Roberto III de Artois

Roberto III de Artois^[1] (1287-1342) fue señor de Conches-en-Ouche, de Domfront, y de Mehun-sur-Yèvre, y en 1310 recibió como infantazgo el condado de Beaumont-le-Roger como compensación por el condado de Artois del que era pretendiente.

Roberto III de Artois
Conde de Beaumont-le-Roger
Estatua de Roberto de Artois en Versailles
Información personal
Otros títulos	Par de Francia
Nacimiento	1287
Fallecimiento	1342
Familia
Consorte	Juana de Valois
Escudo de Roberto III de Artois
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Vida

Roberto de Artois era hijo de Felipe de Artois, señor de Conches, y Blanca de Bretaña, hija del duque Juan II de Bretaña, ambos descendientes por línea masculina de la dinastía de los Capetos, descendiente directo de Luis VIII de Francia.

Sólo tenía once años cuando su padre murió el 11 de septiembre de 1298 por heridas sufridas en la batalla de Furnes el 20 de agosto de 1297 contra los flamencos. La temprana muerte de su padre fue causa indirecta de su disputa sobre la sucesión al condado de Artois.

Querella sucesoria del Artois

Roberto de Artois fue uno de los protagonistas de una de las querellas sucesorias más importantes del medioevo: Su padre, Felipe de Artois (1269-1298), era el hijo y heredero de Roberto II, conde de Artois (1250-1302), quien murió prematuramente.

Después de la muerte de su abuelo Roberto II de Artois, en la batalla de Courtrai en 1302, su hija, Matilde (1268-1329), heredó el condado de Artois de acuerdo con la costumbre. Debido a su edad, Roberto no podía ponerle ninguna objeción a su tía y afirmar los derechos que él heredase de su padre.

El rey,en ese momento Felipe IV de Francia, falló en favor de Matilde, quien se convierte en condesa de Artois, y a Roberto se le cede el título de conde Beaumont-le-Roger, sin la dignidad de par del Reino. De ahí en adelante Roberto de Artois apeló varias veces por lo que él consideraba suyo por derecho legítimo, llegando incluso a levantar a los señores del Artois en contra de su tía, revuelta sofocada por el regente de Francia, Felipe de Poitiers.

El rencor y las intrigas entre Matilde y Roberto se enmarcan en una época de tensión entre Francia e Inglaterra, antes de la Guerra de los Cien Años.

Ascensión de Felipe VI

Roberto de Artois fue un fiel aliado de Carlos de Valois, apoyó siempre tanto sus ideas como la propuesta de nombrarle regente ante el fallecimiento de Luis X de Francia y el embarazo de la reina Clemencia.

En enero de 1328 se produce la muerte del rey de Francia, Carlos IV, suscitándose un problema sucesorio idéntico al que había acaecido con la muerte de Luis X en el año 1316: el rey moría con solo una hija y con una esposa embarazada. De nacer varón, sería rey, de nacer una niña, Francia se enfrentaría al mayor dilema sucesorio desde hace trescientos años.

Durante el breve período del embarazo de Juana de Evreux, la regencia recayó en Felipe de Valois, hijo de Carlos de Valois y primo hermano del rey Carlos IV. La reina viuda dio a luz el 1 de abril de 1328 a una niña bautizada Blanca.

Roberto tuvo un papel importante en la sucesión de Felipe VI de Francia (el medio hermano de su esposa) al trono, y fue su fiel consejero durante algún tiempo. De ahí consiguió cierta influencia en el consejo real que intentó usar para conseguir arrancar a Matilde de Artois un condado que él consideraba suyo. El trono de Francia quedó vacante debido a la Ley Sálica (o ley de los varones) instituida por Felipe el Largo.

Se planteaban así los derechos sucesorios de dos nobles:

El Regente Felipe de Valois: por tanto, primo hermano de los últimos tres reyes (Luis X, Felipe V, Carlos IV), hijo de Carlos de Valois y nieto de Felipe III de Francia;
El Rey Eduardo III de Inglaterra: por tanto, hijo de Isabel de Francia, sobrino de los últimos reyes y nieto de Felipe IV el Hermoso.

Los Estados Generales se reunieron ante este problema y decidieron que la Ley Sálica privaba a las mujeres de transmitir los derechos sucesorios, de igual manera que las privaba para gobernar Francia. Así, con el apoyo de Roberto III de Artois, Felipe de Valois fue coronado como rey de Francia con el nombre de Felipe VI de Francia y concedió al Beaumont-le-Roger la calidad de Condado Pairal.

Sucesión del Artois

El año siguiente, 1329, falleció Matilde de Artois, sobreviviéndole sólo una hija, Juana, que había sido reina de Francia por su matrimonio con Felipe V. Matilde cedió el Artois a su hija. Basándose en el ejemplo del estado del condado de Flandes, de nuevo suscitó el asunto de la sucesión. Artois fue puesto bajo la custodia del rey de Francia. Sin embargo, en 1331, usó un documento falsificado creado por Juana de Divion sobre el testamento de su padre. Este engaño fue descubierto y Roberto perdió cualquier esperanza de adquirir el Artois.

La falsificadora Juana de Divion fue condenada en la hoguera. Los bienes de Roberto fueron confiscados en 1331, y huyó del país en 1332 para eludir el arresto y la ejecución, y se refugió en Namur, con su sobrino Juan II, marqués de Namur. Felipe confiscó su propiedad, apresando a su esposa y sus hijos Juan y Carlos, quienes fueron encerrados en Château-Gaillard. Pidió al obispo de Lieja atacara Namur. De ahí que se marchara a Flandes en concreto a Juan III de Brabante, su sobrino político. De nuevo, la influencia de Felipe suscitó una guerra contra Brabante, y Roberto se exilió de nuevo, esta vez a Inglaterra.

Guerra de los Cien Años

Fue en Inglaterra, donde se reunió con Eduardo III en 1334 o en diciembre de 1336, donde encontró su venganza.^[2] Admitido en la corte inglesa, urgió a Eduardo III cuya esposa Felipa de Henao también descendía de Carlos de Valois de que reclamara derechos sucesorios al trono de Francia, y proporcionó amplia información sobre la corte francesa al rey inglés. Esta guerra de sucesión dio paso a la Guerra de los Cien Años.

A partir de ese momento, siguió a Eduardo en sus campañas. El pueblo de Flandes reconoció al monarca inglés como su rey. Felipe VI confiscó la Guyena. Eduardo III se proclamó rey legítimo de Francia, comenzando así la guerra en estas dos provincias, tan alejadas la una de la otra.

Asumió el mando del ejército anglo-flamenco en la batalla de Saint-Omer en 1340;^[3] recibió algunas heridas el 24 de junio de 1340, en la batalla naval de la Esclusa, en la que la flota francesa fue destruida por la armada inglesa.

Murió de disentería después de resultar herido en la ciudad de Vannes en noviembre de 1342,^[4] en el curso de la Guerra de Sucesión de Bretaña. Al principio, se le enterró en la iglesia de Blackfriars, en Londres, aunque su tumba está hoy en la catedral de San Pablo.

Matrimonio e hijos

En 1318 contrae matrimonio con una de las hijas del segundo matrimonio del conde Carlos, Juana de Valois, del cual nacerían siete hijos:

Catalina de Artois (1319–1368)
Luis de Artois (1320–1326/29)
Juan de Artois (1321–1387), conde de Eu "sans Terre"
Juana de Artois (1323), m. joven
Jaime de Artois (1325–desp. 1347)
Roberto de Artois (1326–desp. 1347)
Carlos de Artois, conde de Pézenas y Longueville (1328–1385)