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Anschluss

Anschluss[1]​ es una palabra alemana que, en un contexto político, significa «unión», «reunión» o «anexión».[2]​ Fue usada para referirse a la fusión de Austria y la Alemania nazi en una sola nación, el 12 de marzo de 1938 como una provincia del III Reich, pasando de Österreich a Ostmark («Marca del Este»). Esta situación duró hasta el 5 de mayo de 1945, cuando los Aliados ocuparon la provincia alemana de Ostmark. El gobierno militar aliado terminó en 1955, cuando se constituyó el nuevo Estado de Austria.

El territorio de Austria y el Reich alemán (12 de marzo de 1938).
Hitler pronuncia un discurso el 15 de marzo de 1938 desde el balcón del Palacio Imperial de Hofburg en Viena, Austria.

Los sucesos del 12 de marzo de 1938 se enmarcan en los anhelos expansionistas de Adolf Hitler para Alemania. Fueron precedidos por la devolución del Sarre en 1935, tras el plebiscito que puso fin al control de la Sociedad de Naciones que el Tratado de Versalles le había encomendado por un periodo de quince años a Francia; y seguidos por la crisis de los Sudetes, la ocupación del resto de Checoslovaquia tras los acuerdos de Múnich, y la invasión de Polonia que, finalmente, supuso el detonante de la Segunda Guerra Mundial.

Antecedentes

La idea de unión con Alemania había surgido en el siglo XIX y había resurgido tras la Primera Guerra Mundial, a pesar de que los tratados de paz lo prohibían.[3]​ La estabilización económica de los años veinte disminuyó el atractivo de la unión de los dos países.[3]​ La Gran Depresión, sin embargo, volvió a presentar el anschluss como una posible solución a la crisis.[4]​ El intento de unión aduanera, empero, fracasó.[4]

El Anschluss fue precedido por un período de creciente presión política sobre Austria, ejercida por Alemania, exigiendo la legalización del partido nazi y, más adelante, su participación en el gobierno. El 13 de septiembre de 1931, la milicia de los socialcristianos intentó en vano tomar el poder por las armas.

 
El canciller Dollfuss en Ginebra, 1933.

A pesar de ser el partido más votado en las elecciones de abril de 1932, los nazis no obtuvieron la mayoría absoluta, por lo que pasaron a la oposición. Los nazis austríacos se lanzaron a una estrategia de tensión y recurrieron al terrorismo. El canciller socialcristiano Engelbert Dollfuss decidió en 1933 gobernar por decreto, disolver el Parlamento, el partido comunista, el partido nacionalsocialista y la poderosa milicia socialdemócrata, la Schutzbund. Su régimen adquirió un tinte fascista con preferencia hacia los modelos adoptados previamente por Benito Mussolini y basado en el catolicismo tradicional, por lo cual recibió el nombre de austrofascismo. Dollfuss reprimió a los socialdemócratas que deseaban salvar la democracia, ya fuera por la mano de Dollfuss o por la de los nazis.

  • La dura represión de la policía tras una insurrección socialista en Linz en febrero de 1934 causó entre 1000 y 2000 muertos. Los socialdemócratas se exiliaron. Entretanto, los nazis austríacos se habían reforzado y organizado, exigiendo un fascismo más germánico y subordinado a Alemania. En su afán de tomar el poder lanzaron una fallida revuelta y asesinaron al canciller Dollfuss el 25 de julio de 1934 en el edificio del gobierno en Viena, pero su golpe de Estado fracasó. El Ejército austríaco no se unió a la rebelión, mientras que los seguidores austrofascistas de Dollfuss lograron aislar y reducir a las bandas de nazis armados que intentaron organizarse.

Hitler tuvo conocimiento de que la viuda y los hijos del asesinado Dollfuss se hallaban en ese momento como huéspedes del dictador italiano Benito Mussolini. Precisamente, cuando Mussolini supo lo acontecido a Dollfuss en Viena, el 26 de julio ordenó movilizar tropas italianas en la frontera alpina con Austria, amenazando con intervenir militarmente para sostener a los sucesores de Dollfuss en caso necesario. Hitler no contaba entonces con la Wehrmacht en toda su fuerza ni bajo control total del nazismo, y aún en ese caso tampoco deseaba un conflicto con un régimen ideológicamente tan cercano como la Italia fascista, por lo cual se abstuvo de enviar tropas para apoyar a los nazis austríacos.

Presión alemana sobre Austria

El nuevo canciller, Kurt Schuschnigg, insistió en proseguir el sistema político de Dollfuss, manteniendo una dictadura nacionalista, fascista e impidiendo toda opción política que propugnase la anexión a Alemania, para lo cual contó con el apoyo tácito de políticos socialistas y católicos, que juzgaron al austrofascismo como un mal mucho menor que el nazismo alemán. No obstante, los nazis austríacos habían empezado a organizarse más cuidadosamente para una posible rebelión futura, y eligieron como táctica el terrorismo contra autoridades gubernamentales y contra conocidos militantes antinazis. Entre agosto de 1934 y marzo de 1938 los atentados nacionalsocialistas mataron a 800 personas.

La situación interna de Austria amenazaba con una guerra civil entre el gobierno y los nazis austríacos, que recibían financiación y armas del Tercer Reich, y que habían logrado captar un alto número de simpatizantes de entre la juventud austríaca que sufría el desempleo provocado por la Gran Depresión de 1929 que aún afectaba a Austria. En este contexto de disturbios sociales, el canciller Kurt Schuschnigg fue convocado a una reunión con Hitler en el «Nido del Águila», en Berchtesgaden, el 12 de febrero de 1938, fecha en que la actividad terrorista nazi en Austria alcanzaba un nivel insoportable para la república alpina. El programa exigido por Hitler era claro: amnistía para los nazis austríacos por los crímenes cometidos, participación de sus miembros en el gobierno, establecimiento de un sistema de colaboración mutua entre la Wehrmacht y el ejército federal austríaco e inclusión de Austria en el área aduanera alemana a cambio de que el Tercer Reich dejara de intervenir en la crisis política austríaca.

La entrevista Schuschnigg-Hitler resultó tempestuosa al explicarse en detalle las exigencias de Alemania, pues el dictador alemán amenazó al canciller austríaco con propiciar una guerra civil en Austria, con ayuda de los nazis austríacos, si no eran aceptadas todas sus condiciones. Hitler, literalmente, amenazó a Schuschnigg con «transformar Austria en una segunda España» si no se satisfacían sus demandas, para lo cual el dictador nazi convocó a la sala de reuniones a los jefes militares Wilhelm Keitel, Hugo Sperrle y Walther von Reichenau que, según Hitler, se hallaban allí «por casualidad». Schuschnigg abandonó Berchtesgaden el mismo 12 de febrero junto con el presidente de Austria Wilhelm Miklas, temiendo ambos una invasión por parte de Alemania en cualquier momento.

De vuelta en Viena, el canciller de Austria Kurt Schuschnigg aceptó dar libertad a los nazis austríacos encarcelados, y entregó el Ministerio de Policía al nacional-socialista Arthur Seyss-Inquart, en un último intento de mantener la independencia de Austria. No obstante, los nazis austríacos no se daban por satisfechos pues ahora Schuschnigg se apoyaba en socialistas y católicos para preservar la independencia de Austria, por lo cual los atentados y sabotajes nazis prosiguieron. Por su parte Hitler en un discurso público se refirió el 3 de marzo de 1938 a los austríacos como «10 millones de alemanes que viven fuera de nuestras fronteras», acreditando así su intención anexionista respecto de Austria.

