Leatherman (vagabundo)
El Leatherman (ca. 1839-1889), "el hombre de cuero", fue un vagabundo famoso por su traje y ropa hecha de cuero que viajó en un circuito entre Connecticut y el Río Hudson entre los año 1856 y 1889 aproximadamente. Aunque su origen es desconocido, se piensa que era canadiense o posiblemente francés, debido a su fluidez en el idioma francés, su torpe inglés y el libro de oraciones en francés encontrado sobre él después de su muerte. Aunque a veces ha sido identificado como Jules Bourglay, no se tiene certeza sobre su identidad.
Vida
Viviendo en refugios rocosos y "cuevas de cuero", como son ahora conocidas localmente, se detenía en pueblos a lo largo de sus recorridos (de 365 millas) cada 34 días para abastecerse de comida y suministros. Fue apodado como "Leatherman" (hombre de cuero) ya que todas sus prendas, desde el sombrero o la bufanda, hasta los zapatos, estaban hechas a mano de cuero.
Hablaba francés con fluidez. Se comunicaba mayormente mediante gruñidos y gestos, raramente usando su inglés entrecortado. Cuando se le preguntaba acerca de sus orígenes, terminaba abruptamente la conversación. Después de su muerte, un libro de oraciones en francés fue encontrado entre sus pertenencias. Se negaba a comer carne los viernes, dando lugar a las especulaciones de que podría ser católico.
Se desconoce como ganaba dinero, aunque una tienda registró su pedido: "un pan, una lata de sardinas, una libra de galletitas, un pastel, un cuarto de galón de café, un gill de coñac y una botella de cerveza".
Leatherman era bastante popular en Connecticut. Confiándose en sus rutas, la gente tenía comida extra preparada para él, la cual a menudo comía en las puertas de las casas. Diez pueblos a lo largo de la ruta de Leatherman pasaron ordenanzas eximiéndolo de la "ley del vagabundo" del estado vigente desde 1879.
Salud
El Leatherman sobrevivió tormentas de nieve y otras tempestades calentando con fuego sus refugios rocosos. La Humane Society de Connecticut lo arrestó y hospitalizó en 1888, por una mancha en su labio que creían que era resultado de la tormenta de nieve de 1888. Finalmente falleció de cáncer en la boca debido al consumo de tabaco, tras haber escapado antes de ser tratado. Su cuerpo fue encontrado el 24 de marzo de 1889 en su cueva de Saw Mill Woods cerca de Ossining, Nueva York.
Tumba
Su tumba está ubicada en el Cementerio Sparte, en la Ruta 9 de Scarborough, Nueva York. La siguiente inscripción está tallada en su lápida:
ÚLTIMA MORADA DE
Jules Bourglay
DE LYON, FRANCIA
"THE LEATHER MAN"
quien regularmente caminaba un recorrido de 365 millas
a través de Westchester y Connecticut desde
el Río Connecticut hasta el Hudson
viviendo en cuevas en los años
1858–1889
Controversia sobre la identidad
En la lápida del Leatherman se lee: "Última morada de Jules Bourglay de Lyon, Francias, 'The Leather Man'…", y es identificado con ese nombre en varios informes. Sin embargo, según los investigadores, incluyendo a Dan W. DeLuca, su identidad continúa siendo desconocida. Este nombre apareció por primera vez en una historia publicada en el Waterbury Daily American, el 16 de agosto de 1884, pero luego fue retractada el 25, 26 y 27 de marzo de 1889, y también en el The Meriden Daily Journal, el 29 de marzo de 1889.
Exhumación
Ya que su tumba en el Cementerio Sparta está a 16 pies de la Ruta 9, hay planes para exhumar su cuerpo. Aunque la fecha exacta de su exhumación no se hará pública, se prevé que será en la primavera de 2011. Un equipo de nueve antropólogos y arqueólogos participarán en la exhumación, y hay planes de hacer un análisis de ADN en los restos del Leatherman. El cuerpo será re enterrado en el Cementerio Sparta en una ubicación más segura para los visitantes. Como resultado de estos planes, han surgido controversias, algunos ciudadanos de la localidad insisten en que el cuerpo se deje intacto. La exhumación se llevó a cabo en mayo-junio de 2011, pero no se encontraron restos orgánicos. [1] Según Norman MacDonald, presidente de la Sociedad Histórica de Ossinning (organización que vigiló el proceso), los huesos se desintegraron, convirtiéndose en abono para la tierra. Sí encontraron los clavos del ataúd, dijo también MacDonald.