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Eucaristía

La Eucaristía (del griego εὐχαριστία, eucharistía, acción de gracias), llamada también Santo Sacrificio,[1]Cena del Señor,[2]Fracción del Pan, Comunión, Santísimo Sacramento, Santos Misterios o Santa Cena, según la tradición de las iglesias católica, ortodoxa, copta, anglicana, presbiteriana y algunas denominaciones luteranas, considerado como un sacramento, es el cuerpo y la sangre de Jesucristo bajo las especies de pan y vino.

Elevación de la Eucaristía, después de la consagración en el rito romano tradicional.
Preparación de las especies y objetos litúrgicos para la Divina Liturgia según el Rito eslavo-bizantino.

Los elementos de la Eucaristía son el pan sacramental (con o sin levadura) y el vino sacramental que se consagran en un altar (o una mesa de comunión) y se consumen a partir de entonces. Los comulgantes, aquellos que consumen los elementos, pueden hablar de "recibir la Eucaristía", así como de "celebrar la Eucaristía".

Los católicos creen que por la consagración las sustancias del pan y el vino en realidad se convierten en el cuerpo y la sangre de Cristo (transubstanciación) mientras las apariencias (o "especies") del pan y el vino permanecen inalteradas. Los luteranos creen que el cuerpo y la sangre de Cristo están realmente presentes "en, con y bajo" las formas del pan y el vino (unión sacramental). Los cristianos reformados creen en una presencia espiritual real de Cristo en la Eucaristía. La teología eucarística anglicana afirma universalmente la presencia real de Cristo en la Eucaristía. Otros, como los cristadelfianos consideran que el acto es solo una recreación simbólica de la Última Cena y un memorial conmemorativo.

En la Iglesia católica, en las Iglesias ortodoxas, copta y en la Iglesia anglicana, la eucaristía se considera la fuente y culmen de la vida de todo cristiano. De acuerdo al catecismo de la Iglesia católica la eucaristía representa un signo de unidad, vínculo de caridad y banquete pascual en el que se recibe a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da prenda de la vida eterna.[3]

Teología de la eucaristía

Se pueden considerar cinco cosas principales que han sido objeto de la reflexión teológica acerca de la eucaristía: la institución del sacramento, la eucaristía como sacrificio incruento, la eucaristía como presencia real de Cristo, la eucaristía como comunión y la eucaristía como prenda de la gloria futura.

Institución del sacramento

El término griego εὐχαριστία (eucaristía) aparece quince veces en el Nuevo Testamento.[4]​ La teología católica considera a la eucaristía como un sacramento instituido por Jesucristo durante la Última Cena.

 
Gérard de Lairesse - La institución de la Eucaristía

La Iglesia católica afirma que la institución de la eucaristía por Jesucristo, tal como lo relatan los evangelios sinópticos, se realizó cuando tomando en sus manos el pan, lo partió y se los dio a sus discípulos diciendo:

Tomad y comed, este es mi cuerpo, que será entregado por vosotros. Del mismo modo, tomó el cáliz y se lo dio a sus discípulos diciendo: Tomad y bebed todos de él, porque esta es mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna, que será derramada por vosotros y por muchos para el perdón de los pecados. Haced esto en conmemoración mía.
Cfr. Mateo 26:26-29; Marcos 14:22-25; Lucas 22:19-20; ICor 11:23-26

Ahora bien, esto se dio, según los relatos evangélicos en un contexto amplio:

  • Cena Pascual: según los evangelios sinópticos la institución se da en el transcurso de la cena pascual (Mateo 26:17-25; Marcos 14:12-21; Lucas 22:7-18).
  • La Iglesia católica entiende que la eucaristía fue prefigurada ya en el Antiguo Testamento, especialmente en la cena pascual, celebrada por los judíos, donde consumían pan sin levadura, carne de cordero asada al fuego y hierbas amargas.[5]
  • Los elementos principales de la celebración de la Pascua judía se encuentran en los siguientes textos bíblicos: Ex 12:1-8; Dt 16; Lv 23:5-8; Nm 28:16-25.
  • San Pablo considera la muerte de Jesús en cruz en clave pascual: «Cristo nuestra Pascua ha sido inmolado» (1Cor 5:7). Lo mismo hace San Juan Evangelista al aplicar a Cristo la frase referida al Cordero Pascual: «no se le quebrará hueso alguno» (Éxodo 12:46) en Juan 19:36.
  • La Pasión. En el relato de la institución de la eucaristía, Jesús anuncia su propia muerte violenta: habla de «mi cuerpo, que será entregado», «el cáliz de mi sangre, que será derramada».[6]
  • Servicialidad mutua. De acuerdo con el relato del evangelista Juan, antes de la cena Jesús lavó los pies a sus discípulos y mandó a todos ellos que siguieran ese ejemplo de servicialidad (Juan 13:1-20), amándose como él los amó (Juan 15:12).

Eucaristía como sacrificio

La Iglesia católica cree que en la eucaristía se hace presente («se re-presenta») el mismo y único sacrificio que Cristo hizo en la cruz de una vez para siempre, se perpetúa su recuerdo a través de los siglos y se aplica su fruto.[7]

La Eucaristía es el memorial de la Pascua de Cristo, la actualización y la ofrenda sacramental de su único sacrificio, en la liturgia de la Iglesia que es su Cuerpo... El memorial no es solamente el recuerdo de los acontecimientos del pasado... estos acontecimientos se hacen, en cierta forma, presentes y actuales. Por ser memorial de la Pascua de Cristo, la Eucaristía es también un sacrificio. El carácter sacrificial de la Eucaristía se manifiesta en las palabras mismas de la institución: "Esto es mi Cuerpo que será entregado por vosotros" y "Esta copa es la nueva Alianza en mi sangre, que será derramada por vosotros" (Lc 22,19-20). En la Eucaristía, Cristo da el mismo cuerpo que por nosotros entregó en la cruz, y la sangre misma que "derramó por muchos [...] para remisión de los pecados" (Mt 26,28).[8]

El sacrificio de la cruz y el sacrificio de la eucaristía son un único sacrificio, ya que tanto en uno como en otro, Cristo es el sacerdote que ofrece el sacrificio y la víctima que es ofrecida. Se diferencian solo en la forma en que se ofrece el sacrificio. En la cruz Cristo lo ofreció en forma cruenta, y por sí mismo, y en la Misa en forma incruenta y por ministerio de los sacerdotes.[9]​ "Y puesto que en este divino sacrificio que se realiza en la misa, se contiene e inmola incruentamente el mismo Cristo que en el altar de la cruz "se ofreció a sí mismo una vez de modo cruento"; […] este sacrificio [es] verdaderamente propiciatorio."[10]

Sólo los presbíteros válidamente ordenados pueden presidir la Eucaristía y consagrar el pan y el vino para que se conviertan en el Cuerpo y la Sangre del Señor.[11]​ En cuanto sacrificio, la Eucaristía es ofrecida también en reparación de los pecados de los vivos y los difuntos, y para obtener de Dios beneficios espirituales o temporales.[12]

El sacrificio de la misa, no añade nada al sacrificio de la cruz sino que hace presente sacramentalmente en nuestros altares el mismo y único sacrificio del Calvario.[13]​ Por tanto en el sacrificio de la misa se hace presente («se re-presenta») el mismo y único sacrificio de la cruz.

En los Padres de la Iglesia

La Didaché, el escrito más importante de los Padres apostólicos, hace la siguiente advertencia: «Reuníos el día del Señor y romped el pan y dad gracias después de haber confesado vuestros pecados, a fin de que vuestro sacrificio (thusía) sea puro».[14]

San Ignacio de Antioquía (f. hacia 107) indica el carácter sacrificial de la eucaristía tratando, en un mismo texto, de la eucaristía y el altar; y el altar como sitio donde se ofrece el sacrificio (thusiastérion): «Tened, pues, buen cuidado de no celebrar más que una sola eucaristía, porque una sola es la carne de nuestro Señor Jesucristo, y uno solo el cáliz para la reunión de su sangre, y uno solo el altar, y de la misma manera hay un solo obispo con los presbíteros y diáconos».[15]

San Justino Mártir (f. hacia 165) considera como figura de la eucaristía aquel sacrificio de harina fina que tenían que ofrecer los que sanaban de la lepra. El sacrificio puro profetizado por Malaquías, que es ofrecido en todo lugar, no es otro —según el santo— que «el pan y el cáliz de la eucaristía».[16]

San Ireneo de Lyon (f. hacia el 202) enseña que la carne y la sangre de Cristo son «el nuevo sacrificio de la Nueva Alianza», «que la Iglesia recibió de los apóstoles y que ofrece a Dios en todo el mundo». Lo considera como el cumplimiento de la profecía de Malaquías.[17]

Tertuliano (f. después de 220) designa la participación en la solemnidad eucarística como «estar junto al altar de Dios», y la comunión como «participar en el sacrificio».[18]

San Cipriano (f. 258) enseña que Cristo, como sacerdote según el orden de Melquisedec, «ofreció a Dios Padre un sacrificio, y por cierto el mismo que había ofrecido Melquisedec, esto es, consistente en pan y vino, es decir, que ofreció su cuerpo y su sangre».[19]​ «El sacerdote, que imita lo que Cristo realizó, hace verdaderamente las veces de Cristo, y entonces ofrece en la iglesia a Dios un verdadero y perfecto sacrificio si empieza a ofrecer de la misma manera que vio que Cristo lo había ofrecido».[20]

San Ambrosio (f. 397) enseña que en el sacrificio de la misa Cristo es al mismo tiempo ofrenda y sacerdote: «Aunque ahora no se ve a Cristo sacrificarse, sin embargo, Él se sacrifica en la tierra siempre que se ofrenda el cuerpo de Cristo; más aún, es manifiesto que Él ofrece incluso un sacrificio en nosotros, pues su palabra es la que santifica el sacrificio que es ofrecido».[21]

En la Edad Media

Pedro Lombardo afirma en el libro de Sentencias: «lo que es ofrecido y consagrado por el sacerdote se llama sacrificio y oblación porque es memoria y representación del verdadero sacrificio y de la santa inmolación hecha en el altar de la cruz. Una sola vez murió Cristo y en ella se inmoló a sí mismo; pero es inmolado cada día en el sacramento, porque en el sacramento se cumple la memoria de cuanto ha sido realizado una sola vez».[22]

 
Santo Tomás de Aquino

Santo Tomás de Aquino resuelve distintas objeciones al carácter sacrificial de la Eucaristía, continuando la doctrina de los Padres y afirmando la identidad del sacrificio eucarístico con el realizado por Cristo en la cruz.[23]

En la Reforma Protestante

Hasta la Reforma Protestante, en dieciséis siglos de cristianismo, nunca se había dado un ataque directo a la doctrina del sacrificio eucarístico.[24]

 
Martín Lutero

Martín Lutero afirma que, dado que el hombre solo es justificado por Dios a través de la fe y no de las obras, la misa es una obra humana más sin mayor eficacia que el de aumentar la fe.[25]​ El sacrificio de Cristo es uno solo y la misa es un don recibido, no una ofrenda sacrificial que podamos dar a Dios. Por ello, abolió el canon romano y las misas privadas, dejando solo el recuerdo de la Cena.[26]

Ulrico Zwinglio, partiendo también del hecho de que el sacrificio de Cristo es único, afirma que la misa es solo un recuerdo del sacrificio, una garantía de la redención que nos obtuvo el Señor.[27]

Juan Calvino afirma no solo la unicidad del sacrificio, sino también del sacerdote que excluye cualquier sucesor o vicario.[28]​ Las últimas ediciones de su libro Institución de la religión cristiana admiten que la misa sea sacrificio pero de alabanza y acción de gracias, nunca de propiciación[29]

Recientemente algunos reformadores han vuelto a considerar la teología del sacrificio eucarístico y en los documentos teológicos elaborados entre católicos y luteranos o anglicanos hay diversas posiciones más o menos cercanas, aunque todavía no comunes. [cita requerida]

En la Contrarreforma

La Iglesia católica, abordó, en el Concilio de Trento, la controversia con los protestantes sobre el carácter sacrificial de la Misa. Sus definiciones fueron aprobadas en la sesión XXII (17 de septiembre de 1562).[30]​ El Concilio menciona que las mismas se basan en «esta antigua fe, fundada en el sacrosanto Evangelio, en las tradiciones de los Apóstoles y en la doctrina de los Santos Padres».[31]

 
Concilio de Trento.

Algunas de sus definiciones fueron:

  1. la Misa es un verdadero y propio sacrificio que se ofrece a Dios;[32]
  2. dicho sacrificio es representación y memorial del sacrificio hecho en la cruz por Cristo, por el que su eficacia saludable se aplica para la remisión de los pecados;[33]
  3. el oferente y el ofrecido tanto en la misa como en la cruz es el mismo Jesucristo. La diferencia está dada porque en la cruz el ofrecimiento fue cruento y en la misa incruento y porque en la cruz Cristo hizo el ofrecimiento por sí mismo, y en la misa, por ministerio de los sacerdotes;[34]
  4. se trata de un sacrificio visible, como según el Concilio exige la naturaleza humana;[33]
  5. su institución fue realizada por Cristo mismo, cuando dijo: «haced esto en memoria mía» (Lc 22, 19; 1 Cor 11,24).[35]

En el magisterio reciente

Pío XII en la encíclica Mediator Dei,[36]​ retoma la doctrina tridentina del sacrificio eucarístico:

  • su institución[37]
  • su carácter de verdadera renovación del sacrificio de la cruz.[38]​ A este respecto recordará:
    • la identidad del sacerdote y la víctima (Jesucristo)[39]
    • la diferencia en el modo de su ofrecimiento (cruento e incruento). Sobre este punto menciona:
la divina sabiduría ha hallado un modo admirable para hacer manifiesto el sacrificio de nuestro Redentor con señales exteriores, que son símbolos de muerte, ya que, gracias a la transustanciación del pan en el cuerpo y del vino en la sangre de Cristo, así como está realmente presente su cuerpo, también lo está su sangre; y de esa manera las especies eucarísticas, bajo las cuales se halla presente, simbolizan la cruenta separación del cuerpo y de la sangre. De este modo, la conmemoración de su muerte, que realmente sucedió en el Calvario, se repite en cada uno de los sacrificios del altar, ya que, por medio de señales diversas, se significa y se muestra Jesucristo en estado de víctima.
Mediator Dei, n. 89
  • la identidad de fines del sacrificio de la cruz y del eucarístico: la glorificación de Dios,[40]​ la acción de gracias,[41]​ la propiciación por nuestros pecados y los de todo el género humano, vivos y difuntos[42]​ y la impetración de la gracia y bendición de Dios.[43]
  • el valor infinito del sacrificio divino.[44]
  • la necesidad de la colaboración de los fieles en el sacrificio eucarístico. Sin embargo, sobre este punto remarcó la diferencia entre el sacerdocio común de los fieles, recibido en el Bautismo, y el sacerdocio ministerial, conferido por el sacramento del Orden Sagrado.[45]
 
Padres conciliares en el Concilio Vaticano II.