La anexión

Convocatoria del plebiscito

Deseoso de evitar una pérdida paulatina del poder y esperando poder recabar la ayuda europea contra Alemania, el canciller decidió el 1 de marzo llevar a cabo un plebiscito el domingo 13.[5]​ La pregunta no incluía la aceptación de la anexión alemana, sino que se limitaba a solicitar el apoyo del votante al mantenimiento de una «Austria unida, cristiana, social, independiente, alemana y libre».[5]​ Los preparativos comenzaron en secreto el día 5 de marzo y Von Schuschnigg comunicó el plan a Seyß-Inquart el 8, encareciéndole que no lo divulgase hasta el día siguiente, cuando tenía pensado anunciarlo oficialmente.[5]​ Aunque Seyß-Inquart mantuvo su promesa, nacionalsocialistas austríacos que trabajaban en la Administración estatal se enteraron del plan y lo comunicaron a Berlín.[5]

Presionado por los hechos, Von Schuschnigg anunció un referéndum el miércoles 9 de marzo de 1938 para determinar la independencia o la unión con Alemania, para así beneficiarse de la legitimidad popular y mostrar las intenciones expansionistas de Hitler. Respecto al referendo, Schuschnigg, de acuerdo con el presidente Miklas, fijó en 24 años la edad mínima para votar,[6]​ evitando la participación masiva de jóvenes desempleados que constituían la mayor reserva de militantes nazis de Austria. La fecha de la consulta popular sería el domingo 13 de marzo. Cuando Hitler se enteró de las intenciones de Schuschnigg entró en furia y ordenó a los nazis austríacos pasar a la acción para evitar que se celebrara tal referéndum. Mientras que en Austria, la noche del 9 de marzo, los nacionalsocialistas exigieron que se abrogara el artículo 88 del Tratado de Saint-Germain-en-Laye que impedía la unión con Alemania para permitir la votación, Hitler enviaba a un representante personal para evitar el plebiscito si no incluía claramente la opción de la anexión con Alemania.[5]​ No se puso en marcha acción violenta alguna, en espera de que el nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Ribbentrop, que se hallaba en Gran Bretaña, informase sobre la actitud de esta a una eventual intervención alemana en el país vecino.[7]​ El 10 llegó la confirmación de que, si el conflicto se limitaba a las dos naciones, el Reino Unido no intervendría en favor de los austríacos.[8]

Antes de que el referéndum fuera posible, los nazis austríacos lanzaron una ola de ataques violentos contra las entidades gubernamentales mientras que la policía austríaca (en manos de Seyß-Inquart) fue neutralizada y se le impidió cualquier oposición. Alemania cerró las fronteras y empezó a movilizar sus tropas, mientras que los nazis austríacos se abstenían de repetir el intento de golpe de Estado de cuatro años antes contra Dollfuß: ahora creaban el caos en todo el país con algaradas callejeras y violencias de toda clase (incendios, saqueos, destrucción de oficinas públicas), para generar una situación de caos y provocar una verdadera guerra civil contra socialdemócratas y católicos. Mientras tanto, Hitler decidía la invasión alemana de Austria y discutía con el Estado Mayor de la Wehrmacht los planes necesarios, perfilados apresuradamente a lo largo del día 10.[8]

La mañana del día 11, Seyß-Inquart recibió una carta de Hitler en la que le informó de los preparativos militares que se estaban llevando a cabo y reclamando la anulación del plebiscito antes del mediodía.[8]​ Acudió a ver al canciller en la sede del Gobierno y le rogó que aceptase las condiciones de Hitler; como la entrevista se alargó, los nazis otorgaron una prórroga para obtener la respuesta del Gobierno austríaco hasta las dos de la tarde.[8]​ A las exigencias del canciller alemán se unieron pronto las del partido en Austria: Von Schuschnigg debía retrasar la votación tres semanas o arriesgarse a que los nacionalsocialistas tomasen el poder por la fuerza.[8]

Los disturbios masivos causados por nazis se sucedieron en Graz, Linz, Innsbruck y Viena a lo largo del 10 y 11 de marzo, con la consiguiente represión de tropas austríacas aún leales al gobierno. El plan de Hitler era que el presidente Miklas destituyese a Schuschnigg ante el temor de una guerra civil y que nombrase a Seyß-Inquart como canciller de Austria. Luego estaba planeado que Seyß-Inquart aprovecharía su nuevo cargo para solicitar ayuda militar a Alemania con el objetivo de poner fin a la crisis austríaca, disipando así toda apariencia de invasión alemana.

Al amanecer del viernes 11 de marzo las juventudes nazis, ahora armadas y disciplinadas, se habían constituido en una milicia que tomaba los edificios gubernamentales por todas las ciudades principales de Austria con apoyo de agentes de la Gestapo infiltrados inclusive en la misma capital austríaca. Ante la amenaza de una revuelta armada masiva patrocinada por Alemania, el canciller Schuschnigg trataba de buscar apoyo en el Reino Unido o Francia para detener la agresión alemana pero ninguno de estos gobiernos mostró intención alguna de intervenir.

 
Policías de frontera alemanes y austríacos desmontan conjuntamente un puesto limítrofe el 15 de marzo de 1938.

El presidente Wilhelm Miklas recibió un ultimátum del propio Hitler a las 12:00 del viernes 11 de marzo, exigiéndole que dejara sin efecto el referéndum ordenado por Schuschnigg y dándole un plazo de dos horas que vencía supuestamente a las 13:00 debido a una demora alemana en hacer llegar el mensaje. Miklas discutió la situación con Schuschnigg pero no aceptó dejar sin efecto el referéndum ya convocado y planificado.

Claudicación austríaca

El Gobierno austríaco se reunió a las dos de la tarde y Von Schuschnigg aceptó anular el plebiscito, aunque no convocar uno nuevo tres semanas después, como reclamaban los nazis austríacos.[9]​ A las 14:45, Göring telefoneó a Seyss-Inquart para rechazar las concesiones, que tachó de insuficientes; poco después, volvió a llamarlo para indicar que Hitler exigía la renuncia del Gobierno entero.[10]​ Cuando se le comunicó la nueva condición a Von Schuschnigg a las 15:30, este presentó la dimisión al presidente.[10]

Al mismo tiempo que se reunía el Consejo de Ministros austríaco, Hitler aprobaba los planes de invasión.[10]​ Dos horas más tarde, cuando se supo de la aquiescencia de Von Schuschnigg a las exigencias alemanas, se detuvieron los preparativos militares.[10]

No obstante, un nuevo mensaje alteró el curso de los acontecimientos, pues a las 15:30 Hitler envió otro ultimátum a Miklas exigiendo nada menos que se destituyera a Kurt Schuschnigg como canciller y se nombrara en su lugar al nazi austríaco Seyß-Inquart. Miklas se negó expresamente y en las horas que siguieron se buscó a otro líder político ya que Schuschnigg había renunciado.[10]​ A las 17:00, dirigentes nazis austríacos volvieron a reclamar la formación de un gabinete con Seyß-Inquart a la cabeza, amenazando con la invasión a las 20:00 si el presidente seguía negándose a aceptar a las 19:30.[10]​ Aunque el agregado militar alemán indicó que efectivamente ciento cincuenta mil soldados estaban listos para invadir el país si Miklas no encargaba el Gobierno a Seyß-Inquart, el presidente rechazó altivamente la intimidación.[11]​ Pese a sus esfuerzos, Miklas no logró que ningún otro líder político o militar austríaco aceptase el cargo de canciller y a las 17:00 recibió un nuevo mensaje de Hermann Göring: Hitler exigía que la designación de Seyß-Inquart fuera realizada, a más tardar, a las 19:30, lo que coincidía con lo que exigían sus correligionarios austríacos.[12]​ Anunció además la presentación de nuevas condiciones.[12]

A las 18:00, Seyß-Inquart recibió de un enviado de Berlín el texto de un telegrama que debía enviar, anunciando su nombramiento como presidente del Gobierno y solicitando ayuda alemana para acabar con los disturbios, pero se negó a hacerlo, alegando que no era aún presidente y que no existían disturbios que requiriesen la intervención militar alemana.[12]​ El enviado y Seyß-Inquart acudieron entonces a visitar al presidente, que nuevamente se negó a aceptar a este como primer ministro.[12]​ A las 19:00, Von Schuschnigg declaró que iba a anunciar públicamente su dimisión.[12]

Por su parte, Kurt Schuschnigg estaba dispuesto a renunciar a su puesto si fuese necesario para evitar una invasión alemana. Viendo la situación casi perdida, líderes del Frente Patriótico de Dollfuß parten al exilio esa misma tarde. Finalmente Schuschnigg decide tomar la iniciativa y pronuncia un emotivo discurso radiofónico a las 19:47 despidiéndose del pueblo austríaco y presentando su renuncia al cargo de canciller mientras alegaba que «ha hecho todo lo posible por salvaguardar la independencia del país». Schuschnigg termina la alocución con la frase Gott schütze Österreich (en alemán, «Dios proteja a Austria»).

