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Batalla de Luchana

Se conoce como batalla de Luchana a los combates que durante la primera guerra carlista tuvieron lugar durante los días 1 al 25 de diciembre de 1836 en la que el ejército isabelino, partiendo desde su base en Portugalete, consiguió arrollar a las fuerzas carlistas que asediaban Bilbao desde el 25 de octubre.

Luchana
Primera guerra carlista
Parte de primera guerra carlista

Ataque al puente de Luchana. Grabado de 1849.
Fecha 1 al 25 de diciembre de 1836
Lugar Ambas orillas de la ría de Bilbao desde Portugalete a Bilbao
Coordenadas 43°17′35″N 2°58′17″O / 43.2931, -2.97139
Resultado Victoria isabelina
Beligerantes
Comandantes

Antecedentes editar

El Estado carlista presentaba a principios del año 1836 «...una insuficiencia económica que amenazaba su propia supervivencia».[1]Juan Bautista Erro, al frente del Ministerio Universal, decidió negociar créditos por valor de un millón de reales en Londres.

 
Juan Bautista Erro. Litografía de 1837 según dibujo de Isidoro Magués.

Ignacio Lardizábal estaba encargado de la negociación, pero no logró obtenerlos al no poder ofrecer suficientes garantías. «En esta situación la posesión de una plaza como Bilbao podría constituir el aval necesario para garantizar los empréstitos e inversiones extranjeras».[2]​ Por lo que, reunidos en Durango, el pretendiente con los ministros y altos cargos militares, decidieron el 14 de octubre de 1836 poner sitio a Bilbao. Sería el segundo que sufriría esta ciudad durante la primera guerra carlista.

 
Vista de Bilbao desde la ría. Grabado de 1845.

Nazario Eguía, general en jefe del ejército carlista, dio el mando para realizar el sitio a Bruno Villarreal. Los días 18 y 19 de octubre, un ingeniero francés al servicio de los carlistas reconoció la plaza de Bilbao, tras lo cual estos comenzaron a trasladar su artillería a diversas alturas que dominan la ciudad, levantando fortines, parapetos y cavando trincheras. Su fuerza estaba compuesta por 17 cañones de grueso calibre, dos morteros, 600 carros de proyectiles huecos y balas rasas, así como 150 de municiones y pertrechos, destinando 15 batallones de infantería para el asalto.[3]

Iniciaron el bombardeo el día 25.

 
Nazario Eguía. Litografía de 1837 según dibujo de Isodoro Magués.

Preliminares editar

El traslado que realizaban los carlistas de prácticamente toda su artillería hacia Vizcaya desde el territorio vasco-navarro que dominaban, evidenciaba sus intenciones de sitiar Bilbao, lo que no pasó desapercibido al mando isabelino, por lo que Baldomero Espartero, jefe del ejército del Norte, había marchado con sus tropas situadas en la frontera sur del Ebro hacia el norte, hallándose al iniciarse el bombardeo de Bilbao en Villarcayo, a 60 kilómetros al oeste. Ya dos días antes había enviado parte de su tropa a Santander para que desde allí se dirigiese por mar a Portugalete, localidad situada en la orilla izquierda de la ría de Bilbao, a unos 10 kilómetros al norte de Bilbao, y que desembarcó allí el día 26.[4]

La ocupación de Portugalete le era necesaria a Espartero para realizar la campaña de auxilio a la ciudad sitiada, ya que en ese lugar establecería sus cuarteles, depósitos de armas, municiones y víveres, así como hospitales de sangre. Pero Espartero tenía mal aprovisionada su tropa en Villarcayo, se encontraba enfermo y tuvo que aniquilar antes las guerrillas carlistas que operaban en la provincia de Burgos y entorpecían el tránsito de los suministros que tenía que recibir. Por todo ello, no pudo iniciar su marcha hasta mediados de noviembre, llegando a Portugalete el día 25 con sus 14 000 soldados. Dos días después comenzó su avance hacia Bilbao por la orilla izquierda del río, pero fue rechazado con gran pérdida de efectivos, dado que las posiciones carlistas que se le interponían estaban muy bien fortificadas y defendidas con gran valor. El fracaso le hizo ver la dificultad de avanzar y romper el cerco por esta orilla, decidiéndose a realizarlo por la opuesta.

 
Baldomero Espartero.

Tras consultar con los jefes de la Armada española y la de los dos buques de guerra británicos fondeados en la ría, se dispuso a construir un puente sobre el Nervión a la altura de Portugalete, fuera del alcance de la artillería enemiga, aunque expuesto por su cercanía a la desembocadura al mar a sufrir la fuerza del oleaje. El puente se construyó «...colocando en línea abarloados 32 lugres, goletas y bergantines que se hallaban en la ría, perfectamente amarrados en la larga extensión de 680 pies, y con sus planchas de cuarteles de unos a otros...»[5]​ El día 30 ya se hallaba en la orilla derecha gran parte de su ejército, enviando a los defensores de Bilbao con el telégrafo óptico un mensaje que decía: «El ejército del Norte estará hoy entre Algorta y Aspe o alto frente de Portugalete y se dirige por el E. a Asúa, y mañana por Archanda a Bilbao».[6]

 
Telégrafo óptico. Grabado de 1843.