El Concilio Vaticano II, en la Constitución Sacrosanctum Concilium,[46]​ puntualizó:

Nuestro Salvador, en la Última Cena, la noche que le traicionaban, instituyó el Sacrificio Eucarístico de su Cuerpo y Sangre, con lo cual iba a perpetuar por los siglos, hasta su vuelta, el Sacrificio de la Cruz y a confiar a su Esposa, la Iglesia, el Memorial de su Muerte y Resurrección: sacramento de piedad, signo de unidad, vínculo de caridad, banquete pascual, en el cual se come a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de la gloria venidera.
Sacrosanctum concilium, n. 47

San Pablo VI en la encíclica Mysterium Fidei[47]​ subraya la ofrenda de la Iglesia como parte del sacrificio:

la Iglesia, al desempeñar la función de sacerdote y víctima juntamente con Cristo, ofrece toda entera el sacrificio de la misa, y toda entera se ofrece en él. [...] Porque toda misa, aunque sea celebrada privadamente por un sacerdote, no es acción privada, sino acción de Cristo y de la Iglesia, la cual, en el sacrifico que ofrece, aprende a ofrecerse a sí misma como sacrificio universal, y aplica a la salvación del mundo entero la única e infinita virtud redentora del sacrificio de la Cruz. Pues cada misa que se celebra se ofrece no sólo por la salvación de algunos, sino también por la salvación de todo el mundo.
Mysterium fidei, n. 4

El mismo Papa, en el Credo del Pueblo de Dios,[48]​ expresó:

Nosotros creemos que la misa que es celebrada por el sacerdote representando la persona de Cristo, en virtud de la potestad recibida por el sacramento del orden, y que es ofrecida por él en nombre de Cristo y de los miembros de su Cuerpo místico, es realmente el sacrificio del Calvario, que se hace sacramentalmente presente en nuestros altares.
Credo del Pueblo de Dios, n. 24

San Juan Pablo II en la encíclica Ecclesia de Eucharistia,[49]​ mencionó que en la eucaristía:

está inscrito de forma indeleble el acontecimiento de la pasión y muerte del Señor. No sólo lo evoca sino que lo hace sacramentalmente presente. Es el sacrificio de la Cruz que se perpetúa por los siglos.
Ecclesia de Eucharistia, n. 11

El Catecismo de la Iglesia Católica[50]​ ha rescatado todos los elementos que se han ido recorriendo, exponiéndolos de esta manera:

La Eucaristía es el corazón y la cumbre de la vida de la Iglesia, pues en ella Cristo asocia su Iglesia y todos sus miembros a su sacrificio de alabanza y acción de gracias ofrecido una vez por todas en la cruz a su Padre; por medio de este sacrificio derrama las gracias de la salvación sobre su Cuerpo, que es la Iglesia.[51]

La Eucaristía es el memorial de la Pascua de Cristo, es decir, de la obra de la salvación realizada por la vida, la muerte y la resurrección de Cristo, obra que se hace presente por la acción litúrgica.[52]

Es Cristo mismo, sumo sacerdote y eterno de la nueva Alianza, quien, por el ministerio de los sacerdotes, ofrece el sacrificio eucarístico. Y es también el mismo Cristo, realmente presente bajo las especies del pan y del vino, la ofrenda del sacrificio eucarístico.[53]

Solo los presbíteros válidamente ordenados pueden presidir la Eucaristía y consagrar el pan y el vino para que se conviertan en el Cuerpo y la Sangre del Señor.[54]

En cuanto sacrificio, la Eucaristía es ofrecida también en reparación de los pecados de los vivos y los difuntos, y para obtener de Dios beneficios espirituales o temporales.[55]

Cristo, que pasó de este mundo al Padre, nos da en la Eucaristía la prenda de la gloria que tendremos junto a él: la participación en el Santo Sacrificio nos identifica con su Corazón, sostiene nuestras fuerzas a lo largo del peregrinar de esta vida, nos hace desear la Vida eterna y nos une ya desde ahora a la Iglesia del cielo, a la Santa Virgen María y a todos los santos.[56]

Benedicto XVI en la exhortación apostólica Sacramentum caritatis[57]​ se ha expresado así:

Al instituir el sacramento de la Eucaristía, Jesús anticipa e implica el Sacrificio de la cruz y la victoria de la resurrección. Al mismo tiempo, se revela como el verdadero cordero inmolado, previsto en el designio del Padre desde la creación del mundo, como se lee en la primera Carta de San Pedro (cf. 1,18-20). Situando en este contexto su don, Jesús manifiesta el sentido salvador de su muerte y resurrección, misterio que se convierte en el factor renovador de la historia y de todo el cosmos. En efecto, la institución de la Eucaristía muestra cómo aquella muerte, de por sí violenta y absurda, se ha transformado en Jesús en un supremo acto de amor y de liberación definitiva del mal para la humanidad.
Sacramentum caritatis n. 10

Eucaristía como presencia real

 
Sacerdote católico eleva la hostia y el cáliz consagrados.

La Iglesia católica cree que "Jesucristo está presente en la Eucaristía de modo verdadero, real y sustancial: con su Cuerpo y con su Sangre, con su Alma y su Divinidad. Cristo, todo entero, Dios y hombre, está presente en ella de manera sacramental, es decir, bajo las especies eucarísticas del pan y del vino. Esta presencia se denomina "real", no a título exclusivo, como si las otras presencias no fuesen "reales", sino por excelencia, porque es substancial, y por ella Cristo, Dios y hombre, se hace totalmente presente."[58]

Además afirma "que por la consagración del pan y del vino se opera la conversión de toda la substancia del pan en la substancia del Cuerpo de Cristo y de toda la substancia del vino en la substancia de su Sangre; la Iglesia católica ha llamado justa y apropiadamente a este cambio transubstanciación."[59]​ Esta conversión se opera en la plegaria eucarística con la consagración, mediante la eficacia de la palabra de Cristo y de la acción del Espíritu Santo. Sin embargo, permanecen inalteradas las características sensibles del pan y del vino, esto es las «especies eucarísticas».[60][61]​ Doctrina que emerge de los evangelios sinópticos, Jesús al decir "Este es mi cuerpo", afirma que el pan es su cuerpo y no una representación de su cuerpo.

Y señala que "la presencia eucarística de Cristo comienza en el momento de la consagración y dura todo el tiempo que subsistan las especies eucarísticas" y que "Cristo está todo entero presente en cada una de las especies y todo entero en cada una de sus partes, de modo que la fracción del pan no divide a Cristo" [62]

Por ello, al creer que la Eucaristía es el cuerpo y la sangre de Cristo, se le debe rendir el culto de latría, es decir la adoración reservada a Dios, tanto durante la celebración eucarística, como fuera de ella. La Iglesia, en efecto, conserva con la máxima diligencia las Hostias consagradas, las lleva a los enfermos y a otras personas imposibilitadas de participar en la Santa Misa, las presenta a la solemne adoración de los fieles, las lleva en procesión e invita a la frecuente visita y adoración del Santísimo Sacramento, reservado en el Sagrario.[63][64]​ En virtud de esto, entiende que la eucaristía se destaca del resto de los sacramentos ya que mientras ellos tienen la misión de santificar, en la eucaristía se halla el autor mismo de la santidad.[65]

Las Iglesias de Comunión Anglicana, sostienen que el pan y el vino una vez consagrados, son el Cuerpo y la Sangre de Cristo, sin analizar qué pasa con las substancias primarias, simplemente en las palabras del Señor Jesús: «Este pan es mi Cuerpo», «este vino es mi sangre», por eso se le considera, Jesucristo Sacramentado, Presencia Real del Señor Jesús en el Sacramento del Altar. [cita requerida]

La iglesia luterana, por su parte, confiesa que en el sacramento el cuerpo y sangre de Cristo subsiste junto con los elementos de pan y vino, denominándose esta teoría «consustanciación». [cita requerida]

La mayoría de iglesias reformadas (bautistas, pentecostales, etc), creen que el pan y el vino no cambian y solo utilizan la eucaristía como una rememoración de la Última Cena.[66]

En los Padres de la Iglesia

Según el Catecismo de la Iglesia católica, los Padres de la Iglesia afirmaron con fuerza la fe de la Iglesia en la eficacia de la Palabra de Cristo y de la acción del Espíritu Santo para obrar la conversión del pan en el cuerpo y del vino en la sangre de Cristo.[67]​ A continuación algunos ejemplos:

 
Martirio de San Ignacio de Antioquía.

San Ignacio de Antioquía (f. entre 98 y 117) expresa su fe en distintas cartas escritas a las comunidades cristianas rumbo a su martirio: «Se abstienen (los docetas) de la Eucaristía y de la oración , porque no confiesan que la Eucaristía es la carne de nuestro Salvador Jesucristo, que sufrió por nuestros pecados y que el Padre, por su bondad, resucitó.».[68]​ «Procurad serviros provechosamente de la única Eucaristía: una es, en efecto, la carne de nuestro Señor Jesucristo y uno el cáliz para la unidad de su sangre».[69]

Justino Mártir (f. entre 162 y 168) en su Apología Primera escribe: «Y este alimento se llama entre nosotros Εὐχαριστία [Eucaristía], del cual nadie puede participar sino el que cree que las cosas que enseñamos son verdaderas , y que ha sido lavado con el bautismo para remisión de los pecados. y para la regeneración, y que vive de la manera en que Cristo lo ha ordenado. Porque no los recibimos como pan común y bebida común; pero de la misma manera que Jesucristo nuestro Salvador, habiendo sido hecho carne por la Palabra de Dios , tuvo carne y sangre para nuestra salvación , así también se nos ha enseñado que la comida que es bendecida por la oración de su palabra, y de la que se nutre nuestra sangre y carne por transmutación, es la carne y la sangre de ese Jesús que se hizo carne. Porque los apóstoles , en las memorias escritas por ellos, que se llaman Evangelios , así nos han entregado lo que les fue encomendado; que Jesús tomó pan, y habiendo dado gracias, dijo: Haced esto en memoria de mí, esto es mi cuerpo; y que, de la misma manera, tomando la copa y habiendo dado gracias, dijo: Esto es mi sangre; y se lo dio a ellos solos. (Lucas 22:19)»[70]

San Ireneo de Lyon (f. hacia 200): «Así como el pan terreno recibiendo la invocación de Dios no es ya el acostumbrado pan, sino la Eucaristía, compuesta de dos elementos, terreno y celeste, así también nuestros cuerpos recibiendo la Eucaristía no son ya corruptibles, teniendo la esperanza de la resurrección».[71]

San Ambrosio (f. 397): «Estemos bien persuadidos de que esto no es lo que la naturaleza ha producido, sino lo que la bendición ha consagrado, y de que la fuerza de la bendición supera a la de la naturaleza, porque por la bendición la naturaleza misma resulta cambiada...La palabra de Cristo, que pudo hacer de la nada lo que no existía, ¿no podría cambiar las cosas existentes en lo que no eran todavía? Porque no es menos dar a las cosas su naturaleza primera que cambiársela».[72]

San Juan Crisóstomo (f. 407): «Cuánta gente dice hoy: ‘Querría ver a Cristo en persona, su cara, sus vestidos, sus zapatos’. ¡Pues bien, en la eucaristía es a él al que ves, al que tocas, al que recibes! Deseabas ver sus vestidos; y es él mismo el que se te da no sólo para verle, sino para tocarlo, comerlo, acogerlo en tu corazón».[73]

En la Edad Media

En el medioevo la reflexión fue más rica en matices debido al influjo de la escolástica. Hubo tendencias de realismo exagerado de tipo físico: la carne de Cristo en la eucaristía sería absolutamente la misma que tuvo tras su encarnación y la Misa sería un caso de antropofagia querida por Dios. A los seguidores de esta línea se les llamó «cafarnaitas». [74]

Pascasio Radberto (785-865) fue un teólogo carolingio y abad de Corbie, cuya obra más conocida e influyente fue De Corpore et Sanguine Domini (escrita entre 831 y 833), la cual es una exposición sobre la naturaleza de la Eucaristía. En esta, Pascasio está de acuerdo con Ambrosio al afirmar que la Eucaristía contiene el verdadero cuerpo histórico de Jesucristo. Según Pascasio, Dios es la verdad misma y, por lo tanto, sus palabras y acciones deben ser verdaderas. La proclamación de Cristo en la Última Cena de que el pan y el vino eran su cuerpo y la sangre debe tomarse literalmente, ya que Dios es la verdad. Por tanto, el cree que realmente se produce la transubstanciación del pan y del vino ofrecidos en la Eucaristía. Sólo si la Eucaristía es el verdadero cuerpo y la sangre de Cristo, el cristiano puede saber que es salvífica.

También se abrió paso la teología del símbolo sacramental que distinguía entre la presencia del cuerpo y de la sangre del Señor tras su encarnación y el modo de su presencia sacramental. Berengario de Tours fue todavía más allá subrayando de manera extrema el simbolismo. La Iglesia católica en diversos sínodos condenó la posición de Berengario y se le obligó a suscribir profesiones de fe algunas de las cuales se iban al otro extremo. [75]

 
La Misa de Bolsena, de Rafael.

Hay que esperar al siglo XIII para una reflexión teológica más equilibrada. De manos principalmente de Santo Tomás de Aquino se abre paso la afirmación de la presencia real y sacramental. Con la ayuda de la filosofía aristotélica –en especial la distinción entre sustancia y accidentes– se elabora la teología de la «transubstanciación». [76]​ Tomás de Aquino trata teológicamente del tema en la tercera parte de la Summa Theologiae, cuestiones 75 a 77;[77]​ y de manera espiritual y con lirismo en los himnos que es bastante probable que haya compuesto para la misa de Corpus Christi, solemnidad instituida por el papa Urbano IV tras el milagro de Bolsena.[78]​ En el IV Concilio de Letrán se consagra la terminología escolástica: « Jesucristo, cuyo cuerpo y sangre se contiene verdaderamente en el sacramento del altar bajo las especies de pan y vino, después de transustanciados, por virtud divina, el pan en el cuerpo y el vino en la sangre…».[79]​ También en el II Concilio de Lyon: « El sacramento de la Eucaristía lo consagra de pan ázimo la misma Iglesia Romana, manteniendo y enseñando que en dicho sacramento el pan se transustancia verdaderamente en el cuerpo y el vino en la sangre de Nuestro Señor Jesucristo».[80]

John Wyclif rechaza la teoría de Santo Tomás de Aquino de la transubstanciación. Él no acepta la desaparición de la sustancia del pan y del vino ni tampoco la permanencia de los accidentes sin sujeto de inhesión. Para él la presencia de Cristo en la Eucaristía es sacramental o en signo, de manera virtual. Estas proposiciones fueron condenadas por los Concilios locales de Oxford, Canterbury y Londres de 1382. [81]​ Estas condenas fueron ratificadas en el Concilio ecuménico de Constanza.[82]

En la Reforma

Todos los reformadores coincidieron en que Cristo no permanece en el pan y vino consagrados terminada la Misa, que no debe ser adorado en los mismos, y que por lo tanto no deben ser guardados.[83]​ Sin embargo, ellos mantuvieron significativas diferencias entre sí:

  • Lutero siempre afirmó la presencia real de Cristo, aunque desechó por completo el dogma de la transustanciación, por considerarlo una «sofisticada especulación»[84]​ En su postura, el pan y el vino no dejan de ser tales, sino que el Cuerpo y Sangre de Cristo están juntamente con ellos. Se ha llamado a esta teoría «consustanciación» o «impanación» aunque él nunca la ha llamado por estos nombres.[85]
  • Calvino admite una cierta presencia («virtus spiritualis») durante la celebración de la cena pero relacionada con la fe.[87]
  • Los anabautistas consideraron que la realidad del cuerpo y la sangre de Cristo en la celebración de la Cena no está determinada por una transubstanciación, sino porque la comunidad cristiana es el cuerpo de Cristo.[88]​ que efectivamente comparte un mismo alimento;[89]​ y es su sangre porque cada integrante de la comunidad cristiana también ama como Cristo amó, hasta entregar la vida por los demás.[88]​ Así el vino y el pan que se parte en la Cena, son unión comunitaria con la sangre de Cristo y participación de su cuerpo, de manera que los que comparten el mismo alimento son un solo cuerpo ICor 10:16-17, del cual Cristo es cabeza Ef 1:22-23 Col 1:18.