Pese a la renuncia de Schuschnigg, el presidente Miklas aún se niega a legitimar la proyectada invasión alemana nombrando un nazi como canciller, aun cuando a las 20:00 las calles de Viena ya están prácticamente dominadas por los nazis austríacos, dedicados a imponer su autoridad por la fuerza y a colgar banderas nazis o decorar con esvásticas la bandera de Austria en los edificios públicos. Mientras los dirigentes nazis austríacos ordenaban a sus seguidores tomar el poder al cumplirse la hora sin que el presidente aceptase sus condiciones, Seyß-Inquart hablaba por teléfono con Göring para informarle de la situación.[13]​ Este indicó que iba a ordenar la invasión de Austria y que cualquier resistencia se juzgarían en consejos de guerra.[13]

 
Tropas alemanas entran en Viena el 14 de marzo de 1938

Hitler aceptó ordenar nuevamente la movilización de las fuerzas preparadas para la invasión y emitió la orden necesaria a las 20:45; las tropas debían penetrar en el país vecino la madrugada del día siguiente.[13]​ Aunque Göring seguía exigiendo que Seyß-Inquart enviase el telegrama que debía justificar la entrada en el país de las tropas alemanas, no lo logró hasta las 21:54.[14]​ Mientras tanto Hitler aun dudaba de la reacción de Benito Mussolini ante los hechos, considerando la protección italiana que ya había sido otorgada a la Primera República de Austria en 1934 tras el asesinato de Dollfuß, pero tras la mutua colaboración ítalo-alemana en la conquista de Abisinia y la Guerra Civil Española, la Italia fascista se había alineado definitivamente con el Tercer Reich. Así, tras una consulta diplomática del príncipe Phillip von Hesse (embajador alemán en Roma), a las 22:00 del 11 de marzo el ministro italiano Galeazzo Ciano informó a Hitler, por medio de Von Hesse, que Mussolini no intervendría en los sucesos de Austria.[14]​ Esta noticia fue conocida de inmediato en Viena y dejó a Miklas y Von Schuschnigg privados de su único gran aliado extranjero, mientras de inmediato Hitler llamaba por teléfono a su embajador en Roma para que este expresase el «profundo agradecimiento personal» del Führer hacia el Duce.

Al transcurrir la noche, y sin recibir noticias de Viena sobre la designación de Seyß-Inquart como canciller austríaco, Hitler entró en furia y ordenó a las tropas de la Wehrmacht proceder con la invasión de Austria a las 22:00 del 11 de marzo, Hitler ordena también la falsificación de un telegrama supuestamente enviado por Seyß-Inquart desde Viena como nuevo canciller y en donde este jefe nazi pedía ayuda a Hitler para restablecer el orden en Austria. Hitler ya no estaba conforme sólo con la renuncia de Schuschnigg, y había sostenido que Miklas también debería renunciar a su cargo.

A medianoche, Miklas cedió finalmente y aceptó nombrar a Seyß-Inquart canciller interino, aunque toda medida gubernamental debía aprobarla el presidente.[14]​ Seyß-Inquart solicitó entonces a Berlín que detuviese la invasión, ya que la movilización de las SA y las SS austríacas y la decisión de Miklas y Von Schuschnigg de aceptar todas las condiciones alemanas la hacían innecesaria.[14]​ Se despertó a Hitler para comunicarle el ruego de Seyß-Inquart, que rechazó.[15]

Mientras tanto los nazis austríacos seguían su campaña de destrucciones y revueltas contra el gobierno, sembrando el desorden. A la medianoche del 11 de marzo, los nazis austríacos habían ocupado casi todos los edificios gubernamentales de Viena, arrestando a los líderes políticos antinazis que pudieron hallar, contando con la colaboración de policías y reclutas de simpatías nazis.

Intervención alemana

 
Tropas alemanas entrando en Viena, el martes 15 de marzo de 1938

Las primeras tropas alemanas que cruzaron la frontera austríaca fueron vitoreadas en territorio austríaco.[15]​ La falta de oposición a la invasión convino a las fuerzas alemanas, que pronto quedaron atrapadas en un gran atasco de tráfico camino de Viena.[15]​ Como las potencias occidentales tampoco reaccionaron a la acción alemana, el mando militar alemán pudo emplear parte de los trenes destinados a participar en la defensa frente a un posible ataque francés a la invasión.[15]

A las diez de la mañana, el nuevo Ejecutivo austríaco juró la Constitución.[15]​ Nuevamente, el nuevo canciller solicitó infructuosamente que se detuviese la invasión.[15]​ Al no conseguirlo, acudió a Linz a encontrarse con Hitler.[15]​ Solicitó que se permitiese a unidades austríacas entrar en territorio alemán, para dar una apariencia de unión a la invasión, a lo que el mandatario alemán accedió.[16]​ A mediodía, el nuevo Gobierno austríaco, que ya había rescindido unilateralmente el artículo 88 del tratado de paz que impedía la unión con Alemania, promulgó un decreto que ratificaba la anexión.[17]​ Al mismo tiempo, las primeras tropas alemanas alcanzaban la capital austríaca.[18]​ Miklas dimitió y nombró presidente interino al canciller, pero se negó a firmar el decreto de anexión aprobado por este.[18]

En la mañana del 12 de marzo, el presidente Miklas aceptó finalmente designar a Seyss-Inquart como canciller austríaco, pero esta medida resultaba inútil pues al amanecer las tropas de la Wehrmacht alemana ya habían cruzado la frontera, iniciando su invasión. Los nazis austríacos arrestaron a Miklas en el mediodía, con apoyo de agentes de la Gestapo infiltrados en Viena y Arthur Seyss-Inquart tomaba el puesto de canciller en la capital austríaca, dando la bienvenida a las tropas de la Wehrmacht que entraban al país. Al día siguiente, las fuerzas alemanas ocupaban sin resistencia toda Austria, hallando un recibimiento efusivo y favorable que les sorprendió, tanto en localidades pequeñas como en las ciudades más grandes. No obstante, el mal estado de muchos transportes de tropas causó retrasos en el avance de la Wehrmacht, lo cual no dejó de preocupar a los jefes militares alemanes.

Hitler mismo cruzó la frontera austríaca el sábado 12 de marzo a las 16:00, dirigiéndose a Braunau am Inn, su localidad natal, y más tarde a Linz.[19]​ El recibimiento entusiasta de la población austríaca a las tropas alemanas sorprendió incluso al líder nazi Hermann Goering, que llegó a Viena el domingo 13 de marzo para coordinar con Seyss-Inquart los detalles de la toma del poder por los nazis. Hitler llegó a Viena el 14, aclamado por una enorme multitud.[18]​ La culminación fue la llegada de Hitler a Viena el martes 15 de marzo, declarando la anexión de Austria a Alemania en la Heldenplatz vienesa ante 250 000 simpatizantes.

Plebiscito

 
Papeleta en blanco que dice: «¿Estás de acuerdo con la reunificación de Austria con el Imperio Alemán efectuada el 13 de marzo de 1938 y votas en favor de la lista de nuestro Führer Adolf Hitler?». El círculo mayor es para el «sí» y el pequeño para el «no».

Tras la ocupación alemana, se estableció la supresión de la Primera República de Austria, la conversión de Austria (Österreich en alemán, literalmente Imperio Oriental) en la provincia de Ostmark (en alemán Marca Oriental) y la designación de Arthur Seyß-Inquart como gobernador general (aboliendo el puesto de canciller). Hitler, para legitimar los eventos de marzo de 1938, anunció un plebiscito para el 10 de abril de 1938, menos de un mes después de la anexión, que serviría para convalidar el Anschluss.

La unión con Alemania tuvo el apoyo del 99.73 % del electorado.[20]​ Si bien el resultado no fue manipulado, sí lo había sido todo el proceso electoral. Para empezar, no había voto secreto.[cita requerida] La papeleta se tenía que rellenar delante de los oficiales de las SS [cita requerida] y entregársela en sus manos, [cita requerida] sin posibilidad de que el elector la introdujera en una urna por sí mismo. [cita requerida] En dicha papeleta aparecía en el centro un círculo muy grande donde poner «sí», y otro más pequeño a la derecha donde poner «no», incitando claramente al voto a favor de la anexión.

Además no hubo campaña posible a favor del «no», pues inmediatamente tras la anexión habían sido detenidas 70 000 personas en pocos días: judíos, socialdemócratas y comunistas, así como toda la cúpula política de la Primera República de Austria, entre los que estaban conocidos líderes políticos como Richard Schmitz, Leopold Figl, Friedrich Hillegeist y Franz Olah. El censo electoral dejó fuera a 400 000 ciudadanos (un 10 % de los votantes potenciales), mayoritariamente izquierdistas y judíos. Cabe destacar que en Innervillgraten, una pequeña población donde la votación no estuvo custodiada por la Wehrmacht, el resultado fue de un 95 % de votos contrarios a la anexión.[cita requerida]

Consecuencias

La respuesta internacional al Anschluss fue bastante tibia: los países aliados de la Primera Guerra Mundial solamente presentaron protestas diplomáticas, sin tomar acciones concretas que revirtieran la situación, a pesar de que eran, como establecía específicamente el Tratado de Versalles, los responsables de impedir la unión política entre Austria y Alemania. Reino Unido sostuvo que los eventos del Anschluss eran irreversibles, aun reconociendo que Hitler había violentado el tratado de paz. Francia se expresó en similares términos y se abstuvo de pedir boicot alguno contra Alemania por esta acción. México protestó oficialmente contra el comportamiento de Alemania a través de su representante en la Sociedad de Naciones, Isidro Fabela, con mayor dureza que la expresada por los países europeos.[21]

Dentro de Austria, el Anschluss encontró fuerte resistencia en los opositores al nazismo, pero fue asumido como una situación política inevitable por la mayoría de la población. Los líderes religiosos católicos y protestantes pidieron a sus feligreses no oponerse activamente a la nazificación de Austria por temor a desencadenar un conflicto sangriento. El cardenal y arzobispo de Viena, Theodor Innitzer, antiguo ministro de Asuntos Sociales del tercer gabinete del canciller Johann Schober, afirmó: «Los católicos vieneses debemos dar gracias al Señor por la forma incruenta en que ha ocurrido este gran cambio político y orar por un gran futuro para Austria. De más está decir que, desde ahora en adelante, todo el mundo debe obedecer las órdenes de las nuevas instituciones».[22][23][24]

Robert Kauer, presidente del Consejo de la Iglesia evangélica, envió un telegrama saludando a Hitler en los siguientes términos: «A su llegada a suelo austríaco, le saludo en nombre de los más de 330 000 alemanes evangélicos. Tras una represión que ha resucitado los tiempos más terribles de la Contrarreforma, llega usted como salvador de todos los alemanes, sin diferenciarlos por su fe, tras la dura crisis de estos últimos cinco años. Que Dios bendiga su camino hacia esta tierra alemana, ¡su patria!».[25]​ Utilizando el mismo argumento, los líderes socialistas y nacionalistas pidieron a sus seguidores la aceptación del Anschluss como un hecho consumado.