Pero el avance no tuvo lugar con la rapidez que había previsto, entablándose la más larga batalla de esta guerra.

Batalla editar

En el trecho que se extiende entre el lugar de su desembarco y Bilbao se abren dos barrancos en la cadena montañosa de la margen derecha del Nervión, bajando perpendiculares al río. En sus cauces fluía mucha agua dadas las fuertes lluvias de los últimos días. El día 1 llegaron los isabelinos, formados en tres columnas paralelas, al primer barranco a la altura del puente de Gobelas pero éste había sido cortado, por lo que tuvieron que vadear el riachuelo muy crecido y bajo el fuego de la fusilería carlista. Continuaron avanzando hacia la parte alta del siguiente barranco hasta el puente de Asúa. También este estaba inutilizado y los carlistas habían establecido los tres fortines artillados de Cabras, San Pablo y Banderas situados en cerros de la estribación sur del barranco. Este barranco era «...el foso del campo enemigo.»[7]​ Los emplazamientos carlistas cubrían perfectamente el barranco desde Azúa hasta el Nervión, sometiendo a los isabelinos a un intenso fuego. Llegando la noche, Espartero desistió de su intento de franquearse el paso por Asúa y decidió realizarlo al día siguiente por Luchana, lugar situado en la parte baja del barranco, junto al Nervión. Como también allí habían inutilizado el puente los carlistas, proyectaba construir en este lugar un puente de pontones, levantando antes baterías en las alturas de su orilla para contrarrestar el fuego de las enemigas.[8]

 
Guardia Real de infantería isabelina. Grabado de la década de 1840.

En tanto se realizaban estas disposiciones, arreció el temporal el día 5 y destrozó el puente que les unía a Portugalete, el cual era la única comunicación con la orilla izquierda desde donde tenían que recibir los víveres y las municiones y poder evacuar sus heridos. Ante ello, renunció Espartero a intentar forzar el paso por Luchana, retiró inmediatamente en barcazas la artillería a la orilla izquierda del Nervión, dando comienzo a la construcción de un nuevo puente para reemplazar al destruido, más al sur y más protegido de los embates del mar, pero ahora también bajo el alcance de la artillería de los tres fortines carlistas. El día 7 por la tarde quedó terminada la nueva obra, comenzando a retirarse a la orilla izquierda las tropas isabelinas, pero mientras lo cruzaban el temporal volvió a partirlo en dos, debiéndose realizar el paso de la fuerza restante empleando lanchas.[9]

 
Bruno Villarreal. Litografía de 1837 según dibujo de Isidoro Magués.

Villarreal pensó que Espartero volvería a intentar nuevamente el avance por la orilla izquierda desde Portugalete, por lo que también trasladó parte importante de su tropa a la misma orilla para hacerle frente.[8]

El día 12 inició Espartero efectivamente la marcha hacia Bilbao por la orilla izquierda, pero los temporales habían convertido los caminos en barrizales, quedando atascada la artillería pesada que necesitaba para batir las trincheras enemigas. El mal tiempo y el ardor defensivo de los carlistas obligaron a los isabelinos a desistir nuevamente de su ataque, retirándose el día 15 por tercera vez a Portugalete. Ahora «...el estado de las tropas de Espartero no era en verdad el más lisonjero, pues que faltos de artillería, de municiones, de víveres, y un tanto mohínos por las tan repetidas retiradas, se advertía cierto oculto disgusto que podía acrecerse de un modo inconveniente, a no acudirse al remedio de las faltas que se experimentaban.»[10]​ Ante esta situación, Espartero dio al día siguiente una orden general que fue leída a sus tropas por los oficiales. En ella decía: «Soldados: vuestra conservación para los gloriosos hechos que os esperan me decidió ayer a retroceder sobre este punto. El fuerte temporal de aguas no teniendo techado en que guareceros, aunque insuficiente para apagar vuestros ardimientos, habría inutilizado las municiones con que debéis batir al enemigo. Aquí tenéis la causa del retroceso. No, de ninguna manera no, abandonar la grande obra de salvar Bilbao... os ofrecí conduciros a la victoria cuando me encargué del mando y pereceré antes que privaros del triunfo. Empero la empresa que vamos a acometer es ardua y solo el conocimiento de vuestro valor me decidió a acometerla... y cuando volváis a salir de los cantones, espero no tornaréis a ellos sin que la guarnición de Bilbao haya estrechado en sus brazos a sus libertadores...»[11]

 
Infantería carlista. Grabado de 184?