En la Contrarreforma

El tema se abordó en la sesión XIII del Concilio de Trento en el año 1551, donde se aprobó el Decreto sobre la Santísima Eucaristía.[90]

El propósito del Concilio fue presentar la doctrina católica, rebatiendo las proposiciones de los reformadores. Según sus definiciones, la presencia de Cristo en el sacramento no es en signo o figura (Zuinglio, Ecolampadio), ni virtual (Calvino),[91]​ sino que queda fijada de esta forma: «en el santísimo sacramento de la Eucaristía se contiene verdadera, real y sustancialmente el cuerpo y la sangre, juntamente con el alma y la divinidad, de nuestro Señor Jesucristo y, por ende, Cristo entero».[92]

Distinguió entre presencia «natural» y «sacramental», según el Concilio tan real como la primera: «Porque no son cosas que repugnen entre sí que el mismo Salvador nuestro esté siempre sentado a la diestra de Dios Padre, según su. modo natural de existir, y que en muchos otros lugares esté para nosotros sacramentalmente presente en su sustancia, por aquel modo de existencia, que si bien apenas podemos expresarla con palabras, por el pensamiento, ilustrado por la fe, podemos alcanzar ser posible a Dios y debemos constantísimamente creerlo. En efecto, así todos nuestros antepasados, cuantos fueron en la verdadera Iglesia de Cristo que disertaron acerca de este santísimo sacramento, muy abiertamente profesaron que nuestro Redentor instituyó este tan admirable sacramento en la última Cena, cuando, después de la bendición del pan y del vino, con expresas y claras palabras atestiguó que daba a sus Apóstoles su propio cuerpo y su propia sangre».[93]​ Con esto evitó el super-realismo (cafarnaitas) y el simbolismo espiritualista (Berengario, Zuinglio, Ecolampadio).[94]

Además definió la presencia en cada una de las dos especies, contra todos los reformadores, que defendían la comunión bajo las dos especies. Y el carácter permanente de esta presencia, contra los que la negaban fuera de la comunión. Afirmó la validez del término «transustanciación», contra todos los reformadores, que negaban la validez del término y su significado. Finalmente, extrae las consecuencias prácticas de lo anterior: culto de adoración eucarístico, distribución de la eucaristía a los enfermos fuera de la misa, reserva de la eucaristía terminada la celebración.[95]

En el magisterio reciente

El Papa Pío XII en la encíclica Mediator Dei reafirmó la presencia real y el culto eucarístico[96]​ y en la encíclica Humani Generis condenó las posturas teológicas que hablaban de presencia simbólica.[97]

El Concilio Vaticano II, según comenta José Aldazábal, no le dedicó ningún documento, solo un capítulo de la Constitución Sacrosanctum Concilium, mientras el Concilio de Trento dedicó nada menos que tres sesiones para tratar el tema de la Eucaristía. Sin embargo, según puntaliza este autor, lo interesante de este Concilio es que todo él está lleno de alusiones a la Eucaristía como centro del misterio eclesial.[98]​ Asimismo, continúa, como fruto de las enseñanzas del Concilio, se ha recuperado una visión conjunta de todos los aspectos del sacramento. Por ejemplo, la presencia real y el culto, acentuados como punto central, habían hecho pasar a un segundo plano la celebración y la comunión de los fieles. Asimismo, una idea de sacrificio desligada de la categoría de memorial, había acentuado la separación entre las dos dimensiones de «sacrificio» y «sacramento».[99]

Pablo VI en la encíclica Mysterium Fidei repropuso las líneas principales de la teología tridentina y afirmó los diversos modos de presencia de Cristo en su Iglesia, privilegiando el eucarístico.[100]

Asimismo, en el Credo del Pueblo de Dios manifestó: «Cualquier interpretación de teólogos que busca alguna inteligencia de este misterio, para que concuerde con la fe católica, debe poner a salvo que, en la misma naturaleza de las cosas, independientemente de nuestro espíritu, el pan y el vino, realizada la consagración, han dejado de existir, de modo que, el adorable cuerpo y sangre de Cristo, después de ella, están verdaderamente presentes delante de nosotros bajo las especies sacramentales del pan y del vino, como el mismo Señor quiso, para dársenos en alimento y unirnos en la unidad de su Cuerpo místico».[101]

San Juan Pablo II en la encíclica Ecclesia de Eucharistia, subrayó que «la Iglesia vive de la Eucaristía. Esta verdad no expresa solamente una experiencia cotidiana de fe, sino que encierra en síntesis el núcleo del misterio de la Iglesia. Ésta experimenta con alegría cómo se realiza continuamente, en múltiples formas, la promesa del Señor: "He aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo" (Mt 28, 20); en la sagrada Eucaristía, por la transformación del pan y el vino en el cuerpo y en la sangre del Señor, se alegra de esta presencia con una intensidad única. Desde que, en Pentecostés, la Iglesia, Pueblo de la Nueva Alianza, ha empezado su peregrinación hacia la patria celeste, este divino Sacramento ha marcado sus días, llenándolos de confiada esperanza».[102]

Benedicto XVI en la exhortación apostólica Sacramentum Caritatis comenzó la misma expresando: «Sacramento de la caridad, la Santísima Eucaristía es el don que Jesucristo hace de sí mismo, revelándonos el amor infinito de Dios por cada hombre. En este admirable Sacramento se manifiesta el amor "más grande", aquel que impulsa a "dar la vida por los propios amigos" (cf. Jn 15,13). En efecto, Jesús "los amó hasta el extremo" (Jn 13,1). Con esta expresión, el evangelista presenta el gesto de infinita humildad de Jesús: antes de morir por nosotros en la cruz, ciñéndose una toalla, lava los pies a sus discípulos. Del mismo modo, en el Sacramento eucarístico Jesús sigue amándonos « hasta el extremo», hasta el don de su cuerpo y de su sangre. ¡Qué emoción debió embargar el corazón de los Apóstoles ante los gestos y palabras del Señor durante aquella Cena! ¡Qué admiración ha de suscitar también en nuestro corazón el Misterio eucarístico!».[103]

 
La Última Cena fresco en Milán (1498), de Leonardo da Vinci.

Eucaristía como comunión

Del latín communĭo, el término comunión hace referencia a participar en lo común.[104]

Según comenta Joan M. Canals, «la reforma litúrgica del Concilio Vaticano II ha restaurado la participación activa de los fieles en la celebración», «la oración ante la presencia santa es plegaria de comunión con Cristo y con los hermanos expresada en solidaridad y caridad».[105]

El Catecismo de la Iglesia Católica expresa que «La Iglesia es "comunión de los santos": esta expresión designa primeramente las "cosas santas" ["sancta"], y ante todo la Eucaristía, "que significa y al mismo tiempo realiza la unidad de los creyentes, que forman un solo cuerpo en Cristo" (LG 3)»[106]

En los Hechos de los Apóstoles, se relata la experiencia de la primera comunidad cristiana, que une la celebración de la fracción del pan a sus compromisos de comunión hasta la condivisión de los bienes: «Todos se reunían asiduamente para escuchar la enseñanza de los Apóstoles y participar en la vida común, en la fracción del pan y en las oraciones (…) Todos los creyentes se mantenían unidos y ponían lo suyo en común: vendían sus propiedades y sus bienes, y distribuían el dinero entre ellos, según las necesidades de cada uno. Íntimamente unidos, frecuentaban a diario el Templo, partían el pan en sus casas, y comían juntos con alegría y sencillez de corazón; ellos alababan a Dios y eran queridos por todo el pueblo. Y cada día, el Señor acrecentaba la comunidad con aquellos que debían salvarse.»[107]

En la época patrística también encontramos muestras de la relación entre Eucaristía y la unión de la comunidad cristiana. Recordemos esta cita de san Ignacio de Antioquía: «Procurad serviros con fruto de la única Eucaristía; una es, en efecto, la carne de nuestro Señor Jesucristo y uno el cáliz por la unidad de su sangre, uno el altar como uno el obispo con los presbíteros y diáconos, mis cofrades, a fin de que todo lo que hagáis lo hagáis según Dios».[108]

Santo Tomás de Aquino subraya que la gracia de la Eucaristía es la «unidad del Cuerpo Místico», la comunión con Cristo y entre nosotros, la unidad del pueblo cristiano.[109]

A este respecto, el Catecismo de la Iglesia Católica afirma los siguientes frutos o efectos de la comunión:

  • La comunión acrecienta la propia unión con Cristo.[110]
  • La comunión con la Carne de Cristo resucitado, "vivificada por el Espíritu Santo y vivificante", conserva, acrecienta y renueva la vida de gracia recibida en el Bautismo.[111]
  • La comunión separa del pecado.[112]
  • Fortalece la caridad que, en la vida cotidiana, tiende a debilitarse; y esta caridad vivificada borra los pecados veniales.[113]
  • Preserva de futuros pecados mortales.[114]
  • La unidad del Cuerpo místico: La Eucaristía hace la Iglesia. Los que reciben la Eucaristía se unen más estrechamente a Cristo. Por ello mismo, Cristo los une a todos los fieles en un solo cuerpo: la Iglesia.[115]
  • La comunión entraña un compromiso en favor de los pobres.[116]

Eucaristía como prenda de la gloria futura

Según el evangelio de San Juan, Cristo ha prometido la vida eterna a los que lo reciben en este sacramento:

El que come mi carne y bebe mi sangre tiene Vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día.
Juan 6:54-56.

En una antigua oración se dice:

¡Oh sagrado banquete, en que Cristo es nuestra comida; se celebra el memorial de su pasión; el alma se llena de gracia, y se nos da la prenda de la gloria futura!
Del Oficio de Corpus Christi[117]

En la oración citada se menciona un orden de tiempo, tres perspectivas: presente («el alma se llena de gracia»), pasado («memorial de su pasión») y futuro («prenda de la gloria futura»), que es el objeto de esta sección.[118]

Según comenta Josep M. Rovira Belloso, «la fuerza de la Eucaristía consiste en anticipar la presencia de Cristo, término final de toda historia humana. Más aún, nos impele hacia aquel final que solamente llegará con la colaboración de la libertad responsable de los seres humanos. Para poder ser anticipación, el sacramento está arraigado en Cristo: desde este futuro absoluto, que se encuentra "en la derecha del Padre", Cristo es Señor del tiempo. La Eucaristía es, por tanto, anticipación de la plenitud divina, que nos ha prometido y que esperamos con fe. Es el advenimiento incoado de esa plenitud. El Señor ha querido anticipar entre sus amigos su presencia y su gracia».[119]

Dice el Catecismo de la Iglesia Católica: «La Iglesia sabe que, ya ahora, el Señor viene en su Eucaristía y que está ahí en medio de nosotros. Sin embargo, esta presencia está velada. Por eso celebramos la Eucaristía (...)mientras esperamos la gloriosa venida de Nuestro Salvador Jesucristo».[120]​ «De esta gran esperanza, la de los cielos nuevos y la tierra nueva en los que habitará la justicia (cf 2 P 3,13), no tenemos prenda más segura, signo más manifiesto que la Eucaristía. En efecto, cada vez que se celebra este misterio, "se realiza la obra de nuestra redención" (LG 3) y "partimos un mismo pan que es remedio de inmortalidad, antídoto para no morir, sino para vivir en Jesucristo para siempre" (S. Ignacio de Antioquía, Eph 20,2)».[121]

Elementos de la Eucaristía

Pueden mencionarse la materia utilizada, la forma en que se realiza la misma, el ministro que la lleva a cabo y los participantes de la misma.

Materia

Se debe usar pan de trigo y vino de vid.[122]​ En la Instrucción general del Misal Romano se confirma para el rito latino el uso del pan ácimo (sin fermentar), el cual debe ser de confección reciente.[123]​ Los orientales han usado y usan pan fermentado, lo cual es aceptado como válido por la Sede Romana.[124]

Para los fieles que padecen la enfermedad celíaca, la Iglesia ha normado la elaboración de hostias «con la mínima cantidad de gluten necesaria para obtener la panificación sin añadir sustancias extrañas ni recurrir a procedimientos que desnaturalicen el pan».[125]​ Asimismo se ha dispuesto que «el fiel celíaco que no pueda recibir la comunión bajo la especie del Pan, incluido el pan con una mínima cantidad de gluten, puede comulgar bajo la sola especie del Vino».[126]​ El sacerdote que padece esta enfermedad, y no puede tolerar ni una mínima cantidad de gluten no puede celebrar individualmente, pero sí, con permiso del Obispo, concelebrar con otros sacerdotes y comulgar él solamente bajo la especie del vino, aunque no puede presidir la concelebración.[127]

El vino para la celebración eucarística debe ser «del producto de la vid» (cfr. Lc 22, 18), natural y puro, es decir, no mezclado con sustancias extrañas.[128]​ Se mezcla con un poco de agua, de acuerdo a una costumbre antiquísima que según algunos documentos se remonta al mismo Jesucristo. El agua alude al agua y la sangre que salieron del costado de Cristo tras la lanzada (cf. Jn 19 34) y a la unión del pueblo cristiano con Cristo.[129]

Para los sacerdotes que por motivos de salud, no pueden tomar vino ni aun en mínimas cantidades, está previsto, con permiso del Obispo, usar mosto, es decir «el zumo de uva fresco o conservado, cuya fermentación haya sido suspendida por medio de procedimientos que no alteren su naturaleza (por ejemplo el congelamiento)».[130]

Forma

La Iglesia Católica cree que el pan se convierte en el cuerpo y el vino en la sangre del Señor en el momento más solemne de la misa llamado consagración. En él, el sacerdote relata la escena de la institución del sacramento y repite las palabras usadas por Jesús, «esto es mi cuerpo», «esta es mi sangre», «haced esto en conmemoración mía», mencionadas anteriormente. La Iglesia enseña que «la fuerza de las palabras y de la acción de Cristo y el poder del Espíritu Santo hacen sacramentalmente presentes bajo las especies de pan y de vino su Cuerpo y su Sangre, su sacrificio ofrecido en la cruz de una vez para siempre».[131]

Ministro

Solo el presbítero y el obispo válidamente ordenado pueden celebrar válidamente la Eucaristía.[132]​ Según la Instrucción general del Misal Romano,[133]​ varios ministros pueden celebrar conjuntamente la Eucaristía. A este acto se le llama concelebración, y según este documento, en ella «se manifiesta provechosamente la unidad del sacerdocio y del sacrificio, como también de todo el pueblo de Dios».