Por su parte, los nazis austríacos apoyaron decisivamente la anexión a Alemania y colaboraron eficazmente en la nazificación de Austria y su sociedad. Muchos nazis nativos de Austria, además del propio Hitler, llegaron a ocupar cargos destacados dentro de la jerarquía política del Tercer Reich, como Ernst Kaltenbrunner y Arthur Seyss-Inquart, mientras varios centenares de nazis austríacos engrosaron pronto las filas del Partido Nazi, la Gestapo, y de la propia SS, sin desmerecer en fanatismo y brutalidad a sus compañeros alemanes como fue el caso de integrantes de la SS como Amon Göth, Franz Stangl, Gustav Wagner, Eduard Roschmann, Aribert Heim o Hanns Albin Rauter, todos ellos nativos de Austria.

Austria dejó de ser una nación independiente y quedó dividida en 7 distritos análogos a los Reichsgaue de la Alemania nazi. Sus funcionarios públicos y oficiales del Ejército pasaron a depender de sus pares alemanes, excepto aquellos expulsados de sus puestos por oponerse al nazismo o porque sus cargos resultaban inútiles en cuanto Austria perdió su independencia. De la misma forma todas las leyes alemanas, especialmente aquellas que prohibían la oposición política al nazismo, entraron en vigor en Austria, juntamente con el aparato de represión política ya existente en Alemania, encarnado en la Gestapo y la SS. Por su parte, el violento antisemitismo del Tercer Reich fue puesto en práctica de inmediato por todo el territorio austríaco, tanto por nazis locales como por los agentes llegados de Alemania. Las grandes comunidades judías de Viena y Graz fueron prontamente sometidas a la discriminación hitleriana y resultaron aniquiladas años después durante el Holocausto.

En 1943, los aliados, mediante la Declaración de Moscú, reconocieron a Austria como «la primera víctima del nazismo» y se comprometieron a restablecer su independencia nacional, declarando nulo y sin valor el Anschluss. No obstante, los firmantes de la declaración también advirtieron de que el nacional-socialismo austríaco y sus adherentes asumían plenamente la culpabilidad que les correspondiera por participar en crímenes de guerra, en la misma proporción que el Tercer Reich.

Situación después de 1945

Austria entró a formar parte del III Reich desde marzo de 1938 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, cuando el gobierno interino austríaco declaró el Anschluss null und nichtig («nulo e inválido») el 27 de abril de 1945, estableciendo la Segunda República Austríaca. Los vencedores de la guerra mantuvieron Austria bajo ocupación militar durante varios años, aunque tratando a Austria siempre como un país distinto de Alemania, sin ejecutar una división del país y manteniendo un gobierno civil nativo desde el primer momento (eventos que no ocurrieron en Alemania). No se restituyó la plena soberanía austríaca sino tras difíciles negociaciones entre la URSS y los EE. UU. sobre el futuro de Austria, hasta que el Tratado para el Restablecimiento de Austria Independiente y Democrática fue firmado en Viena el 15 de mayo de 1955, mientras una declaración de neutralidad del país fue emitida el mismo año, respaldada por la URSS y los EE. UU.

El 27 de abril de 1945, cuando la Wehrmacht había sido expulsada de casi todo el territorio austríaco, se instauró un «gobierno provisional austríaco» en Viena, que fue reconocido por los Aliados y la URSS prontamente en tanto el nuevo régimen estaba conformado por líderes políticos opuestos al nazismo desde antes de los sucesos de 1938, como el estadista Karl Renner.

Al terminar la Segunda Guerra Mundial, pese a que se había reconocido a Austria como «víctima de la agresión nazi», fue preciso iniciar allí un proceso de desnazificación similar al de Alemania, al ser evidente que antes y después del Anschluss existía una gran masa de varios miles de nazis austríacos que habían colaborado de forma voluntaria y entusiasta con el Tercer Reich.

Hasta la fecha es motivo de polémica histórica en la sociedad austríaca determinar la cantidad real de simpatizantes nazis que existían en Austria en el momento del Anschluss, así como el nivel de apoyo popular que tuvo la agresión alemana. En 1998, el gobierno austríaco formó una «Comisión Histórica» (Historikerkomission)[26]​ con el fin de evaluar la responsabilidad de Austria por las expropiaciones contra los judíos desde un punto de vista académico antes que legal. Ello no ha impedido las críticas de historiadores como Raul Hilberg o Norman Finkelstein[27]​ contra las actitudes «evasivas» de los sucesivos gobiernos de Austria ante la responsabilidad de nazis austríacos en el Holocausto.

Véase también

Notas y referencias

  1. Antes de la reforma ortográfica de 1996, esta palabra era escrita como Anschluß. En Austria y Alemania también es conocida como Anschluss Österreichs (en alemán: «Anexión de Austria»).
  2. Enrique Álvarez-Prada (2002). Langenscheidts Handwörterbuch. Teil II, Deutsch-Spanisch (16.ª edición). Langenscheidt. p. 51. ISBN 3468043465. 
  3. Winchester, 1976, p. 409.
  4. Winchester, 1976, p. 410.
  5. Schmitt, 1959, p. 298.
  6. Lukacs, John (2001). The Last European War: September 1939/December 1941. New Haven: Yale University. p. 13. ISBN 0-300-08915-5. OCLC 46979673. Consultado el 16 de agosto de 2013. 
  7. Schmitt, 1959, p. 298-299.
  8. Schmitt, 1959, p. 299.
  9. Schmitt, 1959, p. 299-300.
  10. Schmitt, 1959, p. 300.
  11. Schmitt, 1959, p. 300-301.
  12. Schmitt, 1959, p. 301.
  13. Schmitt, 1959, p. 302.
  14. Schmitt, 1959, p. 303.
  15. Schmitt, 1959, p. 304.
  16. Schmitt, 1959, p. 304-305.
  17. Schmitt, 1959, p. 305-306.
  18. Schmitt, 1959, p. 306.
  19. Schmitt, 1959, p. 305.
  20. "," Archivo de la Resistencia austríaca, Viena, 1988 (acceso el 10 de junio de 2005).
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Bibliografía utilizada

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Bibliografía adicional

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Enlaces externos

  • United States Holocaust Memorial Museum - Library Bibliography:
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  • Artículo de Robert Knight en la BBC, formó parte de la Historikercommission
  • intercambio de notas en el New York Review of Books entre Gerald Stourzh y Gordon Craig sobre la revisión de "Waldheim's Austria"
  • Texto completo de la Declaración de Moscú
  • Centro Simon Wiesenthal
  • Mpg-video Declaración de Adolf Hitler en la Heldeplatz 2.0MB
  • Cobertura de la revista Time de los eventos del Anschluss
  •   Datos: Q154681
  •   Multimedia: Anschluss of Austria 1938

