Yoganarquía
Yoganarquía es el quinto álbum del grupo uruguayo de Art Rock, La Tabaré Riverock Banda, lanzado en 1997 a través del sello Ayuí/Tacuabé, en formato CD y casete.
Yoganarquía | |||||
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Quinto Álbum de estudio de La Tabaré Riverock Banda | |||||
Publicación | 31 de octubre de 1997 | ||||
Grabación | Entre el 26 julio y el 22 setiembre de 1997 en estudio La Rosca (Montevideo - Uruguay) | ||||
Género(s) | Art Rock | ||||
Formato | Casete, CD, Descarga digital, Streaming | ||||
Discográfica | Ayuí/Tacuabé | ||||
Productor(es) | Gastón Ackermann Vázquez | ||||
Cronología de La Tabaré Riverock Banda
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Contexto
En los últimos años, La Tabaré Riverock Banda había sufrido la acusación popular de ser generadora de violencia y a pesar de ser con argumentos infundados, es verdad que en todos los toques de la banda siempre había algún disturbio que opacaba la actuación. Por ese motivo en el año '95, ya habían intentado evitar los toques eléctricos en lugares para más de 400 personas y hacer en cambio presentaciones en teatros con butacas donde el público pudiera escuchar mejor los arreglos musicales (algunos ahora con flautas, cavaquinhos, charangos…), comprender mejor los textos y apreciar los aciertos y errores…
Si bien dentro de los lugares donde se realizaban los toques la actitud del público era de disfrute, nunca se sabía muy bien qué es lo que sucedía afuera del recinto entre los que pretendían entrar (algunos) sin pagar, otros que no tenían ningún interés en escuchar a la banda sino que iban a la puerta a gritar consignas futboleras y la represión policial. La violencia no la generaba la banda sino que estaba efervescente en el aire y se respiraba esa densidad debido principalmente a la desilusión política y social reinante.
En cambio el sonido más eléctrico de La Tabaré era un catalizador de esa energía pesada y quizá también por los textos comprometidos y porque ya no había otra banda que cantara algo similar.
También se recuerda que la actitud del cantante se había vuelto "…un tanto provocadora, catártica y poco simpática…". Es probable que esta apreciación tenga algo de cierto ya que él mismo recuerda ese primer quinquenio de la década, como muy turbio. Tanto es así que a comienzos de 1996 y a pesar de que no paraban de ser convocados a tocar en boliches, eventos varios y festivales, decide no volver a subir a los escenarios con la banda y dedicarse a componer y ensayar para el nuevo disco, evitando así la responsabilidad de los acontecimientos extra musicales que lo venían desgastando desde hacía un buen tiempo.
Eso, sumado a la ausencia de sus dos amigos que fueran su brazo derecho a la hora de resolver inconvenientes: Rudy Mentario (radicado en Brasil) y Andrés Burghi (radicado primero en Madrid y luego en Paraná), más el fallecimiento de sus padres y otros problemas personales, lo fueron alejando del mundillo del rock para volver a dedicarse temporalmente al teatro, el Yoga y la Meditación.
En ese entorno compuso muchísimo material como para sacar un disco doble, idea que luego fue desechada.
En las canciones puede apreciarse un abanico de sensaciones que van de la nostalgia, el humor, el desencanto, y fundamentalmente la rabia, hasta su innato sentimiento ácrata en contraposición a una notoria búsqueda mística.
Entre tanto y en mitad de los ensayos ya en el 1997, sucederían nuevos cambios de formación. Se alejaría de la banda Diego Chapuís quien se encargaba del bajo y entraría en su lugar Jorge Pí y al poco tiempo tras una discusión se alejaría Alejandra Wolff para dar lugar al regreso de la exintegrante Raquel Blatt, quien grabaría las voces del disco y permanecería junto a la banda hasta fin de año.
Cuando el disco salió a la calle, el entorno del rock (grupos nuevos, público, escenarios, etc.) ya hacía unos cuantos meses que había comenzado una lenta transformación.
Grabación
Debido a estos cambios de integración, la banda entra al estudio La Rosca con las canciones poco ensayadas, para terminar de armarlas sobre la marcha.
El técnico de grabación fue Gastón Ackermann, quien además colaboró aportando su conocimiento. No tuvieron productor musical y quizá por eso las sesiones fueron diarias y largas. Entraban al mediodía y seguían probando y grabando hasta entrada la noche.
Andrés Burghi, que venía desde Paraná (Argentina) cada vez que había toque o grabación, hizo las tomas de batería en pocas horas un primer fin de semana, para luego regresar a tiempo a su ciudad de residencia.
Rivero tenía la intención de repetir lo que ya había hecho en sus discos anteriores (Rocanrol del Arrabal, Placeres del Sado-Musiquismo y Apunten...¡Fuego!) presentando las canciones enganchadas entre sí, casi sin silencios entre cada una de ellas y como si fuera un track único ya que la composición fue pensada como una especie de "obra conceptual".
El sonido base del disco es de rock, pero bien puede escucharse nuevamente la sonoridad de instrumentos más folklóricos que ya venían utilizando en sus presentaciones en teatros y la mixtura con el tango, el folklore, la baldada, etc.