La misma está mandada:

También –siempre según el mismo documento- es recomendada para:

  • la misa del Jueves Santo
  • la misa que se celebra en los concilios, en las reuniones de obispos y en los sínodos
  • la misa conventual
  • la misa principal que se celebra en las iglesias y en los oratorios.
  • las misas que se celebran en cualquier tipo de reuniones de sacerdotes, tanto seculares como religiosos
  • en la ordenación del Diácono

Participantes

Si bien solo el sacerdote válidamente ordenado puede realizar la consagración, la Iglesia enseña que la Eucaristía es «fuente y cima de toda la vida cristiana»,[134]​ «compendio y suma de nuestra fe»,[135]​ el canon 230 del Derecho canónico en su párrafo tercero ha establecido que donde lo aconseje la necesidad de la Iglesia y no haya ministros, pueden los laicos suplirles en algunas de sus funciones, es decir, ejercitar el ministerio de la palabra, presidir las oraciones litúrgicas, administrar el bautismo y dar la sagrada Comunión según la prescripción del derecho.[136]

De acuerdo con la doctrina de la Iglesia católica recibir la Eucaristía en estado de pecado mortal es un sacrilegio[137]​ y solo aquellos que se encuentren en estado de gracia, es decir, sin pecado mortal alguno, pueden recibirla.[138]​ Basándose en 1 Cor 11:27-29[139]​ afirma lo siguiente: "Quien tenga conciencia de hallarse en pecado grave (pecado mortal) que no comulgue el Cuerpo del Señor sin acudir antes a la confesión sacramental".[140]

La Iglesia insta a sus fieles de participar de la misma todos los domingos y fiestas de precepto, y de recibir al menos una vez al año la comunión sacramental y recomienda vivamente a los feligreses recibir la santa Eucaristía los domingos y los días de fiesta, o con más frecuencia aún, incluso todos los días, pero siempre en estado de gracia. [141]

La celebración eucarística se da en el contexto de una reunión. La Iglesia cree que a la cabeza de la misma está Cristo mismo, que es el actor principal. Como representante suyo, el obispo o presbítero preside la asamblea «in persona Christi capitis» («en la persona de Cristo Cabeza»). Todos los fieles tienen parte activa en la celebración, cada uno a su manera: los lectores, los que presentan las ofrendas, los que dan la comunión, y el pueblo entero cuyo «Amén» manifiesta su participación.[142]

También recordaremos nuevamente aquí que «la Iglesia, al desempeñar la función de sacerdote y víctima juntamente con Cristo, ofrece toda entera el sacrificio de la misa, y toda entera se ofrece en él»; «Porque toda misa, aunque sea celebrada privadamente por un sacerdote, no es acción privada, sino acción de Cristo y de la Iglesia».[143]

Desarrollo del rito

En la Primera Apología de Justino Mártir (cc.LXV-LXVII) se describe la celebración eucarística con las siguientes partes: liturgia de la palabra, homilía, oración de los fieles, abrazo de la paz, presentación de los dones y plegaria eucarística, comunión eucarística, comunión de bienes.

«65. Luego, al que preside a los hermanos, se le ofrece pan y un vaso de vino, y tomándolos él tributa alabanzas y gloria al Padre del universo por el nombre de su Hijo y por el Espíritu Santo y pronuncia una larga oración de gracias, por habernos concedido esos dones que de Él nos vienen... Y una vez que el presidente ha dado gracias y aclamado todo el pueblo, los que entre nosotros se llaman "ministros" o "diáconos" dan a cada uno de los asistentes parte del pan y del vino y del agua sobre el que se dijo la acción de gracias y lo llevan a los ausentes.

66. Y este alimento se llama entre nosotros "Eucaristía", de la que nadie es lícito participar, sino el que cree ser verdaderas nuestras enseñanzas y se ha lavado en el baño que da la remisión de los pecados y la regeneración, y vive conforme a lo que cristo nos enseñó... cuando Jesús, tomando el pan y dando gracias, dijo: "Haced esto en memoria mía, éste es mi cuerpo". E igualmente tomando el cáliz y dando gracias, dijo: "Esta es mi sangre", y que sólo a ellos les dio parte.

67. Seguidamente, nos levantamos todos a una y elevamos nuestras preces, y éstas terminadas, como ya dijimos, se ofrece pan y vino y agua, y el presidente, según sus fuerzas, hace igualmente subir a Dios sus preces y acción de gracias y todo el pueblo exclama diciendo "amén". Ahora viene la distribución y participación, que se hace a cada uno, de los alimentos consagrados por la acción de gracias y su envío por medio de los diáconos a los ausentes».

A partir del siglo III los testimonios acerca de la celebración de la Eucaristía son cada vez más claros, sea en relación con el esquema celebrativo que permanece sustancialmente el propuesto por Justino, sea por los numerosos textos de plegarias eucarísticas para la celebración. Tales textos contienen una verdadera catequesis teológica y de fe sobre la Eucaristía. En el libro de las Constituciones apostólicas se indica el orden de la celebración: liturgia de la palabra, oración de los catecúmenos y abrazo de la paz (los catecúmenos se retiran), presentación de los dones, anáfora o plegaria eucarística, comunión, oración después de la comunión, oración de bendición y despedida.

La plegaria eucarística consta de los siguientes elementos:[144]

  1. Acción de gracias que se expresa en el prefacio.
  2. Aclamación de alabanza del pueblo con el sanctus.
  3. La epíclesis para pedir la intervención del Espíritu Santo que transformará el pan en el cuerpo y el vino en la sangre del Señor.
  4. La narración de la institución con las palabras consacratorias.
  5. El memorial o anámnesis del misterio pascual de Cristo.
  6. La ofrenda de la Iglesia a través y junto con la víctima sagrada.
  7. Las peticiones e intercesiones por los vivos y muertos.
  8. La doxología final que glorifica a Dios.

En algunas iglesias protestantes o evangélicas se bendicen los alimentos, se toman los elementos de la mano de ancianos o diáconos, se leen los pasajes donde es instituida, se participa y termina con oraciones de adoración y acción de gracias. [cita requerida]

Véase también

Notas y referencias

  1. «Concilio Vaticano II. Constitución Dogmática Sacrosantum Concilium. Capítulo II. El Sacrosanto misterio de la Eucaristía». Vaticano. 4 de diciembre de 1963. 
  2. Lockward, A. 2003. Nuevo diccionario de la Biblia. Editorial Unilit: Miami p. 214
  3. Cfr. Compendio del Catecismo de Doctrina Católica n. 271.
  4. «Strong's Greek: 2169. εὐχαριστία (eucharistia) - thankfulness, giving of thanks» (en inglés). Consultado el 6 de junio de 2019. 
  5. Carro, D., Poe, J. T., & Zorzolia, R. O. 1994; 2003. Comentario Bíblico Mundo Hispano Tomo 2: Exodo. Editorial Mundo Hispano. p. 114
  6. (Mateo 26:26-29; Marcos 14:22-25; Lucas 22:19-20; ICor 11:23-26)
  7. Concilio de Trento, DS 1740; Catecismo de la Iglesia Católica, 1366
  8. Catecismo de la Iglesia Católica, 1362-1367
  9. Concilio de Trento, DS 1743, Catecismo de la Iglesia Católica, 1367
  10. Catecismo de la Iglesia Católica, 1367
  11. Catecismo de la Iglesia Católica, 1411
  12. Catecismo de la Iglesia Católica, 1414
  13. «Credo del Pueblo de Dios # 24». 
  14. Didajé, Cap XIV, nro 1
  15. San Ignacio de Antioquía, Philad. 4, cf. Eph 5, 2
  16. San Justino Mártir. Diálogo con Trifón, 41
  17. San Ireneo de Lyon, Adv. haer. iv 17, 5; cf. Iv 18, 2 y 4
  18. Tertuliano, De orat. 19
  19. San Cipriano, Ep. 63, 4
  20. San Cipriano, Ep. 63, 14
  21. San Ambrosio, In Ps. 38, 25
  22. In Sent. IV, d. 12, n. 7; PL 192, 866
  23. Santo Tomás de Aquino, Suma teológica - Parte IIIa - Cuestión 83, art 1
  24. José Antonio Sayés, El Misterio Eucaristico, Ediciones Palabra, 2ed., España, pag. 199
  25. Martín Lutero, De captivitate baylonica, Ed. Weimar, VI, pags 512 a 514
  26. Martín Lutero, De abroganda missa privata, Ed. Weimar, VIII, pag. 415
  27. Opera Omnia, Ed. Schuler, Schultness, Zúrich 1828ss, I, pag 154
  28. Juan Calvino, Institución de la religión cristiana, 4, 18, 2
  29. José Antonio Sayés, El Misterio Eucaristico, Ediciones Palabra, 2ed., España, pag. 206
  30. Denzinger 937 a 956
  31. Concilio de Trento, sesión XXII, cap 9, Denzinger 947.
  32. Concilio de Trento, sesión XXII, canon 1, Denzinger 948.
  33. Concilio de Trento, sesión XXII, cap 1, Denzinger 938.
  34. Concilio de Trento, sesión XXII, cap 1, Denzinger 938, 940; canon 2, Denzinger 949.
  35. Concilio de Trento, sesión XXII, cap 1, Denzinger 938; canon 2, Denzinger 949.
  36. Cf. Mediator Dei de la Santa Sede.
  37. Mediator Dei n. 85.
  38. Mediator Dei n. 86.
  39. Mediator Dei nn. 87 y 88.
  40. Mediator Dei n. 90.
  41. Mediator Dei n. 91.
  42. Mediator Dei n. 92.
  43. Mediator Dei n. 93.
  44. Mediator Dei nn. 94-96.
  45. Mediator Dei nn. 97-137.
  46. Cf. texto en español de la Santa Sede.
  47. Cf. Mysterium fidei.
  48. Cf. Credo del Pueblo de Dios
  49. Cf. Ecclesia de Eucharistia de la Santa Sede.
  50. Catecismo de la Iglesia Católica.
  51. Catecismo de la Iglesia Católica 1407.
  52. Cf. Catecismo de la Iglesia Católica 1409.
  53. Cf. Catecismo de la Iglesia Católica 1410.
  54. Cf. Catecismo de la Iglesia Católica 1411.
  55. Cf. Catecismo de la Iglesia Católica 1414.
  56. Cf. Catecismo de la Iglesia Católica 1419.
  57. Cf. Sacramentum caritatis.
  58. Cf. Catecismo de la Iglesia Católica 1374, Concilio de Trento, DS 1651
  59. Catecismo de la Iglesia Católica #1376
  60. Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica #283
  61. Denzinger 715, Concilio de Trento, sesion XIII, Denzinger 877.
  62. Catecismo de la Iglesia Católica nro 1377
  63. Catecismo de la Iglesia Católica nro 1378
  64. Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica #286
  65. Concilio de Trento, Denzinger 876
  66. Jesucristo instituyó la Eucaristía
  67. Catecismo de la Iglesia Católica, n.º 1375
  68. San Ignacio de Antioquía, Carta a los cristianos de Esmirna, 7, 1.
  69. San Ignacio de Antioquía, Carta a los cristianos de Filadelfia 4, 1.
  70. Primera Apología de Justino Mártir #66, hacia el año 155
  71. San Ireneo de Lyon, Contra las herejías,IV, 18, 4-5
  72. San Ambrosio, myst. 9,50.52.
  73. san Juan Crisóstomo (v. 345-407), sacerdote en Antioquía, después obispo de Constantinopla, doctor de la Iglesia, Homilía sobre el evangelio de Mateo, n° 82; PG 58, 743.
  74. Véase José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pág. 273.
  75. Véase José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pags 276 a 281.
  76. Véase José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pags 284 a 287
  77. Santo Tomás de Aquino, Suma teológica - Parte IIIa
  78. Joan M. Canals, El Culto a la Eucaristía, Barcelona, 2.ª edición, 2001, pags 29 y 30.
  79. IV Concilio de Letrán, Denzinger 430
  80. II Concilio de Lyon, Denzinger 466
  81. José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pág. 289
  82. Concilio de Constanza, Denzinger 581 a 583
  83. José Aldázabal Larrañaga, La Eucaristía, Centro de Pastoral Litúrgica, 1999, pág. 183.
  84. José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pag 316.
  85. José Aldázabal Larrañaga, La Eucaristía, Centro de Pastoral Litúrgica, 1999, pág. 195.
  86. Véase José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pág. 316.
  87. José Aldázabal Larrañaga, La Eucaristía, Centro de Pastoral Litúrgica, 1999, págs. 191-192.
  88. Schlaffer, Hans (1527); Una agradable carta de consolación; Selecciones Teológicas Anabautistas: 160-161. Guatemala: Herald Press, 1986
  89. Riedeman, Peter (1545); Relato; Selecciones Teológicas Anabautistas:166-168
  90. Denzinger 873 a 893
  91. José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pag 333
  92. Concilio de Trento, sesión XIII, canon 1, Denzinger 883; véase además Denzinger 874 y 876
  93. Concilio de Trento, sesión XIII, capítulo 1, Denzinger 874
  94. José Aldázabal Larrañaga, La Eucaristía, Centro de Pastoral Litúrgica, 1999, págs 193 y 194.
  95. José Rico Pavés, Los sacramentos de la iniciación cristiana: Introducción teológica a los Sacramentos del Bautismo, Confirmación y Eucaristía, Salamanca, 2006, pags 333 y 334.
  96. Pio XII, Carta encíclica Mediator Dei
  97. Pio XII, Carta encíclica Humani Generis, nro 20
  98. José Aldázabal Larrañaga, La Eucaristía, Centro de Pastoral Litúrgica, 1999, pág. 203
  99. José Aldázabal Larrañaga, La Eucaristía, Centro de Pastoral Litúrgica, 1999, pág. 204
  100. Pablo VI, CARTA ENCÍCLICA MYSTERIUM FIDEI
  101. Pablo VI, CREDO DEL PUEBLO DE DIOS, nro 25
  102. «beato Juan Pablo II, CARTA ENCÍCLICA ECCLESIA DE EUCHARISTIA #1». Consultado el 3 de abril de 2017. 
  103. Benedicto XVI, Exhortación apostólica Sacramentum Caritatis, nro 1.
  104. «Definición de comunión - Qué es, Significado y Concepto». Consultado el 3 de abril de 2017. 
  105. Joan M. Canals, El Culto a la Eucaristía, Barcelona, 2.ª edición, 2001, pag. 45.
  106. Catecismo de la Iglesia Católica, 960.
  107. Hechos de los Apóstoles, 2, 42-47.
  108. San Ignacio de Antioquía, Carta a los cristianos de Filadelfia 4, 1.
  109. Santo Tomás de Aquino, Suma teológica - Parte IIIa, cuestión 73, artículo 3.
  110. Catecismo de la Iglesia Católica, 1391
  111. Catecismo de la Iglesia Católica, 1392
  112. Catecismo de la Iglesia Católica, 1393
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  119. Josep M. Rovira Belloso, Los Sacramentos, símbolos del Espíritu, Centre de Pastoral Litúrgica, Barcelona, primera edición, 2001, pág. 185.
  120. Catecismo de la Iglesia Católica, 1404.
  121. Catecismo de la Iglesia Católica, 1405
  122. Catecismo de la Iglesia Católica nro 1412
  123. Instrucción general del Misal Romano nro 320
  124. Véase Bula Laetentur coeli del Papa Eugenio IV, Denzinger 692.
  125. Congregación para la Doctrina de la Fe,Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucarística, punto A.2.
  126. Congregación para la Doctrina de la Fe, Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucarística, punto B.1.
  127. Congregación para la Doctrina de la Fe, Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucarística, puntos B.2 y C.3.
  128. Instrucción general del Misal Romano nro 322.
  129. Bula Exultate Deo del Papa Eugenio IV, Denzinger 698; Concilio de Trento, Doctrina acerca del santísimo sacrificio de la Misa, Sesión XXII, Cap.7, Denzinger 945.
  130. Congregación para la Doctrina de la Fe, Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucarística, puntos A.3 y C.1.
  131. Catecismo de la Iglesia Católica nro 1353
  132. Pablo VI, CREDO DEL PUEBLO DE DIOS, nro 24; Catecismo de la Iglesia Católica nro 1411
  133. Instrucción general del Misal Romano, 199
  134. Concilio Vaticano II, Constitución Dogmática Lumen Gentium, nro 11; Catecismo de la Iglesia Católica, 1324.
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  143. Pablo VI, CARTA ENCÍCLICA MYSTERIUM FIDEI, nro 4
  144. Catecismo de la Iglesia Católica, 1349 a 1355

Bibliografía

 
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  • Catecismo de la Iglesia católica, nn. 1322-1419.
  • Catecismo de la Iglesia católica (compendio), nn. 271-294.

