menendez Pidal de Navascues 1983 pp 312 314 Garijo Perez 2004 pp 286 292 Gomez Bravo 1778 p 328 a b c Gomez Bravo 1778 p 329 a b Sanz Sancho 1989 p 1208 Parcerisa 1855 pp 255 256 a b Jordano Barbudo 2002 p 158 Nieto Cumplido 2007 p 451 Ruano y Ribadas 1779 p 47 Jordano Barbudo 2002 pp 157 158 Nogales Rincon 2010 p 770 a b c Morales Gajete 2015 p 185 Parcerisa 1855 p 256 Morales Gajete 2015 pp 184 185 Morales Gajete 2015 p 186 Bibliografia EditarAlegre Carvajal Esther 1999 Las villas ducales como tipologia urbana el ejemplo de la villa ducal de Pastrana Tesis doctoral dirigida por Victor Manuel Nieto Alcaide 1ª edicion Madrid UNED ISBN 84 362 4959 3 Arco y Garay Ricardo del 1954 Sepulcros de la Casa Real de Castilla Madrid Instituto Jeronimo Zurita CSIC OCLC 11366237 Fernandez Gomez Marcos 1995 La villa de Alcala de los 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Cordoba Datos Q5833957 Multimedia Henry of Castile 1378 1404 Obtenido de https es wikipedia org w index php title Enrique de Castilla 1377 1404 amp oldid 129946823, wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

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