fbpx
Wikipedia

Clientelismo político

El clientelismo político es un intercambio extraoficial de favores, en el cual los titulares de cargos políticos regulan la concesión de prestaciones, obtenidas a través de su función pública o de contactos relacionados con ella, a cambio de apoyo electoral.[1][2]​ Los politólogos Cas Mudde y Cristóbal Rovira Kaltwasser lo definen como «un modo particular de intercambio entre grupos de electores y políticos, gracias al cual los votantes obtienen bienes (pagos directos o acceso privilegiado a empleo, bienes y servicios, por ejemplo) a condición de que apoyen a un patrón o partido».Aspectos ya definidos en décadas anteriores por los politólogos Guillermo O`Donnell, Javier Auyero y Miguel Trotta en el mismo sentido.

En un sistema de clientelismo, el poder sobre las decisiones del aparato administrativo del Estado se utiliza para obtener beneficio privado; el patrón —sea directamente un funcionario, u otra persona dotada de suficiente poder como para influir sobre los funcionarios— toma decisiones que favorecen a sus clientes, y que estos compensan con la perpetuación en el poder del funcionario implicado o de su entorno. La relación puede fortalecerse mediante la amenaza de utilizar esa misma capacidad de decisión para perjudicar a quienes no colaboren con el sistema. Resulta paradigmática, a este respecto, la habitual relación entre los principales medios de comunicación comerciales y privados, y los principales partidos cercanos a cualquiera de los más importantes organismos de poder, fenómeno particularmente característico de sistemas con fuerte consolidación o predominio de situaciones de bipartidismo. En general, los sistemas clientelares aparecen donde la necesidad de integrar rápidamente un elevado número de participantes a un sistema político sin tradición organizativa lleva al desarrollo de sistemas de mediación informal entre la acción estatal y las necesidades de las comunidades.

Estructura de clientelismo

En el clientelismo los bienes públicos no se administran según la lógica imparcial de la ley, sino que bajo una apariencia legal se utilizan discrecionalmente por los detentadores del poder político; normalmente se corresponde con figuras penadas jurídicamente como prevaricación o corrupción. Sin embargo, existen pocos incentivos para que los participantes busquen acabar con el sistema clientelar, puesto que este se halla institucionalizado —en el sentido sociológico del término— como patrón regular de interacciones, conocido, practicado y aceptado (si bien no necesariamente aprobado) por los actores (O'Donnell: 1997).

Hábito clientelar

La relación de los clientes no se apoya solo en su interés por los favores que pueden recibir a cambio de su adhesión, sino que está basada en la concepción que estos se forman a partir de su experiencia del funcionamiento del poder, y en las expectativas que así desarrollan. El elemento material y puntual de intercambio del clientelismo tiene así un efecto persistente sobre las expectativas sociales y políticas de los participantes; si bien la relación entre cliente y patrón se inicia a través de un "favor fundacional" (Auyero, 1997), mediante el cual el patrón —posiblemente a través de un puntero o mediador— brinda una prestación al cliente, no es este el factor más importante en la constitución del sistema, sino el conjunto de creencias, presunciones, estilos, habilidades, repertorios y hábitos que la experiencia repetida, directa e indirecta de estas relaciones provoca en los clientes.

Estos factores consolidan la relación, y disimulan su carácter de transacción; al igual que el don de las sociedades primitivas, en el cual la separación en el tiempo de los regalos recíprocos disimula el hecho de que se trata de una forma de intercambio de equivalentes, en el clientelismo la irregularidad y falta de simetría de las prestaciones escamotea su carácter económico. Puesto que cliente y patrón (o mediador) se conocen personalmente, y la concesión de prestaciones se realiza de manera individualizada, la relación clientelar se confunde con las afinidades personales dadas por la pertenencia común a redes sociales, familiares, étnicas, religiosas o deportivas. Los factores subjetivos vinculan más estrechamente a patrones/mediadores con sus clientes, y se transforman en indispensables para que la relación clientelar no se quede en un simple hecho mercantil (Trotta, 2003).