Enlaces externos

  •   Wikimedia Commons alberga una galería multimedia sobre Eucaristía.
  •   Wikcionario tiene definiciones y otra información sobre eucaristía.
  • Sacramentum Caritatis (El Sacramento de la Caridad), exhortación apostólica de Benedicto XVI
  • La Eucaristía en la Iglesia primitiva
  •   Datos: Q66086
  •   Multimedia: Communion

eucaristía, comunión, redirige, aquí, para, otras, acepciones, véase, comunión, desambiguación, debe, confundirse, artículo, wikipedia, llamado, misa, cual, acto, donde, consagra, eucaristía, griego, εὐχαριστία, eucharistía, acción, gracias, llamada, también, . Comunion redirige aqui Para otras acepciones vease Comunion desambiguacion No debe confundirse con el articulo de Wikipedia llamado Misa la cual es el acto donde se consagra la eucaristia La Eucaristia del griego eὐxaristia eucharistia accion de gracias llamada tambien Santo Sacrificio 1 Cena del Senor 2 Fraccion del Pan Comunion Santisimo Sacramento Santos Misterios o Santa Cena segun la tradicion de las iglesias catolica ortodoxa copta anglicana presbiteriana y algunas denominaciones luteranas considerado como un sacramento es el cuerpo y la sangre de Jesucristo bajo las especies de pan y vino Elevacion de la Eucaristia despues de la consagracion en el rito romano tradicional Preparacion de las especies y objetos liturgicos para la Divina Liturgia segun el Rito eslavo bizantino Los elementos de la Eucaristia son el pan sacramental con o sin levadura y el vino sacramental que se consagran en un altar o una mesa de comunion y se consumen a partir de entonces Los comulgantes aquellos que consumen los elementos pueden hablar de recibir la Eucaristia asi como de celebrar la Eucaristia Los catolicos creen que por la consagracion las sustancias del pan y el vino en realidad se convierten en el cuerpo y la sangre de Cristo transubstanciacion mientras las apariencias o especies del pan y el vino permanecen inalteradas Los luteranos creen que el cuerpo y la sangre de Cristo estan realmente presentes en con y bajo las formas del pan y el vino union sacramental Los cristianos reformados creen en una presencia espiritual real de Cristo en la Eucaristia La teologia eucaristica anglicana afirma universalmente la presencia real de Cristo en la Eucaristia Otros como los cristadelfianos consideran que el acto es solo una recreacion simbolica de la Ultima Cena y un memorial conmemorativo En la Iglesia catolica en las Iglesias ortodoxas copta y en la Iglesia anglicana la eucaristia se considera la fuente y culmen de la vida de todo cristiano De acuerdo al catecismo de la Iglesia catolica la eucaristia representa un signo de unidad vinculo de caridad y banquete pascual en el que se recibe a Cristo el alma se llena de gracia y se nos da prenda de la vida eterna 3 Indice 1 Teologia de la eucaristia 1 1 Institucion del sacramento 1 2 Eucaristia como sacrificio 1 2 1 En los Padres de la Iglesia 1 2 2 En la Edad Media 1 2 3 En la Reforma Protestante 1 2 4 En la Contrarreforma 1 2 5 En el magisterio reciente 1 3 Eucaristia como presencia real 1 3 1 En los Padres de la Iglesia 1 3 2 En la Edad Media 1 3 3 En la Reforma 1 3 4 En la Contrarreforma 1 3 5 En el magisterio reciente 1 4 Eucaristia como comunion 1 5 Eucaristia como prenda de la gloria futura 2 Elementos de la Eucaristia 2 1 Materia 2 2 Forma 2 3 Ministro 2 4 Participantes 3 Desarrollo del rito 4 Vease tambien 5 Notas y referencias 6 Bibliografia 7 Enlaces externosTeologia de la eucaristia EditarSe pueden considerar cinco cosas principales que han sido objeto de la reflexion teologica acerca de la eucaristia la institucion del sacramento la eucaristia como sacrificio incruento la eucaristia como presencia real de Cristo la eucaristia como comunion y la eucaristia como prenda de la gloria futura Institucion del sacramento Editar El termino griego eὐxaristia eucaristia aparece quince veces en el Nuevo Testamento 4 La teologia catolica considera a la eucaristia como un sacramento instituido por Jesucristo durante la Ultima Cena Gerard de Lairesse La institucion de la Eucaristia La Iglesia catolica afirma que la institucion de la eucaristia por Jesucristo tal como lo relatan los evangelios sinopticos se realizo cuando tomando en sus manos el pan lo partio y se los dio a sus discipulos diciendo Tomad y comed este es mi cuerpo que sera entregado por vosotros Del mismo modo tomo el caliz y se lo dio a sus discipulos diciendo Tomad y bebed todos de el porque esta es mi sangre sangre de la alianza nueva y eterna que sera derramada por vosotros y por muchos para el perdon de los pecados Haced esto en conmemoracion mia Cfr Mateo 26 26 29 Marcos 14 22 25 Lucas 22 19 20 ICor 11 23 26 Ahora bien esto se dio segun los relatos evangelicos en un contexto amplio Cena Pascual segun los evangelios sinopticos la institucion se da en el transcurso de la cena pascual Mateo 26 17 25 Marcos 14 12 21 Lucas 22 7 18 La Iglesia catolica entiende que la eucaristia fue prefigurada ya en el Antiguo Testamento especialmente en la cena pascual celebrada por los judios donde consumian pan sin levadura carne de cordero asada al fuego y hierbas amargas 5 Los elementos principales de la celebracion de la Pascua judia se encuentran en los siguientes textos biblicos Ex 12 1 8 Dt 16 Lv 23 5 8 Nm 28 16 25 San Pablo considera la muerte de Jesus en cruz en clave pascual Cristo nuestra Pascua ha sido inmolado 1Cor 5 7 Lo mismo hace San Juan Evangelista al aplicar a Cristo la frase referida al Cordero Pascual no se le quebrara hueso alguno Exodo 12 46 en Juan 19 36 La Pasion En el relato de la institucion de la eucaristia Jesus anuncia su propia muerte violenta habla de mi cuerpo que sera entregado el caliz de mi sangre que sera derramada 6 Servicialidad mutua De acuerdo con el relato del evangelista Juan antes de la cena Jesus lavo los pies a sus discipulos y mando a todos ellos que siguieran ese ejemplo de servicialidad Juan 13 1 20 amandose como el los amo Juan 15 12 Eucaristia como sacrificio Editar La Iglesia catolica cree que en la eucaristia se hace presente se re presenta el mismo y unico sacrificio que Cristo hizo en la cruz de una vez para siempre se perpetua su recuerdo a traves de los siglos y se aplica su fruto 7 La Eucaristia es el memorial de la Pascua de Cristo la actualizacion y la ofrenda sacramental de su unico sacrificio en la liturgia de la Iglesia que es su Cuerpo El memorial no es solamente el recuerdo de los acontecimientos del pasado estos acontecimientos se hacen en cierta forma presentes y actuales Por ser memorial de la Pascua de Cristo la Eucaristia es tambien un sacrificio El caracter sacrificial de la Eucaristia se manifiesta en las palabras mismas de la institucion Esto es mi Cuerpo que sera entregado por vosotros y Esta copa es la nueva Alianza en mi sangre que sera derramada por vosotros Lc 22 19 20 En la Eucaristia Cristo da el mismo cuerpo que por nosotros entrego en la cruz y la sangre misma que derramo por muchos para remision de los pecados Mt 26 28 8 El sacrificio de la cruz y el sacrificio de la eucaristia son un unico sacrificio ya que tanto en uno como en otro Cristo es el sacerdote que ofrece el sacrificio y la victima que es ofrecida Se diferencian solo en la forma en que se ofrece el sacrificio En la cruz Cristo lo ofrecio en forma cruenta y por si mismo y en la Misa en forma incruenta y por ministerio de los sacerdotes 9 Y puesto que en este divino sacrificio que se realiza en la misa se contiene e inmola incruentamente el mismo Cristo que en el altar de la cruz se ofrecio a si mismo una vez de modo cruento este sacrificio es verdaderamente propiciatorio 10 Solo los presbiteros validamente ordenados pueden presidir la Eucaristia y consagrar el pan y el vino para que se conviertan en el Cuerpo y la Sangre del Senor 11 En cuanto sacrificio la Eucaristia es ofrecida tambien en reparacion de los pecados de los vivos y los difuntos y para obtener de Dios beneficios espirituales o temporales 12 El sacrificio de la misa no anade nada al sacrificio de la cruz sino que hace presente sacramentalmente en nuestros altares el mismo y unico sacrificio del Calvario 13 Por tanto en el sacrificio de la misa se hace presente se re presenta el mismo y unico sacrificio de la cruz En los Padres de la Iglesia Editar La Didache el escrito mas importante de los Padres apostolicos hace la siguiente advertencia Reunios el dia del Senor y romped el pan y dad gracias despues de haber confesado vuestros pecados a fin de que vuestro sacrificio thusia sea puro 14 San Ignacio de Antioquia f hacia 107 indica el caracter sacrificial de la eucaristia tratando en un mismo texto de la eucaristia y el altar y el altar como sitio donde se ofrece el sacrificio thusiasterion Tened pues buen cuidado de no celebrar mas que una sola eucaristia porque una sola es la carne de nuestro Senor Jesucristo y uno solo el caliz para la reunion de su sangre y uno solo el altar y de la misma manera hay un solo obispo con los presbiteros y diaconos 15 San Justino Martir f hacia 165 considera como figura de la eucaristia aquel sacrificio de harina fina que tenian que ofrecer los que sanaban de la lepra El sacrificio puro profetizado por Malaquias que es ofrecido en todo lugar no es otro segun el santo que el pan y el caliz de la eucaristia 16 San Ireneo de Lyon f hacia el 202 ensena que la carne y la sangre de Cristo son el nuevo sacrificio de la Nueva Alianza que la Iglesia recibio de los apostoles y que ofrece a Dios en todo el mundo Lo considera como el cumplimiento de la profecia de Malaquias 17 Tertuliano f despues de 220 designa la participacion en la solemnidad eucaristica como estar junto al altar de Dios y la comunion como participar en el sacrificio 18 San Cipriano f 258 ensena que Cristo como sacerdote segun el orden de Melquisedec ofrecio a Dios Padre un sacrificio y por cierto el mismo que habia ofrecido Melquisedec esto es consistente en pan y vino es decir que ofrecio su cuerpo y su sangre 19 El sacerdote que imita lo que Cristo realizo hace verdaderamente las veces de Cristo y entonces ofrece en la iglesia a Dios un verdadero y perfecto sacrificio si empieza a ofrecer de la misma manera que vio que Cristo lo habia ofrecido 20 San Ambrosio f 397 ensena que en el sacrificio de la misa Cristo es al mismo tiempo ofrenda y sacerdote Aunque ahora no se ve a Cristo sacrificarse sin embargo El se sacrifica en la tierra siempre que se ofrenda el cuerpo de Cristo mas aun es manifiesto que El ofrece incluso un sacrificio en nosotros pues su palabra es la que santifica el sacrificio que es ofrecido 21 En la Edad Media Editar Pedro Lombardo afirma en el libro de Sentencias lo que es ofrecido y consagrado por el sacerdote se llama sacrificio y oblacion porque es memoria y representacion del verdadero sacrificio y de la santa inmolacion hecha en el altar de la cruz Una sola vez murio Cristo y en ella se inmolo a si mismo pero es inmolado cada dia en el sacramento porque en el sacramento se cumple la memoria de cuanto ha sido realizado una sola vez 22 Santo Tomas de Aquino Santo Tomas de Aquino resuelve distintas objeciones al caracter sacrificial de la Eucaristia continuando la doctrina de los Padres y afirmando la identidad del sacrificio eucaristico con el realizado por Cristo en la cruz 23 En la Reforma Protestante Editar Hasta la Reforma Protestante en dieciseis siglos de cristianismo nunca se habia dado un ataque directo a la doctrina del sacrificio eucaristico 24 Martin Lutero Martin Lutero afirma que dado que el hombre solo es justificado por Dios a traves de la fe y no de las obras la misa es una obra humana mas sin mayor eficacia que el de aumentar la fe 25 El sacrificio de Cristo es uno solo y la misa es un don recibido no una ofrenda sacrificial que podamos dar a Dios Por ello abolio el canon romano y las misas privadas dejando solo el recuerdo de la Cena 26 Ulrico Zwinglio partiendo tambien del hecho de que el sacrificio de Cristo es unico afirma que la misa es solo un recuerdo del sacrificio una garantia de la redencion que nos obtuvo el Senor 27 Juan Calvino afirma no solo la unicidad del sacrificio sino tambien del sacerdote que excluye cualquier sucesor o vicario 28 Las ultimas ediciones de su libro Institucion de la religion cristiana admiten que la misa sea sacrificio pero de alabanza y accion de gracias nunca de propiciacion 29 Recientemente algunos reformadores han vuelto a considerar la teologia del sacrificio eucaristico y en los documentos teologicos elaborados entre catolicos y luteranos o anglicanos hay diversas posiciones mas o menos cercanas aunque todavia no comunes cita requerida En la Contrarreforma Editar La Iglesia catolica abordo en el Concilio de Trento la controversia con los protestantes sobre el caracter sacrificial de la Misa Sus definiciones fueron aprobadas en la sesion XXII 17 de septiembre de 1562 30 El Concilio menciona que las mismas se basan en esta antigua fe fundada en el sacrosanto Evangelio en las tradiciones de los Apostoles y en la doctrina de los Santos Padres 31 Concilio de Trento Algunas de sus definiciones fueron la Misa es un verdadero y propio sacrificio que se ofrece a Dios 32 dicho sacrificio es representacion y memorial del sacrificio hecho en la cruz por Cristo por el que su eficacia saludable se aplica para la remision de los pecados 33 el oferente y el ofrecido tanto en la misa como en la cruz es el mismo Jesucristo La diferencia esta dada porque en la cruz el ofrecimiento fue cruento y en la misa incruento y porque en la cruz Cristo hizo el ofrecimiento por si mismo y en la misa por ministerio de los sacerdotes 34 se trata de un sacrificio visible como segun el Concilio exige la naturaleza humana 33 su institucion fue realizada por Cristo mismo cuando dijo haced esto en memoria mia Lc 22 19 1 Cor 11 24 35 En el magisterio reciente Editar Pio XII en la enciclica Mediator Dei 36 retoma la doctrina tridentina del sacrificio eucaristico su institucion 37 su caracter de verdadera renovacion del sacrificio de la cruz 38 A este respecto recordara la identidad del sacerdote y la victima Jesucristo 39 la diferencia en el modo de su ofrecimiento cruento e incruento Sobre este punto menciona la divina sabiduria ha hallado un modo admirable para hacer manifiesto el sacrificio de nuestro Redentor con senales exteriores que son simbolos de muerte ya que gracias a la transustanciacion del pan en el cuerpo y del vino en la sangre de Cristo asi como esta realmente presente su cuerpo tambien lo esta su sangre y de esa manera las especies eucaristicas bajo las cuales se halla presente simbolizan la cruenta separacion del cuerpo y de la sangre De este modo la conmemoracion de su muerte que realmente sucedio en el Calvario se repite en cada uno de los sacrificios del altar ya que por medio de senales diversas se significa y se muestra Jesucristo en estado de victima Mediator Dei n 89 la identidad de fines del sacrificio de la cruz y del eucaristico la glorificacion de Dios 40 la accion de gracias 41 la propiciacion por nuestros pecados y los de todo el genero humano vivos y difuntos 42 y la impetracion de la gracia y bendicion de Dios 43 el valor infinito del sacrificio divino 44 la necesidad