Falacia de Hoyle
El Argumento de Hoyle es el nombre que recibe el análisis estadístico usado por Fred Hoyle para refutar la abiogénesis. A pesar del nombre, el argumento es anterior a Hoyle, y se puede rastrear hasta la época de Darwin.[1][2][3]
Argumentación
Según su análisis, la probabilidad de que la vida celular evolucionara es de alrededor de 1 en 1040000.[cita requerida]
La probabilidad de que formas de vida superior pudieran haber emergido de esta manera es comparable a la probabilidad de que un tornado pasando sobre un montón de chatarra arme un Boeing 747 sobre la base de los materiales encontrados allí.
que es una reflexión basada en otra afirmación previa:[4]
La vida tal como la conocemos, entre otras cosas, depende de al menos 2000 enzimas diferentes. ¿Cómo pudieron las fuerzas ciegas del océano primordial arreglárselas para combinar los elementos químicos correctos para construir enzimas?
Detalles
El Argumento de Hoyle se deriva de argumentos populares en los años 1920, anteriores a la síntesis evolutiva moderna, y todos los biólogos evolutivos la rechazan.[3][5]
El primer paso consiste en establecer que el espacio de fases que contiene a cualquier entidad biológica (por ejemplo: los humanos, una célula, el ojo, etc.) es enorme — esto es algo que no está en discusión. El Argumento consiste en inferir a partir del enorme tamaño del espacio de fases, que la probabilidad de que la entidad aparezca por evolución es extremadamente baja.[3] A veces también se invoca una supuesta «Ley de Borel», para afirmar que los eventos altamente improbables no ocurren.[6] (Si todos los posibles resultados de un proceso natural son altamente improbables, entonces un resultado altamente improbable ocurrirá con certeza).
El Argumento de Hoyle es una reelaboración del viejo teorema de los infinitos monos aplicado a la bioquímica celular en lugar de las obras de Shakespeare.[3] En el Argumento se afirma que la probabilidad de que una molécula de proteína pudiera lograr una secuencia funcional de aminoácidos es demasiado baja para que ocurra exclusivamente por azar. Hoyle calculó que esto era comparable a la probabilidad de que un tornado pasando sobre un montón de chatarra pudiera armar un Boeing 747.[1]
Según Ian Musgrave (Lies, Damned Lies, Statistics, and Probability of Abiogenesis Calculations):[1]
Estas personas, incluyendo a Fred, cometen alguno de los siguientes errores:
- Calculan la probabilidad de formación de una proteína "moderna", o hasta de una bacteria completa con todas las proteínas "modernas", mediante eventos al azar. Esto no es lo que la teoría de la abiogénesis afirma en lo absoluto.
- Asumen que hay un número fijo de proteínas, con secuencias fijas por cada proteína, que son necesarias para la vida.
- Calculan la probabilidad de intentos secuenciales, en lugar de intentos simultáneos.
- No comprenden lo que significa el cálculo de probabilidades.
- Subestiman el número de enzimas funcionales/ribozimas que están presentes en un grupo de secuencias al azar.
Impacto
Muchos biólogos evolutivos rechazan el Argumento de Hoyle,[3] dado que «ningún biólogo imagina que las estructuras complejas aparecen de una sola vez».[5] La síntesis evolutiva moderna explica cómo evolucionaron las estructuras celulares, mediante el análisis de los pasos intermedios requeridos por la vida precelular.
Véase también
Referencias
- ↑ Ian Musgrave (1998). «Lies, Damned Lies, Statistics, and Probability of Abiogenesis Calculations». Consultado el 26 de abril de 2011.
- George Johnson (28 de octubre de 2007). «Bright Scientists, Dim Notions». New York Times.
- ↑ Derek Gatherer (2008). «Finite Universe of Discourse: The Systems Biology of Walter Elsasser (1904–1991)». The Open Biology Journal 1: 9-20.
- Fred Hoyle (1983). The Intelligent Universe. ISBN 0-7181-2298-4.
- ↑ John Maynard Smith (1986). The Problems of Biology. p. 49. ISBN 0-19-289198-7.
- Borel's Law and the Origin of Many Creationist Probability Assertions