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Asonada de Álzaga

Se conoce como asonada de Álzaga, ocurrida el 1 de enero de 1809, al intento de destituir al virrey del Río de la Plata, Santiago de Liniers, por parte de un grupo afín al Cabildo de Buenos Aires encabezado por uno de sus miembros, el alcalde Martín de Álzaga.

Santiago de Liniers, el virrey que se buscaba destituir.

Situación previa

Santiago de Liniers y Martín de Álzaga fueron los héroes de la Reconquista de Buenos Aires durante la primera de las invasiones inglesas al Virreinato del Río de la Plata acaecida en 1806. Al producirse el segundo ataque inglés, en 1807, Liniers reemplazó, por presión popular, como virrey a Rafael de Sobremonte, acusado de haber abandonado sus funciones en medio de la invasión. La victoria en la defensa contra la segunda invasión elevó su prestigio y fue confirmado en su cargo por orden del rey Carlos IV de España.

Francisco Javier de Elío, el gobernador de Montevideo, resistió su autoridad y aprovechó el hecho de que Liniers era francés para acusarlo de hacer complot con el Imperio Napoleónico, en guerra contra España por ese entonces. Elío organizó una Junta de Gobierno en Montevideo, que desconoció la autoridad del virrey.

En el mes de octubre de 1808 estuvo a punto de estallar una revolución contra Liniers, dirigida por el Cabildo de la capital virreinal: la excusa era que el hijo del virrey acababa de contraer matrimonio en el virreinato que gobernaba su padre, algo prohibido por las leyes españolas. Pero la absoluta negativa de la Real Audiencia a secundar el reclamo en su contra hizo abortar los planes de Álzaga y su partido.

La asonada

El primer intento

El 30 de diciembre, el Cabildo presentó una exigencia antipática al virrey, con la evidente intención de provocarlo: vetó el nombramiento de alférez real del joven Bernardino Rivadavia, candidato de Liniers a ese cargo, con comentarios hirientes contra la capacidad del mismo. La intención era usar su insistencia para acusarlo de despotismo. Al darse cuenta de que se le tendía una trampa, Liniers adoptó una actitud sumisa y firmó sin comentarios una orden en que se le pedía al mismo Cabildo que nombrara al nuevo alférez real. Eso desarmó el primer impulso revolucionario.

El 1 de enero del año 1809, los miembros del Cabildo se reunieron y propusieron una lista de miembros del nuevo cabildo, que debía asumir ese mismo día, seleccionando a sus miembros entre los más reconocidos enemigos del virrey. Al dirigirse al Fuerte de Buenos Aires para presentar esa lista para su aprobación, fueron apoyados por varios regimientos de milicias, todos de origen español, que ocuparon la Plaza de la Victoria. También reunieron una pequeña multitud de manifestantes, que protestaban contra la gestión de Liniers y exigían su renuncia.

Contra lo que esperaban, Liniers protestó durante algunos minutos en voz baja, y luego firmó los nombramientos. Por segunda vez, había cedido y logrado salvar con eso su cargo.

Simultáneamente, ingresaba por la puerta de atrás del fuerte un batallón del Regimiento de Patricios, cuyo comandante, Cornelio Saavedra, ordenó defender al virrey y apuntar sus cañones contra el edificio del Cabildo.

Los miembros del Cabildo volvieron a reunirse y decidieron deponer al virrey de todos modos. Pretendían reemplazarlo con una Junta de Gobierno, de la cual formaban parte solamente españoles peninsulares y dos criollos, Mariano Moreno y el síndico Julián de Leyva, que ejercerían como secretarios de la misma.

Segundo intento

Pasado el mediodía, una fuerte tormenta dispersó a los manifestantes, pero las tropas permanecieron en sus puestos, aunque trasladándose al reparo de los arcos de la Recova.