de la colaboracion de los fieles en el sacrificio eucaristico Sin embargo sobre este punto remarco la diferencia entre el sacerdocio comun de los fieles recibido en el Bautismo y el sacerdocio ministerial conferido por el sacramento del Orden Sagrado 45 Padres conciliares en el Concilio Vaticano II El Concilio Vaticano II en la Constitucion Sacrosanctum Concilium 46 puntualizo Nuestro Salvador en la Ultima Cena la noche que le traicionaban instituyo el Sacrificio Eucaristico de su Cuerpo y Sangre con lo cual iba a perpetuar por los siglos hasta su vuelta el Sacrificio de la Cruz y a confiar a su Esposa la Iglesia el Memorial de su Muerte y Resurreccion sacramento de piedad signo de unidad vinculo de caridad banquete pascual en el cual se come a Cristo el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de la gloria venidera Sacrosanctum concilium n 47 San Pablo VI en la enciclica Mysterium Fidei 47 subraya la ofrenda de la Iglesia como parte del sacrificio la Iglesia al desempenar la funcion de sacerdote y victima juntamente con Cristo ofrece toda entera el sacrificio de la misa y toda entera se ofrece en el Porque toda misa aunque sea celebrada privadamente por un sacerdote no es accion privada sino accion de Cristo y de la Iglesia la cual en el sacrifico que ofrece aprende a ofrecerse a si misma como sacrificio universal y aplica a la salvacion del mundo entero la unica e infinita virtud redentora del sacrificio de la Cruz Pues cada misa que se celebra se ofrece no solo por la salvacion de algunos sino tambien por la salvacion de todo el mundo Mysterium fidei n 4 El mismo Papa en el Credo del Pueblo de Dios 48 expreso Nosotros creemos que la misa que es celebrada por el sacerdote representando la persona de Cristo en virtud de la potestad recibida por el sacramento del orden y que es ofrecida por el en nombre de Cristo y de los miembros de su Cuerpo mistico es realmente el sacrificio del Calvario que se hace sacramentalmente presente en nuestros altares Credo del Pueblo de Dios n 24 San Juan Pablo II en la enciclica Ecclesia de Eucharistia 49 menciono que en la eucaristia esta inscrito de forma indeleble el acontecimiento de la pasion y muerte del Senor No solo lo evoca sino que lo hace sacramentalmente presente Es el sacrificio de la Cruz que se perpetua por los siglos Ecclesia de Eucharistia n 11 El Catecismo de la Iglesia Catolica 50 ha rescatado todos los elementos que se han ido recorriendo exponiendolos de esta manera La Eucaristia es el corazon y la cumbre de la vida de la Iglesia pues en ella Cristo asocia su Iglesia y todos sus miembros a su sacrificio de alabanza y accion de gracias ofrecido una vez por todas en la cruz a su Padre por medio de este sacrificio derrama las gracias de la salvacion sobre su Cuerpo que es la Iglesia 51 La Eucaristia es el memorial de la Pascua de Cristo es decir de la obra de la salvacion realizada por la vida la muerte y la resurreccion de Cristo obra que se hace presente por la accion liturgica 52 Es Cristo mismo sumo sacerdote y eterno de la nueva Alianza quien por el ministerio de los sacerdotes ofrece el sacrificio eucaristico Y es tambien el mismo Cristo realmente presente bajo las especies del pan y del vino la ofrenda del sacrificio eucaristico 53 Solo los presbiteros validamente ordenados pueden presidir la Eucaristia y consagrar el pan y el vino para que se conviertan en el Cuerpo y la Sangre del Senor 54 En cuanto sacrificio la Eucaristia es ofrecida tambien en reparacion de los pecados de los vivos y los difuntos y para obtener de Dios beneficios espirituales o temporales 55 Cristo que paso de este mundo al Padre nos da en la Eucaristia la prenda de la gloria que tendremos junto a el la participacion en el Santo Sacrificio nos identifica con su Corazon sostiene nuestras fuerzas a lo largo del peregrinar de esta vida nos hace desear la Vida eterna y nos une ya desde ahora a la Iglesia del cielo a la Santa Virgen Maria y a todos los santos 56 Benedicto XVI en la exhortacion apostolica Sacramentum caritatis 57 se ha expresado asi Al instituir el sacramento de la Eucaristia Jesus anticipa e implica el Sacrificio de la cruz y la victoria de la resurreccion Al mismo tiempo se revela como el verdadero cordero inmolado previsto en el designio del Padre desde la creacion del mundo como se lee en la primera Carta de San Pedro cf 1 18 20 Situando en este contexto su don Jesus manifiesta el sentido salvador de su muerte y resurreccion misterio que se convierte en el factor renovador de la historia y de todo el cosmos En efecto la institucion de la Eucaristia muestra como aquella muerte de por si violenta y absurda se ha transformado en Jesus en un supremo acto de amor y de liberacion definitiva del mal para la humanidad Sacramentum caritatis n 10 Eucaristia como presencia real Editar Sacerdote catolico eleva la hostia y el caliz consagrados La Iglesia catolica cree que Jesucristo esta presente en la Eucaristia de modo verdadero real y sustancial con su Cuerpo y con su Sangre con su Alma y su Divinidad Cristo todo entero Dios y hombre esta presente en ella de manera sacramental es decir bajo las especies eucaristicas del pan y del vino Esta presencia se denomina real no a titulo exclusivo como si las otras presencias no fuesen reales sino por excelencia porque es substancial y por ella Cristo Dios y hombre se hace totalmente presente 58 Ademas afirma que por la consagracion del pan y del vino se opera la conversion de toda la substancia del pan en la substancia del Cuerpo de Cristo y de toda la substancia del vino en la substancia de su Sangre la Iglesia catolica ha llamado justa y apropiadamente a este cambio transubstanciacion 59 Esta conversion se opera en la plegaria eucaristica con la consagracion mediante la eficacia de la palabra de Cristo y de la accion del Espiritu Santo Sin embargo permanecen inalteradas las caracteristicas sensibles del pan y del vino esto es las especies eucaristicas 60 61 Doctrina que emerge de los evangelios sinopticos Jesus al decir Este es mi cuerpo afirma que el pan es su cuerpo y no una representacion de su cuerpo Y senala que la presencia eucaristica de Cristo comienza en el momento de la consagracion y dura todo el tiempo que subsistan las especies eucaristicas y que Cristo esta todo entero presente en cada una de las especies y todo entero en cada una de sus partes de modo que la fraccion del pan no divide a Cristo 62 Por ello al creer que la Eucaristia es el cuerpo y la sangre de Cristo se le debe rendir el culto de latria es decir la adoracion reservada a Dios tanto durante la celebracion eucaristica como fuera de ella La Iglesia en efecto conserva con la maxima diligencia las Hostias consagradas las lleva a los enfermos y a otras personas imposibilitadas de participar en la Santa Misa las presenta a la solemne adoracion de los fieles las lleva en procesion e invita a la frecuente visita y adoracion del Santisimo Sacramento reservado en el Sagrario 63 64 En virtud de esto entiende que la eucaristia se destaca del resto de los sacramentos ya que mientras ellos tienen la mision de santificar en la eucaristia se halla el autor mismo de la santidad 65 Las Iglesias de Comunion Anglicana sostienen que el pan y el vino una vez consagrados son el Cuerpo y la Sangre de Cristo sin analizar que pasa con las substancias primarias simplemente en las palabras del Senor Jesus Este pan es mi Cuerpo este vino es mi sangre por eso se le considera Jesucristo Sacramentado Presencia Real del Senor Jesus en el Sacramento del Altar cita requerida La iglesia luterana por su parte confiesa que en el sacramento el cuerpo y sangre de Cristo subsiste junto con los elementos de pan y vino denominandose esta teoria consustanciacion cita requerida La mayoria de iglesias reformadas bautistas pentecostales etc creen que el pan y el vino no cambian y solo utilizan la eucaristia como una rememoracion de la Ultima Cena 66 En los Padres de la Iglesia Editar Segun el Catecismo de la Iglesia catolica los Padres de la Iglesia afirmaron con fuerza la fe de la Iglesia en la eficacia de la Palabra de Cristo y de la accion del Espiritu Santo para obrar la conversion del pan en el cuerpo y del vino en la sangre de Cristo 67 A continuacion algunos ejemplos Martirio de San Ignacio de Antioquia San Ignacio de Antioquia f entre 98 y 117 expresa su fe en distintas cartas escritas a las comunidades cristianas rumbo a su martirio Se abstienen los docetas de la Eucaristia y de la oracion porque no confiesan que la Eucaristia es la carne de nuestro Salvador Jesucristo que sufrio por nuestros pecados y que el Padre por su bondad resucito 68 Procurad serviros provechosamente de la unica Eucaristia una es en efecto la carne de nuestro Senor Jesucristo y uno el caliz para la unidad de su sangre 69 Justino Martir f entre 162 y 168 en su Apologia Primera escribe Y este alimento se llama entre nosotros Eὐxaristia Eucaristia del cual nadie puede participar sino el que cree que las cosas que ensenamos son verdaderas y que ha sido lavado con el bautismo para remision de los pecados y para la regeneracion y que vive de la manera en que Cristo lo ha ordenado Porque no los recibimos como pan comun y bebida comun pero de la misma manera que Jesucristo nuestro Salvador habiendo sido hecho carne por la Palabra de Dios tuvo carne y sangre para nuestra salvacion asi tambien se nos ha ensenado que la comida que es bendecida por la oracion de su palabra y de la que se nutre nuestra sangre y carne por transmutacion es la carne y la sangre de ese Jesus que se hizo carne Porque los apostoles en las memorias escritas por ellos que se llaman Evangelios asi nos han entregado lo que les fue encomendado que Jesus tomo pan y habiendo dado gracias dijo Haced esto en memoria de mi esto es mi cuerpo y que de la misma manera tomando la copa y habiendo dado gracias dijo Esto es mi sangre y se lo dio a ellos solos Lucas 22 19 70 San Ireneo de Lyon f hacia 200 Asi como el pan terreno recibiendo la invocacion de Dios no es ya el acostumbrado pan sino la Eucaristia compuesta de dos elementos terreno y celeste asi tambien nuestros cuerpos recibiendo la Eucaristia no son ya corruptibles teniendo la esperanza de la resurreccion 71 San Ambrosio f 397 Estemos bien persuadidos de que esto no es lo que la naturaleza ha producido sino lo que la bendicion ha consagrado y de que la fuerza de la bendicion supera a la de la naturaleza porque por la bendicion la naturaleza misma resulta cambiada La palabra de Cristo que pudo hacer de la nada lo que no existia no podria cambiar las cosas existentes en lo que no eran todavia Porque no es menos dar a las cosas su naturaleza primera que cambiarsela 72 San Juan Crisostomo f 407 Cuanta gente dice hoy Querria ver a Cristo en persona su cara sus vestidos sus zapatos Pues bien en la eucaristia es a el al que ves al que tocas al que recibes Deseabas ver sus vestidos y es el mismo el que se te da no solo para verle sino para tocarlo comerlo acogerlo en tu corazon 73 En la Edad Media Editar En el medioevo la reflexion fue mas rica en matices debido al influjo de la escolastica Hubo tendencias de realismo exagerado de tipo fisico la carne de Cristo en la eucaristia seria absolutamente la misma que tuvo tras su encarnacion y la Misa seria un caso de antropofagia querida por Dios A los seguidores de esta linea se les llamo cafarnaitas 74 Pascasio Radberto 785 865 fue un teologo carolingio y abad de Corbie cuya obra mas conocida e influyente fue De Corpore et Sanguine Domini escrita entre 831 y 833 la cual es una exposicion sobre la naturaleza de la Eucaristia En esta Pascasio esta de acuerdo con Ambrosio al afirmar que la Eucaristia contiene el verdadero cuerpo historico de Jesucristo Segun Pascasio Dios es la verdad misma y por lo tanto sus palabras y acciones deben ser verdaderas La proclamacion de Cristo en la Ultima Cena de que el pan y el vino eran su cuerpo y la sangre debe tomarse literalmente ya que Dios es la verdad Por tanto el cree que realmente se produce la transubstanciacion del pan y del vino ofrecidos en la Eucaristia Solo si la Eucaristia es el verdadero cuerpo y la sangre de Cristo el cristiano puede saber que es salvifica Tambien se abrio paso la teologia del simbolo sacramental que distinguia entre la presencia del cuerpo y de la sangre del Senor tras su encarnacion y el modo de su presencia sacramental Berengario de Tours fue todavia mas alla subrayando de manera extrema el simbolismo La Iglesia catolica en diversos sinodos condeno la posicion de Berengario y se le obligo a suscribir profesiones de fe algunas de las cuales se iban al otro extremo 75 La Misa de Bolsena de Rafael Hay que esperar al siglo XIII para una reflexion teologica mas equilibrada De manos principalmente de Santo Tomas de Aquino se abre paso la afirmacion de la presencia real y sacramental Con la ayuda de la filosofia aristotelica en especial la distincion entre sustancia y accidentes se elabora la teologia de la transubstanciacion 76 Tomas de Aquino trata teologicamente del tema en la tercera parte de la Summa Theologiae cuestiones 75 a 77 77 y de manera espiritual y con lirismo en los himnos que es bastante probable que haya compuesto para la misa de Corpus Christi solemnidad instituida por el papa Urbano IV tras el milagro de Bolsena 78 En el IV Concilio de Letran se consagra la terminologia escolastica Jesucristo cuyo cuerpo y sangre se contiene verdaderamente en el sacramento del altar bajo las especies de pan y vino despues de transustanciados por virtud divina el pan en el cuerpo y el vino en la sangre 79 Tambien en el II Concilio de Lyon El sacramento de la Eucaristia lo consagra de pan azimo la misma Iglesia Romana manteniendo y ensenando que en dicho sacramento el pan se transustancia verdaderamente en el cuerpo y el vino en la sangre de Nuestro Senor Jesucristo 80 John Wyclif rechaza la teoria de Santo Tomas de Aquino de la transubstanciacion El no acepta la desaparicion de la sustancia del pan y del vino ni tampoco la permanencia de los accidentes sin sujeto de inhesion Para el la presencia de Cristo en la Eucaristia es sacramental o en signo de manera virtual Estas proposiciones fueron condenadas por los Concilios locales de Oxford Canterbury y Londres de 1382 81 Estas condenas fueron ratificadas en el Concilio ecumenico de Constanza 82 En la Reforma Editar Todos los reformadores coincidieron en que Cristo no permanece en el pan y vino consagrados terminada la Misa que no debe ser adorado en los mismos y que por lo tanto no deben ser guardados 83 Sin embargo ellos mantuvieron significativas diferencias entre si Lutero siempre afirmo la presencia real de Cristo aunque desecho por completo el dogma de la transustanciacion por considerarlo una sofisticada especulacion 84 En su postura el pan y el vino no dejan de ser tales sino que el Cuerpo y Sangre de Cristo estan juntamente con ellos Se ha llamado a esta teoria consustanciacion o impanacion aunque el nunca la ha llamado por estos nombres 85 Zuinglio Karlstadt y Ecolampadio afirmaban una presencia meramente simbolica 86 Calvino admite una cierta presencia virtus spiritualis durante la celebracion de la cena pero relacionada con la fe 87 Los anabautistas