anschluss, palabra, alemana, contexto, político, significa, unión, reunión, anexión, usada, para, referirse, fusión, austria, alemania, nazi, sola, nación, marzo, 1938, como, provincia, reich, pasando, österreich, ostmark, marca, este, esta, situación, duró, h. Anschluss 1 es una palabra alemana que en un contexto politico significa union reunion o anexion 2 Fue usada para referirse a la fusion de Austria y la Alemania nazi en una sola nacion el 12 de marzo de 1938 como una provincia del III Reich pasando de Osterreich a Ostmark Marca del Este Esta situacion duro hasta el 5 de mayo de 1945 cuando los Aliados ocuparon la provincia alemana de Ostmark El gobierno militar aliado termino en 1955 cuando se constituyo el nuevo Estado de Austria El territorio de Austria y el Reich aleman 12 de marzo de 1938 Hitler pronuncia un discurso el 15 de marzo de 1938 desde el balcon del Palacio Imperial de Hofburg en Viena Austria Los sucesos del 12 de marzo de 1938 se enmarcan en los anhelos expansionistas de Adolf Hitler para Alemania Fueron precedidos por la devolucion del Sarre en 1935 tras el plebiscito que puso fin al control de la Sociedad de Naciones que el Tratado de Versalles le habia encomendado por un periodo de quince anos a Francia y seguidos por la crisis de los Sudetes la ocupacion del resto de Checoslovaquia tras los acuerdos de Munich y la invasion de Polonia que finalmente supuso el detonante de la Segunda Guerra Mundial Indice 1 Antecedentes 2 Presion alemana sobre Austria 3 La anexion 3 1 Convocatoria del plebiscito 3 2 Claudicacion austriaca 3 3 Intervencion alemana 4 Plebiscito 5 Consecuencias 6 Situacion despues de 1945 7 Vease tambien 8 Notas y referencias 9 Bibliografia utilizada 10 Bibliografia adicional 11 Enlaces externosAntecedentes EditarLa idea de union con Alemania habia surgido en el siglo XIX y habia resurgido tras la Primera Guerra Mundial a pesar de que los tratados de paz lo prohibian 3 La estabilizacion economica de los anos veinte disminuyo el atractivo de la union de los dos paises 3 La Gran Depresion sin embargo volvio a presentar el anschluss como una posible solucion a la crisis 4 El intento de union aduanera empero fracaso 4 El Anschluss fue precedido por un periodo de creciente presion politica sobre Austria ejercida por Alemania exigiendo la legalizacion del partido nazi y mas adelante su participacion en el gobierno El 13 de septiembre de 1931 la milicia de los socialcristianos intento en vano tomar el poder por las armas El canciller Dollfuss en Ginebra 1933 A pesar de ser el partido mas votado en las elecciones de abril de 1932 los nazis no obtuvieron la mayoria absoluta por lo que pasaron a la oposicion Los nazis austriacos se lanzaron a una estrategia de tension y recurrieron al terrorismo El canciller socialcristiano Engelbert Dollfuss decidio en 1933 gobernar por decreto disolver el Parlamento el partido comunista el partido nacionalsocialista y la poderosa milicia socialdemocrata la Schutzbund Su regimen adquirio un tinte fascista con preferencia hacia los modelos adoptados previamente por Benito Mussolini y basado en el catolicismo tradicional por lo cual recibio el nombre de austrofascismo Dollfuss reprimio a los socialdemocratas que deseaban salvar la democracia ya fuera por la mano de Dollfuss o por la de los nazis La dura represion de la policia tras una insurreccion socialista en Linz en febrero de 1934 causo entre 1000 y 2000 muertos Los socialdemocratas se exiliaron Entretanto los nazis austriacos se habian reforzado y organizado exigiendo un fascismo mas germanico y subordinado a Alemania En su afan de tomar el poder lanzaron una fallida revuelta y asesinaron al canciller Dollfuss el 25 de julio de 1934 en el edificio del gobierno en Viena pero su golpe de Estado fracaso El Ejercito austriaco no se unio a la rebelion mientras que los seguidores austrofascistas de Dollfuss lograron aislar y reducir a las bandas de nazis armados que intentaron organizarse Hitler tuvo conocimiento de que la viuda y los hijos del asesinado Dollfuss se hallaban en ese momento como huespedes del dictador italiano Benito Mussolini Precisamente cuando Mussolini supo lo acontecido a Dollfuss en Viena el 26 de julio ordeno movilizar tropas italianas en la frontera alpina con Austria amenazando con intervenir militarmente para sostener a los sucesores de Dollfuss en caso necesario Hitler no contaba entonces con la Wehrmacht en toda su fuerza ni bajo control total del nazismo y aun en ese caso tampoco deseaba un conflicto con un regimen ideologicamente tan cercano como la Italia fascista por lo cual se abstuvo de enviar tropas para apoyar a los nazis austriacos Presion alemana sobre Austria EditarEl nuevo canciller Kurt Schuschnigg insistio en proseguir el sistema politico de Dollfuss manteniendo una dictadura nacionalista fascista e impidiendo toda opcion politica que propugnase la anexion a Alemania para lo cual conto con el apoyo tacito de politicos socialistas y catolicos que juzgaron al austrofascismo como un mal mucho menor que el nazismo aleman No obstante los nazis austriacos habian empezado a organizarse mas cuidadosamente para una posible rebelion futura y eligieron como tactica el terrorismo contra autoridades gubernamentales y contra conocidos militantes antinazis Entre agosto de 1934 y marzo de 1938 los atentados nacionalsocialistas mataron a 800 personas La situacion interna de Austria amenazaba con una guerra civil entre el gobierno y los nazis austriacos que recibian financiacion y armas del Tercer Reich y que habian logrado captar un alto numero de simpatizantes de entre la juventud austriaca que sufria el desempleo provocado por la Gran Depresion de 1929 que aun afectaba a Austria En este contexto de disturbios sociales el canciller Kurt Schuschnigg fue convocado a una reunion con Hitler en el Nido del Aguila en Berchtesgaden el 12 de febrero de 1938 fecha en que la actividad terrorista nazi en Austria alcanzaba un nivel insoportable para la republica alpina El programa exigido por Hitler era claro amnistia para los nazis austriacos por los crimenes cometidos participacion de sus miembros en el gobierno establecimiento de un sistema de colaboracion mutua entre la Wehrmacht y el ejercito federal austriaco e inclusion de Austria en el area aduanera alemana a cambio de que el Tercer Reich dejara de intervenir en la crisis politica austriaca La entrevista Schuschnigg Hitler resulto tempestuosa al explicarse en detalle las exigencias de Alemania pues el dictador aleman amenazo al canciller austriaco con propiciar una guerra civil en Austria con ayuda de los nazis austriacos si no eran aceptadas todas sus condiciones Hitler literalmente amenazo a Schuschnigg con transformar Austria en una segunda Espana si no se satisfacian sus demandas para lo cual el dictador nazi convoco a la sala de reuniones a los jefes militares Wilhelm Keitel Hugo Sperrle y Walther von Reichenau que segun Hitler se hallaban alli por casualidad Schuschnigg abandono Berchtesgaden el mismo 12 de febrero junto con el presidente de Austria Wilhelm Miklas temiendo ambos una invasion por parte de Alemania en cualquier momento De vuelta en Viena el canciller de Austria Kurt Schuschnigg acepto dar libertad a los nazis austriacos encarcelados y entrego el Ministerio de Policia al nacional socialista Arthur Seyss Inquart en un ultimo intento de mantener la independencia de Austria No obstante los nazis austriacos no se daban por satisfechos pues ahora Schuschnigg se apoyaba en socialistas y catolicos para preservar la independencia de Austria por lo cual los atentados y sabotajes nazis prosiguieron Por su parte Hitler en un discurso publico se refirio el 3 de marzo de 1938 a los austriacos como 10 millones de alemanes que viven fuera de nuestras fronteras acreditando asi su intencion anexionista respecto de Austria La anexion EditarConvocatoria del plebiscito Editar Deseoso de evitar una perdida paulatina del poder y esperando poder recabar la ayuda europea contra Alemania el canciller decidio el 1 de marzo llevar a cabo un plebiscito el domingo 13 5 La pregunta no incluia la aceptacion de la anexion alemana sino que se limitaba a solicitar el apoyo del votante al mantenimiento de una Austria unida cristiana social independiente alemana y libre 5 Los preparativos comenzaron en secreto el dia 5 de marzo y Von Schuschnigg comunico el plan a Seyss Inquart el 8 encareciendole que no lo divulgase hasta el dia siguiente cuando tenia pensado anunciarlo oficialmente 5 Aunque Seyss Inquart mantuvo su promesa nacionalsocialistas austriacos que trabajaban en la Administracion estatal se enteraron del plan y lo comunicaron a Berlin 5 Presionado por los hechos Von Schuschnigg anuncio un referendum el miercoles 9 de marzo de 1938 para determinar la independencia o la union con Alemania para