A media tarde, una gran comitiva se presentó en el Fuerte; de ella formaba parte el Cabildo en pleno, el obispo de la ciudad, Benito Lué y Riega, y los miembros de la Audiencia y del Consulado de Comercio de Buenos Aires. Todos exigían la renuncia de Liniers.

Además pidieron a Saavedra que retirara sus tropas. Viendo que el virrey no parecía ya dispuesto a resistir, el coronel de los Patricios retiró su regimiento por el medio de la Plaza, como en un desfile, saludado por las fuerzas militares rebeldes. Minutos más tarde, y sin esperar órdenes superiores, la mayor parte de los soldados de los batallones españoles se retiró a sus casas. Por su parte, Saavedra se dedicó a recorrer los cuarteles de los demás batallones.

Liniers se consideraba vencido, pero aún quiso controlar en algo los efectos de su caída, por lo que — apoyado por Lué — exigió el cumplimiento de las normativas que preveían el reemplazo de los virreyes por el militar más antiguo del virreinato. En este caso, se trataba del general Pascual Ruiz Huidobro. Sabiendo que su primer intento había fallado, pero considerándolo más manejable y menos prestigioso que Liniers, Álzaga terminó por unirse a esa exigencia.

Entonces sí, declaró Liniers que renunciaría, y se inició la redacción de un acta en que Liniers anunciaba su renuncia.

El fracaso

Pero antes de que el acta estuviera completada, se presentó nuevamente de improviso en el Fuerte el coronel Saavedra, comandante de Patricios, con los demás comandantes de regimientos y batallones formados por criollos. Para darle más espectacularidad a su entrada, Saavedra iba con la espada desenvainada y había reemplazado su sombrero por un pañuelo anudado.

Saavedra y los demás comandantes exigieron firmemente que se suspendiera el acto, ya que el grupo que presentaba la exigencia de renuncia no representaba al pueblo. Lué intervino, pidiendo a Saavedra que dejara las cosas como estaban, debido a que Liniers no era querido. Entonces Saavedra llevó a Liniers al balcón del Fuerte, donde fue aclamado por una importante cantidad de gente, convocada por el mismo Saavedra.

En ese mismo momento aparecieron en la plaza los Patricios, ocupándola y desplazando a las milicias partidarias del golpe. Hubo algunos disparos, que causaron algunos heridos, pero las milicias rebeldes evacuaron la plaza sin luchar.

Entonces Liniers ingresó nuevamente al salón en que estaban los capitulares y el obispo, y declaró firmemente que no pensaba renunciar. En un giro muy curioso, el acta que se estaba redactando, que comenzaba anunciando la renuncia de Liniers, terminó con la confirmación del mismo, con el general beneplácito de todos los presentes, incluidos los miembros del Cabildo.

Todos se retiraron a sus casas, excepto los miembros del Cabildo. Horas más tarde, entrada ya la noche, Liniers ordenó la libertad de los alcaldes y otras dignidades entrantes. Pero los cabildantes salientes, incluido Álzaga, permanecieron prisioneros.

Consecuencias

Al día siguiente, Álzaga y los demás líderes del movimiento fueron desterrados a Carmen de Patagones. La Audiencia inició un juicio contra ellos, por "independencia" (sic). Pero los dos secretarios nunca fueron molestados.

Los batallones de milicias urbanas sublevados — tercios de Miñones, de Gallegos y de Vizcaínos, incluyendo a los Cazadores Correntinos — fueron disueltos. Parte de las tropas correspondientes pasaron a otros cuerpos, pero los oficiales fueron dados de baja de forma definitiva. También se hallaron implicadas 4 compañías del 3° Batallón de Patricios al mando de José Domingo de Urién y algunos oficiales de los otros dos batallones del cuerpo, tales como Antonio José del Texo (un capitán del 1° batallón), Pedro Blanco y Tomás José Boyso. Urién fue destituido y a Texo se le inició juicio por intentar asesinar a Saavedra.[1]​ Los desterrados a Carmen de Patagones: Martín de Álzaga, Juan Antonio Santa Coloma, Olaguer Reynals, Francisco de Neyra y Arellano y Esteban Villanueva, fueron rescatados por Elío — quien seguía sin reconocer a Liniers y sostuvo la Junta de Montevideo — y trasladados a esa ciudad.