El día 17 llegó a Portugalete un refuerzo de tropas y una importante provisión de víveres, dinero y municiones, tras lo cual Espartero se decidió a forzar nuevamente el paso por la orilla derecha.[12]​ Se comenzó con la construcción de un nuevo puente, facilitando los comandantes de los buques británicos balsas para realizar previamente el paso de la artillería y parte de la caballería a la orilla derecha durante la noche del día 19 y el amanecer del 20, mientras aquel se estaba terminando. Para distraer el fuego carlista, la goleta isabelina Isabel II y la cañonera San José se situaron el día 21 frente a Luchana y bombardearon el fortín de la Casa de la Pólvora, situado al sur del puente de este lugar, aunque ambos buques fueron pronto dañados y tuvieron que ponerse fuera del alcance de los cañones enemigos. Al anochecer, los isabelinos habían emplazado sus piezas de artillería sobre el Azúa, el puente sobre el Nervión quedó concluido y al amanecer el día 22 comenzó a pasar a la orilla derecha el grueso de la infantería isabelina y la restante caballería. También se fortificó el lugar donde el puente de embarcaciones arrancaba en la orilla izquierda, ocupándolo tres batallones de infantería en previsión de que Villarreal ordenase un ataque sobre él por esa orilla. Al día siguiente, día 23, se realizó un nuevo ataque marino, formado por unas 20 cañoneras y trincaduras, abriendo fuego frente a Luchana, vivamente contestado por los carlistas. El mal tiempo impidió que los fuegos intercambiados produjesen graves daños.

 
Marcelino Oráa. Grabado de 1844.

Amaneció el día 24 previsto para realizar el ataque definitivo. El temporal azotaba la ría y Espartero despertó enfermo, debiendo ceder el mando a su jefe de plana mayor, el general Marcelino Oráa. Las baterías sobre el Azúa y las emplazadas frente a Luchana en la orilla izquierda del Nervión no cesaron de batir las posiciones carlistas. Hacia las cuatro de la tarde embarcaron en la orilla izquierda ocho compañías de cazadores[nota 1]​ en unas 30 pequeñas embarcaciones, la mayor parte de ellas traídas de Laredo y Castro Urdiales. «El fin de la empresa era saltar a la orilla ocupada por los enemigos, apoderarse de sus obras y proteger la rehabilitación del puente de Luchana... En el mismo momento de dar principio a la ejecución se pronunció de una manera espantosa el temporal que ya reinaba... Allí, en aquella terrible travesía, trasportados en medio de una nube, pues solo agua, granizo y escarcha los rodeaba por todas partes, hacían resonar los vivas y aclamaciones, precursoras de la victoria.»[13]​ Las cañoneras y trincaduras cubrían los flancos de las fuerzas de desembarco y los cazadores consiguieron saltar a tierra. Los carlistas en Luchana, aunque sorprendidos por el imprevisto ataque, defendieron con gran valor sus posiciones, lo que «...dio lugar a que se trabase una contienda singular, la más extraña quizá, la más sorprendente... Furiosamente alternaba el estampido del cañón con los violentos mugidos del huracán embravecido, mezclábase el proyectil del fusil con el que en forma de granizo y con no menor violencia arrojaban las nubes, y en medio de una oscuridad casi completa, la luz de los fogonazos daba un color siniestro a la nieve que cubría todos los objetos.»[14]

 
Litografía de 1846 recreando la batalla de Luchana. En primer término el lugar de la orilla izquierda del Nervión donde embarcaron los cazadores. Enfrente, al otro lado del río, el puente de Luchana. Detrás se abre el barranco de Azúa. A la derecha del puente, se ve abajo el fortín Casa de la Pólvora, en las cumbres, de derecha a izquierda, los fortines Cabras, San Pablo y Banderas.
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Los cazadores isabelinos desembarcados consiguieron finalmente desalojar de Luchana a sus enemigos, se tendió junto al puente derruido uno provisional y el ejército de la orilla norte del Azúa repasó el barranco, se encaramó por las laderas del sur del mismo y comenzó a asaltar los fortines de Cabras, San Pablo y Banderas. Pero la bravura de la defensa carlista frenó sus sucesivos ataques y habiendo sido deshecho nuevamente el puente de barcas sobre el Nervión, se hizo crítica su situación. «El temporal aumentaba los embarazos del ejército cristino, cuyo puente de comunicación con Portugalete había desaparecido ante la bravura del mar; la nieve y el agua caía sin cesar; el viento arremolinaba las nieves y jamás ejército alguno estuvo en situación más crítica que el de la reina, hambriento, desnudo y acampado al norte de la ría [sic, quiere decir «ciudad»]».[15]​ A medianoche se informó de estas circunstancias a Espartero, que abandonó su lecho y, logrando en una lancha pasar a la otra orilla, montó en un caballo y recorrió el campo de batalla. Cuando entre los soldados isabelinos se corrió la voz de que su general se hallaba entre ellos, les hizo retomar con fuerza los ataques y hacia las cuatro de la madrugada del día 25, cuando el temporal cesaba un tanto en su crudeza, consiguieron apoderarse del fuerte de Banderas, último que conservaban los carlistas, los cuales iniciaron la retirada, quedando para las tropas isabelinas libre el paso a Bilbao y finalizada la batalla.