A pesar de no estar más en la banda, fueron invitados a participar Diego Chapuís tocando el bajo y Gustavo Castro (quien había suplantado a Burghi en alguna oportunidad, cuando este vivía en Madrid). También Wolff fue invitada a poner su voz en el tema "Qué venís", pero no aceptó.
Participan otros invitados como Fernando "L. Mental" Santullo e Iván Noble (cantante en ese momento del grupo argentino Los Caballeros de la Quema, con quienes La Tabaré había compartido escenario en algunas oportunidades en Montevideo y Buenos Aires). También el Sr. Omar Freire (destacado personaje de la política uruguaya de esos tiempos, líder del Movimiento Liberación Masculina, Lista 69, que intentaba llegar al parlamento y luego a la presidencia, para entre otros importantes proyectos, convertir la Playa Ramírez en zona nudista).
Este disco finaliza exactamente igual (con las mismas notas) que el disco Rocanrol del arrabal, y lo hace con la canción "Calesita", que es una clara continuación del tema "Los buenos, los malos y yo", intentando así no solo que este álbum sea escuchado como si fuera todo un solo tema, sino también uno con los discos anteriores.
El tema "No lo aceptaremos", fue grabado en vivo en el mismo estudio, en junio del mismo año.
La grabación de Yoganarquía fue registrada en el video-documental independiente "La Rockeríada" (donde también se pueden ver toques de la banda en Brasil, Argentina y Uruguay durante el año '97).
Presentación
El disco se presenta oficialmente al público en Montevideo el 22 de noviembre en La Factoría, aunque ya lo habían tocado casi íntegramente en Zorba de Solymar, el día 8 de ese mismo mes.
Lista de canciones
Todos los temas pertenecen en letra y música a Tabaré J. Rivero, excepto los indicados.
N.º | Título | Duración | |
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1. | «Obertura» (extraído del film "Socorro", de The Beatles) | 0:53 | |
2. | «Uruguayitos barrigas» | 3:59 | |
3. | «Religión» | 3:17 | |
4. | «2 x 3 llueve» | 3:08 | |
5. | «Los rosados» | 2:31 | |
6. | «En tiempos de mala magia» | 3:26 | |
7. | «Sacro-Versículo 1» | 0:38 | |
8. | «Espantapájaros» | 3:06 | |
9. | «Qué venís» (Letra: Alejandra Wolff – Música: Tabaré J. Rivero) | 2:09 | |
10. | «El jardín volador» (con una cita de "Across the universe", de J. Lennon – P. McCartney) | 6:32 | |
11. | «Zoofisticada» | 3:10 | |
12. | «El chiste nacional» | 0:55 | |
13. | «Sacro-Versículo 2» | 0:38 | |
14. | «Sensación 8 horas» (Andrés Burghi) | 1:59 | |
15. | «¿Qué hago con la luna?» | 3:55 | |
16. | «El cosmonauta interior» | 1:54 | |
17. | «No lo aceptaremos» ("We’re not gonna take it", de Peter Townshend) | 2:01 | |
18. | «Canción para mamá» | 1:05 | |
19. | «Plegaria politeísta del rock and roll» | 2:18 | |
20. | «Los blues de madrugada» | 2:25 | |
21. | «Crónicas del Ludo» | 3:29 | |
22. | «Aclimatándonos» | 2:36 | |
23. | «Caos en R.O.U.» | 2:27 | |
24. | «Sacro-Versículo 3» | 0:42 | |
25. | «Calesita» | 3:08 | |
Músicos
- Tabaré J. Rivero: voz, guitarra acústica, cavaquito y flauta dulce
- Andrés Burghi: batería
- Hernán Rodríguez: guitarras, charango y coros
- Raquel Blatt: voz y kazoo
- Jorge Pí: bajo, contrabajo y coros
Músicos Invitados
- L.Mental: voz en "Caos en R.O.U."
- Ivan Noble: voz en "Crónicas del ludo"
- Gustavo Castro: batería en "No lo aceptaremos" y "Plegaria politeísta del rock and roll"
- Diego Chapuís: bajo en "En tiempos de mala magia", "¿Qué hago con la luna?", “Crónicas del Ludo”, "Caos en R.O.U.” y “Calesita"
- Omar Freire: escribió y dijo su discurso en "Zoofisticada"
- Matías Rivero: voz en "Canción para mamá"
- Gastón Ackermann: bandoneón con teclados
- Rudy Mentario: yerbomatófono en "Calesita"
- Ricardo “Dipa” Dipaolo: coros en "¿Qué hago con la luna?" y "En tiempos de mala magia"
- Lucas Gonzales Blatt: coros en "Sensación 8 horas"
Ficha técnica
- Técnico de grabación: Gastón Ackermann
- Mezcla: Gastón Ackermann y Hernán Rodríguez
- Arreglos: cada músico hizo el arreglo para su instrumento
- Fotos de tapa e interior del librillo: Carina Carcacía
- Diseño gráfico: Sofía Battegazzore
- Representante artístico: Andrés Rega