consideraron que la realidad del cuerpo y la sangre de Cristo en la celebracion de la Cena no esta determinada por una transubstanciacion sino porque la comunidad cristiana es el cuerpo de Cristo 88 que efectivamente comparte un mismo alimento 89 y es su sangre porque cada integrante de la comunidad cristiana tambien ama como Cristo amo hasta entregar la vida por los demas 88 Asi el vino y el pan que se parte en la Cena son union comunitaria con la sangre de Cristo y participacion de su cuerpo de manera que los que comparten el mismo alimento son un solo cuerpo ICor 10 16 17 del cual Cristo es cabeza Ef 1 22 23 Col 1 18 En la Contrarreforma Editar El tema se abordo en la sesion XIII del Concilio de Trento en el ano 1551 donde se aprobo el Decreto sobre la Santisima Eucaristia 90 El proposito del Concilio fue presentar la doctrina catolica rebatiendo las proposiciones de los reformadores Segun sus definiciones la presencia de Cristo en el sacramento no es en signo o figura Zuinglio Ecolampadio ni virtual Calvino 91 sino que queda fijada de esta forma en el santisimo sacramento de la Eucaristia se contiene verdadera real y sustancialmente el cuerpo y la sangre juntamente con el alma y la divinidad de nuestro Senor Jesucristo y por ende Cristo entero 92 Distinguio entre presencia natural y sacramental segun el Concilio tan real como la primera Porque no son cosas que repugnen entre si que el mismo Salvador nuestro este siempre sentado a la diestra de Dios Padre segun su modo natural de existir y que en muchos otros lugares este para nosotros sacramentalmente presente en su sustancia por aquel modo de existencia que si bien apenas podemos expresarla con palabras por el pensamiento ilustrado por la fe podemos alcanzar ser posible a Dios y debemos constantisimamente creerlo En efecto asi todos nuestros antepasados cuantos fueron en la verdadera Iglesia de Cristo que disertaron acerca de este santisimo sacramento muy abiertamente profesaron que nuestro Redentor instituyo este tan admirable sacramento en la ultima Cena cuando despues de la bendicion del pan y del vino con expresas y claras palabras atestiguo que daba a sus Apostoles su propio cuerpo y su propia sangre 93 Con esto evito el super realismo cafarnaitas y el simbolismo espiritualista Berengario Zuinglio Ecolampadio 94 Ademas definio la presencia en cada una de las dos especies contra todos los reformadores que defendian la comunion bajo las dos especies Y el caracter permanente de esta presencia contra los que la negaban fuera de la comunion Afirmo la validez del termino transustanciacion contra todos los reformadores que negaban la validez del termino y su significado Finalmente extrae las consecuencias practicas de lo anterior culto de adoracion eucaristico distribucion de la eucaristia a los enfermos fuera de la misa reserva de la eucaristia terminada la celebracion 95 En el magisterio reciente Editar El Papa Pio XII en la enciclica Mediator Dei reafirmo la presencia real y el culto eucaristico 96 y en la enciclica Humani Generis condeno las posturas teologicas que hablaban de presencia simbolica 97 El Concilio Vaticano II segun comenta Jose Aldazabal no le dedico ningun documento solo un capitulo de la Constitucion Sacrosanctum Concilium mientras el Concilio de Trento dedico nada menos que tres sesiones para tratar el tema de la Eucaristia Sin embargo segun puntaliza este autor lo interesante de este Concilio es que todo el esta lleno de alusiones a la Eucaristia como centro del misterio eclesial 98 Asimismo continua como fruto de las ensenanzas del Concilio se ha recuperado una vision conjunta de todos los aspectos del sacramento Por ejemplo la presencia real y el culto acentuados como punto central habian hecho pasar a un segundo plano la celebracion y la comunion de los fieles Asimismo una idea de sacrificio desligada de la categoria de memorial habia acentuado la separacion entre las dos dimensiones de sacrificio y sacramento 99 Pablo VI en la enciclica Mysterium Fidei repropuso las lineas principales de la teologia tridentina y afirmo los diversos modos de presencia de Cristo en su Iglesia privilegiando el eucaristico 100 Asimismo en el Credo del Pueblo de Dios manifesto Cualquier interpretacion de teologos que busca alguna inteligencia de este misterio para que concuerde con la fe catolica debe poner a salvo que en la misma naturaleza de las cosas independientemente de nuestro espiritu el pan y el vino realizada la consagracion han dejado de existir de modo que el adorable cuerpo y sangre de Cristo despues de ella estan verdaderamente presentes delante de nosotros bajo las especies sacramentales del pan y del vino como el mismo Senor quiso para darsenos en alimento y unirnos en la unidad de su Cuerpo mistico 101 San Juan Pablo II San Juan Pablo II en la enciclica Ecclesia de Eucharistia subrayo que la Iglesia vive de la Eucaristia Esta verdad no expresa solamente una experiencia cotidiana de fe sino que encierra en sintesis el nucleo del misterio de la Iglesia Esta experimenta con alegria como se realiza continuamente en multiples formas la promesa del Senor He aqui que yo estoy con vosotros todos los dias hasta el fin del mundo Mt 28 20 en la sagrada Eucaristia por la transformacion del pan y el vino en el cuerpo y en la sangre del Senor se alegra de esta presencia con una intensidad unica Desde que en Pentecostes la Iglesia Pueblo de la Nueva Alianza ha empezado su peregrinacion hacia la patria celeste este divino Sacramento ha marcado sus dias llenandolos de confiada esperanza 102 Benedicto XVI en la exhortacion apostolica Sacramentum Caritatis comenzo la misma expresando Sacramento de la caridad la Santisima Eucaristia es el don que Jesucristo hace de si mismo revelandonos el amor infinito de Dios por cada hombre En este admirable Sacramento se manifiesta el amor mas grande aquel que impulsa a dar la vida por los propios amigos cf Jn 15 13 En efecto Jesus los amo hasta el extremo Jn 13 1 Con esta expresion el evangelista presenta el gesto de infinita humildad de Jesus antes de morir por nosotros en la cruz cinendose una toalla lava los pies a sus discipulos Del mismo modo en el Sacramento eucaristico Jesus sigue amandonos hasta el extremo hasta el don de su cuerpo y de su sangre Que emocion debio embargar el corazon de los Apostoles ante los gestos y palabras del Senor durante aquella Cena Que admiracion ha de suscitar tambien en nuestro corazon el Misterio eucaristico 103 La Ultima Cenafresco en Milan 1498 de Leonardo da Vinci Eucaristia como comunion Editar Del latin communĭo el termino comunion hace referencia a participar en lo comun 104 Segun comenta Joan M Canals la reforma liturgica del Concilio Vaticano II ha restaurado la participacion activa de los fieles en la celebracion la oracion ante la presencia santa es plegaria de comunion con Cristo y con los hermanos expresada en solidaridad y caridad 105 El Catecismo de la Iglesia Catolica expresa que La Iglesia es comunion de los santos esta expresion designa primeramente las cosas santas sancta y ante todo la Eucaristia que significa y al mismo tiempo realiza la unidad de los creyentes que forman un solo cuerpo en Cristo LG 3 106 En los Hechos de los Apostoles se relata la experiencia de la primera comunidad cristiana que une la celebracion de la fraccion del pan a sus compromisos de comunion hasta la condivision de los bienes Todos se reunian asiduamente para escuchar la ensenanza de los Apostoles y participar en la vida comun en la fraccion del pan y en las oraciones Todos los creyentes se mantenian unidos y ponian lo suyo en comun vendian sus propiedades y sus bienes y distribuian el dinero entre ellos segun las necesidades de cada uno Intimamente unidos frecuentaban a diario el Templo partian el pan en sus casas y comian juntos con alegria y sencillez de corazon ellos alababan a Dios y eran queridos por todo el pueblo Y cada dia el Senor acrecentaba la comunidad con aquellos que debian salvarse 107 En la epoca patristica tambien encontramos muestras de la relacion entre Eucaristia y la union de la comunidad cristiana Recordemos esta cita de san Ignacio de Antioquia Procurad serviros con fruto de la unica Eucaristia una es en efecto la carne de nuestro Senor Jesucristo y uno el caliz por la unidad de su sangre uno el altar como uno el obispo con los presbiteros y diaconos mis cofrades a fin de que todo lo que hagais lo hagais segun Dios 108 Santo Tomas de Aquino subraya que la gracia de la Eucaristia es la unidad del Cuerpo Mistico la comunion con Cristo y entre nosotros la unidad del pueblo cristiano 109 A este respecto el Catecismo de la Iglesia Catolica afirma los siguientes frutos o efectos de la comunion La comunion acrecienta la propia union con Cristo 110 La comunion con la Carne de Cristo resucitado vivificada por el Espiritu Santo y vivificante conserva acrecienta y renueva la vida de gracia recibida en el Bautismo 111 La comunion separa del pecado 112 Fortalece la caridad que en la vida cotidiana tiende a debilitarse y esta caridad vivificada borra los pecados veniales 113 Preserva de futuros pecados mortales 114 La unidad del Cuerpo mistico La Eucaristia hace la Iglesia Los que reciben la Eucaristia se unen mas estrechamente a Cristo Por ello mismo Cristo los une a todos los fieles en un solo cuerpo la Iglesia 115 La comunion entrana un compromiso en favor de los pobres 116 Eucaristia como prenda de la gloria futura Editar Segun el evangelio de San Juan Cristo ha prometido la vida eterna a los que lo reciben en este sacramento El que come mi carne y bebe mi sangre tiene Vida eterna y yo lo resucitare en el ultimo dia Juan 6 54 56 Adoracion eucaristica Adoracion eucaristica en la Basilica de Mafra Portugal Real y Venerable Hermandad del Santisimo Sacramento de Mafra En una antigua oracion se dice Oh sagrado banquete en que Cristo es nuestra comida se celebra el memorial de su pasion el alma se llena de gracia y se nos da la prenda de la gloria futura Del Oficio de Corpus Christi 117 En la oracion citada se menciona un orden de tiempo tres perspectivas presente el alma se llena de gracia pasado memorial de su pasion y futuro prenda de la gloria futura que es el objeto de esta seccion 118 Segun comenta Josep M Rovira Belloso la fuerza de la Eucaristia consiste en anticipar la presencia de Cristo termino final de toda historia humana Mas aun nos impele hacia aquel final que solamente llegara con la colaboracion de la libertad responsable de los seres humanos Para poder ser anticipacion el sacramento esta arraigado en Cristo desde este futuro absoluto que se encuentra en la derecha del Padre Cristo es Senor del tiempo La Eucaristia es por tanto anticipacion de la plenitud divina que nos ha prometido y que esperamos con fe Es el advenimiento incoado de esa plenitud El Senor ha querido anticipar entre sus amigos su presencia y su gracia 119 Dice el Catecismo de la Iglesia Catolica La Iglesia sabe que ya ahora el Senor viene en su Eucaristia y que esta ahi en medio de nosotros Sin embargo esta presencia esta velada Por eso celebramos la Eucaristia mientras esperamos la gloriosa venida de Nuestro Salvador Jesucristo 120 De esta gran esperanza la de los cielos nuevos y la tierra nueva en los que habitara la justicia cf 2 P 3 13 no tenemos prenda mas segura signo mas manifiesto que la Eucaristia En efecto cada vez que se celebra este misterio se realiza la obra de nuestra redencion LG 3 y partimos un mismo pan que es remedio de inmortalidad antidoto para no morir sino para vivir en Jesucristo para siempre S Ignacio de Antioquia Eph 20 2 121 Elementos de la Eucaristia EditarPueden mencionarse la materia utilizada la forma en que se realiza la misma el ministro que la lleva a cabo y los participantes de la misma Materia Editar Se debe usar pan de trigo y vino de vid 122 En la Instruccion general del Misal Romano se confirma para el rito latino el uso del pan acimo sin fermentar el cual debe ser de confeccion reciente 123 Los orientales han usado y usan pan fermentado lo cual es aceptado como valido por la Sede Romana 124 Para los fieles que padecen la enfermedad celiaca la Iglesia ha normado la elaboracion de hostias con la minima cantidad de gluten necesaria para obtener la panificacion sin anadir sustancias extranas ni recurrir a procedimientos que desnaturalicen el pan 125 Asimismo se ha dispuesto que el fiel celiaco que no pueda recibir la comunion bajo la especie del Pan incluido el pan con una minima cantidad de gluten puede comulgar bajo la sola especie del Vino 126 El sacerdote que padece esta enfermedad y no puede tolerar ni una minima cantidad de gluten no puede celebrar individualmente pero si con permiso del Obispo concelebrar con otros sacerdotes y comulgar el solamente bajo la especie del vino aunque no puede presidir la concelebracion 127 El vino para la celebracion eucaristica debe ser del producto de la vid cfr Lc 22 18 natural y puro es decir no mezclado con sustancias extranas 128 Se mezcla con un poco de agua de acuerdo a una costumbre antiquisima que segun algunos documentos se remonta al mismo Jesucristo El agua alude al agua y la sangre que salieron del costado de Cristo tras la lanzada cf Jn 19 34 y a la union del pueblo cristiano con Cristo 129 Para los sacerdotes que por motivos de salud no pueden tomar vino ni aun en minimas cantidades esta previsto con permiso del Obispo usar mosto es decir el zumo de uva fresco o conservado cuya fermentacion haya sido suspendida por medio de procedimientos que no alteren su naturaleza por ejemplo el congelamiento 130 Forma Editar La Iglesia Catolica cree que el pan se convierte en el cuerpo y el vino en la sangre del Senor en el momento mas solemne de la misa llamado consagracion En el el sacerdote relata la escena de la institucion del sacramento y repite las palabras usadas por Jesus esto es mi cuerpo esta es mi sangre haced esto en conmemoracion mia mencionadas anteriormente La Iglesia ensena que la fuerza de las palabras y de la accion de Cristo y el poder del Espiritu Santo hacen sacramentalmente presentes bajo las especies de pan y de vino su Cuerpo y su Sangre su sacrificio ofrecido en la cruz de una vez para siempre 131 Ministro Editar Solo el presbitero y el obispo validamente ordenado pueden celebrar validamente la Eucaristia 132 Segun la Instruccion general del Misal Romano 133 varios ministros pueden celebrar conjuntamente la Eucaristia A este acto se le llama concelebracion y segun este documento en ella se manifiesta provechosamente la unidad del sacerdocio y del sacrificio como tambien de todo el pueblo de Dios La misma esta mandada en la ordenacion del Obispo y de los presbiteros en la bendicion de un Abad en la Misa Crismal Misa en que el Obispo bendice los oleos el Jueves Santo Tambien siempre segun el mismo documento es recomendada para la misa del Jueves Santo la misa que se celebra en los concilios en las reuniones de obispos y en los sinodos la misa conventual la misa principal que se celebra en las iglesias y en los oratorios las misas que se celebran en cualquier tipo de reuniones de sacerdotes tanto seculares como religiosos en la ordenacion del DiaconoParticipantes Editar Si bien solo el sacerdote