Consecuencias editar

Las tropas isabelinas entraron en Bilbao el mismo día 25 de diciembre, recibidas con gran júbilo por los defensores de la ciudad. Entre los sitiadores carlistas «la confusión no tenía límites, las fuerzas vagaban dispersas por el país y a tan lamentable desorden se añadió la de perderse la fuerza moral entre los soldados carlistas... y un rumor de traición circuló entre los que habían creído seguro el triunfo.»[16]​ José Manuel de Arízaga, auditor general del ejército carlista, dice que la defensa carlista no fue lo suficientemente recia, debido a que aquellos días «la mayor parte de nuestras tropas recibieron orden de acantonarse en los pueblos a retaguardia de Bilbao y muy poca fuerza quedaba cubriendo el servicio de la línea que no se consideró pudiera ser atacada.»[17]

La noticia de la batalla y de la liberación no llegó a Vitoria hasta el día 29, pero desde allí se propagó velozmente por todo España, dando motivo a que estos hechos fuesen celebrados hasta en los lugares más apartados del país y numerosas localidades dieron nombre de «Luchana» a una de sus calles o plazas.

Espartero recibió el título de conde de Luchana, mientras que Eguía y Villarreal perdieron sus mandos. En esta batalla falleció Antonio de Aymerich Ortiz de Pinedo, nacido de José Aimerich, ministro de la guerra en funciones con Cea Bermúdez.

Incertidumbres editar

Ni Eguía ni Villarreal dejaron testimonio escrito sobre los motivos que tuvieron para no utilizar la agilidad de movimientos de sus batallones, lo que les caracterizaba precisamente, para avanzar desde Bilbao y aniquilar en Portugalete la vanguardia de Espartero que allí había desembarcado el 26 de noviembre. Ni por qué no realizaron un ataque sobre esta localidad el día 5 de diciembre o siguiente, cuando el temporal había inutilizado el puente de barcas sobre el Nervión y había dejado a Espartero aislado en la orilla derecha.

Véase también editar

Notas editar

  1. Cada batallón tenía una compañía de cazadores. Estaba formada por los hombres más cualificados y era la encargada de cubrir los flancos en las marchas por zonas boscosas y encabezar el asalto sobre los lugares parapetados.

Referencias editar

  1. Rosa María Lázaro Torres. El poder de los carlistas. Evolución y declive de un Estado. 1833-1839. p. 63. Sin lugar ni fecha. ISBN 48-604-6471-7.
  2. Rosa María Lázaro Torres. op. cit. p. 68.
  3. Galería Militar Contemporánea. Tomo II. Págs. 208-209. Madrid 1846.
  4. José Segundo Flórez. Espartero. Tomo I. p. 363. Madrid 1843
  5. José Segundo Flórez. op. cit. p. 389
  6. José Segundo Flórez. op. cit. p. 391
  7. José Segundo Flórez. op. cit. p. 406
  8. Galería Militar Contemporánea. op. cit. p. 225
  9. Galería Militar Contemporánea. op. cit. págs. 223-225
  10. Galería Militar Contemporánea. op. cit. p. 227
  11. Vida militar y política de Espartero. Tomo II. p. 97. Madrid 1844
  12. Galería Militar Contemporánea. Págs. 227. op. cit.
  13. Vida militar y política de Espartero. op. cit. p. 107
  14. Vida militar y política de Espartero. op. cit. p. 108
  15. José Manuel de Arízaga. Memoria militar y política sobre la guerra de Navarra. Madrid 1840. Pág. 77
  16. Galería Militar Contemporánea. op. cit. p. 165
  17. José Manuel de Arízaga. op. cit. Pág. 77

Bibliografía editar

  • Arízaga, José Manuel de. Memoria militar y política sobre la guerra de Navarra los fusilamientos de Estella, y principales acontecimientos que determinaron el fin de la causa de D. Carlos Isidro de Borbon. Imprenta Vicente Lalama, 1840.
  • Lázaro Torres, Rosa María. El poder de los carlistas. Evolución y declive de un Estado. 1833-1839. Edición propia, 1993. ISBN 84-604-6471-7
  • Segundo Flórez, José. Espartero. Historia de su vida militar y de los grandes sucesos contemporáneos. Sociedad Literaria, 1845.
  • Varios. Galería militar contemporánea. Sociedad tipográfica de Hortelano y Cía., 1846.