asi beneficiarse de la legitimidad popular y mostrar las intenciones expansionistas de Hitler Respecto al referendo Schuschnigg de acuerdo con el presidente Miklas fijo en 24 anos la edad minima para votar 6 evitando la participacion masiva de jovenes desempleados que constituian la mayor reserva de militantes nazis de Austria La fecha de la consulta popular seria el domingo 13 de marzo Cuando Hitler se entero de las intenciones de Schuschnigg entro en furia y ordeno a los nazis austriacos pasar a la accion para evitar que se celebrara tal referendum Mientras que en Austria la noche del 9 de marzo los nacionalsocialistas exigieron que se abrogara el articulo 88 del Tratado de Saint Germain en Laye que impedia la union con Alemania para permitir la votacion Hitler enviaba a un representante personal para evitar el plebiscito si no incluia claramente la opcion de la anexion con Alemania 5 No se puso en marcha accion violenta alguna en espera de que el nuevo ministro de Asuntos Exteriores Ribbentrop que se hallaba en Gran Bretana informase sobre la actitud de esta a una eventual intervencion alemana en el pais vecino 7 El 10 llego la confirmacion de que si el conflicto se limitaba a las dos naciones el Reino Unido no intervendria en favor de los austriacos 8 Antes de que el referendum fuera posible los nazis austriacos lanzaron una ola de ataques violentos contra las entidades gubernamentales mientras que la policia austriaca en manos de Seyss Inquart fue neutralizada y se le impidio cualquier oposicion Alemania cerro las fronteras y empezo a movilizar sus tropas mientras que los nazis austriacos se abstenian de repetir el intento de golpe de Estado de cuatro anos antes contra Dollfuss ahora creaban el caos en todo el pais con algaradas callejeras y violencias de toda clase incendios saqueos destruccion de oficinas publicas para generar una situacion de caos y provocar una verdadera guerra civil contra socialdemocratas y catolicos Mientras tanto Hitler decidia la invasion alemana de Austria y discutia con el Estado Mayor de la Wehrmacht los planes necesarios perfilados apresuradamente a lo largo del dia 10 8 La manana del dia 11 Seyss Inquart recibio una carta de Hitler en la que le informo de los preparativos militares que se estaban llevando a cabo y reclamando la anulacion del plebiscito antes del mediodia 8 Acudio a ver al canciller en la sede del Gobierno y le rogo que aceptase las condiciones de Hitler como la entrevista se alargo los nazis otorgaron una prorroga para obtener la respuesta del Gobierno austriaco hasta las dos de la tarde 8 A las exigencias del canciller aleman se unieron pronto las del partido en Austria Von Schuschnigg debia retrasar la votacion tres semanas o arriesgarse a que los nacionalsocialistas tomasen el poder por la fuerza 8 Los disturbios masivos causados por nazis se sucedieron en Graz Linz Innsbruck y Viena a lo largo del 10 y 11 de marzo con la consiguiente represion de tropas austriacas aun leales al gobierno El plan de Hitler era que el presidente Miklas destituyese a Schuschnigg ante el temor de una guerra civil y que nombrase a Seyss Inquart como canciller de Austria Luego estaba planeado que Seyss Inquart aprovecharia su nuevo cargo para solicitar ayuda militar a Alemania con el objetivo de poner fin a la crisis austriaca disipando asi toda apariencia de invasion alemana Al amanecer del viernes 11 de marzo las juventudes nazis ahora armadas y disciplinadas se habian constituido en una milicia que tomaba los edificios gubernamentales por todas las ciudades principales de Austria con apoyo de agentes de la Gestapo infiltrados inclusive en la misma capital austriaca Ante la amenaza de una revuelta armada masiva patrocinada por Alemania el canciller Schuschnigg trataba de buscar apoyo en el Reino Unido o Francia para detener la agresion alemana pero ninguno de estos gobiernos mostro intencion alguna de intervenir Policias de frontera alemanes y austriacos desmontan conjuntamente un puesto limitrofe el 15 de marzo de 1938 El presidente Wilhelm Miklas recibio un ultimatum del propio Hitler a las 12 00 del viernes 11 de marzo exigiendole que dejara sin efecto el referendum ordenado por Schuschnigg y dandole un plazo de dos horas que vencia supuestamente a las 13 00 debido a una demora alemana en hacer llegar el mensaje Miklas discutio la situacion con Schuschnigg pero no acepto dejar sin efecto el referendum ya convocado y planificado Claudicacion austriaca Editar El Gobierno austriaco se reunio a las dos de la tarde y Von Schuschnigg acepto anular el plebiscito aunque no convocar uno nuevo tres semanas despues como reclamaban los nazis austriacos 9 A las 14 45 Goring telefoneo a Seyss Inquart para rechazar las concesiones que tacho de insuficientes poco despues volvio a llamarlo para indicar que Hitler exigia la renuncia del Gobierno entero 10 Cuando se le comunico la nueva condicion a Von Schuschnigg a las 15 30 este presento la dimision al presidente 10 Al mismo tiempo que se reunia el Consejo de Ministros austriaco Hitler aprobaba los planes de invasion 10 Dos horas mas tarde cuando se supo de la aquiescencia de Von Schuschnigg a las exigencias alemanas se detuvieron los preparativos militares 10 No obstante un nuevo mensaje altero el curso de los acontecimientos pues a las 15 30 Hitler envio otro ultimatum a Miklas exigiendo nada menos que se destituyera a Kurt Schuschnigg como canciller y se nombrara en su lugar al nazi austriaco Seyss Inquart Miklas se nego expresamente y en las horas que siguieron se busco a otro lider politico ya que Schuschnigg habia renunciado 10 A las 17 00 dirigentes nazis austriacos volvieron a reclamar la formacion de un gabinete con Seyss Inquart a la cabeza amenazando con la invasion a las 20 00 si el presidente seguia negandose a aceptar a las 19 30 10 Aunque el agregado militar aleman indico que efectivamente ciento cincuenta mil soldados estaban listos para invadir el pais si Miklas no encargaba el Gobierno a Seyss Inquart el presidente rechazo altivamente la intimidacion 11 Pese a sus esfuerzos Miklas no logro que ningun otro lider politico o militar austriaco aceptase el cargo de canciller y a las 17 00 recibio un nuevo mensaje de Hermann Goring Hitler exigia que la designacion de Seyss Inquart fuera realizada a mas tardar a las 19 30 lo que coincidia con lo que exigian sus correligionarios austriacos 12 Anuncio ademas la presentacion de nuevas condiciones 12 A las 18 00 Seyss Inquart recibio de un enviado de Berlin el texto de un telegrama que debia enviar anunciando su nombramiento como presidente del Gobierno y solicitando ayuda alemana para acabar con los disturbios pero se nego a hacerlo alegando que no era aun presidente y que no existian disturbios que requiriesen la intervencion militar alemana 12 El enviado y Seyss Inquart acudieron entonces a visitar al presidente que nuevamente se nego a aceptar a este como primer ministro 12 A las 19 00 Von Schuschnigg declaro que iba a anunciar publicamente su dimision 12 Por su parte Kurt Schuschnigg estaba dispuesto a renunciar a su puesto si fuese necesario para evitar una invasion alemana Viendo la situacion casi perdida lideres del Frente Patriotico de Dollfuss parten al exilio esa misma tarde Finalmente Schuschnigg decide tomar la iniciativa y pronuncia un emotivo discurso radiofonico a las 19 47 despidiendose del pueblo austriaco y presentando su renuncia al cargo de canciller mientras alegaba que ha hecho todo lo posible por salvaguardar la independencia del pais Schuschnigg termina la alocucion con la frase Gott schutze Osterreich en aleman Dios proteja a Austria Pese a la renuncia de Schuschnigg el presidente Miklas aun se niega a legitimar la proyectada invasion alemana nombrando un nazi como canciller aun cuando a las 20 00 las calles de Viena ya estan practicamente dominadas por los nazis austriacos dedicados a imponer su autoridad por la fuerza y a colgar banderas nazis o decorar con esvasticas la bandera de Austria en los edificios publicos Mientras los dirigentes nazis austriacos ordenaban a sus seguidores tomar el poder al cumplirse la hora sin que el presidente aceptase sus condiciones Seyss Inquart hablaba por telefono con Goring para informarle de la situacion 13 Este indico que iba a ordenar la invasion de Austria y que cualquier resistencia se juzgarian en consejos de guerra 13 Tropas alemanas entran en Viena el 14 de marzo de 1938 Hitler acepto ordenar nuevamente la movilizacion de las fuerzas preparadas para la invasion y emitio la orden necesaria a las 20 45 las tropas debian penetrar en el pais vecino la madrugada del dia siguiente 13 Aunque Goring seguia exigiendo que Seyss Inquart enviase el telegrama que debia justificar la entrada en el pais de las tropas alemanas no lo logro hasta las 21 54 14 Mientras tanto Hitler aun