El Cabildo fue purgado de varios de sus miembros, y un nuevo grupo de dirigentes, ligados especialmente al jefe de los Patricios y a los demás jefes militares criollos, asumió el mando del mismo. No obstante, la mayor parte de ellos — a diferencia de Saavedra — no participarían en la Revolución.

Con la llegada de España del nuevo virrey, Baltasar Hidalgo de Cisneros, los cuestionamientos de los pobladores españoles al reemplazado Liniers quedaron en el olvido, y Cisneros indultó a los responsables de la Asonada.

Poco después tendría lugar la Revolución de Mayo, dirigida por criollos en lugar de españoles. Álzaga parece haber tenido alguna participación en la elección de los miembros de la Primera Junta, aunque no de forma visible. Varios de los partidarios de Álzaga tuvieron activa participación en la Revolución, aliados esta vez del grupo dirigido por Saavedra.

Uno de los vocales de la fallida junta, Juan Larrea, fue miembro de la Primera Junta. Uno de los dos secretarios, Mariano Moreno, fue secretario de la misma, mientras que el otro, Manuel Leyva, opuso los últimos obstáculos legales que debieron sortear los revolucionarios.

El principal beneficiario del fracaso de la Asonada fue Saavedra, a quien Liniers debía desde entonces su gobierno. De allí en adelante, ningún gobierno pudo actuar en Buenos Aires sin el apoyo de las milicias urbanas, por lo menos hasta la crisis de 1820. De hecho, fue la decisión de Saavedra la que desencadenó la Revolución de Mayo.

Interpretaciones

Desde Vicente Fidel López en adelante, la Asonada de Álzaga fue vista como una reacción absolutista, dirigida por españoles, para salvar el dominio español en el Virreinato. Muchos historiadores han repetido esa visión desde entonces. Entre ellos, Ricardo Levene, biógrafo de Mariano Moreno, no logró nunca conciliar esa visión con el panegírico de su biografiado. Uno de los últimos biógrafos de Álzaga, Lozier Almazán, no intenta definir ese punto con precisión.

Posteriormente, varios autores han puesto en duda esa visión, observando que Álzaga era vasco, y había llegado al Río de la Plata siendo un niño; es decir, que mal podía pretender una dependencia de una España que casi no recordaba, y por la cual los vascos no sentían el mismo apego que los habitantes de las provincias centrales.

Asimismo, tampoco la posterior trayectoria de Moreno condice con el supuesto absolutismo de los partidarios de la Asonada. Por otro lado, durante esos años, los absolutistas siempre se opusieron a la formación de juntas de gobierno.

La significación exacta de la Asonada de Álzaga sigue abierta a discusión, aunque queda claro que no todos los que participaron en ella perseguían los mismos fines. Ni tampoco concordaban en sus objetivos quienes se le opusieron.

Referencias

  1. Harari, 2006, p. 137-139.

Bibliografía

  • Harari, Fabián (2006). «¿Ampliación política o crisis orgánica?: un análisis del Cuerpo de Patricios, 1806-1810». Anuario del Instituto de Historia Argentina 6: 125-145. 
  • López, Vicente Fidel (1881). Historia de la revolución argentina hasta la reorganización política de 1824 (1ra. edición edición). Argentina: Imprenta y Librería de Mayo. 
  • Lozier Almazán, Bernardo (1998). Martín de Alzaga; historia de una trágica ambición. Argentina: Ediciones Ciudad Argentina. ISBN 987-507-043-2. 