Enlaces externos editar

  •   Wikimedia Commons alberga una galería multimedia sobre Iconografía de la Primera Guerra Carlista.
  •   Datos: Q3310734
  •   Multimedia: Battle of Luchana / Q3310734

batalla, luchana, conoce, como, batalla, luchana, combates, durante, primera, guerra, carlista, tuvieron, lugar, durante, días, diciembre, 1836, ejército, isabelino, partiendo, desde, base, portugalete, consiguió, arrollar, fuerzas, carlistas, asediaban, bilba. Se conoce como batalla de Luchana a los combates que durante la primera guerra carlista tuvieron lugar durante los dias 1 al 25 de diciembre de 1836 en la que el ejercito isabelino partiendo desde su base en Portugalete consiguio arrollar a las fuerzas carlistas que asediaban Bilbao desde el 25 de octubre LuchanaPrimera guerra carlistaParte de primera guerra carlistaAtaque al puente de Luchana Grabado de 1849 Fecha1 al 25 de diciembre de 1836LugarAmbas orillas de la ria de Bilbao desde Portugalete a BilbaoCoordenadas43 17 35 N 2 58 17 O 43 2931 2 97139ResultadoVictoria isabelinaBeligerantesCarlistas IsabelinosComandantesBruno Villarreal Baldomero Espartero editar datos en Wikidata Indice 1 Antecedentes 2 Preliminares 3 Batalla 4 Consecuencias 5 Incertidumbres 6 Vease tambien 7 Notas 8 Referencias 8 1 Bibliografia 9 Enlaces externosAntecedentes editarEl Estado carlista presentaba a principios del ano 1836 una insuficiencia economica que amenazaba su propia supervivencia 1 Juan Bautista Erro al frente del Ministerio Universal decidio negociar creditos por valor de un millon de reales en Londres nbsp Juan Bautista Erro Litografia de 1837 segun dibujo de Isidoro Magues Ignacio Lardizabal estaba encargado de la negociacion pero no logro obtenerlos al no poder ofrecer suficientes garantias En esta situacion la posesion de una plaza como Bilbao podria constituir el aval necesario para garantizar los emprestitos e inversiones extranjeras 2 Por lo que reunidos en Durango el pretendiente con los ministros y altos cargos militares decidieron el 14 de octubre de 1836 poner sitio a Bilbao Seria el segundo que sufriria esta ciudad durante la primera guerra carlista nbsp Vista de Bilbao desde la ria Grabado de 1845 Nazario Eguia general en jefe del ejercito carlista dio el mando para realizar el sitio a Bruno Villarreal Los dias 18 y 19 de octubre un ingeniero frances al servicio de los carlistas reconocio la plaza de Bilbao tras lo cual estos comenzaron a trasladar su artilleria a diversas alturas que dominan la ciudad levantando fortines parapetos y cavando trincheras Su fuerza estaba compuesta por 17 canones de grueso calibre dos morteros 600 carros de proyectiles huecos y balas rasas asi como 150 de municiones y pertrechos destinando 15 batallones de infanteria para el asalto 3 Iniciaron el bombardeo el dia 25 nbsp Nazario Eguia Litografia de 1837 segun dibujo de Isodoro Magues Preliminares editarEl traslado que realizaban los carlistas de practicamente toda su artilleria hacia Vizcaya desde el territorio vasco navarro que dominaban evidenciaba sus intenciones de sitiar Bilbao lo que no paso desapercibido al mando isabelino por lo que Baldomero Espartero jefe del ejercito del Norte habia marchado con sus tropas situadas en la frontera sur del Ebro hacia el norte hallandose al iniciarse el bombardeo de Bilbao en Villarcayo a 60 kilometros al oeste Ya dos dias antes habia enviado parte de su tropa a Santander para que desde alli se dirigiese por mar a Portugalete localidad situada en la orilla izquierda de la ria de Bilbao a unos 10 kilometros al norte de Bilbao y que desembarco alli el dia 26 4 La ocupacion de Portugalete le era necesaria a Espartero para realizar la campana de auxilio a la ciudad sitiada ya que en ese lugar estableceria sus cuarteles depositos de armas municiones y viveres asi como hospitales de sangre Pero Espartero tenia mal aprovisionada su tropa en Villarcayo se encontraba enfermo y tuvo que aniquilar antes las guerrillas carlistas que operaban en la provincia de Burgos y entorpecian el transito de los suministros que tenia que recibir Por todo ello no pudo iniciar su marcha hasta mediados de noviembre llegando a Portugalete el dia 25 con sus 14 000 soldados Dos dias despues comenzo su avance hacia Bilbao por la orilla izquierda del rio pero fue rechazado con gran perdida de efectivos dado que las posiciones carlistas que se le interponian estaban muy bien fortificadas y defendidas con gran valor El fracaso le hizo ver la dificultad de avanzar y romper el cerco por esta orilla decidiendose a realizarlo por la opuesta nbsp Baldomero Espartero Tras consultar con los jefes de la Armada espanola y la de los dos buques de guerra britanicos fondeados en la ria se dispuso a construir un puente sobre el