dudaba de la reaccion de Benito Mussolini ante los hechos considerando la proteccion italiana que ya habia sido otorgada a la Primera Republica de Austria en 1934 tras el asesinato de Dollfuss pero tras la mutua colaboracion italo alemana en la conquista de Abisinia y la Guerra Civil Espanola la Italia fascista se habia alineado definitivamente con el Tercer Reich Asi tras una consulta diplomatica del principe Phillip von Hesse embajador aleman en Roma a las 22 00 del 11 de marzo el ministro italiano Galeazzo Ciano informo a Hitler por medio de Von Hesse que Mussolini no intervendria en los sucesos de Austria 14 Esta noticia fue conocida de inmediato en Viena y dejo a Miklas y Von Schuschnigg privados de su unico gran aliado extranjero mientras de inmediato Hitler llamaba por telefono a su embajador en Roma para que este expresase el profundo agradecimiento personal del Fuhrer hacia el Duce Al transcurrir la noche y sin recibir noticias de Viena sobre la designacion de Seyss Inquart como canciller austriaco Hitler entro en furia y ordeno a las tropas de la Wehrmacht proceder con la invasion de Austria a las 22 00 del 11 de marzo Hitler ordena tambien la falsificacion de un telegrama supuestamente enviado por Seyss Inquart desde Viena como nuevo canciller y en donde este jefe nazi pedia ayuda a Hitler para restablecer el orden en Austria Hitler ya no estaba conforme solo con la renuncia de Schuschnigg y habia sostenido que Miklas tambien deberia renunciar a su cargo A medianoche Miklas cedio finalmente y acepto nombrar a Seyss Inquart canciller interino aunque toda medida gubernamental debia aprobarla el presidente 14 Seyss Inquart solicito entonces a Berlin que detuviese la invasion ya que la movilizacion de las SA y las SS austriacas y la decision de Miklas y Von Schuschnigg de aceptar todas las condiciones alemanas la hacian innecesaria 14 Se desperto a Hitler para comunicarle el ruego de Seyss Inquart que rechazo 15 Mientras tanto los nazis austriacos seguian su campana de destrucciones y revueltas contra el gobierno sembrando el desorden A la medianoche del 11 de marzo los nazis austriacos habian ocupado casi todos los edificios gubernamentales de Viena arrestando a los lideres politicos antinazis que pudieron hallar contando con la colaboracion de policias y reclutas de simpatias nazis Intervencion alemana Editar Tropas alemanas entrando en Viena el martes 15 de marzo de 1938 Las primeras tropas alemanas que cruzaron la frontera austriaca fueron vitoreadas en territorio austriaco 15 La falta de oposicion a la invasion convino a las fuerzas alemanas que pronto quedaron atrapadas en un gran atasco de trafico camino de Viena 15 Como las potencias occidentales tampoco reaccionaron a la accion alemana el mando militar aleman pudo emplear parte de los trenes destinados a participar en la defensa frente a un posible ataque frances a la invasion 15 A las diez de la manana el nuevo Ejecutivo austriaco juro la Constitucion 15 Nuevamente el nuevo canciller solicito infructuosamente que se detuviese la invasion 15 Al no conseguirlo acudio a Linz a encontrarse con Hitler 15 Solicito que se permitiese a unidades austriacas entrar en territorio aleman para dar una apariencia de union a la invasion a lo que el mandatario aleman accedio 16 A mediodia el nuevo Gobierno austriaco que ya habia rescindido unilateralmente el articulo 88 del tratado de paz que impedia la union con Alemania promulgo un decreto que ratificaba la anexion 17 Al mismo tiempo las primeras tropas alemanas alcanzaban la capital austriaca 18 Miklas dimitio y nombro presidente interino al canciller pero se nego a firmar el decreto de anexion aprobado por este 18 En la manana del 12 de marzo el presidente Miklas acepto finalmente designar a Seyss Inquart como canciller austriaco pero esta medida resultaba inutil pues al amanecer las tropas de la Wehrmacht alemana ya habian cruzado la frontera iniciando su invasion Los nazis austriacos arrestaron a Miklas en el mediodia con apoyo de agentes de la Gestapo infiltrados en Viena y Arthur Seyss Inquart tomaba el puesto de canciller en la capital austriaca dando la bienvenida a las tropas de la Wehrmacht que entraban al pais Al dia siguiente las fuerzas alemanas ocupaban sin resistencia toda Austria hallando un recibimiento efusivo y favorable que les sorprendio tanto en localidades pequenas como en las ciudades mas grandes No obstante el mal estado de muchos transportes de tropas causo retrasos en el avance de la Wehrmacht lo cual no dejo de preocupar a los jefes militares alemanes Hitler mismo cruzo la frontera austriaca el sabado 12 de marzo a las 16 00 dirigiendose a Braunau am Inn su localidad natal y mas tarde a Linz 19 El recibimiento entusiasta de la poblacion austriaca a las tropas alemanas sorprendio incluso al lider nazi Hermann Goering que llego a Viena el domingo 13 de marzo para coordinar con Seyss Inquart los detalles de la toma del poder por los nazis Hitler llego a Viena el 14 aclamado por una enorme multitud 18 La culminacion fue la llegada de Hitler a Viena el martes 15 de marzo declarando la anexion de Austria a Alemania en la Heldenplatz vienesa ante 250 000 simpatizantes Plebiscito EditarVease tambien Referendum sobre Anschluss en Austria de 1938 Papeleta en blanco que dice Estas de acuerdo con la reunificacion de Austria con el Imperio Aleman efectuada el 13 de marzo de 1938 y votas en favor de la lista de nuestro Fuhrer Adolf Hitler El circulo mayor es para el si y el pequeno para el no Tras la ocupacion alemana se establecio la supresion de la Primera Republica de Austria la conversion de Austria Osterreich en aleman literalmente Imperio Oriental en la provincia de Ostmark en aleman Marca Oriental y la designacion de Arthur Seyss Inquart como gobernador general aboliendo el puesto de canciller Hitler para legitimar los eventos de marzo de 1938 anuncio un plebiscito para el 10 de abril de 1938 menos de un mes despues de la anexion que serviria para convalidar el Anschluss La union con Alemania tuvo el apoyo del 99 73 del electorado 20 Si bien el resultado no fue manipulado si lo habia sido todo el proceso electoral Para empezar no habia voto secreto cita requerida La papeleta se tenia que rellenar delante de los oficiales de las SS cita requerida y entregarsela en sus manos cita requerida sin posibilidad de que el elector la introdujera en una urna por si mismo cita requerida En dicha papeleta aparecia en el centro un circulo muy grande donde poner si y otro mas pequeno a la derecha donde poner no incitando claramente al voto a favor de la anexion Ademas no hubo campana posible a favor del no pues inmediatamente tras la anexion habian sido detenidas 70 000 personas en pocos dias judios socialdemocratas y comunistas asi como toda la cupula politica de la Primera Republica de Austria entre los que estaban conocidos lideres politicos como Richard Schmitz Leopold Figl Friedrich Hillegeist y Franz Olah El censo electoral dejo fuera a 400 000 ciudadanos un 10 de los votantes potenciales mayoritariamente izquierdistas y judios Cabe destacar que en Innervillgraten una pequena poblacion donde la votacion no estuvo custodiada por la Wehrmacht el resultado fue de un 95 de votos contrarios a la anexion cita requerida Consecuencias EditarLa respuesta internacional al Anschluss fue bastante tibia los paises aliados de la Primera Guerra Mundial solamente presentaron protestas diplomaticas sin tomar acciones concretas que revirtieran la situacion a pesar de que eran como establecia especificamente el Tratado de Versalles los responsables de impedir la union politica entre Austria y Alemania Reino Unido sostuvo que los eventos del Anschluss eran irreversibles aun reconociendo que Hitler habia violentado el tratado de paz Francia se expreso en similares terminos y se abstuvo de pedir boicot alguno contra Alemania por esta accion Mexico protesto oficialmente contra el comportamiento de Alemania a traves de su representante en la Sociedad de Naciones Isidro Fabela con mayor dureza que la expresada por los paises europeos 21 Dentro de Austria el Anschluss encontro fuerte resistencia en los opositores al nazismo pero fue asumido como una situacion politica inevitable por la mayoria de la poblacion Los lideres religiosos catolicos y protestantes pidieron a sus feligreses no oponerse activamente a la nazificacion de Austria por temor a desencadenar un conflicto sangriento El cardenal y arzobispo de Viena Theodor Innitzer antiguo ministro de Asuntos Sociales del tercer gabinete del canciller Johann Schober afirmo Los catolicos vieneses debemos dar gracias al Senor por la forma incruenta en que ha ocurrido este gran cambio politico y orar por un gran futuro para Austria De mas esta decir que desde ahora en adelante todo el mundo debe obedecer las ordenes de las nuevas