Relaciones de dominación

Sin embargo, la relación entre cliente y patrón no es simétrica: existe en ella una neta dominación, motivada por las dotaciones sumamente desiguales de capital social, simbólico y económico de patrones y clientes. Además de las diferencias producidas por el acceso desigual al poder estatal o económico, es la posición histórica de los agentes en el campo clientelar —su reconocimiento público como "necesitados" o "dispensadores"—[cita requerida] lo que le da el carácter de un espacio históricamente constituido, con instituciones específicas y leyes propias de funcionamiento. No obstante, como afirma Trotta, desde una perspectiva materialista histórica, las relaciones de dominación no pueden restringirse a la dimensión microsocial, sino que los condicionantes macroestructurales definen las transformaciones de las prácticas clientelares y sus desdoblamientos , aspectos investigados y desarrollados por el autor, de notable influencia en la literatura posterior sobre el tema (Trotta, 2003).

Posiciones en el campo

La explicación del sistema clientelar como un campo —en lugar de como una estructura estable de roles, en la tradición estructural-funcionalista— permite explicar que las posiciones de los actores cambien a partir de una compleja serie de cuestiones; por ejemplo, el poder del patrón puede verse amenazado por el ingreso de un patrón alternativo, o por circunstancias especiales, como las vísperas de un acto electoral, donde necesita el voto de los clientes de la red, quienes —aprovechando la coyuntura favorable— adquieren mayor fuerza en la negociación. Incluso la dinámica propia de una red clientelar podría generar que un actor modifique su posición, pasando de cliente, en virtud de la confianza obtenida de su patrón, en mediador, con lo cual suma capital para moverse dentro del campo.

Cada participante del campo clientelar tiene objetivos propios. Los clientes buscan respuestas a sus necesidades básicas inmediatas, los mediadores pueden motivarse por diferentes cuestiones —desde adscripción partidaria o ideológica hasta el mantenimiento de un empleo estatal—, y patrones buscan a su vez acumulación política, como objetivo estratégico, y acumulación electoral, como objetivo coyuntural.

La acumulación política incluye tanto la búsqueda de adhesiones que legitimen su rol de dirigentes políticos como la construcción de aparatos que otorguen la posibilidad de acrecentar su poder político. El patrón no obtiene recursos económicos de la red, sino que amplía su base de sustentación para mantener su carrera. Esa acumulación debe concretarse, hacerse visible, en un momento concreto: los comicios, cuando el poderío del patrón debe ratificarse.

Clientelismo y sistema político

Patrón y mediadores no aportan privadamente los recursos que sustentan los intercambios, sino que los toman del ámbito estatal; generalmente, patrón y mediadores también están allí insertos. Las prestaciones sociales —en particular que no están disponibles universalmente, como planes diferenciales de subsidios o becas— son los recursos generalmente considerados como medios típicos de la redistribución clientelar.[cita requerida]

Los patrones suelen ser gobernantes o legisladores; los mediadores, parte de la plantilla de ministerios, municipios o legislaturas (ver nepotismo). Esa es otra característica propia del clientelismo: se ejerce a partir de la estructura burocrática o del aparato público estatal (Trotta, 2003). Del Estado provienen por lo general los recursos que aceitan los intercambios clientelares, y es también el ámbito de actuación de patrones y mediadores; el clientelismo moderno tiene su base en él, constituyéndose en una variante de privatización de lo público. De acuerdo a la influente definición de Javier Auyero, el clientelismo «[depende] de una tercera parte para su continuación (aquí refiriéndose al patrón político, representado por un político en particular o por una estructura estatal). Los incentivos materiales necesarios para el desarrollo de la relación vienen del afuera y son producto de un balance de poder específico entre el mediador y el patrón político exterior» (Auyero, 1997).

En los estados clientelistas, se relega el derecho como instrumento de gobierno. La vigencia del derecho está determinada por el grado de preponderancia de los vínculos clientelistas. En los estados puramente patrimoniales, las relaciones clientelistas desplazan al derecho como medio de gobierno. La ley y las instituciones dependen del capricho de quienes ostentan el poder, y la norma no guía la conducta de los individuos. Las personas dejan de ser iguales ante la ley: el trato depende de la relación con los que ostentan el poder. El estado de derecho es un medio para lograr una falsa legitimidad, un instrumento de manipulación, y a veces, de represión.

Clientelismo y representación

El clientelismo ha sido asociado a naciones con representación democrática debilitada, sin embargo, cada vez más países con democracias consolidadas presentan fenómenos clientelares. Generalmente, los clientes en la relación de intercambio son los votantes en condiciones de pobreza a quienes se condiciona el voto a cambio de la entrega de dinero en efectivo o bienes de primera necesidad. En su forma más sofisticada, se presenta como patronazgo.