Nervion a la altura de Portugalete fuera del alcance de la artilleria enemiga aunque expuesto por su cercania a la desembocadura al mar a sufrir la fuerza del oleaje El puente se construyo colocando en linea abarloados 32 lugres goletas y bergantines que se hallaban en la ria perfectamente amarrados en la larga extension de 680 pies y con sus planchas de cuarteles de unos a otros 5 El dia 30 ya se hallaba en la orilla derecha gran parte de su ejercito enviando a los defensores de Bilbao con el telegrafo optico un mensaje que decia El ejercito del Norte estara hoy entre Algorta y Aspe o alto frente de Portugalete y se dirige por el E a Asua y manana por Archanda a Bilbao 6 nbsp Telegrafo optico Grabado de 1843 Pero el avance no tuvo lugar con la rapidez que habia previsto entablandose la mas larga batalla de esta guerra Batalla editarEn el trecho que se extiende entre el lugar de su desembarco y Bilbao se abren dos barrancos en la cadena montanosa de la margen derecha del Nervion bajando perpendiculares al rio En sus cauces fluia mucha agua dadas las fuertes lluvias de los ultimos dias El dia 1 llegaron los isabelinos formados en tres columnas paralelas al primer barranco a la altura del puente de Gobelas pero este habia sido cortado por lo que tuvieron que vadear el riachuelo muy crecido y bajo el fuego de la fusileria carlista Continuaron avanzando hacia la parte alta del siguiente barranco hasta el puente de Asua Tambien este estaba inutilizado y los carlistas habian establecido los tres fortines artillados de Cabras San Pablo y Banderas situados en cerros de la estribacion sur del barranco Este barranco era el foso del campo enemigo 7 Los emplazamientos carlistas cubrian perfectamente el barranco desde Azua hasta el Nervion sometiendo a los isabelinos a un intenso fuego Llegando la noche Espartero desistio de su intento de franquearse el paso por Asua y decidio realizarlo al dia siguiente por Luchana lugar situado en la parte baja del barranco junto al Nervion Como tambien alli habian inutilizado el puente los carlistas proyectaba construir en este lugar un puente de pontones levantando antes baterias en las alturas de su orilla para contrarrestar el fuego de las enemigas 8 nbsp Guardia Real de infanteria isabelina Grabado de la decada de 1840 En tanto se realizaban estas disposiciones arrecio el temporal el dia 5 y destrozo el puente que les unia a Portugalete el cual era la unica comunicacion con la orilla izquierda desde donde tenian que recibir los viveres y las municiones y poder evacuar sus heridos Ante ello renuncio Espartero a intentar forzar el paso por Luchana retiro inmediatamente en barcazas la artilleria a la orilla izquierda del Nervion dando comienzo a la construccion de un nuevo puente para reemplazar al destruido mas al sur y mas protegido de los embates del mar pero ahora tambien bajo el alcance de la artilleria de los tres fortines carlistas El dia 7 por la tarde quedo terminada la nueva obra comenzando a retirarse a la orilla izquierda las tropas isabelinas pero mientras lo cruzaban el temporal volvio a partirlo en dos debiendose realizar el paso de la fuerza restante empleando lanchas 9 nbsp Bruno Villarreal Litografia de 1837 segun dibujo de Isidoro Magues Villarreal penso que Espartero volveria a intentar nuevamente el avance por la orilla izquierda desde Portugalete por lo que tambien traslado parte importante de su tropa a la misma orilla para hacerle frente 8 El dia 12 inicio Espartero efectivamente la marcha hacia Bilbao por la orilla izquierda pero los temporales habian convertido los caminos en barrizales quedando atascada la artilleria pesada que necesitaba para batir las trincheras enemigas El mal tiempo y el ardor defensivo de los carlistas obligaron a los isabelinos a desistir nuevamente de su ataque retirandose el dia 15 por tercera vez a Portugalete Ahora el estado de las tropas de Espartero no era en verdad el mas lisonjero pues que faltos de artilleria de municiones de viveres y un tanto mohinos por las tan repetidas retiradas se advertia cierto oculto disgusto que podia acrecerse de un modo inconveniente a no acudirse al remedio de las faltas que se experimentaban 10 Ante esta situacion Espartero dio al dia siguiente una orden general que fue leida a sus tropas por los oficiales En ella decia Soldados vuestra conservacion para los gloriosos hechos que os esperan me decidio ayer a retroceder sobre este punto El fuerte temporal de aguas no teniendo techado en que guareceros aunque insuficiente para apagar vuestros ardimientos habria inutilizado las municiones con que debeis batir al enemigo Aqui teneis la causa del retroceso No de ninguna manera no abandonar la grande obra de salvar Bilbao os ofreci conduciros a la victoria