  •   Datos: Q6420682

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Se conoce como asonada de Alzaga ocurrida el 1 de enero de 1809 al intento de destituir al virrey del Rio de la Plata Santiago de Liniers por parte de un grupo afin al Cabildo de Buenos Aires encabezado por uno de sus miembros el alcalde Martin de Alzaga Santiago de Liniers el virrey que se buscaba destituir Indice 1 Situacion previa 2 La asonada 2 1 El primer intento 2 2 Segundo intento 2 3 El fracaso 3 Consecuencias 4 Interpretaciones 5 Referencias 6 BibliografiaSituacion previa EditarSantiago de Liniers y Martin de Alzaga fueron los heroes de la Reconquista de Buenos Aires durante la primera de las invasiones inglesas al Virreinato del Rio de la Plata acaecida en 1806 Al producirse el segundo ataque ingles en 1807 Liniers reemplazo por presion popular como virrey a Rafael de Sobremonte acusado de haber abandonado sus funciones en medio de la invasion La victoria en la defensa contra la segunda invasion elevo su prestigio y fue confirmado en su cargo por orden del rey Carlos IV de Espana Francisco Javier de Elio el gobernador de Montevideo resistio su autoridad y aprovecho el hecho de que Liniers era frances para acusarlo de hacer complot con el Imperio Napoleonico en guerra contra Espana por ese entonces Elio organizo una Junta de Gobierno en Montevideo que desconocio la autoridad del virrey En el mes de octubre de 1808 estuvo a punto de estallar una revolucion contra Liniers dirigida por el Cabildo de la capital virreinal la excusa era que el hijo del virrey acababa de contraer matrimonio en el virreinato que gobernaba su padre algo prohibido por las leyes espanolas Pero la absoluta negativa de la Real Audiencia a secundar el reclamo en su contra hizo abortar los planes de Alzaga y su partido La asonada EditarEl primer intento Editar El 30 de diciembre el Cabildo presento una exigencia antipatica al virrey con la evidente intencion de provocarlo veto el nombramiento de alferez real del joven Bernardino Rivadavia candidato de Liniers a ese cargo con comentarios hirientes contra la capacidad del mismo La intencion era usar su insistencia para acusarlo de despotismo Al darse cuenta de que se le tendia una trampa Liniers adopto una actitud sumisa y firmo sin comentarios una orden en que se le pedia al mismo Cabildo que nombrara al nuevo alferez real Eso desarmo el primer impulso revolucionario El 1 de enero del ano 1809 los miembros del Cabildo se reunieron y propusieron una lista de miembros del nuevo cabildo que debia asumir ese mismo dia seleccionando a sus miembros entre los mas reconocidos enemigos del virrey Al dirigirse al Fuerte de Buenos Aires para presentar esa lista para su aprobacion fueron apoyados por varios regimientos de milicias todos de origen espanol que ocuparon la Plaza de la Victoria Tambien reunieron una pequena multitud de manifestantes que protestaban contra la gestion de Liniers y exigian su renuncia Contra lo que esperaban Liniers protesto durante algunos minutos en voz baja y luego firmo los nombramientos Por segunda vez habia cedido y logrado salvar con eso su cargo Simultaneamente ingresaba por la puerta de atras del fuerte un batallon del Regimiento de Patricios cuyo comandante Cornelio Saavedra ordeno defender al virrey y apuntar sus canones contra el edificio del Cabildo Los miembros del Cabildo volvieron a reunirse y decidieron deponer al virrey de todos modos Pretendian reemplazarlo con una Junta de Gobierno de la cual formaban parte solamente espanoles peninsulares y dos criollos Mariano Moreno y el sindico Julian de Leyva que ejercerian como secretarios de la misma Segundo intento Editar Pasado el mediodia una fuerte tormenta disperso a los manifestantes pero las tropas permanecieron en sus puestos aunque trasladandose al reparo de los arcos de la Recova A media tarde