Illusio

Los objetivos propios de cada actor son asimilables a lo que Pierre Bourdieu define como interés específico, pero al mismo tiempo es imprescindible un interés (illusio) propio del campo clientelar; la illusio es la convicción de que actuar en ese campo tiene una importancia primordial, que a su vez es indispensable para que el campo funcione. Salvo excepcionalmente, la illusio no es producto de un cálculo consciente, sino una relación de creencia que estructura las formas de relación con las prácticas políticas.

Véase también

Referencias

  1. Guía de lenguaje claro sobre la lucha contra la corrupción. Transparency International. 2009. p. 7. 
  2. «Mapaches, carrusel... El diccionario de delitos electorales». Nación321. Consultado el 18 de mayo de 2019. 

Bibliografía

  • Auyero, Javier (1997). Favores por Votos. Buenos Aires: Losada. 
  • O'Donnell, Guillermo (1997). Contrapuntos. Ensayos escogidos sobre autoritarismo y democratización. Buenos Aires: Paidós. ISBN 950-12-8901-X. 
  • Crevari, Esteban (2001). «La deformación de la representación». Medios de Comunicación, Partidos Políticos y Representación: Un escenario complejo. Capítulo 5 ([1]). 
  • Mudde, Cas; Rovira Kaltwasser, Cristóbal (2019) [2017]. Populismo. Una breve introducción [Populism. A Very Short Introduction]. Madrid: Alianza Editorial. ISBN 978-84-9181-396-5. 
  • Trotta, Miguel Edgardo Vicente (2003). Las metamorfosis del clientelismo político. Contribución para el análisis institucional. Buenos Aires: Espacio. ISBN 9789508021502. 

Enlaces externos

  • , (IIDH)
  • Los expolíticos ganan peso en las grandes empresas, 17/04/2011, Público.es
  •   Datos: Q1774349