cuando me encargue del mando y perecere antes que privaros del triunfo Empero la empresa que vamos a acometer es ardua y solo el conocimiento de vuestro valor me decidio a acometerla y cuando volvais a salir de los cantones espero no tornareis a ellos sin que la guarnicion de Bilbao haya estrechado en sus brazos a sus libertadores 11 nbsp Infanteria carlista Grabado de 184 El dia 17 llego a Portugalete un refuerzo de tropas y una importante provision de viveres dinero y municiones tras lo cual Espartero se decidio a forzar nuevamente el paso por la orilla derecha 12 Se comenzo con la construccion de un nuevo puente facilitando los comandantes de los buques britanicos balsas para realizar previamente el paso de la artilleria y parte de la caballeria a la orilla derecha durante la noche del dia 19 y el amanecer del 20 mientras aquel se estaba terminando Para distraer el fuego carlista la goleta isabelina Isabel II y la canonera San Jose se situaron el dia 21 frente a Luchana y bombardearon el fortin de la Casa de la Polvora situado al sur del puente de este lugar aunque ambos buques fueron pronto danados y tuvieron que ponerse fuera del alcance de los canones enemigos Al anochecer los isabelinos habian emplazado sus piezas de artilleria sobre el Azua el puente sobre el Nervion quedo concluido y al amanecer el dia 22 comenzo a pasar a la orilla derecha el grueso de la infanteria isabelina y la restante caballeria Tambien se fortifico el lugar donde el puente de embarcaciones arrancaba en la orilla izquierda ocupandolo tres batallones de infanteria en prevision de que Villarreal ordenase un ataque sobre el por esa orilla Al dia siguiente dia 23 se realizo un nuevo ataque marino formado por unas 20 canoneras y trincaduras abriendo fuego frente a Luchana vivamente contestado por los carlistas El mal tiempo impidio que los fuegos intercambiados produjesen graves danos nbsp Marcelino Oraa Grabado de 1844 Amanecio el dia 24 previsto para realizar el ataque definitivo El temporal azotaba la ria y Espartero desperto enfermo debiendo ceder el mando a su jefe de plana mayor el general Marcelino Oraa Las baterias sobre el Azua y las emplazadas frente a Luchana en la orilla izquierda del Nervion no cesaron de batir las posiciones carlistas Hacia las cuatro de la tarde embarcaron en la orilla izquierda ocho companias de cazadores nota 1 en unas 30 pequenas embarcaciones la mayor parte de ellas traidas de Laredo y Castro Urdiales El fin de la empresa era saltar a la orilla ocupada por los enemigos apoderarse de sus obras y proteger la rehabilitacion del puente de Luchana En el mismo momento de dar principio a la ejecucion se pronuncio de una manera espantosa el temporal que ya reinaba Alli en aquella terrible travesia trasportados en medio de una nube pues solo agua granizo y escarcha los rodeaba por todas partes hacian resonar los vivas y aclamaciones precursoras de la victoria 13 Las canoneras y trincaduras cubrian los flancos de las fuerzas de desembarco y los cazadores consiguieron saltar a tierra Los carlistas en Luchana aunque sorprendidos por el imprevisto ataque defendieron con gran valor sus posiciones lo que dio lugar a que se trabase una contienda singular la mas extrana quiza la mas sorprendente Furiosamente alternaba el estampido del canon con los violentos mugidos del huracan embravecido mezclabase el proyectil del fusil con el que en forma de granizo y con no menor violencia arrojaban las nubes y en medio de una oscuridad casi completa la luz de los fogonazos daba un color siniestro a la nieve que cubria todos los objetos 14 nbsp Litografia de 1846 recreando la batalla de Luchana En primer termino el lugar de la orilla izquierda del Nervion donde embarcaron los cazadores Enfrente al otro lado del rio el puente de Luchana Detras se abre el barranco de Azua A la derecha del puente se ve abajo el fortin Casa de la Polvora en las cumbres de derecha a izquierda los fortines Cabras San Pablo y Banderas Los cazadores isabelinos desembarcados consiguieron finalmente desalojar de Luchana a sus enemigos se tendio junto al puente derruido uno provisional y el ejercito de la orilla norte del Azua repaso el barranco se encaramo por las laderas del sur del mismo y comenzo a asaltar los fortines de Cabras San Pablo y Banderas Pero la bravura de la defensa carlista freno sus sucesivos ataques y habiendo sido deshecho nuevamente el puente de barcas sobre el Nervion se hizo critica su situacion El temporal aumentaba los embarazos del ejercito cristino cuyo puente de comunicacion con Portugalete habia desaparecido ante la bravura del mar la nieve y el agua caia sin cesar el viento arremolinaba las nieves y jamas ejercito alguno estuvo en situacion mas critica que el de la reina hambriento