una gran comitiva se presento en el Fuerte de ella formaba parte el Cabildo en pleno el obispo de la ciudad Benito Lue y Riega y los miembros de la Audiencia y del Consulado de Comercio de Buenos Aires Todos exigian la renuncia de Liniers Ademas pidieron a Saavedra que retirara sus tropas Viendo que el virrey no parecia ya dispuesto a resistir el coronel de los Patricios retiro su regimiento por el medio de la Plaza como en un desfile saludado por las fuerzas militares rebeldes Minutos mas tarde y sin esperar ordenes superiores la mayor parte de los soldados de los batallones espanoles se retiro a sus casas Por su parte Saavedra se dedico a recorrer los cuarteles de los demas batallones Liniers se consideraba vencido pero aun quiso controlar en algo los efectos de su caida por lo que apoyado por Lue exigio el cumplimiento de las normativas que preveian el reemplazo de los virreyes por el militar mas antiguo del virreinato En este caso se trataba del general Pascual Ruiz Huidobro Sabiendo que su primer intento habia fallado pero considerandolo mas manejable y menos prestigioso que Liniers Alzaga termino por unirse a esa exigencia Entonces si declaro Liniers que renunciaria y se inicio la redaccion de un acta en que Liniers anunciaba su renuncia El fracaso Editar Pero antes de que el acta estuviera completada se presento nuevamente de improviso en el Fuerte el coronel Saavedra comandante de Patricios con los demas comandantes de regimientos y batallones formados por criollos Para darle mas espectacularidad a su entrada Saavedra iba con la espada desenvainada y habia reemplazado su sombrero por un panuelo anudado Saavedra y los demas comandantes exigieron firmemente que se suspendiera el acto ya que el grupo que presentaba la exigencia de renuncia no representaba al pueblo Lue intervino pidiendo a Saavedra que dejara las cosas como estaban debido a que Liniers no era querido Entonces Saavedra llevo a Liniers al balcon del Fuerte donde fue aclamado por una importante cantidad de gente convocada por el mismo Saavedra En ese mismo momento aparecieron en la plaza los Patricios ocupandola y desplazando a las milicias partidarias del golpe Hubo algunos disparos que causaron algunos heridos pero las milicias rebeldes evacuaron la plaza sin luchar Entonces Liniers ingreso nuevamente al salon en que estaban los capitulares y el obispo y declaro firmemente que no pensaba renunciar En un giro muy curioso el acta que se estaba redactando que comenzaba anunciando la renuncia de Liniers termino con la confirmacion del mismo con el general beneplacito de todos los presentes incluidos los miembros del Cabildo Todos se retiraron a sus casas excepto los miembros del Cabildo Horas mas tarde entrada ya la noche Liniers ordeno la libertad de los alcaldes y otras dignidades entrantes Pero los cabildantes salientes incluido Alzaga permanecieron prisioneros Consecuencias EditarAl dia siguiente Alzaga y los demas lideres del movimiento fueron desterrados a Carmen de Patagones La Audiencia inicio un juicio contra ellos por independencia sic Pero los dos secretarios nunca fueron molestados Los batallones de milicias urbanas sublevados tercios de Minones de Gallegos y de Vizcainos incluyendo a los Cazadores Correntinos fueron disueltos Parte de las tropas correspondientes pasaron a otros cuerpos pero los oficiales fueron dados de baja de forma definitiva Tambien se hallaron implicadas 4 companias del 3 Batallon de Patricios al mando de Jose Domingo de Urien y algunos oficiales de los otros dos batallones del cuerpo tales como Antonio Jose del Texo un capitan del 1 batallon Pedro Blanco y Tomas Jose Boyso Urien fue destituido y a Texo se le inicio juicio por intentar asesinar a Saavedra 1 Los desterrados a Carmen de Patagones Martin de Alzaga Juan Antonio Santa Coloma Olaguer Reynals Francisco de Neyra y