clientelismo, político, clientelismo, redirige, aquí, para, otras, acepciones, véase, cliente, roma, antigua, clientelismo, político, intercambio, extraoficial, favores, cual, titulares, cargos, políticos, regulan, concesión, prestaciones, obtenidas, través, f. Clientelismo redirige aqui Para otras acepciones vease Cliente Roma antigua El clientelismo politico es un intercambio extraoficial de favores en el cual los titulares de cargos politicos regulan la concesion de prestaciones obtenidas a traves de su funcion publica o de contactos relacionados con ella a cambio de apoyo electoral 1 2 Los politologos Cas Mudde y Cristobal Rovira Kaltwasser lo definen como un modo particular de intercambio entre grupos de electores y politicos gracias al cual los votantes obtienen bienes pagos directos o acceso privilegiado a empleo bienes y servicios por ejemplo a condicion de que apoyen a un patron o partido Aspectos ya definidos en decadas anteriores por los politologos Guillermo O Donnell Javier Auyero y Miguel Trotta en el mismo sentido En un sistema de clientelismo el poder sobre las decisiones del aparato administrativo del Estado se utiliza para obtener beneficio privado el patron sea directamente un funcionario u otra persona dotada de suficiente poder como para influir sobre los funcionarios toma decisiones que favorecen a sus clientes y que estos compensan con la perpetuacion en el poder del funcionario implicado o de su entorno La relacion puede fortalecerse mediante la amenaza de utilizar esa misma capacidad de decision para perjudicar a quienes no colaboren con el sistema Resulta paradigmatica a este respecto la habitual relacion entre los principales medios de comunicacion comerciales y privados y los principales partidos cercanos a cualquiera de los mas importantes organismos de poder fenomeno particularmente caracteristico de sistemas con fuerte consolidacion o predominio de situaciones de bipartidismo En general los sistemas clientelares aparecen donde la necesidad de integrar rapidamente un elevado numero de participantes a un sistema politico sin tradicion organizativa lleva al desarrollo de sistemas de mediacion informal entre la accion estatal y las necesidades de las comunidades Indice 1 Estructura de clientelismo 1 1 Habito clientelar 2 Relaciones de dominacion 3 Posiciones en el campo 4 Clientelismo y sistema politico 5 Clientelismo y representacion 6 Illusio 7 Vease tambien 8 Referencias 9 Bibliografia 10 Enlaces externosEstructura de clientelismo EditarEn el clientelismo los bienes publicos no se administran segun la logica imparcial de la ley sino que bajo una apariencia legal se utilizan discrecionalmente por los detentadores del poder politico normalmente se corresponde con figuras penadas juridicamente como prevaricacion o corrupcion Sin embargo existen pocos incentivos para que los participantes busquen acabar con el sistema clientelar puesto que este se halla institucionalizado en el sentido sociologico del termino como patron regular de interacciones conocido practicado y aceptado si bien no necesariamente aprobado por los actores O Donnell 1997 Habito clientelar Editar La relacion de los clientes no se apoya solo en su interes por los favores que pueden recibir a cambio de su adhesion sino que esta basada en la concepcion que estos se forman a partir de su experiencia del funcionamiento del poder y en las expectativas que asi desarrollan El elemento material y puntual de intercambio del clientelismo tiene asi un efecto persistente sobre las expectativas sociales y politicas de los participantes si bien la relacion entre cliente y patron se inicia a traves de un favor fundacional Auyero 1997 mediante el cual el patron posiblemente a traves de un puntero o mediador brinda una prestacion al cliente no es este el factor mas importante en la constitucion del sistema sino el conjunto de creencias presunciones estilos habilidades repertorios y habitos que la experiencia repetida directa e indirecta de estas relaciones provoca en los clientes Estos factores consolidan la relacion y disimulan su caracter de transaccion al igual que el don de las sociedades primitivas en el cual la separacion en el tiempo de los regalos reciprocos disimula el hecho de que se trata de una forma de intercambio de equivalentes en el clientelismo la irregularidad y falta de simetria de las prestaciones escamotea su caracter economico Puesto que cliente y patron o mediador se conocen personalmente y la concesion de prestaciones se realiza de manera individualizada la relacion clientelar se confunde con las afinidades personales dadas por la pertenencia comun a redes sociales familiares etnicas religiosas o deportivas Los factores subjetivos vinculan mas estrechamente a patrones mediadores con sus clientes y se transforman en indispensables para que la relacion clientelar no se quede en un simple hecho mercantil Trotta 2003 Relaciones de dominacion EditarSin embargo la relacion entre cliente y patron no es simetrica existe en ella una neta dominacion motivada por las dotaciones sumamente desiguales de capital social simbolico y economico de patrones y clientes Ademas de las diferencias producidas por el acceso desigual al poder estatal o economico es la posicion historica de los agentes en el campo clientelar su reconocimiento publico como necesitados o dispensadores cita requerida lo que le da el caracter de un espacio historicamente constituido con instituciones especificas y leyes propias de funcionamiento No obstante como afirma Trotta desde una perspectiva materialista historica las relaciones de dominacion no pueden restringirse a la dimension microsocial sino que los condicionantes macroestructurales definen las transformaciones de las practicas clientelares y sus desdoblamientos aspectos investigados y desarrollados por el autor de notable influencia en la literatura posterior sobre el tema Trotta 2003 Posiciones en el campo EditarLa explicacion del sistema clientelar como un campo en lugar de como una estructura estable de roles en la tradicion estructural funcionalista permite explicar que las posiciones de los actores cambien