desnudo y acampado al norte de la ria sic quiere decir ciudad 15 A medianoche se informo de estas circunstancias a Espartero que abandono su lecho y logrando en una lancha pasar a la otra orilla monto en un caballo y recorrio el campo de batalla Cuando entre los soldados isabelinos se corrio la voz de que su general se hallaba entre ellos les hizo retomar con fuerza los ataques y hacia las cuatro de la madrugada del dia 25 cuando el temporal cesaba un tanto en su crudeza consiguieron apoderarse del fuerte de Banderas ultimo que conservaban los carlistas los cuales iniciaron la retirada quedando para las tropas isabelinas libre el paso a Bilbao y finalizada la batalla Consecuencias editarLas tropas isabelinas entraron en Bilbao el mismo dia 25 de diciembre recibidas con gran jubilo por los defensores de la ciudad Entre los sitiadores carlistas la confusion no tenia limites las fuerzas vagaban dispersas por el pais y a tan lamentable desorden se anadio la de perderse la fuerza moral entre los soldados carlistas y un rumor de traicion circulo entre los que habian creido seguro el triunfo 16 Jose Manuel de Arizaga auditor general del ejercito carlista dice que la defensa carlista no fue lo suficientemente recia debido a que aquellos dias la mayor parte de nuestras tropas recibieron orden de acantonarse en los pueblos a retaguardia de Bilbao y muy poca fuerza quedaba cubriendo el servicio de la linea que no se considero pudiera ser atacada 17 La noticia de la batalla y de la liberacion no llego a Vitoria hasta el dia 29 pero desde alli se propago velozmente por todo Espana dando motivo a que estos hechos fuesen celebrados hasta en los lugares mas apartados del pais y numerosas localidades dieron nombre de Luchana a una de sus calles o plazas Espartero recibio el titulo de conde de Luchana mientras que Eguia y Villarreal perdieron sus mandos En esta batalla fallecio Antonio de Aymerich Ortiz de Pinedo nacido de Jose Aimerich ministro de la guerra en funciones con Cea Bermudez Incertidumbres editarNi Eguia ni Villarreal dejaron testimonio escrito sobre los motivos que tuvieron para no utilizar la agilidad de movimientos de sus batallones lo que les caracterizaba precisamente para avanzar desde Bilbao y aniquilar en Portugalete la vanguardia de Espartero que alli habia desembarcado el 26 de noviembre Ni por que no realizaron un ataque sobre esta localidad el dia 5 de diciembre o siguiente cuando el temporal habia inutilizado el puente de barcas sobre el Nervion y habia dejado a Espartero aislado en la orilla derecha Vease tambien editarLuchana Episodio nacional Notas editar Cada batallon tenia una compania de cazadores Estaba formada por los hombres mas cualificados y era la encargada de cubrir los flancos en las marchas por zonas boscosas y encabezar el asalto sobre los lugares parapetados Referencias editar Rosa Maria Lazaro Torres El poder de los carlistas Evolucion y declive de un Estado 1833 1839 p 63 Sin lugar ni fecha ISBN 48 604 6471 7 Rosa Maria Lazaro Torres op cit p 68 Galeria Militar Contemporanea Tomo II Pags 208 209 Madrid 1846 Jose Segundo Florez Espartero Tomo I p 363 Madrid 1843 Jose Segundo Florez op cit p 389 Jose Segundo Florez op cit p 391 Jose Segundo Florez op cit p 406 a b Galeria Militar Contemporanea op cit p 225 Galeria Militar Contemporanea op cit pags 223 225 Galeria Militar Contemporanea op cit p 227 Vida militar y politica de Espartero Tomo II p 97 Madrid 1844 Galeria Militar Contemporanea Pags 227 op cit Vida militar y politica de Espartero op cit p 107 Vida militar y politica de Espartero op cit p 108 Jose Manuel de Arizaga Memoria militar y politica sobre la guerra de Navarra Madrid 1840 Pag 77 Galeria Militar Contemporanea op cit p 165 Jose Manuel de Arizaga op cit Pag 77 Bibliografia editar Arizaga Jose Manuel de Memoria militar y politica sobre la guerra de Navarra los fusilamientos de Estella y principales acontecimientos que determinaron el fin de la causa de D Carlos Isidro de Borbon Imprenta Vicente Lalama 1840 Lazaro Torres Rosa Maria El poder de los carlistas Evolucion y declive de un Estado 1833 1839 Edicion propia 1993 ISBN 84 604 6471 7 Segundo Florez Jose Espartero Historia de su vida militar y de los grandes sucesos contemporaneos Sociedad Literaria 1845 Varios Galeria militar contemporanea Sociedad tipografica de Hortelano y Cia 1846 Enlaces externos editar nbsp Wikimedia Commons alberga una galeria multimedia sobre Iconografia de la Primera Guerra Carlista nbsp Datos Q3310734 nbsp Multimedia Battle of Luchana Q3310734 Obtenido de https es wikipedia org w index php title Batalla de Luchana amp oldid 157522311, wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

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