Arellano y Esteban Villanueva fueron rescatados por Elio quien seguia sin reconocer a Liniers y sostuvo la Junta de Montevideo y trasladados a esa ciudad El Cabildo fue purgado de varios de sus miembros y un nuevo grupo de dirigentes ligados especialmente al jefe de los Patricios y a los demas jefes militares criollos asumio el mando del mismo No obstante la mayor parte de ellos a diferencia de Saavedra no participarian en la Revolucion Con la llegada de Espana del nuevo virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros los cuestionamientos de los pobladores espanoles al reemplazado Liniers quedaron en el olvido y Cisneros indulto a los responsables de la Asonada Poco despues tendria lugar la Revolucion de Mayo dirigida por criollos en lugar de espanoles Alzaga parece haber tenido alguna participacion en la eleccion de los miembros de la Primera Junta aunque no de forma visible Varios de los partidarios de Alzaga tuvieron activa participacion en la Revolucion aliados esta vez del grupo dirigido por Saavedra Uno de los vocales de la fallida junta Juan Larrea fue miembro de la Primera Junta Uno de los dos secretarios Mariano Moreno fue secretario de la misma mientras que el otro Manuel Leyva opuso los ultimos obstaculos legales que debieron sortear los revolucionarios El principal beneficiario del fracaso de la Asonada fue Saavedra a quien Liniers debia desde entonces su gobierno De alli en adelante ningun gobierno pudo actuar en Buenos Aires sin el apoyo de las milicias urbanas por lo menos hasta la crisis de 1820 De hecho fue la decision de Saavedra la que desencadeno la Revolucion de Mayo Interpretaciones EditarDesde Vicente Fidel Lopez en adelante la Asonada de Alzaga fue vista como una reaccion absolutista dirigida por espanoles para salvar el dominio espanol en el Virreinato Muchos historiadores han repetido esa vision desde entonces Entre ellos Ricardo Levene biografo de Mariano Moreno no logro nunca conciliar esa vision con el panegirico de su biografiado Uno de los ultimos biografos de Alzaga Lozier Almazan no intenta definir ese punto con precision Posteriormente varios autores han puesto en duda esa vision observando que Alzaga era vasco y habia llegado al Rio de la Plata siendo un nino es decir que mal podia pretender una dependencia de una Espana que casi no recordaba y por la cual los vascos no sentian el mismo apego que los habitantes de las provincias centrales Asimismo tampoco la posterior trayectoria de Moreno condice con el supuesto absolutismo de los partidarios de la Asonada Por otro lado durante esos anos los absolutistas siempre se opusieron a la formacion de juntas de gobierno La significacion exacta de la Asonada de Alzaga sigue abierta a discusion aunque queda claro que no todos los que participaron en ella perseguian los mismos fines Ni tampoco concordaban en sus objetivos quienes se le opusieron Referencias Editar Harari 2006 p 137 139 Bibliografia EditarBeruti Juan Manuel 2001 Memorias curiosas 1ra edicion completa edicion Argentina Editorial Emece ISBN 950 04 2208 5 Harari Fabian 2006 Ampliacion politica o crisis organica un analisis del Cuerpo de Patricios 1806 1810 Anuario del Instituto de Historia Argentina 6 125 145 Lopez Vicente Fidel 1881 Historia de la revolucion argentina hasta la reorganizacion politica de 1824 1ra edicion edicion Argentina Imprenta y Libreria de Mayo Lozier Almazan Bernardo 1998 Martin de Alzaga historia de una tragica ambicion Argentina Ediciones Ciudad Argentina ISBN 987 507 043 2 Scenna Miguel Angel 1984 Las brevas maduras Memorial de la Patria tomo I Argentina Editoral La Bastilla ISBN 950 008 021 4 Datos Q6420682Obtenido de https es wikipedia org w index php title Asonada de Alzaga amp oldid 136799131, wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

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