instituciones 22 23 24 Robert Kauer presidente del Consejo de la Iglesia evangelica envio un telegrama saludando a Hitler en los siguientes terminos A su llegada a suelo austriaco le saludo en nombre de los mas de 330 000 alemanes evangelicos Tras una represion que ha resucitado los tiempos mas terribles de la Contrarreforma llega usted como salvador de todos los alemanes sin diferenciarlos por su fe tras la dura crisis de estos ultimos cinco anos Que Dios bendiga su camino hacia esta tierra alemana su patria 25 Utilizando el mismo argumento los lideres socialistas y nacionalistas pidieron a sus seguidores la aceptacion del Anschluss como un hecho consumado Por su parte los nazis austriacos apoyaron decisivamente la anexion a Alemania y colaboraron eficazmente en la nazificacion de Austria y su sociedad Muchos nazis nativos de Austria ademas del propio Hitler llegaron a ocupar cargos destacados dentro de la jerarquia politica del Tercer Reich como Ernst Kaltenbrunner y Arthur Seyss Inquart mientras varios centenares de nazis austriacos engrosaron pronto las filas del Partido Nazi la Gestapo y de la propia SS sin desmerecer en fanatismo y brutalidad a sus companeros alemanes como fue el caso de integrantes de la SS como Amon Goth Franz Stangl Gustav Wagner Eduard Roschmann Aribert Heim o Hanns Albin Rauter todos ellos nativos de Austria Austria dejo de ser una nacion independiente y quedo dividida en 7 distritos analogos a los Reichsgaue de la Alemania nazi Sus funcionarios publicos y oficiales del Ejercito pasaron a depender de sus pares alemanes excepto aquellos expulsados de sus puestos por oponerse al nazismo o porque sus cargos resultaban inutiles en cuanto Austria perdio su independencia De la misma forma todas las leyes alemanas especialmente aquellas que prohibian la oposicion politica al nazismo entraron en vigor en Austria juntamente con el aparato de represion politica ya existente en Alemania encarnado en la Gestapo y la SS Por su parte el violento antisemitismo del Tercer Reich fue puesto en practica de inmediato por todo el territorio austriaco tanto por nazis locales como por los agentes llegados de Alemania Las grandes comunidades judias de Viena y Graz fueron prontamente sometidas a la discriminacion hitleriana y resultaron aniquiladas anos despues durante el Holocausto En 1943 los aliados mediante la Declaracion de Moscu reconocieron a Austria como la primera victima del nazismo y se comprometieron a restablecer su independencia nacional declarando nulo y sin valor el Anschluss No obstante los firmantes de la declaracion tambien advirtieron de que el nacional socialismo austriaco y sus adherentes asumian plenamente la culpabilidad que les correspondiera por participar en crimenes de guerra en la misma proporcion que el Tercer Reich Situacion despues de 1945 EditarAustria entro a formar parte del III Reich desde marzo de 1938 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial cuando el gobierno interino austriaco declaro el Anschluss null und nichtig nulo e invalido el 27 de abril de 1945 estableciendo la Segunda Republica Austriaca Los vencedores de la guerra mantuvieron Austria bajo ocupacion militar durante varios anos aunque tratando a Austria siempre como un pais distinto de Alemania sin ejecutar una division del pais y manteniendo un gobierno civil nativo desde el primer momento eventos que no ocurrieron en Alemania No se restituyo la plena soberania austriaca sino tras dificiles negociaciones entre la URSS y los EE UU sobre el futuro de Austria hasta que el Tratado para el Restablecimiento de Austria Independiente y Democratica fue firmado en Viena el 15 de mayo de 1955 mientras una declaracion de neutralidad del pais fue emitida el mismo ano respaldada por la URSS y los EE UU El 27 de abril de 1945 cuando la Wehrmacht habia sido expulsada de casi todo el territorio austriaco se instauro un gobierno provisional austriaco en Viena que fue reconocido por los Aliados y la URSS prontamente en tanto el nuevo regimen estaba conformado por lideres politicos opuestos al nazismo desde antes de los sucesos de 1938 como el estadista Karl Renner Al terminar la Segunda Guerra Mundial pese a que se habia reconocido a Austria como victima de la agresion nazi fue preciso iniciar alli un proceso de desnazificacion similar al de Alemania al ser evidente que antes y despues del Anschluss existia una gran masa de varios miles de nazis austriacos que habian colaborado de forma voluntaria y entusiasta con el Tercer Reich Hasta la fecha es motivo de polemica historica en la sociedad austriaca determinar la cantidad real de simpatizantes nazis que existian en Austria en el momento del Anschluss asi como el nivel de apoyo popular que tuvo la agresion alemana En 1998 el gobierno austriaco formo una Comision Historica Historikerkomission 26 con el fin de evaluar la responsabilidad de Austria por las expropiaciones contra los judios desde un punto de vista academico antes que legal Ello no ha impedido las criticas de historiadores como Raul Hilberg o Norman Finkelstein 27 contra las actitudes evasivas de los sucesivos gobiernos de Austria ante la responsabilidad de nazis austriacos en el Holocausto Vease tambien EditarThe Sound of Music Sonrisas y lagrimas o La novicia rebelde en castellano es una pelicula ambientada en los anos previos a la Segunda Guerra Mundial en el momento de la anexion de Austria al Tercer Reich El gran dictador pelicula de Charles Chaplin que recrea la invasion de Osterlich por Tomania El cetro de Ottokar album de aventuras de Tintin que contiene el relato ficticio de la invasion de Syldavia por parte de su vecina Borduria basada en el Anschluss Notas y referencias Editar Antes de la reforma ortografica de 1996 esta palabra era escrita como Anschluss En Austria y Alemania tambien es conocida como Anschluss Osterreichs en aleman Anexion de Austria Enrique Alvarez Prada 2002 Langenscheidts Handworterbuch Teil II Deutsch Spanisch 16 ª edicion Langenscheidt p 51 ISBN 3468043465 a b Winchester 1976 p 409 a b Winchester 1976 p 410 a b c d e Schmitt 1959 p 298 Lukacs John 2001 The Last European War September 1939 December 1941 New Haven Yale University p 13 ISBN 0 300 08915 5 OCLC 46979673 Consultado el 16 de agosto de 2013 Schmitt 1959 p 298 299 a b c d e Schmitt 1959 p 299 Schmitt 1959 p 299 300 a b c d e f Schmitt 1959 p 300 Schmitt 1959 p 300 301 a b c d e Schmitt 1959 p 301 a b c Schmitt 1959 p 302 a b c d Schmitt 1959 p 303 a b c d e f g Schmitt 1959 p 304 Schmitt 1959 p 304 305 Schmitt 1959 p 305 306 a b c Schmitt 1959 p 306 Schmitt 1959 p 305 Die propagandistische Vorbereitung der Volksabstimmung Archivo de la Resistencia austriaca Viena 1988 acceso el 10 de junio de 2005 Serrano Migallon Francisco 2000 Con certera vision Isidro Fabela y su tiempo Mexico D F Fondo de Cultura Economica pp 112 113 ISBN 968 16 6049 8 Giblin James Cross 2002 The life and death of Adolf Hitler en ingles New York Clarion Books p 113 ISBN 0 395 90371 8 OCLC 47658930 Consultado el 30 de agosto de 2012 Macdonald Richard G 2010 Inside the gates the nazi concentration camp at Ebensee Austria en ingles S l Xlibris p 24 ISBN 978 1450088169 OCLC 777853398 Consultado el 30 de agosto de 2012 Schneider Gertrude 1995 Exile and destruction the fate of Austrian Jews 1938 1945 en ingles Westport Praeger Publishers p 16 ISBN 0 275 95139 1 OCLC 31374016 Consultado el 1 de septiembre de 2012 Arbeitsgemeinschaft der Evangelischen ReligionslehrerInnen an Allgemeinbildenden Hoheren Schulen in Osterreich 2012 Theologie und Spiel Schulfach Religion Jg 30 Nr 1 4 Wien Lit Verlag p 199 ISBN 978 3 643 99904 7 OCLC 794506105 Consultado el 10 de septiembre de 2012 Im Namen der mehr als 330 000 evangelischen Deutschen in Osterreich begrusse ich Sie auf osterreichischem Boden Nach einer Unterdruckung die die schrecklichsten Zeiten der Gegenreformation wieder aufleben liess kommen Sie als Retter aus funfjahriger schwerster Not aller Deutschen hier ohne Unterschied des Glaubens Gott segne Ihren Weg durch dieses deutsche Land Ihre Heimat Austrian Historical Commission Raul Hilberg interviews on The Holocaust Industry amp Finkelstein 2000 2001 Norman G Finkelstein en ingles 4 de agosto de 2000 Archivado desde el original el 15 de julio de 2012 Consultado el 29 de mayo de 2013 Bibliografia utilizada EditarBukey Evan Burr 1986 Hitler s Hometown Linz Austria 1908 1945 Indiana University Press ISBN 0 253 32833 0 Parkinson F ed 1989 Conquering the Past Austrian Nazism Yesterday and Today Wayne State University Press ISBN 0 8143 2054 6 Pauley Bruce F 1981 Hitler and the Forgotten Nazis A History of Austrian National Socialism University of North Carolina 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wikipedia, wiki, leyendo, leer, libro, biblioteca,

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