validamente ordenado puede realizar la consagracion la Iglesia ensena que la Eucaristia es fuente y cima de toda la vida cristiana 134 compendio y suma de nuestra fe 135 el canon 230 del Derecho canonico en su parrafo tercero ha establecido que donde lo aconseje la necesidad de la Iglesia y no haya ministros pueden los laicos suplirles en algunas de sus funciones es decir ejercitar el ministerio de la palabra presidir las oraciones liturgicas administrar el bautismo y dar la sagrada Comunion segun la prescripcion del derecho 136 De acuerdo con la doctrina de la Iglesia catolica recibir la Eucaristia en estado de pecado mortal es un sacrilegio 137 y solo aquellos que se encuentren en estado de gracia es decir sin pecado mortal alguno pueden recibirla 138 Basandose en 1 Cor 11 27 29 139 afirma lo siguiente Quien tenga conciencia de hallarse en pecado grave pecado mortal que no comulgue el Cuerpo del Senor sin acudir antes a la confesion sacramental 140 La Iglesia insta a sus fieles de participar de la misma todos los domingos y fiestas de precepto y de recibir al menos una vez al ano la comunion sacramental y recomienda vivamente a los feligreses recibir la santa Eucaristia los domingos y los dias de fiesta o con mas frecuencia aun incluso todos los dias pero siempre en estado de gracia 141 La celebracion eucaristica se da en el contexto de una reunion La Iglesia cree que a la cabeza de la misma esta Cristo mismo que es el actor principal Como representante suyo el obispo o presbitero preside la asamblea in persona Christi capitis en la persona de Cristo Cabeza Todos los fieles tienen parte activa en la celebracion cada uno a su manera los lectores los que presentan las ofrendas los que dan la comunion y el pueblo entero cuyo Amen manifiesta su participacion 142 Tambien recordaremos nuevamente aqui que la Iglesia al desempenar la funcion de sacerdote y victima juntamente con Cristo ofrece toda entera el sacrificio de la misa y toda entera se ofrece en el Porque toda misa aunque sea celebrada privadamente por un sacerdote no es accion privada sino accion de Cristo y de la Iglesia 143 Desarrollo del rito EditarArticulo principal Santa Misa En la Primera Apologia de Justino Martir cc LXV LXVII se describe la celebracion eucaristica con las siguientes partes liturgia de la palabra homilia oracion de los fieles abrazo de la paz presentacion de los dones y plegaria eucaristica comunion eucaristica comunion de bienes 65 Luego al que preside a los hermanos se le ofrece pan y un vaso de vino y tomandolos el tributa alabanzas y gloria al Padre del universo por el nombre de su Hijo y por el Espiritu Santo y pronuncia una larga oracion de gracias por habernos concedido esos dones que de El nos vienen Y una vez que el presidente ha dado gracias y aclamado todo el pueblo los que entre nosotros se llaman ministros o diaconos dan a cada uno de los asistentes parte del pan y del vino y del agua sobre el que se dijo la accion de gracias y lo llevan a los ausentes 66 Y este alimento se llama entre nosotros Eucaristia de la que nadie es licito participar sino el que cree ser verdaderas nuestras ensenanzas y se ha lavado en el bano que da la remision de los pecados y la regeneracion y vive conforme a lo que cristo nos enseno cuando Jesus tomando el pan y dando gracias dijo Haced esto en memoria mia este es mi cuerpo E igualmente tomando el caliz y dando gracias dijo Esta es mi sangre y que solo a ellos les dio parte 67 Seguidamente nos levantamos todos a una y elevamos nuestras preces y estas terminadas como ya dijimos se ofrece pan y vino y agua y el presidente segun sus fuerzas hace igualmente subir a Dios sus preces y accion de gracias y todo el pueblo exclama diciendo amen Ahora viene la distribucion y participacion que se hace a cada uno de los alimentos consagrados por la accion de gracias y su envio por medio de los diaconos a los ausentes A partir del siglo III los testimonios acerca de la celebracion de la Eucaristia son cada vez mas claros sea en relacion con el esquema celebrativo que permanece sustancialmente el propuesto por Justino sea por los numerosos textos de plegarias eucaristicas para la celebracion Tales textos contienen una verdadera catequesis teologica y de fe sobre la Eucaristia En el libro de las Constituciones apostolicas se indica el orden de la celebracion liturgia de la palabra oracion de los catecumenos y abrazo de la paz los catecumenos se retiran presentacion de los dones anafora o plegaria eucaristica comunion oracion despues de la comunion oracion de bendicion y despedida La plegaria eucaristica consta de los siguientes elementos 144 Accion de gracias que se expresa en el prefacio Aclamacion de alabanza del pueblo con el sanctus La epiclesis para pedir la intervencion del Espiritu Santo que transformara el pan en el cuerpo y el vino en la sangre del Senor La narracion de la institucion con las palabras consacratorias El memorial o anamnesis del misterio pascual de Cristo La ofrenda de la Iglesia a traves y junto con la victima sagrada Las peticiones e intercesiones por los vivos y muertos La doxologia final que glorifica a Dios En algunas iglesias protestantes o evangelicas se bendicen los alimentos se toman los elementos de la mano de ancianos o diaconos se leen los pasajes donde es instituida se participa y termina con oraciones de adoracion y accion de gracias cita requerida Vease tambien EditarAdoracion eucaristica Copon Liturgia Sagrario Transubstanciacion Consubstanciacion Memorial religion Notas y referencias Editar Concilio Vaticano II Constitucion Dogmatica Sacrosantum Concilium Capitulo II El Sacrosanto misterio de la Eucaristia Vaticano 4 de diciembre de 1963 Lockward A 2003 Nuevo diccionario de la Biblia Editorial Unilit Miami p 214 Cfr Compendio del Catecismo de Doctrina Catolica n 271 Strong s Greek 2169 eὐxaristia eucharistia thankfulness giving of thanks en ingles Consultado el 6 de junio de 2019 Carro D Poe J T amp Zorzolia R O 1994 2003 Comentario Biblico Mundo Hispano Tomo 2 Exodo Editorial Mundo Hispano p 114 Mateo 26 26 29 Marcos 14 22 25 Lucas 22 19 20 ICor 11 23 26 Concilio de Trento DS 1740 Catecismo de la Iglesia Catolica 1366 Catecismo de la Iglesia Catolica 1362 1367 Concilio de Trento DS 1743 Catecismo de la Iglesia Catolica 1367 Catecismo de la Iglesia Catolica 1367 Catecismo de la Iglesia Catolica 1411 Catecismo de la Iglesia Catolica 1414 Credo del Pueblo de Dios 24 Didaje Cap XIV nro 1 San Ignacio de Antioquia Philad 4 cf Eph 5 2 San Justino Martir Dialogo con Trifon 41 San Ireneo de Lyon Adv haer iv 17 5 cf Iv 18 2 y 4 Tertuliano De orat 19 San Cipriano Ep 63 4 San Cipriano Ep 63 14 San Ambrosio In Ps 38 25 In Sent IV d 12 n 7 PL 192 866 Santo Tomas de Aquino Suma teologica Parte IIIa Cuestion 83 art 1 Jose Antonio Sayes El Misterio Eucaristico Ediciones Palabra 2ed Espana pag 199 Martin Lutero De captivitate baylonica Ed Weimar VI pags 512 a 514 Martin Lutero De abroganda missa privata Ed Weimar VIII pag 415 Opera Omnia Ed Schuler Schultness Zurich 1828ss I pag 154 Juan Calvino Institucion de la religion cristiana 4 18 2 Jose Antonio Sayes El Misterio Eucaristico Ediciones Palabra 2ed Espana pag 206 Denzinger 937 a 956 Concilio de Trento sesion XXII cap 9 Denzinger 947 Concilio de Trento sesion XXII canon 1 Denzinger 948 a b Concilio de Trento sesion XXII cap 1 Denzinger 938 Concilio de Trento sesion XXII cap 1 Denzinger 938 940 canon 2 Denzinger 949 Concilio de Trento sesion XXII cap 1 Denzinger 938 canon 2 Denzinger 949 Cf Mediator Dei de la Santa Sede Mediator Dei n 85 Mediator Dei n 86 Mediator Dei nn 87 y 88 Mediator Dei n 90 Mediator Dei n 91 Mediator Dei n 92 Mediator Dei n 93 Mediator Dei nn 94 96 Mediator Dei nn 97 137 Cf texto en espanol de la Santa Sede Cf Mysterium fidei Cf Credo del Pueblo de Dios Cf Ecclesia de Eucharistia de la Santa Sede Catecismo de la Iglesia Catolica Catecismo de la Iglesia Catolica 1407 Cf Catecismo de la Iglesia Catolica 1409 Cf Catecismo de la Iglesia Catolica 1410 Cf Catecismo de la Iglesia Catolica 1411 Cf Catecismo de la Iglesia Catolica 1414 Cf Catecismo de la Iglesia Catolica 1419 Cf Sacramentum caritatis Cf Catecismo de la Iglesia Catolica 1374 Concilio de Trento DS 1651 Catecismo de la Iglesia Catolica 1376 Compendio del Catecismo de la Iglesia Catolica 283 Denzinger 715 Concilio de Trento sesion XIII Denzinger 877 Catecismo de la Iglesia Catolica nro 1377 Catecismo de la Iglesia Catolica nro 1378 Compendio del Catecismo de la Iglesia Catolica 286 Concilio de Trento Denzinger 876 Jesucristo instituyo la Eucaristia Catecismo de la Iglesia Catolica n º 1375 San Ignacio de Antioquia Carta a los cristianos de Esmirna 7 1 San Ignacio de Antioquia Carta a los cristianos de Filadelfia 4 1 Primera Apologia de Justino Martir 66 hacia el ano 155 San Ireneo de Lyon Contra las herejias IV 18 4 5 San Ambrosio myst 9 50 52 san Juan Crisostomo v 345 407 sacerdote en Antioquia despues obispo de Constantinopla doctor de la Iglesia Homilia sobre el evangelio de Mateo n 82 PG 58 743 Vease Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pag 273 Vease Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pags 276 a 281 Vease Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pags 284 a 287 Santo Tomas de Aquino Suma teologica Parte IIIa Joan M Canals El Culto a la Eucaristia Barcelona 2 ª edicion 2001 pags 29 y 30 IV Concilio de Letran Denzinger 430 II Concilio de Lyon Denzinger 466 Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pag 289 Concilio de Constanza Denzinger 581 a 583 Jose Aldazabal Larranaga La Eucaristia Centro de Pastoral Liturgica 1999 pag 183 Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pag 316 Jose Aldazabal Larranaga La Eucaristia Centro de Pastoral Liturgica 1999 pag 195 Vease Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pag 316 Jose Aldazabal Larranaga La Eucaristia Centro de Pastoral Liturgica 1999 pags 191 192 a b Schlaffer Hans 1527 Una agradable carta de consolacion Selecciones Teologicas Anabautistas 160 161 Guatemala Herald Press 1986 Riedeman Peter 1545 Relato Selecciones Teologicas Anabautistas 166 168 Denzinger 873 a 893 Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pag 333 Concilio de Trento sesion XIII canon 1 Denzinger 883 vease ademas Denzinger 874 y 876 Concilio de Trento sesion XIII capitulo 1 Denzinger 874 Jose Aldazabal Larranaga La Eucaristia Centro de Pastoral Liturgica 1999 pags 193 y 194 Jose Rico Paves Los sacramentos de la iniciacion cristiana Introduccion teologica a los Sacramentos del Bautismo Confirmacion y Eucaristia Salamanca 2006 pags 333 y 334 Pio XII Carta enciclica Mediator Dei Pio XII Carta enciclica Humani Generis nro 20 Jose Aldazabal Larranaga La Eucaristia Centro de Pastoral Liturgica 1999 pag 203 Jose Aldazabal Larranaga La Eucaristia Centro de Pastoral Liturgica 1999 pag 204 Pablo VI CARTA ENCICLICA MYSTERIUM FIDEI Pablo VI CREDO DEL PUEBLO DE DIOS nro 25 beato Juan Pablo II CARTA ENCICLICA ECCLESIA DE EUCHARISTIA 1 Consultado el 3 de abril de 2017 Benedicto XVI Exhortacion apostolica Sacramentum Caritatis nro 1 Definicion de comunion Que es Significado y Concepto Consultado el 3 de abril de 2017 Joan M Canals El Culto a la Eucaristia Barcelona 2 ª edicion 2001 pag 45 Catecismo de la Iglesia Catolica 960 Hechos de los Apostoles 2 42 47 San Ignacio de Antioquia Carta a los cristianos de Filadelfia 4 1 Santo Tomas de Aquino Suma teologica Parte IIIa cuestion 73 articulo 3 Catecismo de la Iglesia Catolica 1391 Catecismo de la Iglesia Catolica 1392 Catecismo de la Iglesia Catolica 1393 Catecismo de la Iglesia Catolica 1394 Catecismo de la Iglesia Catolica 1395 Catecismo de la Iglesia Catolica 1396 Catecismo de la Iglesia Catolica 1397 Catecismo de la Iglesia Catolica 1402 Josep M Rovira Belloso Los Sacramentos simbolos del Espiritu Centre de Pastoral Liturgica Barcelona primera edicion 2001 pag 184 Josep M Rovira Belloso Los Sacramentos simbolos del Espiritu Centre de Pastoral Liturgica Barcelona primera edicion 2001 pag 184 Josep M Rovira Belloso Los Sacramentos simbolos del Espiritu Centre de Pastoral Liturgica Barcelona primera edicion 2001 pag 185 Catecismo de la Iglesia Catolica 1404 Catecismo de la Iglesia Catolica 1405 Catecismo de la Iglesia Catolica nro 1412 Instruccion general del Misal Romano nro 320 Vease Bula Laetentur coeli del Papa Eugenio IV Denzinger 692 Congregacion para la Doctrina de la Fe Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucaristica punto A 2 Congregacion para la Doctrina de la Fe Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucaristica punto B 1 Congregacion para la Doctrina de la Fe Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucaristica puntos B 2 y C 3 Instruccion general del Misal Romano nro 322 Bula Exultate Deo del Papa Eugenio IV Denzinger 698 Concilio de Trento Doctrina acerca del santisimo sacrificio de la Misa Sesion XXII Cap 7 Denzinger 945 Congregacion para la Doctrina de la Fe Carta circular a los Presidentes de las Conferencias Episcopales acerca del uso del pan con poca cantidad de gluten y del mosto como materia eucaristica puntos A 3 y C 1 Catecismo de la Iglesia Catolica nro 1353 Pablo VI CREDO DEL PUEBLO DE DIOS nro 24 Catecismo de la Iglesia Catolica nro 1411 Instruccion general del Misal Romano 199 Concilio Vaticano II Constitucion Dogmatica Lumen Gentium nro 11 Catecismo de la Iglesia Catolica 1324 Catecismo de la Iglesia Catolica 1327 Derecho Canonico Consultado el 3 de abril de 2017 Leccion 28 del Catecismo de Baltimore 368 Compendio del Catecismo de la Iglesia Catolica 291 Consultado el 20 de agosto de 2019 Catecismo de la Iglesia Catolica 1385 Consultado el 20 de agosto de 2019 Catecismo de la Iglesia Catolica 1457 Consultado el 20 de agosto de 2019 Catecismo de la Iglesia Catolica 1389 Catecismo de la Iglesia Catolica 1348 Pablo VI CARTA ENCICLICA MYSTERIUM FIDEI nro 4 Catecismo de la Iglesia Catolica 1349 a 1355Bibliografia Editar Breve resumen de la disposicion reverencia y pureza con que deven llegar los Fieles a recibir el Santissimo Sacramento del Altar Juan Bautista Sicardo 1673 S HAHN La cena del Cordero la Misa el cielo en la tierra Rialp Madrid 2001 Sor Pascale Dominique Nau OP Historia de la Eucaristia desde la Cena hasta la Misa medieval 2 ª edicion revisada y aumentada en J RATZINGER La Eucaristia centro de la vida Dios esta cerca de nosotros EDICEP D L Valencia 2003 J SAYES El misterio eucaristico Ed BAC Madrid 1986 ISBN 84 220 1258 8 M NICOLAU Nueva Pascua de la nueva alianza Ed Stvdivm Salamanca 1973 ISBN 84 304 1156 9 A JUNGMANN El sacrificio de la Misa Ed BAC Madrid 1951 Catecismo de la Iglesia catolica nn 1322 1419 Catecismo de la Iglesia catolica compendio nn 271 294 Enlaces externos Editar Wikimedia Commons alberga una galeria multimedia sobre Eucaristia Wikcionario tiene definiciones y otra informacion sobre eucaristia Sacramentum Caritatis El Sacramento de la Caridad exhortacion apostolica de Benedicto XVI La Eucaristia en la Iglesia primitiva Datos Q66086 Multimedia Communion Obtenido de https es wikipedia org w index php title Eucaristia amp oldid 140351299, wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

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