a partir de una compleja serie de cuestiones por ejemplo el poder del patron puede verse amenazado por el ingreso de un patron alternativo o por circunstancias especiales como las visperas de un acto electoral donde necesita el voto de los clientes de la red quienes aprovechando la coyuntura favorable adquieren mayor fuerza en la negociacion Incluso la dinamica propia de una red clientelar podria generar que un actor modifique su posicion pasando de cliente en virtud de la confianza obtenida de su patron en mediador con lo cual suma capital para moverse dentro del campo Cada participante del campo clientelar tiene objetivos propios Los clientes buscan respuestas a sus necesidades basicas inmediatas los mediadores pueden motivarse por diferentes cuestiones desde adscripcion partidaria o ideologica hasta el mantenimiento de un empleo estatal y patrones buscan a su vez acumulacion politica como objetivo estrategico y acumulacion electoral como objetivo coyuntural La acumulacion politica incluye tanto la busqueda de adhesiones que legitimen su rol de dirigentes politicos como la construccion de aparatos que otorguen la posibilidad de acrecentar su poder politico El patron no obtiene recursos economicos de la red sino que amplia su base de sustentacion para mantener su carrera Esa acumulacion debe concretarse hacerse visible en un momento concreto los comicios cuando el poderio del patron debe ratificarse Clientelismo y sistema politico EditarPatron y mediadores no aportan privadamente los recursos que sustentan los intercambios sino que los toman del ambito estatal generalmente patron y mediadores tambien estan alli insertos Las prestaciones sociales en particular que no estan disponibles universalmente como planes diferenciales de subsidios o becas son los recursos generalmente considerados como medios tipicos de la redistribucion clientelar cita requerida Los patrones suelen ser gobernantes o legisladores los mediadores parte de la plantilla de ministerios municipios o legislaturas ver nepotismo Esa es otra caracteristica propia del clientelismo se ejerce a partir de la estructura burocratica o del aparato publico estatal Trotta 2003 Del Estado provienen por lo general los recursos que aceitan los intercambios clientelares y es tambien el ambito de actuacion de patrones y mediadores el clientelismo moderno tiene su base en el constituyendose en una variante de privatizacion de lo publico De acuerdo a la influente definicion de Javier Auyero el clientelismo depende de una tercera parte para su continuacion aqui refiriendose al patron politico representado por un politico en particular o por una estructura estatal Los incentivos materiales necesarios para el desarrollo de la relacion vienen del afuera y son producto de un balance de poder especifico entre el mediador y el patron politico exterior Auyero 1997 En los estados clientelistas se relega el derecho como instrumento de gobierno La vigencia del derecho esta determinada por el grado de preponderancia de los vinculos clientelistas En los estados puramente patrimoniales las relaciones clientelistas desplazan al derecho como medio de gobierno La ley y las instituciones dependen del capricho de quienes ostentan el poder y la norma no guia la conducta de los individuos Las personas dejan de ser iguales ante la ley el trato depende de la relacion con los que ostentan el poder El estado de derecho es un medio para lograr una falsa legitimidad un instrumento de manipulacion y a veces de represion Clientelismo y representacion EditarEl clientelismo ha sido asociado a naciones con representacion democratica debilitada sin embargo cada vez mas paises con democracias consolidadas presentan fenomenos clientelares Generalmente los clientes en la relacion de intercambio son los votantes en condiciones de pobreza a quienes se condiciona el voto a cambio de la entrega de dinero en efectivo o bienes de primera necesidad En su forma mas sofisticada se presenta como patronazgo Illusio EditarArticulo principal Illusio Los objetivos propios de cada actor son asimilables a lo que Pierre Bourdieu define como interes especifico pero al mismo tiempo es imprescindible un interes illusio propio del campo clientelar la illusio es la conviccion de que actuar en ese campo tiene una importancia primordial que a su vez es indispensable para que el campo funcione Salvo excepcionalmente la illusio no es producto de un calculo consciente sino una relacion de creencia que estructura las formas de relacion con las practicas politicas Vease tambien EditarCasos de corrupcion politica en Espana Corrupcion politica Puerta giratoria politica Referencias Editar Guia de lenguaje claro sobre la lucha contra la corrupcion Transparency International 2009 p 7 Mapaches carrusel El diccionario de delitos electorales Nacion321 Consultado el 18 de mayo de 2019 Bibliografia EditarAuyero Javier 1997 Favores por Votos Buenos Aires Losada O Donnell Guillermo 1997 Contrapuntos Ensayos escogidos sobre autoritarismo y democratizacion Buenos Aires Paidos ISBN 950 12 8901 X Crevari Esteban 2001 La deformacion de la representacion Medios de Comunicacion Partidos Politicos y Representacion Un escenario complejo Capitulo 5 1 Mudde Cas Rovira Kaltwasser Cristobal 2019 2017 Populismo Una breve introduccion Populism A Very Short Introduction Madrid Alianza Editorial ISBN 978 84 9181 396 5 Trotta Miguel Edgardo Vicente 2003 Las metamorfosis del clientelismo politico Contribucion para el analisis institucional Buenos Aires Espacio ISBN 9789508021502 Enlaces externos EditarClientelismo Instituto Interamericano de Derechos Humanos IIDH Los expoliticos ganan peso en las grandes empresas 17 04 2011 Publico es Una web descubre que 48 politicos espanoles manejan 58 000 millones de euros en empresas del IBEX 12 11 2012 Diariorc Datos Q1774349 Obtenido de https es wikipedia org w index php title Clientelismo politico amp oldid 145264333, wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

español

, española, descargar, gratis, descargar gratis, mp3, video, mp4, 3gp, jpg, jpeg, gif, png, imagen, música, canción, película, libro, juego, juegos